La Perspectiva de Género: Una Mirada Multidisciplinaria

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UNIVERSIDAD NACIONAL AUTÓNOMA DE MÉXICO FACULTADDE ESTUDIOS SUPERIORESIZTACALA

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Perspectiva ,

de

genero UNA VISiÓN MULTlDlSCIPlINARIA


UNIVERSIDAD NACIONAL AUTÓNOMA DE MÉXICO .:

FACULTAD DE ESTUDIOS SUPERIORES IZTACALA CARRERA DE PSICOLOGÍA

Perspectiva DR. JOSÉ NARRO ROBLES RECTOR

~ti '.~c.4 , !

,

de

genero UNA VISiÓN MULTIDISCIPLlNARIA

DR. SERGIO CHÁZARO OLVERA DIRECTOR

DR. CLAUDIO ANTONIO CARPIO RAMíREZ SECRETARIO GENERAL ACADÉMICO

BIÓL. ÁNGEL MORÁN SILVA

COORDINADORAS

SECRETARIO DE DESARROLLO Y RELACIONES INSTITUCIONALES

MARíA ANTONIETA DORANTESGÓMEZ

ORA, LAURA EVELIA TORRES VELÁZQUEZ

LAURA EVELlATORRESVELÁZQUEZ

SECRETARIA DE PLANEACIÓN y CUERPOS COLEGIADOS

LCELlSEO VENEGAS ALVARADO

AUTORAS

SECRETARIO ADMINISTRATIVO

ALBA LUZ ROBLESMENDOZA DRA. MA. ALEJANDRA SALGUERO VELÁZQUEZ JEFA DE LA CARRERA DE PSICOLOGíA

Me JOSÉ JAIME ÁVILA VALDIVIESO COORDINADOR

EDITORIAL

MARGARITA MARTíNEZ RIVERA ROSA MARíA SEGURAGONZÁLEZ MA. TERESAHURTADO DE MENDOZA ZABALGOITIA GUILLERMINA ARENAS MONTAÑO MARíA ANTONIETA DORANTESGÓMEZ LAURA EVELlATORRESVELÁZQUEZ

Responsable de la edición MC José Jaime Ávila Valdivieso FESIztacala, UNAM


Perspectiva ,

de

genero UNAVISiÓN MUlTIOISCIPLlNARIA Primera edición: 5 de diciembre de 2011 TÓNOMA D.R. © 2011 UNIVERSIDAD NACIONAL,AU Ciudad Universitaria, Delegación Coyoacan,

DE MÉXICO

_____

AU_TORAS

I

CP 04510, México, Distrito Federal. FACULTAD DE ESTUDIOS SUPERIORES IZTACALA Av, de los Barrios N.' 1, Los Reye~ Iztacala, Tlalnepantla, CP 54090, Estado de México, México. ISBN: 978-607-02-2686-1 .. tata I o parcia. I por cualquier medio Prohibida la raproducción , . .I sin la autorización escrita del titular de los derechos patrtmorua es.

Esta obra fue dictaminada por: ., t 'a en psicoterapia y doctora en Antropología, OLIVA LÓPEZSÁNCHEZ, Licenciatura en PSlcologla, males ~ TC d finitiva adscrita a Posgrado e Investie especia. I'd I a d en Estudios de la Mujer. Profesora Titu ar . 'n FESI, UNAM ' Miembro del PIEGI. gaclo, . , . Iogta, ' UNAM y posdoctorado en estudios detiGe, ' Z GUZMÁN Doctora en SOCIO . MARIA LUCERO JIMENE • . S. I (UCES) Buenos Aires, Argentina. Inves ga. d C' . Empresariales y OCia es . Id nero por la Universidad e rencias d C' 'as Políticas y Sociales Centro Regiona e . .. t el Posgra o en lenCI " d I dora Titular B Definltlva Te. Docen e en . d en el Programa de Equidad y Genero e Investigaciones Multidisciplinarias CRIM, UNAM. lnvestiga ora

MA. ANTONIETA DORANTES GÓMEZ Licenciada en Psicología, Facultad de Estudios Superiores Iztacala (FESI), UNAM; maestra y doctora en Filosofía, Facultad de Filosofía y Letras, UNAM_ Profesora Titular A TC definitiva de la carrera de Psicología, FES!. LAURA EVELlA TORRES VELÁZQUEZ Licenciada en Psicología, maestra en Modificación de Conducta, FESI; doctora en Sociología, Facultad de Ciencias Políticas y Sociales, UNAM. Profesora Titular C TC definitiva adscrita a la División de Investigación y Posgrado, FESI,UNAM.

CRIM y docencia en el Posgrado, UNAM. .' . lo ía or el Instituto Tecnológico y de Estudios SuPATRICIA A. GARCíA GUEVARA. ucenciada en PSICO ~ P Sociología de la Educación otorgada por el perlores de Occidentes (ITESO), Guadalajara. Maefstrla enl astigadora Titular del Departamento de Es, . id d de Londres Pro esora- nv , G' Instituto de Educacion, Universí a '·'d d d G adalajara Doctorado en Educacion y enero tudios en Educación (DEEDUC-CUCSH), Universl a e U . otorgado por la Universidad South Bank, Londres. APOYO TÉCNICO MC JOSÉJAIME ÁVILA VALDIVIESO . Cuidado de la edición y corrección de estilo MARCOS REYNOSO FLORES Corrección de estilo DG ELlHÚ GAMBOA MIJANGOS DG CARLOS DOMíNGUEZ MORENO Formación editorial y preliminares DG JOSÉ ALFREDO HIDALGO ESCOBEDO Diseño de portada o ectos ara la Innovación y Mejoramiento de la EnseñanLibro financiado por el Programa de Apoyo a Pr y p lA dé mico (DGAPA) "Fortalecimiento de la ., G al de Asuntos del Persona ca , za (PAPIME) de la Dirección ener , . d 'ero" N.' PE300409, formación de estudiantes de Psicologia en perspectiva e gen IMPRESO Y HECHO EN MÉXICO

ALBA LUZ ROBLES MENDOZA Licenciada en Psicología, maestra en Modificación de Conducta, FESI; doctora en Ciencias Penales y Política Criminal, Instituto Nacional de Ciencias Penales. Profesora de Asignatura B definitiva de la carrera de Psicología, FESI,UNAM. MARGARITA MARTíNEZ RIVERA Licenciada en Psicología y maestra en Modificación de Conducta, FES!. Profesora Asignatura A de la carrera de Psicología, FESI,UNAM. ROSA MARíA SEGURA GONZÁLEZ Licenciada en Psicología, Benemérita Universidad Autónoma de Puebla (BUAP). Estudios de Antropología Social en la Escuela de Antropología Social de la BUAP. Profesora Asignatura A definitiva de la carrera de Psicología, FESI,UNAM.


, GUILLERMINA

ARENAS MONTAÑO

Nacional de Enfermería y Obstetricia, UNAM. Médica Cirujana, FESI. Maestra en Enseñanza Superior. Especialista en Sociología de la Educación Superior. Profesora Asociada C TC definitiva de la carrera de Enfermería, FESI. Licenciada

en Enfermería,

Escuela

,

INDICE MA. TERESAHURTADO DE MENDOZA ZABALGOITIA Médica Cirujana, FESI. Especialista en Psicoterapia Sexual, AMSSAC. Maestra en Sexualidad Humana por HISPANAP. Profesora Asociada B de la carrera de Médico Cirujano, FESI.

PRÓLOGO PREFACIO INTRODUCCiÓN

V 1

CAPfTULO 1 TEORfAS FEMINISTAS FEMINISMO MARXISTA Feminismo ortodoxo 1

1,

Marxismo

radical

FEMINISMO DE LA IGUALDAD FEMINISMO DE LA DIFERENCIA DEL FEMINISMO A LOS ESTUDIOS DE GÉNERO

5 7 8 11 14 18 23

CAPfTULO 2 FAMILIA, IDENTIDAD Y GÉNERO

29

CONSTRUCCIÓN IDENTlTARIA DE GÉNERO: FEMINIDAD, MASCULINIDAD RELACIONES DE GÉNERO EN LAS FAMILIAS

31 37

CAMBIOS DEMOGRÁFICOS y SOCIOCULTURALES EN LAS FAMILIAS MEXICANAS IMPORTANCIA DE LA JEFATURA EN LOS HOGARES HACIA LA RESIGNIFICACIÓN DE LAS RELACIONES FAMILIARES

43 46 51


r RETOS CONCEPTUALES Y APLICADOS PARA EL ESTUDIO DE LAS FAMILIAS

54

CAPíTULO 3 EDUCACiÓN V GÉNERO

61

ANTECEDENTES DE LA EDUCACIÓN EN MÉXICO

66

Educación prehispánica

66

Educación en la Colonia

69

Educación en el México Independiente

70

Educación en el México actual

71

LA ESCUELA COMO REPRODUCTORA DE lOS PATRONES PATRIARCALES Abordaje desde una perspectiva de género Discriminación de género en la escuela HACIA UNA NUEVA EDUCACiÓN

72 73 74

79

CAPíTULO 4 SEXUALIDAD V GÉNERO

89

LA SEXUALIDAD HUMANA COMO SISTEMA

91

PERSPECTIVA DE GÉNERO Y SEXUALIDAD

93

GÉNERO

95

REPRODUCCIÓN

100

EROTISMO

103

VíNCULO

108

MORAL SEXUAL Y EQUIDAD DE GÉNERO

110

CAPíTULO 5 PODER V GÉNERO

119

CONCEPTO DE PODER

121

PODER y CUERPO

123

EXPRESIONES SOCIALES DEL PODER

125

RELACiÓN DIÁDICA: VIOLENCIA Y PODER

126

MASCULINIDAD Y PODER

128

VIOLENCIA y GÉNERO

132

EMPODERAMIENTO

FEMENINO VERSUS PODER FEMENINO

PRÓLOGO

134

H

oy día, el término "género" se ha introducido en los discursos académicos y políticos, lo cual implica una oportunidad, a la v~z q,u,euna responsabilidad histórica, de difundir el origen, Significado y usos de esta categoría, así como los malos entendidos -en algunos casos-, que han abonado a su vacío conceptual. Éste es el objetivo que se lee entre las líneas de este libro escrito por colegas feministas de la Facultad de Estudios Superioras Iztacala, resultado de un esfuerzo compartido por esclarecer la importancia teórica y política de mirar a través de una lente feminista y con perspectiva de género, tanto nuestros objetos de estudio, como nuestros compromisos vitales. La difusión de la perspectiva de género para el trabajo académico estudiantil es una tarea imprescindible de la que este libro forma parte, como medio escrito que apoyará la formación de un alumnado que habrá de formar parte del relevo generacional ferninista que requiere nuestra Universidad y nuestro país, Las y los estudiantes que cursan sus carreras profesionales o posgrados en diferentes disciplinas, a quienes este libro va dirigido, tienen cada vez una mirada más crítica cuyo mantenimiento es nuestra responsabilidad; también quienes ya hemos pasado por las bancas universitarias y ahora nos dedicamos a la investigación y la docencia debemos intentar responder a sus dudas y debatir escuchando esa mente crítica estudiantil.


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Perspectiva de género

Uno de los cuestionamientos frecuentes de este alumnado tiene que ver con la postura que se debiera asumir al incorporar una mirada de género a su trabajo académico y profesional: ¿Qué significa trabajar desde una "perspectiva de género"? ¿Se puede trabajar desde esta perspectiva sin un marco teórico feminista? ¿Estamos hablando de una teoría, una nueva disciplina, un marco conceptual o una ideología? y lo más práctico: ¿Qué se tiene que hacer? En primer término, habría que mirar alrededor, al entorno de cada quién, leer los diarios, escuchar los discursos en los medios; leer los productos y disertaciones de la ciencia "normal"; mirar al interior de nuestras propias familias, pero de una manera diferente, identificando las desigualdades que en ese momento se mostrarán por sí solas: una vez hecho a un lado el velo de la neutralidad y la objetividad, será mucho más claro observar a las tantas mujeres que siguen viviendo en situación de violencia, de pobreza, de oportunidades limitadas y de minoría de edad, sólo por formar esa parte de la humanidad que nació con órganos sexuales femeninos. Todo lo anterior es indispensable, pues no será posible introducir un discurso de género feminista si antes no tenemos: consciencia del hecho de que las mujeres están menos y peor valoradas que,los hombres y el deseo por cambiar esta realidad. Sin embargo, la pertinencia y modo de introducir la perspectiva de género en la investigación y en la práctica profesional requiere no sólo de buenas voluntades y éticas compartidas, se necesita entrar a una parte de la historia de la investigación científica, reconociendo su naturaleza social al igual que la de los productos científicos "normales". Senecesita fundamentar una crítica epistemológica y una reflexión metodológica que lleven a plantear cierto tipo de problemas de cierto modo y no de otro, y asimismo hacer explícita una postura ética que al trabajar desde este enfoque esté siempre presente, anteponiéndose a cualquier otra directriz proveniente de la construcción científica tradicional. Más allá de eso, en la investigación, al igual que en la acción directa sobre la realidad, es insuficiente hacer mención del género si antes no se define a qué nos referimos con ello y si antes no se aclara hacia dentro y hacia fuera (hacia una misma y hacia los otros) que dicha categoría adquiere sentido únicamente a través de una mirada feminista y que sin ésta se habla de otra cosa; se requiere pues

Prólogo

I

111

rastrear también sus orígenes, mismos que se ubican en el feminismo llamado de la segunda ola o feminismo de los años 60. . Quiero decir que la palabra "género", sin historia, sin teoría que Incluya ~na refle~!ón crítica sobre los modos de conocer, del qué, del para que y los qUlene~del conocimiento, es una palabra hueca, una palabra ador~o que no Impacta nuestra investigación en ningún sentido. A~,UIno pretendo, más que señalar la importancia de pensar el gen,ero d,esdeel sentido expuesto, además de enfatizar la importancia d,e libr~s que, como éste, lo promueven, cuya particular importancia estriba en la forma didáctica en que se presenta cada uno de los textos que lo conforman, lo que la hace por demás asequible a la lectura de las nuevas generaciones críticas en formación de las que antes hablé. Incl~s~ tiene e! tino de iniciar con un capítulo que otorga el contexto teórico y políttco para la comprensión del resto dado que s~ conce~tra en la compleja tarea de sintetizar de maner; clara y concls~ las.dlferentes teorías feministas que se han ido generando ,en la hIStO~I~,de esta tradición interdisciplinaria, lo que evita la e~Ulv~ca supostcron de que el feminismo es una sola forma de discurn~, mlra~ y actuar en torno a las desíguaidades, bajo la excusa de las ~Iferenclas sexual~s. Un corolario que desprendo de este primer C~~ltulo es el de la busqueda de relaciones igualitarias, aún en condlclone~ de dif~~encia sexual, de la categoría de género, a partir de las teorías feministas, para su construcción y uso en la academia en el ~ntendido de que una vez alcanzadas las condiciones de igualdad, y solo hasta entonces, esta categoría podrá caer en desuso. Posterior a este capítulo, el texto lleva hacia las diferentes aristas ana.l~ticasque tiene la categoría de género, desde la familia, la educacl.~n, la sexualidad y el poder, que son expuestas en toda su complejidad pero con la sencillez requerida por las características de la presente obra. 11'

S:gura de que su lectura irá acompañada de la asesoría comprometida de .cadauna de las autoras, académicas especialistas en el te~a,. ~ste libro puede ser un rico antecedente o primicia para la publicación d~ ~uchos más, precisamente dirigidos a un público no e,xperto pero ,av,ldode trabajar desde el ámbito académico y profesional ~ara eliminar la opresión y desigualdad hacia las mujeres. ,. Finalmente, c~ncluyo ~eiterando el carácter académico y político de la perspectiva de genero, sin lo cual se corre el riesgo de


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Perspectiva de género

continuar legitimando las desigualdades sociales,. en ,~n intento p~r mantener la imagen de neutralidad y objetividad científica que el mismo Kuhn y otras autoras han deconstruido. En este cas~, com~ en muchos otros, defender la neutralidad es defender la indlf~ren~la ello, en estos tiempos no nos lo podemos permitir como universítanos.

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,

Octubre, 2010

PREFACIO

OLlVIA TENA GUERRERO

Coordinadora del Programa de Investigación Feminista CEI/CH, UNAM

L

a presente obra tiene como finalidad apoyar los cursos del Diplomado de Estudios de Género al proporcionar al estudiante los contenidos que precisa conocer y estudiar para cada uno de los módulos, a fin de que cuente con los conocimientos y las herramientas teóricas necesarias sobre la perspectiva de género, que le permitan ser agente de cambio en el proceso educativo de las generaciones jóvenes. El capítulo 1 presenta diferentes teorías feministas, tales como el feminismo marxista, el feminismo de la igualdad, el feminismo de la diferencia y un apartado que nos lleva del feminismo a los estudios de género; su objetivo es identificar las diferentes plataformas teóricas feministas que han impactado el desarrollo de los estudios de género, para lo cual las autoras nos presentan los planteamientos y presupuestos de cada una de las teorías. En el capítulo 2, se presenta el estudio de la familia y la identidad masculina y femenina desde los estudios de género. El objetivo es el diseño y realización de una investigación de familia a partir de la identificación, análisis y evaluación de los aspectos que conforman los procesos de identidad y de las relaciones familiares desde una perspectiva de género. La autora presenta algunos de los conceptos que han venido surgiendo en la investigación de la familia desde la perspectiva de género, como los procesos de formación familiar, la dinámica familiar, la división de trabajo y la toma de decisiones.


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VI

I

Perspectiva de género

En el capítulo 3, se analiza el papel que I~ e?~cación ha ~e~ido en la reproducción de condiciones, lugares, significados y practicas asociadas con la diferencia sexual; para su logro, I~s autoras Ino~ presentan los antecedentes de la educación en México de~de a epoca prehispánica hasta la actualidad, para después ir enfatizando al~unos aspectos que nos muestran la reproducción de patro~es patr~rcales que se favorecen en la escuela, para I~evarnos hacia una e ucación diferente basada en la equidad de genero. El capítulo'4 nos lleva al terreno de la sexualidad desde la f.~rs~ ectiva de género; en él se integran los c~n~eptos d~ la se~ua I a _ ~umana desde el ámbito biológico, psicológico y social, a fin dedlle . lento y análisis de los derechos sexuales y repro ucI gar a conocrrru bl 1'· d la sexualidad tivos ue han transformado el concepto 10 ogrco e , huma~a. En este capítulo las autoras muestran los concep~os ~pra~~ ticas de la sexualidad humana matizadas por la perspectiva e, g nero, a fin de poder entender en una dimensión completa esta area en la vida. dif tes acepcioFinalmente, en el capítulo S se muestran~ I ere~ ., nes del concepto del poder, sus expresiones sociales, la lnterrelaclón entre las expresiones de violencia y el ejercicio del poder, las ~xpresiones de la violencia de género en I~ sOci~da~ clont:~~~~~~:ad~ el empoderamiento femenino. Se analizan, es e a p . ti énero algunos de los conceptos que se han utilizado como JU~ ~cante~ para perpetuar la diferencia sexual, diferencia que ha sido entendida

como desigualdad.

INTRODUCCiÓN

A

partir de la década de los 70, dentro de las ciencias sociales se comenzaron a desarrollar investigaciones enmarcadas dentro de la perspectiva de género. Herederas de las teorías feministas, estas investigaciones incorporaron la categoría de género y se enfocaron a estudiar el carácter construido de las relaciones entre hombres y mujeres. Las aportaciones a partir de incorporar la perspectiva de género han permitido esclarecer hasta dónde ciertas características y conductas al respecto tienen un carácter social. La perspectiva de género posibilita investigar el carácter social de los roles sexuales que marcan la diferente participación de las personas en las instituciones económicas, sociales, políticas y religiosas. El género es un concepto construido socialmente a partir del conjunto de ideas, creencias y representaciones que cada cultura ha generado con base en las diferencias sexuales entre las personas. Esta asignación de atributos, lugares y prácticas ha sido la justificación de las desigualdades, marginación y subordinación que se ejerce sobre las personas en función del sexo al que pertenecen. La perspectiva de género, al analizar el carácter cultural de las significaciones de la diferencia sexual, ha permitido identificar las prácticas, los repartos de privilegios, el establecimiento de jerarquías y la institución de sistemas de valores. Esta perspectiva se ha abocado a investigar los mecanismos a través de los cuales las diferencias sexuales se transforman en condiciones de discriminación, marginación y opresión. El cuestionamiento de


2

Perspectiva de género

estas condiciones ha permitido la elaboración de propuestas que favorezcan una equidad de género. El terreno de la investigación en las Ciencias Sociales y de la salud no ha estado exento de la influencia de la perspectiva de género, sus aportaciones han sido fructíferas en las diferentes áreas de intervención. En la constitución de nuevas condiciones de equidad de género, la investigación es un aspecto fundamental, dado que la incorporación de la perspectiva de género ha permitido: • Identificar las diferencias que la sociedad patriarcal establece entre los sexos. • Analizar los mecanismos a través de los cuales las diferencias entre los sexos se transforman en prácticas de discriminación, exclusión y marginación. • Generar propuestas que coadyuven al fortalecimiento de condiciones de equidad de género. La importancia de considerar la formación en perspectiva de género no radica solamente en la formación profesional de los y las estudiantes, sino que también tiene un impacto en su desarrollo académico dentro de la escuela. La necesidad de promover condiciones de equidad en la educación universitaria es un factor relevante, dado que repercutirá en la constitución de condiciones que promuevan la equidad de género. El estudio de la forma en que la escuela reproduce las condiciones de discriminación de género ha cobrado importancia a partir de las investigaciones surgidas desde la perspectiva de género. Dentro de la escuela existen muchas prácticas en las cuales las personas reciben un trato discriminatorio a partir del género al que pertenecen, esto en muchas ocasiones se justifica apelando a una naturaleza intrínseca de la diferencia sexual. El sistema social con sus prescripciones sobre lo que significa ser varón o mujer funciona también dentro de la escuela y es visto como parte natural de las relaciones entre los géneros. La perspectiva de género ubica estas condiciones como parte de un ejercicio de poder y plantea la posibilidad de construir espacios en los que se cuestionen estas prescripciones y se prepondere la equidad de género. Si se parte de la premisa de que estas condiciones tienen un origen social y no son intrínsecas al

Introducción

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sexode las perso~~s, es posible transformarlas. Un primer paso para esta transformación es la identificación de los mecanismos a través de los cuales operan. . El cam.po de investigación sobre la manera en que la escuela eJe~ceuna discriminación de género es un terreno fértil en virtud del reciente au~e que han tenido los estudios de género. La constitución de una te~na que dé cuenta de esta problemática es una necesidad actual en virtud de que no existen suficientes trabajos que la aborden. . Dentro de la escuela se instituyen prácticas y condiciones que Influyen de mane~aimportante en la construcción de identidades femeninas y masculinas; ahí, la instrucción no sólo incluye información s~,bret~mas .académicos, sino que también repercute en la formacl.o.nde Identida~es femeninas y masculinas que reproducen los significados y espacios que la sociedad asigna a las personas. la escuela r~pro~uce significaciones culturales del ser mujer o del. ser varón, s~tuaclonesque hacen pasar como naturales las condiciones diferenciales y discriminatorias en las que se desenvuelven las personas. Cuando se aborda el tema de la discriminación de género en la e~cuela, muc~os aut~res consideran como uno de los principales indlcador~s la diferencia en la matrícula de varones y mujeres. Entanto que el num~ro de mujeres que ingresan a la escuela se está increment~nd~, podna pensarse que esto implicaría que la discriminación está dlsmlnuyen~o. No obstante, aunque es importante el hecho de que u,nmayor num~ro de m~je~estenga acceso a la educación, esto por SIsolo no constltuye un indicador de cambio en las condiciones bajo las.cuale~ los educandos se forman en la escuela. Es menester que s~ Investigue dentro de la escuela los patrones de dominación de genero presentes en el ejercicio académico. Desde esta perspectiva el pro.blem~ ya no se reduce a investigar cuántos varones o mujeres estudian, sino a identificar cuáles son las condiciones de igualdad de opo~~unidades bajo las cuales se da su formación académica. La formación q~e los estudiantes reciben en la escuela reproduce, en m~chas ocasiones, las condiciones de discriminación y marginación ex!~ten~~sen la socie~ad, esto sucede a través de las prácticas, en la utiliza~IO~~ellenguaJe, en los privilegios y en la asignación de lugares y significados. Tanto a nivel del currículo formal como del oculto los y .Ias.~studiantes reciben una formación en la que se marca lo que significa pertenecer a un determinado género, en la que se


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Perspectiva de género

establece lo que está permitido para cada sexo,así como los espacios en los que pueden desenvolverse. La formación académica explícita (la que reciben en los contenidos curriculares) así como la implícita (la que reciben en las prácticas cotidianas, en el lenguaje que se utiliza, en los valores que se transmiten) por cuanto a género es un punto muy importante a considerar que marcará tanto el desarrollo personal como la inserción social de los estudiantes. En la escuela los y las estudiantes incorporan valores, significaciones y prácticas acerca de la diferencia sexual, aspectos que influyen en la conformación de su identidad de género. En la mayor parte de los casosla formación que reciben no cuestiona los estereotipos sexuales y las condiciones de discriminación y marginación de género. La educación como un agente transformador debe cuestionar prácticas discriminatorias de género que han limitado el desarrollo personal y académico de los y las alumnas. La perspectiva de género posibilita identificar condiciones discriminatorias, así como proponer acciones tendientes a fomentar una nueva cultura de equidad de género en las aulas.. Considerando la relevancia de la perspectiva de género en la formación de los estudiantes, se creó en la Facultad de Estudios Superiores Iztacala (FESI),a finales del 2003, el Programa Institucional de Estudios de Género (PIEG), el cual ha tenido como uno de sus objetivos el fortalecimiento de la enseñanza de la perspectiva de género a fin de promover condiciones de equidad, y surge como una instancia que fomenta el trabajo multidisciplinario, aspecto que se fortalece por el hecho de que los profesores del programa provienen de las carreras de Psicología, Enfermería, Biología, Medicina, Cirujano Dentista y Optometría, así como de la División de Investigación y Posgrado. Dentro de estos años de trabajo del PIEG,en la línea de docencia se ha implementado el Diplomado de Estudios de Género, que ha formado varias generaciones de participantes. Como resultado de los esfuerzos desarrollados por cuanto al diseño e implementación de este Diplomado de Estudios de género ha surgido el presente libro que constituye una guía introductoria a los temas abordados en este programa.

