Ámbito

Page 1

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Revista que difunde el pensamiento actual A no I

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.1


A M 13 I T O

Notds de Edilor

La Revista que difunde el pensamiento actual

Hay problema.s fundamentales en la vida del pueblo Ano I

No. VI

' ])uertorriqiiefio que no se deben olvidar. Eu el niimero do esta Revista eorvespomliente al ine.s de abril presente a crandes rasgos la cuferniedad (jue esta cuiidiendo la .so* ciedad islena: la ilegitimidad. Hoy deseo oeuparme de

Rio Piedras, P. R. Junto do D34.

olro problema no menos importante: el problema de nnes-

Directorio

ira tierra.

Director: Luis Adam Nazario

Parece como que el pais se e.sta dando cueuta de la

Sub-director: Rafael Lasa Diaz

gran tragedia que se apioxima y que iios euvolvera sin du-

Administrador: M. Toro Aquiles

(!a en sus apretados tentaeulos si a tiemiio no sabemos po-

ner un dique a ella. Nuestra.s tierra.s e.stan diariauiente

Consultores y Colaboradores

])erdiendo valor. Los aguaeeros de los tropieos arrastrau

Prof. Jose A. Ralseiro

Pra. Concliita Mclendez

Dr. An'otvo S. Pcdrcira

Dr. R. Lavandero

Pr. Luis M. Morales

Dr. Ruben del Rosario

Hiinalmente enormes eantidades de toneladas de la flor do nuestros suelas que es eonducida al mar, o a las tierras

Prof. Clctncntc Perecla

Dra. Margot Arce

er-reanas a este.

Con motivo de la jnoclama del Gobernador para que sc eelebrara El Dia de la Tierra, el deeano de Administraeion de nuestra Universida 1, Dr. Julio B. Ortiz, eonvoeo una reunion de las ])ersoiias iiiteresadas en lo.s asnntos

Tlncjirgado de Aiiuncios: 11. Toro Aquiles

Nos reservamos el privilegio de solicitar colaboracidn. AMBITO se edita mensualmente

de la tierra, que se llevo a ei'eeto en el edifieio Janer el clonungo 6 de mayo. Hubo bnena representaeion de la Estaeion Experimental, boy a;lserita a la Luiversidad, del

Precio de suscripcidn para Puerto Rico: $1.00 anual. — Para el extranjero: $1.50 anual, oro americano.

Departamento del Trabajo. representado por el Ledo. Vi

Dirija toda la correspondencia a:

cente Geigel Poianco, y varies proJesore.s de la Univev.si-

AMBITO

flad, enfre ellos Sol Luis Descartes, de quieii se publiea un

arli'culo sobre el mismo tema en este numero. La reunidn fue presidida per el deeano Ortiz. En sus eharlas, lo.s se-

Universidad de Puerto Rico

nores, Lopez Dominguez, Oordero, Pedreira, Giugel Polan-

Rio Piedras, P. R.

~ -co, u'eseartes y otros. pre.sentarou la magnitud del probleEn Este Numero Notas del Editor — — — — — —

— — —

" ma. La eseasez de tierra; el desgaste que sufre diariauien te; la densidad de poblacion (lue no eorresponde a un jiu3 mere tan alto de personas; la cantida.l de tierra labraiuia; 3

los productos que .se estan sembrando; la fey de aparceria! Luces, por la Dra. Maria Cadilla de Martinez

44 discutida per el Ledo. Geigel Polanco. Mueiios de lo.s piesentes expnsieron sns puntos de vista con respecto a esta 5 lev, ereyendo que era defectuo.sa en nuiebos sentidos. fse

Don Jose A. Balseiro, por Luis Adam Nazario

hicieron varia.s recoineiulaeiones que el Lc '.o. Gt'igel Po5S lanco creyo conveniente presentarlas al jet'e del Departa

I'na Nota do D. Jose A. Balseiro — — — —

8 8 se enmendase la ley-

El Quijole y Nosotros, por Gustavo Agrait

9 tieo. Pero creo que estas reuniones se deben eelehrar mas

Ei-osofla, por el profcsor Facundo Bueso Sanllehl — —

mento del Trabajo para qne se disculieraii y .si ci-a po-sible Los temas que se discutieron tienen alto valor pvac

a n.enudo y en sitios doudo pue.'.a asistir el mayor numero I'domas de Carmen Alicia Cadilla — — — — — —

10

de personas posible para que se sienla el

enorme peso (p.e

:'ae sobre nuestras espalda.s eomo l)uertorriquefios que so-

c

juas y que no deseamos que nuestra tierra eada dia nos de-

El Loco de Saujuanopolia, por Alejandro Tapia y

jo mas linerfanos. 11

Felicitamos ^ deeano Sr. Orti;, por su iniciativa.

yul Luis Dcsciirles — —

12

El profesor Jase A. Balseiro t'esde que nosotros fundiiinos AMIUrO ha estado a nuestro lado pre.stjindonos .su viiliosa ayuda. Con su experieneia en el periodismo nos ha

Infortunios de Alonso Ramirez

15

Rivera

^

Ell torno al Problema del Uso de Nuestra Tierra, por

sabido guiar sabiamente. A M B 1 T U te dediea muy gustosameute este numero.


A M B IT 0

EC OSO FI A Por F. Biieso Sanllehi

Hay ecos y ecos, y a veces no los hay. Mis palabras encuentran eeo, por ejemplo, cuaudo iiivito a un amigo a escamotear un vaso de cerveza.

Y

sin embargo, eu las misnias condieiones, no enonentran eco aL pedir qiie se me invite a un vaso del mismo Ifquido. De identiea maiiera, no enenentran eco la.s voces de uuestras comisiones en las .solidas mnralla.s de la Casa Blanca.

Muchos seuores gricgos y ronianos nos lian dado ex-

pueblo.

Cuando la reflexion es multiple oeurren fenmenos CU-

riosos, eonvcnicntes o ijiconvenientes. ,E1 ruido del true" no, por ejemplo, es la reflexion multiple por la.s nubes y cl suelo, del sonido debido a una eliispa eleelrica. Al lue-

meiios, esta es una teoria ; liabiendo olro ([Ue explica el ruido diciendo que lo.s augcdes esfan dc niudanza alia arriba.

plieaciones sobre la natnraleza del eco. Eiitre estas, escogi Si la reflexion multiple oeurro dentro de un edificio la relacion de Ovidio porque identlfiea al eco con una luu- recibe el nonibre de reverberaei«hi la eiial iiareec ser una jei que iioseia las mismas propiedades acusticas que aun vcutaja en la.s igle.sias y uua desvinitajn en lo,'^ teatros >' aliora adornan al seso fuerfc en euerdas vocalcs. Nos di salas dc mu.siea. En las igiesins se ea|ulnliza la reverce Ovidio (jue de vez en cuando Jiipiter abandonaba su beracion para dar mayor soleimiidad, y liacer mas iinpotrono para haeer uiias cabriolas como el muy liombre nente la palabra hablada, aunqiie esta 110 se llegue a cnque era, y se enfrascaba en plalieas mas o ineuos inocen-

tender en el eaos de sonidos (pie iiieita.

Pero si en un

tes con las ninfas de la monlana. Su senora esposa, Juno, teatro una palmada produce un sonitlo que dure mas de Picada de unos celos que liacian honor pero no gracia a un par de .segundos, es in.servible para representaciones jiua iosa, y acompahando esa picardia con la otra de

^a curiosidad qiieria oir esas eonversaciones, tal y como •-

aee ahora en las lineas de telefonos con color. Pero

y audicione.s.

El remedio es relativameiile Jacil y con-

siste en di.stribuir cortinas o alfombras en iiroporcion con el tamano del salon. De otro mode podria ser que en

^uno no tenia telefono de color, y ademas, o.staba Eco, cidad^T ^ distingina especialmente por su locuano en innsitada en aquclla epoca, pero pulabra^ ^ pobre dc Juno no oia una sola de las

cierta localidad im e.spcctador tuvie.se la dudosa veutaja de oir la repre.seiitacion dos voces siieesivas por el precio de un solo boieto: una vez dircetameiit0 de los Inblos del lirico en ol e.sceuario, e instantos nia.s tarde por la reflec-

fuern ^^

a un co)toissecur cascarrabias.

uio Jun

r" ^luantisiino consorte. Asi pues transforI'oea, prohibiendole liablar liasta que

pasat a o

Juno nil Los

''I

(Sen'a util re-

El eco multiple puede presentarse como una nota

pura ver .si se localiza la formulita de

musical. Si daraos una palmada dolante de la escalinata

euentos por muy Ovidio

del Capitolio cuando no liaya ningiin ruido — es deeir en epoca de reeeso legislativo—la e.sealinata nos contesta con un sonido musical debido a la reflexion de la onda origi

due

blanos y due nn«!

cion dc una b(>veda o i)ared. Lo cual podria no agradar

^ ^

han echado a el y a su.s compue-

ludo, muy a pesar de los clasicofilos nal por cada iino de los escalones. Si daino.s uiia palmada

^ una m melenudos sablos que el eeo flc una de sonido. algo asi como el rebote una bol nold^ por la pared.

bras deit^nd^e^dl^^r tancia a que

^'eprodueeion de nuestras palaf^ctores, notablemente de la dis-

de ser general^e ^'^'^outramos del obstaculo, la ciial ha

en frente de "El Clievere", puede ser que nos contcste

un mozo: pero esto no es eeo, esto es servicio. Tambieii oeurre el feiionieno del eco musical eu la vecindad de nu cercado de zinc aeaualado. En un eampo ath^tico con una valla de esta indole resulta muy no table el eco musical. Cada vez (lue un bateador conecta

de .silabas repel CCDS mal edncado.s

sesenta pie.s. El nnmero firmemente la esferide, la valla le obseqiiia con un silbido I^'^r e.so encontramos pronunciado (pie podria interprelarso como una bnrla a

ciu'so. A e.sfos ec

la labor del candidate a la faiua peloteril. La reverberacioii puede enganai'no.s en eiianto a nuestms habilidades carusesca.s. De alii cd gran luunero de

