ZÁRATE RIVERA

Realizar Nuestra Funci N

DESDE LA EMPATÍA Y BUEN TRATO, JAMÁS DEJAR DE VER LA NOBLEZA DE NUESTRO TRABAJO Y LA IMPORTANCIA DE ÉL, AL IMPACTAR CON LA SOCIEDAD.

Diana Sarahí Zárate Rivera, es nacida en México, en la ciudad de Irapuato en el Estado de Guanajuato, se titula en Licenciada en Derecho por la Universidad de Guanajuato, así mismo cuenta con una Maestría en Ciencias Políticas por el Instituto de Formación del Estado de Guanajuato.

Dentro de su crecimiento ha recibido diversos cursos dirigidos al Sistema Penitenciario y a la Ejecución de las Penas; el cual dentro de los años 2015 al 2023, fue la secretaria del Juzgado de Ejecución de Penas del Distrito Judicial de Irapuato y Salamanca, donde realizo suplencias como Jueza Provisional. Actualmente es secretaria Interina del Juzgado de Ejecución de Penas del Distrito Judicial de Pénjamo, Guanajuato. Aparte de ser una gran madre excepcional de un niño de 11 años.

¿Qué significa para ti ser servidor público? Es gran compromiso social, significa, hacer tu trabajo, siempre lo mejor que puedas con la visión enfocada en servir y dar resultados que aporten al bienestar social.

¿Cuál fue tu motivación para ser servidor público?

Mi papá, toda vez que fue un servidor público como pocos y que se fue de este plano en el apego al cumplimiento de su deber.

¿En qué área te desarrollas?

Actualmente, me desenvuelvo dentro del Poder Judicial del Estado de Guanajuato, en la materia penal concretamente en la Ejecución de las Penas.

¿Cuáles han sido las dificultades más grandes como mujer que te encontraste en este trabajo? Compaginar la maternidad con lo demandante del servicio público, lo delicado de algunos asuntos, sumando la carga de trabajo, la presión y las urgencias del mismo.

¿Qué representa para ti el área donde te desenvuelves? El procedimiento de Ejecución Penal desde mi perspectiva, si bien es la última parte del proceso penal, es el momento más humano del mismo, enlaza a las partes procesales desde una mirada más sensible, pues es propiamente dicho donde la sentencia ejecutoria se va a volver realidad, por una parte los ofendidos obtendrán la reparación del daño y por la otra el sentenciado reparará a la sociedad el daño causado, de alguna manera; y todo pasa, bajo la mirada de la figura del Juez de Ejecución de Penas, un juez que nació constitucionalmente en las reformas del 2008, que se encuentra ligado al Sistema Penitenciario, desde su fin que es la reinserción social, y la dignificación humana de las personas privadas de la libertad dentro de los centros penitenciarios.

¿Crees en la reinserción social?, Sí, creo que la delincuencia es producto de la ruptura social actual, que la familia es nuestro principal aliado para reinsertar, la clave está ahí, como en las oportunidades, los valores y el amor.

¿Algún mensaje? Me centrare en todos los servidores públicos, les quiero decir y pedir que realicemos nuestra función desde la empatía y buen trato, que jamás dejemos de ver la nobleza de nuestro trabajo y la importancia de él, al impactar con la sociedad

¿Qué más hay para ti, dentro del área donde de desempeñas? Seguir, preparándome, superándome aprendiendo para en algunos años poder ser Jueza de Ejecución. Y sobre todo no darme por vencida, cuando siento como mujer, mama y trabajadora que ya no puedo más.

AGRADECIMIENTOS: Primero a mi familia, mi mamá y mis hermanas, sin ellas definitivamente no podría haber realizado, lo que hoy hago, así como a mi mentor el Maestro Oscar Perea Olmos, que, por años, me apoyo, me enseño y me dio la libertad de aportar mi granito de arena en sus resoluciones, gracias por compartir conmigo lo que es impartir justicia. Y a mi valiosa institución Poder Judicial del Estado de Guanajuato