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Vuelo en la espiral alta de un eco. (Carne, médula y alma) Lumbre en lo oscuro.

Poesía...

Rosario F. Cartes

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abla la llama con su luz tartamuda de un trasiego de lenguas babélicas donde el pájaro es sombra y la sombra, proclama de la luz.

La diáspora se inicia con el vuelo; ahí la maravilla de la búsqueda.

¿En qué fragua? ¿En qué duda? ¿En qué [derrota?

¿En qué amplitud se moldea el ardido del inquieto?

Oculto tras mis ganas llevo un verbo a nadie le interesa, solo a mí; a nadie pertenezco, más que al fuego.

Aborojuán

Ati, que hasta mí llegaste, hoy te brindo esta poesía, porque siento todavía el amor que me inspiraste. Una semilla guardaste dentro de mi corazón; estando el fruto en sazón, brota cada primavera, como si esa vida fuera de mi vivir la razón.

Quiero Volar A

ndo entre bosques de hombres y [cementos, las luminarias no iluminan, vago derramándome por las aceras con ojos de cristal, brillantes y ciegos.

Vivo mi muerte constante, día a día, en una espera infinita con el alma deshidratada y el corazón preso de soledad en un apagado fuego.

Ruego a esta espiral eterna que vomite esta rueda sin retorno quiero volar…

Concha Vilches

Relecturas H

ay libros que querría no haberlos ya leído, Empezarlos de nuevo y hallar lo que ya sé que vive dentro de ellos. ¡Quién pudiera ignorarlos sabiendo lo que encierran! Añoranza imposible, belleza conocida que oculta te quisiera.

Francisco Núñez Roldán

Eparar

los bultos que se mueven suenan, gestos y convicciones estatutos o leyes. Hojas hojas llenas de hormigas elocuentes. Sonidos, separar cortinas de sonidos lluvia de sonidos y ecos. Separar nostalgias de sonidos y las sombras tanto pasado acumulándose jugando a desaparecer a no haber sido azahar mano tendida dedos banderas, cuántas señales esparcidas y tener que llorar por tanta muerte por manteles tendidos cada día como sábanas.

La lógica del desamparo que ocupa tanto sitio [en las butacas con sus huellas dormidas o muertas, otra vez a la nada y al espacio callado e infinito todo encima de cada hombro cada noche cada no de vacíos para esconderse y besar silencios para perderse de una vez por todas.

Cuando la luz tronche de verde el viejo rubor del invierno, los árboles abran sus venas al canto loco de los pájaros y el poniente traiga la brisa que zumbaba entre mis manos, volverá el carbón de la ausencia, el batir de los naranjos, la silueta de mi padre andando entre cirios blancos y bajo el mudo antifaz de la noche, volverán a sonreírme sus tiernos ojos de esparto. Mariló

Trini Pérez Ballester

La calle Adriano y el Paseo Colón no son paralelas, son...convergentes.

Pero cuando llega la primavera, se convierten en un aluvión que lleva...un río de gente.

Juan Masero Flores

La Eternidad Sin Ti I

maginé ser volcán en una noche de cuento y al ocultarse la luna la realidad me advirtió...

Eres sustrato de lava en una montaña fría donde los vientos recogen los besos que no existieron.

Rarezas Del Alma

almera tosca, violeta al fondo, te dejas ver. cunar

cicatrices con ternura.

Ante la impaciencia malva de la profecía se acaban las pruebas del olvido, sucumbidas yacen las palabras. En mis manos acojo sus letras, flores marchitas que, indolentes, desordenan sus pétalos. Con ellos, rehacer tu nombre intento, sin romper tu carne imposible como las cosas inefables. Sin manchar tu corazón impasible como el aroma dulzón de las acacias. Como amanecer en la alcoba donde la lluvia duerme intacta.

Soñaba… Al fin sentía que dormido vivía. Y sin dejar de soñar, sin querer… despertaba.

Mientras más imaginaba, el sueño claro volvía. Y mi cuerpo se dolía de no soñar como esperaba. Confundí la noche y el día.

¿Dónde el sueño y la vigilia estaban?

Perdí la razón en porfías, y soñé que al despertar soñaba.

Manuel Rámila

Este zaquizamí dedicado al “Jardín de la Caridad”, fue elaborado por pintores y poetas, enamorados de esta tierra como ascuas. Su arquitecto fue Paco Díaz Cebador. Con la ayuda irrenunciable de Ana Llorca y Pilar Alcalá, y bajo los auspicios prescindibles de Manuel Rámila.

Se terminó de imprimir el 30 de mayo de 2017, festividad de San Fernando, Rey de Sevilla.

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