I'llfiraas si'iaba.s no^'c*^ "I'Sislen en repetir unicamente las

^furtiinadas, de iiue.stro dis-

bJar con .sunia cautej-'^'^^" f''>UMiderados se las ha de ha-

imjmsjbles de tero-iv ^^''"^dnando siempre con palabras divo.s de cuarto de bano, pues que la reflexion multiple en' oivei'sar. Lo.s bosques tienen u

riblemente los sonidos - l^^cuhandad de reflejar prefe-

ahi rasnha que nnestrr^ ^gudos de nuestra voz, y de con iJie'(nlias de ninjcr

deviielta por el bosque

jnal fundada.s. Tal seieeclAi!'''''''"?''

esperanzas

j 1 1 ad1 azulI alI cieio - , sipni.iv« tKlentica a la ime da la tonalic • , , , ' -^H-mpre limpido que iios sirve de closel— ii'tJ.se q. buen sewnm f • ^ '=>eguia, no fue escnta eu este

riqueoe nne.stra humilde voz y nos liaec ponsar que henios errado nuestra earrera. Tal vez tenga la culpa la reverberaeion del crecido iinniero de ruisenoi'ps que eosquillean nue.stra ecuahimidad con sus esfuerzos vocales —y .son esl'iK^rzos vocales ]ioi' lu l>oio con.sonanLes. Y hablando de ecos, me vicne a la inemoria una ta

bula aeerea del origen de la palabra ecoiiomia que si no .se debe a Herodoto bien gauado se Lu tiene. (..'aip eierto


A M B I T0

LUCES como siente cuanlo le rodea y lo primero:

VK POETA:

POCOS osFium'zos aut('iitieos piieden aiiotarse en niiestra ])o('sia islona. contoinpor;nira. a pesar de su floracion ox\ibcraiito.

"Alediaba ya la noche y en la imponente calma la voz de la tierruca inetidse por mi alma."

(Lo que dice la Tierruca).

No obshuite—como vi-

de horizontes—se sinpularizan en ella los esfnerzos

de linos pocos autoros (pie tienen cevtera orientacion. Uno de esos sefieres c.s VTRCtILTO DAYTIjA, el inconfundi-

j. Xo recuerda este aeeiito melancotico, sincero, a Poiez de Ayala en "La Fa- del Sendero", cuando dice:

ble regioiialista flel verso seiu-illo, plastieo.

"Con sayal de amargura.s de la vida romero.

Salido por (•oinpleto de la. eninareaeidn vanguardista, acentiia esto poeta nn naturalismo quo abarea ninehas epoeas y altnras; nisticidad auroral de Berceo; piin-

tope tras luengas audanzas eon la paz del seiideio . ..

tilieo detallista, dieeiocliesc-o. de Ramon de la Crnz o Coelio; costiimbrismo romantieo. matizado ora de melanco-

Siga m 0.S oyen d ole:

"A traves de los setos, por las rendijas, nos mandara el Dios bueno sns baratijas:

Ka, era de provincialisino. a lo Copi'c o Estebauez Calde-

rayos de .sol. ijerfuines de flores bellas,

ron; claridadcs veristas de nn Goya, Vicente iledina o Ga

V la luz mistei'iosa de las estrellas .

(El Boliio).

briel y Galan. . . ITasta alp:o del cvocador y familiar acento de Francis James.

"Las aves despertaron, abrim'onse las floies,

^

Reposado por temperamento, aiincine tiene sangre del tropico, toma la vida en sorio, reflexiva ])ero pasionalmonte... Con esn enritmia destaca en ella perfiles, riitas,

V al tiempo qiie en Ja tierra, en mi alma amanecia."

(Lo qne dice la Tierruca).

1.0.S in-imeros versos no.s le mnestran contempUitivo, en

Sns medio.s tones tienen nn

conuinicacion directa con el paisaje; los que siguen nos

cromatismo imi^resionante para de.sarrollar contrastes lo niismo que se obscrva, por ejemplo, en la tecnica y composicion del A^ErjORTO de nuc.stro ]>intor Oiler. Asi, pnos, el IcH-nioiif de sn arto e.s pictorico y de nn dibujo cuidadoso ((ue elimina, como deciamos, enbismo.s, geroglificos mnnequoriles, caricaturas y otras rare-

haceu .saber su apreeiaeion de los ritraos eternales; en el

colores, formas, iiaisajes.

zas qne di.stinguen a las croacione.s de nn Hnidobro ©

'de nn Picasso. Tam])oc*o, annqne se aproxima ma.s a ellos, podemos atribuirlo el sub.ietivismo y trascendencia de Ronicro de Tori'e.s o de Dario en Cantos <tc Vida y Espe-

tercero estableee equivalcneias entre las eosas ereadas y su vo.

Amores de la isla le avasallan. For eso, con ternura y orgullo, cauta a Puerto Rico:

"...que el sol fecunde tus entrana.s y te abone la. Iluvia do sus be.sos,

y la graminea en sus dautines de oro cante la gloria que tu valle esplendido,

rnnza porqne el poeta, ]ir6ximo a lo popular, a sn am-

y nos deslumbre el tabacal undoso

biente, es innebo mas e.spontaneo aiinqne sea ignalmente impresivo. Con sostenida fidelidad reproduce panoramas,

con sus A'erdes y raros terciopelos...

ocuiiaciones, tipos, sentimientos.

"A'o en ti he nacido y en tn vade hennoso

Sn perfeccion esta en

C'l detalle; en las curvas y liiieas que precisan nnestra ar-.

qniero dormirme de la niuerte al beso, para volver a tu bendita <nitrana

qnitectura familiar.

'Ponpio todo Id mio te lo dcbo''. nXJTA

:

Sns cnadros. boeetos. retratos e impresiones nos lievan a eardinales direcciones: amor a la natiiralcza, pa-

A', como es cabal, ademas de ser entusiasta ese amor a la ])a1ria, desea rcndirla vasalla.ie. dignificarla y darla nn destino IViz:

triotismo integral; hnmildad; hnmanitarismo.,. A^eamos

dia se encontro nn par de zapatos dos nvimcros mas pe-

quenos qne los que so merecian .sns .iuanotudos pies, por el plausible motivo cpie lo resultaban ma.s baratos. (Me

tengo de bncna tinta que Cain y Abel eran judios cabales, y a ellos se atribnye el sistema de ventas a plazos). Naturalmente. ,sns pies expresaron una queja vigorosa a traves do sus cuerdas vocales, y le .salio a Cain nn lamen-

1,0 extrano y distante—sin duda por originarse en Ifts ^x-

trpmidadcfi do m ser.

lo oyo 7 preguntd?

''i Esa voz, es del eco ''

Y Cain coutestd quejumbroso, antes de posesionarse lie la quijada de burro: "Oel eco no. mia."

A.'- efectivamente, la voz era de 1' economia.

Se. ha estudiado mncho el etc, pero ann no .se lia en-

confrado el eco cortes y bien e lucado (pie al gritar'e "[Me voy..." conteste: "Que vaya.s cop D.os y UcvftlP WS reonerdos a tti fawUia.,,"


AMBITO como un derrumbamieuto de ilusiones."

(El Buey). ''Tu corazon aleja del sordido egoisino:

i Con que orgullo te vec!... i Patria de mis mayores I

preclica al igiioranle que cuinpia sus deberes

i Hogar de mis ensueuos 1

y dale, con tu ejemplo, leeeionos de civismos.

I Que inefable placer

y haz, si, mentor, que la Candida niuez de la Patria sea gloria y orguJlo y prez.

este placer que siento

al ver salir el hiimo de tus fabricas;

al multipliearse el saber de tus temples,

(Lo que dice la Tierruca). Sus temas predileetos, como vemos, son el amor a- la

y atravesar los mares en navios soberbios

patria. Los mezcla, los eultiva separados, pero" siempre

con noble afan de coiiquistar el orbe,

permaiiece rondandolos. Accidenlalinonte ocui)a.se de algo mas concrcto o abstracto: buoy, jibaro, fiestas, retratos, ipos, las estrellas, el anhelar, etc.

los ricos frutos del vergel riqueno! I Cual mi delicia al percibir el valio de tu bumeclo suelo cuando el corte recibe!".,. (Vision del Porvenir).

ESTILO:

Se cuaja el estilo del poeta con agiles descripciones,

El que sabe amar a su tierra tambien sabe ver.sas con comparaciones felicos y cvocadora.s innigenes solares problemas y empenarse en buscarle solucion. For eso que gradan sus matices—ore, pu)q)ura, volcta, azul, berliace deeir a su musa: mejo, gualda, verde—y con el uso de dobles asonancias;

Ue reiteracione.s, cultivo de fornias populares—^A'oces y

No vendas al extrano ni un jeme de mi suelo porque vender mi suelo, sera vendenne a mi." (Lo qne dice la Tierriiea).

hiunildaddeverdadera; que deciayo,Emerson en ®If eliance", comprenderla nuestro y el sitio que a Providencia le diera en el muudo, hace que el P a acepte gozoso su destine y diga:

metios y con innata habilidad para corporizar sensacione.s.

Vamo.s a comprobarlo: (colorismo, descripciones, si miles):

"Un prineipe que irradia mas brillo que el rubi que todo euanto mira lo Ilena de arrebol

al contemplar mis galas se enamoro de mi. ..

