LIBRO MITOS, LEYENDAS Y MENTIRAS DE LA H. MATAMOROS LEYENDAS DE MATAMOROS
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Entrando en materia y para mayor conocimiento e inteligencia de mis lectores, es importante explicar el significado de LA LEYENDA: Sus orígenes son cristianos; los frailes la utilizaban para narrar la vida de un santo o de un mártir y era leída en los servicios religiosos o durante las sobremesas del pasado. Sin embargo, con el transcurso del tiempo la leyenda, como concepto, tomó otro giro, pues al añadírsele motivos de mitología y al popularizarse se convirtió en el relato folclórico de sucesos reales o fantásticos. Por lo tanto, ahora la leyenda es una narración basada en hechos supuestos que incluye una mezcla de elementos tradicionales y dramáticos para hablar sobre una persona, un lugar específico o algún incidente ocurrido en un lugar determinado, pero que son aceptados como reales por narradores y escuchas. Lo interesante de la leyenda es que en ocasiones se da una singular combinación de hechos reales y de ficción, cuyo punto de partida muchas veces suele ser una anécdota o una situación históricamente verídica. Cuando la leyenda es creada y con el tiempo se consolida en el folclor de un pueblo, éste la adopta como suya y por eso se le considera como patrimonio popular, pues va estrechamente vinculada a un pueblo concreto, a un país o a una religión. Sin embargo, la leyenda también puede ser considerada como patrimonio de la humanidad cuando narra sucesos comunes a todas o a un buen número de culturas. Tradicionalmente, y dentro de su estilo narrativo muy particular, la leyenda es ubicada en un lugar específico y en una época concreta y, por lo general, parte de hechos reales aunque estén idealizados o dramatizados. La leyenda se diferencia de la historia propiamente dicha tanto por el énfasis de la narración como por su propósito, que algunas veces es de tipo didáctico o nacionalista. Asimismo, la leyenda suele versar sobre un héroe humano – conocido como héroe cultural– o un pueblo. Las leyendas incluidas en este libro forman parte importante de la cultura matamorense. Se han transmitido de generación en generación, y con frecuencia experimentan supresiones, añadidos o modificaciones, porque contienen con mayor o menor proporción elementos imaginativos y que generalmente quieren hacerse pasar por verdaderas o basadas en la verdad, o ligada en todo caso a un elemento de la realidad.
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LIBRO MITOS, LEYENDAS Y MENTIRAS DE LA H. MATAMOROS Leyenda 2.37 LOS TUNELES DE MATAMOROS Documentada por el Ing. Manuel Humberto González Ramos Cronista de la Ciudad
Arraigada en la cultura popular de los heroicos matamorenses, esta leyenda la publiqué por primera vez en el año del 2001 como resultado de la búsqueda de los famosos túneles. Mi investigación me condujo a varios lugares: al sótano del Teatro de la Reforma, a la bóveda de Bancomer, a la cripta del templo de Nuestro Sagrado Corazón de Jesús, en el edificio Rubiano resultó ser una antigua noria soterrada, en el edificio Yturria unos ladinos veracruzanos creyéndose dueños del lugar me impidieron el acceso; la entrada al sótano de la casa Galván Malo está tapiada, en el Casino Matamorense no encontré nada. Pura decepción para los que todavía creen en ellos. Y dice así: como en toda región, toda cultura, toda civilización, se tejen leyendas durante el desarrollo y crecimiento de la Ciudad, historias que se cuentan de boca en boca, generación tras generación, historias que no son verdad obligada, pero que son creídas por quienes las cuentan y quienes las escuchan. Los túneles, leyenda mil veces susurrada a los ingenuos boquiabiertos, que al cautivar su imaginación son convencidos de su antigua existencia. Con vehemencia se les dice que pasadizos subterráneos comunicaban al fortín Casamata con otros edificios o lugares de la ciudad. ¿Con que propósito?
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Se presume que hubo varios túneles: el primero de ellos desde la Casamata hasta la parroquia de Nuestra Señora del Refugio y de ahí a las Casas Consistoriales (Presidencia Municipal). Un remanente de éste fue un sótano en la plaza de Hidalgo, que se utilizó para resguardar el armamento y munición de la policía, el cual fue soterrado en 1969 cuando se relocalizaron los monumentos del cura Miguel Hidalgo y de Benito Juárez. Este largo pasadizo daba un rodeo al estero de Los Cuarteles, y cuentan que una “entrada” estaba en el patio del Colegio Modelo, la cual dicen fue descubierta durante la construcción de este edificio en 1923. Algunos afirman que era tan amplia como para permitir que entrase un jinete en su cabalgadura. El Colegio Modelo con una capacidad para 800 alumnos se construyó a un costo de $90,000.00 pesos. El tractor marca Caterpillar se utilizó para nivelar las calles de los alrededores.
Se dice que el segundo iba desde la misma Casamata al fortín llamado del Estero, cerca del río Bravo. Algunos aseveran que lo cruzaba permitiendo pasar la frontera sin ser descubierto por la "migra".
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El tercero partía del edificio Galván Malo, pasaba por debajo del escenario del Teatro de la Reforma, seguía hasta la bodega el Hotel Matamoros (esquina de las calles Real y de Matamoros) hasta llegar al Parían o plaza del mercado, y según afirman algunos fantasiosos hasta la plaza de los Arrieros.
