HABÍA UNA VEZ UN ORDENADOR QUE ESTABA MUY TRISTE, PORQUE SIEMPRE ESTABA APAGADO.
UNA DE SUS PARTES, EL RATÓN , ESTABA MUY PREOCUPADO PORQUE ECHABA DE MENOS A TODOS SUS COMPAÑEROS.
“TODAVÍA RECUERDO – DECÍA EL RATÓN - CUANDO MI COMPAÑERA
LA TORRE
SE ENCENDÍA MUY CONTENTA”,.
Y CUANDO SE ENCENDÍA LA PANTALLA Y EMPEZABA A PROYECTAR IMÁGENES DE MUCHOS COLORES.
TAMBIÉN ME ACUERDO DE MI AMIGO EL TECLADO QUE, CUANDO LO TOCABAN, SUS TECLAS SE PONÍAN COMO LOCAS A ESCRIBIR.
EL RATÓN PENSÓ: ¡TENGO QUE CONSEGUIR QUE NUESTRO ORDENADOR VUELVA A ESTAR ALEGRE!Y SIGUIÓ PENSANDO-...¡YA LO SÉ! VOY A PEDIRLE A LA TORRE QUE POR FAVOR SE ENCIENDA.
¡TOOOOORRE ENCIÉNDETEEEE! Y LA TORRE SE ENCENDIÓ.
¡PANTALLAAAAA ENCIENDETEEEE Y HAZ COSAS BONITAAAAS! Y LA PANTALLA SE ENCENDIÓ Y EMPEZÓ A MOSTRAR IMÁGENES INCREÍBLES. -¡BIEEEEEEEEN, BIEEEEEN!- DIJO EL RATÓN, MUY FELIZ.
EL TECLADO, AL OIR LAS VOCES DE SUS COMPAÑEROS, COMENZÓ A BAILAR. EN LA PANTALLA SE VEÍA DIFERENTES LETRAS Y NÚMEROS Y MUCHOS, MUCHOS COLORES Y MELODÍAS.
DE REPENTE, UNOS NIÑOS SE ACERCARON A LA SALA MUY SORPRENDIDOS: ¡QUÉ ORDENADOR MÁS CHUUUUULOOOOO!
EL RATÓN LES DIJO QUE SE ACERCARAN A JUGAR CON ÉL Y SUS AMIGOS. A PARTIR DE ESE DÍA, EL ORDENADOR DEJÓ DE ESTAR TRISTE.
Y TAMBIÉN JUGÓ CON SUS OTROS AMIGOS: • LOS ALTAVOCES: LA IMPRESORA: • EL MICRÓFONO: EL ESCÁNER: • AURICULARES:
Y COLORÍN, COLORADO... EL ORDENADOR YA ESTÁ FUNCIONANDO.