TEORíAS FEMINISTAS María Antonieta Dorantes Gómez Margarita Martínez Rivera Rosa María Segura González

OBJETIVO GENERAL dentificar las diferentes plataformas teóricas feministas que han impactado el desarrollo de los estudios de género.

I

OBJETIVOS PARTICULARES 1) Ubicar los planteamientos del feminismo marxista como antecedentes de la perspectiva de género. 2) Identificar los presupuestos teóricos a partir de los cuales se gestan las propuestas del feminismo de la igualdad. 3) Reconocer los presupuestos teóricos a partir de los cuales se gestan las propuestas del feminismo de la diferencia. 4) Tener claros los principios teóricos que sustentan los estudios de género. INTRODUCCiÓN Paracombatir el antisemitismono hacefalta serjudío, como para lucharcontra el racismono hacefalta ser negro. Lamentablemente,a vecespareceque paracombatir la discriminaciónde la mujer, hacefalta ser mujer. SOLEDAD GALLEGO-oiAZ


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Teorías feministas

Perspectiva de género

ha gestado una serie de propuestas teóricas que han abierto nuevos derr~teros en la investigación. Se ha cuestionado, inicialmente I~s paradigmas de explicación que se habían ofrecido en torno a I~ ~Iferencla sexual y posteriormente se han construido teorías alternativa~ ~cerca d; la diferencia sexual. En este esfuerzo, las pensadoras feministas, mas que buscar respuestas en la tradición, se han dedicado a ~esarrollar nuevas interpretaciones utilizando las herramientas ofrecidas por las diferentes concepciones filosóficas. Para efectos del presente trab.ajo identificamos las cuatro aproximaciones siguientes:

Uno de los fenómenos sociales más importantes del siglo pasado es sin lugar a dudas 'el surgimiento del movimiento feminista. Aunque desde los inicios de la historia las mujeres han cuestionado los sistemas patriarcales que pretendían mantenerlas marginadas, no es sino hasta entonces que el movimiento feminista comienza a consolidarse como una teoría y una práctica que tiene gran influencia en todos los ámbitos sociales. Dentro de los ámbitos académicos la teoría feminista comienza a cuestionar la dlscriminaclón que se ejerce sobre las mujeres en los diferentes espacios sociales. Al mismo tiempo que las teorías feministas identifican los espacios y las formas en los que se ejerce discriminación sobre las mujeres, también comienzan a proponer nuevas maneras de reivindicación social

a) Marxista b) De la igualdad e) De la diferencia d) Posestructuralista.

para las mujeres. Los esfuerzos que se han gestado dentro del pensamiento feminista han repercutido en el desarrollo de una serie de propuestas teóricas que han abierto nuevos derroteros en la investigación. Inicialmente estas teorizaciones surgieron en estrecha relación con los movimientos de militancia feminista, aunque posteriormente se separaron de esta esfera de acción, encontrando sus propios espacios en los claustros académicos. Las teorizaciones feministas parten de un punto clave: el reconocimiento de la diferencia sexual, como categoría de análisis. Esto representa un profundo cuestionamiento a los planteamientos que habían negado la diferencia sexual, planteando el estudio del"hombre" como una categoría que aglutinaría las experiencias de varones y mujeres. También significan un distanciamiento respecto de las posiciones que si bien habían reconocido a la diferencia sexual, consideraban a la experiencia masculina como parámetro de referencia ubicando a la experiencia femenina como una mera carencia. La teoría feminista no presenta sólo una vertiente, existen diferentes feminismos que surgen de diferentes plataformas filosóficas y políticas. El reconocimiento de esta diversidad pone de manifiesto la necesidad de recuperar estos discursos a fin de ubicar la manera en que constituyen un antecedente fundamental en el surgimiento de los estudios de género. Las teorías feministas representan un cuestiona miento desde diferentes frentes a las concepciones que han pretendido legitimar la discriminación hacia las mujeres. El pensamiento feminista

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FEMINISMO

MARXISTA

': ~ediados del siglo XIX se impone en el movimiento obrero el socialisrno de inspiración marxista, el cual según Varela (2005) e I . " . ' , s a prl~era. :eorla critica de la historia que analiza la dominación y subordinación entre las clases sociales. ~arx y E~ge~sdescriben la opresión de la mujer como una explotación econornrca, es menester precisar que para Marx en realidad la emancipación de las mujeres no le toma ni tiempo ni espacio relevante en su obra y es tan sólo un apéndice de la emancipación del proletariado. E.n 1884, Engels, en su obra El origen de la familia, la propieda~ privada y el ,Estado, señala que el origen de la sujeción de las mujeres no estarta en las causas biológicas, la capacidad reproductora o la c~nStituci?n física, sino en las causas sociales, en la aparición de la propiedad privada y la exclusión de las mujeres de la esfera de la Pro~ucción sociaL. En este sentido, la emancipación de las mujeres se daría al lograr su Independencia económica.

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. Engels en su análisis traza la historia de la mujer en función del or.lgen de la propiedad privada. Este autor comenta que el derrocamlent~ del derecho materno fue la gran derrota histórica del sexo fem~nlno en todo el mundo dado que el hombre empuñó también I~s rlen~as en la casa y la mujer se vio degradada y se convirtió en un Simple Instrumento de reproducción (Engels, 2008).


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Teoríasfeministas

Perspectiva de género

De acuerdo con esto, la familia patriarcal está fundada sobre la propiedad privada, la mujer es oprimida y el hombre reina como soberano; de acuerdo con esto, la propiedad privada, el matrimonio, la familia y el Estado fueron desde los inicios del capitalismo la base fundamental de la opresión femenina. Engels plantea que sólo se podrá reestablecer la igualdad cuando ambos sexos gocen de derechos jurídicamente iguales y cuando la mujer se incorpore a la producción, es decir, sólo logrará su emancipación al lograr su independencia económica. ' La recuperación del planteamiento teórico-marxista dentro de las teorizaciones feministas siguió dos vertientes: el feminismo ortodoxo o reivindicativo Feminismo

y el feminismo

.1 ,

radical.

Ortodoxo

El feminismo ortodoxo surge fuertemente influido por el pensamiento marxista, que plantea la abolición del capitalismo y la implantación del socialismo como forma de liberación de, las mujeres. Bajo este paradigma se considera que el sistema capitalista conlleva la opresión de las mujeres, la cual está materializada en la desigualdad, económica, confusión política, moral burguesa y relaciones sociales insalubres. Se retoma el pensamiento de Engels acerca de la historia de la mujer y del papel integral desempeñado por la familia en la sociedad capitalista. Se ubicó a la mujer en el modo de producción capitalista y en el sistema patriarcal como un ser al que hasta el hombre más explotado del mundo llega a oprimir y a explotar a su casa al final de la jornada de trabajo (Chávez, 2004). Bajo esta vertiente, la discriminación de las mujeres era un reflejo de la lucha de clases, por tanto, al resolverse los conflictos en esa línea la situación de opresión de las mujeres se resolvería también. El movimiento feminista debería dirigirse por los mismos cauces que la lucha socialista. La emancipación de las mujeres, por lo tanto, dependía de la revolución que permitiría la emancipación de todos los oprimidos. Se retomaron conceptos economicistas marxistas con la finalidad de analizar las condiciones materiales que explicarían la situación de opresión de la mujer. Se analizó la "doble jornada" de trabajo femenino, el papel del trabajo doméstico; se consideró que

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la explotación de la mujer se daba por la apropiación de su trabajo. Asimismo, se estimó que el sistema patriarcal se asentaba sobre la apropiación del trabajo no remunerado de las mujeres. Sobre la vía de los hechos, la lucha feminista quedó relegada respecto a las prioridades que planteaba la teoría marxista, lo cual se consideró una mera cuestión de superestructura que se solucionaría automáticamente con la socialización de los medios de producción. El feminismo ortodoxo esta básicamente representado por los trabajos realizados por August Bebel y Alejandra Kollontai. August Bebel procuró desarrollar las tesis marxistas sobre la cuestión femenina. Estimuló más que Marx y Engels la igualdad de derechos y el sufragio femenino, aunque no llegó a dar el paso definitivo sobre la libertad de las mujeres. Aseguraba en su libro La mujer en el pasado, presente y en el porvenir que si la mujer estuviera en iguales condiciones que el hombre, ella sería tan activa como él. Bebel consideraba que a pesar de la teoría no todos los socialistas apoyaban la igualdad de los sexos: Hay socialistas que se oponen a la emancipación de la mujer con la, misma obstinación que los capitalistas al socialismo. Todo socialista reconoce la dependencia del trabajador con respecto al capitalista (...) pero ese mismo socialista frecuentemente no reconoce la dependencia de las mujeres con respecto a los hombres porque esta cuestión atañe a su propio yo (Rowbotham, 1978, citado en Varela, 2005:72). Bebel indica que en la futura sociedad socialista las mujeres realizarán tareas adaptadas a sus capacidades, pero que serían distintas a las de los hombres. Se podrían dedicar a los cuidados, a la educación e instrucción de la juventud, a desarrollar un arte o ciencia, a cumplir funciones administrativas y a divertirse. Como se puede apreciar, las ideas de Bebel no se distancian demasiado de la noción aceptada sobre el papel social que las mujeres deberían desempeñar. Bebel defendía la tesis que afirmaba que las mujeres, por cuestiones biológicas, deberían desempeñar roles vinculados con la maternidad y la crianza de los hijos. Asimismo, afirmaba que las mujeres eran impulsivas emocionalmente y no estaban físicamente aptas para el trabajo manual pesado, ya que éste podría afectar su feminidad.


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Por su parte, desde muy joven Alejandra Kollontai se interesó por el planteamiento marxlsta. Participó en los acontecimientos revolucionarios de 1905 en Rusia.Trabajó escribiendo artículos y organizando a los trabajadores rusos. Fue elegida comisaria del pueblo para la Asistencia Pública. Colocó en primer plano teórico la igualdad sexual y mostró su interrelación con el triunfo de la revolución socialista. De esta manera, trabajó arduamente para conseguir los derechos y libertades de las mujeres, modificó aspectos de las leyes que hacían a la mujer una subordinada del hombre, le negaban derecho al voto y la hacían ganar menos salario y trabajar en peores condiciones que los hombres. La Revolución rusa consiguió teóricamente poner las bases para la igualdad real entre varones y mujeres. Seaprobó el divorcio y el derecho al aborto; también se otorgaron a las mujeres beneficios sociales en forma de salarios de maternidad, guarderías y hogares para los niños. Sedesarrollaron campañas de información para dar a conocer a las mujeres sus nuevos derechos. En 1918, Kollontai organizó, junto con otras activistas, el Primer Congreso de Mujeres Trabajadoras de Rusia.Ahí nació el Zhenotdel, un organismo dedicado a promover la participación de las mujeres en la .vida pública, en proyectos sociales y, de manera muy especial, en la lucha contra el analfabetismo. Todo este esfuerzo consiguió sentar las bases para el surgimiento de la "mujer nueva" en Rusia. Esto en relación con la idea de Marx, quien planteaba que para construir un mundo mejor, además de cambiar la economía, tenía que surgir el "hombre nuevo". Kollontai también defendió el amor libre, la igualdad de salario para las mujeres, la socialización del trabajo doméstico y del cuidado de los niños. Asimismo, señaló la necesidad de cambiar la vida íntima y sexual de las mujeres. Era necesario formar una mujer nueva que fuera independiente económica, psicológica y sentimentalmente. Kollontai fue quien articuló de forma más racional y sistemática feminismo y marxismo, ya que no se limitó a incluir a la mujer en la revolución socialista, sino que indicó qué tipo de revolución necesitaban las mujeres; una revolución de la vida cotidiana, de las costumbres y de las relaciones entre los sexos (Varela, 2005).

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Feminismo radical El feminismo radical tuvo su origen en la segunda ola feminista de los años 60. Se desarrolló entre 1967 y 1975. Este movimiento establece las bases para la revolución de las mujeres del siglo xx. La influencia teórica de estos planteamientos proviene del marxismo, el psicoanálisis y las teorías de la Escuela de Frankfurt. Se partió de la idea de que el subsumir las problemáticas femeninas dentro de la noción de lucha de clases, a la manera del marxismo ortodoxo, no daba cuenta de las condiciones específicas en las cuales las mujeres se desarrollaban dentro de las sociedades patriarcales. El feminismo radical ya no representa tan sólo la mera asimilación de los conceptos marxistas, significa un trabajo que le da preeminencia a las problemáticas femeninas y construye interpretaciones alternativas que recuperan conceptos y metodologías marxistas, Esto significó un gran avance en la teorización feminista en virtud de que en los planteamientos de Marx y de Engels la cuestión de las mujeres no constituyó un problema fundamental. El feminismo radical se basa en dos obras medulares: Política Sexual, de Kate Millet, publicada en 1969, y Dialéctica del Sexo, de Shulamith Firestone, de 1970. Firestone formuló el feminismo como un proyecto radical en el sentido marxista del término, lo que significa tomar las cosas por la raíz,es decir, se pretendía ir a la raíz misma de la opresión. Este movimiento rechazaalgunas concepciones marxistas clási.cas, ya que desde esta perspectiva la lucha feminista no se debía subsumir dentro de la noción de la lucha de clases. Se propone elaborar teorizaciones alternativas con una significación diferente del planteamiento marxista con la finalidad de defender la autonomía de las luchas feministas. Bajo este marco se cuestionó el papel de la mujer en el sistema socialista, donde a pesar de haber cambiado el sistema, la mujer seguía en situación de opresión. De ahí que era necesario diferenciar entre los sistemas económicos y los sistemas sociales que reproducen la dominación del hombre sobre la mujer. Ensu trabajo, estas pensadoras recuperaron la diferencia sexual corno una unidad de análisis más específica que la de "clases socioeconómicas". Esto implicó el fin de la ilusión marxista ortodoxa


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según la cual la revolución resolvería todos los problemas de la marginación de las mujeres. Este feminismo afirmó que la utilización de categorías económicas no agotaba la investigación de la condición de marginación de las mujeres. Bajo esta perspectiva se planteó que era necesario adentrarse en el estudio del ejercicio del poder sobre las mujeres, lo cual implicó exploración de la forma en que estas sociedades controlaban el cuerpo femenino. Este cambio en los parámetros de análisis significó que se estudiara el sistema que establecía roles sociales y normas dependiendo del género. A este sistema se le denominó "sociedad patriarcal", considerada como aquella estructura que establecía deberes, responsabilidades y privilegios diferentes en función del género de las'personas. Dentro de esta división, los espacios más valorados socialmente correspondían a los hombres, en tanto que a las mujeres se les asignaban los menos valorados; asimismo, implicaba una ruptura fundamental respecto de la noción esencialista. Ahora se planteaba que no era por los rasgos biológicos particulares de las mujeres la razón por la cual se encontraban marginadas, sino que era por la existencia de un sistema social que establecía un conjunto de relaciones y compromisos estructurados, en virtud de los cuales las mujeres quedaban bajo el control de los hombres. Se rechazaba de esta manera la idea que afirmaba que existían supuestas esencias de carácter instintivo que pudieran dar cuenta del carácter psicológico y social de las mujeres. Se identificó como centros de dominación aspectos de la vida considerados "privados" analizando las relaciones de poder que estructuran la familia y la sexualidad. El poder que se ejercía sobre las mujeres se centraba en el control sobre el cuerpo femenino, es decir, sobre su sexualidad y la procreación. Paralasfeministas radicales no setrataba sólo de ganar espacios públicos (igualdad en el ámbito laboral, la educación, derechos civiles y políticos), era necesario transformar el espacio privado. A continuación presentamos una breve semblanza de dos representantes de este movimiento: Kate Millet y Shulamith Firestone. Kate Millet fue una activa feminista desde finales de los 60. En 1966 se integró como miembro del comité de la National Organitation of Women. En agosto de 1970 publica, Política Sexual, que fue su tesis doctoral en la Universidad de Oxford. Seconsidera que fue la primera tesis doctoral sobre género que se hizo en el mundo.

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En esta obra se ofrece una amplia crítica de la sociedad patriarcal, en la sociedad occidental y en la literatura; básicamente combate los prejuicios patriarcales y el papel de la familia en impulsar líneas de acción más radicales y renovadoras. Kate Millet hace hincapié en el aspecto sexual, ya que considera que más allá de las condiciones materiales de la subordinación femenina, la esfera de la actividad sexual es el lugar en donde se ejerce el poder. En este sentido, afirma que el sexo es una categoría social impregnada de política, ya que el dominio sexual es la ideología más profundamente arraigada en nuestra cultu-ra. Plantea que todas las vías del poder se encuentran en manos masculinas y como la esencia de la política radica en el poder, el impacto de ese privilegio es infalible. Establece que la supremacía masculina no radica en la fuerza física, sino en la aceptación de un sistema de valores cuya índole no es biológica. Asimismo, hace un análisis de la situación económica de las mujeres y del papel del sindicalismo. Shulamith Firestone (1976), la otra pensadora femin ista que se incluirá en este libro, propuso el estudio de lo que llama la dialéctica del sexo. Para ella, era necesario incorporar la reflexión acerca de la relación entre los sexos y, para tal efecto, utiliza el concepto "clases sexuales". Firestone considera que la dialéctica del sexo implicaba el estudio de la división de la sociedad en dos clases biológicas diferenciadas con fines reproductivos, así como el análisis de los conflictos de dichas clases entre sí; también debería de dar cuenta de las variaciones habidas en los sistemas de matrimonio , reproducción y educación de los hijos, así como con la división del trabajo basada en el sexo que evolucionó hacia un sistema (económico-cultural) de clases. De acuerdo con esto, la revolución feminista radical tendría como objetivo superar las diferencias sexuales de origen natural para llegar a una especie de utopía comunista donde reine la más perfecta homogeneidad de funciones y comportamientos entre los seres humanos. Así, considera que las diferencias genitales deberían pasar a ser culturalmente neutras. Hace énfasis en que las mujeres deben apropiarse de sus cuerpos y tener el control de la fertilidad humana, ya que el núcleo de la opresión femenina hay que buscarlo en sus funciones procreadoras y de crianza.


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FEMINISMO DE LA IGUALDAD

El feminismo de la igualdad tiene sus orígenes en los movimientos de las mujeres en los siglos XVII y XVIII a partir del estallido de la Revolución francesa. El ideal de igualdad manifiesto en esa Revolución hizo pensar a las mujeres que también era aplicable para ellas, pero en la práctica se les negó la calidad de ciudadanas. En 1791, en Francia, Olimpia Gouges escribe la Declaración de los derechos de la mujer y de la ciudadana, mientras que la inglesa Mary Wollstonecraft, en 1792, escribe la Vindicación de los derechos de la mujer, que se considera la obra fundacional del feminismo. Una de estas premisas fundamentales del feminismo de la igualdad es la consideración que afirma que la condición de los varones es privilegiada, en tanto que la de las mujeres no lo es, por tanto, la tarea de este feminismo es lograr que las mujeres cuenten con los mismos privilegios que los varones. Elfeminismo de la igualdad plantea como objetivo lograr la igualdad legal y social de las mujeres. Para lograr esto, una de las tareas a las que se aboca es la de cuestionar las ideas que justificaban la discriminación femenina a partir de la apelación a una "naturaleza femenina" anclada en lo biológico. Se rechaza la tendencia que justifica la discriminación hacia las mujeres a partir de las diferencias biológicas. De acuerdo con esto, el origen de la discriminación hacia las mujeres no está en lasdiferencias biológicas, proviene de una cuestión cultural. Elfeminismo de la igualdadconsideraque la conceptualizaciónde la mujer como perteneciente al ámbito de la naturaleza es la razón por la cual no esconcebida como sujeto del contrato social. Como a la mujer supuestamente la requiere la ley de la naturaleza y no la ley social, se define su deber ético en relación con su función biológica l/natural", la reproducción. Por su capacidad de parir y amamantar, la mujer queda responsabilizada de todo trabajo familiar, no sólo el relativo al cuidado y atención de los hijos. De ahí que una gran reivindicación de este feminismo ha sido desmitificar el espacio privado de la familia mostrando las relaciones de poder que lo sostienen -lo personal es político- como el trabajo no reconocido que ahí se realiza. Al feminismo de la igualdad le debemos múltiples análisis de la manera en que los estereotipos han pretendido conformar, a través del establecimiento de roles sexuales, identidades femeninas.