Vo bailo el seis, la cadena,

Me manda a cada beso

snSo b^*/^ tierra macarena,

los viviclos matices qne extiende su paleta bordando de primores su tunica gentil.

teno-rv ribetes de zapateado tengo coplcro como el mas donoso bailarm;

En mi campo y mi cielo pinta el rojo, el violeta,

V

ol gualda, azul y flavo; el verde y el anil."

vocinglero

^ da ml numea como floras da el jardin." ^,

i Que Sana alegria Pasarse la noche y el dia

(El Jibaro).

(Lo que dice la Tierruca).

'Se hacen frutos las flores de las bayas jugosas

a los ojos simulan del feliz labrador e.smeraldas joyantes las que verdes se eneueiitran y joyantes rubies los que estan en sazon."

ai ando, de tiple y giiiro al son; Jen 0 agua laja, comiendo cazuela, nastpl gandinga yy leehon! cauela, P^;teles, *ersar eon

' '

i^O'/.Qs del barrio en poria

en ode ® t'r I i a eaballo, salirastrouomia; rino I ^

(El Gafetal).

(Tmagenes eA-oeaclore.s) :

Srupa la linda muchacha

PCS quita eldormir!..."

Sieute el dolor OlOi ageno, prcdiea el bien y e 1 civismo

para haeer „ua bumanidad mejor:

es Liji nivierto desde el triste dia,

que abandoi.d la alegre vaq.ieria para servir humanas ambiciones;

algiina vez da un liigubre mugido porque el buey es un alma qne ha seutidc

''i Oye el rumor de las hojas y el erujido de los tallos -.V el zumbar de los machetes y el recliiiiar de los carros!

Sobre la ])ieza de cana eon el macliete en la mano,

In emulacion en el j)eelio y la deslreza en ol brazo

se lanzan los pica'.iores como Una tropa de asalto."

(En la Zafra).

i,Asonancias dobles): "/Mira aquella jiharifa que vie7ie ligero el paso con jicara de leche


AMBITO

y la dita de malangos!" (En I'a Zafra).

ejemplo en la poesia La Zafra hay un fragment© que dice:

(Reiteracinji):

"Xi para su curso el rio ok)!' ilcspide el liinonero

ni viste el moiite de bianco, etc."

(le sns alias t-oroias!

que trae a la moinoria los divulgados *'Treinta Anos de

i Que yrato oloi- <•) nrrayan del bosqiiel

Nunez de Arce.

iConio Inieleii las rosas! ;Y quo poi ruino daii tus madreselvns tiLS elaveles, tits lii ios y tus violas!

tado aiiloriormente encontranio.s vagas reminisceneias de

En las deciiuas de las paginas 35 y 36 del libro ci-

aquelia decima de Gutierrez Najera que dice; "En los verdes tamarindos

se columpian las palomas, etc."

Eies till pelu'leio donde la lien-a

sns aromas."

(Vision del Porvenir). "Y roiupe el arroz en e.spigas y rompe el luaiz en mazoreas y rompe el baiiauo en racimos..."

(El Sol). Las deeima.s de Virgilio Davila (Paginas 31 y sigiiientes de sn libro Aromas del Terruuo, Bayamoii 1916) .son tan tipieas quo liasta [lodrian servir eomo modelos del metro en la isla. Tralan de amor, patria y religion. INFLVENCIASi

V en la poesia "Lo que dice la Tierruca" igualmeuLC encontrainos un lejano parecido al "Beatus Ille' de Horaeio.

W LOGRjlDO-.

Aire silvcstrc, visioncs cainpesinas y liogareuas; for mulas rusticanas; dLstincion no caleulada, espontanea; riianeras inlere-santes, i)rivativa, para, destacar uiios pocos

tpina.s—los inagotables y eternos del Amor, Patria y Naturalcza, Boudad—einoeion; precision en detalles; recargo de eomparativos tth-minos; uso escesivo de eonjuncioiics. Sobre estas ultimas^ un sentido claro, un estilo plas-

La mas dirocta es la ainbiental: voces, giros, y temas

mador exento de barrocas envergaduras—propias de los

.son extraidos del mismo. Ademas—raramente por cierto—.se advierte la infliieneia lejana. de algiin autor. Por

actuales—y dinamiea captacion de horizontes ambientales, de vibraciones que registran los tonos menores "de los cien chicliaras que aposentan el giiiro"; del cre-

pitar de la leua seca en el fogon campestre; del aleteo del gallo en la pelea; del sabor de la fruta, y las mayo-

La elegancia unida a

res armonias de la eolmeua laboriosa del ingenio de cafia, el conjunto de la tierra, el viento bramador en las ca bas cimarronas...

la utilidad y duracion

Una ultima hornada de sus ver.sos paniferos, ''Rimas

para mis Nietos" nos revela otra moilalidad intima, sen timental de este poeta del Amor.

Iloy Ud. puede amueblar sti casa con mue-

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A

B I T0

Don Jose A. Balseiro Por Luis Adam. Nazario

E

b Una labor demasiado atrevida la que rae he im- letrato tornado nl efeeto y resaltan las fijriiras del Dr. Grepiiesto al querer escribir sobre la figura literaria gorio ^larahon, Ramon Gomez dc la ISeriia, Luis Jimenez c.e don Jose A. Balseiro. Joven, que apenas ha de Asua, Weiieeslao bhu-iuindex Fioies, Ailolfo Salazar,

l)asado los treinta anos, ya se puede poiier de Jiombros

eou lo.s grande.s literato.s espaholes y universales. Abogac.c, poeta,^ eritieo literario, ensayista, novelista, eoni'ereueiantc, rausico; en todos e.stos eampos ha sobresalido el pvoteaor Balseiro.

Luis de Zuliicta, Pio de Rio Jlorlcga. Miigejiio llernioso, Juan Cristobal, Merelior FernaiKlez Almagro y otros, que lOilean al homonajeado.

Ell el lf)2<S su poenia Iii/orn<//<> del libro Miisira Cor-

dial, OS esc'Ogido para figiirar en el lonio de Las Cien Mejo-

Desue la noehe del 24 de diciembre de 1922 que die- re.s Poes^ias Moderiias. \ to .su piimera coiifereneia en el Ateneo de Madrid, vieEn el 1929 viene a Puerto Rico y dicta la conferenne leeogiencio aplausos ininterriunpiJos. Sobre esta con- cia La Davza I'uoion iiiia I'la en la I'liiversidad. '"BI Poeta y la Vida", dice "El ImparEn el 19;U) la L'niversidad de Illinois por reconienda-

nlblico ^ ^ sensibilidad

Ba Confereucia, digna del distinguido cion eKiiontauea tie! proi'e.sor .Mardeii, jel'e del Departade manillesto la exqiiisita mento de Esludios ilispanieos de la Universidad de

minar^B'T- ^ cultura del disertante. Al ter- Princeton, invita a Baiseii-o eoino prolesor visitante y el disertaeion notabilLsinia, que el publico IHJl lo hacc profesor ]iernianente. puertorri^^'^ - muy aplaudido." "^omplaceneia, fue el ciilto eseritor Yoi-k,Enacepta el 1928 la Editoi-ial i\leMillan &, Kspauolcs C3o. de Nueva iqueno v publica su obra Xorclishis mo-

e.'^cuch''

J^n eTK^Tvt a...! nr\....

versas

,

vuelve otra vez al Ateneo a leer

gunda ve-''

Libertad": "Por se-

Puertorriquerm D

^^eneo el notable poeta

su nuevo UK .'*

creoiite (|ue '

'^yo algunos poemas

P''"xinio a publicar: La Copa de Ana-

por la bei eza"T lo.s6fieas de p ^ rij entusiasmT

i i

\

^ ■

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i

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.

i.

(If.nios del cual la critica mundial ha iiablado muy lavorablemente.

En esle mismo afio ia Universidad de Puerto

Rico y a. recomeiidaci6n.de don Ramon I\Ieneudez Pidal

y a nombre del CentJ'o tie Estudios Ilispanieos de Madrid, lo nonibra pioi'esoi- visitante.

Proximamente el jirofesor Balseiro, en los ejercicios ^°"d'osicioue.s de gran merito, tanto publico aplaudio con verdade- Rico, pronunciara el di.seurso a los gradnando.s. Indiida-

factura ^«^:iura como como por por las la.s orientaciones orientaciones fifi- de graduacioii de e.ste aho de la Universidad de Puerto

trinos^ -Mnceraiaente." ' poeta antillaiio, a quien nosotros feliei- triunfo.s. blemente sera este, otro eslabdii en su larga cadena de En el 1923 escriht,^ i

bra^.o yecretario d

IMadrid.

"ovela La ruta eterna. Es nom-

e.ste^ ^ '"^^ecioii de literaliira del Ateneo de

Aca..emia de Arter^^^oel 1924 pubr en Prancia, Italia' p'^^ J^iid Anieriea.

Una Nota de D* Jose A Balseiro

nonibran academico de la Hispanoamericanas. de Anacreo7ite elogiada

j-o de marzo de 1984— al comentar el aserto del Dr. Gre-

Espafia, Estados Unido.s y

gorio Maranon, a pro])6sito de que Ires siglos despues de

h^'inier tomo de El Vigia, ensa-

lluarte, estaba citado y comentado su libro en todas p«i'tes "menos en Espana", recordaba yo que Menendez y Pelayo, en su liiHioria de las ideas esl('/ icas. y eu el tomo ill, ({ue data de 1884, eapitulo VllI (pagiuas 206-207 de

'

En nota. aeiaratoria publicada en esta revista —uiime-

ninerto el autor del E.nhuen <le Lngcnios, Juan de Dios

yos tie critiea

rra, ilolanda, Alei^^^^' Sur y Eatadgy

eomentados en Inglate^ ^^"cia, Portugal, America del

^ iene a Puerto j?i/L'niversinHri „i

eo a u

Jhud Aca .emia Espanola'^i currcspondiente al

Uueive a Espyfj^j ^

Cordial, de quien eseribi''^ "8abro.so e,s ciianto contie ^ cog-ido, e.'egante, origin

L.ega el 1928 y ijubl" ^

En este mismo aiio la""

noticia ae que la maestro del Ensayo bialogu otorgado su primer preraio

hbio

Vigia.

