Para Erín, a quien le estoy eternamente agradecida.
He aquí una nueva traducción, recuerden que realizo este trabajo para ayudar a todos los Fans de la serie que no saben hablar inglés.
TABLA DE CONTENIDO
CAPÍTULO 1 La mayor aventura de la Tierra CAPÍTULO 2 Daring toma la delantera CAPÍTULO 3 La Sala de Lectura de la Sociedad Botánica Ecuestre CAPÍTULO 4 La llave de Gallant True A CAPÍTULO 5 El Diario y la Hoja Eterna CAPÍTULO 6 Atrapar al ladrón de la hoja CAPÍTULO 7 Una fortaleza en el borde del mundo CAPÍTULO 8 La emboscada de Ahuizotl CAPÍTULO 9 El secreto de las Hojas Eternas CAPÍTULO 10 Viajar en las escamas
CAPÍTULO 11 Un oasis de fuego y flores CAPÍTULO 12 Plantas Indígenas y Plantas ingeniosas CAPÍTULO 13 Lágrimas del Dragón CAPÍTULO 14 La Gruta de la Luna CAPÍTULO 15 La raíz del Infinito CAPÍTULO 16 El Tesoro
CAPÍTULO 1 La mayor aventura de la Tierra Había un centenar de animadas conversaciones teniendo lugar a la vez en el gran salón de baile, pero sólo una le importaba a Daring Do, aunque no era una parte de ella...aun, pero lo sería, tan pronto como pudiese hacer su movimiento hacia el consejo de administración. Daring no quería que toda esta noche hubiese sido para nada, la melena recogida elegantemente, el incómodo vestido de noche con lentejuelas y la absoluta agonía de tener que socializar durante horas con ponis de los que no sabía nada (ni le importaba, en todo caso) eran todos los medios a su fin. Esta noche era la noche en la que averiguaría la verdad acerca de la Flor Eterna y si realmente era capaz de concederle a un poni el inescrutable premio legendario– de la inmortalidad. Por lo que sabía, era un mito, como muchas otros que había tenido en toda su carrera, pero Daring Do tenía un fuerte presentimiento sobre éste y no sería silenciado. La velada era un evento elegante, había cincuenta enormes mesas redondas, cada una estaba cubierta por un flamante mantel blanco y acomodada para diez invitados. Hermosas flores de jazmín, lavanda e hibiscos arco iris que estaban organizados en elevados centros de mesa que llenaban el aire de frescura perfumada, deleitando a todos los ponis. Cada lugar de cada afortunado invitado estaba colocado con utensilios enchapados en oro, pétalos de flores y un exclusivo recuerdo, una pequeña trufa de chocolate en forma de rosa y junto a ella había una flor verdadera de tallo largo sosteniendo una tarjeta con el nombre del invitado. SRTA. DARING DO –INVITADA DE HONOR DE LA SOCIEDAD BOTÁNICA EQUESTRE. La elaborada caligrafía llevaba muchos bucles y remolinos, al igual que las vides de la hiedra que cubrían el quiosco de música, luces parpadeantes de color blanco cubrían todo en cascadas desde el techo como ramas de un sauce llorón. Los ponis de Sociedad, los únicos que siempre asistían a estas beneficencias, amaban los detalles intrincados, compraban un costoso boleto, se vestían con sus mejores galas y
bailaban toda la noche, todo en nombre de una causa u otra. Cualquier excusa era buena para una fiesta. Una joven yegua que llevaba una pulsera de casco incrustada de diamantes trotó al lado de la mesa de Daring "¿Cuál es la causa de tu tardanza, otra vez?" le pidió a su amiga, quien estaba comprobando su sombra de ojos azul en un pequeño espejo de bolsillo "Algo que ver con salvar flores" le respondió a su amiga "Me encantan las flores, ¿a ti no?" añadió antes de que el par galopara a aplicarse más maquillaje y hacer más declaraciones vagas de apoyo al evento de la noche. Su lengua burbujeo mientras tomaba un sorbo de su delicada copa de sidra espumosa. La yegua fingía escuchar al General Sparks parlotear acerca de su colección de sus raros bits Horavianos, pero realmente estaba demasiado preocupada escaneando la habitación como para molestarse con la numismática. El mar de telas, velos y trajes de etiqueta era un obstáculo para su objetivo: encontrar a los eruditos que sabían algo sobre su obsesión actual. De acuerdo con la única revista botánica de la sociedad de la Flora y Foalna, ella debería estar buscando a dos miembros específicos de la sociedad llamados Vine y Fern, que recientemente habían publicado un artículo titulado "Llegar a la Eternidad: La Leyenda de la Flor Eterna" Daring sabiamente se había tomado un tiempo extra para obtener una copia de la lista de invitados antes del evento, por lo que sabía que estarían allí. "Oh, por el heno!" Sparks rió divertido "¿Qué tal algunas imágenes, para que realmente puedas tener una idea de lo que estoy describiendo?" El general sacó su cartera, hojeando las fotos una por una “Ah, sí! Aquí está uno de mis favoritos... la magnífica Morrow Era pieza de plata de dos bits, alrededor del año 796 antes de Celestia... "Se ajustó el monóculo y le sonrió a Daring "¿No es una belleza?" Su rizado bigote blanco se movía con cada palabra que decía. "Wow, nunca he visto nada igual..." la aventurera respondió con un gesto cortés y una sonrisa forzada. La atención de Daring no estaba en el poni al frente de ella ¿Dónde estaban esos dos ponis con la información secreta que estaba desesperada por obtener? La única razón por la que estaba presente en este evento para recaudar fondos ridículamente elevados de la Sociedad Botánica Ecuestre era para espiarlos.
A lo largo de la mesa de postres, Daring vio un pony gris claro con una melena color púrpura oscuro charlando con un semental que podría haber sido un erudito, pero el tipo no se daba la vuelta. "¿Le apetece otra copa de sidra, señorita?" Un camarero apareció, vestido con una chaqueta negra, corbata y con una botella en su casco. "Sí," Daring espetó y estiró el cuello a su alrededor "Pero date prisa" no le habría importado si no estuviera bloqueando toda su vista de la habitación. El camarero le sirvió y se acercó al siguiente invitado, sí iba a tener que permanecer durante todo el evento de discursos y presentaciones, bien podría tomar un poco del dulce brebaje burbujeante. De repente, vio al dúo, sus objetivos estaban al lado contrario del gran espacio, en otra mesa y completamente fuera del alcance de su oído, pero Daring Do era una maestra lectora de labios, se alisó unos mechones de su melena, la cual estaba en un increíblemente incomodo tocado francés. La poni era la imagen misma de la elegancia con su brillante vestido de noche color verde oliva, Daring no odiaba nada más que vestirse así, pero siempre y cuando lo mirase como otro de sus expertos disfraces, podría ocuparse de ser un poco elegante por una noche, sin embargo el ver su reflejo en el espejo todavía era extraño. La banda cambió a un ritmo más rápido y varios ponis se levantaron para tomar parte en la alegría. Los invitados comenzaron a formar parejas, girando y golpeando sus cascos al ritmo. "Perdón por mis malos modales señorita Do, le pediría a bailar, pero me temo que tengo cuatro patas izquierdas" Sparks inclino la cabeza hacia ella y su monóculo casi se caía de su ojo izquierdo, capto la indirecta y escondió sus fotos en el bolsillo del abrigo. "Aunque si lo pide, podría intentar un fox-trot...." Daring Do agitó su casco y negó con la cabeza en respuesta. "Esta en lo cierto, General. Yo no bailo. En realidad, yo—" Daring se interrumpió a mitad de la frase, tomó otro trago de sidra y enfocó su vista en una pequeña yegua anciana que llevaba un vestido do noche de cuello alto con volantes, charlando con un joven semental corpulento con un traje marrón.
Madame Willow Fern y el señor Thaddeus Vine, respectivamente, no sólo eran miembros de la junta y expertos en todo tipo de hierba, árbol y flor conocida por los ponis, sino que también tenían teorías sobre el elemento específico que a ella le interesaba y si algún poni tenía la información que estaba buscando –la auténtica verdad de la Flor Eterna—eran ellos dos. Sus ojos se movían alrededor mientras hablaban, claramente sospechosos de estar siendo escuchados "-después de la presentación la tomaremos-" Madame Fern estaba diciendo, sus labios rojos contrastaban contra su piel de color verde azulado y enfatizaban cada palabra. "Tal vez deberíamos hacerlo ahora mientras—" el Sr. Vine frunció el ceño, su tupido bigote amarillo hacia más difícil de leer sus labios. Él miró sobre su hombro a la multitud de ponis corriendo al nuevo lote de tartas de manzana "ningún poni notara si ella desapare—" unos ponis cruzaron delante de Daring, en dirección a la pista de baile y sin saberlo la hicieron perder palabras aquí y allá, aunque no se atrevía a moverse ahora "-tal vez no nos crea--", dijo Vine y más ponis cruzaron a través de su línea de visión, ¡Fuera de mi camino! Pensó Daring. Vine seguía hablando "—circunstancias!" "—entonces ella irá, eso es lo él dijo—" Dos yeguas se detuvieron delante de su mesa, fijándose en el peinado de la otra antes de continuar hacia la estación de sidra. Tal vez había llegado el momento para acechar más de cerca. "—localización de la Flor Eterna!" Fern exclamó, con el rostro plagado de preocupación. Vine jadeó y puso su pata sobre la boca de Fern. "No aquí." Daring se inclinó hacia delante, con los ojos cada vez más abiertos, sus instintos habían estado en lo correcto! Ellos sabían algo sobre el objeto que buscaba. Había muchas razones para creer que la mítica flor efectivamente era real. En su mayoría Daring Do sólo cazaba los artículos que fuesen más tangibles o al menos algo gordo como oro o acero de los ponis de Tierra, pero las flores estaban vivas y a su vez,
efímeras— un poni podría buscar toda su vida por una planta rara, sólo para descubrir que la especie se había extinguido. A Daring Do no le gustaba decepcionarse de esa forma, así que los objetos tangibles que duraban para siempre eran su juego. Pero después de los acontecimientos recientes en Marapore donde Daring había rescatado a los aldeanos de la erupción de fuego del Monte Vehoovius, sus opiniones habían cambiado al respecto. Golden Rule, el erudito local de Marapore, le había dado un regalo de despedida: Plantas Mágicas Indígenas del Norte y del Sur, Volumen 5: Flores. El raro libro contenía una gran cantidad de información sobre el tema, incluyendo una enigmática entrada sobre la Flor Eterna: la única planta que se creía podía durar para siempre. Se entendía que la evasiva flor mágica era la dadora de inmortalidad a cualquier poni que consumiera su dulce néctar, el único problema era que ningún poni sabía dónde encontrarla e incluso si lo hiciesen, no serían capaces de pasar la información ya que la flor se replantaba en una nueva ubicación cada vez que era vista. Para hacer las cosas aún más complicadas, se decía que la flor se transformaba cada vez mediante el desarrollo de nuevos atributos basados en quién la había buscado. La Flor Eterna no quería ser encontrada, así que naturalmente, Daring Do tenía que conseguirla. La canción terminó y comenzó una nueva, era una melodía lenta. Basta de esperar y a atravesar la sala! Daring se puso de pie y corrió directamente a la mesa de Madame y Thaddeus, dejando boquiabierto al General tras su precipitada salida, Daring alargó su casco a un sobresaltado Thaddeus Vine y enarcó las cejas "Gusta bailar, Sr. Vine?" El pobre semental apenas pudo murmurar una respuesta antes de que Daring Do fuera estrellada contra el suelo por dos fuertes secuaces en trajes de etiqueta, Daring había cometido un error de novato. Había estado tan ocupada viendo sus propios objetivos toda la noche que no se había molestado en darse cuenta de que también era un objetivo –del mismísimo Dr. Caballeron!
