Lugares para conocer y sentir mejor Teror
SENTIR LA NATURALEZA.
Hay en Teror parajes de especial encanto paisajístico, especialmente por su vegetación y relieve. Entre ellos es de destacar la Finca de Osorio -quizás la más conocida- y el espacio protegido de Pino Santo, además del Lomo de Las Julianas, en San Isidro, el Lomo Gallego, en Arbejales, la Hoya Alta, visible en la trasera de la Basílica con su «Cruz del Siglo», y barrancos como el de Madrelagua, el Barranco del Pino o el Barranco de Molineta. En la zona de Ojero, nos encontramos con una de las formaciones geológicas más curiosas, donde La Agujerada ofrece un toque de distinción al relieve montañoso de la zona.
LUGARES LLENOS DE SILENCIO. Si buscamos lugares
para disfrutar del silencio, en Teror encontraremos varios rincones y edificaciones con mucha historia, vinculadas al espíritu de religiosidad que desprende Teror. El barrio de San Isidro, junto a Arbejales, cuenta con un hermoso casco histórico impregnado de silencio, en el que se encuentra la ermita del siglo XVII, junto al camino real, rodeada de un paisaje de especial encanto. La ermita de un solo cuerpo posee un importante patrimonio artístico, tanto en su retablo mayor presidido por la imagen de San Isidro como en sus otras imágenes de santos y el altar de azulejos. En la actualidad
la ermita es propiedad particular y para visitarla hay que contactar con la Oficina de Turismo (turismo@ teror.es). La ermita de La Peña, en El Palmar, donde se venera desde el siglo XVI la imagen de Ntra. Sra. de Las Nieves, es otro de los lugares a destacar. Y si el visitante desea conocer otras edificaciones religiosas, también puede acercarse a la iglesia del Sagrado Corazón de Jesús, en Arbejales, rodeada de un bello paisaje montañoso; o a los monasterios de las Dominicas, con una espectacular arquitectura y jardines, que dispone de la Casa de la Espiritualidad ‘Scala Coeli’, un centro para la reflexión; o el
monasterio del Císter, al que es más difícil acceder para su visita, al tratarse de un convento de clausura.
GUSTO POR LAS COSAS DE LA TIERRA. El entorno de la Basílica
del Pino se transforma cada domingo con la presencia del Mercadillo de Teror, en un espacio para encontrar las cosas de la tierra, productos cultivados en la isla, artículos artesanales, el típico pan con chorizo, quesos de Gran Canaria, los dulces, …Comprar en el Mercadillo dominical y en los comercios de la Zona Comercial Abierta de Teror es todo un placer para el gusto. A ello se une la excelente gastronomía en los locales d erestauración,