Ua.

C'orre.spondiendo a mi aclaracioii. en cartu feeliada en

P'l'^hca el libro MiUica Madrid el 8 de abril, tuvo mi geiieroso amigo la geiitiloza Cejador: do es|)ecificar io siguiente:... "al hablar de que tres si'-^'odo es e.s- gios despin's (le la obra de Iltuu-te, nadie se ocii|)aba de

™ano mae.stra."

oUa eu E.s])ana, me re/icro a la- lilerahira. medira", etc. (El

«egimdo tomo de El Vigia. subrayado e.y nuo). Siendo a.si, no puede dudarse de la

onptp en sn honov ®ctualidad espauola da un ban- exactitud de la afinnacion marafiouiana. Lo que me com., " n ' ® Eirculo de BellasmeArtes de Mapublicar beneficio del eseritor, de la verdad c.J id. EJ profe.sor Balseiro amablemente muestra el vjjiazco de losenlectores de para Amhito,


AMBITO

EL QUIJOTE Y NOSOTROS —PROMESA DE ENSAYO—

Pov Gustavo Agrait Xucsfra cpora

cu trineo, puedeu igualar al arriesgado y fascinante in-

El iinoslro si^lo XX, del cual Gstamos tan enamo-

dague de aquelia neuroua final en ese nervio perdido en el iiit.rincado niapa anatomico de cualquier hombre. De-

lai.ios y uei (jiio euDria clceir, eoino tie la Liiad ilecUa, "enoi'ine el delieat*', usando tie la aeertada

sesperado, Julio Verne se lanzo al vacio desde ei aeros-

fiase que niereee tener luejoi- genealogia; Vivimos la epo-

tlr-o declarandolos en Cienqias Politicas honoris ca^i^a.

ta que sc ha tiado cueiila de ([tie la geoinetria euelidiana es.t:o.tia pei'ieiitada, qiui esTabieeii'j la intuieion eomo su-

El arte se resistio a ser espejo de la ciencia y se encerro heimetieo en su easa y eolgo un eartelito valiente y hii-

pcriOL* a la logiea y tpie ueseubrio que la. funeion erea

iiiilde que deeia: intra-soendeneia. A Pcn-ez Esorich se le

ei organo. Li moniento fomproiidido en el triibigulo Einstem-rreuti-l'iramuMlo. LI instaule eansatio que i>e niega a rcaeeioiiai- et)n los eailueos esliniulo.s apolillados que haciaii eiiioeiouai* a uue.slros jd)iie<os. llu}' no podenuxs reir

taio de Piccard y a los noveiistas inoralizadores se les cas-

pinto en la fronte la pa abra la-hit y de aid en adelante todos fuiinos t'eliees.

En eontraposieion a la novela en que todo oeuiTia se

Ei niismo 1'ant.astico

uieo ni fit^eibn en la que uada acoutece. En la que nada aeonteee y eii la (pie todo'aeonlece, porqne si bien es cier-

insiauLe ue superiieLei o.nna sen.sihdidad que responde tigil

1.0 que imestras lieroiuas no se laiizmi ruborizadas "en

ni ilorar sino eon diaries (hiapiin.

y eia^itico a los nuevos inonulos de expresiihi.

Uii dia a guieu iralo ue palpar la rotunda desnudez de una de Jils Tres (Jraeias tie lluhi^ius y tleseubrio iiue lies engahahan, tjue alii no iiabla [ii'ol'unili.tad. Eatoiices Una uiano unne y segura, de un soio trazo, dibujii las Tres Gracias y se pjasino la roaiidad ue la luauzana berkeliaiia.

Giro dia se deseubrio quo la barca en medic del lago luiiado era la tie uii postjador tie truelias y el sentiuieutalnimo se easo eon Liui^-miun y todavia duerme. Eue en la misma leeiia tiue la iroiiia perloro el infiado vieutre de 10 grave y la roaiidad eedK> el campo a la idea objelivaua y ei arte adquirio ingraviua elegaiicia. Ayer y hoy; borrdn y cuenta nueva. R'luistra novela

biazos uc Terpsieore" para eaer luego reudidas "en los aiuorosos y eonso-adores de iMori'eo", no es menos vertdaI ero que hi aecibn mental snbstituye eon creoes la fisiea. Freiile al cahadero de rompe y rasga del XiX nos enconIramos eon an llliscs quo no haee nada, como no sea intj-oinspeeeionarse hasta ei mas leve vibrar de lo subeonseieiite. Ante el autor que nos deeia si sus personajes eran shnpiiticos o graves, el autor eontemporaneo que humildemente se e-sconde y deja actuar y decir a los suyos. l-reiiie aquellos personajes guinoleseos, timidos, que no se atreviaii pensar sin consnltarlo antes eon su ereador, unos seres disemos, atrevidos, mu.mb.es, interesautisimos, que se resist.en a servir de pasatiempo al autor e imponeu su realidad trasceudente. Esto es piraiidelismo, lo otro no vaie la pena de uombrarse. Y a esto se reduce la novela moneina: aceion nula o easi nula, mucha introspeccion

psicoibgiea y la constante y desesperada caza de seres po-

El agudo eambio do sensibilidad que dejanios esque- sibles, no reales, que ya estos son demasiado coinuues. Y inatizauo ae por iuerza tiene que haber iniduido en todo h, certeza de tpie el artista es un pequeuo dies que puede ei oampo c.e la expresion artistica. En la literatura y iiaeer (pie cuan.tO un liombre saite haeia arriba, quede L'luy especia.inente en la uovela, la metainori'osis es patente. La novela del siglo i)a.sado se deelaro en bancaiTota, ineapaz de saldar sus deutlas emoeionales. Coiiven-

eidos de que la unioa li-ama tpie vale la poua de iutere-

sanios es la trayeutoria de uuestras vidas, un bueu dia dejamos abandonados y eoiideuados a inorir de inauieioii,

embiitido hasta la mitad del cuerijo en la tierra. jY esto

por veutuia no sera ol universo en que todo es posible? iY "EL Quijofe''?

iMuy bien pudiera ser que alguieu se estuviese pre-

al borde oe uii prooqiioio, a Dumas y a GaJdos. Mientras guutando en este instaiite (pie tieiie que vor lo expuesto alegres y eerleros nos liisparabamas haeia incditos pia con la obra de Cervantes. Uace muy bien eu formularse nos tie pura eroaeldu. (.'on inoviiniento paralelo al de la esa pregunta y nosotros en deeirles que, eomo en el ada eieneia crmunologica, (pie ha ido tiesproocuiniiidose del gio germano que eita Ortega, "los arboles no dejan ver delito pai-a xionsar en ei delineueute, con el desprestigio ,.] bosque". Muy probable es que no se vea el bosque, tie la ani.'cdolu narrada, naeib el interes en los personajes [joro para nosotros existe, tenemos coiiseieneia de su reay empezamos a preoeupariios por sus problomas y su in- hdad y esta dialaiio y perfilado en nuestro panorama tensa y coinplieada vida mental. Niiiguna novela de via- mental. Para verlo elaro y preciso no hay sino que dejes, aunque estos sean a la iuna o al centre de la tierra (Coutiuuar4),


•^1'"

10

AMBITO

fiPDcmaA dc.

a^man

(Jl'acia (^adiiia

ANTESOiLBRA

^Que liara en la tanle ju^nel arbol de oi*o siu la cojiseieneia

tie la pena rai'a?

Hay iin sol de inentiras Que me duele

barlandase en los ebarco.s del eamino...

LA SxVXA :\rALDxVl>

!Mis ojos pocadoiT.s ilesgranai-on la espiga. del sol nuevo.

icon quo maldad tan sana!

Despai-ramose toda con fruicion de simienle en siireo abierto

y t'l'ufecio lozana

•—mas plena, mas feciinda-

iCnanto tarda

la bora nienos larga!.. Espigare mi snefio en la antesorabra > nn jubilo de luces

jneendiani los nidos ei'- quo cantan

piijai-os que miieren eon el alba...

eii mis mtimos predios. .. LO QUE DEBIO SER

Esto eorazdu mio

olienle a sal yodada, iiujuieto y aiihelante de conocer nna por una, todas

las ])layas de la tierra debio ser flor de espnma en Una ola

0 eancion brisalera

laxitud

de un caracol aznl que se entregara

a un par de algtis morenas

estoy, eomo Lin vaso

AQUACERO

de vifia derramado e-ste elaastro azul

> bianco de mi eiiarto.

f'en eslos brazes lacios

La espina amarga y dura se clavo en el silencdo de Eios.

eaidos conio ramas

I'an perdido la savia.

Sangre de cristales mana

Con el mirar prendido

por la carne del aire.

'embloroso.

1"" "''it" de arafia

Redobla el tambor rojo

Con el aUna

—salvaje—

'■eeha u„ oyillo de eanciones

de los teelios.

9>^e ae quedarou aiu palabra

Sienibra de luz miedosa retona en los asfaltos, ,.