CAPÍTULO 2 Daring toma la delantera
La manga de su vestido se rasgó tan pronto como salto sobre sus cascos, quitándose a los pesados ponis de encima, no podía importarle menos si el vestido se arruinaba. Las tiras de tela oliva hacían cada movimiento el doble de difícil. Con una pirueta elegante, Daring giró sobre sus cascos traseros y golpeo a los dos ponis fornidos, enviándolos por la pista de baile de madera pulida, el más grande de los dos, un poni de crin corta de color naranja, se estrelló contra una de las mesas y gruñó derrotado. El centro de mesa floral se estrelló contra el suelo, los fragmentos de vidrio explotaron por todas partes, los ponis sentados en la mesa se quedaron sin aliento en estado de shock ante la escena, protegiendo sus preciosos rostros, algunas de las yeguas gritaron, aunque no estaba claro si estaban molestas por la lucha o por la sidra derramada en sus vestidos. La habitación empezó a vaciarse, la banda comenzó a tocar, cambiando la canción a un número optimista que hacía juego con la acción que se desarrollaba frente a ellos. "Alguien más quiere bailar tango?" Daring Do llamó a los dos secuaces que podía ver, los ponis, disfrazados de camareros se miraron el uno al otro con expresiones en blanco. No eran los individuos más inteligentes. "¿No? Bueno, supongo que eso significa que estoy haciendo una actuación en solitario!" Daring extendió sus alas y se elevó hasta el candelabro de doce niveles del imperio de cristal, voló a toda velocidad, rodeando el enorme aparato en un vertiginoso tornado oro, gris y verde brillante. Los cristales del candelabro brillaron a través del desenfoque y simularon un fascinante espectáculo de luces. Todos los ponis debajo se detuvieron en su lugar, incluyendo a los secuaces camareros. La banda aceleró el ritmo para agregarle más emoción, Daring se impulsó aún más
rápido. Uno de sus trucos favoritos para derrotar a un enemigo era crear una distracción confusa, funcionaba todo el tiempo. "Se va a caer!" Una yegua pegaso en un vestido amarillo gritó, su rostro se contrajo con horror cuando señalo al candelabro balanceándose. Los soportes de un lado se habían roto y ahora sólo una cadena de acero lo suspendía "Todos, corran!" los ponis se apresuraron a los bordes de la habitación, pero los dos secuaces en traje de camarero se mantuvieron firmes mientras los otros dos seguían gimiendo en el suelo y sosteniéndose la cabeza. Daring Do despegó hacia la esquina donde el techo se unía a la parte superior de la pared y el enorme candelabro giro en círculos como un péndulo frenético, exactamente como Daring lo había calculado. Se mordió el labio en anticipación, sólo sería un segundo hasta que... ¡ZAS! El candelabro cayó y aterrizó sobre una mesa con un fuerte golpe, demoliendo todo, excepto la propia mesa, los pedazos de cristal salieron volando haciéndose añicos igual que fuegos artificiales, entonces la mesa rodó sobre su costado y se volcó hacia otra, creando un efecto dominó que se tradujo en cinco mesas creando una barrera alrededor de los cuatro secuaces a mitad de la pista de baile. Estaban atrapados! "Yo llamo a eso uno el paso de la caja!" Daring rió desde arriba, controlar al grupo de ponis había sido relativamente fácil, sólo un rápido movimiento, una trampa y un golpe, y ahora estaban completamente indefensos. El Dr. Caballeron siempre contrataba zoquetes para que trabajaran para él, pero eso hacia su trabajo más fácil, la fuerza bruta era nada en contra de su astucia y agilidad. Incluso en un vestido de noche formal. "No tan rápido, Do!" Una voz familiar resonó por el salón de baile, tenía un acento claramente extranjero y Daring Do reconocería esa voz en cualquier lugar. "Caballeron!" Daring gruñó, buscando entre la multitud, frunció el ceño y se concentró en él, de pie junto a la misma mesa a la que estaba tratando de acercarse cuando la pelea se desató, era donde había estado sentado el consejo de administración de la Sociedad
Botánica Ecuestre "Todavía no has aprendido a meterte en tus propios asuntos?", se burló de él. El semental adulador sonrió y alisó su corta crin entrecana, su barba estaba más crecida, como si hubiese estado en la carretera por semanas y a juzgar por su traje –la camisa marrón de siempre y su pañuelo rojo de lunares– Caballeron no había asistido al evento, sino que había estado esperando en sus alas por su momento para lanzarse en picado y arruinar todo para todos. Caballeron paseaba por todas partes, su Cutie Mark de un cráneo dorado con gemas rojas y blancas en sus ojos se movía casi como si estuviera hablando "Por el contrario, Do, te he mantenido vigilada más de cerca que nunca..." Él trotó hacia Fern y Vine, una cuerda ya estaba atada alrededor de sus cascos y tenían cinta sobre sus hocicos. Se retorcían y gritaban pero sus súplicas eran indescifrables. Madame Willow Fern parecía a punto de desmayarse "Y aquí mis nuevos amigos Willow y Thaddeus se han comprometido a ayudar para que cooperes con mis peticiones" Él tocó la barbilla de la señora con su casco y le guiñó un ojo. Ella se retorció con el rostro contraído en una expresión de angustia "No es así, mi encantadora señora?" "Libéralos, Caballeron!" Daring gritó "No tienes nada en contra de los miembros de la junta, esto es entre tú y ...yo". Ella voló y aterrizó en una mesa cercana, con la cabeza colocada hacia abajo y con los dientes apretados con fuerza, sus ojos se estrecharon. No había manera en que el Dr. Caballeron arruinara más de esta noche. Los demás invitados se reunieron en pequeños grupos, riendo nerviosamente ante la falta de seguridad en el asunto y preguntándose si podrían conseguir el reembolso de sus bits, típicos ponis de la alta sociedad en medio de una crisis - preocupados por pequeñeces en lugar de su propia seguridad. "Voy a liberarlos con una condición, Daring Do..." Caballeron paseó hasta ella "Me dejas a mí y a mis ponis marcharnos libremente ahora mismo" Él levantó una ceja "Trato?" "¿Cuál es el truco?" Daring saltó de la mesa y salió a su encuentro, frente a frente. Caballeron tenía una mirada furtiva en su rostro y sólo podía significar una
cosa "Estás tramando algo y no me gusta." Ella levantó una ceja sospechosa, buscando pistas ocultas en su rostro. "Digamos que conseguimos lo que vinimos a buscar" el Dr. Caballeron se burló "Y que la Flor Eterna será encontrada!" El poni levantó una botella de vidrio transparente, inspeccionándola con satisfacción, dentro había una sola hoja, con los bordes de un color jade oscuro desvaneciéndose en vibrante color lima hacia el tallo. Diminutas manchas doradas se esparcían a través de ella como pecas en un hocico. El hecho de que el Dr. Caballeron lo deseara tanto significaba que debía ser valioso. Caballeron sonrió, con los ojos encendidos de victoria. "Ahuizotl va a estar tan encantado cuando le entreguemos este ejemplar a él." "otra vez vendiendo bienes robados por dinero, Caballeron?" Daring se burló "No esperaba nada más de ti." De repente, el Sr. Vine miró a los ojos de Daring y le dio una pequeña inclinación de cabeza que parecía decir, dejarlo ir. Mensaje recibido— la botella con la hoja no tenía importancia para Vine, la operación fue tan sutil que Caballeron se la perdió por completo. "Sólo lárgate, Caballeron!" Daring gruñó con los dientes apretados "Y no dejes que te atrape cerca de Madame Willow Fern o el señor Thaddeus Vine de nuevo." "Excelente elección, querida." Dr. Caballeron sonrió, alejándose de sus rehenes. Él trotó hacia el recinto donde estaban atrapados sus secuaces y pateo sus patas traseras contra una de las mesas, la pesada mesa se movió lo suficiente para que los ponis pudiesen escapar, cayeron hacia fuera con sus trajes estropeados y arrugados, y con expresiones de vergüenza. No era la primera vez que Daring Do les había derrotado sin siquiera pestañear. Mientras la banda de rufianes se reunía, Daring aprovechó la oportunidad para desatar a Vine y a Fern, la cuerda había quemado sus cascos y arrugado sus ropas lujosas. "Adiós*, Daring Do!" Dr. Caballeron llamó mientras giraba sobre sus cascos hacia el arco principal de la entrada, se detuvo por un momento y se dio la vuelta, con una mirada maliciosa en su cara "Por cierto, Daring, realmente deberías considerar usar vestidos
más a menudo. Te ves más o menos... linda" Entonces él y sus ponis se giraron y galoparon por la puerta a la oscuridad de la noche, Daring Do nunca había estado más furiosa, ningún poni le decía que se veía linda.
*Esta frase estaba originalmente en español, parece que el Dr. Caballeron habla con un acento latino
CAPÍTULO 3 La Sala de Lectura de la Sociedad Botánica Ecuestre
El una vez hermoso vestido negro con volantes de Madame Willow Fern ahora estaba manchado donde una tarta de manzana había caído en su regazo y su rímel corría por sus mejillas, su melena canosa estaba cayendo fuera de su chongo trenzado con los pequeños pasadores sobresaliendo en todas direcciones y de vez en cuando mientras trotaba uno caía sobre el suelo del pasillo de madera con un pequeño clic. Sin embargo, había una determinación en sus ojos mientras llevaba a Daring Do y al señor Thaddeus Vine a través de los pasillos de la Sociedad Botánica Ecuestre, debido a su avanzada edad, la yegua no podía trotar tan rápido como sus contrapartes. Ellos hacían todo lo posible para mantener la calma y ser pacientes a pesar de la urgencia de la situación, Daring dio a Vine una mirada y lo lanzo a la acción "¿necesitas, uh... un casco, Willow?" La yegua se apartó rápidamente con un gruñido poco ceremonioso. Las cosas no podían ir peor para los nuevos conocidos de Daring, de un solo golpe el Dr. Caballeron había arruinado todo el banquete de la Sociedad Botánica Ecuestre con su emboscada, además de eso, el malvado semental se había marchado con una valiosa y rara hoja que acababa de robar. Daring no podía dejar de preguntarse qué hacía tan especial a la planta, pero su instinto le decía que no lo mencionara hasta que llegaran a la biblioteca de los miembros de la junta, de acuerdo con Madame, era el lugar más seguro del edificio, un búnker –
disfrazado, insonorizado e impenetrable contra intrusos no deseados. Tal vez debieron
dejar allí la muestra de la hoja, Daring pensó mientras caminaba tras la pareja.
El deteriorado edificio le recordó a Daring Do sus días universitarios, los que gastaba vagando por las oscuras salas revestidas de madera de la academia, absorbiendo cada pieza de información como una esponja, pero en lugar de retratos de arqueólogos famosos, estos muros estaban adornados con pinturas de botánicos famosos y las plantas
que habían descubierto. El aire olía a rancio y polvoriento con un matiz de flores frescas, gracias a los hermosos arreglos de cada uno de los aparadores. Daring contó por lo menos veinte puertas antes de que finalmente llegaran a la que decía sala de lectura. "Es justo aquí, querida." Madame Fern miró a Daring y sacudió la cabeza "Sabía que deberíamos haberte encontrado primero" "Después de ti" el Sr. Vine inclinó la cabeza, con los ojos entrecerrados de una manera triste, y Daring se preguntó si la hoja del frasco le había pertenecido a él. Tal vez era parte de una investigación y había estado al borde de un gran avance científico. Una vez dentro, el aire se volvió espeso y Daring casi podía escuchar el silencio. Estantes sobre estantes de libros viejos y polvorientos eran tan grandes como para absorber el ruido, por lo que era una habitación perfecta para una reunión secreta. Daring Do plantó su flanco en el borde de un sofá de cuero marrón y fue directo al grano "Entonces, de que estaban hablando los dos antes de que Caballeron decidiera interrumpir?" Los dos académicos intercambiaron una mirada de preocupación "Vamos, Willow" Vine asintió con la cabeza a la vieja yegua "Está bien, dile todo" "No hay mucho tiempo, así que voy a ser concisa—Caballeron ha tomado la Hoja Eterna." Ella se sentó en el sillón frente a Daring y hojeó su bolso enjoyado "Todo el objetivo de esta noche, querida, era reclutarte para una misión". "Una misión?" Daring levantó una ceja, Madame Fern tenía toda su atención ahora. "¿De qué naturaleza?" Willow agitó una casco "Bueno, supongo que en su origen fue una búsqueda, pero ahora se ha convertido en una misión de rescate." Ella sacudió la cabeza con pesar "solo deseo que–" "Te necesitamos para encontrar a un poni" Vine la cortó mientras buscaba en el bolsillo de su chaleco púrpura y sacó una pipa de caoba, la encendió, dio una larga calada y
exhaló una nube de humo "Nuestro fiel compañero Gallant True está perdido" Señalo a una pintura al óleo en la pared. El semental unicornio en la foto estaba sonriendo—torpe pero noble. Su escasa y corta melena era de un color amarillo polvoriento y con un bigote tan reducido que era difícil de igualar, nada parecido al de Thaddeus Vine, tanto que Daring pensó que parecía como que dos grandes orugas habían decidido anidar encima de su hocico. El poni en el retrato tenía un pelaje color de chocolate, lentes con marco delgado y una corbata azul marino. "Ese es él...?" Daring sintió que su corazón latía más rápido "ese es Gallant True?" Vine asintió, mirando el retrato con nostalgia "Pobre tipo era uno de nuestros mejores investigadores, sino hubiese tomado todo el proyecto de la Eterna Flor por su cuenta, él esperaba traerte aquí esta noche y reclutarte para salir y encontrarla con él.... " Daring Do se puso de pie y se acercó a la pintura. Sin duda era él. El poni desaparecido no era otro que su propio tío.
CAPÍTULO 4 La llave de Gallant True La cara que le devolvía la mirada en la pintura era un espectáculo para sus adoloridos ojos, Daring Do había conocido al poni por otro nombre—él era su tío Adventure. Cuando era sólo una pequeña potra, el tío Ad llegaba a quedarse durante semanas. El musculoso Unicornio pasaba sus días escribiendo artículos de investigación y creando misiones falsas para su sobrina. Habían sido los mejores momentos de su infancia. Había tesoros para que la pequeña Daring Do encontrara enterrados en la playa de la bahía Horseshoe, trampas hechas a casco colocadas fuera de su casa para hacerla más astuta y búsquedas del tesoro de todo un día, las alocadas pistas que el tío Ad preparaba los obligaban a pasar horas atravesando el bosque. Era desordenado y glorioso. Habían trotado por el barro más blando y trepado hasta los árboles más altos, siguiendo un mapa del tesoro y cuando finalmente llegaban a la X que indicaba el lugar, encontraban un cofre del tesoro con un conjunto de coronas y su almuerzo de sándwiches de manzana y pastel de zanahoria en el interior. Los gobernantes de la selva! cantaban. Descubridores del tesoro! Y como resultado de las visitas de su tío, Daring había crecido amando todas las cosas emocionantes. Pero él era un hombre muy ocupado con la importante investigación que realizaba, a menudo era llamado bruscamente y Daring Do tenía que llenar el tiempo haciendo su propia diversión. Con los años, ella y el tío Ad habían perdido el contacto, pero Daring escuchaba por comentarios que él estaba ocupado caminando por los senderos árticos de Frozen North. Daring recordó su último encuentro en un restaurante, a las afueras Vanhoover hace
unos años! Es grande, Daring, él había dicho, tomando un sorbo de sidra de manzana
caliente con especias, había círculos oscuros alrededor de sus ojos, como si no hubiera dormido en días. El próximo tesoro que voy a encontrar va a cambiar la vida como la
conocemos, los ponis nunca serán los mismos cuando se enteren de esto.
"Tu tío hablaba de ti a menudo." La voz rasposa de Thaddeus Vine la atrajo de nuevo a la situación actual. Cruzó y se colocó delante de la pintura, el adornado marco dorado, estaba tallado con representaciones artísticas de al menos cincuenta flores diferentes y brillaba bajo la luz de una lámpara de pared de vidrio verde "dijo que eras la poni más valiente que jamás había conocido— incluso de potranca— pero que también eras increíblemente tenaz." Vine le entregó una sonrisa torcida, con relación a Daring "De hecho, fue su idea que lanzáramos un banquete sólo para atraerte" Su bigote se enrosco, un lado más alto que el otro. Daring inclinó hacia delante "Que hizo?" "Gallant insistió en que nunca te atreverías a asistir a un evento al que hubieses sido
formalmente invitada" Thaddeus troto hacia Daring y añadió con otra sonrisa "Es por eso que mandamos a esos ponis para que te siguieran y hablaran en voz lo suficientemente alta para que los escucharas" El momento le llegó de golpe, ella había estado en el mercado haciendo algunas compras para abastecerse de zanahorias y té de diente de león, cuando había oído a un par de yeguas hablando sobre el banquete, habían mencionado que incluiría una presentación especial de la finalidad de las nuevas especies vegetales del pasado año de la Sociedad Botánica, y luego en susurros habían dicho las palabras mágicas: Flor Eterna.
Daring había tomado nota de todos los detalles del evento según murmuraban las ponis y había planeado mostrarse la noche siguiente engalanada con sus mejores atuendos y sin una invitación, ella no necesitaba ser invitada a esas cosas; simplemente iría. "Que astuto Ad..." tendría que ajustarse un poco para referirse a él por su apodo actual "Quiero decir, que astuto Gallant True." El plan de su tío había funcionado. Daring Do odiaba ser predecible, pero era entrañable que su amado tío todavía la conociera tan bien, incluso después de todos estos años separados. Una vez que realmente lo considero, se dio cuenta de lo mucho que lo extrañaba y por un breve instante cierta inocencia regresó a ella –la fugaz sensación de ser una potranca.