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Muchas feministas de la igualdad pertenecían a partidos políticos de izquierda y luchaban arduamente para conseguir emancipaciones económicas, profesionales, domésticas y políticas, aunque el precio fuera elevado: agotamiento, dobles y triples jornadas, altos niveles de estrés, enfrentamientos, etc. Este movimiento propone recuperar para las mujeres los atributos y capacidades asignados a los hombres dentro del terreno social. Uno de los problemas que surgieron con la utilización política de las ideas del feminismo de la igualdad es la constitución de una sociedad pretendidamente' homogénea, en donde la diferencia y la individualidad no tiene cabida. El reclamo de igualdad en muchas ocasiones en los ámbitos sociales ha significado el mandar á márgenes de invisibilidad las particularidades de las condiciones de las mujeres. De tal modo que se siguen encubriendo las discriminaciones que resultan de pretender tratar como iguales a personas que están bajo condiciones distintas. Se afirma, por ejemplo, que existe igualdad para que varones y mujeres ingresen en el mercado laboral, concepto que encubre la disparidad de condiciones bajo las cuales, en nuestras sociedades, desempeñan su trabajo las personas. Las mujeres se han integrado al mercado laboral, en tanto que los hombres no se han integrado al ámbito doméstico, lo cual ha redundado en condiciones de trabajo de doble jornada para las mujeres. Se reproducen de esta forma las condiciones de discriminación y opresión para las mujeres, encubiertas bajo la proclamación de la igualdad. Entre las principales representantes de este movimiento están: Simone de Beauvoir, Celia Amorós, Amelia Valcárcel, Nancy Fraser e Iris Young. Simone de Beauvoir

El 8 de enero de 1908 nace en París Simone de Beauvoir. Estudió Filosofía en la Sorbona, donde conoce a Jean-Paul Sartre, con quien establece una relación amorosa que llama la atención por proponer nuevas formas de vinculación. En 1943, Simone de Beauvoir abandona la docencia y se dedica de pleno a escribir; se une a la resistencia francesa y escribe su primera obra, La lnvitada, en la que su tema es la libertad y la responsabilidad individual. Toda su propuesta se ve influenciada por el


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existencialismo. En 1949, publica El segundo sexo, ensayo feminista muy importante del siglo xx-en el cual analiza la condición de la mujer occidental desde un punto de vista histórico, filosófico y político. Lateoría que esta filósofa desarrolla parte de la premisa de que en cuanto a estructura ontológica, hombres y mujeres son iguales aunque se reconozcaque cultural y socialmente se les haya asignado diferentes connotaciones. Elexistencialismo le ofreció las herramientas teóricas necesarias para dar una explicación fenomenológica de la condición femenina. La respuesta a la pregunta que se formula sobre ¿qué es la mujer? se centra en la afirmación de que a lo largo de la historia se ha pretendido reducir la existencia de las mujeres a la inmanencia (al "ser para-otro"), negándoles así su condición de trascendencia ("ser para-sí"). En su condición, las mujeres se descubren en un mundo que pretende que se elijan como lo inesencial, como la alteridad. Entanto que se espera que los hombres se elijan como "ser para-sí", como fundamento de su propia conciencia, en el caso de la mujer se espera que ésta se manifieste en función de los otros, que su conciencia asuma la forma de "ser para- otro". La importancia de esta obra para el pensamiento feminista radica en el hecho de que en este trabajo se rompe con las posiciones materialistas y economicistas que consideran que el proceso de liberación de la mujer se circunscribiría al otorgamiento de ciertos derechos civiles, tales como el del sufragio. La obra de esta filósofa permitió vislumbrar cómo dentro de los mismos discursos que se proponían como libertadores de la situación femenina se enmascaraba la negación de la presencia de las mujeres en tanto que seres autónomos y libres. Laobra de esta pensadora contribuyó a conformar una nueva visión de la mujer como proyecto abierto a todas sus posibilidades. La idea que afirmaba lino se nace mujer, sino se llega a serlo" constituirá un punto de referencia importante para las posteriores teorías feministas. Celia Amorós Una de las representantes actuales del feminismo de la igualdad es la filósofa española Celia Amorós. Nace en Valencia en 1944. Filósofa y profesora de Filosofía en Madrid, perteneciente al feminismo de la Ilustración y la posmodernidad. Forma parte del Centro de Estudios

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de Género del Instituto Universitario de Investigación. Marca nuevas tendencias en los estudios de género, insistiendo en el carácter marcadamente androcentrista de la sociedad, lo que conlleva la necesidad por parte de las mujeres de ponerlo en duda y corregirlo. En el 2006, se convierte en la primera mujer en ganar el Premio Nacional de Ensayo,con su libro La gran diferencia y sus pequeñas consecuencias... para las luchas de las mujeres. La extensa producción teórica de esta filósofa está integrada por. los.I!bros siguientes: Teoríafeminista: de la Ilustración a la globatlzacton, tomos " 11Y 111; Tiempo de feminismo; 10 palabras e/ave sobre la mujer. Feminismo: igualdad y diferencia; entre otros. Los estudios de Celia Amorós han mostrado cómo el sistema patriarcal otorga a los hombres el control político y social. A este respecto, esta filósofa plantea que lo público, el espacio en donde los ~aronesse desenvuelven, se caracteriza por un pacto de poder entre Iguales que favorece el proceso de individuación. Por individuación esta autora entiende el proceso por medio del cual el individuo dentro de estos espacios públicos marca su lugar diferencial como una apropiación claramente configurada. Este proceso de individuación que se desarrolla en el espacio público, es un operador distributivo que troquela individualidades. Entanto que lo privado, que es el espacio en que se desenvuelven las mujeres, no favorece este proceso de individuación dándoles a éstas tan sólo la posibilidad de una relación entre idénticas. En el espacio privado no hay nada que repartir en cuanto a poder ni en cuanto a prestigio o reconocimiento. Desde esta perspectiva, el sistema patriarcal es concebido como una especie de pacto interclasista por el cual el poder se constituye como patrimonio del genérico de los hombres (Amorós, 1994). Amorós comenta que entre lo público y lo privado existe una articulación asimétrica -no es una relación complementaria-, pues en una de las categorías (lo público) se ha puesto lo socialmente valorado, mientras que en la otra se ha puesto lo menos valorado. Los hombres se insertan dentro de la esfera pública, una esfera en la cual se establecen los pactos para el poder y el control, en tanto que a las mujeres se les destina a la esfera de lo privado, un espacio que tiene menos importancia. Dentro de este contexto, se ha denunciado la marginación de que las mujeres son objeto en las sociedades patriarcales. Se ha identificado la manera en que estos espacios de


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participación se han designado en función del sexo de los individuos asignándoles a las mujeres los menos valorados socialmente. Se ha ubicado el carácter político de las interpretaciones sobre la diferencia sexual, mostrándose que las apelaciones a esencias o naturalezas femeninas esconden un ejercicio de poder que pretende legitimar la dominación que se ejerce sobre las mujeres. Ante esta situación, la propuesta de Amorós se centra en resolver el problema de la marginación femenina incluyendo a las mujeres en los mismos espacios privilegiados en los que se desarrollan los hombres. Esta consideración distingue claramente la propuesta del feminismo de la igualdad de otras aproximaciones feministas que revisaremos en los apartados siguientes. Amorós sostiene que para el surgimiento de la mujer como ciudadana, como sujeto político pleno, con derechos y obligaciones en el contrato social, se requiere un doble movimiento: tanto la entrada masiva de las mujeres al ámbito público, como la de los varones al ámbito privado. Sólo así podrán los seres humanos compartir equitativamente responsabilidades políticas y domésticas, lo que otorgará al concepto de ciudadanía su sentido verdadero: el de la participación de las personas, con indiferencias de su sexo, como ciudadanos iguales. FEMINISMO DE LA DIFERENCIA Como una crítica al feminismo de la igualdad, surge dentro del pensamiento feminista una tendencia que tiene como objetivo rescatar la diferencia, resignificar a lo femenino. Estatendencia se aglutinará bajo el rubro del feminismo de la diferencia. Bajo este modelo, lo femenino ya no es concebido como lo otro de lo masculino, sino como una identidad propia. Este feminismo se abocará a construir teorizaciones en las que se pretende revalorizar y dar presencia a lo femenino, dejando de considerarlo como la alteridad. Mientras que el interés del feminismo de la igualdad se centró en el análisis de las condiciones económicas, sociales y políticas que han mantenido marginadas a las mujeres, el feminismo de la diferencia dirige sus esfuerzos a incluir en el plano de la construcción simbólica la experiencia femenina. Para realizar esta labor una de lastareas a las que se aboca el feminismo de la diferencia es la de i

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identificar los patrones de la construcción simbólica de lo femenino dentro de la razón patriarcal. . Esta propuesta se inicia a mediados de los 70, dentro de los grupos radicales de Estados Unidos y Francia, que promueve el identificar y defender las características propias de las mujeres. Así se reformula una crítica al feminismo de la igualdad, que propone lo femenino como lo otro de lo masculino, para proponer lo femenino como con una identidad propia, con lo cual se pretende revalorizar y dar presencia a lo femenino dejándolo de considerar como lo alterno. Los planteamientos del feminismo de la diferencia cuestionan los modelos androcéntricos que preponderan el modelo masculino. Señalan los problemas que para las mujeres ha representado el pretender que se integren dentro de modelos masculinos. Consideran que esto constituye una manera de sumisión que mantiene los esquemasde dominio sobre las mujeres. Elfeminismo de la diferencia parte del reconocimiento de la diferencia sexual y se propone recuperar las experiencias, fines y posibilidades de las mujeres; busca la construcción de un modelo femenino a partir del cual se constituya una nueva identidad para las mujeres. Elfeminismo de la diferencia plantea la necesidad de construir .un nuevo orden cultural en el que las mujeres sean los sujetos que expresen el decir femenino. Este feminismo se propone como un movimiento radical que busca establecer distancia respecto de una tradición en la cual lo masculino ha construido la cultura. Se recuperan los planos de construcción simbólica de la diferencia sexual y se denuncia la existencia de un modelo androcéntrico que ha considerado a la diferencia sexual en términos jerárquicos y que ha negado el carácter de sujetos a las mujeres. Lasfeministas de la diferencia han considerado que dentro de estavisión androcéntrica se les otorga a las mujeres un estatus ontológico de seres carentes de los atributos que se les asignan a los varones. Este modelo androcéntrico ha partido de la idea de un sujeto universal, neutro y asexuado,sujeto que en realidad tiene un carácter masculino. El sujeto universal y neutro que ha constituido el centro de los planteamientos patriarcales es masculino y, por tanto, no representa a las mujeres. De aquí que se cuestione el afán universalista que pretende dar cuenta de las mujeres a partir de modelos que sólo recuperan la experiencia masculina. Los trabajos de Annie Leclerc,


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Luce Irigaray, Mabel Burin, Emilce Dio Bleichmar, Rosi Braidotti, Luisa Murara, Giulia Paoli de Nicola y Graciela Hierro se insertan dentro de esta vertiente del pensamiento feminista. En este análisis se va a incluir una breve semblanza de dos representantes del feminismo de la diferencia: Luce Irigaray y Graciela Hierro. Luce Irigaray

Esuna filósofa-psicoanalista francesa de formación lacaniana. Postula que varones y mujeres son distintos en tres aspectos: el sujeto femenino privilegia, casi siempre, la relación entre sujetos, la relación con el otro género y la relación de dos, a diferencia de los varones que se inclinan por una relación sujeto-objeto, que se realiza a través de un instrumento o elemento mediador, lo que prepondera la relación yo-ellos. En 1974, en su libro Speculum, señala una crítica a la cultura patriarcal monosexuada, reafirmando la posición de que se debe romper con la idea del hombre como el neutro universal, contenedor del género femenino. Su obra trata de la búsqueda de condiciones para el desarrollo de una "subjetividad femenina autónoma". Irigaray propone la construcción de un nuevo orden simbólico a partir de la utilización de una lógica que recupere la positividad y la relación. En este orden simbólico, las mujeres ya no son concebidas como alteridad y entonces no son desvalorizadas, son conceptualizadas a partir de la positividad de su diferencia. Esto implica un ejercicio de redefinición por parte de las mismas mujeres. Para frigaray la crisis que presagia la muerte del sujeto logocéntrico ofrece la condición de posibilidad para la expresión de una subjetividad femenina. Esta crisis representa la muerte del sujeto universal y la posibilidad de construir una identidad para lo femenino (frigaray, 1993). Enesta constitución, las mujeres rompen con las definiciones esencialistas que les había negado el carácter de sujeto dentro del pensamiento falocéntrico. Esteejercicio implica una reinvención en la medida en que se propone una ruptura respecto de las definiciones esencialistas que ha planteado el androcentrismo. Las mujeres necesitan pronunciarse como sujetos del discurso. Irigaray (1982) plantea la existencia de un mundo separado de y para mujeres, al mismo tiempo que afirma los valores diferenciales de éstas (menos competitividad y agresividad, mayor sensibilidad y afectividad). También señala la existencia de un sistema

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simbólico-representativo distinto para hombres y mujeres. Para frigaray el sujeto femenino privilegia casi siempre la relación con el otro género; le da un lugar muy importante a la relación intersubjetiva. El sujeto masculino, en cambio, privilegia más la relación sujetoobjeto, la cual se lleva a cabo a través de un instrumento que se agrega o reemplaza al cuerpo. Algunos de los libros que Irigaray ha publicado son: Ese sexo que no es uno, Una ética de la diferencia sexual, Ser dos. Graciela Hierro

Esuna filósofa mexicana que desarrolla su trabajo teórico bajo los paradigmasdel feminismo de la diferencia a fines del siglo xx y principios del presente. Estafilósofa señala que nuestra cultura patriarcal muestra a las mujeres como seres incompletos, al compararlos con los varones, quienes representan el parámetro de referencia. Ella cuestiona esta concepción discriminatoria de la diferencia sexual. En su obra se propone la deconstrucción de los mecanismos que han constituido estas identidades femeninas y masculinas. Su interés se centra en el análisis del universo simbólico patriarcal que ha construido la diferencia sexual, con el objetivo de identificar sus problemáticas y contribuir a la creación de una nueva cultura feminista que rescate la diferencia sexual. En este rescate ocupa un lugar muy importante la resignificación de lo femenino. Óentro del análisis de la manera en que se ha otorgado significado a la diferencia sexual, Hierro ubica que lo masculino ha sido considerado como el parámetro de referencia, en tanto que lo femenino tiene el significado de carencia. Esta concepción ha asociado lo universal con lo masculino a fin de representar a lo humano, confinando lo femenino a una posición secundaria de "alteridad devaluada". Lo femenino se ha relacionado con esquemas de valoración jerárquicos que muestran a las mujeres como seres carentes. Los saberes patriarcales situaron y encarnaron ontológica mente el principio femenino, oscuro y peligroso como lo otro. Se concibió a las mujeres como seres carentes de aseidad (ser) por no tener identidad, por no estar simbolizadas (Hierro, 2001). Hierro identifica que la diferencia sexual dentro del paradigma patriarcal ha sido representada a través de oposiciones binarias en las que al término masculino se le otorga mayor valor. La oposición


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masculino-femenino tiene su correlato en muchas otras oposiciones que este pensamiento patriarcal ha establecido, tales como las de cultura/naturaleza, mente/cuerpo,. igualdad/diferencia, razón/emoción, actividad/pasividad, día/noche, bien/mal, padre/madre, hombre/mujer, público/privado. Este pensamiento presupone la existencia de una jerarquía en la cual uno de los términos (el masculino) tiene más valor que el otro. Ante esta situación, la vía que elige Hierro es la de comenzar a nombrar lo femenino bajo nuevos paradigmas que recuperen la diferencia. Lo femenino ya no es analizado como la carencia respecto de un parámetro masculino, sino que adquiere significado por su propio valor. El nuevo orden simbólico que es necesario crear busca nombrar el principio femenino, darle un nuevo sentido a partir del rescate de la palabra, del deseo y del saber de las mujeres. El modelo androcéntrico propuso como valor universal al principio masculino. Hierro propone la revaloración del principio femenino y la afirmación de su diferencia respecto de aquél. Eldesarrollo de esta nueva cultura feminista supone una ruptura con la lógica patriarcal, cuya conciencia, en su afán androcéntrico, ha estado inmersa en la lógica del Uno, ha propuesto el modelo masculino como hegemónico y ha negado la diferencia, significando a lo femenino como lo no-masculino. La propuesta de Hierro considera romper con esta lógica, recuperando el carácter de sujeto para las mujeres. En la constitución de este orden simbólico feminista es importante el rescate de la experiencia femenina, a través de la recuperación del modo de producción del saber y del conocer, característicos de las mujeres. Al respecto, Hierro plantea la necesidad de recuperar la palabra femenina. En un mundo patriarcal en el que la palabra la tienen los hombres, las mujeres han satisfecho su necesidad de expresión a través de escribir sus diarios, sus memorias y otros escritos que crean para satisfacer su necesidad de expresarse (Hierro, 2001). Enestos escritos se ha mostrado que las mujeres han encontrado dentro de las esferas domésticas modos de expresar sus experiencias, deseos y saberes. Los libros que Hierro publicó fueron: Ética y feminismo, De la

domesticación a la educación de las mexicanas, Naturaleza y fines de la educación superior y Ética del placer.

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DEL FEMINISMO A LOS ESTUDIOS DE GÉNERO

Dentro de los espacios académicos se comenzó a gestar a fines del siglo xx un movimiento que se denominó "estudios de género". Fuert~mente influenciadas por los estudios feministas, estas aproximaciones plantean la necesidad de indagar acerca de la forma en que dentro de nuestras sociedades se construye la diferencia entre hombres y mujeres. Estasteorías se han abocado al análisis de las construcciones de significado y de las relaciones de poder que se gestan en torno a la diferencia sexual. Estas propuestas representan una ruptura con las concepciones que debatían respecto a la igualdad o diferencia ontológica entre varones y mujeres. Bajo esta perspectiva se plantea que debe llevarse el análisis a los procesos de constitución discursiva de la diferencia sexual. Suspropuestas consideran que no existe un referente unívoco que dé cuenta de la diferencia sexual. Las propuestas de los estudios de género se han dado a la tarea de desesencializar los conceptos de mujer y varón en todos sus aspectos, enfatizando el carácter de construcción discursiva que dicha concepción tiene. Se plantea que las diferencias sexuales no se agotan en los aspectos biológicos, son formas de simbolización inconsciente que establecen pautas para la constitución de la identidad sexual y se entrecruzan y refuerzan con los papeles de género, los cuales son configurados dentro de instituciones tales como la familia, el derecho, la política. De acuerdo con esto, no existen rasg?Sesenciales que caractericen a los seres humanos, sino que es el discurso el que crea sujetos sexuados. Este feminismo considera que la identidad atribuida a las mujeres es una construcción simbólica, la cual está consolidada por diferentes estrategias de poder. A partir de esta idea, uno de los puntos clavesdel análisis lo constituye la elucidación de las categorías desde donde es pensadala diferencia sexual,asícomo la identificación de los dispositivos mediante los cuales se ejerce el poder; este poder que se traduce en discriminaciones hacia las personas en función del género al que pertenezcan. Los discursos sociales ordenan, legitiman y definen lugares de los actores de estas desigualdades y subordinaciones, tanto en los espacios sociales como en los subjetivos.


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Para los estudios de género un principio clave lo constituye la propuesta de establecer condiciones que fomenten una equidad de género, que implica la aceptación de las diferencias por cuanto a condiciones de vida de hombres y mujeres, así como el reconocimiento de que debe buscarse la igualdad en la diferencia. Esto representa un cuestiona miento a las teorías liberales que propugnaban por lograr que las mujeres contaran con los mismos derechos que los hombres. La equidad de género busca el establecimiento de condiciones justas que reconozcan las desventajas históricas que han permeado la existencia de hombres y mujeres; esto significa que no pueden existir modelos únicos que desconozcan las diferencias por cuanto a las necesidades específicas. La equidad de género busca introducir medidas específicas para compensar las desventajas históricas y sociales entre los seres humanos, lo cual permitirá que las personas se desarrollen en medios más justos y equitativos. La equidad de género promueve que los hombres y las mujeres cuenten con los mismos derechos y oportunidades para ser libres de desarrollar sus capacidades y potencialidades; es una premisa que debe guiar el desarrollo de políticas públicas que busquen eliminar las disparidades que se presentan a partir del sexo de las personas, diferencias reflejadas en el acceso y control sobre los recursos, la toma de decisiones, las oportunidades para el desarrollo personal y social, así como las retribuciones que se sustentan en los diferentes campos del ejercicio del poder. En muchos casos, el diseño de estas políticas ha sido una mera adición de programas dirigidos a mujeres, bajo una estructura general que sigue manteniendo las condiciones discriminatorias hacia las mujeres. La búsqueda de la equidad de género debe partir del conocimiento de las condiciones de vida reales de hombres y mujeres, a fin de propugnar por que tengan un carácter más equitativo. Esto constituye un importante esfuerzo para lograr que existan las mismas condiciones para el desarrollo de los seres humanos. Un primer paso para lograr la equidad de género es la identificación y denuncia de las situaciones de discriminación. Esta labor ha logrado, dentro de sus objetivos principales, la igualdad social entre hombres y mujeres, no la eliminación de las diferencias ni la asimilación de las mujeres a los patrones masculinos o viceversa. Esto implica el propugnar por la desaparición de la marginación y

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discriminación en función del sexo de los individuos. Lo que se pretende es acabar con lajerarquización entre los géneros y, en última instancia, con las discriminaciones que social y cultural mente se imponen en cuanto a género. Los estudios de género no sólo estudian la desigualdad hacia las mujeres, sino que han abierto nuevos campos de investigación como son los estudios sobre masculinidad, homosexualidad y transexualidad, entre otros.

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Teorías feministas

Perspectiva de género

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1. ¿Cuálesson los principios en los que se sustenta el feminismo de la igualdad? 2. ¿De qué manera las feministas integraron dentro de sus investigaciones las aportaciones del marxismo? 3. ¿Quiénes son las principales representantes del feminismo de la diferencia? 4. ¿Cuáles son las aportaciones de la perspectiva de género al campo de la investigación en ciencias sociales? 5. ¿Qué es la equidad de género?

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OBJETIVO GENERAL

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l objetivo general del presente capítulo será diseñar y realizar una investigación en familia, a partir de la identificación, análisis y evaluación de los aspectos que conforman los procesos de identidad y de las relaciones familiares, desde una perspectiva de género.