I


11

AMBITO

EL LOCO DE SANJUANOPOLIS l\)r Alejandro Tupia y Rivera

TAL vez i (> linyjMi <'iu*ontrado los lectores cl nom-

necesitaba establecer una industria, y no habia casas;

taiicias ([ue ro.knuon sus eunas. Las hay iiuliulableaiente

varse luia destartaJa;ia habitacion, eual si se tratase de

ff-liees, por sn asioiUo en higar apropiado a su desarrollo,

una mansion olimpica, iioiatue no habia casas; etc., etc.,

bre do e«ia eiudnd on los tralados cle Cicograijia iiue (lueria mudarse ponpie se aliogaba, y no habia casas; poriiue sin dvula tigui-ai-a en ellos eon otro ciial- que se inoria de hiiinbre porqiie lodo se lo llevaba el estnpendo alquiler, y no habia casas: que tenia que ir pre([uieva. Aosotros saboinos iine es o I'lie inia eimUul ile las guutando a los transeiinles y a todo el mniidit, de autemaiio; "iCiuindo se miida Ud. para hablar la podlga que Quiinbi'indmlas: eiuclad desgraeiada, si las liay. Pd vive, poi'Ciue no se eneuentran casas?" y que por ul EsU) puede sueeder. i)nesl() (lue las poblaeioncs como timo, veia disputarsc y pujar como en subasta para lleios individuos, obeileeen diirante su vida a las eircuus-

eoncluyo por deeivse Pero, sefior, ;qne se han heeho las easaa de esta eiuclad L Que diablo de ciudad es esta que ia sed de los liabitanles. sino que sirva para la indaslria, todo lo tiene: pulgas. sabandijas, zanganos, patios humeel aseo y hasta el ornato ju'iblico, pero exisleii otras po das. agna de aljibes, (sucios hoy, mahana seeos) letrinas blaeioncs que nuiestran a las elaras el desaeierto que pre

eon la proxlmidad de alguii bueu rio que no solo apague

liorribles, focos de infecciou y de otras cosas, y no tiene

sidio a su fundaeion.

Esto aeonteeio eon la pobro Saujuauopolis. Suponga-

SR el lector que la situaroii en uii islote largo y estrcciio

ca-sas'?

El infeliz D. Venaneio se qne.iaba, y se quejaba...

coiTio no se cine, sin agua eorrieiite y sin mas espacio que como en el desierto; .sin embargo de que oia quejarse a ei que i)ouia neeesitar alia en su origen; y para ma}or los deimis de lo mismo, pero... con igual frirto. desgraeia suya, oran tales los asaltos de corsarios y otros

eiieiuigos extranjeros, que hiibierou de considerar los ve-

"Hablais de liigienc fisica.—les deeia caluroso—pues

V la higieue moral .' iQue edueacion puede haber para

ciiios de antaho, como salvaeion, las murallas cou que se

vuestros^ hijos con el baturrillo de gente que pulula eu

vieron precisados a ccrcarla.

iJs bajas y eorrale.s de vuestras casas? ^Que obteudreis

Con el tieinpo credo como era natural, el vecindario; pero no la c.iudad; convirtiendose las casas en eolmcuas con. gran nuiuero de zangauos, por eierto. Huyeron los corrales y el arbolado t[ue les daba oxigeno, soinbra y fres co, y, por consiguiente, salad del veeiudario; con aumenlo prolifico de sabandijas, inseetos y lo que es mas deplo rable, de los zanganos reJ'eridos. Entro las abejas, Ijabia un infeliz que, segun sabeiiios, se apellidaba Veiiancio o D. Venaneio, como las gen-

do esa mezeolanza de elases tan desacertada, en qtie los

de abajo no mejoran y los de arriba pierden? ^ Que criados liabra que no aeaben de raalearee con zahurdas semc-

jante.s? i Qwe palabrotas para los oidos de vuestras bijas, que cinismo en las eonversaciones; que insolentes disputas con el de arriba y a deshora, por el uso nocturne de la puerta de la calle, quo algazaras a media noche con las rihas y pelotera.s; que alarde de mancebias y que mezcla de requiebros, araiuLzo.s y casas inaguantables, y todo,

t«:s le desigiiaban loara hidaU/uizarle o porquo naciera hi-

porque el casero quiere aproveehar hasta d rinconeillo

dalguizado. jPobre

mas inmundo o porque no se cabe en la ciudad! Tapa.!

los oidos de vuestros hijos, y tapad sus ojos, sobre todo quejarse a todas lioras do cuanto llevamos diclio! Lo peer ■ OS de vuestras hijas, porque de seguro que nada saludan. Venaneio!

; Pues dio en

la mania

de

ble podrau sacar sus almas de semejantes foeos de pes-

es que jn-edieaba en desierto, y llegaron a tomarle hasta por deniente.

tilencia."

Pero al eabo fueron todos euloqueciendose a su vez, puesto quo eorjioj-adoues y part iculares comenzaron a

Asi deeia el imbre D. Venaneio,-y todo el mundo le hacia eoro y repetia lo mismo; solo que aquel se trastorno

nmrmurar primei-o y a quejarse despues, de la faUa de aire, de luz y de saUul, asi eomo del auinento de sabandi jas, inseetos y zanganos en tau reducido espacio.

ae tanto desear el ensanche de la ciudad; porLpie sabido

Esto veina a corroborar aqudllo do que el .sueho de hoy suelo ser realidad de niahana; pero D. Venaneio al oir (pie todos, en vez de contradeeirle o de escuchaide eon hidiferencia como antes, le ibau ahora eon la corriente;

acabo de perder los tribos de puro gozoso. Ein embargo, como veia que todas eran exclamacio-

i»cs y palabras, y de aca para alia y de alia para ac^ y papel, y discursos y escribirj y que ei tiempo oorrla y 61

G.S que para volverse loco, iiada ma.s a proposito que fijarse en una idea y sonar cou lo imposible.

como esie

imposible era posible en el juego de sera y no sera, de ya va a ser y va a no ser, su cerebro se trastoruaba y mas.

1 610 sehoies, deeia creo eu cl mejor deseo de la mlmirnstraeion. Por lo tauto, no eomprendo por qu6 no ,se lace loy lb que habra de hacerse manana. Si al cabo

es de necesidad 4 a que oir mas razones? No hay razones

posibles contra la necesidad, y manana nos asombraria-


12

A M B I T0

En Torno ai Problema del Uso de Nuestras Tierras For S. L. Descartes

PUERTO Rico es im pais que necesita explotar efi-

(pie alguien con poca o ninguna autoridad afirmo sobre

eazmente sus reeursos agncolas. Somos una de las

ei problema. Es nece.sario quo «o conservou intactos, o regiones mas densamente pobladas del globo. No nias bien quo .se aiiinenten, los seutimientos de amor a nues poseemos un ciesarrollo indastrial adecuado para sostener tra tierra v el eutusia.siuo quo surge euando de ella se traiiiiestra excesiva poblaeioii. Dependemos casi exelusivamen- la, pero e.s imi.res-indible quo euidado.saineute y con vitc- c e la produecion agrieola para mantener las normas de si(in Serena analiepiuos los iieelios, antes de oJrecei opi

\:da de nuestro pneb!o. Si no peeamos de pesimistas con-

tiiiTiaiemos dependiendo de los recxirsos agricolas para me- niones. Con este piinto de vi-sta, y con motive del Dia de la jorar nuest.ra sitiiacion como pueblo. No parece que ba- Tierra, comence a expurgar los cen.sos de agricultiua que innehas razoiies para esperar una industrializacion del el gobierno amei'ioano ha llevado a efeeto en Puerto Rico pais en eseala suficieute para resolver nuestros problema.s. lente a a reaiklad de nuestros limitados recursos apa- en 1899, 1910, 1920 y 1980. Mi de.seo era investigar los Conseguir ha.sta donde I'liera jiosible eifras qae leee un pueblo en neeesidad apremiaute de mejoras que ha- lieehos. me ot'recieran una base para comprencler mejor el proble ganlavulamasllevadera ma. El lector pen.sara enaiulo iniya tei-ininado de lee^" ,

,

Ipeeemos p i ^nor .

este aiticulo, si )o tennina, qiic bien inuiil i'u6 mi tentatiEm- va. No enconti-ara ninguna conelii.sion definitiva, la base vai. de aumentar nuestro ingreso social. . situacion, que exploreiuos todas

eoino u.saino.s la tierra, riqueza basica de

((ue biiscaba para entonder mejor el problema no aparece

eeonomica, para determinar si esta-

])or ningun la '.o. Solamente iiicluyo do.s o tres tendeiicias

nnestia oieariivir.n'.

-

.

luaximo de reudimiento, o si (pie apareeen en las citras del oeiiso cpie a mi me parecen inlevcsant,e.s, ponpie son un magnifieo ejomplo para deiaosmejor aproveehainiento.

hav nrnr^r-r^'^ El te' ^

iiioii niibr^''^ ^ noestras tierras y sus u.sos atrae la opise ha habr'^i Mueho se ha aserito y mas

trar la eomplcjitlad del problema y la inescapable necesi lad de una investigaeion seria .sobre el uso de nuestras

ni^vor parte

tierra.s.

clones emo' ^ i se habla

problema. Sin embargo, la

Al usar los cejisos no presume qua la informacion que ^ escribe es fruto dq reacNuestra tendeneia euando de la tierra me brindan sea muy exacta. Los eensos estan sujetos a

foea el

sentimental. Pocas vecas se en- UP considerable margen de error, que no debe olvidarse, el angulo cientifico. A veces se cspecialmente en Puerto Rico. Mucbas voces el temor de Porque se geueraliza a base de dos o que la informacion puede usarse para imponer mayores

ci'ee poseer I tres obsiovTro^^ Clones aecidentales. Qtras veces se repite lo

boy. Quieii afua V Pnto

caigas contributiva.s hace que nuesti'o.s pocos prosperos

i^^bran venido a ser las razones de

dos eu la mania de gritar del misinn modo. habria ensanche y c-'t sedienta y apretada Sanjuanapolis, bido que eomplacerlos, sobre todo en lo dado vida y aera su mejor pa- lo ("el agua, alia por Mayo; pero la dcmeueia de nuestro bombro era pacifica y periodica, segiiu la lima, aunque no dejaban de estar todos monomauiaco.s, si bien decian

ba lastima^oiTie"l">"

Tez mas rematado, da-

elm para ISanjuao6po&!°°"''"''°'""'"^'^

^

solo por lo bajo: agua y ensanche. Don Venancio la liabia tornado por lo alto, y por

no

Los vpri>.

tolerarle per mas tiein-

de acS ™::rdr'!'''^"- -^e "" aquel chair de dra y aturdia y r^uitaba el "uefl' forzoso eueerrarle."

dormir y es

Y dieroii con eJ en f-fl • locos a los demiis o los ^ • r/t-,,// u tiirdia eon sus repetieiones dr

V 'yV solo le' aenuo, quedaban p^i^oues para gritareriflaque^ lo mismo noeJie y dia.