Daring Do quería ver a su tío de nuevo tan pronto como fuese posible, para compartir con él sus historias de triunfo desafiando al peligro. Tal vez él estaría orgulloso, había tenido tantas invaluables antigüedades aseguradas en los museos y poderosas reliquias salvadas de los cascos equivocados, que estaban muy lejos de excavar el "tesoro enterrado" en la arena. Por un lado, ya no era tan ingenua como para creer que una X marcaba el lugar. Nunca lo hizo. "Yo lo haré!" Daring anunció, hinchándose con orgullo "Voy a rescatar a mi tío y vamos a encontrar esa flor. Algo que me pueda decir sobre la muestra que se llevó Caballeron?" "Todo lo que sabemos es que su tío cree que la hoja había sido arrancada del tallo de la propia Flor Eterna. Dijo que era la clave de toda su investigación –que sería lo que finalmente le permitiría encontrar la flor contigo a su lado..." por la forma en que sus ojos se estaban humedeciendo, parecía que Vid estaba más molesto por perder la flor que por la pérdida de Gallant. Daring recordó el momento antes de que Caballeron había escapado—Thaddeus le había asentido, para que se fuera pero ¿por qué quería que lo dejara ir? Algo no cuadraba. "No dejaba de decir una y otra vez cómo él no podía esperar para verte cara a cara" Vine continuó. "Esas fueron sus palabras: 'cara a cara'" "Bueno, ahora que estoy en el caso y no pasará mucho tiempo hasta que eso ocurra" Daring dijo mientras ponía su pata sobre el hombro de Vine, el toque lo hizo saltar y Daring le lanzó una mirada de reojo "¿Te asuste?" "No, por supuesto que no!" Thaddeus frunció el ceño "Solo estoy abrumado por los acontecimientos de la noche, seguramente podrá entender eso, señorita Do " Se apartó de ella y retrocedió unos pasos. Algo en su lenguaje corporal era desconcertante. "Casi lo olvido" Willow Fern exclamó. La vieja yegua cojeo y sacó un pequeño objeto de su bolso. "Gallant quería que tuvieras esto" Ella dio una débil sonrisa mientras se lo pasaba a Daring Do. "Una llave?" Estaba hecha de bronce oxidado y con forma de un narciso, y a lo largo de un lado tenía varias cuñas de longitud variable. Daring Do se estrujo el cerebro tratando
de encontrar lo que podría abrir. Vine estaba inquieto y Willow Fern asintió "Lo encontramos cuando buscamos en su oficina. Había una nota adjunta que—" Thaddeus intervino "decía explícitamente que te lo teníamos que dar, si algo le pasaba" Él comenzó a caminar de un lado, sus cascos se silenciaban alternativamente contra el suelo de madera y la suave alfombra roja de Arabia Equina "Supongo que conocerás que abre la llave?" Se burló. "Por supuesto..." Daring mintió, tenía la llave hacia la luz, dándole vueltas "Ha sido mucho tiempo desde que he visto esta cosa vieja!" Ella paso su casco sobre las ranuras desgastadas del narciso, comprando tiempo extra aparentando estar sumida en sus pensamientos, realmente, no tenía ni idea de lo que era. Pero era una pista y si había algo que su tío le había enseñado, era que las cosas no siempre eran lo que parecían. Daring escondió la llave en el bolsillo secreto que había cosido en su reluciente vestido verde, los bolsillos eran esenciales en cualquier prenda.
Gracias, tío Ad, Daring pensó, me encantan tus juegos y todo, pero algo un poco más obvio podía ayudar ahora mismo. Los engranes comenzaron a girar en su
cabeza, Daring miró a la pareja expectante y esbozó una sonrisa "¿les importa si uso la biblioteca durante unos minutos? Tengo que hacer un poco de investigación de última hora." "Sea nuestra huésped, querida." Madame Willow Fern agarró a su colega por la solapa de su abrigo y lo llevó hacia la puerta. Vine le dio una mirada sospechosa a Daring, pero Willow sonrió. "Tu tío siempre solía decir que la mayor parte del trabajo de un poni aventurero se lleva a cabo dentro de una biblioteca" La puerta se cerró detrás de ellos, y Daring Do se quedó sola en la sala de lectura.
CAPÍTULO 5 El Diario y la Hoja eterna
"Cara a cara, ¿eh?" Daring le dijo a la pequeña llave, haciendo eco de las palabras de su tío. "Vamos a ver lo que estamos trabajando, tío Ad" Ella comenzó a husmear por la habitación, recogiendo bases de lámparas y sacudiéndolas, tirando de las alfombras para comprobar si había una trampilla y tirando de los libros particularmente grandes en los estantes. Su búsqueda no produjo nada y comenzó a crecer su frustración, si solo tuviera algún tipo de idea más tangible para seguir adelante, sería capaz de determinar dónde buscar. "Cara a cara..." se repetía, los ojos de Daring recorrieron la habitación una vez más en busca de una caja de seguridad, un cofre o cualquier cosa que pudiera coincidir con la llave en su casco, lo que fuera seguramente contendría más respuestas! De repente, cayó en la cuenta. Cara a cara. Daring corrió hacia el retrato de Gallant True y miró la cara de su tío en la imagen, era de una semejanza tan precisa –que sus ojos parecían burlarse de ella por haber tardado tanto tiempo en descifrar su enigma. No había duda de que esta pintura albergaba un mensaje oculto, entrecerró los ojos pero sólo parecía una versión borrosa del poni con gafas. Entonces notó un pequeño pin en el pañuelo de su cuello, una flecha dorada que le recordaba a la Flecha de Marapore, una reliquia recientemente recuperada. Estaba acomodada en diagonal, con la punta apuntando directamente a la esquina inferior derecha de la imagen. Como experimento, los ojos de Daring trazaron la línea invisible todo el camino hasta el marco dorado. Allí estaba, una pequeña abertura al lado de un manojo de rosas Razdonianas, lo suficientemente grande para una llave. La aventurera sonrió. Efectivamente, el narciso encajaba perfectamente, Daring contuvo la respiración y giró la llave lentamente, no podía decir lo que estaba a punto de encontrar. El marco se abrió de forma instantánea revelando un compartimiento secreto!.
El dorado interior repetía el diseño del marco, una sola plataforma con tallados de flores por todas partes que contenía dos artículos—un gastado libro de cuero y un vial como el que Caballeron había robado. La hermosa hoja dentro del vial parecía ser idéntica, mostraba cada color verde del espectro y estaba salpicada en oro, sutiles ondas pulsantes de luz brillante rodeaban el tesoro y se reflejaban en el rostro de Daring mientras los inspeccionaba. Sólo había una planta a la que esta hoja podría pertenecer, pero aún más preguntas surgieron en la mente de Daring ahora que la tenía en su poder. Cuando había obtenido la hoja Gallant? ¿Por qué había dos? ¿Por qué Thaddeus Vine había estado tan indiferente sobre dejar ir a su hermana? Y lo más importante— ¿cómo ayudaría esto a encontrar la Flor Eterna y rescatar a su tío? Un pequeño trozo de cinta blanca al fondo del vial decía HOJA ETERNA 2/2. Con que así se llama, Daring pensó, no es que el nombre ayudara mucho.
"Tal vez aquí haya algunas respuestas...." El libro, aunque pequeño, se sentía pesado en sus cascos. Podría ser su mente jugándole una mala pasada, pero los objetos de valor siempre se sentían más pesados para ella. Miró por encima de sus hombros para asegurarse de que ningún poni se hubiese deslizado en la biblioteca. Casi esperaba que Thaddeus Vine regresara otra vez, pero aun así estaba libre. Abrió el libro.
Mi Diario de la Flor Eterna, por el profesor Gallant True decía en la escritura a casco de su tío, Daring Do dio la vuelta a la página y leyó en un susurro alto "'Yo, Gallant True, he concedido una oportunidad única para exhumar el trofeo del siglo, la entidad viviente del deseo místico de cualquier poni desde la época de Star Swirl el barbado –la Flor Eterna! Ahora me comprometo a dedicar mis días, mi riqueza y mis energías académicas para lograr esta notable tarea"" Su tío había dejado su más preciada posesión en sus cascos: sus años de investigación sobre la Flor Eterna! Era la mayor pista que podría haberle dado y ciertamente no era un error. Daring Do sintió una punzada de emoción, al igual que cuando era una potra y los dos estaban a punto de buscar tesoros juntos. Nada la detendría ahora, cerró con cuidado el
compartimento del marco, extrajo la llave narciso y echó un último vistazo a la imagen de su tío. "Agárrate fuerte, tío Adventure! Voy en camino."
CAPITULO 6 Atrapar al ladrón de la hoja
Daring se elevó en el cielo de la noche batiendo sus alas tan rápido como podía, debajo, tenues nubes pasaban rápidamente, envolviendo su cuerpo en un vapor frío de rocío que era refrescante y enviaba escalofríos por su espina dorsal. Caballeron y sus ponis tenían una ventaja considerable en su travesía, tras su fácil escape del banquete y la posterior conferencia en la sala de lectura. Incluso si Daring estaba en desventaja, todavía podía deleitarse en lo increíble que se sentía estar fuera de ese ridículo vestido y de vuelta en su uniforme regular, su sello, una camisa verde oliva de safari y un sombrero de explorador le permitían moverse libremente, esquivando las ramas, los depredadores del bosque o cualquier otro peligroso obstáculo que le lanzaran. Inmediatamente después de salir de la Sociedad Botánica, Daring había partido hacia el oeste, hacia la montaña Smokey. Sus instintos le decían que el Dr. Caballeron y sus secuaces no querían esperar mucho tiempo para vender los bienes robados al mejor postor y si iba a haber un intercambio de la Hoja Eterna por dinero, definitivamente sucedería en esta misma noche. La pregunta era –donde se escondían los culpables? "Ven afuera y enfréntame, Caballeron! No seas cobarde, sé que estás ahí! "Daring gritó a las copas de los árboles. La tierra debajo pasaba rápido como una mancha de color verde y negro. Nada todavía—no había tiendas de campaña o fogatas visibles dentro del bosque. La determinación de Daring Do no pararía hasta que encontrar a la banda de ladrones. El diario de Gallant había explicado un detalle clave que Caballeron desconocía –ambas Hojas Eternas eran necesarias para localizar la flor. Este detalle estaba escrito en la última página del diario. Al parecer, Gallant acababa de descubrir que cuando las dos Hojas Eternas se reunían, actuaban como una brújula señalando el camino a la ubicación exacta de la flor y cuando se separaban señalaban hacia otro lado,
lejos de la flor, además que guiaban al poni por mal camino—en la dirección opuesta a la meta del buscador. Eso no era todo lo que había aprendido de los escritos de su tío. El semental no había dejado piedra sin mover y ningún libro sin leer en su búsqueda de la Flor Eterna y Daring estaba agradecida por no tener que empezar de cero, comparado con lo que su tío había hecho, la información que ella había reunido por sí misma solo era la punta del iceberg. Cada página estaba llena de ásperas notas escritas a casco y dibujos realizados por el propio Gallant. Garabatos de cepas y árboles crecían a través de las palabras como si True les hubiese estado regando con su pensamiento, viendo su teoría crecer y florecer en algo tangible. Además cada nota había sido laboriosamente categorizada: estudios de campo, interpretaciones, teorías, ubicaciones, una sección en particular parecía especialmente importante. Entre los garabatos dibujados a toda prisa de diversos tipos de flores y grabados de grabados antiguos, había una ilustración a color de dos páginas de lo que parecían ser raíces de plantas. La parte superior de la página mostraba la superficie del suelo, y los fibrosos brazos de la planta llegaban hasta la parte inferior de la flor. Pero había algo diferente en estas raíces. En lugar de seguir hundiéndose en la tierra, cada punta se enrollaba y se cruzaba de nuevo en sí misma, subiendo de nuevo hacia la superficie. El efecto de todo era un intrincado patrón de símbolos infinitamente entrelazados, como un lazo orgánico o una delicada pieza de joyería, sólo que el precioso colgante era una flor viviente que proporcionaba la inmortalidad, y no un brillante diamante. Gallant había escrito a un lado: La Raíz Infinita –Esta distintiva raíz curva es el único elemento inmutable de la Flor Eterna, todas las demás características cambian cada vez que la flor es vista por los ojos ponis.
