Ubicado en la línea fronteriza entre Arizona y Utah, es un lugar con un encanto especial. Fue fundada en 1957 y tiene una población aproximada de 7500 habitantes. La mayoría de visitantes coinciden en definirlo como un lugar con una magia especial. Un lugar único. Diferente. A donde vale la pena regresar. Y precisamente buscando ese encanto especial, Ricardo Soto y su familia, decidieron salir de su casa, después de meses de encierro por el coronavirus. Lo que encontraron y lo que sintieron, lo comparten con nuestros lectores a través de estas fotografías tomadas con el corazón.