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Informe Técnico
EFECTOS
Ingeniería y Construcción:
Proyecto de ley que regula la construcción de estas centrales es abordado por actores del sector, quienes concuerdan en que algunos de sus alcances tienen una serie de exigencias que dificultaría el desarrollo de estas instalaciones.
Torre y palas eólicas de proyecto instalado en Chile.
SEGÚN LAS CIFRAS del Coordinador Eléctrico Nacional, entre Arica y Chiloé actualmente existen 45 parques eólicos en operaciones, por un total de 3.168 MW de capacidad instalada, registrando una creciente participación en la generación bruta dentro del sistema eléctrico local, que en 2021 cerró con casi un 10%.
En el corto plazo, los datos de la Comisión Nacional de Energía (CNE) muestran que en construcción se encuentran 696 MW de estas centrales generadoras, mientras que con aprobación ambiental se anota un total de 13.241 MW, repartido en diferentes proyectos.
Proyecto de ley
Sin embargo, entre los desarrolladores de este tipo de iniciativas existe preocupación por el proyecto de ley que se tramita en el Congreso, el cual busca regular “la construcción de complejos de aerogeneradores y modifica la ley sobre bases generales del medio ambiente”, pues señalan que tal iniciativa eventualmente afectaría la construcción y desarrollo de estas instalaciones.
Y es que el proyecto también cubre aspectos técnicos como la sombra parpadeante –shadow flicker en inglés- o el ruido de los aerogeneradores, especificando que en el primer punto “la sombra proyectada por los aerogeneradores sobre las viviendas aledañas al complejo eólico no podrá ser mayor a treinta horas mensuales o treinta minutos diarios”.
Es así como los especialistas adelantan a ELECTRICIDAD que la zona sur del sistema eléctrico se vería afectada a causa de estas indicaciones, especialmente en la operación de los parques eólicos instalados entre 2014 y 2021 en las regiones de Biobío, La Araucanía y Los Lagos, añadiendo que esto también tendría un impacto en el contexto de descarbonización que se impulsa en el país.
Es más, algunos son más categóricos con la situación y afirman que si se aprobase este proyecto, tal como está, se disminuyen las oportunidades para que la energía eólica sea alternativa tecnológica re-
Foto: Gentileza 350 Renewables .
Patricia Darez, directora ejecutiva de 350renewables. novable para avanzar hacia la carbono neutralidad.
Patricia Darez, directora ejecutiva de 350renewables, recuerda que en Chile “se han construido 4 GW de proyectos eólicos, desde el 2001, pero la gran mayoría se ha instalado en los últimos 5 a 8 años. Es decir, que es una industria que ha crecido (y para poder descarbonizar debe seguir creciendo) de forma exponencial”.
Sumado a lo anterior, la ejecutiva, quien también es vicepresidenta de la Asociación Chilena de Energías Renovables y Almacenamiento (Acera A.G.) afirma que el proyecto de ley “no está intentando regular la construcción de parques eólicos, sino el desarrollo de estos. Es decir, no se trata de disminuir los impactos que puedan surgir durante la fase más corta del ciclo de vida de una central eólica, la construcción,
Clemente Pérez, socio en Guerrero Olivos y director en Sustentable S.A.:“ Se hace casi imposible el desarrollo de proyectos eólicos en regiones pobladas, pues propone distanciamientos muy exigentes, reduciendo enormemente la disponibilidad de terrenos donde se pueda desarrollar un parque eólico, pues no sólo exige mucha distancia de cualquier lugar poblado, sino también una fuerte distancia entre un aerogenerador y otro, sin mucha lógica”.
Foto: Gentileza GES .
Marta Alonso, gerente general de South America en Global Energy Services. la cual sin duda puede generar ciertos desafíos tanto para las comunidades afectadas como los titulares de los Proyectos”.
“En su formato actual el Proyecto de Ley no está técnicamente bien planteado ya que contiene algunas medidas para regular el desarrollo de parques eólicos que son bastante arbitrarias y ponen trabas al desarrollo sin que necesariamente se mitiguen los efectos”, precisa Darez.
Por su parte, Clemente Pérez, socio en Guerrero Olivos y director en Sustentable S.A., sostiene que la iniciativa legal “hace casi imposible el desarrollo de proyectos eólicos en regiones pobladas, pues propone distanciamientos muy exigentes, reduciendo enormemente la disponibilidad de terrenos donde se pueda desarrollar un parque eólico, pues
no sólo exige mucha distancia de cualquier lugar poblado, sino también una fuerte distancia entre un aerogenerador y otro, sin mucha lógica”.
El abogado, también asegura que la propuesta de ley de establecer una vida útil de 15 años “es totalmente ridículo, ya que los proyectos suelen tener una vida útil sobre 25 años. También establece indemnizaciones en efectivo a las comunidades cercanas, lo que da espacio a la proliferación de reclamos en forma interesada. Y por último, tampoco queda claro desde cuándo empieza a regir, en caso de ser aprobado, complicando el desarrollo actual de varios proyectos muy necesarios para contar con una matriz más renovable. En suma, si se aprobase este proyecto tal cual, podemos empezar a despedirnos de la energía eólica como alternativa tecnológica renovable”.