Una luz parpadeante llamó la atención de Daring, bocanadas de humo negro se elevaban en pilares ondulados y el contorno sombreado de un poni paseaba por delante,
sin lugar a dudas, la silueta era del villano que había estado buscando. La pegaso viro a la izquierda, dando vuelta hacia atrás y descendiendo en el grueso dosel de hojas del bosque. Daring irrumpió en la escena, con las alas bien abiertas y una mirada amenazadora en su rostro, "Entrégala, Caballeron!" Ella plantó sus cascos en el frío suelo justo al frente de un secuaz. El corpulento semental tenía una melena naranja recortada y patillas pobladas que trazaban una línea hasta su fuerte mandíbula, había cambiado su traje formal del banquete y ahora estaba vestido con su atuendo habitual de un chaleco marrón, exponiendo su Cutie Mark de un remolino, una estrella, una chispa, y una escotilla sobre su piel color gris. Frunció el ceño hacia ella y se rascó la cabeza. "Rogue!" Caballeron le gritó al zoquete confundido "Fuera del camino! Yo me encargo de esto" él caminó hacia Daring, con una malvada sonrisa en su rostro. Las llamas que bailaban en la fogata se reflejaban en sus ojos "Un mundo pequeño, Daring Do" "No lo suficiente para nosotros, Caballeron" la pegaso amplió su postura, enseñó los dientes y soltó un gruñido bajo "Dame. La. Hoja!" "Me temo que es demasiado tarde..." Caballeron respondió, señalando a un secuaz plateado con una crin negra parecida a trapeador peludo y a pesar de que era de noche, aún llevaba gafas oscuras de sol. El pony trotó, llevando un pesado saco marrón que chocaba y hacia sonidos metálicos, el sonido de bits, se la arrojó a Caballeron, quien desato el cordón, echó un vistazo dentro y se rió "Gracias, Withers" y se giró hacia Daring, quien todavía estaba a la defensiva "Ya se la vendí a mi mejor cliente: Ahuizotl" Daring sintió como la furia comenzaba a burbujear en su interior ¡Qué tonto! Ahora que la hoja estaba en posesión de Ahuizotl, sería diez veces más difícil de recuperar, además confirmó un detalle que había sospechado pero esperaba que no fuese cierto— Ahuizotl, una perruna bestia gigante y su enemigo número uno, quería encontrar la Flor Eterna y eso sólo podía significar una cosa. Él quería ser inmortal. "¿No te das cuenta de lo que has hecho?" Daring respondió, manteniendo un ojo en los cuatro secuaces de Caballeron. La forma en que estaban al acecho detrás de él la ponía
nerviosa. Daring conocía a tres de ellos Withers, Outlaw y Rogue, pero no reconoció al cuarto. El nuevo recluta, era una yegua pegaso de color azul claro con una melena y cola naranja peinadas hacia atrás, parecía especialmente sospechosa. Era una poni bonita con ojos almendrados fuertemente delineados en negro y su Cutie Mark era una rosa blanca con espinas puntiagudas, que implicaba que ella era pura dulzura mezclada con peligro. En otras palabras, el peor tipo de yegua. Daring Do dio un paso más cerca de Caballeron y entrecerró los ojos. "Ahuizotl va a usar esa hoja para buscar la Flor Eterna y ganar el premio final –la inmortalidad ¿Realmente quieres que ese monstruo viva para siempre? Estarías maldiciendo a Equestria a una eternidad con una bestia que aterroriza a cualquier poni por sus propios y malvados planes!" "En realidad no hay mucha diferencia para mí, Do." Caballeron levantó una ceja "Planeo pasar mis días viviendo lujosamente gracias a mi benefactor, incluso me pagó extra por una entrega personal de cierto poni para un uso especial—" "¿Dónde ha llevado Ahuizotl a mi tío?!" Daring rugió. El cielo dejó escapar un trueno y gotas gigantes de lluvia comenzaron a caer sobre ellos. La fogata se apagó con un silbido, Withers, Outlaw y Rogue se zambulleron para cubrirse debajo de uno de los toldos de las tiendas de campaña, pero la pegaso azul se acercó más, escuchando cada palabra de la conversación. Daring le lanzó una mirada para que se quedara atrás. Esta no era su lucha. Ella evitó los ojos de Daring y miro al suelo. "Mi, mi" Caballeron arrastro las palabras, peinando los mechones húmedos de su melena detrás de sus gruesas cejas "¿Alguien acaba de ponerse tan nerviosa que convocó a la maldición del Pegaso Tzacol? ¿Qué es eso que decías... 'las flores eternas traerán fuertes lluvias' Él se rió, mirando hacia atrás por la aprobación de la yegua ante su broma sin gracia "No, no. Eso sería demasiado afortunado para ti, Sra Do." "Eres ridículo, Caballeron." Daring Do rodo los ojos, ahora estaba empapada por el aguacero y comenzaba a impacientarse. Al menos el ala ancha de su casco había
mantenido seco su rostro y melena "Y tú estás perdiendo mi tiempo, no me importa la flor; me importa encontrar a mi tío!" El aventurero despegó en la oscuridad a toda velocidad, dejando que la lluvia la empapara. En una tormenta normal, podía lidiar con ella partiendo con sus patas traseras cualquier nube enojada en su camino, pero esto era algo diferente. Estas nubes no desaparecerían. No había otra manera. Daring Do extendió sus alas y las agitó contra los vientos huracanados, era una lucha por permanecer en el aire y cualquier resistencia solo conseguiría que se sacudiera. Su cuerpo estaba pesado por el agua y sólo había alrededor de diez cascos de visibilidad en los que navegar incluso volando, las condiciones nunca habían sido peor, pero Daring Do no tenía miedo, acelero imaginando la cara de Gallant en su mente. El cielo volvió a temblar y un enorme relámpago de luz chocó contra un árbol, friendo sus ramas y por poco el ala izquierda de Daring. Ella salió arrojada del camino cuando varias ramas le cayeron del cielo. "¡Hey! ¡Espera!" Una voz apagada luchó contra el choque ruidoso de un trueno. Daring Do giró la cabeza, la yegua azul de Caballeron estaba tras su cola, luchando contra los elementos para alcanzar a Daring "¡Déjame!" "Estoy tratando...de...ayudarte!" gritó de nuevo sobre el silbido del viento, con los ojos entrecerrando para evitar la lluvia torrencial "Mi nombre es Rosy Thorn!" Cogió su velocidad, haciendo un gran giro de barril para alcanzarla. Impresionante, pensó
Daring, sin embargo no cambiaba nada, Daring Do tenía una estricta regla de "no compañeros" Especialmente para los antiguos compañeros de sus enemigos. "Yo trabajo sola!" Gritó Daring "¿tu jefe no te lo dijo?" Rosy alcanzo a Daring Do "Él no es mi jefe!" "Seguro que se veía de esa manera." "Bueno, ya no más! estaba corta de dinero y él necesitaba ponis adicionales" Rosy admitió "solo fue trabajo! Pero quiero ayudarte! "
'Y se supone que ahora debo confiar en ti? Por favor, déjame en paz!" Daring se desvió, cambiando su rumbo hacia la costa. Recordando algo en el diario de Gallant True sobre la Flor Eterna, siendo reportada en varias ocasiones a lo largo de la historia cada vez más cerca de grandes masas de agua. Era poco probable que Ahuizotl llegase a esta conclusión por sí mismo, pero ahora que estaba en posesión de Gallant True, Daring Do tuvo que considerar la desgarradora posibilidad de que la información le había sido arrancada ¿Qué otra cosa podría desear el monstruo con el viejo erudito? "No tienes idea de a dónde vas, ¿verdad?" Rosy Thorn gritó, todavía estaba logrando mantener el ritmo de Daring Do. La pegaso azul tenía razón, pero Daring era demasiado orgullosa como para admitirlo. "Tengo un plan," Daring bufo, algo le vendría una vez que se deshiciese de esta molesta poni. El contorno borroso de una montaña quedó a la vista en el mismo momento en que las dos Pegasos atravesaron la última nube de lluvia. El matiz rosado del horizonte alcanzaba el cielo gris, señalando el amanecer y una vez que amaneciera, Ahuizotl y sus ponis estarían en movimiento. "Lárgate" Daring advirtió, mirando a la joven Pegaso "Yo no voy a decírtelo o—" "Pero yo sé dónde está tu tío!" Rosy espetó "Puedo llevarte allí". Bueno, eso era una historia diferente.
CAPÍTULO 7 Una fortaleza en el borde del mundo
"¡Allí está!" Rosy Thorn retiró las ramas de una palmera para revelar un gran templo en lo alto de un acantilado, con vistas al mar azul. Vibrantes pilares de luz solar rompieron las nubes, revelando la estructura en un resplandor angelical. Las suaves olas salpicaban rítmicamente contra el borde de los acantilados, habría sido una escena idílica, si no fuera por las actividades siniestras que acontecían dentro de sus muros. La torre estaba hecha de enormes bloques de piedra, construidas en una pirámide. La base cuadrada era más ancha en la parte inferior, similar a la Fortaleza de Talacon—la ominosa ciudadela que se había derrumbado después que Daring Do quitara los anillos de Scorchero del antiguo pilar de Burnination con el fin de salvar a la región de ochocientos años de calor implacable. "No veo a nadie...." Daring Do se inclinó hacia delante para ver mejor, haciendo que el tronco del árbol se balanceara hacia adelante, entrecerró los ojos a través del visor de sus confiables binoculares. No había movimiento en cualquier dirección "Estas segura de que aquí es donde Ahuizotl mantiene cautivo a Gallant True?" "Absolutamente, escuche como lo mencionaban durante el intercambio de mercancías en el bosque" Rosy asintió, sus almendrados ojos marrones se ensancharon de emoción. Después del aguacero, su melena y la cola naranja se habían secado en un lío rizado en vez de su típico estilo elegante, se la alisó en vano con su casco y señaló una abertura rectangular en el perímetro del templo "Mira esa puerta lateral, es la única que está abierta". Definitivamente parecía uno de los escondites de Ahuizotl, pero eso no explicaba por qué o cómo Rosy Thorn sabía dónde encontrarlo. Daring Do no le creía del todo, pero hasta ahora la pegaso azul no había hecho nada sospechoso. Bueno, aparte de retozar con el Dr. Caballeron, pero eso podría ser atribuido a su falta de experiencia.
Daring mantenía un ojo en Thorn cuando llegó alcanzo el bolsillo secreto de su alforja, el diario de Gallant y la Hoja Eterna permanecían allí, les dio una palmadita tranquilizadora y miró otra vez a través de los binoculares. Daring los enfocó sobre el horizonte del cristalino mar azul, un par de gaviotas revoloteaban en los acantilados, graznando "Bueno, está cerca de una gran masa de agua, va de la mano con lo que mi tío teorizó sobre la ubicación de la flor." "Y... cuando te dijo eso?" Rosy preguntó, trataba de ocultar su curiosidad sonando casual "¿Dijo algo más acerca de la Flor Eterna? Lo que parece o— " "¿Qué te importa? Pensé que era 'sólo trabajo'" Daring levantó una ceja ante la
entrometida. Buen intento, Thorn, como voy a revelarle todos mis secretos a un extraño. "Oh, sí, así fue" La sonrisa de Rosy Thorn descendió, y se dio la vuelta, refugiándose en sus propios pensamientos, escupió en sus cascos y trató de acomodar su melena "Sólo pensé que sería interesante saber más acerca de esta cosa que todos quieren tan desesperadamente, debe ser muy especial." "La única cosa que necesitas saber acerca de ella es que es muy poderosa. La Flor Eterna debe ser destruida para que no caiga en los cascos equivocados... O garras, por así decirlo." Rosy se burló "¿Crees que tu tío estaría de acuerdo con eso?" "Algo" Daring Do respondió "Pero eso es de poca importancia para ti." Las dos ponis volvieron a vigilar. Pasaron unos minutos "¡Mira! Por ahí! ¿No te lo dije?" Susurró Rosy, su rostro estaba escrito con alegría petulante "El lugar está lleno de guardias de Ahuizotl." A través del visor, Daring pudo ver que la yegua estaba en lo cierto. Aproximadamente ocho ponis vistiendo brazaletes de plumas y collares enfilaban por la puerta, llevando armas y bolsas pesadas. Provisiones para una extensa jornada, tal vez? La pandilla de sementales trotó bajando los escalones uno tras otro. Un pony rojo con una melena blanca gritó una orden desde la parte delantera y el grupo se detuvo con un chirrido, se colocaron en sus cascos y se pusieron en posición de firmes
en línea recta frente a la puerta, a la espera de su próxima orden, preparados con lanzas de madera. Estaban esperando a algún poni, o algo así. De repente, Ahuizotl apareció en la puerta! Su peludo, cuerpo azul oscuro se alzaba sobre sus guardias, por lo que los fuertes sementales parecían débiles. La bestia estiró una de sus garras de color azul cielo, apuntando hacia los árboles donde Daring y Rosy se escondían, aunque era obvio que no había visto al par. Estaba demasiado distraído con su propio plan malvado para notar las sutilezas del paisaje, como una palmera que se balanceaba más que el resto. Parpadeos de luz solar se reflejaban en sus brazaletes de oro y su collar blindado, una sonrisa se formó en su larga cara perruna y expuso sus filas de afilados y blancos dientes. El monstruo miró hacia abajo y la sonrisa se hizo más amplia. Ahuizotl aferraba un objeto en su garra izquierda y Daring Do podía adivinar lo que era: La Hoja Eterna. Tan pronto como aflojó el puño, se confirmaron sus sospechas, la hoja eterna que le había comprado a Caballeron –la única que Daring Do y Gallant True necesitaban para encontrar la Flor Eterna— estaba allí mismo, en su pata. Ahuizotl sacó la hoja de su vial y la puso plana sobre una pequeña tabla de madera. El óvalo verde dio vueltas en círculos, como la aguja de una brújula, hasta que su punta afilada se detuvo en dirección a los árboles, más allá del mar. Ahuizotl dijo algo inaudible y todos los ponis empezaron a marchar hacia la selva. Ahuizotl recogió la hoja y esperó. Una segunda oleada de secuaces salió en formación, cada uno con una cuerda que estaba atada a un poni en el centro del grupo. Daring Do miró a través de sus binoculares y de inmediato reconoció su tío, Gallant True. Ella reconocería a ese poni en cualquier lugar. "¡Ahí está!" Daring Do exclamó, olvidando momentáneamente que necesitaba su ayuda, se alegró mucho de ver a su tío. Todo en él era igual a como ella recordaba, a excepción de las profundas arrugas debajo de los ojos. El mismo viejo tío Adventure, con su pelaje color cacao, su canoso pelo amarillo y el bigote que se extendía a lo largo de su
mandíbula. La vista familiar de su Cutie Mark—un cofre cerrado con dos llaves de oro cruzadas al frente– la trajo de nuevo a sus años de formación. Gallant todavía llevaba su jersey marrón favorito, pero una de las coderas de cuero estaba por caerse. Podría haber sido por los años de desgaste, pero a juzgar por el hollín y la suciedad que cubría todo su cuerpo, era más probable que fuese por el arduo viaje a la fortaleza y su reciente tiempo en los mugrientos calabozos. Al menos el sello característico del Profesor, su bufanda azul doblada en el cuello de su camisa blanca y los lentes en el puente de su hocico estaban intactos. Los ponis tiraron de las cuerdas y Gallant True camino hacia adelante, su cabeza se desplomó, siguiendo la procesión de treinta ponis y una gigantesca bestia azul. "Lo están moviendo a otro lugar" dijo Daring, o más probablemente, lo moverían hasta que encontraran la localización— de la Flor Eterna. Ahuizotl lo estaba usando como guía personal "La Flor Eterna está apuntando directamente por este camino, lo que significa que está mal, por supuesto." "Te dije que estaría aquí", dijo Rosy con una sonrisa satisfecha. "¿Ahora confías en mí?" "No" Daring respondió arrebatando el aire de satisfacción de las alas de Rosy "Pero es un progreso" La aventurera no tenía el tiempo ni la paciencia para dar palmaditas en la espalda. Rosy se desanimó. "Entonces, ¿qué hacemos?" preguntó Rosy, extendió sus alas azules e inclino su cuerpo hacia delante, dispuesta a saltar fuera y volar al rescate de Gallant "Tengo una idea! Vamos a bajar y—" "Nosotras esperamos!" Daring ordenó "No te vas hasta que yo diga que vayas" Daring Do frunció el ceño y pego su nariz en la cara de la poni "Lo tienes, Thorn?" Lo último que Daring necesitaba ahora era a un ayudante ansioso estropeando una emboscada, ya había tratado con esto en el pasado y aprendía de sus errores. Si Rosy Thorn iba a ser parte de esto, seria en sus términos o no lo seria, así es como tenía que ser. -Está Bien..." Rosy admitió, doblando sus alas de nuevo en su cuerpo, apoyó la barbilla en su pata derecha y dejó escapar un suspiro "Pero debemos movernos pronto".
"¿Crees que no lo sé?" Daring le lanzó una mirada y llevo los prismáticos hasta sus ojos "Vamos a ver con lo que estamos tratando antes de ir a ciegas". Cada uno de los cascos de Gallant estaban atados a una cuerda y su cuerno estaba cubierto con una Unicadena Horaviana, un cilindro de metal hecho de cadenas de acero entrelazadas. Así que por eso el semental no había sido capaz de usar magia para escapar! Sus poderes estaban completamente inutilizados, mientras llevara el artefacto. Este era un movimiento malvado, incluso para Ahuizotl. Cubriendo el cuerno de un unicornio con una Unicadena era uno de los castigos más crueles y más humillantes conocidos por cualquier poni. Pero al parecer la bestia no se detendría ante nada para causar problemas, Daring se estremeció al imaginar un mundo en el que Ahuizotl fuera inmortal. Una eternidad de caos y disturbios para los ponis de todo el mundo? No había ninguna realidad en la que pudiera dejar que eso suceda. "Ellos lo retienen usando una Unicadena Horaviana y uno de estos ponis debe tener la llave para ello..." Daring Do aterrizo, buscando entre las cuerdas rojas, azules y naranjas que empuñaban los secuaces y señaló a un semental azul especialmente grande que usaba más adornos de oro que los demás. En la oreja izquierda, había cuatro pendientes en lugar de los dos habituales. A través de sus ojos era como una línea de pintura naranja de guerra. Sin duda, un secuaz de alto rango "Él" Daring señalo "Él es el único" Rosy asintió que ella entendía. Ahora todo lo que Daring Do y Rosy Thorn tenían que hacer era robar la llave, recuperar la Hoja eterna y rescatar a Gallant True. Todo a la vez. Dos Pegasos contra un monstruo y treinta secuaces? No había problema en absoluto "Una cosa más, Thorn" Daring levantó el casco. "Sí, Daring?" Rosy respondió, con un afán familiar en sus ojos. Era la misma mirada que Daring llevaba cuando se enfrentaba al peligro e hizo que Daring se sintiese mejor acerca de lo que iba a decir.
