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La religión redonda

3Los cientos de millones de fieles de la única religión politeísta con dioses tangibles que recrean milagros sobre un rectángulo de césped semana a semana, estamos en capilla en espera del acontecimiento supremo que cada cuatro años exige devoción total: la Copa del Mundo.






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ELECTORAL CIRO MURAYAMA

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os cientos de millones de fieles de la única religión politeísta con dioses tangibles que CIRO MURAYAMA recrean milagros sobre un rectángulo de ECONOMISTA, CONSEJERO DEL INSTITUTO NACIONALcésped ELECTORAL semana a semana, estamos en capilla en espera del acontecimiento supremo que cada cuatro años exige devoción total: la Copa del Mundo. os cientos de–ese millones Un Mundial de futbol evento de fieles de única con el que, de acuerdo con el la poeta Luis religión politeísta con Miguel Aguilar, debemos medir nuestro dioses tangibles que tiempo vital– genera ingentes cantidades recrean milagros de dinero en el orbe, multiplica sus soimábreconductos un rectángulo de genes por todos los de la revocésped semana aproduselución de las telecomunicaciones, ce adhesiones mana, masivas, afianzaen o lesiona estamos capiidentidades,llaesen motivo de del festejo o dueespera acontelo en los cinco continentes. Un Mundial cimiento supremo que cada cuatro años y sus resultados, suma, del no Mundo. son indifeexige devoción total:en la Copa rentes para losde estados ánimo colectiUn Mundial futbolde–ese evento vos en amplias franjas de la población con el que, de acuerdo con el poeta Luisde

Miguel Aguilar, debemos medir nuestro tiempo vital– genera ingentes cantidades de dinero en el orbe, multiplica sus imágenes por todos los conductos de la revolución de las telecomunicaciones, produce adhesiones masivas, afianza o lesiona identidades, es motivo de festejo o duelo en los cinco continentes. Un Mundial y sus resultados, en suma, no son indiferentes para los estados de ánimo colectivos en amplias franjas de la población de


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Domingo XX de XXXXX de 2018 >> REFORMA

las naciones en liza –e incluso de aquellas que por eliminación no participan–, mas me temo que los triunfos o fracasos futbolísticos de un país poco tienen que ver con la situación política del mismo ni influyen en resultado electoral alguno. Mi aseveración anterior no excluye que no existan casos, bien documentados, en los que el futbol ha intentado usarse como herramienta para ganar legitimidad política – al fin la idea de ofrecer circo a falta de pan es más vieja que el mismo balompié– o que el futbol no haya tenido en ciertos momentos alguna repercusión o significado político: desde ser pretexto para guerras, para partidos amistosos entre naciones o facciones enfrentadas bélicamente, para promover la interculturalidad –o en su opuesto, para dar rienda suelta a expresiones racistas y xenófobas–, ni implica que el mundo del futbol sea ajeno a los problemas que corroen a las sociedades de nuestro tiempo, como el poder corruptor del dinero. A continuación, ofrezco un puñado de recuentos futboleros inmersos en su respectivo entorno político para sostener mi hipótesis de que, por aficionados que seamos a la infelicidad (Rafael Pérez Gay, dixit) como seguidores de la Selección Nacional, ello poco tiene que ver con el sentido del sufragio. APERTURA DEMOCRÁTICA Y FRACASO FUTBOLÍSTICO

Casi una década después del 68, en 1977 había comenzado la reforma política que abrió las compuertas al torrente de cambios que terminó por desplazar el régimen de partido hegemónico que nació en la postrevolución mexicana. Antes, en 1976, un solo candidato registrado a la Presidencia se había hecho con el 100 por ciento de los votos válidos. El sistema electoral era ajeno a la política real: la unanimidad formal en las urnas contrastaba con la movilización sindical y social de aquellos convulsos 70, marcados también por la guerrilla y la guerra sucia (esa sí: las de desapariciones forzadas que, entre otros, denunció el colectivo Eureka). Mi primer Mundial, es decir, el primero que recuerdo, fue Argentina 1978. Uno de los mayores desencantos para la afición nacional. Si la idea era golear a Túnez, vencer a Polonia –así fuera por la mínima– y buscar el empate con Alemania, la realidad fue indiferente a tan optimista guión: caímos 3-1 con Túnez, 6-1 con Polonia y 6-0 con Alemania (en aquél célebre “¡empatamos Pilar!” del arquero Pedro Soto: en efecto, tres goles encajó Pilar Reyes en el primer tiempo y otros tantos el