A juicio de Marta Alonso, gerente general de South America en GES (Global Energy Services), el proyecto también busca “reducir la distancia entre aerogeneradores a 400 metros, y mitigar el efecto sombra parpadeante también conocido como shadow flicker”, advirtiendo que ambas medidas aumentarán la superficie necesaria para el desarrollo de un parque eólico debido al incremento de la longitud de los viales, así como la opción de respetar una zona llamada de seguridad desde el aerogenerador hasta el deslinde.
“El principal impacto se producirá en algunas partidas de las obras civiles como por ejemplo el movimiento de tierras, las cunetas y los drenajes, y también en aquellas otras relativas a la ejecución de las obras de media tensión. Habrá que considerar un incremento de precio asociado al aumento de unidades de materiales como el árido, el geotextil y la bischofita cuando sea de aplicación en la partida de obras civiles y de fibra óptica y cable en la partida de red de media tensión”, asegura.
Desafíos
Si bien Patricia Darez, “en Alemania se publicó, hace aproximadamente 20 años, una Guía Técnica para gestionar este fenómeno, según la cual se debe limitar la exposición al efecto de los receptores
Marta Alonso, gerente general de South America en Global Energy Services: “El principal impacto se producirá en algunas partidas de las obras civiles como por ejemplo el movimiento de tierras, las cunetas y los drenajes, y también en aquellas otras relativas a la ejecución de las obras de media tensión. Habrá que considerar un incremento de precio asociado al aumento de unidades de materiales como el árido, el geotextil y la bischofita cuando sea de aplicación en la partida de obras civiles y de fibra óptica y cable en la partida de red de media tensión”.
Gentileza Guerrero Olivos .
Clemente Pérez, socio en Guerrero Olivos y director en Sustentable S.A. sensibles, bajo las condiciones reales de operación, a 8 horas anuales y 30 minutos diarios”.
“Para esto existen sistemas de control operacional automático de los aerogeneradores que monitorean, en tiempo real, las condiciones astronómicas, meteorológicas y operacionales (debe haber sol, debe haber viento, el aerogenerador debe estar operativo y geométricamente la sombra debe caer en el receptor). Si se da la situación en la que un receptor va a superar los límites impuestos, el aerogenerador que causa el efecto se apaga automáticamente durante el periodo de tiempo dentro del cual la sombra del rotor pudiera afectar a este receptor. De los proyectos operacionales que existen en Chile actualmente ninguno cuenta con este tipo de sistema”, precisa.
“El SEA simplemente debe solicitar que los desarrolladores de proyectos implementen este sistema para otorgar una Resolución de Calificación Ambiental (RCA) y de esta forma nunca se deberían superan los límites impuestos. Cabe destacar que el apagar ocasionalmente algún aerogenerador no conlleva a perdidas de energía que sean prohibitivas y el fenómeno es predecible por lo que se puede planificar dentro de la operación del sistema”, agrega.
La ejecutiva señala que el ruido de los aerogeneradores es complejo, por lo que se requiere mirar de forma crítica el marco normativo actual.
“Si revisamos las RCAs y el Sistema Nacional de Información de Fiscalización Ambiental (SNIFA) de los proyectos en operación, casi el 60% de los
proyectos operacionales en Biobío, La Araucanía y Los Lagos debe realizar algún tipo de campaña de monitoreo de ruido según su RCA. En el 40% de estos proyectos se ha detectado algún incumplimiento de la norma de ruido vigente en los últimos años. La mitad de los proyectos con incumplimientos han debido implementar medidas de mitigación adicionales (como bordes aserrados en las palas o modos restringidos de operación). La otra mitad de los proyectos sigue con procesos de investigación y mitigación” señala la ejecutiva.
Otro de los desafíos que plantea la propuesta regulatoria son los costos. Clemente Pérez explica: “Más que encarecimiento, en la práctica estaremos hablando de algo que será inviable. Los bancos no van a estar dispuestos a financiar proyectos con vida útil de sólo 15 años, y con tantas exigencias de compensaciones. Se debe considerar que los factores de planta de los proyectos eólicos son cercanos a un 30%, o sea, más de las dos terceras partes del día no están generando. Son demasiadas restricciones que se imponen sobre esta tecnología. Dejará de ser competitiva”, aseveró. mismo sentido que “existe un número importante de empresas en Chile que ya diseñan sus parques eólicos considerando una distancia entre turbinas superior a 400 metros y, por tanto, no debería existir un incremento de precio por este concepto, pero una modificación en la distancia a viviendas sí afectará”.
Palas eólicas dispuestas para su instalación en proyecto emplazado en la zona norte del sistema eléctrico.
“En cuanto al factor que incrementaría el precio está directamente relacionado con la evolución de la inflación en Chile que impacta en los precios de combustible y otros, y también en aquellas partidas que son commodities como por ejemplo el cable, cuya fluctuación depende directamente de la volatilidad y posible inestabilidad de los mercados a nivel global”, complementa la ejecutiva.
A modo de conclusión, señala que también “podría incrementarse el Capex para el inversionista disminuyendo su rentabilidad, y desde el punto de vista constructivo podría extenderse el cronograma favoreciendo el empleo en la zona y articulando planes de fortalecimiento del tejido de pequeñas y medianas empresas locales tan importantes en la ejecución de un proyecto de esta envergadura”.