"Ahí cada uno está por su lado, si una de nosotras es capturada, no hay vuelta atrás. ¿Entiendes? "
CAPÍTULO 8 La emboscada de Ahuizotl
"A la cuenta de tres" Daring anunció y se echó hacia atrás sobre sus patas traseras con el fin de obtener un mejor lanzamiento "Uno...dos...tres!" Las dos pegasos irrumpieron a través de las hojas de palma, volando directamente hacia la multitud, confiaban en gran medida en el elemento de sorpresa, ya que si se usaba correctamente, podría darles el casco superior que necesitaban para distraer a Ahuizotl, y sus secuaces no eran los más brillantes, por lo que eran fáciles de desorientar. "¿Qué es esto?!" Ahuizotl rugió, dando vueltas para pillar una mejor visión de los intrusos. Rosy Thorn voló junto a él y su ala derecha paso a una pulgada de su nariz. El monstruo le dio un manotazo, pero la perdió, lo que le permitió a Daring Do bajar rápidamente hasta su estómago y tocar su pata delantera izquierda. Ahuizotl sintió el cosquilleo donde Daring le había cepillado e instintivamente dejo caer la Hoja Eterna para sacudirse lejos la plaga "Te voy a destruir por esto!" el monstruo rugió con ira "Cualquier pequeño poni que se mete con el gran Ahuizotl paga el precio!" La pegaso dorada sonrió en señal de triunfo y giro devuelta, con la intención de arrebatarle la hoja mientras Rosy continuaba zumbando alrededor de su cabeza como un abejorro enojado, Ahuizotl se recostó sobre sus patas traseras y gruñó, usando ambas patas delanteras para tratar de atrapar a Rosy. Pero ella era rápida, desviándose dentro y fuera de su rango como si fuera un juego. Ahora en el suelo, Daring Do se lanzó de izquierda a derecha, en busca del premio y evitando por poco las flechas envenenadas que eran disparadas en su dirección por los secuaces al borde de la selva. Los ponis que sostenían las cuerdas de Gallant tenían las caras en blanco, tratando de decidir si las tiraban y luchaban, o esperar. Estaban perdidos y sin las órdenes de
Ahuizotl. Gallant dio una risita encantada al ver a su sobrina en acción “Este si es un buen espectáculo!" "La hoja, idiotas!" Ahuizotl gritó a los ponis que sostenían las cuerdas "Impidan que obtenga la hoja!" Señaló al suelo a unos quince trotes de distancia "Por ahí!" Tres ponis dejaron caer sus cuerdas y galoparon, pero ya era demasiado tarde. La Hoja Eterna yacía a una pulgada del precipicio de piedra de la fortaleza y sosteniéndose sobre las olas agitadas del mar, cualquier movimiento en falso y la hoja caería por el aire hasta el agua. Daring Do entrecerró los ojos y se lanzó sin un segundo de vacilación, en un movimiento continuo, se apoderó de la hoja, la metió en un vial de repuesto que siempre llevaba con ella y la tiró dentro de su alforja "Gracias, Ahuizotl!" Daring sonrió, en lugar de salvar su baratija, él se la había señalado "Me ahorraste la molestia!" En el momento en que la hoja aterrizó en el compartimiento secreto de su alforja, las Hojas Eternas dieron una sacudida masiva "Whoaaa!" Daring Do gritó, cayendo al suelo. El choque debió ser por los poderosos especímenes mágicos que se unían entre sí una vez más, sintió como comenzaban a temblar y se esforzó por mantener la bolsa contra su costado mientras se ponía a sí misma en posición vertical. Sería malo si algún poni y especialmente Ahuizotl, se diese cuenta de su extraño comportamiento, —y entonces, ambas Hojas estarían en riesgo!— "Ten cuidado, Daring!" Gallant llamo en preocupación. Un grito resonó cuando Ahuizotl atrapo a Rosy Thorn en el aire con la garra en la punta de su larga y delgada cola. "Daring! atrapa!" Rosy gritó y arrojó una pequeña llave hacia Daring Do, era de la Unicadena! Cuatro secuaces saltaron hacia adelante para atraparla al mismo tiempo que Daring, aterrizando sobre la aventurera en un montón de miembros y plumas, algunos inconscientes y algunos sujetando las alas de Daring. Rosy se retorció tratando de liberarse de las garras de Ahuizotl, pero sólo hizo que la bestia apretara con más fuerza. Él se rió de alegría.
Mientras tanto, al otro lado de la puerta, Gallant True gruñó mientras trataba de lanzar las dos últimas cuerdas de sus cascos traseros, obteniendo nueva fuerza con la presencia de su sobrina y su cohorte. El viejo semental pateó a un poni de color naranja, quien se vino abajo como una botella de leche golpeada por una bola en un juego de feria del condado "Toma eso, tu... malhechor insolente!" Él se erizó, y sacudió su casco al frente del soldado caído. "No se levanten!" Ahuizotl rugió, acercándose a la pila de ponis "Quiero a Daring Do
atrapada debajo, ella es la mía" Los secuaces hicieron todo lo posible para mantener sus posiciones, conteniendo a la Pegaso en una jaula pseudo-construida por sus cuerpos. Eso era todo lo que Daring Do necesitaba oír, salió por en medio, arrojando a los sementales de encima con un casco al aire y salió disparada hacia el cielo "No lo creo!" gritó, una amplia sonrisa visible por debajo de los mechones grises de su melena que caían sobre sus ojos "No le pertenezco a ningún poni y tampoco lo hace mi tío!" Ante esto, Ahuizotl corrió hacia Daring Do, todavía llevaba a Rosy en su garra y trato de alcanzarla, pasando muy cerca de la cola de Daring, Rosy se liberó y voló hacia su compañera pero Ahuizotl consiguió atraparla otra vez, un premio de consolación por el que había perdido. Desafortunadamente para Rosy, Daring no fue testigo de su recaptura. "Date prisa, Thorn!" Daring gritó, corriendo hacia Gallant, lo cogió por los hombros de su suéter y despegó hacia el cielo y sus alas tuvieron que trabajar el doble de duro para llevar el peso extra. Una vez que se precipitaron por la capa de nubes, Daring desaceleró para echar un último vistazo sobre su hombro y comprobar que Rosy Thorn estuviera justo detrás de ellos, no lo estaba. Pero Daring le había dicho el trato, tenía una tarea que completar y ahora, con las dos Hojas Eternas aseguradas y con su tío a su lado, realmente podría tener una oportunidad.
CAPÍTULO 9 El secreto de las Hojas Eternas
No estaban muy lejos del templo de Ahuizotl, pero Daring Do sabía que nunca buscaría en esta dirección. La Hoja Eterna había apuntado hacia el sur, por lo que la bestia calculaba que la Flor Eterna se encontraba allí y por todo lo que Ahuizotl sabía, Daring y Gallant también se habían ido por ese camino. Las nubes habían hecho un excelente trabajo ocultando su curso actual. "Debemos estar bien si descansamos aquí por un momento" Daring le aseguró a su tío, colocándolo suavemente sobre sus cuatro cascos. Él tocó la blanca y suave arena con un profundo suspiro de alivio "Me preguntaba cuando vendrías, mi Darling Do*". "¡Hey! No—" Daring empezó a protestar por costumbre, pero luego se detuvo, si alguien podía llamarla por un viejo apodo, ese era su pariente favorito. Ahogó una risita y lo atrajo en un abrazo "Estaba elaborando un estrategia!" "Bueno, te tomaste tu tiempo" Gallant respondió retirando la Unicadena de su cuerno " Realmente estaba cansado de pretender usar esa cosa." "Fingir?" Daring se quedó boquiabierta y levantó la llave duramente ganada "¿Quieres decir que nos tomamos la molestia de conseguir esto para nada, y que podrías haber usado tu magia para ayudarnos?" Su mente regresó a Rosy Thorn y sintió una punzada de culpabilidad, la yegua podía cuidarse sola ¿no? sí, por supuesto que podía. "Me temo que sí, encanto" Gallant se sentó en la arena y se quitó las gafas. Desplegó su pañuelo y lo frotó distraídamente en las lentes "Robe la llave anoche cuando esos tontos guardias estaban durmiendo, solo llevaba esa tontería como actuación, ¿sabías? Hay que dejar que estos ponis piensen que están manejando las cosas. Ciertamente te enseñé ese truco, querida..." *Darling se traduce como “querida” pero se pierde el juego de palabras ya que es similar a Daring
"Obviamente" Daring Do se sentía como si tuviera cinco años, siendo interrogada en tácticas de nuevo "Pero vamos a centrarnos en lo que es realmente importa –tu estas a salvo y tengo las Hojas Eternas!" Ella le sonrió, inflando su pecho con orgullo. "Sí, sí." True asintió, su cuerno brillo con un resplandor mágico de color azul claro y coloco las gafas en su rostro "Supongo que es una mejoría, no es perfecto, pero servirá por ahora". Daring trotó hacia él y miró hacia abajo, levantó su casco derecho "Aún no vas a hacer el golpe de cascos secreto para felicitarme?" "Oh, eso era cuando eras una potrilla" Él se rió "Para mantenerte motivada, ya no tenemos que molestarnos con él, ya eres un yegua adulta con una exitosa carrera propia!" Gallant se puso de pie y sacudió su suéter, aunque los cambios fueron mínimos en su ya desgastada apariencia "Si no tuvieras las hojas, estaría un poco sorprendido, prácticamente te lo deletreé, amor" "Gracias" Daring Do rodo los ojos, debió haber estado muy ilusionada como para pensar que recibiría elogios por parte del semental. "¿Te apetece chapotear?!" Gallant trotó hacia la orilla, con su melena amarilla ondeando en el viento, se subió las mangas y se metió en la refrescante agua azul. Daring sacudió la cabeza con una sonrisa, incluso Gallant True se estaba poniendo excéntrico en su vejez. Arrojó su sombrero de explorador en la arena, pero mantuvo su alforja al hombro, tenía demasiados objetos de valor como para soltarlo, ni siquiera por un segundo. "Así que, estudiaste mi diario?" Gallant cerró los ojos y respiró el aire salado "Sí encontraste la Hoja Eterna, supongo que también lo encontraste" "Lo leí de principio a fin" Daring Do le aseguró y también cerró los ojos, el suave ritmo de las olas la adormeció "¿Es cierto que la Flor Eterna cambia su apariencia cada vez que es vista? Y que se replanta sola un nuevo lugar?" "Muy bien, cariño" El viejo semental sonrió, y sus ojos brillaron con la intriga "¿Y qué más has aprendido?" Dio un paso hacia ella, salpicando agua intencionalmente sobre su camisa verde olivo.
"Que la única manera de reconocer a la verdadera Flor Eterna es por sus viñas, que se enrollan como el símbolo del infinito. Pero no entiendo las Hojas Eternas—de donde son y cómo funcionan?" Daring presiono. "En cuanto a donde las obtuve –debe seguir siendo un misterio" Gallant dijo crípticamente. Sacudió sus cascos y trotó de vuelta a la orilla "Me temo que mi colega Thaddeus Vine es el único que lo sabe. No te lo dijo... pero de todos modos, vamos a echar un vistazo a cómo funcionan, de acuerdo?" Daring Do lo siguió, levantando la bolsa de su hombro, busco dentro y abrió el cierre del compartimiento secreto. Las dos hojas estaban intactas y vibrando como dos imanes que trataban de unirse entre sí. Después de tanto bombo, Daring Do estaba ansiosa por ver lo que las hojas eternas eran capaces de hacer. "¿Te acuerdas de las tres rúbricas?" "¿Las qué?" Daring Do trató de recordar la información del diario, pero el texto era denso y ella iba con muy pocas horas de sueño. "Oh, vamos, tío Ad, ¿no puedes decirme?" "Muy bien", Gallant reconoció "Si él ya sabe, tú también puedes saber. El diario, por favor" Él le tendió el casco. Daring le pasó el libro y el poni pasó frenéticamente a una página cerca del final. Por la forma en que Gallant True estaba actuando, Daring Do claramente interpreto que era la parte más importante "Ya Está!" Apuntó con su casco al pequeño dibujo de un escudo de piedra. "Las rúbricas fueron encontradas en una antigua escultura en el sitio de Orshab, el mismo sitio donde encontré las hojas –donde la leyenda dice que Mooncurve el Astuto tomó un sorbo del néctar de la flor que buscamos." Le mostró a Daring la imagen de Mooncurve, era un unicornio alto y delgado, con una crin larga, puños ornamentales en cada casco y una capa bordada con flores. Daring Do sentía como que lo había visto antes en alguna parte ¿realmente era posible que este poni estuviese vivo en algún lugar, después de miles de años?
"Rúbrica número uno: 'Para leer la brújula, hojea las páginas'..." Gallant apuntó con su casco la próxima regla en la página, cada vez más ansioso con cada momento que pasaba "Número dos:" Para llegar a la isla, viaja en las escamas'" Gallant comenzó a pasearse alrededor de su sobrina con la suave brisa soplando en la playa tropical, se sentía igual a los días en la bahía Horseshoe, sólo que esta vez era… una búsqueda real, con dinero real y no es un juego de potrillos. "Y número tres." Daring terminó, finalmente, recordando las palabras. "Para revelar la verdad, examina las raíces." "Correcto!" Su tío puso el diario sobre la arena, abriéndolo en las que debían ser las dos únicas páginas en blanco de todo el libro, saco con cuidado las dos hojas eternas de sus viales, las llevó cerca de su cara para inspeccionarlas y luego las colocó de lado a lado, planas sobre el pergamino. Las páginas volaron.
Hojea las páginas, Daring recordó, así que eso es lo que significaba. Las dos hojas comenzaron a girar a una loca velocidad.