^

Por J'ortima cle la ciudad b»<a (Kmias vecinos, aunque v-iuuau, JOS

coDfagiados por su idea, le oian desde lejos y no se exacerbaba tanto su deseo de agua y ensanche; que a dar to-

se hizo un loco mas insufrible. Vivio muclios anos y sieui-

pre loco y gritaiido, a pesar de su (niei<irro

y c"-

sanche. Y ya por ultimo enroiiqiu'C'i<) y repetia con -Rficultad sus I'nriosas palabi'as. Y euando no pudo ya decirlo con la gai-gaiita, lo prusaba iior senn.s.

—jAgua y (:'nsaucbo para la desdieliada San-Juau-ii jiolis! fueron .sus uitimos acentos. Descause en paz el pobre lopo.

El infeliz tal vez hubiera reeobrado la cordura, si da en vivir uu siglo o alguno.s sig'los mas, y llega a ver n alizada su mania. ^Pero quien va a ser eterno? jMas vale morir.se 1

187 5


IS

AMB ITO

jPodemos admitir que esista una tendeneia hacia la

agricultores no scan nuiy veridicos en sus contestaciones.

Los enumeradores no poseon ni la tcenica ni la experien-

reduccion en el numero de cuerdas en fineas en Puerto

cia snficionte jiaj-a ohtoner la informacion d<^eada en for

Eico ? I Seriau aplicables a Puerto E-ieo las razones que explican la tendeneia en Estados Unidos? Estas preguutas

ma .sati.slac'toria. 1*21 ccmiso no se toina mas que para nn aiio. Es snnianuMilc lacii (pu' puedan existir elementos iH) pueclen eontestarse sin un amllisis ni^ cuidadoso del tie anoiinalidad duianic cso ano que vicien el caracter probiema basado en investigaeiones de otras fiientes de intfpico de parte o do to [a la informacion. A pesar de fojinaeion que sirvan pai*a cotejar la tendeneia que apa-

esa.s limit aeioiie.s protiero el een.so a las especnlaciones y ^^n.era.idat e.s de mueha.s j)ersonas. Son muy poeas las iijcntes de las (pie j)oilamos de])ender en la interpretaeiou de eonociinientos enii)irico.s sobre problemas como el qne nos preocupa.

rcue en las eifras del censo y que nos pei-niitan determi-

nar satisfactoriamente que factores son responsables de la reduccion si es que esta verdaderamente existe. Otra tendeneia iateresante que apareee en las eifras de! censo es la disminucion en el numero de cuerdas de te-

El censo nos <liee (pie el lirea territorial de Puerto rreuos labrados. El censo ofrece la siguieute definicion; Kico es a])roximadainenle 2,1})8;400 cuerdas. En el ano '" terrenos labrados iiiciuyen todos los terrenes eultivados 19.10 teiuamos el 9()'/f. de esa.s tierras en fineas. Desde el con regularidaci, terrenos en pastes que ban sido limpia1920 aparece nna tendeneia a disminuir el nnmero de dos y cultivaiios, terrenos en barbecho, terrenes en jardi-

nes, bortalizas, huertos, semilleros y terrenos ocupados por

eiierda.s en finca.s. (Tabla No. 1). TABLA NO. I

Area total en tlnea.s y poreientos del area territorial to

tal en tineas en ios anos 1S99, 1910, 1920, y 1930. PGR CIENTO

.\REA TOTAL .\SO

EN

DEL AREA TERRITORIAL

EINCAS

TOTAL EN

(OUERDAS)

PINCAS

1899 (1)

1910 (2) 1920 (2) 19.80 (y)

1,757,774

79.9

2,085,102

94.8

2,022,404

92.8

1,979,474

90.0

l(Xs edificios en la finca". Paralelo a este deseenso en lc« tH-renos labrados ha ocurrido un aiunento en los terrenos" en bosqiies y otros terrenos yermos en fineas. (Tabla No. El cletermiiiar si verdaderamente existe en Puerto liico esta tendeneia, o si se debe a en-ores del censo debido a equivocaciones en la interpretaeiou de que se entien-

cie por terrenos eultivados es uu asunto que a rui entender requiere estudios posteriores. TABLA NO. 2

lerrenos eultivados, porciento de terrenos eultivados del area territorial total, bosques y otros terrenos yernios en fineas en las anos 1910, 1920, y 1930. Terrenos eul

(1) (2)

Infoinie sobre el Censo de Piiorto Rico 1899, pAg. 356. Censo XIV do los Estados Unidos. Agricultura, P. R.

tivados «.'U Fineas

Ano

(Cuerdas)

1920, pilg. 1. OB

Bosques Por ciento

A'V (.'eusuR of the ITnited Slates. Agriculture, P. B.

de

Terrenos

En

Otros Te rrenos yer

Fiucas

mos en

(Cuerdas

Cultivados

Fineas

(Cuerdas)

1930, pp. 6 and 8. 1910

En ios Estados Unido.s hay estados donde ban ocurri(io disminuciones en el area de terrenes en fincas. En Niieva Yorlc i)or ejempio el niunero de cuerdas de fineas sf! redigo alre iedor de 4,500,000 cuerdas desde 1880 a

1920. (1) En Indiana ha ocurrido im movimieuto parecido. El area total en fineas se redtijo en 9% de 1900 a 1930.

(2; Entre las causas aducidas para explicar esta disminu-

1P20 1930

(1)

1,570,304

75.3

291,908

(1) (2)

1,303,547

64.5

296,213

222,950 422,644

1,222,284

55.6

322,447

434,743

(1) Censo XIV de los Estados Unidos. Agrlcultu to Rico, 1920, pag. 1. (2) XV Census

ra, Puer-

of the TJhite., states. Agriculture P

1930, pp. 6 and 8.

'

eion en E.stados Unidos la de niiis interes eeonomico es el Otro a.specto intimamente relaeionado con el abandono do tierras marginales. Otras causas son el ail ment o del area en ceutros urbanos, y el traspa.so de tierras ciente de nuestras tierra.s es la tendeiKdn b..- f para panpies publicos y reservas forestales.

(1) Vaugliaii, Lawrence M. Abandoned Farm Areas in N. y — Cornell University Agriculture Experiment Station. Bui. 490; 1929 page 7.

(2) Young, G. E. Marginal Farm Land in Southern India

R.

uso efi-

traci6n jigraida y la desaparieion de las nernip-^'^ « eoncenvoy a eutrar a disciitir los meritos vpI u No

y .a., gt-andes fineaa

eiieiente de la tierra. Me cone ret '- ■

'T":

g.ado.ote^rSdrrTtdi^!

na. — Purdue University Agriculture E.xperiment Station. Bui. 376, March, 1933, page 4.

La tabla No. 3 nos demuestr.a que bubo u» aumeuto eu


14

AMBITO

el numero de fineas de 1899 a 1910. El aiunento fue tan

A pesar de los hecbos arriba ex])uestos no podemos

grande qne es dificil creer pueda deberse a errores. De concluir que no cxiste concentraeion de los terrenos en P. 1010 a 1920 sin embargo ocurrio una disminueion de easi 60%. Las cilras de estos dos auos ban sido citadas muchas veees para deniostrar la lendeucia Jiacia la desaparicion

1*.

I'n estndio inas euitladoso de ins distritos productores

de cann demostraria una tendencia distinta en esas mu-

uic'palidadcs. (8)

Adennis ann ])ara la isia en general

del pe([ueno terrateniente. Pero la tendencia no persiste aparece una fuerte eoueentracion. Aunqne alrededor de dos de 1920 a 1980, epoca en qne ocurrio un aumento de 28.9% lerceras parte.s del numero de fineas son menores de 20 en el numero de fineas. Es interesante declarar que este curr.ias, solamente 278,93.5 cuerda.s eslan di.slribuidas en aumento ha ocurrido en las fineas relativamente pequenas, (sa fci'ma, mientras que aunque solamente un seis poreomo en las de las de 0 a 9 cuerdas y de 10 a 19 cuerdas. eient.o de las fineas c-xctule de 100 cuerda.s de extension, comprenden 1,209,863 cuerdas o sea algo mas del 50% del area total en fineas. (Tabla No. 4).

TABLA NO. 3

?^uinero total de finca.s, promedio del tamano per finca, promedio de terrenos labrados por finca, aumento o dismi

nueion en el numero de fineas comparado con el ano anteI'lor y pop ciento de aumento o disminueion para Ids anas 1899, 1910, 1920, 1930.

TABLA NO. 4.

Distribucion de las fineas por tamano y niimero de euer^ das en las finca.s de esos tamanos en 1930. Tamailo

Ano

Ntiniero

Promedio Promedio Aumento Por ciento

total

del tama- de terre- o disminu- de aumen-

^6

no por nos labra- ei6n en el to o dis-

fincas _

finca

dos por

Numero de Por ciento

(Cuerdas)

ndm. de miuuci6n

(cuerdas) fineas fincascom(cuerdas) parado con

Eincas

1910

131,432

20,520

50.1

11,007

20,9

147,503

20-49

8,835

16.7

264,712

50-99

3,351

6.3

3,192

6.0

52,965

(2)

cuerdas

0-9

(1) 1899

Numero de

10-19

100 y mus

el ano ante-

del total

226,464 1,209,363 1,979,474

100.0

39,021

45.0

(a)

58 371

35.7

26.9

19,350

49.6

Basada en el Censo XV de los EE. TJU. Agricultura P. R. 1930.

