LIBRO MITOS, LEYENDAS Y MENTIRAS DE LA H. MATAMOROS LEYENDAS DE MATAMOROS
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Entrando en materia y para mayor conocimiento e inteligencia de mis lectores, es importante explicar el significado de LA LEYENDA: Sus orígenes son cristianos; los frailes la utilizaban para narrar la vida de un santo o de un mártir y era leída en los servicios religiosos o durante las sobremesas del pasado. Sin embargo, con el transcurso del tiempo la leyenda, como concepto, tomó otro giro, pues al añadírsele motivos de mitología y al popularizarse se convirtió en el relato folclórico de sucesos reales o fantásticos. Por lo tanto, ahora la leyenda es una narración basada en hechos supuestos que incluye una mezcla de elementos tradicionales y dramáticos para hablar sobre una persona, un lugar específico o algún incidente ocurrido en un lugar determinado, pero que son aceptados como reales por narradores y escuchas. Lo interesante de la leyenda es que en ocasiones se da una singular combinación de hechos reales y de ficción, cuyo punto de partida muchas veces suele ser una anécdota o una situación históricamente verídica. Cuando la leyenda es creada y con el tiempo se consolida en el folclor de un pueblo, éste la adopta como suya y por eso se le considera como patrimonio popular, pues va estrechamente vinculada a un pueblo concreto, a un país o a una religión. Sin embargo, la leyenda también puede ser considerada como patrimonio de la humanidad cuando narra sucesos comunes a todas o a un buen número de culturas. Tradicionalmente, y dentro de su estilo narrativo muy particular, la leyenda es ubicada en un lugar específico y en una época concreta y, por lo general, parte de hechos reales aunque estén idealizados o dramatizados. La leyenda se diferencia de la historia propiamente dicha tanto por el énfasis de la narración como por su propósito, que algunas veces es de tipo didáctico o nacionalista. Asimismo, la leyenda suele versar sobre un héroe humano – conocido como héroe cultural– o un pueblo. Las leyendas incluidas en este libro forman parte importante de la cultura matamorense. Se han transmitido de generación en generación, y con frecuencia experimentan supresiones, añadidos o modificaciones, porque contienen con mayor o menor proporción elementos imaginativos y que generalmente quieren hacerse pasar por verdaderas o basadas en la verdad, o ligada en todo caso a un elemento de la realidad.
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LIBRO MITOS, LEYENDAS Y MENTIRAS DE LA H. MATAMOROS Hace ya algunos años Jesús Hernández Vega hizo circular la leyenda TEMPLOS MATAMORENSES DEDICADOS AL DIOS BACO, que en mi libro consigno como la número 2.41 Advertencia: BACO (en griego antiguo Βάκχος Bakkhos) era el dios patrón de la agricultura y el teatro. y el frenesí que inducía, bakcheia. En la mitología clásica, es conocido también como Dioniso (en griego antiguo Διώνυσος Diônysos o Διόνυσος ) es el dios de la vendimia y el vino, inspirador de la locura ritual y el éxtasis.
Y dice así, los hubo en todas las épocas y de toda laya, los quita sed, los que surten a los siempre insatisfechos bebedores del buen vino. Pero en tiempos más recientes nos es grato recordar a los mucho muy famosos por diversas circunstancias. No se nos puede olvidar el Houston Bar, contiguo al puente nuevo, atendido personalmente por el distinguido caballero Ed Bermea, La clientela en su mayoría la formaban gentes del lado norteamericano.
Este bar estuvo ubicado en el poblado de Santa Cruz al norte de la H. Matamoros, Tam.
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De ninguna manera podemos dejar en el tintero el Drive Inn establecido en 1916, en su misma ubicaci贸n actual, teniendo una arquitectura tipo colonial, hoy luce un local propio de lo m谩s moderno, pero sigue recibiendo hasta ahora a personas del Valle de Texas y es punto de reuni贸n de nuestras gentes, en fin es toda una leyenda.