"Están calibrándose para formar la brújula", explicó Gallant True, manteniendo sus ojos en el progreso "En realidad puede ser en cualquier libro, pero solo lo he intentado en éste." Las hojas se detuvieron, apuntando ligeramente hacia dentro, una hacia la otra "Y funciona". "¿Y ahora qué?" Dijo Daring, impresionada "Eso no nos dice nada" "Hay que esperar por eso!" Gallant gruñó y un momento después, dos haces de luz verde salieron disparados de la punta de cada hoja, convergiendo en una gran columna que apuntaba directamente al mar. Un brillante, camino visible a seguir. "Sólo hay un lugar al que esas hojas pueden estar apuntando" el curso se apoderó de Daring Do como las olas en sus cascos "y no es el fondo del océano" La aventurera busco en el bolsillo de su camisa y saco su pequeño mapa del mundo conocido, lo desplegó y señaló a un pequeño parche de puntos en la costa occidental "Las Islas Scaly!" "el territorio Dragón..." Gallant respiro con temor, y quedo boquiabierto, sus gafas se deslizaron a escasos centímetros debajo de su hocico "Pero, por supuesto— para llegar a la isla, viaja en las escamas'!" Puso un casco en el hombro de Daring "Ningún poni puede
ir allí, a menos que viaje en dragón. Escamas de dragón! ahora tiene perfecto sentido!" Su rostro cayó repentinamente "¿Qué vamos a hacer?!" "Bueno, tío, creo que hoy es tu día de suerte." Daring Do levantó una pequeña concha tallada con el antiguo símbolo de Scaly— un diente de dragón con una estrella de cinco puntas en el centro. "Creo que conozco a un dragón que puede ayudarnos" tocó la concha con sus labios y sopló. Un silbido dulce sonó, y en algún lugar en la distancia, una verde oreja escamosa se animó.
CAPÍTULO 10 Viajar en las escamas
Los dos ponis agarraron los lados de la cuerda tan fuerte como pudieron sin estrangular el dragón. La bestia había tenido la amabilidad de inclinarse y dejar que los ponis envolvieran la cuerda alrededor de su cuerpo, entendiendo que el mayor estaba nervioso. Los Dragones podrían ser intuitivos y sabios, si querían y afortunadamente, éste y Daring Do eran viejos amigos. Esta no era la primera vez que Knuckerbocker le había salvado el pellejo. "Deja de tirar de la cuerda tan duro!" Daring Do le recordó a Gallant, ella preferiría volar junto a su tío y el dragón, pero las rúbricas habían declarado claramente que tenían que "viajar en las escamas" Además, la única forma en que cualquier otra criatura podría intentar entrar en el reino de los dragones—las Islas Scaly—era con un invitado. Los ponis tenían que hechizar su camino hacia el místico lugar si querían visitarlo, aunque la mayoría de los ponis nunca se atreverían. A los dragones no les gustaba a los intrusos. "Whooaa!" Gallant True gritó, mirándose igualmente aterrorizado y encantado por estar montado en la espalda de una enorme criatura verde. La bestia se inclinó hacia la izquierda, para que sus grandes alas montaran una bolsa de viento cálido y Gallant se deslizó hacia abajo, agarrándose a la cuerda con tanta fuerza que sus cascos se pusieron blancos por la falta de circulación. Daring ahogó una carcajada. "Y te llamas a ti mismo un poni aventurero?" "¿Por qué crees que quería que vinieras conmigo, Darling Do?" Él levantó su pata derecha para acariciar a Daring en la espalda, olvidando que se aferraba por su vida. Daring alargó su casco y lo agarró por el suéter para acomodarlo, y él dio un suspiro de alivio "Ves?!" "Ciertamente no puedo culparte" Daring guiñó un ojo "Me quiero tener durante cualquier aventura! Pero... ¿por qué no me lo pediste? En lugar de toda esa farsa del
banquete de la Sociedad Botánica? ¿No hubiera sido mucho más fácil?" Daring sonrió y añadió "Y no habría tenido que usar ese horrible vestido" "Después de desaparecer durante todos estos años?" Preguntó Gallant. Pudo haber sido el viento que sopló en su cara, pero los ojos del semental se veían especialmente acuosos "¿realmente habrías venido?" "No, probablemente no" Daring admitió, volviendo sus ojos hacia adelante "Estaba muy molesta contigo después de que dejaste de escribir desde Frozen North. Solo desapareciste!" Daring Do se volvió de nuevo hacia él "Pero… me alegro de estar aquí ahora. " "Yo también, querida" Gallant True dio un suspiro de alivio "Yo también" La yegua dorada extendió sus alas y abrazó a su tío. El abrazo se detuvo por un fuerte gruñido de Knuckerbocker. El dragón agitó sus grandes alas aún más rápido cuando empezó a descender, a medida que irrumpió atreves de las nubes, fue obvio el por qué. Un magnífico paisaje se extendía a sus pies, como relucientes esmeraldas incrustadas en una losa de color aguamarina. Habían llegado a las islas Scaly "¡Qué glorioso!" Gallant se maravilló, quitándose las gafas "Cada isla se parece a la curva de una garra de dragón!" "Cinco islas en total", explicó Daring Do. "Una por cada una de las tribus de dragones del mar, Knucker pertenece a la tribu más grande, que habita en la cima de la isla más grande–Octave. Ahí es donde vamos a empezar." Knuckerbocker tiro su cuello hacia atrás y dejó escapar un chorro de fuego, anunciando su llegada al reino y varios géiseres de fuego en diferentes lugares de la isla se dispararon en respuesta. Él agitó sus alas puntiagudas tan pronto como tocaron tierra en el entorno tropical y los árboles cercanos se sacudieron ante las poderosas ráfagas de viento que estaba creando. Las garras del dragón hicieron contacto con el suelo cubierto de musgo, dobló sus alas y se inclinó en una profunda reverencia, tocando una zona de hierba verde azulada con su barbilla. Expulsó a un pequeño estallido de llamas de su nariz y redujo la hierba instantáneamente a cenizas. Un segundo después, la hierba se regenero, creciendo aún más de lo que era antes.
"Fascinante... ", Dijo Gallant, con los ojos cada vez más dilatados "La flora es capaz de regenerarse instantáneamente después de la exposición al fuego..." sacó una pequeña libreta de su bolsillo y garabateó furiosamente una nota "Tiene sentido para un entorno en el que el ocupantes primarios son dragones" sonrió con verdadero placer, su bigote dorado relucía en el sol del mediodía "No puedo esperar para decirle a Thaddeus! Él va a estar tan celoso." "¡Vamos! No tenemos tiempo para investigación botánica. Justo ahora sólo hay una planta que nos interesa buscar" Daring Do se deslizo por del arco de la espalda de la bestia, sus cascos dorados se deslizaron fácilmente a lo largo de las resbaladizas escamas iridiscentes, la pegaso extendió sus alas, dejando que ellas hicieran el resto del trabajo mientras arrojaba su cuerpo al aire y aterrizaba suavemente en el suelo. Ella asintió con la cabeza a su tío para que hiciera lo mismo. Su intento no fue tan bueno, dada la falta de alas y la torpeza general de un poni que se ha encerrado en una biblioteca la mayoría de los últimos años. "Gracias por el paseo, Knucker", dijo Daring, inclinándose ante el dragón "Un día voy a encontrar una manera de pagarte toda la ayuda" Era difícil creer que había conocido al dragón durante tantos años. A pesar de que le había dado la concha de invocación, Daring no lo utilizaba a menos que no hubiera de otra. Esta era la segunda vez que había invocado sus poderes. La bestia cerró sus enormes ojos azules y asintió con la cabeza. Un segundo después, Knuckerbocker despegó de nuevo y desapareció en el cielo. Su silueta verde se disolvió en la atmósfera. Al mismo tiempo, dos dragones púrpuras se acercaron, parecía que iban a aterrizar en una isla diferente. "Criaturas increíbles, los dragones," Gallant True se maravilló, protegiéndose los ojos mientras miraba el par elevándose a través del cielo "Y qué suerte que conozcas a uno que pudo venir aquí, Daring! ¡Qué aventura salvaje! La Flor Eterna está a nuestro alcance". Daring Do se dio la vuelta, examinando el denso follaje, con un intento de enfocarse, el dulce aroma de las flores y el agua dulce atacó sus sentidos. Cada dirección era un oasis
de flores lleno con cientos de diferentes tonos de verde y salpicados por brillantes descargas de colores exóticos. El trino de los insectos llenaba el aire y la tibia luz del sol impregnaba el crecimiento en pequeñas zonas brillantes. Daring Do dio un paso adelante y accidentalmente puso su casco justo encima de un grupo de Dindiwigs, los bichitos rojos se arrastraron hasta ella con las tenazas preparadas. Daring pisoteó su casco de nuevo y todos se fueron volando "Argh!" Gruñó con frustración "¿Puedes por favor hacer la cosa con las hojas para saber hacia dónde nos dirigimos al menos?" "Oh, sí. Por supuesto!" Gallant True sacó las hojas y otra vez las colocó en el diario, ellas comenzaron a girar, justo como lo habían hecho antes y cuando se detuvieron, se inclinaron entre si y proyectaron las columnas de luz verde en dirección de un pequeño claro "Hacia adelante a la Flor Eterna!" Gallant clamó, trotando hacia el camino, cuando su sobrina no lo siguió, se detuvo y gritó: "¿No vienes, Daring?" Pero Daring Do no respondió. En cambio, una voz familiar gritó: "Sólo guie el camino, profesor..." Gallant True dio media vuelta y se encontró cara a cara con Ahuizotl! El monstruo estaba sonriendo maliciosamente, sosteniendo de rehén a su querida sobrina con su gran garra cola. Había dos secuaces a su lado, cargando sus mercancías y otro par al acecho en las sombras detrás de ellos. "Sorprendido de vernos, señor True?" Ahuizotl se rió "Parece que no es el único que sabe cómo ser persuasivo con los dragones. Entrégate ahora o se tomado por la fuerza! " La bestia no estaba sola "Será mejor que lo escuches, Gallant...", dijo el Sr. Thaddeus Vine, caminando hacia la luz "...o sufrirás las consecuencias” Su pelaje verde pálido y Cutie Mark de una enredadera de hiedra enroscada parecían encajar perfectamente con el exuberante ambiente. Ya que Daring Do sólo lo había visto en su traje formal del banquete, la camisa café de utilidad del poni parecía extraña, sobre todo porque todavía llevaba el monóculo junto con él. "Thad?" La cara de Gallant cayó "En el nombre de Star Swirl que estás haciendo?" "Estoy tomando lo que me pertenece."
"Libérame!" Daring exigió. Vine observo la lucha de la pegaso por liberarse de las garras de Ahuizotl. Vine suspiró. "Todo esto va a ser mucho más fácil si ambos sólo cooperan" "¡Nunca!" Daring le grito "Prefiero sufrir la ira de encantamiento oscuro de la emperatriz Ketztwctl que ayudarte por un segundo!" "Te dije que diría eso" dijo una dulce voz desde las sombras "Tal vez pueda convencerlos para que nos ayuden. Después de todo, somos viejos amigos...." "Buena idea." Vine le menciono a algún poni detrás de él "Creo que ya has conocido a mi hermana, la señorita Rosy Thorn" la pegaso azul dio un paso adelante, se veía presumida y se colocó a su lado, su viejo chaleco verde había sido cambiado por una brillante blusa dorada y su melena y cola naranja estaban alaciadas hacia atrás, suaves y elegantes. Un traje ridículo para un viaje a lo desconocido, probando así que Rosy era una aficionada total. "Es bueno verte de nuevo, Gallant" Rosy agito sus pestañas con practicada perfección "Aunque no creo que hayamos sido presentados formalmente, la última vez que fuimos agraciados con la presencia del otro fue cuando usted y su egoísta sobrina me abandonaron después de que lo ayudé a escapar. No es muy agradable...". "¡Hey!" Daring goleó su cuerpo contra el agarre de Ahuizotl "Dijimos que cada poni se cuidaba solo!" una cosa era ser una traidora, pero también una revisionista? Despreciable. Gallant aflojó el pañuelo azul alrededor de su cuello. Se veía cabizbajo "Yo...uh..." Se quedó mirando a Thaddeus Vine, tratando de leerlo, de entender sus motivos ¿Cómo había podido su colega, su amigo, traicionarlo de esta manera? Se armó de valor y gritó en un ataque impropio de rabia "Vid, tu sucio traidor! ¿Nuestros años de cuidadosa investigación no significan nada para ti?! Piensa en la Flor Eterna!" "Por el contrario, mi querido colega" respondió Vid "Significan todo para mí y también para mi principal benefactor, Ahuizotl. Es por eso que tú y tu querida sobrina van a llevarnos a ella. Tenemos la intención de ver si tus teorías realmente se mantienen ya que nunca antes compartiste toda su investigación conmigo" Vine sonrió y alzó una ceja,
su monóculo también se movió "Ahora es tu gran oportunidad de estar en lo cierto, Gallant." Thaddeus Vine bien podría haber pronunciado un conjuro mágico ya que si había algo que el tío de Daring Do amaba en este mundo, era demostrar que estaba en lo correcto.
CAPÍTULO 11 Un oasis de fuego y flores
Los rayos de luz verde siguieron destacando el camino, brillando cada vez más a medida que se acercaban a la ubicación de la Flor Eterna. El variopinto grupo siguió adelante con Daring Do y Gallant True a la cabeza, seguidos de los dos secuaces que apuntaban sus lanzas en sus flancos, y después Vine, Rosy y Ahuizotl en la parte trasera. El paisaje de la isla era una hermosa pantalla giratoria de palmas, zonas de césped bordeados de flores silvestres y acantilados rocosos de cara a las aguas agitadas y playas de arena púrpura. Si no fueran retenidos como rehenes, Daring Do realmente podría haberlo disfrutado. Pero aún había tantos peligros invisibles a los que tener cuidado, que Daring secretamente se preguntaba si alguno de sus captores se había molestado en hacer su investigación en las islas Scaly. Su conjetura era que no, teniendo en cuenta que ninguno de los ponis parecía demasiado preocupado por la posibilidad de insectos venenosos, fosos, o aguaceros de lluvia ácida, además de los dragones que acechaban por todas partes. Daring Do se arrastró por toda la isla, esforzándose por no interrumpir nada, cada paso que daba era extremadamente cuidadoso. Pero todo era en vano, ya que el sonido de los cascos torpes de Vid contra el suelo detrás de ella era todo lo contrario al sigilo y combinado con el escalar de Ahuizotl a través de los árboles, tocando cada planta en su camino, seguramente estaban llamando un poco de atención no deseada. A lo lejos una explosión aleatoria de fuego se disparó hacia el cielo y Ahuizotl trató de ocultar sus terribles temblores. Qué cobarde era realmente su enemigo, tenerle miedo de los dragones! Cuando Daring lo consideró, tenía sentido. Los agresores más grandes usualmente eran los que secretamente tenían miedo de todo. Gallant True se detuvo en seco. "Sigue adelante, viejo semental," Thaddeus gritó con regocijo "todavía no terminas"
"Lo haría, Thad, pero parece que estamos en un callejón sin salida" Gallant se quedó mirando a través de sus gafas al borde de la tierra y la desembocadura de un amplio, río burbujeante. El rayo verde de luz de las Hojas Eternas brillaba directamente hacia él "algunas ideas" Thaddeus, ya que eres tan brillante, tal vez tendrás algo que decir..." "Bueno, claramente necesitamos una balsa de algún tipo" Vine anunció "No todos somos Pegasos" "Secuaces!" Ahuizotl tronó "Constrúyanos una balsa!" Los dos sementales entraron en pánico, luchando por recoger ramas sueltas de la zona circundante. Ahuizotl rió mientras observaba como construían una balsa tosca "¡Dense prisa! Puedo sentir la Flor Eterna cada vez más cerca...." Ahuizotl proclamó, mirando el río "Pronto seré la única criatura en toda Equestria que vivirá para siempre!" La bestia señaló a Gallant True y a Daring Do "Y tú, Daring Do, vas a ayudarme a lograr esta hazaña!" "Oh, Ahuizotl. . . "Daring Do bajó la cabeza con preocupación fingida y comenzó a temblar "Tú no sabes ni una sola cosa acerca de la Flor Eterna. . . o sí? ¿Ni siquiera como se ve?" "No me insultes, Do!" Ahuizotl rugió "Es la flor más hermosa que el mundo haya conocido. Lo sabré cuando lo vea..." Daring tuvo cuidado de mantener un ojo en la traicionera, mentirosa de pelo lacio Rosy Thorn y el otro en su hermano. Daring Do nunca había confiado en Vine, incluso en la sala de lectura de la Sociedad Botánica, el semental de color verde pálido había sido un manojo de nervios—con sus miradas furtivas y paseándose alrededor. Ahora Daring sabía por qué, supuso que sería bastante difícil actuar natural alrededor de un poni al que planeaba traicionar más adelante. Thaddeus le había dado un guiño a escondidas en el salón de baile, uno que implicaba que debía dejar que el Dr. Caballeron escapar con la Hoja Eterna, todo había sido parte del gran plan para engañarla y tenerla y asegurar los elementos que faltaban, pasando por la llave narciso, recuperar la otra Hoja Eterna y finalmente unir fuerzas con Gallant true para entender las cosas.