1994 48.6% DE VOTOS

ERNESTO ZEDILLO

25.9%

DIEGO FERNÁNDEZ DE CEVALLOS

16.56% CUAUHTÉMOC CÁRDENAZ

propio Soto en la segunda mitad). México fue el lugar 16, de 16 participantes. El descalabro deportivo nada tenía que ver con el rumbo político del país. Si en esa época las elecciones no hacían mella al gobierno del hiperpresidencialismo, menos un fracaso futbolístico. Por cierto, de las elecciones intermedias de 1979, el PRI obtuvo el 74 por ciento de los asientos en la Cámara de Diputados. La historia del Mundial 78 que sí tiene miga política, sin embargo, se refiere a la selección Argentina, a la sazón campeona mundial. El país sudamericano era conducido a punta de bayoneta por la Junta Militar desde 1976. El campeonato Mundial de futbol ofreció una oportunidad al dictatorial gobierno para encontrar asideros de legitimidad. En la segunda fase, hubo dos grupos con cuatro equipos cada uno y quienes resultaran líderes disputarían la final. Argentina necesitaba derrotar por cuatro goles a Perú para clasificarse. En el libro Historias secretas de los mundiales (Ed. Capital intelectual, 2014, Buenos Aires), el periodista Alejandro Fabbri explica que antes del partido el dictador Videla, acompañado por el secretario de Estado estadounidense, Henry Kissinger, bajó al vestidor de la selección de Perú a cuyos integrantes hizo un llamado a la “unidad latinoamericana”, que “fue tomada como lo que era: una presión adicional a los que jugaban como visitantes para que no hicieran un buen partido”. El resultado fue: Argentina 6, Perú 0. Al pasar de los años, varios jugadores peruanos aceptaron haber recibido dinero a cambio de dejarse ganar. El mediocampista Raúl Gorriti contó: “a mí se me acabó la vida, por unos cuantos dólares”. Fabbri también recuerda que esos días, el gobierno argentino entregó al de Perú a 13 políticos peruanos “con la condición de la victoria y clasificación argentina para la final. Todo en el marco del Plan Cóndor, de colaboración de las dictaduras latinoame-

ricanas. Estaba claro que la Dictadura quería ganar la Copa del Mundo como fuera, más allá de los méritos legítimos del equipo de Menotti”. CRISIS ECONÓMICA Y RECHIFLA EN EL ESTADIO AZTECA

Vendría luego en México la elección de 1982, año del Mundial de España. Nuestro equipo cayó en el premundial de Honduras en 1981, por lo que la representación de la Concacaf la encabezaron El Salvador y Honduras. La crisis futbolística, la eliminación que impidió asistir al Mundial, que se celebró entre el 13 de junio y el 11 de julio, no se reflejó en las adhesiones al todavía partido hegemónico en la jornada electoral del 4 de julio: el candidato del PRI (también postulado por el PPS y el PARM), Miguel de la Madrid, obtuvo el 70.99 por ciento de los votos, seguido por Pablo Emilio Madero, del PAN, con 15.68 por ciento y por Arnoldo Martínez Verdugo, del PSUM, con 3.48 por ciento. Cuatro años después, México fue la sede del Mundial de 1986. El país acumulaba cuatro años de efectos de la crisis que erosionó uno de los pilares de la legitimidad política del régimen: el crecimiento económico que generaba expansión del empleo y mejoras en las condiciones de vida para capas importantes de la población, si bien la desigualdad y la pobreza siempre estuvieron presentes. A los rigores de la crisis, y del ajuste económico, se sumaron los devastadores saldos de los terremotos de septiembre de 1985 en la Ciudad de México. Acaso la primera manifestación masiva de repudio a un Presidente ocurrió en ese 1986, en el coloso de Santa Úrsula: en la ceremonia de inauguración de aquel Mundial, el hartazgo del respetable hacia el gobierno se manifestó con una sonora rechifla al primer mandatario, que con rostro estoico pasó el mal trago.