OBJETIVOS PARTICULARES 1) Analizar y discutir los elementos que conforman el proceso de construcción genérica. 2) Examinar los elementos que se han investigado dentro de las relaciones familiares desde una perspectiva de género. 3) Analizar los cambios que han tenido las familias mexicanas en las últimas décadas: sus antecedentes y consecuencias. 4) Estudiar la estructura, función y autoridad que tiene la jefatura en los hogares mexicanos y su significación social. 5) Examinar diferentes propuestas de resignificación de las relaciones familiares que actualmente se presentan, a fin de lograr una equidad de género. 6) Realizar una investigación que presente retos teóricos y aplicados para el estudio de las familias, a fin de alcanzar una equidad de género en sus relaciones cotidianas.


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INTRODUCCiÓN

La familia es un sistema de interrelación biopsicosocial que media entre el individuo y la sociedad y se encuentra integrada por un número variable de individuos, unidos por vínculos de consanguinidad, unión, matrimonio o adopción; desde el punto de vista funcional y psicológico, implica además compartir un mismo espacio físico; desde el punto de vista sociológico no importa si se convive o no en el mismo espacio para ser considerado parte de la familia. Entre las funciones básicas de la familia se encuentran: reproducción, comunicación, afectividad, educación, apoyo social y económico, adaptabilidad, generación de autonomía, adaptación y creación de normas. Se puede decir que los dos grandes objetivos de toda familia son: 1) resolver las tareas o crisis que va enfrentando la familia en las diferentes etapas de desarrollo, y 2) aportar los complementos a las necesidades de sus miembros, con el objeto de lograr una satisfacción en el presente y una preparación segura y adecuada para el futuro (Estrada, 1993). Así, al constituirse una nueva pareja, se crean expectativas acerca de cómo se llevará a cabo la vida futura en familia, pues se contempla tener hijos e hijas, su cuidado, atención y el logro de una armonía familiar; sin embargo, diferentes factores intervienen en la manera en que se generarán las relaciones entre la pareja, con los hijos y en la familia; estos factores abarcan desde la educación de la familia de origen de cada miembro de la pareja, su escolaridad, edad, sexo, ingresos, expectativas y situaciones no esperadas, tales como la no llegada de los hijos e hijas, el nacimiento de hijos o hijas con retardo en el desarrollo o enfermedades crónicas en algún miembro de la familia, entre otros. Ahora bien, el análisis de las familias desde una perspectiva de género nos permite observar componentes que han permanecido ocultos o no han sido considerados relevantes para entender la diversidad de las familias y su transformación actual, elementos que han sido agrupados en apartados que nos permiten profundizar en su estudio, tal como los procesos de formación familiar, la división del trabajo y la dinámica familiar.

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CONSTRUCCiÓN IDENTITARIA DE GÉNERO: FEMINIDAD y MASCULINIDAD

Utilizar el término "sexo" nos remite a una condición biológica e inmutable, originando'una concepción imposible de cambiar entre la mujer y el hombre, permitiendo la aparición de formas excluyentes de conducta entre los seres humanos. Esta concepción nos permite estudiar qué acciones y características tienen las mujeres que las diferencian de los hombres, diferencias que posteriormente explican y promueven la opresión de alguno de los sexos, generalmente de las mujeres; también se perpetúa una relación jerárquica entre los sexos que remarca la diferencia y la desigualdad entre géneros. Laconcepción biologicista asume que las acciones, conductas y habilidades están dadas y perpetuadas por el sexo, de tal modo que no es posible cambiarlas, existiendo una aspiración constante de alcanzar el modelo previamente establecido. Para ello se cuenta con grupos e instituciones que demandan y apremian que se cumpla con lo determinado para cada sexo y se esfuercen en no caer en actitudes y comportamientos del sexo contrario. No se rescata la idea de compartir actitudes, sino de establecer una oposición permanente y perpetua de actitudes femeninas y masculinas. En su proceso de socialización y desarrollo, generalmente se plantea que las mujeres tienen que mantenerse jóvenes, bonitas, atractivas, castas y puras para el hombre, su plena realización es ser madres y esposas (en ese orden) dentro del espacio privado del hogar. Por otro lado, se espera, en casi todos los casos, que los hombres en el espacio público sean violentos, fuertes, decididos, triunfadores e infieles, mostrando en todo momento su supremacía sexual. Esto ha permitido hacer comparaciones entre los seres humanos y los animales, hablando de instintos en ambas especies; se ha tratado de presentar a los animales con conductas humanas, interpretando sus acciones desde la óptica humana, hablando de sus sentimientos, de su cortejo, de su fidelidad y, posteriormente, se intenta explicar el comportamiento humano con base en el de los animales, argumentando que los humanos se comportan como diferentes especies y, por tanto, actúan por instintos. Esta explicación parece ser circular: a los animales se les dan atributos humanos (se pretende socializar su comportamiento) y luego se dice que los


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humanos se comportan como los animales (atribuyendo conductas instintivas en los seres humanos). Por otro lado, utilizar el término género nos permite situar la conducta humana en el ámbito de lo social, de lo simbólico, en la construcción cultural del ser hombre y del ser mujer. Elgénero nos permite decodificar las atribuciones que se les han dado a las personas,encontrando que como seres humanos tienen más similitudes que diferencias, pudiendo visualizar cuestiones relevantes en la organización política, social y económica en diferentes sistemas, como el matrimonio y las relaciones de parentesco. La categoría de género permite determinar que las diferencias sexualesgeneran desigualdad y que existen otras formas de organización que pueden ser implementadas. "La perspectiva de género se aleja de las argumentaciones funcionalistas y deterministas y busca explicar la acción humana como un producto construido con base en un sentido subjetivo" (Lamas, 1996, p. 11). Esta perspectiva nos da la oportunidad de revisar los conceptos de humanidad y naturaleza que tenemos y así poder ampliar nuestra percepción de la condición humana, en donde el aprender de las mujeres implica aprender de los hombres. Desde esta perspectiva de género se observa que el papel de hombre y de mujer no está determinado, sino que es posible reconstruir una nueva forma de relación entre los sexos y entre el mismo género; es decir, las relaciones entre las personas no necesariamente deben ser en términos de jerarquías y de opresión, sino que es posible relacionarse entre iguales, entre seres humanos; es posible crear nuevas maneras de relación, evidenciando conductas y rasgosde personalidad que son compartidos y que no son exclusivos de un sexo; ambos pueden llorar, decidir no ser madres o padres, ocuparse de la crianza y salir de su hogar a trabajar sin considerarse malas personas. Desde esta postura, es factible analizar la manera en que las personashan ido construyendo su identidad, haciéndolo consciente y, entonces, tomar el camino adecuado para efectuar cambios que permitan establecer modos diferentes de relacionarse, entre los géneros y dentro del mismo género. Ahora bien, ¿qué diferencias tiene la crianza de las mujeres con respecto a la de los hombres? Hierro (1998) hace un recorrido histórico desde el México prehispánico hasta nuestros días sobre la crianza que se ha llevado a cabo con las mujeres, lo que nos permite

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apreciar las diferencias genéricas al respecto, además de entender que éstas están asociadas a las prácticas culturales más que a factores biológicos. En el México antiguo, la educación de la mujer era en la casa, en donde se le instruía que no se pertenecía a ella misma, que sus acciones repercutían en los miembros de la familia, por lo cual debía sujetarse a las normas. Susactos estaban asociados, en primer lugar al culto, a la divinidad y, en segundo, las labores domésticas propias de su sexo. El que un varón se quedará en casa era deshonroso tenía que salir y participar de la vida pública. Otra parte fundarnental de la educación de las mujeres era la preparación para el amor, para el matrimonio. El hombre nacía para la guerra, la mujer para el matrimonio. La educación de la hija provenía de la madre, a la cual pagaba demostrando obediencia y sumisión; siendo lo que la madre le inculcaba, logrando un buen matrimonio, un buen hogar y una buena crianza de las hijas; reproduciendo el papel que ella había aprendido de la madre. También había mujeres que iban a la escuelacon la idea de que lasque fueran educadasallí serían mujeres de distinción, servidorasdel templo o sacerdotisas.Éstaera la entrada de lasmujeres al servicio religioso,en donde ellaseran lasencargadasde organizarel servicioeclesiástico y dar los conocimientos morales a niños(as)y jóvenes; la obedienciaseguíasiendo la mayor virtud de las mujeres y el castigo corporal o penitencia la manera como lograban la perfección espiritual. La finalidad educativa de las mujeres era el matrimonio y la ocupación más allá de su hogar sólo podría darse en las actividades religiosas o como parteras, las que no sólo atendían los partos, sino que también eran casamenteras y consejeras matrimoniales. En el hogar, la mujer hilaba, tejía, cosía, molía el maíz, hacía tortillas, preparaba la comida y barría. Cuando la niña era bautizada, los padres entregaban una escoba como símbolo de lo que iba a ser su deber en el matrimonio. GracielaHierro (1998) desde una aproximación filosófica, hace notar que toda la información con la que se cuenta acerca de la educación de las mujeres, durante este periodo de la historia de México, está influenciada por los cronistas, quienes eran misioneros que relataban los hechos a través de su propia vivencia y cultura. En la Colonia se trajo la idea española de una condición medieval y católica de la condición de la mujer como inferior al varón, en


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cuanto a su ser y a su valer. Fue el catecismo la tarea educativa más importante de los conquistadores, en donde se tenían que aprender de memoria oraciones y mandamientos de Dios y de la Iglesia, haciendo énfasis en la honestidad y la castidad en las mujeres y que su fin era el matrimonio o la vida religiosa. Hierro también señala que siempre hubo mujeres "inquietas" que querían estudiar, aprender, que buscaban un destino diferente, tal es el caso de Sor Juana, quien mostró que toda verdadera educación culmina en la autoeducación. Posteriormente, las mujeres se abrieron un espacio más, el de maestras, sin embargo, la lucha no cesó, las mujeres no eran educadas para la libertad, sino para seguir en obediencia y sumisión, era necesaria la autoeducación como lo habían mostrado algunas mujeres anteriormente para ser educadas para la libertad, la libertad de decisión de sus propias vidas. Esta autora nos marca una división entre el ser domesticadas y el ser educadas, en donde es necesario que la mujer construya y reconstruya la visión de la cultura hasta ahora vista y escrita en clave masculina. Estepanorama histórico nos permite entender y visualizarcómo la educacióno, mejor dicho, la domesticación de las mujeres, ha sentado las basespara que los padres y madres sigan contribuyendo a mantener.el orden establecido en la cultura patriarcal, en donde lasmujeres deben dedicar su vida al cuidado de otros(as), en donde ellas no eligen ni deciden ni aun su propia vida y destino; en donde deben cumplir y obedecer normas impuestas que ellas mismas no pueden o creen que no pueden ni deben cuestionar. Actualmente, dentro de lasfamilias, el que losvarones seasuman como personas participantes en los procesos reproductivos parece indicar que se está rompiendo la fuerte asociación que se hace del ser mujer con la maternidad, el control de la sexualidad, la reproducción y la crianza;y que el ejercicio de la paternidad está cambiando, aunque a través de un sendero lleno de complejidades y contradicciones. Encuanto a la crianza de los hijos, encontramos que los padres generalmente prefieren tener un hijo como primogénito, argumentando que las mujeres sufren mucho por causa de los mismos y que la sociedad las discrimina. Al tener un hijo está siendo reconocido socialmente y, sobre todo, se reconoce él mismo, como un hombre viril, ya que de esta manera confirma su potencia sexual, no sólo en el sentido ñsico de inseminar, sino en el aspecto de continuidad de la

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familia, de su apellido y, por tanto, en el sentido de prestigio y buen nombre (Fuller, 2000). Lospadres hacen ~na distinción de su expresión amorosa y del tipo de satisfacciones que reciben de sus hijos e hijas. Con sus hijos reprimen las expresiones verbales y corporales de afecto y ternura, porque temen volver sensibles a los niños y entorpecer el desarrollo de la cualidad masculina por excelencia: la fuerza. Siendo la madre la que transmite al hijo la ternura y sensibilidad, que son reprimidas en la relación con su padre, mismas que posteriormente utilizará en sus relacionesde pareja y con sus propias hijas. De sushijos, los padres reciben satisfacción en cuanto al orgullo que les causa la identificación con ellos; la satisfacción que las hijas les dan está basada en la ternura, cuidado y atenciones que reciben de ellas. Durante la infancia, una de las tareas del padre es asegurarse de que el niño se desarrolle dentro de la caracterización masculina, para lo cual tiene que contrarrestar la influencia de la madre en lo doméstico, señalando, criticando y reprimiendo cualquier señal de feminidad en su comportamiento. En la adolescencia, es común que el hijo esté más influenciado por los amigos; sin embargo, en esta etapa el padre deberá guiarlo y controlarlo, aquí será necesario contrarrestar la influencia del grupo de pares. El padre deberá enseñarle a su hijo los valores que tiene que asumir en el ámbito público y deberá ayudarlo a entrar en este espacio. En esta etapa el padre ayudará a su hijo a una toma de decisión de la profesión u ocupación que deberá escoger ya la cual se dedicará en el futuro. Otro terreno importante es el de la sexualidad, en el cual el hijo aprende conductas y comportamientos viendo a su padre, aprendiendo del trato que éste da a las mujeres y de la manera como él se expresa de ellas; éste es un tema que en la relación padre-hijo se calla, no se habla, se considera que en esta relación filial la sexualidad no entra; se da por hecho que éste es un terreno que le corresponde aprender al hijo con los amigos; si acaso la labor de los padres es llevar al adolescente con una prostituta para que ella le enseñe lo que debe aprender de la sexualidad, centrándola sólo en el acto sexual. Entre padre e hijo se da y asume implícitamente que ambos comparten un campo del que las mujeres están excluidas. El que el hijo signifique la continuidad del nombre familiar provoca en el padre que se identifique con él y que proyecte en su


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propia vida la realización de sus metas futuras. Él espera que su hijo continúe y aun que supere su propia actuación y trabajo. Escomún que se diga que un hijo es una segunda oportunidad de lograr lo que el padre no puede alcanzar en su propia vida y que se encuentren familias con dinastías de una misma profesión; es por ello que el hijo está asociado con el logro y el orgullo del padre (Gutmann, 1998). Los padres tienen que enseñar a sus hijos a ser masculinos y, según Kimmel (Valdés y Olavarría, 1997), la masculinidad es vista como una relación de poder, significa: un hombre en el poder, un hombre con poder, un hombre de poder. La masculinidad es sinónimo de fortaleza, éxito, capacidad, confianza y control; bastantes adjetivos para ser mostrados en cada actitud y comportamiento. La masculinidad es concebida como lo contrario a la feminidad. El hijo debe aprender a tomar distancia de todas aquellas actividades o actitudes catalogadas como femeninas, como la ternura, el llanto, la sensibilidad, la realización de tareas domésticas e inclusive salir a la calle con la madre a realizar actividades propias de las mujeres, todas ellas vinculadas con lo doméstico. La masculinidad requiere una validación ·homosocial. Los hijos deben demostrar perpetuamente su hombría para ser aprobados por' otros de su mismo género, ya que son ellos quienes evalúan el desempeño, por ello es que es importante realizar las hazañas más intrépidas en el grupo de pares, a fin de confirmar su virilidad, hombría y masculinidad. Para el hijo es importante ganarse la admiración, orgullo y elogios del padre, ya que refuerza su masculinidad. La masculinidad es contraria a la homofobia. Según Kimmel (Valdésy Olavarría, 1997), la emoción más destacada de la masculinidad es el miedo, pero su temor real no es hacia las mujeres, sino a ser avergonzadoso humillados delante de otros hombres, o bien, a ser dominados porque son más fuertes que ellos, y señala que los miedos son la fuente de sus silencios. El hijo aprende a ser violento como un indicador evidente de su virilidad; aprende a mostrarse agresivoy dominante ante otros y a vencerlos, verbal o físicamente; siempre debe estar dispuesto a la lucha y al pleito o conflicto, para mostrarse fuerte y con poder ante sus pares. Enocasiones,algunoshombres mencionan que no lesgusta ser violentos, es más,les da miedo serlo, sin embargo, tienen que serlo porque si no pierden el estatus ante otros y, peor aún, ante ellos mismos.

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Según ~.arqués (Valdés y Olavarría, 1997) y Cazés(1994), en

:1 hogar los hiJOSparecen haber sido notificados de que ellos son Importantes o superiores, a través de distintos procedimientos: . • Obs~r~ar que el padre en el hogar es la figura más importante. • Percibir que haber tenido un varón y darle un sucesor al padre es un orgullo para la madre. • Recibir un trato preferente sobre sus hermanas. • Obtener un refuerzo sexual por todo lo que realiza bien: se le dice que es ~odo un hombrecito, por ser responsable, atento y por comer bien, lo que no ocurre con las niñas. • Estar sujeto a una alternancia entre ser disculpado por el hecho de ser hombre o bien exigírsele por ser hombre. • Darse c.u.entade la importancia que tiene el ser hombre, para los familiares o personas próximas. • Tener más alternativas de ocupaciones que las mujeres. • Observar que en los medios de comunicación los papeles importantes y protagonistas son desempeñados por ellos.

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. Posteri.ormente, la escuela, el barrio, el trabajo y otras institUCIO~~S SOCialesirán ratificándole que ser varón es ser importante. Tamble~ puede ser que su propio padre le haya dicho explícitamente que el forma parte de un prestigioso colectivo. En resumen, la identidad de género es la condición en que cada ~ersona logra, delante de sí misma y de los otros, ser hombre o mUJer,.de acuerdo a lo determinado por su cultura y comunidad donde vive; es el proceso en el que las personas se identifican con el mandato cultural genérico, se reconocen en él y lo asumen. RELACIONES DE GÉNERO EN LAS FAMILIAS ~liveira, ~ternod y López (García, 1999) proponen que la perspectiva de genero ha introducido cuestionamientos importantes en el estudio de la familia porque se busca redefinir la visión del mundo domés~co, el cual ha sido considerado como privado y exclusivo de las mujeres, en contraparte del espacio público de los varones· se evidencian los diversos arreglos familiares existentes cuestionando a la familia nuclear como el único modelo aceptado socialmente se discute la visión de la familia como una unidad de interés común ,


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en donde todos(as) los y las integrantes comparten armónica y solidariamente sus derechos y responsabilidades, mostrando el orden asimétrico que se da en las relaciones intrafamiliares y evidenciando que el ejercicio del poder y las jerarquías están determinadas por la condición del hombre, la edad, las relaciones de parentesco y el papel de proveedor, entre otros; se cuestiona que la división sexual del trabajo sea natural y tenga que ver con el papel reproductor de la mujer, y que la valoración social de la maternidad sea un elemento importante para la subordinación de las mujeres. Así, el análisis de las familias desde una perspectiva de género nos permite observar elementos que han permanecido ocultos, o bien que no han sido considerados como relevantes para entender la diversidad de las familias y su transformación actual, elementos que han sido agrupados, según Oliveira, Eternod y López (García, 1999) en los apartados siguientes: 1} procesos de formación familiar; 2) dinámica familiar y 3) trabajo doméstico y extradoméstico. 1) Procesos de formación familiar. Desde la perspectiva de género es posible examinar la influencia que tienen los valores y costumbres imperantes en nuestra cultura, con respecto al matrimonio, noviazgo, elección del cónyuge, motivos para casarse y expectativas de la relación sobre la vida en pareja y sobre el significado que el matrimonio tiene para ambos. En ocasiones únicamente se presentan datos demográficos acerca de sus comportamientos ante la relación de pareja, pero no se cuestionan las diferentes creencias, valoraciones y pensamientos que cada uno de ellos tiene ante el matrimonio, ni se asocian con la cultura imperante ni con factores de desigualdad social y genérica. Por ejemplo, se han encontrado variaciones respecto al sector social de pertenencia; Oliveira, Eternod y López (García, 1999) mencionan que, para las mujeres de sectores pobres, el matrimonio significa un apoyo moral o económico, la posibilidad de ser madres y contar así con compañía (Herrera y Rojas, 1999); en tanto que, para las mujeres provenientes de familias con recursos económicos altos, el matrimonio significa comprensión y apoyo moral o económico. En estas últimas se valora tanto a la familia como a la pareja, y no sólo a los hijos o hijas, como ocurre en los sectores más pobres.

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Para la mayoría de las mujeres los hijos representan un elemento fun.dam~~tal para la conservación de la relación conyugal y para la satisfacción marital. Estas mu~er~sseñalan que mantienen una vida en pareja por los lo~ros econornicos alcanzados,por los hijos y por la infraestructura mat.enalq,ueles proporciona estabilidad en su vida cotidiana, siendo factible aSIllevar a cabo sus proyectos individuales y profesionales. En cuanto a la visión masculina se destaca que el matrimonio es un ~roceso e~ el cual se va construyendo el aspecto emocional y material de su vida, lo cual repercute en una pérdida de individualidad y de libertad. Esto nos lleva a considerar que cuando se habla de matrimonio en una pareja cada miembro tiene una valoración y expectativa difere.ntes,sin embargo, a menudo ellos suponen que están hablando de lo m.lsmo~que entienden y esperan lo mismo. Así como el tema del matnmonl? pode~os mencionar otros temas, como el noviazgo, la vida en pareja, la crianzay la sexualidad; lasestadísticasnos muestran dife~e~ciasgenéricas, pero no se ha considerado relevante hacer un análiSISdel por~ué de ~sta diversidad en su pensamiento, de los valores con que estan asociadassus creencias; se asume que las diferencias son por su sexo: que todas las mujeres piensan y actúan de la misma manera,que todos los hombres piensany actuan igual. Deesta forma se encubre la influencia cultural, la desigualdad, el poder, entre otras. 2_)Dinámica familiar. Oliveira, Eternod y López (García, 1999) mencionan que la dinámica familiar es el conjunto de relaciones de coop~ración, intercambio, poder y conflicto que, entre géneros y gener~c~~~es,se establecen en el interior de las familias, alrededor de la división del trabajo y de los procesos de toma de decisiones. El estudio de la dinámica familiar surge como una crítica a los supuestos de unidad, interés común y armonía, que tradicionalmente se ha dicho acerca de las familias, ya que al asomarse a cada familia encontramos diferencias, desigualdades y conflictos; entonces esnecesario evidenciar qué pasa realmente al interior de las familia; y no postular un modelo que no se asemeja a la realidad, o cuando menos no todo el tiempo. .