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Para tratar de esclarecer ésta leyenda, es necesario mencionar algunas de las posibles circunstancias en las que pudo fundamentarse, considerando que los únicos materiales disponibles para la construcción de su bóveda y paredes, eran los ladrillos y madera: 1.- Las personas partidarias de los "túneles" dicen haberlos visto y jugado en ellos cuando niños Que algunas personas los han explorado con ayuda de antorchas, pero que el acre humo los ha hecho salir casi asfixiados. Otros han oído mencionar de su existencia de terceros, pero sin evidencia tangible, testimonios verbales sin prueba alguna. 2.- Muchas casas antiguas como la Yturria y la Cross, tienen sótanos cuyo fresco interior ayudaba a conservar ciertos víveres. Con algo de fantasía se puede pensar que daban acceso a los túneles. 3.- Antes de la introducción del agua potable por tubería y del servicio de drenaje público, la mayoría de las casas y edificios públicos contaban con norias o cisternas, y con excusados (retretes) de "pozo". Al quedar abandonadas estas excavaciones, soterradas, y olvidada su localización, la siguiente generación de matamorenses al "descubrirlas" años más tarde, fácilmente podían tomarlas como la "entrada a un túnel". 4.- La Casamata que por definición es una pequeña fortificación o reducto abovedado para instalar artillería, que puede tener un abrigo subterráneo, tiene una parte subterránea entre los cimientos del ala norte del edificio, con accesos al este y al oeste. En la pared norte de este pequeño sótano, hay un arco (como una especie de entrada), cuyo vano esta tapiado con ladrillos. 5.- El fortín Paredes tenía un pasadizo cubierto que lo comunicaba con la orilla del río. Los que se niegan a creer en la existencia de los legendarios túneles, impugnan con los siguientes hechos: 1.- No hay en los documentos resguardados en el archivo histórico municipal una sola referencia de los "túneles". No existen planos o dibujos con su traza. 2.- Por su importancia, Matamoros ha sido siempre una ciudad que ha sido muy fotografiada (hay dibujos y litografías desde 1828, fotografías desde 7
1865), pero no hay una sola imagen de un "túnel" que alguien haya mostrado jamás, como evidencia de su existencia 3.- El tipo de terreno es del tipo aluvión sedimentario, no hay estrato rocoso, que facilitara la construcción de los túneles. 4.- El alto nivel freático que hay en Matamoros, o sea el de las aguas subterráneas, ocasionaría que los túneles estuviesen siempre inundados, inutilizándolos para el supuesto propósito para el que fueron construidos. Hay que considerar que el túnel de la Casamata a la Plaza de Hidalgo, debió haber pasado cerca del Estero de los Cuarteles, haciendo casi imposible su construcción y su mantenimiento demasiado costoso. 5.- En las excavaciones que se han hecho por toda la ciudad para introducir las redes de agua potable y de drenaje, o para construir las cimentaciones de los edificios, no se han encontrado indicios de los túneles. En búsqueda de los Túneles. En el año de 1990 durante la administración del Sr. Jorge Cárdenas, se nombró Director de Casamata al periodista Víctor Manuel Rodríguez Escalera. Él estaba convencido de la existencia de los túneles, por lo porfiadamente logró convencer a las autoridades para hacer varias zanjas de exploración al noroeste de la garita, a una distancia de tres a diez metros para evitar dañar al fortín. No hubo túnel que encontrar, pero como premio a su tenacidad se logró fracturar al vetusto edificio, tal como se muestra en la fotografía. El herrumbroso fragmento de revólver no valió la pena el esfuerzo. Ésta "valiosa" pieza estuvo en exhibición por varios años.
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En abril y mayo año del año 2004, de la recién establecida delegación del INAH en Tamaulipas enviaron de ciudad Victoria a un arqueólogo con el propósito de probar en forma definitiva la existencia de los túneles. En la esquina noreste, esta vez junto a la pared del torreón que soporta la garita, se hizo una excavación rectangular de aproximadamente tres metros de longitud y de una profundidad de dos.
En esta "exploración" tampoco se encontraron los túneles, únicamente viejos trozos de tuberías, recuerdo del tiempo cuando el fortín fue utilizado como almacén de la Junta de Aguas y Drenaje de Matamoros. Con certeza se puede afirmar que la cantina “El Túnel”, del Sr. Chavarría, ubicada frente al mercado de Juárez, es el único que ha existido. Moraleja: “Las palabras son enanas; los ejemplos son gigantes”
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IN OMNIBUS VERITAS
Los libros de mi Autoría se pueden consultar en las bibliotecas de la H. Matamoros: Eliseo Paredes Manzano, Juan B. Tijerina y en la del Museo Casamata. En el Archivo Municipal de Reynosa. En Cd. Victoria en la Biblioteca Estatal Ing. Marte R. Gómez, en el Museo Regional de Historia de Tamaulipas, y en el Archivo General e Histórico del Estado de Tamaulipas. Se pueden adquirir en las librerías Nilo, Proceso y en el Museo Casamata. Correos electrónicos manuelhumbertogonzalezramos@yahoo.com.mx elcronistadematamoros@hotmail.com Tel. Cel. 8681206978. Facebook: Manuel Humberto González Ramos Vera Historia de la H. Matamoros, Tam Issuu: http://issuu.com/cronistadematamoros/docs
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