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A la Selección Nacional no lo fue mal en el 86: superó el cuarto partido con el célebre gol de media tijera de Manuel Negrete a Bulgaria y, al siguiente partido, la esperanza se perdió en Monterrey en tiros penales contra Alemania. El jolgorio futbolístico no se correspondía con el desánimo ante la marcha de la economía del país. Seguía emergiendo sin dique el reclamo democratizador y, una vez más, como hasta hoy, política y futbol corrían distantes. En 1988, ocurrieron las primeras elecciones presidenciales realmente competidas: con un sistema electoral desbordado por la pluralidad política, y con unas condiciones asimétricas entre el partido en el gobierno y la oposición, surgió el Frente Democrático Nacional. Según cifras oficiales: el candidato del PRI, Carlos Salinas de Gortari, obtuvo el 50.36 por ciento de los votos; Cuauhtémoc Cárdenas, por el Frente Democrático, el 31.12 por ciento, y Manuel Clouthier, del PAN, 17.07 por ciento.

ciento para Cuauhtémoc Cárdenas, del PRD. Luego, las elecciones intermedias de 1997 produjeron cambios profundos en el sistema político. El partido del Presidente perdió el control de la Cámara de Diputados y en la primera elección de Jefe de Gobierno del Distrito Federal la izquierda obtenía su primer triunfo en una entidad federativa. Vino el Mundial de Francia, en 1998. México volvió a superar la fase de grupos: ganó a Corea, empató con Bélgica y con Holanda. En el cuarto partido, comenzó venciendo a Alemania y al final perdió 2 a 1. Dos años después, las elecciones del año 2000 produjeron la primera alternancia en la Presidencia. Vicente Fox derrotaba al candidato del PRI, Francisco Labastida. México, a fuerza de votos, había trascendido el sistema de partido hegemónico para edificar un sistema plural de partidos. En el futbol, las cosas se mantenían básicamente igual: un equipo medio para superar la primera fase, y punto.

DE LOS CACHIRULES A LA ALTERNANCIA

EL BREVE SIGLO XXI

Al Mundial de Italia, en 1990, México no fue por una razón que aún causa vergüenza: por castigo al hacer fraude con la alineación de una selección menor que participó en un mundial juvenil. Los directivos de la Federación decidieron llevar a jugadores que excedían el límite de edad, para así tener ventajas ilegales e ilegítimas, y la trampa fue descubierta. Regresaríamos a una Copa del Mundo en Estados Unidos 1994. Un año difícil para México: inició con la irrupción zapatista el 1 de enero y en marzo fue asesinado Luis Donaldo Colosio, candidato del PRI a la Presidencia de la República. Fue necesaria una reforma electoral en pleno proceso, que contó por primera vez con el respaldo de las tres principales fuerzas políticas del país, para encauzar por una vía legal y pacífica la disputa por el poder. El Mundial transcurrió entre junio y julio. México empezó perdiendo con Noruega pero ganó a Irlanda y empató con Italia. En la segunda fase volvería a caer en penalties, ahora con Bulgaria. El quinto partido como local seguía inalcanzable. Que el voto se respetara era una realidad. Las elecciones fueron el 21 de agosto de 1994 y transcurrieron sin sobresaltos y con el reconocimiento de las distintas fuerzas a las cifras emanadas de las urnas: 48.69 por ciento para Ernesto Zedillo del PRI; 25.92 por ciento para Diego Fernández de Cevallos, del PAN, y 16.56 por

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Se han jugado cuatro copas del mundo después del 2000. En todas, México ha sido eliminado en el cuarto partido. En Corea-Japón, 2002, se perdió, dolorosamente,

