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” S O N A I C R A “M S O N I T A RG E N
SIETE ON LOS ARRERA S S E N QUIÉ S EN C . TRIOTA COMPA ONIZAR MARTE L O C A PAR Savio tian H. is r C r o P los discos de vinilo; y Felipe Campos Otamendi (31), técnico en calidad de alimentos del INTI, en Mar del Plata. “En mi círculo de amigos dicen que estoy loca”, admite Farjat. “Pero cuando hace 500 años Colón llegó a América, mucha gente pensaba que esa empresa de la conquista era una locura”, dice esta salteña de 40 años que practica parapente, ciclismo, tenis y squash, entre otras disciplinas. “El mundo va creciendo y hay dos alternativas: que la humanidad se reduzca de tamaño y adquiera verdadera conciencia del medio ambiente, o empezar a buscar nuevos horizontes”, añade. Es que de ninguna manera puede tomarse como una aventura. Sobre todo, si se tiene en cuenta que quienes vayan, ya no regresarán. “Es un auténtico viaje de ida”, describió en diálogo con distintos medios Campos Otamendi, el técnico del INTI, padre de un chico de 11. “Pero la vida misma es un viaje de ida. Todos en la familia me apoyan y están muy contentos. Seguro voy a extrañar, pero es una propuesta interesante y lo veo más como una oportunidad”. También profesor de yoga, Campos Otamendi asegura que, si es seleccionado, pedirá que lo dejen viajar con su ukelele. “Creo que para esta selección ellos hicieron más énfasis en la psicología del individuo que en las capacitaciones formales”, estima. El año que viene comenzará el entrenamiento con capacitación física, psicológica y académica. Poner a los candidatos a prueba simulando la vida en Marte será un proceso que demandará unos ocho años. Y los que viajen no encontrarán un paraíso, ni mucho menos. “Sé que es delicado, difícil”, admite Farjat. “Nada de diversión, trabajar de cero. No te estás yendo a Hawái, sino a un lugar hostil, muy frío. Hay que prepararse bastante para todo eso”. Con el agravante de que se van y no vuelven. “No soy una persona muy apegada a lo material, nada me ata a la Tierra más que los sentimientos. Es una encrucijada sentimental. Así que estar a millones de kilómetros es una decisión difícil”. Decisión que muchos decidieron tomar. Y que algunos, entre ellos un puñado de argentinos, no se resignan a que sea sólo un sueño. 64
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Mariana Farjat 40 años Encargada de ventas en un hotel. Ama los deportes de aventura.
Ricardo 55 años Profesor de ciencias, le encantan la historia y la astronomía.
Franco Ranzoni 26 años Hijo de diplomáticos, vivió en una decena de países.
Felipe Campos Otamendi 31 años Técnico del INTI, le gusta meditar, la sociología y la historia.
FOTOS : MARS - ONE
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A MARIANA Farjat le habría encantado ser astronauta. Desde chica le gustó indagar acerca de los planetas del Sistema Solar y se sintió atraída por las historias de ovnis. De haber nacido en Estado Unidos, dice, seguramente habría seguido una carrera relacionada con la astronáutica, algo que viviendo en Argentina ve casi tan lejos como la distancia que separa la Tierra de Marte. O no tanto. Porque Farjat es una de siete argentinos que están en carrera para convertirse en colonos del Planeta Rojo, como parte del proyecto Mars One que a principios de mayo hizo un nuevo corte de candidatos hasta dejar en 705 la lista inicial de más de 200.000 aspirantes. “Me enteré del proyecto por un amigo que sabía que me gustaba todo esto y me comentó”, le cuenta a Newsweek desde Salta, donde trabaja como encargada de ventas en un hotel. “Investigué un poquito para ver si me involucraba”. Y se involucró. Como otros 33 argentinos. Pasó la primera instancia de selección, que redujo drásticamente la nómina de aspirantes a 1.058. Esos candidatos debieron completar antes de marzo requisitos que incluían un certificado de salud de su médico y abrir al público su perfil solicitante en el sitio de Mars One. Así, a principios de mayo la organización seleccionó a los 705 finalistas, 418 hombres y 287 mujeres, que serán citados para entrevistas. Entre ellos hay 187 europeos, 136 asiáticos, 41 africanos, 28 de Oceanía y 313 del Continente Americano, incluyendo a siete de nacionalidad argentina: además de Mariana, están Franco Ranzoni (25), un hijo de diplomáticos que vive en Los Ángeles y cuya esfera de intereses abarca desde la historia hasta la exploración espacial; Julián, de 24 años, quien se declara fanático de Carl Sagan, la aviación y la arqueología; María Carla (37), una compositora e intérprete de tango que en 2008 se compró un lote en la Luna; Ricardo (55), un profesor de ciencias y miembro de Mensa, el club de personas con alto IQ; Marta Marina Boriosi (53), vigilante de seguridad y profesora de educación física radicada en Madrid; Francisco (33), quien vive en México desde los 2 años, trabaja en el área comercial de una fábrica de envases plásticos y se define como amante de la ciencia ficción, la astronomía, el alpinismo, el running, el fútbol y
Newsweek
03/06/2014 03:55:30 p.m.