.?tro aspecto que merece la pena estudiar es la creciente partí-

cipacron que las mujeres están teniendo en los mercados de trabajo


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yen la manutención de sus familias, lo cual ha generado ciertas inquietudes sobre sus efectos en las relaciones intrafamiliares. Seobserva que regularmente la esposa es la que asume la responsabilidad de realizar o supervisar las actividades domésticas y que la participación de los hombres es escasay no sistemática en el ámbito doméstico; con frecuencia él asume la manera en que va a colaborar, o bien en qué ocasiones especiales lo va a hacer (ya sean fines de semana, vacaciones, en casos de enfermedad, etc.), y generalmente es cuando sus esposas realizan un trabajo extradoméstico. Estetipo de trabajo extradoméstico ha venido adquiriendo un papel relevante en la vida de las mujeres, similar al de la maternidad. Según Oliveira, Eternod y López (García, 1999), habitualmente, las personas asumen que existe una división de trabajo basada en el sexo biológico, por lo que a la mujer le corresponde el ámbito de lo doméstico y al hombre, las actividades como proveedor: su responsabilidad es llevar dinero a la casa, esto se presenta en todos los sectores socioeconómicos. Cuando la mujer no realiza trabajo extradoméstico, ella y el varón asumen que a la mujer le corresponde el trabajo doméstico; cuando ella trabaja fuera de la casa los dos asumen que ella es la encargada de supervisar quién se encargará del trabajo doméstico, o bien, la mujer se involucra en una doble jornada. Dentro de la dinámica familiar cada mujer y cada hombre tienen diferentes representaciones en cuanto a la maternidad y la paternidad, respectivamente. En general, la mayoría de las mujeres valoran la maternidad, les otorgan a sus descendientes una gratificación emocional, ya que suponen que con los hijos se refuerza la relación matrimonial, a la vez que le proporcionan compañía. González (1994, en García, 1999) encuentra que la maternidad es fundamental en la construcción de la identidad femenina y representa una fuente de poder de las mujeres, porque les da sentido a sus vidas, las enaltece frente a la sociedad y les autoriza ejercer control e influencia sobre los hijos, hijas, nueras y yernos. Desde la perspectiva de género, las relaciones a lo interno de la familia se conciben como relaciones de poder asimétricas, en las que las esposasy los hijos son los más propensos a ocupar posiciones de subordinación. Escomún que los jefes de la familia impongan su autoridad a las mujeres y que los padres y las madres hagan lo mismo con los hijos e hijas, y como toda interacción de imposición,

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frecuentemente se presenta la violencia, ya sea física o psicológica (Oliveira, Eternod y López, en García, 1999). García (1999) ha encontrado que algunas decisiones familiares sobre el número y la educación de los hijos, o la administración del pres~puesto familiar, pueden ser tomadas en forma compartida por los conyuges o ser de injerencia exclusivamente femenina, pero en otras esferas, como la adquisición de bienes de consumo durables y propiedades, el trabajo de la esposa o de descendientes, con frecuencia el jefe tiene la última palabra. También se ha evidenciado que las mujeres y los jóvenes tienen una mayor participación en la ~oma de decisiones de la familia cuando llevan un ingreso a la casa Igualo superior al jefe de la familia. Desde esta perspectiva es posible estudiar los conflictos que se d~sarrollan dentro de las familias, que generalmente surgen por la busqueda de mayor autonomía femenina, de la exigencia de los esposos sobre el cuidado y la crianza y por la administración del presupuesto familiar. Estos conflictos, por lo regular, se vinculan con la violencia verbal y la agresión física de los hombres sobre las mujeres niñas y niños, aunque también es frecuente el castigo físico de las madres sobre su descendencia. Este mecanismo es eficaz sobre todo cuando los controles ideológicos se debilitan (Oliveira Eternod y López, en García, 1999). La paternidad violenta provoca muchos daños y estragos en la vida de la familia, y se ha evidenciado que se trata de una práctica aprendida socioculturalmente y no de una cuestión natural con la que se nace o se hereda. Según el boletín informativo del Colectivo de Hombres por Relaciones Igualitarias A. C. (CORIAC,1999), las normas y los valores sociales han convertido a la violencia en una forma de prestigio para los hombres y en su recurso principal para solucionar sus problemas y conflictos. De este modo la violencia doméstica está ligada a relaciones desiguales de poder, que la validan como el método para resolver conflictos familiares reconociendo que el padre es el ejecutor y sancionador de reglas. ' Una contribución importante sobre la dinámica familiar es la discusión acerca de la relación que guardan la desigualdad social y de género. Losdiversos análisis que comparan sistemáticamente diferentes sectores sociales muestran que la vulnerabilidad y subordinación de las mujeres se acentúan en los sectores más pobres. Habría que analizarsi esto es asío sólo es que estos sectores son los más estudiados, o


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bien existe una gama de diversas maneras de ser vulnerable y subordinado y que cada sector social se vincula a alguna de ellas. 3) Trabajo doméstico y extradoméstico. Uno de los modelos analíticos más utilizados en las ciencias sociales para igualar o diferenciar los valores sociales de las personas, de acuerdo a las actividades que realizan en la sociedad, ha sido la dicotomía público-privado (Salazar, 1999). Convencionalmente se han asociado diversos significados al concepto de público, como el de algo que es común, colectivo y general para todas las personas, que afecta y repercute en la población total, significado que se presenta contrario a lo individual y particular, que nos remite al concepto de privado. Otro significado de público es que es visible, aquello que se desarrolla a la luz del día, lo que toda persona puede ver; así pues, se hace referencia a que la luz hace visible lo que anteriormente era oculto, por esto un personaje público es aquel cuya vida se desarrolla ante la mirada de los demás; en tanto, lo privado hace referencia a lo secreto, a lo oculto. Un tercer significado es que lo público es accesible, lo abierto, en donde todas las personas pueden incluirse, donde tienen acceso; contrario a lo cerrado, lo clausurado, ante lo cual sólo ciertas personas tienen posibilidad de acceso, que hace referencia a lo privado. Cotidianamente, se ha asociado la crianza y el cuidado de los niños con lo que corresponde al ámbito doméstico, siendo éste privado, en tanto que el trabajo del hombre se desenvuelve en el espacio público, al cual se le considera de mayor jerarquía; sin embargo, desde la perspectiva de género se puede mencionar que la actividad público-privada señala únicamente la ubicación de los miembros del hogar de distinto sexo en espacios sociales específicos y que esto no debiera asociarse a jerarquías que permiten y mantienen la dominación masculina. Desde esta perspectiva se ha evidenciado el papel de las mujeres en las estrategias familiares para obtener recursos monetarios y no monetarios; se ha estimulado el análisis del trabajo doméstico y los condicionantes familiares para las actividades femeninas extradomésticas; se cuestiona que el trabajo doméstico no ha sido identificado como una actividad importante para la manutención, la crianza, educación, socialización de la prole y el cuidado de la salud de los miembros del hogar.

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Usualmente se ha dado a la convivencia familiar un carácter de armonía y solidaridad sin considerar las tensiones, los conflictos y la violencia que existe en su seno, los cuales son inherentes a las estrategias propias de dicha institución. También se argumenta que las decisiones que se toman en el seno familiar no siempre son producto de una responsabilidad compartida, que los derechos y las obligaciones no necesariamente se asumen de igual modo por los integrantes de las familias (Oliveira, Eternod y López, en García, 1999). En nuestra realidad social se han establecido diferencias entre la mano de obra masculina y la femenina, destacando los factores familiares que propician o facilitan la participación de las mujeres en los mercados de trabajo; por ejemplo, el trabajo femenino extrado~éstico asume diversas modalidades: trabajo asalariado, trabajo realizado por cuenta propia y trabajo familiar no remunerado· se discute la influencia de los diversos tipos de trabajo extradornéstico sobre las condiciones de trabajo y la autonomía de las mujeres, sobre las influencias que las distintas actividades extradomésticas ejercen sobre la organización y la dinámica familiar; también es factible analizar si las actividades realizadas por cuenta propia son más compatibles con el desempeño de las tareas domésticas y la crianza de los hijos, como tradicionalmente se ha supuesto. Desde la perspectiva de género, se da valor al papel que desempeñan las mujeres en la organización del consumo familiar en los problemas que se generan por la distribución desigual del poder en la toma de decisiones para usar los recursos económicos y para organizar el consumo en las familias; dentro de estas familias es posible estudiar las formas de control que los esposos ejercen sobre los recursos que ingresan al hogar (Oliveira, Eternod y López, en García, 1999). CAMBIOS DEMOGRÁFICOS Y SOCIOCULTURALES EN LAS FAMILIAS MEXICANAS En este apartado es importante retomar algunas de las definiciones que se han hecho sobre la cultura y los cambios culturales, para posteriormente enunciar algunos de estos cambios que han influido en la dinámica familiar, afectando las relaciones de pareja y las parentales. . La cult~ra es un sistema simbólico de valores, creencias y actitudes; un sistema que es aprendido y compartido; uno que forja e


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influye en las percepciones y comportamiento de las personas que viven bajo ella. Toda cultura tiene una visión del mundo, interpretando también las relaciones sociales, que en casi todos los casos están determinadas por la ideología dominante. Por otro lado, Salles (2002) menciona que es común que en la cultura se integre todo aquello que no se ha podido explicar desde otras variables o instancias analíticas. Esta autora menciona que la cultura otorga sentido a la realidad y, dado que las relaciones de género son otorgadoras de sentido, es impensable la cultura desde un punto de vista que excluya al género. Desde esta perspectiva, analizar la cultura es esclarecer los significados y valores que de manera implícita y explícita se manifiestan en los modos cotidianos de vida. El cambio cultural está relacionado con el modo como los significados y los valores se transforman, por ejemplo, la maternidad y la paternidad, si bien tienen necesariamente un componente biológico, también están condicionadas por factores culturales. Algunos de los campos en que se puede pensar en las transformaciones culturales desde el feminismo, según Salles (2002), son: 1) Los códigos morales. 2) La organización de la vida familiar (se elaboran formas simbólicas para la maternidad y la paternidad, la resignificación de los papeles sociales otorgados a las personas). 3) El planteamiento de la,igualdad genérica en el contexto laboral, dando pauta a una nueva cultura del trabajo. 4) Lasreelaboraciones sobre lo público y lo privado, asociado al trabajo doméstico y extradoméstico. Se cuestionan algunos de los códigos elaborados culturalmente, lo que lleva a proponer nuevas visiones del mundo, lo que implica un rompimiento de los valores instituidos y el surgimiento de nuevos valores con nuevos modos de vida en lo cotidiano. Esteinou (2001) menciona que cuando hablamos de que las familias han estado expuestas a cambios económicos, demográficos y socioculturales no se debe pensar que todas las familias en México han sido afectadas por ellos ni que las que han sido influenciadas lo han sido de manera homogénea, en la misma intensidad y dirección. Entre estos cambios la autora menciona el incremento de familias en que el padre y la madre trabajan fuera del hogar, lo que supone una estructuración distinta; el que la mujer participe en el campo laboral, el descensoen la tasa de fecundidad, el alargamiento de la esperanza de vida, cambios en la nupcialidad, en la disolución de las uniones y

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fa multip!i~idad de modelos culturales. Todos estos cambios no sólo ha~ modificado las estructuras familiares, sino también el tipo de relaclo~es que se establecen en el hogar (Esteinou, 1999). Otro de los cambios que Esteinou menciona es la resignificación de los roles de madre, esposa y ama de casa, lo mismo que los de padre, esposo y proveedor. Esta autora señ.alaque el papel de la mujer ha sido muy valora.do.yvenerado, han Sido las "reinas del hogar", teniendo un recono~lmlento. por ello en la familia y en la sociedad, pero también han ~Ido sancionadas cuando trabajaban fuera del hogar, ya que son consl.deradasmalas madres que abandonaban a su prole y se evi~encla el fracaso del varón al no poder proveer los recursos necesanos para el sostenimiento de su familia. Sin embargo, ahora el que la ~adre tenga a.l~unaactividad laboral y de esta manera contribuya al ble,ne~tar~amJllarc~?a vez es más aceptado, no sólo en el plano econom.lco,smo también como benéfico para su desarrollo personal y profesional. Estaresignificación puede provocar que en lasfamilias: • Se mantenga una estructura tradicional. • Se cons~r~e esta estructura, pero incorporando el trabajo extrado.mestíco de la mujer (mujeres de doble jornada). • Un miembro (generalmente el varón) mantenga el rol tradicion.aI y el otro (generalmente la mujer) modifique sus concepciones sobre los roles familiares. • La pareja modifique su valores sobre los roles familiares que ambos desempeñan. Estos cambios también afectan el ejercicio de la parentalidad porque se ha modificado por las separaciones, divorcios, segundas nupcias y uniones consensuales; por el aplazamiento que las personas están haciendo para tener hijos; por las políticas sociales y de salud que cada vez influyen más en la protección que se debe tener de los niños y las niñas (que deben ser cuidados y atendidos en las familias, que deben recibir educación). Lostipos de estudios que se han hecho sobre los cambios en la familia (Esteinou, 1999; Donati, 1999; Hareven y Adams, 1999; Trost, y Levin, 1999) nos hablan de las nuevas recomposiciones familiares que se han establecido, del incremento de las relaciones LAT(Living Apart Together) que se establecen sobre la base de que "lo amo demasiado; por eso, no quiero vivir con él" (Trost y Levin, 1999, p. 73),


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esto debido a que tienen hijos u otras personas a quienes cuidar; porque trabajan o estudian en lugares distintos; porque no desean repetir el mismo error; porque son personas ya retiradas que desean conservar su vivienda y tener una relación amorosa. Azaola (1999), con referencia a estas personas que no desean que su pareja se mude a su casa por el"bienestar de sus hijos(as)", cuestiona: ¿Las parejas son percibidas como riesgo para los hijos? ¿Implica que ahora los padres tienen mayor dependencia de sus hijos? ¿Qué cambio hay en el papel asignado socialmente a los hijos e hijas? ¿Qué implicaciones sociales tiene? ¿Laincorporación de unos miembros de la familia requiere la expulsión de otros? ¿Por qué se elige expulsar a la pareja? ¿Qué implicación y significado social tiene el que se excluya a la pareja? Estascuestiones requieren ser investigadas y documentadas. IMPORTANCIA DE LA JEFATURA EN LOS HOGARES Familias con jefatura femenina. Se ha mostrado que existen familias con jefatura femenina, lo cual contradice lo que sistemáticamente se asume con el concepto de jefe de hogar, que se atribuye al varón. Según Rodríguez (1994, en González y Tuñon, 1997) el 14% de los hogares en México están dirigidos por mujeres, que cada día enfrentan a una sociedad empeñada en negar ideológica, social, cultural, económica y jurídicamente los arreglos domésticos que cuestionan el modelo hegemónico de familia nuclear. y según el Censo de Población de 1995 (realizado por el Instituto Nacional de Geografia y Estadística, INEGI), cuatro de cada cinco hogares monoparentales están compuestos por la madre y los hijos. La condición de las mujeres que acceden a una jefatura de hogar se ha dividido en tres sectores: las divorciadas, las separadas y las abandonadas; siendo las primeras las que, habiendo participado en el proceso de divorcio, tienen mayores recursos afectivos y sociales para salir adelante como jefas de hogar. Sin embargo, no debe excluirse a aquellas familias dirigidas por mujeres que sostienen sus hogares y viven con su cónyuge, las cuales no aparecen en los datos provenientes de fuentes regulares de información (Schmukler, 1998). ¿Qué es lo que hace que este tipo de hogares incrementen? Quizá la búsqueda de las mujeres por tener relaciones de pareja más

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igualitarias al ser económicamente independientes, o bien como resultado de la violencia doméstica y la dificultad que enfrenan los hombres para asumir el papel de proveedores en condiciones de pobreza extrema y desempleo, es decir, por la irresponsabilidad masculina para asumir las obligaciones familiares. Se han vinculado los niveles altos de escolaridad con una mayor autonomía femenina, con el desempeño de actividades extradomésticas y con mejores condiciones económicas; mientras que la violencia doméstica se vincula, en forma más frecuente, con condiciones económicas precarias y con la incidencia del alcoholismo y machismo. Oliveira, E~erno~y López (García, 1999) consideran importante reiterar que si bien la J,efat~rafemenina suele darse en condiciones desventajosas para las mujeres, con una fuerte carga de desaprobación social, no se descarta que estos hogares pueden ser más el resultado de una elección individual que de una imposición social o familiar. Según la revisión de estudios sobre jefatura femenina realizado por Buvinic en 1990 (González, 1999), estos hogares presentan mayor vulnerabilidad y pobreza, sin embargo, cada día es más cuestionable este dato, ya que generalmente al estudiar los hogares con mayor .pobrezase encuentra que la mayoría están encabezados por las mujeres: pero no se considera si el nivel socioeconómico varió con la partida o ausencia del padre. En las últimas décadas se ha encontrado una disminución en lasjefaturas femeninas de las viudas y un au~ento en las de las divorciadas y separadas, quienes generalmente viven en hogares ampliados o extensos. _Enel estudio de Cortés y Rubalcava (1995, en González, 1999) se senalan algunas características que contradicen lo encontrado por. Buvinic; estos autores señalan que en el 48.5% de los hogares de Jefatura femenina los ingresos provienen exclusivamente de las mujeres, siendo éstos del 2.9% en hogares con jefatura masculina. En los hogares de jefatura femenina hay más trabajadores remunerado~ que en los de jefatura masculina, también existe mayor ausen~l~ del.~adre que percibe algún ingreso, es decir, hay una baja particlpaclon de los que generan o perciben ingresos. Esto nos lleva a plantear que la supuesta vulnerabilidad, por las condiciones que las mujeres enfrentan en el mercado laboral, es compensada por una estrategia colectiva para generar ingresos; generalmente este colectivo es con participación femenina.


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Los hogares más pobres son aquellos con jefatura masculina que tienen ingresos de mujeres exclusivamente, hogares, según los estudios de Garcíay De Ollvelra (1994, en García, 1999), caracterizados además por niveles altos de violencia doméstica, en donde los hombres, quizá por la insatisfacción que les produce su incapacidad para cumplir el papel de proveedor, se relacionan violentamente con las mujeres que generan los ingresos del hogar. De acuerdo a los datos proporcionados por González (1999) se observa que los hogares con jefatura femenina no son los más pobres, que la jefatura del hogar, por sí misma, no explica la mayor o menor pobreza, que tanto la exclusividad de ingresos, como la combinación de éstos genera un nivel socio-económico similar tanto en familias con jefatura femenina como masculina y que los hogares con mayores ingresos son aquellos en que se combinan los ingresos, predominando los femeninos. Estaautora concluye que los hogaresde jefatura femenina no son los espacios de pobreza y vulnerabilidad que se ha dicho, además de que estos tipos de hogares no están caracterizados por la violencia doméstica, donde los conflictos y diferencias son tratados a la luz de los intereses colectivos, siendo escenarios sociales más igualitarios. Esto permite ratificar, contrario a la creencia social, que no es el ingreso económico ni la presencia de un padre como jefe del hogar lo que da un mayor bienestar a los miembros de una familia. Al respecto, Boltvinik (2000a) señala que la pobreza depende del ingreso y del número de personas que dependen de ese ingreso. Así, cuando se pretende comprobar si la pobreza está ligada a la jefatura de los hogares, nos encontramos ante dos problemas: por una parte los criterios de pobreza hacen referencia a los hogares y no a las personas, por lo que resulta dificil analizar la desigualdad interna del hogar, suponiendo siempre una igualdad total entre todos sus miembros: todos son pobres o todos no son pobres en el hogar estudiado. Por otra parte, se encuentra la definición misma de la jefatura, porque hace referencia a una atribución subjetiva: ¿A quién reconoce como jefe la persona entrevistada? Con estas consideraciones el autor realiza un estudio (Boltvinik, 2000b) a partir de los datos de la Encuesta Nacional de Ingresos y Gastos de los Hogares de 1996 (ENIGH96),encontrando lo siguiente:

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Existen diferencias en cuanto a la edad de los jefes y jefas de hogares: más del 70% de ellos tienen entre 21 y 50 años de edad' el 77% de las jefas tienen 41 años o más contra menos del 50% de 'los jefes; en cuanto al nivel de escolaridad, las jefas tienen niveles más bajos que los jefes, esto se asocia a que sus niveles de ingresos sean ~?s bajos. T~~bién encuentra diferencias en las tasas de participacron e~ la actividad económica: 92% (15.3 millones de 16.6 millones) de losJefesson económicamente activos, en tanto que de lasjefas es ~161%(2 millones de 3.3 millones). Sin embargo, la pobreza está más presente en los hogares de jefes activos que en los de jefes inactivos. . Seencuentra que el que una mujer presida un hogar,sobre todo mujeres de edades medias y avanzadas,está asociado con menores ~iveles d~ pobreza. Algunas posibles explicaciones son porque las Jefaspresiden hogares más pequeños, con 1.2 miembros menos por hoga! que los presididos por varones; los miembros son mayores de 12 anos y la tasa de dependencia es más baja, es decir, son hogares en que la mayoría de sus miembros trabaja y aporta ingresos para la manutención familiar. Boltvinik (2000c) divide los hogaresen tres tipos: 1) Hogaresnuc!ear~s.Completos, con cónyuge (con hijos o sin ellos) e incompletos, Sin c~nyuge (con hijos o sin ellos). 2) Hogares ampliados (la pareja, los hiJOSy otros parientes). 3) Hogares unipersonales. Así mismo asocia los hogares,lajefatura y la pobreza, de la manera siguiente: Loshogaresde jefatura femenina son casi todos incompletos o unipersonales, el 43% son nucleares incompletos, 38% ampliados incompletos (29%con prole y 8.7% sin hijos) y 16% son unipersonales, esto constituye el ~7% de los hogares con jefatura femenina, en donde las mujeres no tienen una pareja residente en el mismo hogar. Pero el 72% de ~stoshogarestienen descendientes corresidentes. En los hogares con Jefaturamasculina el 91% son completos y el 84% con descendencia la mayoría con edades menores a los 12 años y el 75% menores de 1~ años;una posible explicación es que los hogares completos continúan teniendo familia, en tanto que los incompletos lo dejan de hacer o lo hacen en una menor tasa (Boltvinik, en Boltvinik y Hernández Laos, 2000). Enlos hogares con jefatura femenina los ingresos por miembro de la familia son menores al de los jefes de hogar, sin embargo, en los primeros son más personas las que trabajan; esto se comprueba cuandoel autor realizaanálisistanto de hogarescon jefatura femenina


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como masculina cuando los jefes son mayores, ya que estos hogares . son menos pobres, debido a que el ingreso aumenta al incrementarse el número de personas del hogar que tienen trabajo remunerado. Dado lo anterior podemos decir que el que un hogar esté presidido por una mujer o por un hombre no determina el grado de pobreza, sino que son varios los aspectos que se tienen que considerar, analizando las diferencias que se dan al interior de uno u otro tipo de hogares. Así es que las mujeres, activa y visiblemente, y los varones, de forma más oculta y menos evidenciada, se están enfrentando a cambios profundos en su relación de pareja. Esto ha generado arreglos diferentes y ha establecido nuevas relaciones de género, en donde las prácticas cotidianas de la vida familiar no han quedado al margen, ya que estos cambios son el resultado de variaciones nacionales e internacionales, sociales y económicas. y son estas prácticas cotidianas e íntimas transformadas las que sientan las bases de la convivencia doméstica, de las relaciones intrafamiliares y de las formas y prácticas sociales de las familias en México. Según Cortés y Rubalcava (1995, en González, 1999) los hogares de jefatura masculina son espacios en donde predominan los ingresos exclusivamente masculinos, la proporción es de tres de cada cuatro hogares. y generalmente lo componen el padre, la madre y los hijos, es decir, lo que denominaremos familias nucleares. Este tipo de hogares son los que se han presentado como el modelo, bajo el cual se analizan los fenómenos sociales y culturales. concernientes a la familia. Se ha evidenciado que en estos hogares el jefe de la familia impone su autoridad y poder sobre la mujer y los hijos, en donde las decisiones las toma y ejecuta él, en donde la familia le está agradecida por mantenerlos y darles lo necesario, o lo que le es posible dar; en donde la valoración a su papel como jefe del hogar le reditúa muchos privilegios, y en los que se asume que, gracias a su presencia, ese grupo es una familia. Esen este tipo de hogares en donde se ha evidenciado mayor desigualdad social y mayor ejercicio de la violencia, tanto física como psicológica. Sin embargo, desde la perspectiva de género es posible estudiar las diferentes familias y descubrir los matices que se presentan al interior de cada una de ellas. Algunos autores mencionan que el trabajo de las mujeres ha propiciado que el varón asuma actividades del trabajo doméstico y de la crianza de los hijos; esto a algunos