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El Bolo de Oro, lugar de reunión de la aristocracia, fue punto de reunión de comerciantes y empresario, regenteado por distinguidos miembros de familia de gran lustre. La Cantina de Gasper, anexo al desaparecido Hotel Villa Española frente a la plaza principal, fue el lugar de tradición, de reunión de lo más granado de la ciudad, pero también de la clase media que jacarandosa y alegre le quitaba por momentos la seriedad del elitismo, sin llegar a lo vulgar El Cod, ubicado en Sexta y González, lado norte, fue bebedero de la gente empleada en la industria algodonera, su propietario instaló en su negocio las mejores radiolas del momento y desde luego con buena música, siendo bastante concurrido. Por el rumbo de la plaza de la Capilla existió un bar con el nombre de Van y Ven, su propietario fue un gachupín que por su manera de caminar un tanto irregular, la gente así bautizó su negocio , porque no sabían sí va o viene; ahí la pelusa se daba gusto, inclusive en el techo de madera se podían observar los miles de balazos que la raza disparaba con sus pistolas o las recortadas 12, que para cuando la policía hacia acto de presencia, no aparecía ninguna, pues el gachupín tenía lugar especial para esconderlas. Otra cantina famosa fue la de Don Ramoncito, personaje legendario del Matamoros bohemio, él aseguraba que colaboraba con las esposas o amantes de sus clientes pues al servir la del estribo, daba la última copa misteriosa para llegar a la casa del bebedor de acuerdo a las cuadras de distancia de su hogar. Nunca fue posible darnos cuenta de sus mixturas para hacer esos milagros, Tenía una lista de todos sus clientes figurando nombre, ubicación de su residencia, la distancia entre su negocio y su casa medida en cuadras, por ejemplo si el adicto a Baco tenía su lugar de residencia a cinco cuadras, le servía una copa para aguantar verticalmente exactamente cinco bloques, al 6
tocar la puerta o abrir con su llave, ahí azotaba de ancho, no podía dar un paso más, por lo tanto Don Ramoncito sabía que las damas no sufrirían al ver que sus maridos recalcitrantes se volvían a salir a parrandear. Otro lugar muy popular por cierto, fue el Oasis del Sediento, bebedero que funcionó entre Puertas Verdes y el Alto del Burro, todos los rancheros de ese rumbo, y del rumbo del mar, antes de entrar a la ciudad hombres de a caballo llegaban a saciar su sed o su frío, ya sea con una helada cerveza o con un fuerte trago para el frío. En ese lugar nunca se escenificó una trifulca, era territorio neutral, las riñas con regla de caballerosidad se montaron en el Alto del Burro, los sones de los tamborileros fueron su especialidad ¿Quién no recuerda a Lencho el tamborilero? Y nada menos que Pancho tamboras quienes siempre estuvieron disputándose la supremacía local y no podemos dejar de pasar el recordar al magnífico coplero de su inseparable guitarra, alegraba los ambientes, nos referimos al mocho González, amo y señor de todas las tabernas matamorenses, quien por muchos años deleitó los oídos de la sociedad piadosa de Baco.
Otros famosos manantiales etílicos fueron: Las Dos Repúblicas, ubicado en la esquina de las calles Matamoros y Novena, lugar de tronío, de señorío, atendido por un madrileño de pura cepa. 7
¡Ah! Y el Texas Bar, en la esquina de las calles de general Manuel González y Quinta, lugar también de tradición internacional, cuyas cavas generosas vertieron sus licores de exquisito bouquet, dándole sabor a la vida social de esta bella ciudad. ¡SALUD!
En contra esquina del Texas Bar estuvo el no menos famoso
Moraleja: “Baco, Venus y Tabaco, ponen al hombre flaco" 8
IN OMNIBUS VERITAS
Los libros de mi Autoría se pueden consultar en las bibliotecas de la H. Matamoros: Eliseo Paredes Manzano, Juan B. Tijerina y en la del Museo Casamata. En el Archivo Municipal de Reynosa. En Cd. Victoria en la Biblioteca Estatal Ing. Marte R. Gómez, en el Museo Regional de Historia de Tamaulipas, y en el Archivo General e Histórico del Estado de Tamaulipas. Se pueden adquirir en las librerías Nilo, Proceso y en el Museo Casamata. Correos electrónicos manuelhumbertogonzalezramos@yahoo.com.mx elcronistadematamoros@hotmail.com Tel. Cel. 8681206978. Facebook: Manuel Humberto González Ramos Vera Historia de la H. Matamoros, Tam Issuu: http://issuu.com/cronistadematamoros/docs 9