La intrepidez y astucia de Daring combinadas con la experiencia de Gallant True con la Flor Eterna formarían al único dúo capaz de resolver el misterio. En cierto modo, Thaddeus Vine debería ser aplaudido ante su predicción en la forma en que los acontecimientos iban a desarrollarse. Pero no había manera en que Daring Do dejara que este viaje terminase de la manera en que Vine y Ahuizotl querían, tenía que entrar en acción ahora.
CAPÍTULO 12 Plantas Indígenas y Plantas Ingeniosas
"Pssst! Gallant!" Daring trató de captar la atención de Gallant, ahora que los secuaces estaban ocupados con la construcción de la balsa, los dos podrían escapar fácilmente. Daring se preparó para soportar otra vez el peso de su tío. Si eso significaba volar a otra isla mientras sostenía a Gallant True de su jersey de lana, entonces que así fuese. Aunque primero tendría que recuperar las Hojas eternas, lo que sería más complicado ya que Vine las tenía en su casco, situadas sobre las páginas en blanco que Gallant hábilmente había arrancado del diario con el fin de mantenerlo a salvo. "Tío Ad!" Daring intentó de nuevo pero Gallant True estaba demasiado ocupado inspeccionando una planta indígena como para notar que Daring estaba tratando idear un plan de escape. El poni café estaba encendiendo un helecho con un fósforo, viéndolo quemarse y riendo con deleite cada vez que crecía al instante. Era como la hierba que Knuckerbocker había quemado con su aliento de fuego después de aterrizar en la isla. Gallant se agachó y recogió unas cuantas piezas de helechos y raíces, y los puso en su bolsillo. Daring rodo los ojos. Le agarraría cuando llegara el momento. "Si estás pensando en escapar -no importa." Rosy voló hacia ella y aterrizó incómodamente cerca "Tú me has visto en acción. Soy lo suficientemente rápida como para atraparte". Daring entrecerró los ojos "De todos modos ¿Qué hay para ti en todo esto?, Thorn" Daring debió haber escuchado su primer instinto en el campamento de Caballeron: el que le había dicho que se mantuviera lejos de esta yegua. "Es como te dije" Rosy se encogió de hombros con una sonrisa malvada. "Solo un trabajo" "¿Qué? No conseguiste a algún otro poni para contrate?" Daring Do se burló "Tuviste que acudir tu malvado hermano mayor Thaddeus para hacerte un favor?" Daring ajustó su sombrero de explorador y apartó un mechón negro de su cara sucia. El contraste entre Daring Do y la elegante Rosy Thorn nunca había sido más evidente.
"Por el contrario... Recluté a Rosy porque sabía que sería perfecta" Vine intervino y Daring se dio la vuelta para mirarlo. Ella podía decir que estaba saboreando esta explicación, Vine estaba increíblemente orgulloso de sí mismo y quería felicitaciones por organizarlo todo. "Verás" continuó, dando vueltas alrededor de las dos yeguas "Necesitaba a algún poni que pudiese desempeñar su papel con Caballeron y contigo. Él es lo suficientemente estúpido como para no darse cuenta de un intruso pero no cualquiera podría engañarte, Daring. Tengo que darte crédito por eso" Vine sonrió y puso un casco en el delicado hombro de Rosy "Rosy aquí es una excelente actriz ¿No estás de acuerdo, Do?" "Vine" Daring respondió: "Creo que toda tu familia es excelente en el engaño y la mentira. Tal vez deberías empezar una compañía de teatro!" A lo largo de la orilla del agua, los dos secuaces gruñían y gemían mientras ataban la última sección de madera, gotas de sudor rodaban por sus caras. "Arréglalo ahora!" Ahuizotl gruñó en un ataque de rabia "O voy a hacer una balsa contigo!" El azul saltó sobre la estructura para poner a prueba su fuerza y varias piezas de madera se desprendieron, arrastradas por la fuerte corriente. "Parece estructuralmente sólida, muchachos" Gallant bromeó "¿les importa si lo intento?" comenzó a disparar ráfagas de magia verde de su cuerno hacia una pila cercana de palos y lianas. Los palos flotaron, arreglándose en una cuadrícula perfecta y más explosiones de magia ataron las lianas alrededor de ellos. Gallant repitió los pasos varias veces hasta que pareció seguro "Todavía lo tengo!" El viejo semental sonrió, dio un paso en su propia embarcación estable, era lo suficientemente grande para dos— Él y Daring Do. Él trotó hacia atrás y adelante, inspeccionando el doble vagón. Los secuaces vigilaban, con las bocas abiertas. De la nada, surgió una explosión de llamas que pasaron muy cerca de las balsas "RAAAAAAAAAAAWR!” rugió un furioso dragón descendiendo hacia los ponis y masticando su enorme mandíbula de dientes afilados, cada planta en las proximidades se tambaleó a causa de los fuertes vientos provocados por las alas de la bestia. Las
ráfagas eran tan poderosas que tiraron a los ponis de sus cascos e incluso Ahuizotl se vino al suelo, agitando las extremidades. La bestia de escamas carmesí voló alrededor de los viajeros caídos, disparando fuego contra ellos. Se elevó al cielo por un momento y cayó en picado otra vez, aunque había una cosa peculiar sobre el comportamiento de dragón, y Daring y Gallant debieron darse cuenta al mismo tiempo. "No va a acercarse al río!" Daring Do le gritó a su tío "Tiene miedo de él!" . "Sobre el barco!" Gallant True le ordeno, alcanzó su casco hacia ella "¡Rápido!" "Sólo tenemos que recoger dos cosas primero!" la pegaso dorada se lanzó bajo el ala del dragón, dirigiéndose directamente a Vid, quien estaba luchando por levantarse del suelo. El dragón rugió de nuevo, causando Vine girara la cabeza hacia otro lado. Era el momento justo para que Daring Do e arrebatara las Hojas Eternas de debajo de su casco y tomarlas de regreso. "Buena suerte para encontrar la flor ahora!" Daring gritó "¿O de alguna vez salir de esta isla!" Ahora, con su premio asegurado y sus enemigos desarmados, Daring Do saltó a la balsa de su tío.
CAPÍTULO 13 Lágrimas de Dragón
Los dos aventureros remaron río abajo a toda velocidad, apresurándose hacia lo desconocido. La pequeña pero resistente balsa se balanceo de lado a lado gorgoteando en el agua, las gotas de humedad empañaron los binoculares de Daring Do, por lo que era difícil inspeccionar el paisaje al frente por posibles obstáculos mientras se detenía cada tres segundos para limpiarlos con el dobladillo de su camisa. Gallant True estaba tumbado en la balsa, luchando por alinear las Hojas Eternas para que guiaran la brújula de luz y al mismo tiempo por no perder el equilibrio para no ser arrojado sin contemplaciones por la borda. "¡Ajá!" Finalmente gritó por encima del alboroto "Muéstranos el camino!" El rayo verde apunto al frente, sobre el río, directamente a los profundos y desconocidos territorios de las islas Scaly. El paisaje a ambos lados comenzó a volverse más denso a causa de los árboles, y el cielo empezó a volverse de un tono rosa por el atardecer. El aroma de las flores flotaba en el aire, provocando a los dos ponis con la idea de que en cualquier momento encontrarían a la elusiva flor. "Ya casi hemos llegado" Gallant True miró sobre su hombro, tirando a sí mismo contra la balsa, troto a la parte posterior de la balsa y dejó escapar un profundo suspiro "Todavía no puedo creer que Thaddeus me haya traicionado de esa manera" murmuró en voz baja." Pero no sería la primera vez que la búsqueda de la Flor Eterna haya convertido a un poni en un monstruo, creo." Se preguntó dónde estaría el malicioso grupo, no había ni rastro de la balsa destartalada "¿Crees que los perdimos, Daring?" "Por ahora," Daring respondió con una inclinación de cabeza y sostuvo sus binoculares para escanear el cielo en busca de los dragones "Pero sabiendo cuan determinado esta Ahuizotl por encontrar la Flor Eterna, aún no estamos seguros." Ella troto a la parte delantera de la balsa para inspeccionar la zona. "¿no te parece que el río se está
volviendo más estrecho?" Daring señaló a cada lado de la balsa. "Estamos más cerca de la orilla en ambos lados, estoy segura." "Estoy de acuerdo" Gallant asintió y se puso de pie "Tenemos que estar cerca" Las aguas comenzaban a calmarse. Más adelante, el río se dividió en dos corrientes y el haz de luz se hizo más brillante, apuntando a la derecha de la bifurcación. Daring Do dirigió la balsa con un palo como remo y pronto se encontraron en una pequeña y tranquila bahía, los graznidos de los pájaros y el rugido de los dragones habían cesado y el único ruido era el de una burbujeante cascada, Daring se quedó sin aliento cuando la vio. No era cualquier cascada; era una enorme escultura antigua! El acantilado de piedra se había reducido a imitar el cráneo amenazante de un dragón con dientes de piedra que sobresalían desde el techo a su boca como estalactitas, con la articulación inferior de la mandíbula del dragón sumergida bajo el agua y las constantes corrientes de agua caían del hueco de sus ojos, como si el gran reptil estuviese llorando y el río hubiese sido creado por los siglos de lágrimas de dragón. Un escalofrío recorrió la espalda de Daring Do, y supo que estaban en el camino correcto. Los tesoros generalmente acechaban en los lugares más espeluznantes." Creo que tenemos que entrar a través de su boca" Daring Do apunto hacia el arco puntiagudo "Bajo la cascada". De repente la carcajada de Ahuizotl se hizo eco a través de la bahía, enviando otro escalofrío por su espalda "Después de ti, Daring Do!"
CAPÍTULO 14 La Gruta de la Luna
"¡Atrás, Ahuizotl!" Daring Do gritó mientras dirigía la balsa a la boca del dragón y se maldijo por no moverse lo suficientemente rápido para perder a Vine y a los demás ¿Cómo se las habían arreglado? Quizás Thaddeus había prestado atención a la magia de Gallant desde antes y copiado su construcción de la balsa, después de todo el semental era conocido por robar las ideas de su colega. "Prepárate" Daring le advirtió su tío. La cascada llovió sobre los ponis, empapando sus cuerpos de la cabeza a los cascos, pero Daring apenas tuvo tiempo de reaccionar ya que en el momento que atravesó al otro lado, mágicamente estuvo seca de nuevo. Ella y Gallant intercambiaron una mirada de sorpresa. "¿Qué es este glorioso lugar?" Rosy Thorn susurró con asombro cuando la otra balsa atravesó y entro en escena "Ni siquiera parece real!" Y por una vez, Daring Do tuvo que estar de acuerdo con ella. Ahora estaban flotando en una increíblemente hermosa gruta en forma de medialuna. Cada centímetro de cada superficie visible estaba cubierta de un espectro de flores vibrantes de todas las formas y tamaños, suave musgo cubierto de rocío y largos helechos llegaban a darles la bienvenida. Solamente el aire estaba sobrecargado con deliciosos-perfumes aromáticos que luchaban entre sí por ser los más dulces y las luciérnagas danzaban perezosamente, iluminando la oscuridad con su magia. "Sé exactamente dónde estamos." Gallant cerró los ojos con una sonrisa, inhalando el aire fresco "La Gruta de la Luna" Hizo un gesto a su entorno, incapaz de contener su emoción "¡Lo logramos! La Flor Eterna está aquí". Todos los ponis miraron a su alrededor en pánico, esperando ser los primeros en encontrar la flor "¡Fuera de mi camino!" Ahuizotl saltó a la orilla, aplastando varios helechos en el proceso, miró de izquierda a derecha y entonces se dio la vuelta y le ladro a sus siervos "No se queden ahí! Encuéntrenme la Flor Eterna!"
Los secuaces entraron en acción, saltando al otro lado y frenéticamente comenzaron a trotar a lo largo del perímetro con el hocico a una pulgada del follaje. Un semental rojo se detuvo para inspeccionar una gran flor amarilla con un centro rosado y después de una sola aspiración, él se puso de pie, se tambaleó por un momento y luego cayó de bruces. "Una flor Somnambular" dijo Gallant encogiéndose de hombros, todavía hipnotizado por su entorno. Se quitó las gafas y su sonrisa se hizo aún más grande, susurró para sí mismo "simplemente increíble..." "Está bien, tío. Tenemos que centrarnos. ¿Qué estamos buscando?" Susurró Daring, viendo a Ahuizotl revolviendo todo alrededor de la gruta y levantando cada flor de aspecto elegante que veía, las cuales eran prácticamente todas. Ahuizotl frunció el ceño confundido "Tenemos que encontrar esta cosa antes que ellos!" Rosy voló a la cima de una gran roca para una mejor vista de la gruta y Vine salió a tientas de la balsa, pero su peso lo hizo caer y se fue chapoteando en el agua azul, trepó hasta el suelo cubierto de musgo y se levantó, chorreando agua. Solo fue cuestión de segundos antes de que estuviese seco de nuevo y corrió hacia una flor púrpura con bordes en destellos blancos. Gallant se veía tranquilo, a pesar de la locura que desplegada a su alrededor "Paciencia, cariño" True aconsejó fríamente. Se inclinó y le susurró al oído "No hay forma de saber la apariencia de la flor, debe revelarse a nosotros cuando esté lista. Recuerdas las rúbricas?" Daring pensó en su conversación en la playa. Hasta el momento, las otras dos reglas se había hecho realidad: las Hojas eternas habían actuado como su brújula y habían llegado a la isla a través de las escamas de dragón "¿Quiere decir" -Daring se volvió hacia su tío- "'para revelar la verdad, examina las raíces'?" La pegaso no tuvo ni idea si Gallant le había respondido ya que inmediatamente se encontró siendo succionada debajo de la superficie del agua por una fuerza invisible y no tenía escapatoria.