41,078

49.2

31.7

17,293

29.6

Hemos considerado brevemente tres problemas sobre la utilizacion de la tierra ; la disminueion de las tierras en

52,966

37.4

23.1

11,887

28.9

fineas, la disminueion de los terrenos labrados y la concenti-acidn agraria. En relaeion con ninguno de ellos ba sido

(2) 1920

(3 1930

(1)

fnforme sobre el Cenao de Puerto Kico, 1899, pdg. 356.

(2)

Censo XIV de •o8 Estados Unidos. Agricultura P. R.,

t^20,

2.

[vosible aportar eonclusiones definitiA'a.s.

Sirva este traba-

jo unieamente como demostracion de la dificultad del problcma y de la neeesidad de cuidadosa investigacion sobre

(3) United States.

Agriculture

P. R.,

el,

pp. 6 and 8. (a)

a que ofreee el censo no es comparable con las Riguientes.

(3) Clark and Associates. Porto Rico and Its Problems. The

Brookings Institution. Wash., D. C. 1930.

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y;i poi" s(fiii]'OM en pfirte alguiia, y temerosos (le perder las hiestiniables riquezas eon (pie se hallaban, determinaron Dudando si desemboearian per el estreelio de 8unda

dejar aquel Archipielago. 6 de Bincupura, elig:eron este por mas eereano, aiinque

ir.as pi-oliio y difienlto.so, deseehando el otro, aunque mas brc\'e, y limpio por mas distante, 6 lo mas cierto, ])or miis frecueiitado de los muehos navies que van y vienen de la luieva Baiuvw, como arriba dije. Fiando.se, pues, en un pnietico de aquel estreelio (pie iba con ellos, ayudandolcs la brisa y corrientes cuanto no

cs decible, con bandej-as bolandesas y bien prevenidas las armas para cualqiiier easo, esperando iina noche que fuese 161)iega, se (uitianon por el con de-sesperada re.solucion y embarcacion al segundo dia.

lo eoiTleron casi hasta el fin sin eneontrar sine una sola Ei-a esta iina fragata de treinta y tres codes de quilia, cargada de arroz y de una fruta que llaman Bonya, y al mismo tiempo de acometerla (por no perder la co.stumbre do robar, aun cuando huiaii) dejandola sola los que la licron a tierra para .salvar las viclas.

llcvaban, y eran JIalayos, .se eeliaron al mar y de alii saAlegres de haber liallado embarcacion en que poler aliviarso de la muclia earga con que se hallaban, pasaron a ella de eada uno de sus navio.s siete personas con todas

armas y diez piezas de artilleria con sus pertreehos, y prosiguiendo con su viaje como a las cinco de la tarde de En esta oeasiihi se do.sapareeiercn cineo de los ralos

(>:le mismo dia desembocaron.

y pre.sumo (pie valiendose de la cercania a la tierra, lograi-on In libertad con eehar.sc a natlo. A lo.s veinticinco dias de navegacion avistamos una

isia (no se su nombre) de (pie por liabitada de Portugue

ses, scgiin deeian 6 presumiau, nos apartamo.s y desde alii tin'i la viu^lta de la Xueva Jiolanda, tierra aun no bastaiilemeiite descubierta de ios eiiropeos, y poseida, a lo que

jiarece, de gentes bariiaras, y al fin de mas de tres ine.ses diD(*.sembareados en la costa los que se euviaron a tie-

m('S con ella.

28

j'ra eon las jiiraguas, lialiaron ra.stros antiguas de haber

esiado genie en aquel (Kiraje, pero siendo aUi los vientos contrario,s y vehementes y el surgidero male, solicitando

ne.s, sine un arro\-o de agua duice, mueJia tortuga y nm-

Ingar mas eomodo, se comsigiiio (m una isla de tierra 11ar.y, y halJando no solo resguardo y abrigo a las embarcaeio-

guiia geute, se determinaron dar alii earena para volver-

mios en remendarles la.s velas y en hacer carne.

se a sus ca.sa.y. Oeujiaronse elias en hacer esto, y yo y los

A eosa de cuatro mese.s 6 poco mas, e.stabamos ya pai a

sjilir a viaje, y poniendo las proas a la isla de Madagas car, 6 de San Lorenzo, con Le.stes a popa, llegamos a ella

en vehitiocho dias. Rescataron.se de los negros que la habiTini inuchas gallinas, cabras y vacas, y notieiados de que un navio ingles mercantil estaba para entrar en aquel puerto a contratar con los negros, determinaron esperarlo

abundancia.

y asi lo liicieron. No era esto como yo inferta de sus acciones y phiticas, sine por ver si lograban el apresarlo; pero reeonoeiendo cuando llego a surglr que venia muy bien artillado y con bastante gente, hubo de la una a la otra parte repetidas salvas y aralstad reciproca. Dieronles los mercaderes a los pirates aguardiente y vino, y retornaronles estos de lo que traian hurtado, eon

Ya que no por fiierza (que era imposible) no omitia (liligencia el capitan Bel para hacerse dueno de aquel na

vio como pudiese; pero lo que teuia este de ladron y de codieio.so, tenia el capitan de lo.s mercaderes de vigilante y sagaz, y a.sl sin pasar jamas a bordo nuestro (aunque con grande instancia y con convites que le liicieron, y qne 61 no admitia, lo proeuraban) procedio en las acciones eon

gran recato. No fue meuor el que pusieron Bel y Donkin jiara que no supiesen los mercaderes el ejereicio en que audabaii y para eonsegiiirlo eon mas seguro nos mandaron a mi y <i los mios, de quien iinicamente se recelaban, el que ptua de la vida no habla-semos con ellos palabra alguna y que dijesemos eramo.s marineros voluntaries suyos y que no.s pagaban. 29


30

En el tiempo de dos semanas en que fuimos al luengo de la costa y sus vueltas disminuyendo altura en dos ocasiones echaron seis Iiombres a tierra en una eanoa, y habiendo liablado cou no se que Portugueses y comprando-

Oeste y con brisas largas dimos en la costa del Brasil en Teinte y cinco dias.

pues de tomar agua y proveerse de lena, con las proas al

se eosteo un miiy extendido pedazo de tierra firme, hasta ilegar a una isla que nombran de piedras, de donde des

lo, lo montaron. Desde alli por espacio de mes y medio

de navegacion estando primero cinco dias barloventando-

Esperanza en la costa de Africa, y despues de dos meses

de bastimentos salierou en demanda del Cabo de Buena

Despedidos de los mereaderes, y bien provisionados

mucho, no me instaron mas.

Agradeciles la mereed, y haciendo refleja a las obligaciones con que naei, les respondi con afeetada liumildad •el que mas me acomodaba a servirlos a ellos que a pelear eon otros, por ser grande el temor que les tema a las balas, tratandome de espanol cobarde y gallina, y por eso in•digno de estar en su eompania, que me lionrara y vaUiera

darian armas.

ofreciendome a asistirles en su viaje como si fuese esclavo, eonsegui el que me llevasen eonsigo. Propusieronnae entonces como ya otras veces me lo habian dicho, el que jurase de aeompaiiarlos siempre y me

pues de reconvenirles eon lo raueho que les liabia servido y

barbaridad de los negros moros que alli vivian, hincado de rodillas y besandoles los pies eon gran rendiiiiiento, des-

que babfan quedado en aquella isla; pero considerando la

guiente dia. Tratai'on de dejai'me a mi y a los pocos companeros

que los daban, que amaneeieron muertos los pobres al si-

cientos y fue tal el rebenque y tan violento el impulso con

fce los eondenaron a recibir cuatro azotes de cada uno. For &er ellos eiento y cineuenta, IJegaron los azotes a nove-

ros hablandole a un portugues que venia eon ellos, y mostraiidose piadosos en no quitaries la vida luego al instan-

Contravinieron a este maudato dos de mis eompane-

27

rohicieron dc bastimentos y de agua; pero no teiiiendose

de la noclie. mudaron i-iinibo iiasta dar en Pulilaor. y se

E.staban estos a Sotavento, y tenicndose de loo los piratas cnanto los fuo posible, ayudado.s de la obscuridad

se.s a lo quo parecia.

giino que se los pucliera o]ioiier, y en este paraje, 6 por casiialidatl de la eontingencia. 6 porque ya se tendria noticia de tail famosos ladrones en algunas partc.s, de donde creo habia ya salido gento ))ara castigarlos, se descubrieron c'odro navios de guerra bien artillados, y todos de liolande-

elefantes, garzas y sarampures, y habieiidolas desvalijado de lo mas preeioso, les dieroii fuego, quitandoles entonces la vida a muchos de aquellas moros fi .sangre fria, y diindoles ii los que quedaron las pequenas lanchas que ellos mismos traian para que se fuesen. Hasta este tiempo no habian eneontrado eon navio al-

ser mas cursada de embarcaciones, y en pocos dias apresaroii dos bien grandes de moros negros, cargadas de razos,

pales de Cicudana, viraron para la costa de Bengala per

su sombrero de solos diamautes. Aportamos a la isla de Baturinau dentro de seis dias y dejandola por iuutil se dio fondo en la de Pulitimau donde hicieron agnada y tomaron lena, y poniendo en tierra (despues de muy maltratados y muertos de liambre) al goberiiador y princi

Videle al capitan Bel teuer a granel llena la copa de

pa lo que importaba"

No hubo pillaje que a este se eompanise por lo poeo que ocupaba, y su exeesivo precio. iQuieu sera el que se-

salienr'o a fuera.

ron a bordo con gran presteza, y eon la misma se levaron

yendo preso al goberiiador y a otros principales, se vinie-

Cometida muy a su salvo tan execrable traicion, tra/-

derable.

fuc la mortandad (como blasonaron despues), muy consi

Oiase a bordo el clamor del pueblo y la escopeteria, y

barcaeioues que alli se hallarou.

iniichas a que pegaron fuego, eorao tambien a algunas em-

Saquearon ei.antos diamautes y otras piedras preoiosas ya estaban juutas, y lo propio consipiwon en otras

<1


roil ii i'uera.

