CONTRABANDO DE COMBUSTIBLE EN LA GUAJIRA: COMPLICIDAD FRONTERIZA
Contexto El contrabando de combustible desde Venezuela representa una problemática de primer nivel para el Estado colombiano, ya que constituye un modo de subsistencia de muchas familias en La Guajira. Pero también para el sostenimiento de grupos armados o bandas criminales mediante dinámicas ilegales asociadas con el clientelismo, la corrupción, el desplazamiento forzado, la extorsión, el lavado de activos y la evasión de impuestos.
Origen
Luego, en los noventa, llegaron las Autodefensas Unidas de Colombia (AUC) al mando de Rodrigo Tovar Pupo alias ‘Jorge 40’, quien asumió el dominio total del contrabando de combustible en el departamento a través del denominado Frente de Contrainsurgencia Wayúu.
Entre enero y agosto de 2019 se han incautado 12 168 galones de combustible, el 37 % del "cupo de contrabando" entre los municipios fronterizos del lado venezolano.
Con la captura de ‘Kiko’ Gómez exgobernador de La Guajira y ‘Marquitos’, exparamilitar, además del proceso de paz que desmovilizó a parte de las FARC-EP (2016), el contrabando pasó a manos del Cartel del Contrabando: un conglomerado de diferentes bandas criminales, cuyo modus operandi radica en el envío de carros por trochas con una carga promedio de 47 galones (3,7 litros por galón).
La probelmática como negocio en La Guajira inicia en la década de los ochenta cuando familias wayúu como los Uriana, González o Epiayú acarreaban combustible en pequeña escala desde estaciones de servicio venezolanas.
Movidas de poder y estructuras mafiosas
Pimpinero en Rioacha, como el eslabón de la jerarquía
Instituciones y organizaciones como la Policía Fiscal y Aduanera (Polfa), DIAN, el Ministerio de Trabajo, la Cancillería de la República (entre otros) sumán esfuerzos para desarrollar proyectos productivos y formales que garanticen un cambio en la vida de los pimpineros o distribuidores minoritarios. Muestra de ello fue la primera reunión histórica realizada el 30 de julio del año en curso, en el corregimiento de Cuestecitas.
Esto estaría generando el ingreso de 117.500 galones (434.750 litros) diarios a La Guajira.
¿Cómo es la vuelta?
Estaciones nacionales de Venezuela que, según datos de 2018, vende la gasolina a un precio subsidiado de 10 bolívares soberanos (300 pesos colombianos) por litro aproximadamente, todo esto, con un acceso máximo de 200 litros (52,84 galones) por cada vehículo registrado con el carné de la patria, lo que es particularmente atractivo para el contrabandista debido a su margen de beneficio, pues en Colombia la gasolina de contrabando es comercializada en un precio que oscila entre los 2 030 - 10 154 pesos colombianos por cada 5 litros.
Un negocio
Geografía transporte
El combustible se mueve ilegalmente de la siguiente manera: 1. Vehículos con una capacidad de hasta 120 litros llevan pasajeros desde Maracaibo (Venezuela) hasta Maicao (Colombia)y una vez en su destino, descargan el excedente y vuelven con las reservas justas por otro viaje.
Ganancia
2. Vehículos pesados con una capacidad de hasta 4.000 litros.
El precio depende del tipo de comercialización: si es mayorista es introducido a las estaciones colombianas con la táctica del ‘carrusel’ (utilizar la misma documentación legal como artículo importado para varios cargamentos ilegales) y vendido al precio oficial del mercado, que actualmente es $7.000 pesos por galón; si es minorista, lo más probable es que el combustible sea conducido a Cuestecitas (La Guajira), uno de los mayores centros de acopio, desde donde se distribuye a las ciudades donde es vendido entre los $0,80 y $3,7 centavos de dólar. En ganancias netas, el contrabando de gasolina produce hasta $243.000 dólares al día y $7 millones de dólares al mes, y más de $360.000 dólares al día y $11 millones de dólares al mes si es comercializada fuera de La Guajira.