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de ello~ n.o les ha generado problemas, sino que han adaptado su a~rendlzaJe de ser hombre a su realidad, ajustando y reajustando diferentes maneras de pensar, sentir y actuar. D:sde este enfoque podemos analizar la experiencia que ellos h.a.ntenl~o, cuando no han estado dispuestos a ser losviolentos, impoSI.tivOS, ajenos, pr~veedores, racionales, autosuficientes e independientes que .Ia SOCiedady, en ocasiones su familia, espera de ellos. Podem~~ ev~denciarque no todos son iguales ni que todos los jefes de !amllla ejercen ,la violencia e imposición; podemos asumir que SOCialmenteel varon es construido y, por tanto, podemos hablar de una deco~s~rucci.ón,.en la que todas laspersonaspuedan aprender una form~ mas Igualitaria de relacionarse, en donde se aprecien más las se~~Janzas que las diferencias, en donde la crianza, el trabajo domestico y ~I extr~doméstico sean actividades compartidas que lleven a un ~IS~O fin y no competencias en donde se ejerce el poder y el autoritarlsmo. .. Falta todavía abordar el estudio de las desigualdades que se manlfiesta~ en el seno de las familias, tanto como las que se present~n entre diferentes generaciones de mujeres, en las relaciones entre gene~osde disti.nt~sgeneraciones y en la crianza de hijos e hijas. Evid:nc.lar.qu~ :asl siempre las condiciones de desigualdad, inequidad, dls~rlmlnaclon, exclusión social y desvalorización que afectan a las mUJeres.en s.urelaci?n.con los hombres sólo se pueden apreciar en el esp~~lo privado e Intimo que les da origen y las sustenta, tal como la f~~llIa. E.n.consecuencia, el conocimiento detallado del entorno f~~~lIar posibillta no sólo la explicación de las variaciones en la condición de la autonomía femenina, sino también la acción que permite ro.~per !as.p~utas tradicionales que norman el comportamiento familiar e lndivlduaf mediante la puesta en marcha de políticas y programas dirigidos a la familia. HACIA LA RESIGNIFICACIÓN DE LAS RELACIONES FAMILIARES En los resultad.os del :studio de Garrido, Reyes, Ortega y Torres (2007? se aprecia que sigue siendo la mujer la principal realizadora y o.rga~l,zadorade las actividades en el hogar; se sigue viendo la participacron de los varones como un apoyo y no precisamente como una


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obligación. Por otra parte, la alternativa para no entablar discusiones en cuanto a estas actividades ha sido la contratación de terceros para hacerlas. No obstante, existe mayor participación del padre en los quehaceresdiarios, en la compra de víveresy en la planeación de salidasy vi- . sitas, aunque hay actividades que parecieran series exclusivas,como las que tienen que ver con los arreglos mecánicos, los trabajos rudos o pesados y el pago de servicios. Aun faltan estudios desde la perspectiva de género de las relaciones de pareja, que no únicamente se centren en el trabajo doméstico, sino a los que se incorporen asuntos de equidad, autonomía, valoración del trabajo doméstico y extradoméstico dentro de la pareja. También es importante romper con la creencia, presente en el imaginario social, de que se puede prescindir de la figura paterna en la crianza, suponer que las madres son las únicas que educan y que es posible para ellas sustituir la función del padre por el sólo hecho de mantener económicamente a la prole. Esnecesario visualizar otras funciones que puedan definir la paternidad y no únicamente la de ser proveedor, pues la ausencia física o psicológica del padre tiene serias consecuencias en el desarrollo de los hijos (Osherson, 1993; Pruett, 2001). Chavarría (1990) señala que el padre no sólo es el punto de conexión entre su descendencia y el mundo exterior, sino que es el encargado de situarlo en ese mundo, darle orientación, impulso y apoyo. Para esta autora, ser padre significa atender a la prole en sus necesidades vitales, darle cuidados, enseñarles a valerse por sí mismos y ser un ejemplo; tomar decisiones cuando aún ellos no lo pueden hacer, y aconsejar, corregir y orientar. Entre las responsabilidades del ser padre y madre, consideradas relevantes para el desarrollo de los hijos, se han encontrado las siguientes: Formar. Es necesario considerar que se está modelando una nueva persona, lo que implica que no sólo es transmitir conocimientos, sino vida. Dentro de esta formación es necesario cubrir todas las áreas: física, emocional, sexual, espiritual, mental, social, recreativa y familiar. Asimismo, recordar que para los hijos es más fácil aprender lo que observan.

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~mar. Esnece~ario que los padres y las madres satisfagan esta neceslda~ en sus hiJosy que los enseñen a amar, no en cuanto sentimiento, Sln~ ~omo acción, y que la muestren con acciones y sean capaces de recibírla. Disci~linar. Un aspecto vinculado con el amor es la disciplina. Esnecesario comprender que el objetivo de la disciplina es formar, lo que va.acorde con.'a edad y la falta; no es golpear, maltratar, descargar la Ira ~ el enojo del padre o la madre; la disciplina no consiste en destruir a una persona sino, en formarla. Dar seguridad. El que la prole viva en un ambiente de tranquilidad y paz ayuda a formar personas seguras, con una buena autoestima lo q~e I.e.spermitirá establecer relaciones sanasy constructivas. Est; no sl~nlfica ~~ausencia de conflictos, de crisis -una utopía-, sino que los hiJose hijas puedan saber que están bajo la autoridad de adultos que saben.actuar, resolver los conflictos cotidianos y respetar los derechos y diferencias de los miembros de su familia. E~tarp~esentes.Pareciera ser que la amenaza de la paternidad es la distancia. Aunque es más usual que las madres estén más cerca física~ e~ocionalmente de los hijos e hijas, es necesario que los padres e.stenI,gualmente presentes, que acorten la distancia y que estén en ~1n~o~lacon todo lo que tiene que ver con aquellos. Es importante msisnr en la necesidad que tienen los hijos e hijas de tal contacto. Dar ~dentidad. Una más de las cosas que los padres y madres proporc~onana ~us hijos e hijas es la identidad. Esvital para la supervivencia emoclona~ y conductual de cada persona saber quién es, lo que ~esulta muy Importante para sus decisiones, actos, conflictos y de~as; es lamentable que la mayoría de las personas que forman la s?cledad no sepan quiénes son y adopten numerosos papeles soerales buscando su identidad y su lugar en la sociedad en que viven. .. Ind~pendientemente del tipo de relación en la pareja, los hijos e hijas requieren para su desarrollo a sus madres y también a suspadres.


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que se estudian desde la perspectiva de género: . 1. Organización doméstica, siendo la división del trabajo pecto central que garantiza la reproducción cotídlanav

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racional de sus miembros. a. Trabajo doméstico • Prestación de servicios domésticos • Prestación de servicios de apoyo • Prestación de servicios de cuidado • Crianza. b. Trabajo extradoméstico • Experiencia laboral • Ocupación. Tipo de trabajo que se realiza • Aportación. Acceso y control de los recursos económicos • Significado personal de la participación laboral • Condición de la actividad de la madre (familia de origen). 2. Estructura de poder, que establece formas de convivencia familiar caracterizadas por jerarquías, privilegios, derechos y obligaciones diferenciales en torno al parentesco, género y generación, aspectos básicos de diferenciación social. a. Toma de diferentes tipos de decisiones. Asociada a la escolaridad. b. Grado de autonomía (ausencia de permisos para realizar actividades fuera del hogar). Se mide por el número de actividades que las esposas pueden realizar sin tener que pedir permiso a sus cónyuges.

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c. Ausencia o presencia de violencia entre los cónyuges. La forma más frecuente de violencia en la pareja es dejarse de hablar, los insultos y la violencia física. d. Ausencia o presencia de violencia de los cónyuges hacia los hijos e hijas. La forma más frecuente de violencia es a través de insultos, violencia física y, en muy pocos casos, dejar de hablar.

RETOS CONCEPTUALES y APLICADOS PARA EL ESTUDIO DE LAS FAMILIAS La perspectiva de género en los estudios de familia contribuye a hacer evidente la diversidad de arreglos familiares (monoparentales, unidades unipersonales, familias con varios proveedores), la dinámica interna de otras unidades domésticas caracterizada por las asimetrías y los conflictos entre géneros y generaciones. De manera que ha venido a erosionar el modelo ideal de familia nuclear con roles diferenciados y sin contradicciones, así como el modelo de familia caracterizado por relaciones solidarias, cuyos miembros comparten derechos y responsabilidades en pos de un interés común. García y De Oliveira (2006) proponen los aspectos siguientes,

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3. Conjunto de valores, creencias y normas -compartido o no por los diferentes miembros- sobre la familia y el papel de sus integrantes. Como podemos notar, los estudios de familia van avanzando en los aspectos que se tienen que tomar en cuenta; ahora bien, notemos que no basta hacer la mención o estudiar hombres y mujeres para decir o suponer que estamos haciendo estudios desde la perspectiva de género, pues para ello tenemos que considerar las cuestiones sustantivas que se plantean en esta perspectiva, según lo menciona Cazés (2005): •

¿En qué orden la estructura patriarcal del mundo y las circunstancias femenina y masculina apoyan o imposibilitan a las mujeres y a los hombres para satisfacer sus necesidades vitales efectuar sus aspiraciones y dar sentido a sus vidas? '

¿Cuál es la distancia entre el desarrollo mujeres y hombres?

¿Cuál es la correspondencia entre el desarrollo y el progreso de los hombres en razón con las mujeres, y viceversa? ¿Las relaciones de dominio y opresión entre los géneros y las formas de ser mujer y ser hombre en el contexto patriarcal benefician el desarrollo social, los derechos humanos y el progreso de la calidad de vida?

personal y social de

¿Cómo se desarrollan los sucesos históricos de las relaciones patriarcales entre los géneros, cómo se transforman y cómo se puede crear una opción no opresiva?

Existen aún muchos aspectos de la vida familiar que merecen ser evidenciados desde la perspectiva de género.


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Familia, identidad y género

Perspectiva de género

po familiar • Reciprocidad Y solidaridad en la pareja en cuanto a los dere. chos individuales Y la responsabilidad en la toma de decisiones • Eliminacióndel autoritarismo y la violencia en las relacionesconyugalesy parentales. • Reconocimiento legal e institucional de la autoridad y la capacidad de la mujer en y fuera de la familia, en especial en las instituciones de salud, de educación y jurídicas. • Reconocimiento del derecho de ambos géneros a la recreación y al placer, incluyendo el sexual. Por otro lado, Giddens (1992, en Revista Nexos, febrero de 2002) menciona que para tener relaciones personales puras (fuera y dentro de la familia) es necesaria la democratización de la vida personal, para la cual considera diferentes aspectos:

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• La autonomía definida como un eier . . . persona, permitiendo la relaciónJ ig~'Ci.~r~flexlvo de mi propia capacidades de otras personas U ,ad~ ~dnay el respeto a las , n In IVI uo autó paz de tratar a otros individ uos como perso nomo es ' caque, el desarrollo de sus potencialidad nas, reconociendo poniendo límites personales ara el es ~o e~ una amenaza y clones, Estos límites son tran~ redid~saneJoexitoso de sus relana usa a otra o cuando se est gbl cada vez que una persorelaciones personales, a ece una codependencia en las

CONCLUSIONES Finalmente, Pérez(Lomas, 1999) menciona que la educación, familiar y escolarizada,siguesiendo la herramienta por medio de la cual la verdad oficial se sigue estableciendo, verdad que no tiene que ver con la igualdad entre los géneros, sino que está en contra. Esimportante señalar esta cita de Pérezporque hace referencia a que varias de las diferencias entre los géneros propician desigualdades. Esta misma autora menciona que hay una gran demanda de igualdad en todos los niveles: de salario, de horarios, de derechos, de oportunidades, educativa, jurídica y de libertades. y el hecho de que todavía no haya sido posible la igualdad entre los géneros nos lleva a replantear qué estrategias se tienen que seguir paraque la crianza y la educación escolarizadapropicien el nacimiento de seres humanos que reflexionen, que sean libres; que se reflexione quién o quiénes deberían definir las categorías, los valores, la moral, la ética, los límites y las posibilidades de vida. Schmukler (1998) señala que si bien la democratización de la familia es aún una utopía, es conveniente impulsar acciones que contribuyan a la igualdad entre los géneros dentro de la vida familiar, de tal manera que se logre: • Reciprocidad Y solidaridad para compartir las responsabilidades domésticas y las tareas de reproducción cotidiana entre los miembros de la pareja y entre los de ambos sexos del gru-

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,

El respeto. Una condición para la d " , por las opiniones y lo~ rasgos p em~cratizaclon es el respeto la violencia, ersona es, en lugar del abuso y

• La apertura, No se trata de escond ' , pareja, el revelarse a otras perso e~ las Intencl,ones reales a la ció n y no de rechazo emocí Inas como medio de comunica. clona) es una aspir " , de la interacción dernocrán acron Inseparable L ca. • os derechos y las obligaciones El au ' cepto elemental de la demo " I~~r considera que el pre, cracla po itíca (no h d ' obligaciones) también se a lica I ' ay erechos Sin derechos reducen el pOde:a b'ta a~ relacíones personales. Los responsabilidades mism r I rano del otro(a) atribuyéndole un equilibrio con ~bligaci~Snqesue ctortan sbuSprivilegios y forman • L en re am os a concordancia entre la rendición d' . confianza, La confianza sin rendición ~~uentas, la autoridad y la pendencia y la rendición d ' cuentas se torna en de, e cuentas Sin confia ' continua lndagación de la nza permite una s razones y acci d I menciona que la confianza en t ones e otro, El autor venido que no requiere de un~ ;~~it~~~:nas ~s un "~rédito" connecesario se abre a la revisión eriód! conti~ua, ~'~Oque si es alguien confiable significa rec p I ,~a,Ser Identificado como , , onocer a integrid d ámbito de igualdad signifi d I en un . ,ca ec arar por qué a personal , cierta acción si a un individuo I id ue motivo se cometió ner buenos motivos por hab e PI',endque lo haga, o significa teer rea Iza o algun .. la vida de un tercero Enlas' a aceren que afecte existiría como una ~artiCUI~~/~~~onee~ entre adultos, la autoridad rrolla capacidades de las q I r donde una persona desación de pareja no se habla ~: :U~:~~dPersonacare~e, En la relaen una relación de progenitores y sus dadsObrd~el conyuge como escen lentes.


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Perspectiva de género

La democracia entre un padre y sus pequeños se presenta d percibe que ellos tienen derecho a ser tratad~s como percuan o se las acciones que no pueden negociarse directamente ~~~a:íl~~:~~~UStifiCadaSampliamente, cuando se procura alcanzar el acuerdo y se mantiene la confianza. AUTO EVALUACiÓN

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1 ¿Qué es la identidad de género? . ¿Por qué se dice que los hogares con jefatura femenina son

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EDUCACiÓN y GÉNERO Guillermina Arenas Montaño María Antonieta Dorantes Gómez

OBJETIVO GENERAL '.

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l objetivo general del presente capítulo será analizar el papel que la educación ha tenido en la reproducción de condiciones, lugares, significados y prácticas asociadas con la diferencia sexual, a fin de identificar los aspectos sociales de la educación informal y formal que intervienen en la construcción genérica de las personas, lo cual permitirá realizar modificaciones de prácticas discriminatorias. OBJETIVOS PARTICULARES 1) Conocer los principios que guiaron la educación de hombres y mujeres en el mundo prehispánico, en la Colonia, en el México Independiente y en el México actual. 2) Identificar los principios de un abordaje a la educación desde una perspectiva de género. 3) Reconocer las principales prácticas de discriminación de género en la escuela. 4) Analizar los principios de una nueva educación que promueva la equidad de género.


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Educación y género Perspectiva de género

INTRODUCCiÓN Un ser humano libre es aquel que piensa de un modo diferente al que podría esperarse en razón de su origen, medio, estado o función y de las opiniones reinantes en su tiempo. NIETZSCHE

En el presente capítulo se analizará el papel que la educación ha tenido en la reproducción de condiciones, lugares, significados y prácticas asociadas con el género de las personas. Inicialmente es importante definir lo que entenderemos por educación. Desde un punto de vista sociológico, una de las más importantes definiciones de la educación es la planteada por Durkheim, quien considera a la educación como la acción ejercida por las generaciones adultas sobre aquellas que no han alcanzado aún un grado de madurez suficiente para desenvolverse en la vida social. De acuerdo con esto, la educación tiene por objetivo suscitar y desarrollar en las personas un cierto número de estados físicos, intelectuales y morales, que les exigen tanto la sociedad política en su conjunto, como el medio específico al que están especialmente destinadas (1996, p. 49). Esen la forma de educar a sus generaciones jóvenes que podemos entender las condiciones de cualquier grupo en un momento determinado de su desarrollo: usos y costumbres, cosmovisión, jerarquías sociales e ideología predominante. La educación no se realiza solamente a través de la palabra, sino que está presente en todos nuestros sentimientos, actitudes y acciones, es el proceso de concentración y vinculación cultural, moral y conductual. De esta manera, gracias a la educación, las nuevas generaciones pueden asimilar y aprender todos los conocimientos necesarios, las normas de conducta, los modos de ser y las formas como se ve el mundo de las generaciones anteriores a ellos, creando ,además, nuevas visiones. La educación también puede ser definida a través de un análisis etimológico: existen dos connotaciones del término educación, la primera proviene del latín educare, que significa 'guiar' o 'conducir' 'instruir"; con estetérmino se representa a la persona como una tabu~ la rasa, como una masaamorfa que el educadory la educadora deben

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moldear y transformar con base en las formas, normas y lineamientos preestablecidos. Esto constituye una educación de tipo tradicional, donde la educadora y el educador deciden todo, es una mera transmisión de conocimientos; aquí se asigna papeles bien definidos a los educandos y al educador: mientras que éste tiene un rol predominante en la transmisión de conocimientos, aquél es receptivo y pasivo. El educador es siempre quien educa, los educandos son los educados; el educador es el que sabe, los educandos quienes no saben; el educador es el sujeto del proceso, los educandos son los objetos pensados; el educador es quien habla, los educandos son quienes escuchan dócilmente; el educador es el que disciplina, los educandos son los disciplinados; el educador es quien opta y prescribe su opción, los educandos son quienes siguen la prescripción; el educador es quien actúa, los educandos son aquellos que tienen la ilusión de participar en la actuación de los educadores; el educador es quien escoge el contenido programático, los educandos son a quienes jamás se les escucha, sólo se adaptan a él; el educador es el que se identifica como la autoridad del saber con su autoridad funcional , la que se opone antagónicamente a la libertad de los educandos. Son éstos quienes deben adaptarse a las determinaciones de aquellos. Finalmente, el educador es el sujeto del proceso; los educandos, son sus objetos. Éste es el tipo de educación bancaria que describe Freire (1998) y que refleja a la sociedad opresora, donde se domestica a los educandos dentro de un marco ideológico para que se preserven las condiciones de opresión social. La segunda connotación de la educación se deriva de educere, palabra latina que significa 'sacar'. En esta concepción el educando tiene un papel activo. Bajo esta línea ,el papel del educador consiste en promover las condiciones para que el educando experimente una profunda transformación. La educación, desde una concepción activa, es bidireccional, tanto el educador trasforma al educando como viceversa. Con el término educere se representa a la persona con un potencial interno valioso, que mediante diferentes procesos cognitivos y procedimientos realizados por ella misma, logra desarrollar para utilizarlo en diferentes niveles de aplicación. El potencial de la persona puede ser fortalecido por medio de la educadora y el educador; la educación es activa y la persona es creativa. El término educere promueve la


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Perspectiva de género

formación de un modelo de persona que por sí misma es capaz de desarrollar infinidad de capacidades; la persona se forma no sólo en el núcleo básico del desarrollo cognitivo, sino también en el núcleo básico de la personalidad. Esta educación promueve en la persona modelos de excelencia y pautas de reconocimiento que sirvan de apoyo a su autoestima; desarrolla el respeto, el humanismo, la autonomía, la dignidad y la libertad de las personas. Cuando se asume la libertad, la persona es capaz de eximirse de los privilegios, prejuicios e idolatrías de su tiempo. La finalidad de esta concepción de la educación consiste en formar el carácter de los seres humanos, de tal modo que puedan integrarse a su hábitat social en una relación positiva con los principios valiosos que la rigen. Esta educación transforma a la persona, le proporciona fundamentos que estimulan la reflexión, la crítica y la acción verdadera sobre la modificación de la realidad. Como se observa, existen dos concepciones de la educación, una que privilegia la transmisión de conocimientos y otra que promueve el desarrollo del potencial interno del educando. Una vez que se identifican las dos concepciones de la educación, el paso siguiente es identificar la relación que éstas guardan con el conjunto de patrones sociales que instituyen las nociones de género. Esto constituye el sistema patriarcal, que implica el establecimiento de un orden que: • Instituye significados, lugares, prácticas, identidades diferenciadas para varones y mujeres. • Establece la diferencia sexual a partir de las características biológicas distintivas. • Considera que estas significaciones son inherentes, ahistóricas e inmutables. • Enmarca la diferencia sexual dentro de una jerarquía que asigna lo público como terreno masculino y lo privado como espacio femenino. • EStigmatiza,reprime y margina que las personas se alejen de los patrones establecidos de acuerdo con su sexo. Cuando vinculamos estas dos acepciones del término educación al terreno de la transmisión de estos patrones patriarcales

