La Pirata Cien Patas

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ESTE LIBRO HA SIDO ESCRITO E ILUSTRADO POR…

Salma Fernández Pablo González Leo Fernández Manuel Quintana Julia Puente Desiré Hernández Naim Alfonso Ibio de la Torrente Ángel Villoslada Sara Nahia Gaztelumendi Sofía Gómez

CRIE, Viérnoles 2019.

Carolina Díaz


En los lejanos mares de La Muerte había un barco pirata que estaba hecho con oro y rubíes, que habían conseguido en todos sus asaltos. Este barco tenía algo especial. Tenía un dragón en la proa. También tiene un camarote con un acuario lleno de tiburones.


El barco tenĂ­a una capitana pirata. Me llamo

Sacasangre y soy la capitana del barco.

Mi cara no tiene piel. Tengo que llevar un garfio en la mano y siempre sale sangre de mi mano. A todos les aterrorizaba mi pata porque estaba hecha con el hueso de un

humano.


Toda la tripulación le tenía miedo. Llegó la timonel. - Mi nombre es

Mata Huesos. Como cocodrilos enteros y desayuno…

¡¡¡ 50 ballenas con ojos !!!

Cambié la pata del capitán por una espada. Con la nueva pata iba cortando tiburones. Y todos tenían miedo porque salía mucha sangre y se desmayaban.


Después llegó el pirata cocinero. - Mi nombre es Palo

Voolcanus. Soy famoso por mis comidas. Cocino

patas de pulpo con polvo de dientes de tiburón.

Tuve la idea de cambiar la pata del capitán por una rata. Con la nueva pata se trasmitían más rápido los virus. Y todos tenían miedo porque no querían ir al médico.


Apareció por allí otro pirata. - Soy la grumete y me llaman Relámpago. Tengo un

ojo tapado con un parche. De mascota tengo un lagarto azul.

Se me ocurrió cambiar la pata por una escoba. Con la nueva pata limpiaba todo el barco. Y todos tenían miedo porque se podían caer del barco.


El siguiente pirata que apareció dijo: - Soy el pirata armero y mi nombre es

Barbudo, me llamo así

porque nunca me afeito, soy muy vago.

Rápidamente cambié la pata por un puñal que le robé a un pirata. Con la nueva pata cortaba a todos. Y todos tenían miedo porque pensaban que les iba a cortar y no les

gustaba la sangre.


Entonces se presentó el pirata vigía. - Mi nombre es

Alexia

Camuñas, y me encanta comer uñas, sobre todo las uñas largas con Ketchup.

Cambié la pata del capitán por una nube tormentosa. Con la nueva pata iba mojando y echando rayos a todo el mundo. Y todos tenían miedo porque no les gustaban las tormentas.


A continuación llegó otro pirata. - Soy el pirata carpintero y mi nombre es Martillueso. Por la

mañana me gusta desayunar filetes de tiburón al ali-oli.

Tuve la idea de cambiar la pata por un martillo con metal muy, muy duro. Con la nueva pata hacía moratones a toda la gente. Y todos tenían miedo porque era muy agresivo y peligroso.


El siguiente pirata que apareció dijo: - Soy el ayudante del capitán. Me llaman

Bruce Buner y desayuno medusas

con salsa barbacoa.

Se me ocurrió cambiar la pata del capitán por una calavera que encontré en

una isla llena de esqueletos. Con la nueva pata intimidaba a la gente. Y todos tenían miedo porque era una calavera temible que pertenecía a Barba Gris, un pirata con la barba de metal y un cuerpo hecho de trastos, tiburones y armas.


Más tarde vino la pirata médica. Era una chica llamada pirata Chupasangre a la que le encantaba curar tiburones.

Rápidamente cambió la pata por el diente más afilado del tiburón más grande de todos los mares. Lo tenía porque ese tiburón había sido paciente suyo. Con la nueva pata al principio le daba igual, pero después se dio cuenta que le molestaba al andar. Y todos tenían miedo porque no les gustaban los dientes de tiburón afilados. Y sobre todo les daba miedo, porque podían pincharse.


Más tarde vino la pirata tonelera.

- Me llamo la pirata América Sangrienta y me encanta hacer pasar miedo a toda la tripulación.

Rápidamente cambié la pata por un tiburón que cazamos y que era muy peligroso. Con la nueva pata de tiburón se quería comer a su tripulación. Y todos tenían miedo porque les perseguía para comérselos a todos de un bocado.


El loro pirata, que lo había visto todo, pensó que era mejor cambiar la pata del capitán por una varita mágica. Cada vez que agitaba la varita, salía lo que cada tripulante pedía.

El capitán se puso muy contento, y para celebrarlo le dio un regalo a cada uno. Al final, todos se pusieron alegres porque descubrieron que el pirata tenía su parte generosa y se entretuvieron abriendo los regalos.


Este libro es una adaptación del álbum ilustrado “El PIRATA de la PATA de PATA”, escrito por JOSÉ CARLOS ANDRÉS e ilustrado por MYRIAM CAMEROS SIERRA. EDITORIAL NubeOcho.



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