2006 36.8% DE VOTOS

FELIPE CALDERÓN

35.9% ANDRÉS MANUEL LÓPEZ OBRADOR

22%

ROBERTO MADRAZO

contra Estados Unidos. En Alemania 2006, el mejor gol del torneo nos lo hizo Maxi Rodríguez, de Argentina, para dar la vuelta al marcador. En Sudáfrica 2010, de nuevo Argentina nos dejó en el camino, con un 3-1. En 2014, en el Mundial de Brasil, después de ir ganando a Holanda, la naranja mecánica remontó para enviar a nuestro seleccionado de vuelta a casa. En medio, en 2012, se produjo la segunda alternancia en la Presidencia de la República. Una vez más la desconexión entre política y futbol: no hay causalidad entre una y otro, ni viceversa. En 2018, coinciden elecciones y Mundial. Mientras el futbol sigue siendo el deporte más popular en la sociedad mexicana, no hay fuerza política que pueda presumir tener más seguidores que detractores. En estos comicios, dudo que haya coalición, partido político o candidato que se beneficie o se vea afectado por lo que hagan los jugadores de la Selección Mexicana en Rusia. Pero no faltarán análisis que busquen revelarnos cómo la suerte del seleccionado en sus tres partidos en junio va a influir en las urnas el 1 de julio, pues la especulación es otro gran deporte nacional. Qué remedio. Ciro Murayama es autor del libro La economía del futbol (Cal y arena, 2014).


MISCELÁNEA UNA SEGUNDA MIRADA

Escaños reservados Ex gobernadores, ex candidatos, ex funcionarios federales y ex líderes de partidos tienen un lugar (casi) asegurado en el Senado.

EX GOBERNADORES Mayoría Relativa José Reyes Baeza Fernando Moreno Peña Manuel Andrade Lista nacional Miguel Ángel Mancera Rafael Moreno Valle Eruviel Ávila Ricardo Monreal

Miguel Ángel Osorio Chong (SEGOB) Germán Martínez Cázares (SFP) PRI PRI PRI PAN PAN PRI Morena

Chihuahua Colima Tabasco CDMX Puebla Edomex Zacatecas

EX CANDIDATOS A GOBERNADOR Mayoría Relativa Guillermo Anaya Armando Guadiana Delfina Gómez Juan Zepeda Salomón Jara Rafael Flores Mendoza Alejandro González Yáñez Higinio Martínez Miranda Félix Salgado Miguel Ángel Navarro

PAN Morena Morena PRD Morena PRD PT Morena Morena PRD

Coahuila Coahuila Edomex Edomex Oaxaca Zacatecas Durango Edomex Guerrero Nayarit

Lista Nacional Josefina Vázquez Mota

PAN

Edomex

EX SECRETARIOS DE ESTADO Mayoría Relativa Jorge Carlos Ramírez Marín (SEDATU)

PRI

Yucatán

PRI Morena

EX FUNCIONARIOS FEDERALES Mayoría Relativa Lorena Martínez (Profeco) Nuvia Mayorga (CDI) Héctor P. Ramírez (Liconsa) Mario Zamora (Fin. Rural) Patricia Flores Elizondo (Oficina de la Presidencia) Lista Nacional Alejandra Lagunes (Estrategia digital, Presidencia)

PRI PRI PRI PRI

Ags. Hidalgo Oaxaca Sinaloa

PAN

Durango

PVEM

EX DIRIGENTES DE PARTIDO Mayoría Relativa Gustavo Madero Martí Batres Beatriz Mojica César Camacho Guadalupe Acosta Naranjo Lista Nacional Damián Zepeda Cecilia Romero Beatriz Paredes Jesús Zambrano Alberto Anaya Patricia Mercado Dante Delgado

PAN Morena PRD PRI PRD

Chih. CDMX Guerrero Edomex Nayarit PAN PAN PRI PRD PT PSD MC

Lista Nacional Claudia Ruiz Massieu (SRE) PRI MAYO 2018

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