Educación V género

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podemos señalar que un d ., nalidad I t . ~, a e ucacion tradicional tendría como fia ransmrsron y reproducción 'ti (d y explícita) de los mismos mient acn ca e manera implícita propondría el cuestiona miento d:a~ ~ue una educación liberadora respeto a la diversidad ya la equidad sd~s~atrones y promovería el At 'd genero. . raves e la educación tradicional cada sociedad va duciendo estas connotaciones sociales en función del género de las personas lo que h d· e as ~iales (la 'familia, ~ae eS~~:I;~e¡'~~~:~~~ l~i~;~:~i:~s ~nStituciones soImportante de esta educación lo constit I . n .a.s?ecto muy ~e género y la c?nsideración de que son ~ineh:r~~~::~~S;~~odned:~I:s umana, es decir, que están anclados en una esencia hu reten tant~, no pueden ser transformados. A través de esta ;ana .~,por van Imponiendo diferentes prácticas sí e ucacion se ~~rma.s: valor~s a par~r de la diferen;ia s:~~II~~nr:~~~s~;~~~~~~~~~ .s exrs e una Jerar.qula.enla cual lo masculino (los varones, lo úblico, I.acultura, la inteligencia, la fuerza) tiene mayor valor que lo femenl~o (las mujeres, lo privado, la naturaleza). Laeducación que se t:ansmlte va rep.rod~~iendo estas concepciones a través de las prácticas, del lenguaje utilizado, de las omisiones, de los espacios asignad?s. Esto se ha traducido a lo largo de la historia en una educación diferente para hombres y mujeres. Por ejemplo, se ha señalado que los hombres son "naturalmente" superiores a las mujeres en virtud de ~ue son más racionales y más fuertes. Por lo que se refiere a las m.uJer~sse ha afirmado que éstas son "naturalmente" más débiles e.lnfeno:es en intelecto (Hierro, 2001, p. 218). La afirmación de esta ~Iferencla sexual ha justificado, durante muchos siglos de la histona humana, la exclusión de las mujeres de los espacios educativos tomando en consideración este "carácter débil y poco racional". Bajo este paradigma patriarcal se ha otorgado significado a lo femenino y lo masculino a partir de la postulación de esencias inmutables da?as p~r cuestiones biológicas, que por esta misma naturaleza resulta Imposible transformar. Una ~ducación crítica tendrá como objetivo, en relación con e.sta.s. cu~stiones, ubicar el carácter socialmente construido de las slgnlficaclone~ de las diferencias de género. Esta perspectiva considera que las Situaciones discriminatorias que experimentan las personasa partir de su género no son naturales ni tienen su fundamento


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Perspectiva de género

en la biología, sino que son un producto social, razón por la cual pueden ser transformadas. ANTECEDENTES DE LA EDUCACiÓN EN MÉXICO Mucha de la educación que hemos recibido puede ubicarse dentro del paradigma que busca la reproducción de los patrones de género. A lo largo de la historia de nuestro país podemos identificar distintos momentos cruciales por cuanto a las prácticas educativas que han ido instituyendo patrones patriarcales. A nivel general es posible identificar cuatro grandes etapas por cuanto a esta conformación social: el mundo prehispánico, la Colonia, el México Independiente y el México actual. En los apartados siguientes se describirá de manera sucinta los principios que han guiado la educación de hombres y mujeres durante estas etapas. Educación prehispánica Para tener una mayor comprensión de nuestra educación actual, es menester volver los ojos a nuestro pasado más remoto. Una de lassociedades que nos dio origen fue la sociedad mexica. Lasnoticias que tenemos de esta época llegaron a nosotros gracias a la recopilación que hicieron los frailes españoles justo después de la Conquista de México-Tenochtitlan; de entre ellos, la más importante es, sin lugar a dudas, la Historia General de las Cosasde la Nueva España, de Fray Bernardino de Sahagún,donde se describe la educación que recibían los niños y las niñas. Entre las prácticas rituales de los nahuas existía la siguiente: cuando un niño nacía lo prometían como un don y lo llevaban al Calmécac para que llegara a ser sacerdote o al Telpochcalli para que fuera un guerrero, así, todos los padres tenían cuidado de llevar a sus hijos a las escuelas. Los ideales de la educación de los nahuas y el supremo ideal humano entre ellos, el "varón maduro", omacic oquichtli, debía poseer un corazón firme como piedra, ser resistente como el tronco de un árbol, ser dueño de un rostro y un corazón. Entre los informes de Sahagún existen textos que pudieran describirse como reglamentos, donde se especifica qué es lo que se enseñaba a los jóvenes nahuas y cómo se llevaba a cabo la formación de su "rostro y corazón". El Códice Florentino menciona las

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práctic~s e~teriores siguientes: "ir a traer a cuestas la leña, barrer los patios, Ir a buscar puntas de maguey", dirigidas principalmente a d:~arrollar,en los estudiantes el sentido de la obligación y responsabilidad. ASIse iba dando firmeza a la voluntad o, como decían los nahuas, "al corazón" de los educandos. La enseñanza intelectual en el Calmécac era la destinada a la nobleza, estaba dirigida a formar "rostros sabios"; se enseñaban poesía y cantos de los llamados divino,s,d~~de se encerraba lo más elevado del pensamiento religioso y filosofico de los nahuas; se aprendía el manejo del tona/pohualli o 'cuenta de los días', la interpretación de los sueños y los mitos así como los anales históricos donde se precisaban las fechas de' hechos p,a,sado~de importancia; se enseñaba el lenguaje noble y la exp,reslon CUidadosa.El Telpochcalli era la escuela a la que asistían C~SItodos los plebeyos, las enseñanzas que se daban eran: a unos como usar las armas, a otros cómo cazar, cómo hacer cautivos en la guerra, cómo tirar la cerbatana, cómo arrojar la piedra, cómo lanzar el dardo y la flecha mediante la tiradera y el arco, cómo cazar con la re~ y ~on cordeles; todos aprendían a usar el escudo y la macana. ASI,mientras en el Ca/mécacse ponía más empeño en la enseñanza de tipo intelectual, en el Telpochcalli se preocupaban especialmente por lo que se refiere al desarrollo de las habilidades del joven para la guerra y la caza (León, 1958:193). Por otro lado, cuando las niñas cumplían 40 días de nacidas las ofrecían al señor Dios; los padres las criaban hasta los ocho años de edad, que era el tiempo destinado para entrar en clausura' los parientes las conducían al templo coronadas de flores y vestidas a su ~sanzagalanamente, donde eran recibidas por el sumo sacerdote: En este lugar sagrado haz de hacer penitencia por los tuyos, que andan vagando por el mundo distraídos y enmarañados de cosas innecesarias para la vida... determine desde ahora tu corazón a sufrir co~ alegría el hambre de los ayunos y a practicar los mandatos ... barreras los patios, cuidarás de tu pureza, pues sólo con que tengas deseo de pecar, ya habrás pecado.., te exhorto a que obedezcas a todos, por,que la obediencia representa la buena crianza y nobleza de los antiguos, con lo cual serás honesta y recogida, y dejarás de ser desvergonzada y liviana" (Alva, 1985:44-49). De la escuela femenina o ~c~pochcalli'casa de doncellas' casi ni hay noticias, es posible que existieran varias dedicadas a distintos dioses. Fray Diego Durán


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habla de las doncellas dedicadas al dios Huitzilopochtli. Según consigna el mencionado libro VIII de Sahagún, a lasjóvenes nobles se les criaba en casa hasta la edad de seis o siete años, donde sus madres o amas les instruían en buen lenguaje y buenos modales; entre los 10 y 12 años entraban al Calmécac o al Mixcoacalli; en el primero, a los varones se les enseñaba a hacer penitencia, a servir y ofrendar a los dioses, hábitos de limpieza, y se les inculcaban valores como la humildad y la castidad. Otro cronista, el padre jesuita Joseph de Acosta, completa la información acerca de las enseñanzas en este sitio: se les acostumbraba a comer mal y dormir peor "para que no fueran regalados"; es decir, para que no se criaran ajenos a la vida dura de la campaña militar; madrugaban y velaban, aprendían a hacer penitencia con espinas de maguey, acostumbraban el baño frío nocturno, practicaban abstinencia y ayuno, solían ir con poca ropa para aumentar la resistencia al frío. A los 15 años de edad comenzaba su enseñanza militar y a los 20 años se les llevaba, por fin, a la guerra. En este momento debían demostrar que eran capaces de vencer el miedo y dirigir una campaña en una serie de guerras de iniciación. Aquellos que mostraban algún indicio de cobardía eran tomados como prisioneros sin gran lucha, o bien regresaban de varias guerras sin haber capturado a ningún enemigo, sufrían del rechazo de la sociedad en general (López, 1996:29-40). En cuanto a las mujeres, entraban como servidoras del templo o cihuatlamacazqui; se les inculcaba también la castidad y permanecían en encierro hasta la edad de casarse. Ellas hacían la comida que se ofrendaba a los dioses y la que consumían los tlamatinimeh o sabios y los sacerdotes; molían el cocaoatl, cantaban y danzaban y, en general, se les enseñaba a ser discretas, obedientes y humildes. En conclusión, podemos señalar, recuperando las aportaciones de Graciela Hierro (1998), que la educación que se daba a las mujeres dentro de estas culturas perpetuaba su papel tradicional de esposas y madres, dependiendo siempre de un hombre padre, marido, hermano, hijo, para su defensa y valer. Sus tareas domésticas, artesanales, agrícolas, comerciales y religiosas eran siempre subordinadas frente a su destino absoluto: el matrimonio.

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Educación en la Colonia Las c~ndicion~s .de la educación que recibían hombres y mujeres cam~laron drasticamente durante la Colonia. Al llegar la Conquista e.s?a~ol~,una de I~s preocupaciones fue la educación de la poblacion indígena, habla que transformar la cosmovisión mexicana en una concepción cristiana del mundo, es decir, "humanizarla"; de ahí que el catecismo se convirtió en la tarea educativa más importante de los conquistadores, pues consistía en aprender de memoria las oracio~es principales, los mandamientos de Dios y de la iglesia; para esta Instrucción se ordenó que "a los niños los traerán junto a los hombres grandes y a las niñas las traerán junto a las mujeres grandes para que aprendan honestidad y castidad" (Kobayashi, 1974:270). La educación femenina en el Virreinato puede ordenarse ,en tres etapas: la del catecismo, de la cultura media y la educación superior autodidáctica. La primera etapa consiste en la educación de la cultura occidental católica; es decir, la enseñanza de las "verdades básicas", por ejemplo, la explicación de la existencia humana y de la creación divina. La segunda etapa, que se caracteriza c_?mode "cultura media", es el periodo formativo cuando ya se ensena a leer, a escribir y las cuatro reglas de la aritmética, además de los "oficios mujeriles". También se preocupan los conquistadores por la "cultura del corazón"; es decir, de la enseñanza moral. Constituye esta formación la práctica de las virtudes humanas, que se co~sideran indis~ensables para la vida en sociedad. Lasmujeres estudiaban y aprendían, celosamente custodiadas por los varones de la familia y bajo el ojo muy cercano del inquisidor. A las mujeres los oficios mujeriles les hacían aprender economía doméstica, para el buen manejo de criados, esclavos y trabajadores a su servicio. Esta segunda etapa se realizaba en los colegios, conventos, beaterios, en las escuelas públicas y privadas; también en las escuelas llamadas "amigas" y en otros colegios e internados. La segunda fase de la ed~:a.c!ón femenina virreinal es el antecedente o la base para la adqul~lclon de una cultura superior. Para las mujeres, los estudios superiores se tenían que realizar de manera autodidacta. Los maest~os s~guían los intereses de las alumnas, siempre bajo estricta viglla~c~ade los confesores. Estosestudios superiores podían ser Matemáticas, Astronomía, Latín, Griego, Música y Pintura. Los maestros


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particulares generalmente eran bachilleres de la Real Pontificia Universidad o maestros de colegios mayores.

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registrada en la -Normal de Profesores. Entre los argumentos esgrimidos para justificar tal política, destaca la convicción de esta generación en la supuesta capacidad innata de las mujeres para las tareas educativas, para el cuidado moral y material de la niñez (Alvarado y Becerril, 2001). Así, Justo Sierra, el gran impulsor de la educación, señalaba que las mujeres eran las más aptas para el cuidado moral y material de los niños (Sierra, 1902).

Educación en el México Independiente Al triunfo de la Independencia, los libertadores pretendieron transformar al país, retomando el modelo de naciones como lnglaterra y Francia. Se pretendía modernizar las estructuras y, para este fin, la educación tenía un lugar muy importante. Siguiendo una ideología liberal, se buscaba, a través de la educación, formar individuos capaces que respondieran a las exigencias del país. La educación cobró gran importancia en virtud de que era concebida como un instrumento necesario para el cambio del país (Saladino, 2009:479). Durante este periodo, la educación de niños y niñas se daba en instituciones separadas. Las niñas que habitaban en grandes ciudades continuaron asistiendo a los centros conocidos como "amigas". La función principal que guiaba el quehacer educativo hacia las mujeres era el de lograr que ellas acataran el papel que les correspondía como madres y esposas. Posteriormente, las demandas sociales de producción perrnitíeron que en pleno siglo XIX se crearan las primeras instituciones de capacitación para mujeres, éstas incluían las escuelas de artes y oficios, las normales y las escuelas de Enfermería (Saladino, 2009:492). Durante el Porfiriato se continuó brindando una educación distinta para varones y mujeres en instituciones diversas y con pIanes de estudio diferentes, cuyo objetivo era formar a las personas para los papeles que la sociedad les demandaba. Así las mujeres se preparaban para desempeñar sus roles dentro del hogar, mientras que los varones se formaban para ingresar dentro del ámbito público. Cuando en 1910 se instituye la Universidad Nacional Autónoma de México pocas fueron las mujeres que ingresaron a estudios universitarios en virtud de que era mal visto que pretendieran terminar con la dependencia económica que tenían hacia sus maridos, padres o hermanos (Córdova, 2005). Mientras que dentro de la Universidad la incorporación de las mujeres fue más lenta, no ocurrió lo mismo en el campo de la formación magisterial, lo cual vivió un impulso. A fines del siglo XIX, la matrícula de la Escuela Normal de Profesoras era bastante superior a la

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Educación en el México actual Aunque las condiciones respecto a la equidad de género en la educación que se imparte en México distan mucho de ser las ideales es preciso reconocer los avances que se han dado en esta materia: En México, las estadísticas muestran que en los últimos 30 años se ha incrementado el número de mujeres que acceden a realizar estudios dentro de las escuelas. Al tener un mayor acceso a todos los niveles de educación, las mujeres están escalando nuevas posiciones dentro de la esfera social. Aunque esto todavía no es una realidad que llegue a todas las clases sociales o etnias es preciso destacar los avances.

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Un mayor número de mujeres se están incorporando a las instituciones de educación superior, sin embargo, sigue existiendo una distribución y valorización diferente de las carreras en función del género de las personas; las tradicionalmente consideradas "femeninas" no tienen el mismo estatus o prestigio que las profesiones "masculinas", lo cual repercute en la falta de reconocimiento profesional, social y, probablemente, en una percepción de salarios bajos. Asimismo, en el caso de las mujeres que se instruyen en licenciaturas mayoritariamente pobladas por hombres, se encuentran en franca desventaja para la obtención de un trabajo reconocido y bien remunerado. Aún se piensa que a las mujeres no les interesa realizarse como profesionales; además, tener hijos sigue siendo un factor importante para la no contratación de las mujeres. Al hacer un análisis de los porcentajes de mujeres que están realizando estudios universitarios, se tiene que en el año 2002 se muestran mayores porcentajes en las áreas de estudio de Educación y Humanidades (65.6%), Cienciasde la Salud (61.3%), Ciencias Sociales y Administrativas (57.5%); mientras que su incidencia es menor


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en áreas como Ingeniería y Tecnología (30.5%) Y Ciencias Agropecuarias (28.2%), existiendo una aproximación a la paridad en las áreas de Ciencias Naturales y Exactas (47.2%). De las carreras más pobladas en el 2002 observamos que licenciaturas como Psicología (77.81%) o Pedagogía (76.96%) tienen una mayor población femenina; en contraste con carreras con población mayoritariamente masculina como Ingeniería Industrial (68.94%), Ingeniería Mecánica (93.17%) e Ingeniería en Sistemas Computacionales (69.58%) Este tipo de disparidades se mantiene tanto en el ingreso, permanencia, egreso y titulación. Las áreas donde predominan las mujeres que han realizado una maestría son: en ciencias de la salud, ciencias sociales, administrativas, educación y humanidades y donde tienen menos presencia es en ingeniería, tecnología y ciencias agropecuarias (ANUlES,2002). En estos apartados, que han mostrado las prácticas que han caracterizado a lo largo de la historia de México a la educación, podemos observar un común denominador: el papel de la educación en la reproducción de los roles sociales. La educación ha sido uno de los medios a través de los cuales se ha ido formando a las personas a fin de desempeñar los papeles que la sociedad les ha asignado. No obstante, esta reproducción no es mecánica ni los educandos son totalmente pasivos. Estos procesos son dinámicos y han presentado una transformación histórica. Este hecho nos muestra cómo la asignación de roles sociales es un producto histórico y no una cuestión de esencias femeninas o masculinas. En los apartados siguientes se abordará la manera en que dentro de nuestra condición actual, la escuela, una de las principales instituciones formativas, contribuye a la reproducción de los patrones patriarcales. LA ESCUELACOMO REPRODUCTORA DE LOS PATRONES PATRIARCALES Uno de las principales instituciones sociales que contribuyen a la reproducción de los patrones patriarcales es la escuela, ésta no media ni pretende cambiar las estructuras de la sociedad ni las características de las personas que ocupan posiciones de riqueza, estatus y poder (Bourdieu, 1998:17).

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Abordaje desde una perspectiva de género El es.tud.io.de I~,manera como la escuela reproduce las condiciones ~e dls.cnn;lnaclon de género ha cobrado importancia a partir de las Investi~ac~on~~surgidas desde la perspectiva de género. La escuela como rnstttuclón social, en muchos casos, reproduce este esquema Dentro de la escuela existen muchas prácticas en las cuales las per~on~~ lIe~an a c~bo ~~ trato discriminatorio de género apelando a Justific~Clones,blologlclstas para considerarlo como algo natural. El trato diferenciado y discriminatorio que reciben varones y mujeres ~en,tro de la escuela se justifica afirmando que es por su naturaleza Intnnse,ca,De esta f~rma, ~n,la escuela a las personas se les asignan d~termlnad,os espacios, pnvllegios o condiciones en función de su g~~ero, El sls~emap~triarcal con sus prescripciones sobre lo que significa ser varon o mujer funciona dentro de la escuela y es visto como p~rte nat~ral de las relaciones entre los géneros, La perspectiva de genero ubica ~s~~scondiciones como parte de un ejercicio de poder y plantea la P~sl~llIdad de construir espacios en los que se cuestionen estas prescrrpcronss y se prepondere la equidad de género, El abordar el problema de la educación que se transmite en las escu~'a desde una perspectiva de género parte de una premisa que sostiene ~ue desde tiempos remotos el proceso de socialización se ha construido desde una orientación de dominación masculina esto es, que los h~chos sociales y las formas de ser y hacer de los h?m~res y las mujeres se han explicado desde una mirada androcéntrica que privilegia el dominio masculino (Arenas, 2004:14) Mucho~ de los fenó~enos que ocurren dentro de las aulas puede'n ser explicados ,atendlend~ a una lógica androcéntrica que privilegia el punto '" d de ' vista , masculino y que niega la visión femenina ' Esta vlslon an rocentnca ha asociado lo masculino con lo universal a fin de representa~ a lo "humano, confinando a lo. femenino a una posición secun?ana d~ al~eri~ad devaluada", Este modo dualista de pensar cr~a dlferencl~s binarias con el fin de ordenarlas en una escalajerár~ulca"de relaciones de poder, Lo femenino es considerado como lo otro, en tanto que lo masculino, entendido como lo propiamente humano, se plantea como lo universal (Braidotti 2000) Lasdif . bai ' ' I erencl,as ,a,Joeste paradigma patriarcal se han utilizado para justificar el ejercicro del poder sobre las mujeres, Existen múltiples ejemplos de


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esto dentro de las prácticas que se realizan dentro de las escuelas. La falta de contenidos que aborden las aportaciones de las mujeres en las diversas áreas del saber científico y humanístico, la utilización de un lenguaje neutro que privilegia la visión masculina, son sólo algunos de los fenómenos que ponen de manifiesto esta tendencia. Otro de los principios que sustentan una aproximación a la escuela desde una perspectiva de género es el que señala que estas condiciones de discriminación tienen un origen social y, por tanto, no son intrínsecas al sexo de las personas. Este reconocimiento permite plantear la posibilidad de una transformación de estas condiciones, para ello, un primer paso es la identificación de los mecanismos a través de los cuales operan. Discriminación

de género en la escuela

Cuando se aborda el tema de la discriminación de género en la escuela muchos autores consideran como uno de los principales indicadores la matrícula diferenciada por género. En tanto que el número de mujeres que ingresan a la escuela se está incrementando, podría pensarse que esto implicaría que la discriminación está disminuyendo. No obstante, aunque es importante lograr que un mayor número de mujeres tengan acceso a la educación, esto por sí solo no constituye un indicador de un cambio en las condiciones bajo las que las personas se forman en la escuela; es menester considerar cómo dentro de ella se reproducen los patrones sociales de discriminación por género. Más allá de estudiar el acceso numérico diferenciado por género como único indicador de la igualdad de oportunidades a la educación, es preciso evidenciar la discriminación de género presente en las prácticas, en el lenguaje, en los currículos, en las relaciones interpersonales, en los contenidos yen los valores que se transmiten en la educación. Desde esta perspectiva, el problema ya no se reduce sólo a presentar los porcentajes de varones o mujeres que tienen acceso a las escuelas, sino a identificar también cuáles son las condiciones de igualdad de oportunidades bajo las cuales se da su formación académica, en tanto esto reproduce, en muchas ocasiones, las condiciones de discriminación y marginación de género existentes en la sociedad: a través de las prácticas, en la utilización del lenguaje, en los privilegios y en la asignación de lugares y significados.