CAPÍTULO 15 La raíz del Infinito
Ella había esperado encontrarse a sí misma bajo el agua, remando para llegar de nuevo a la superficie, por lo que se sorprendió al descubrir que estaba en una especie de dimensión diferente. Un hueco patas-arriba por debajo de la gruta, la pegaso se maravilló por esta peculiar visión. En lugar de las preciosas flores de la gruta de arriba, este lado era un paisaje extenso de las plantas al revés, las raíces estaban creciendo desde el suelo en punta, con formaciones parecidas a garras que se extendían en la tierra invisible. Era como si toda la gruta se hubiese volteado. Daring Do miró al suelo y sus cascos eran sólidos en la superficie del agua, como si fuera una ventana de cristal ondulado. Daring Do podía ver el fondo de la balsa de su tío y la tierra que rodeaba la piscina, trotó hacia la tierra y encontró a Ahuizotl y a Vine revolviendo alrededor de las camas de flores. Entro en acción, con la esperanza de que no la descubrieran mientras estaba atrapado en este lugar en la nada. ¿Qué exactamente estaba haciendo ella aquí? Entonces recordó que justo antes de ser succionada hacia abajo, ella había dicho la última rúbrica en voz alta. Eso era todo! Daring Do necesitaba "examinar las raíces"! Tan pronto como Daring camino a inspeccionar las diversas raíces, comenzó a sentirse desesperada. El jardín de las enredaderas proporcionaba poca variación entre sí. Pero cuando Daring Do finalmente la vio, la ilustración del diario de su tío cruzó por su mente. Curveada, en un patrón de encaje, el símbolo de eternidad—las raíces de la propia Flor Eterna. "La raíz del infinito!" La poni se acercó al espécimen con temor y notó que aunque las raíces eran bastante espectaculares, la flor al otro lado era bastante normal. Una modesta flor blanca con
cinco pétalos blancos, situada entre un hibisco añil y una rosa fucsia que era del tamaño de un casco de Daring. Era una sencilla Jane entre una multitud de elegancia. Daring Do sintió una sacudida, y su cuerpo se tambaleó hacia delante. Ella regreso, jadeando por aire, la fragancia de la gruta le golpeó de nuevo y supo que estaba de vuelta, era como si absolutamente nadie hubiese notado su ausencia! Ni siquiera Gallant True que todavía estaba esperando pacientemente por que se produjera algún acontecimiento misterioso. "Gallant lo he visto! Lo sé, "Daring silbó y rápidamente miró a su alrededor para asegurarse de que ningún poni estuviera escuchando "Sé cuál es la Flor Eterna." "¿Cómo?" Gallant respondió agarrando su hombro con su casco "¿Sucedió? ¿Has visto las raíces? Lo sabía!"
"Por fin, la he encontrado!" Ahuizotl gritó, inclinándose en una cama de flores "Ahora voy a experimentar la gloria de la vida eterna!" Echó la cabeza hacia atrás y soltó una risa profunda y victoriosa. Cuando Daring Do vio donde estaba parado, su corazón dio un vuelco, estaba justo al lado de la Flor Eterna! ¿Milagrosamente también lo había averiguado? ¿O era sólo una suposición afortunada? "Prepárese para dar testimonio de este histórico acontecimiento!" Ahuizotl anunció "Mira de cerca, Daring Do" Rosy Thorn y Thaddeus Vine se paseaban cerca, viendo en desconcierto. Daring se preparó para atacar, por si acaso él realmente escogía la correcta. Con broche de oro, la bestia se agachó y tocó el hibisco índigo con sus labios, y entonces el formidable Ahuizotl se redujo hasta el tamaño de ratón "NOOOOoooooo!" gritó derrotado, la riqueza de su voz fue disminuyendo junto con él hasta que no fue mucho más que un diminuto chillido. Thaddeus Vine rió en señal de triunfo y se inclinó por el mini-monstruo "Qué tonto, Ahuizotl. ¿No reconoces una broma Venenosa en cuanto la ves?!" Ahuizotl respondió con una serie de chillidos airados, negándole con su pequeño puño a Vine. Los dos secuaces aterrorizados, quienes dieron a conocer que habían despertado,
trotaron y recogieron a su líder. Corrieron a la balsa y se dirigieron hacia la cascada, mirando hacia la gruta como si estuviera a punto de comérselos. "Supongo que ahora somos nosotros contra ti, Vine" Daring se burló, saltó sobre una roca cercana, manteniéndose en un terreno alto justo por encima de la flor "Y algo me dice que no tienes idea de lo que estás haciendo." "Mal de nuevo, Daring" el bigote de Thaddeus se enrollo en los extremos, formando una expresión maliciosa "Sé que es una de estas dos flores aquí" Hizo un gesto hacia la rosa fucsia y la flor blanca. Daring Do no dejó que el hecho de que estaba en lo cierto se registrara en su cara "¿Qué te hace pensar eso?" "Porque te vi mientras Ahuizotl hizo su selección." Vine enarcó las cejas "No hay manera de que te pusieras nerviosa si no hubiera estado cerca..." Thaddeus se agachó sobre sus patas traseras y se inclinó hacia la rosa. Inhalo profundo, arranco la flor de la tierra, y bebió del centro. Por un momento, parecía que el poni no fue afectado por la flor, Gallant True le guiñó un ojo a Daring. Sé paciente, él pronunció, Mira.
"Thad!" Rosy Thorn gritó, con su linda cara retorciéndose de horror "¿Qué está pasando?" La cara de su hermano empezaba a inflarse como un globo, sus mejillas se expandieron, sus ojos se abrieron, y su monóculo estalló, Thaddeus flotaba en el aire, otra víctima de la gruta. Rosy extendió sus alas y se fue tras él. La pegaso azul enrosco su brazo alrededor de él, y ambos desaparecieron en el ocaso color naranja, un borrón decadente de azul y verde en un cielo sin nubes. "Tsk, tsk." Gallant True negó con la cabeza mientras lo veía volar lejos "Estoy sorprendido querido Thaddeus no pudiste reconocer que era una rosa Swelling del Sur, nunca estudiaste lo suficiente, que poni. Siempre cortando las esquinas con tu investigación". "Creo que ahora siempre la recordara!" Daring rió entre dientes, tomando un lugar a su lado y le dio un codazo a su tío "Deberíamos?"
Gallant True asintió. Él y Daring Do dieron un paso adelante con cautela y se acercaron a la Flor Eterna desde ambos lados, este era el momento que habían estado esperando. Los ojos del viejo profesor se llenaron de lágrimas de alegría mientras se arrodillaba y acarició la flor con su casco. Los pétalos resplandecieron, iluminados por la luna nueva y el reflejo de las luciérnagas. "¿No vas a recolectarla?" Daring Do le pregunto a su tío. "Fue maravilloso de ver", dijo Gallant True. Se levantó, se sacudió el jersey, y se aclaró la garganta. "Pero vamos a casa, Darling Do."
CAPÍTULO 16 El Tesoro
La regordeta camarera unicornio dejó mágicamente dos platos humeantes de picadillo de zanahoria y patatas en frente del viejo profesor y su sobrina "Puedo conseguirles algo más?" ella preguntó con un tirón de su rizada melena castaña, la Cutie Mark de la yegua era un conjunto de saleros y pimenteros, y su sonrisa era cálida "Más sidra para usted, señor?" "Sí, por favor!" Gallant True levantó la jarra vacía. "Gracias, Pepper Mill!" "Aquí la tienes," ella respondió con un guiño, y desfilo hacia la cocina. Era agradable estar sentado en un acogedor pub en la Bahía Horseshoe disfrutando de una comida duramente ganada. Había sido un largo viaje de regreso de las islas Scaly. "Hay una cosa que todavía no entiendo, tío Ad" Daring Do tomó un gran bocado de picadillo y continuó hablando con la boca llena "¿Por qué no llevaste la Flor Eterna contigo a Equestria?" "Es una cosa divertida, Daring" Gallant la miró a través de sus gafas, lo que significaba que él estaba hablando en serio. "Algunas veces pasas toda la vida persiguiendo algo y entonces cuando lo consigues, te das cuenta de que en realidad era la persecución lo que amaste todo el tiempo." Daring dio un suspiro aliviada "Así que nunca quisiste ser inmortal?" "Cielos, no!" Gallant rió a través de un gran bocado de comida. "Ningún poni o bestia debe vivir para siempre, mi querida ¡Qué terrible maldición tendría sobre la cabeza!" Daring Do negó con la cabeza y frunció el ceño en confusión "Pero incluso si no quieres la inmortalidad, pensé que querías estudiar las propiedades mágicas de la Flor Eterna" Ella levantó su sidra y se la llevo a la boca. "¿Por qué la dejaste? incluso destruiste las Hojas Eternas y tu diario! Ahora nunca podrás encontrarla de nuevo" "Después de ver la forma en que Thaddeus y Ahuizotl actuaron, me di cuenta de que era demasiado peligrosa para ser encontrada" le explico Gallant.
"Me duele decir esto cuando se trata de un tesoro de valor incalculable", dijo Daring, levantando la sidra al aire en señal de saludo "pero creo que tomaste la decisión correcta." "Lo sé." Él sonrió y se inclinó "Además, he encontrado algo mucho mejor que estudiar: Plantas regenerativas! Recuerdas, en la isla, cómo las plantas han evolucionado para crecer de nuevo después de ser quemadas para convivir con los dragones? Guarde algunas muestras y las estudiare y averiguare cómo lo hacen. Es tan emocionante! Y me va a hacer un héroe de la Sociedad Botánica, posiblemente, incluso un héroe de Equestria. Creo que voy a llamarlas Phoenix Flora. Tal vez podría publicar un artículo sobre esto en la Flora y Foalna...." Y así, con la localización secreta de la Flor Eterna, una vez más segura, los ponis de todas las especies fueron salvados de su involuntaria maldición, gracias a Daring Do!
El fin
A. K. Yearling Las novelas aventureras de A. K. Yearling son protagonizadas por la
intrépida Daring Do y han sido reconocidas como los Bestsellers más vendidos en la historia ecuestre. Yearling es licenciada en literatura de la Universidad de
Pranceton y después de la universidad, trabajo brevemente como investigadora en el Archivo Nacional de Artefactos Ecuestres y Pontropologia en Canterlot.
Durante ese tiempo, escribió un ensayo basado en sus conclusiones de los
territorios grifos, titulado "¿Cuál era el nombre de ese Grifo ¿Otra vez? o, picos y estudios de la memoria itinerante" que fue publicado por la revista de la Universidad de EqueXeter y en Pegasus el año pasado.
Ella disfruta del tiempo a solas en su casa y largos trotes en la playa.
G. M. Berrow adora explorar lugares exóticos en todo el mundo, tanto a través de las historias que escribe como en las aventuras de su vida real.
Berrow está feliz de haber colaborado en estas aventuras con su muy propia ídolo dorada –la mismísima A. K. Yearling!
Ella adora las cosas brillantes, pero piensa que el mejor tesoro de todos es un libro.
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GLOSARIO
Ahuizotl (OW-Whee-ZOH-tul): Una malvada bestia gigante que no se detendrá ante nada para obtener riquezas y poder. Él es el mayor enemigo de Daring Do. La maldición del Pegaso Tzacol (ZAH-cohl): Un antiguo mito que predice una gran tormenta, provocada por las acciones de un curioso pegaso nombrado Tzacol, quien entro en un templo sagrado cuando tenía prohibido hacerlo y más tarde se convirtió en un protector del cielo. Dr. Caballeron (Cab-uh-LAIR-on): Un poni cazador de tesoros rival. Desde que Daring Do se negó a trabajar con él como su compañera, se ha hecho de bits haciendo el trabajo sucio de Ahuizotl. . Sociedad Botánica Ecuestre: Un club exclusivo para los botánicos y estudiosos de ciencias ambientales en la tierra de Equestria. Flor Eterna: Una flor mágica que se cree que es capaz de conceder la vida inmortal a quien beba su néctar. Cambia su apariencia física cada vez que es encontrada, lo que hace que sea muy difícil de localizar y reconocer. Hoja Eterna: Un espécimen preservado de la hoja arrancada de la Flor Eterna. Gallant True teorizo que las dos hojas juntas conducirán a la ubicación actual de la flor. La flora y Foalna: Una revista científica mensual de la Sociedad Botánica Ecuestre. Gallant True: tío de Daring Do, buscador de emociones, compañero y estudioso de las plantas, a quien cariñosamente se refiere como tío Adventure. Gallant True pasó años explorando Frozen North, investigando las plantas y en busca de pistas sobre la Flor Eterna.
Gruta de la Luna: Un oasis que se encuentra detrás de una cascada en Octave, una de las islas Scaly. Raíz del Infinito: una raíz cuyas inconfundibles curvas son el único elemento inmutable de la legendaria Flor Eterna. Todas las demás características de la flor cambian cada vez que es vista por los ojos de los ponis, lo que hace que sea casi imposible de encontrar. Islas Scaly: Un grupo de cinco islas. Cada una tiene la forma de una garra de dragón y es el hogar de una tribu separada de los dragones. Knuclcerbocker (NUK-ur- bak-ur): El dragón Octaviano que Daring Do una vez salvó de una prisión encantada. Por siempre en deuda con ella, le ayudó a recuperar el radiante Escudo de Razdon y le otorgo a Daring una reliquia de Scaly – una concha de convocación para que la utilice cada vez que necesite su ayuda. Maddame Willow Fern: Un miembro de la junta directiva de la Sociedad Botánica Ecuestre. Una de los mayores expertos en flora y árboles únicos. Tres veces nominada y dos veces ganadora del premio al botánico del año, principalmente por su trabajo con las flores Insomnio. Octave (AHK-tayve): La isla y tribu dragón las grandes de las islas Scaly, y el hogar de Knuckerbocker. Rosy Thorn: Una independiente pegaso aventura contratada por el Dr. Caballeron para ayudar en las misiones y las incursiones. Rúbricas: Tres pistas que pueden conducir a la ubicación de la Flor Eterna. Fueron descubiertas por Gallant True en una antigua escultura en el sitio de Orshab, el mismo sitio que las Hojas Eternas (La leyenda dice que allí Mooncurve el Astuto tomó un sorbo del néctar de la flor eterna.) Flor Somnambular (som-NAM-bew-ler): Grandes flores tropicales con pétalos de color fucsia y tallos naranja, estas peligrosas flores se conocen por arrullar ponis y dormirlos con su fuerte perfume, aunque algunas variedades afectan a los ponis haciendo de él o ella sonámbulos. Comúnmente se encuentran en las regiones del sur y varias islas tropicales de la costa occidental de Equestria.
Símbolo de Scaly: El símbolo de las tribus que habitan en las islas dragón de Scaly – un diente de dragón con una estrella de cinco puntas en el centro. Thaddeus Vine: Un miembro de la junta directiva de la Sociedad Botánica Ecuestre especializado en hiedra y pastos, con un interés especial en las flores mágicas.
¡He aquí una nueva traducción espero que la disfruten! ATTE Mogami Kyoko