Viveii en c'lu .Macazai-es, y Hcntido.s los ingleses de no Ijabcr haliado aJli lo (|ue en otras paries, |)oniendo fuej^o a la poblaeion en ocasion qne dornium siis liahiladores.jiavegaron a la grandc isla de Bnrncy, y por haber barloventca 'o catoree dias ÂŤu eosta Oceid.en1.al sin haber pillage, se

aeei'caron al pnerto de Cicu'lana en la nii.sraa isla.' Ihil aii.se en el terriiorio tie e.ste 1 igar muLha.s preeiodicia de rescatarlos y poseerlo.s, no muchos nieses antes que

sas piedj-a.s y en esp(;cial diainantes tie rieo londo, y la cualH llega.seino.s, estimnld a los ingleses que en la India viven, pidiesen al rey de Borney fva!i6ndose para eso del gobernador qne en Cicudana lerna) les permitie.se factona en aquel iiaraje.

reeonocerlos.

Pusieronse los piratas a .sondar en la.s piraguas la barj*a del rio no solo para entrar en el con. las embarcaciones rnayores, sino para hacer.se capaces de aquellos pnestos. Interrumpioles oste ejercicio un champan de los de la tieiTa, en que se venia de parte de quien la gobrrnaba a

Pu6 su respuesta ser de naeion ingleses y que venian caj'gados de generos nobles y exquisitos para contratar y

Como ya antes liabian experimentado en los de esta

rescatarles diamantes.

nacidn ainigable trato y vieron rieas muestras de lo que en lo.s navios que aiire.saron en Puliubi, les pii.sieron luego a la vi.sla. se les facilild la licencia para eomereiar. liicinronle al gobcriia lor iin regale considerable y

consigtiicron el que por el rio subleseji al i)ueb)o (que dista ini euarlo de legiia de la niarlna) ciiando giista.sen.

Kii Ij-es di'a.s qne alii e.sfiiviiiios reeonocieron e.star indei'enso y abierto ])or lodas partes y ])roponiendo a los Ciciidaites no poder deleiierso luir iniiclio lienipo. \ (pie a.si se recogie.seii hts diaiiiante.s en casa del gobernador, dondc se haria la feria, dejandoiins aprisionados a bordo y eon bas-

l.'iiie giiarda, subiendo al piuito de media noehe por el lio an-iba muy bien annados, dieron de improvise en el pueblo, y fue la casa del gobernador la que primero avanzaron.

26

4.

Jes aJgun rel'resco, .se pa-so ade'ante hasta llegar finalmente ;i un rio diiatadisinio sobre cuya boca surgieron en cincu

brii/.HH, y presumo fue el de 'las Amazonas, si no me engaho.

su prisidn.

Daule Utcrtad los piratas y trae d la memoria lo que toler6 eo

IV

Debo advertir antes de expresar lo que tolere y sufn do trabajos y penalidades en tantos aiios el que solo en el

eonde.stable Nicpat y en Dick qiiartamae.stre del capitan Del hallo alguna conmiseracion y consuelo en mis conti-

ruas fatigas, asi socorriendome sin que sus compaheros

labras con que me eliortaban a la paeiencia. Persuadome

lo viesen en casi extremas necesidades, como en buena.s pa-

a que era el Condestable catolico sin duda alguna. Juntaroiise a eon-sejo en este paraje y no se trato otrs eosa sino que se liaria de mi y de siete eompafieros mios que habian quo'lado. Votaron unos, y fueron los mas, que nos degollasen, y otros, no tan crueles, que no.s dejaseil en tierra. A unos y otros se opusieron el Condestable Nicpat, el Quartamaesire Dick y el capitan Bonkin eon los de su sequito, afeando aceion tan incligna a la generosiclad inglesa. —Bastanos (decia este) haber degenerado de quienes

somos, robaudo lo major del Oriente con circunstancias tan imjnas. /, Por veutura no estan elamando al cielo tan

tos inocentes a quienes les llevamos lo que a eosta de siidores ])o,seiau, a quienes les qiiitamos la vida? ^Que es lo que hizo este pobre espauol ahora para que la pierda? Habcj'uos servido eomo un esclavo en agradecimiento de lo qne (^on el se lia hecho desde que lo cogimos. Dejarlo en este rio donde juzgo no hay otra eosa sino indio.s barbaros, es ingratitnd. Begollarlo, como otros decis, es mas que

impiedad, y porque no de voces que se oigan por todo el mundo su inocente sangre, yo soy, y los mios, quien lospatrocina. 31


'i2

.mar de tautas borrascas fue n.uo.stra estrella.

Con un regocijo nunea esperado .suele de ordinario embarazarse el discurso, y pareciendonos .sueho lo que pasaba, se neeesito de muclia reflexa para creernos libres. Pue nuestra acciou priinera levantar las voces al eielo engrancleciendo a la divina mbsericordia como mejor pudimos, y con inmediacion dimas las gracias a la qne en el

Alabo a cnantos, aun con riesgo de la vida, solicitan In libertad, por ser sola ella la que merece, ami entre animales brutes, la estimaeiou. Saeonos a mi y a mis eoinpafieros tan no esperada dicba eopiosas lagrimas, y juzgo corrian gustosas per nuestros rostros por lo que:antes las habiamos tenido reprimidas y ocultas en nuestras peuas.

diindome el buen viaje, 6 per mejor decir, mofandome y escarneciendome, me dejaron ir.

<lad que eonmigo nsaban, y a.sf lo bice. • Dieronme iin astrolabio y agujon, nn derrotero holandes. iiua sola tinaja de agna y dos tereios de arroz; peTo i\i abrazarme al Coudestable para despedirse, me aviso como me babia dejado, a excusas de sns eompaneros, alguna sal y tasajos, cuatro barri'les de p6lvora, mucbas balas •do avtilleria, nna caja de medicinas y otras diversas cosas. Intimaronine (haciendo testigos de que lo oia) el que si otra vez me cogiaii en aquella costa, sin que otro que Dies lo remediase, me matainan, y que para esensarlo gobernase siempre entre el Oeste y Noroeste donde hallaria esi)anoles que me amparaseii, y haciendo que me levase,

^gradeciesG a eada nno separadainente la libertad y pie-

tamano seiu'a el susto y la eongoja eon que yo estuve. Pesembaraiiada la fragata que me daban, de cuanto habia en ella, y'eambiado a las suyas, me obligaron a que

p6nga.se en mi lugar quien aquf llegai-e y discurra de qu6

Presupouiendo el que a todo ello me halle presente,

mis eompaneros eonio mejor me estuviese.

ciieseii la fragata que apresaron en eJ estreelio de Syueapura, y con ello la libertad paj'a que dispusiese de ini r de

tomar las armas para decidiria, se convinierou en qiie me

Llego a tauto la coutroversia, que estando ya para .V'

Iba en la primera un embajador de aquel ley paia e

25

a los \)obr(-s barbaros, despin'-s de. malar silgunos y de robi.rlos a todos, en, demanda do la isla de Tamburlan, vira-

Kesesilarnn de ellos alg.una.s cabras, cocos y aceite de estos j)ara la lantia y otros refrescos, y diindoles un albazo

crLse.s.

rarnu hi vmdia de las de Ginnlan habitadas de Msilayos, ciiya \Tstimen(a no jsasa de la cintui'a. y ciiyas ai-ina.s .son

a sianes y si oclio de los mios en miuella isla sin gcnte, ti-

vabau les dieroii fuegn. y dojamlo asi a porTugu(\ses coino

Besembarazada esta y las dos ]irinieras de lo (pie lle-

pvociosas piedra.s, y aunciue no de tanto valor le igualabau en lo curioso muchas alhajas de plata, eantidad de eanfora, ambar y almizcle, sin el resto de lo que para eomerciar y vender en aquel veino babia en la embarcacion.

(Ic vam en alto de piwo oro xcmbyada de diamantcs y otras

Vide y toque con mis manos arm como torre, 6 castillo

luntad al rey se le remitia.

A empefio que parece no eabia en la esfera de lo asequible correspondio el regalo que para granjearle la vo-

castigarle.

Notieiado de ello el virey de Goa enviaba a pedirle satisfaeci6n y aim a solicitar se le eutregase cl ginoves para

ves causas.

Ensoberdecido 6ste con tanto cargo, les corto las manos a dos caballeros Portugueses que alH asistian, per le-

tos.

embajador que enviaba al rey de Slam por e.ste motivo. Cons.iguio uii Ginoves (no se las circiinsty'tia.s con que vino alii), no solo la privaiiza con aquel re.., sine cl qne lo biciese su lugartenieiite en el principal de .sus puer-

Era !a tercej-a del virey de Goa e iba a cargo de mi

do Goa se reniitia a Europa.

I'cdueia fi .solos tejido.s de seda de la China en extreme ri ces, y & caiitidad de ore en piezas de fiiigrana qne por via

Era rl inten's de la segnnda niucJio mayor, porque so

sos de aquella tierra.

gobernador de Manila, y IJevaba para 6sto un, legao ^ e preseas de nuicJia estima y muclio.s frutos y generos piecio-


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