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Tanto a nivel del currículo formal como del oculto los estudiantes reciben una formación en la que se marca lo que significa ser varón o mujer, en la que se establece lo que está permitido para cada sexo asícomo los espacios en los que pueden desenvolverse. Laformación académica explícita (la que reciben en los contenidos curriculares) así como la implícita (la que reciben en las prácticas cotidianas, en el lenguaje que se utiliza, en los valores que se transmiten) en cuanto a género es un punto muy importante a considerar que marcará el desarrollo personal y social de los estudiantes. En la escuela los estudiantes incorporan valores, significaciones y prácticas acerca de lo que significa ser hombre y mujer, estos aspectos influyen en la conformación de su identidad de género.La formación que se recibe en la escuela generalmente no cuestiona los estereotipos sexuales y las condiciones de discriminación y marginación de género. La instrucc.i~n escolar ~n la mayoría de las ocasiones, instituye prácticas y condiciones que Influyen de manera importante en la reproducción de identidades femeninas y masculinas. La instrucción que se da en la escuela no sólo incluye información sobre temas académicos sino que también repercute en la formación de identidades femeninas y. masculi~as que reproducen los significados y espacios que la soc~edadasigna a la diferencia sexual. La escuela reproduce significaciones culturales de la diferencia de género, haciendo pasar como naturales las condiciones diferenciales y discriminatorias en las que se desenvuelven las personas. La escuela es uno de los medios a través de los cuales se instituye una dominación simbólica inscrita dentro del lenguaje mismo, en los sistemas de representación de lo femenino y lo masculino. En la vida cotidiana de las escuelas y particularmente en las aulas es donde se establecen relaciones que promueven y trasmiten valores, reglas, normas y formas de comportarse al prescribir y reforzar de manera estigmatizada los estereotipos de género. El análisis de estas si~uacionesposibilita cuestionar la reproducción de los patrones patnarcales dentro de la escuela. A continuación mencionaremos algunos de los fenómenos que ocurren dentro de las escuelas y que ponen de manifiesto la reproducción de patrones patriarcales. • La ausencia de las aportaciones de las mujeres en los planes y programas de estudio. Si revisamos los contenidos de los pianes y programas observaremos que en la mayoría de los casos


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no se presta atención a las aportaciones de las mujeres dentro de los camposde la ciencia y de lashumanidades. Estose pone de manifiesto si observamos las imágenes de los libros de texto, de los manuales y otro tipo de material didáctico, en donde impera una iconografía masculina. • Lafeminización de carreras con la consecuente baja de estatus económico y profesional. Cuando las carreras profesionales se feminizan (el ejercicio de las mismas es preponderantemente realizado por mujeres) se observa que el ingreso económico que se recibe por ejercerlas se deteriora, así como la connotación social. Un ejemplo de esto es la fernlnlzación de la carrera de Odontología (González, 2008). • Laformación que se recibe en las escuelas reproduce la asignación de actividades profesionales "propias de mujeres" (las que se refieren al cuidado y atención) y las "propias de varones" (las que se relacionan con el trabajo calificado y el desempeño público). Esto implica la reproducción dentro de la escuela de las tendencias que pretenden formar a las mujeres para guiar su vida al servicio de los otros, mientras que a los hombres se les forma para lograr el éxito profesional. . • Lasprácticas de hostigamiento y acoso sexual por parte de varones hacia mujeres dentro de la escuela. El hostigamiento y el acoso sexualdentro de las escuelases una forma de discriminación por razón del género. La diferencia entre el hostigamiento y el acoso radica en que el primero se ejerce entre personas que son consideradas como iguales, en tanto en el segundo se da entre una persona que tiene poder sobre otra que ocupa un lugar subordinado. El acoso sexual es cualquier conducta o avance sexual no deseado, el cual interfiere con el derecho de los educandos a gozar de una educación digna. En la escuela, el acoso sexual puede ser un resultado de palabras o conducta sexual que ofenda, marque con estigma, degrade, intimide o amenace a la persona que no ceda a las proposiciones de alguien que ejerza un puesto de poder dentro de la escuela (maestro, directivo). El acoso sexual en la escuela se da cuando una persona es presionada contra su voluntad a elegir entre acceder a las demandas sexuales o sufrir un perjuicio en su situación académica. Si bien es cierto que los varones pueden

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ser objeto de acoso sexual, la realidad es que en casi todos los casos las mujeres son víctimas de esta forma de violencia. Dentro del aula escolar se ha investigado el ejercicio de control por parte de los niños sobre las niñas. Askew y Ross(1991:39) han observado en sus investigaciones en escuelas primarias que las niñas son 'sometidas a un hostigamiento por parte de los niños. Esto se manifiesta en comentarios críticos y mordaces respecto al trabajo de las niñas, provocaciones, tratos bruscos y otras formas de intimidación. La atención diferenciada de los docentes hacia varones y mujeres. Es común observar dentro de la escuela la actitud que muchos docentes tienen respecto de brindar mayor atención a los varones, lo cual los está preparando -desde pequeñospara ocupar puestos de mayor responsabilidad y estatus. Dentro de los espacios escolares existe la tendencia a fomentar en los niños actividades que implican la competencia, mientras que a las niñas se les impulsa desarrollar actividades que preponderan el cuidado de las relaciones interpersonales. A este respecto se ha encontrado, en estudios realizados en escuelas primarias, que los niños dominan los espacios físicos dentro del campo escolar y reciben mayor atención por parte del profesorado (Askew y Ross,1991:40). La falta de información de los estudiantes acerca de las problemáticasde la discriminaciónde género. La incorporación de la perspectiva de género dentro de los planes y programas de estudios es muy incipiente, es necesario incorporar dentro de planes y programas la perspectiva de género a fin de evidenciar las problemática por cuanto a la discriminación de género, así como las propuestas para buscar condiciones más equitativas. La utilización dentro del aula de un lenguaje androcéntrico. Dentro del aula generalmente se utiliza un lenguaje que universaliza la experiencia masculina, al mismo tiempo que niega la femenina. Esto se observa en múltiples prácticas dentro del aula escolar, por ejemplo, cuando los profesores hacen referencia a la experiencia masculina tratando de mostrar que engloba la experiencia de mujeres y varones; cuando se emplea un lenguaje que nombra más a los hombres y en menor medida a las mujeres. En estos y muchos otros casos, la categoría


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de género no traspasa al lenguaje escolar, que sigue negando la presencia de las mujeres. • Falta de reconocimiento y valoración dentro de la escuela de la diversidad sexual y familiar. Como parte del currículo formal y del oculto en mucho de la educación que se imparte en las escuelas se parte del presupuesto de la existencia de un solo modelo familiar y sexual: la familia heterosexual en la cual hay un padre, una madre e hijos. Las nuevas condiciones sociales reclaman que dentro de las escuelas se integren contenidos que muestren la diversidad de patrones familiares (familias uniparentales, con padres del mismo sexo, reconstruidas) y de orientaciones sexuales (homosexualidad, heterosexualidad, bisexualidad). • Invisibilidad de la doble jornada que las mujeres desempeñan en su actividad como estudiantes, docentes, investigadoras, etc. Es necesario evidenciar cuáles son las condiciones diferenciales, bajo las cuales se desarrolla el trabajo académico; al observarlas se pondrá de manifiesto que las condiciones de las mujeres, en su gran mayoría, incluyen el ejercicio de una doble jornada. Una auténtica equidad de género implicaría el reconocimiento de estas condiciones desiguales con el objeto de construir condiciones más equitativas. • La menor participación de las mujeres en los estudios especializados y técnicos, que les permitirán contar con una mayor remuneración económica y prestigio social. Cuando se analiza la proporción de varones y mujeres en la jerarquía de trabajos mejor remunerados se observa que a medida que aumenta el nivel disminuye la proporción de mujeres que acceden a puestos altos. Todos estos aspectos, entre otros, dan cuenta de la manera en que la escuela reproduce las condiciones de marginación y discriminación por género, tanto desde el currículo formal como del oculto; consciente o inconscientemente los diversos agentes del proceso educativo pueden estar reproduciendo patrones de discriminación de género dentro de la escuela. En este sentido, es muy importante pasar de la inconsciencia a la conciencia, ser capaces de analizar con sentido crítico lo que se está transmitiendo en el aula,

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los contenidos de los libros de texto, la falta de congruencia entre lo que se enseña desde el currículo explícito y lo que se transmite con el currículo oculto (Moreno, 2004). La construcci?n .de un ~uevo proyecto de escuela que tenga como una de sus principales finalidades el desarrollo de condiciones d.~equidad de género es un aspecto que actualmente está promoviéndose en los diferentes países. En el apartado siguiente se presentarán algunas ideas alrededor de las cuales podría construirse un nuevo modelo educativo que incorpore la equidad de género. HACIA UNA NUEVA EDUCACiÓN Por lavía de la educa'ción no nacemos al mundo sino al tiempo; nos vemos cargadas de sirnbolosv famas pretéritas, de amenazas y esperanzas venideras siempre populosas entre las que se escurrirá apenas el agobiado presente personal. SAVATER1

Una de laspropuestas más importantes que aborda la educación desde ~~a perspectiva de género es la coeducación, definida como educaclo~ d~moc;áti~a de niñas y niños, hombres y mujeres, para las e~ferasp~bl~cas(ámbito laboral y político) y las esferas privadas (ámbito domestico y de las relaciones personales) (Tomé, 2002:50). A lo largo de la historia de la educación en nuestro país hemos observado que una práctica común ha sido la imposición de una educación diferente para varones y mujeres. Dentro de esta educación, a las mujeres se les ha pretendido formar para desarrollarse en los ámbitos privados, mientras que la educación recibida por los hombres ha pretendido prepararlos para desarrollarse en los ámbitos públicos. Actualmente, en nuestro país, en muchas escuelas, la proporción de alumnos y las alumnas es cada vez más similar no obstante, a pesar de que los planes y programas son los mismos para ambos, aún se presentan diferencias en cuanto a la educación I SAVATER, Fernando. (1997): El valor de educar. México: Instituto de Estudios Educativos y S1l1dicales de América.


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que se recibe: en este sentido, continúa promoviendo la adopción de roles diferenciados considerando el sexo de las personas. Precisamente, la propuesta de una coeducación pretende terminar con estas diferencias V discriminaciones. Esto se plantea no sólo a través del cambio de planes y programas a nivel del currículo formal, sino también en el currículo oculto; en las prácticas educativas que conforman las circunstancias particulares bajo las cuales se desarrollan los procesos educativos. La coeducación tiene como una de sus principales finalidades la reconstrucción de las relaciones entre varones V mujeres (Blanco, 2002). En lugar del papel reproductor de la discriminación de género que la educación ha tenido, esta propuesta educativa busca sentar las bases para el establecimiento de relaciones en donde se preserve la equidad de género. La coeducación se propone terminar con los factores internos V externos presentes en las escuelas que promueven la discriminación de género. Esto implica el desarrollo de estrategias que involucren el cambio de actitudes, valores, prácticas discriminatorias V sexistas, a fin de impulsar una cultura de equidad de género en todos los niveles de educación. La coeducación tiene como finalidad la identificación de la marginación, dominio V exclusión de la que son objeto las personas a partir de su género, para así buscar los medios más adecuados en pos de la transformación de estas condiciones. Esta nueva educación dirige sus esfuerzos a conseguir el establecimiento de condiciones de equidad de género, para lo cual se pretende promover: • La identificación de los efectos que los roles de género V los estereotipos sexuales tiene en el desarrollo personal, familiar V social de los individuos. • El reconocimiento de que las condiciones de vida de hombres V mujeres son distintas V, por tanto, requieren prácticas educativas específicas. • La recuperación de concepciones científicas que den cuenta de la experiencia de hombres V mujeres. • La incorporación de contenidos educativos que integren las aportaciones de mujeres V varones a la vida social V a la cultura. • La identificación de actitudes, conductas V valores de los diversos agentes del proceso educativo, que reproducen la

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desigualdad y la jerarquización sobre la base de la diferenciación por género. • Eldesarrollo de intervenciones educativas que tiendan a transformar las relaciones de poder entre los géneros en relaciones entre pares. • La im~lementación de programas específicos de orientación profesl.ona.1que valoren la utilidad de la ciencia V la técnica en las aplicaciones sociales V humanas, aspecto poco enfatizado hasta el momento V que se considera como posible causa de ~~no elección de estas profesiones por parte de las mujeres Jovenes (Subirats, 1994). • La.modificación del currículo escolar, dando lugar a los conocimientos V experiencias relativos a la salud, la sexualidad las tareasd.~la ~i~acotidiana, lasrelaciones afectivas (Subirats: 1994). .. La ~~llzaclon de recursos didácticos que ofrezcan modelos pOSitiVOSde mujeres, ejerciendo puestos de responsabilidad tales como ingenieras, abogadas, directoras de empresas di~ pu.tadas, senadoras, para contrarrestar los lugares com~nes eXistentes (Gutiérrez, 2005). . Estos.son sólo algunas de las directrices que podrían guiar el camino hacia la coeducación. El objetivo es convertir a la educación en un auténtic~ instrumento que promueva la democracia como una forma de ~Ida V responda a las necesidades, exigencias V retos de nuestra ~oCledad"" c~mbio, particularmente para aquellas personas q.ue~Iv.en~~ situaciones de exclusión, marginalidad venfrentan la dlscnmlnacl~n V desvalorización por razones de sexo y género. , La c~educaclón está dirigida a la autonomía ya la equidad de g~nero y tiene como finalidad transformar las prácticas en todos los niveles d~ .enseñanz~formal e informal, principalmente la que se da en la familia, I~,Iglesia y la sociedad civil. La propuesta básica de esta n.~evaeducación se centra en la idea de que las tareas de la satisfacCIO~de las ne~~sidades humanas sean compartidas por hombres y ~uJeres; ~amblen se debe abrir la posibilidad para que las personas Indepe~d.lentemente del género al que pertenezcan se eduquen en ~aafe~tivldad. Las consecuencias positivas de compartir el cuidado Infantil, el trabajo doméstico y el trabajo asalariado podrían ser tener el mundo más abierto para elegir el tipo de persona que desean


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ser, el tipo de conocimientos y habilidades que desean adquirir y el tipo de mundo en el que desean vivir, todo esto, al lograr la igualdad de condiciones. La coeducación busca deconstruir los valores, las prácticas, las ideologías, los mitos sociales que establecen ámbitos distintos a partir de la diferencia sexual. Por otra parte, esta educación tendrá que ser, ante todo, un intento constante de cambiar de actitud moral, de crear disposiciones democráticas a través de las cuales se sustituyan hábitos antiguos y culturales de pasividad por nuevos hábitos de participación e inferencia que concuerden con el nuevo clima transicional (Freire, 1998:89). Para la persona preocupada por la educación de los seres humanos en las diferentes etapas de la vida se debe considerar una formación orientada a lograr un juicio personal sobre el valor y significado de los acontecimientos y el deseo de afirmarse a sí mismo como persona libre y responsable, así como el anhelo de poder dar a los otros seres humanos. La tarea de los educadores consiste en estar atentos en todos los matices que presentan las diversas edades, con el objeto de sujetarse a una absoluta exigencia de respeto a la persona que se está educando para que ésta se integre en la realidad social que le tocó vivir. No se trata únicamente de una mera "adaptación al medio", es decir, de una inserción a patrones culturales, sino de la formación de sí mismos y de sí mismas en una acción recíproca entre su personalidad y la sociedad. En el proceso educativo, además de formación cientifica, existe la necesidad de adquirir una instrucción de la capacidad discursiva y crítica que permita la incorporación en la vida ciudadana, pero no como miembro masificado, sino como una mente crítica, capaz de aportar reformas y revoluciones creativas en la sociedad en la que se desarrolle. La planeación académica de los estudios profesionales habrá de orientarse a la formación de seres humanos cultos; es decir, que posean una información general y un conocimiento específico acerca de la especialidad, personas que razonen y se expresen con claridad y exactitud, que distingan lo esencial de lo accidental en cuanto a categorías lógicas, como en lo que respecta a principios de acción moral y política; que posean receptividad a la belleza, así como hacia los sentimientos humanos.

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CONCLUSIONES El propósito general de este capítulo ha sido evidenciar cómo a través de la educaci~n tradicional se han constituido sistemas sociales en los que se han a~,g~adolugares, significados y prácticas para cada género. Se .mo~tro.como much.o de la educación formal que se imparte en ~asInStitu~,oneseducativas ha favorecido la reproducción de esta sOCl.edadpatnarcal y ha.propiciado una mayor marginación yopresión haCialas p~r~o~asconSiderando el género al que pertenecen. Asimismo, se revl~o como en la historia de México la educación ha sido un factor muy Importante en la preservación de estas condiciones sociales. Otro de los aspectos que se abordó en el capítulo fue el relativo a las maneras en que las prácticas en la escuela siguen reproduciendo estos patrones patriarcales. Una vez revisadas las condiciones que han caracterizado la educación re:ibida por.'as personas en nuestro país, es evidente que es muy amplio el camino que es necesario recorrer a fin de desarroll~r una educació.~que tienda a generar condiciones de equidad de genero. La reflexión acerca de los fines de una nueva educación es una tarea fundamental. Con base en lo anterior, y como educadores y educador~s ~ue somos, debemos plantearnos algunas preguntas como las siguientes: ¿Qué tipo de seres humanos deseamos formar con la educación formal actual? Cuáles son los fines que se deben logr~r con la educ,ación?¿Qué educación propicia la equidad y dem~cracla entre los generos masculino y femenino? ¿Conocemos e~cu.rnculo oculto que persiguen los planes y programas de estudio vigentes en las instituciones educativas? Para dar una respuesta acertada a estos ~uestionamientos es necesario aprender a pensar sobre lo que se piensa, haciéndonos conscientes de la realidad de las personas que nos rodean. Debemos aprender a leer la realidad p:ro no la.que nos.~ue.stran los que tienen el poder, los que ma~ nipulan la inforrnacrcn, sino la que estamos viendo y viviendo, como pu~de ser: la pobreza, los problemas de género, las prácticas educativas cuyo objetivo es formar "robots" humanos, el autoritarismo gu~~rna.~ental.en todos ~usámbitos, la corrupción y su impunidad, la injusticia SOCialy las violaciones a los derechos humanos, entre otras. De esta forma, cuando aprendemos a observar la realidad entonces podremos incidir en ella, principalmente en la tarea que é


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nos toca como educadores y educadoras, promoviendo modelos de enseñanza y pautas de reconocimiento que sirvan de apoyo a la autoestima de las personas, luchando para que los ideales educativos sean generales y que rebasen los intereses particulares; esto es, fomentar e impulsar una educación que lleve a las personas a una nueva posición frente a los problemas de su tiempo y de su espacio (Arenas, 2004:102). Es necesario que los profesores tomen consciencia de lo que se describe en el currículo formal y lo que se puede generar a través del currículo oculto, para lo cual es menester formarse, actualizarse y perfeccionarse como educadores y educadoras humanistas a fin de promover dentro del aula la justicia, la equidad, la lectura de la realidad social, la solidaridad y la democracia. Con lo anterior, la educación se desarrollará centrada en valores para favorecer la dignidad humana, entendida ésta como todo aquello que conduce a las personas a ser libres, a tener consciencia de la realidad y ser capaces de transformarla, de interactuar con el medio y ser creadoras y difusoras de la cultura.

EVALUACiÓN

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1. ¿Qué caracterizó la educación de hombres y mujeres en el México prehispánico? 2. ¿Qué caracterizó la educación de las personas en el México de la Colonia? 3. ¿Qué caracterizó la educación de los mexicanos en el México Independiente? 4. ¿Cuáles son las prácticas que fomentan la discriminación género en la escuela? 5. ¿Cuáles son los principios que deben guiar la coeducación?

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SEXUALIDAD y GÉNERO Ma. Teresa Hurtado de Mendoza Zabalgoitia María Antonieta Dorantes Gómez

OBJETIVO GENERAL dentificar los principios que guían un acercamiento haciael tema de la sexualidad desde una perspectiva de género.

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OBJETIVOS PARTICULARES 1. Identificar los principios de la teoría de holones para explicar la sexualidad humana. 2. Reconocer algunas de las aportaciones del pensamiento feminista al tema de la sexualidad humana. 3. Tener conocimiento de los aspectos biológicos, psicológicos y sociales de cada uno de los holones de la sexualidad humana. 4. Conocer los derechos sexuales y reproductivos INTRODUCCiÓN El fuego original y primordial, la sexualidad, levanta la llama roja del erotismo y ésta, a su vez, sostiene y alza otra llama, azul y trémula: la del amor. Erotismo y amor: la llama doble de la vida. OCTAVIO PAZ**


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La sexualidad es un componente muy importante de la vida de todos los seres humanos, está presente desde antes de nuestro nacimiento y será muy importante a lo largo de toda nuestra vida; asimismo, es un tema complejo, que le ha interesado al ser humano desde la antigüedad y del que existen múltiples concepciones, una de las más comunes es acotarlo únicamente a las relaciones sexuales, concepción por demás simplificada, dado que integra muchos otros aspectos. LaOrganización Panamericana de la Salud, dependiente de la Organización Mundial de la Salud, en colaboración con la Asociación Mundial de Sexología, después de realizar diversos análisis, ha considerado que la sexualidad puede ser definida como: ... una dimensiónfundamental del hecho de ser un Ser Humano basadaen el sexo,incluyeal género,las identidadesde sexo,la orientaciónsexual,el erotismo,lavinculaciónafectiva, el amor y la reproducción.Seexperimentao expresaen forma de pensamientos,fantasías,deseos,creencias,actitudes, valores,actividades,prácticas,roles y relaciones.Lasexualidad es el resultado de la interacción de factores biológicos, socioeconómicos,culturales,éticosy religiososo espirituales. Esta conceptualización de la sexualidad pone de manifiesto la amplitud de aspectos que la integran, asícomo la posibilidad de incidir en esta temática a partir de diversos niveles de análisis. Considerando la multiplicidad de aspectos y niveles de análisis que integran la sexualidad, se han propuesto diversas teorías, una de éstas es la desarrollada por el Dr. Eusebio Rubio, que considera que la sexualidad está conformada por cuatro holanes: el vínculo, la reproducción, el género y el erotismo. Esta concepción amplía la panorámica desde la cual se había abordado la sexualidad, dado que cada uno de estos holanes puede ser analizado en su dimensión biológica, psicológica y social. Respecto de la dimensión social de la sexualidad es importante destacar la manera en que, dentro de las sociedades patriarcales, se ha pretendido controlar y regular la sexualidad humana a través de la imposición de estereotipos de género. Esto se ha realizado apelando a la existencia de esencias que determinarían los comportamientos, actitudes y espacios en los que se desarrollarían las sexualidades femenina y masculina. Un acercamiento a este tema desde una perspectiva de género permite evidenciar el carácter cultural, histórico y social de los aspectos que integran a la sexualidad.

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El objetivo del presente capítulo es desarrollar un acercamiento al tema de la sexualidad desde una perspectiva de género. Para tal efecto, inicialmente se presentará el modelo de holanes desarrollado por Eusebio Rubio, para luego integrar esta información desde una perspectiva de género.

LA SEXUALIDAD HUMANA COMO SISTEMA El modelo de holanes desarrollado por Rubio (2008) considera los diversos aspectos que conforman la sexualidad humana; es un modelo sistémico que plantea que la sexualidad está integrada por cuatro dimensiones: • Vínculo • Reproducción • Erotismo • Género. Cada una de estas dimensiones puede analizarse desde un punto de vista biológico, psicológico y social. El modelo de holanes surge a partir de la Teoría General de Sistemas, la cual fue desarrollada en 1947 por Bertalanffy; de acuerdo con esta teoría se entiende como sistema al conjunto de elementos interrelacionados que interactúan entre sí. En todo sistema hay organización y estructura, y la organización no cambia, es la esencia del sistema, si llega a cambiar sería otro sistema; en cambio, las estructuras sí pueden cambiar. Los sistemas pueden ser abiertos o cerrados, se dice que son abiertos cuando entra y sale información y están en constante equilibrio: no son estáticos, sino dinámicos. Los sistemas cerrados tienden a la autodestrucción, pues no hay intercambio de información. Basado en lo anterior, en 1983, Rubio desarrolló el modelo de holanes, que tiene aplicabilidad vertical, lo cual permite estudiar la sexualidad en diferentes niveles: biológico, psicológico o social; además, a la vez los elementos de los sistemas interactúan entre sí y son sistemas a su vez, a lo que se llama halones o subsistemas. Cada individuo nace con estos cuatro holanes como potencialidades, es decir, se van a ir desarrollando. conforme el individuo va creciendo e incorporando personalmente experiencias; por


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ejemplo, por cuanto al halón de la reproductividad, un recién nacido tiene los genitales y las gónadas apropiados para cuando su cuerpo esté lo suficiente desarrollado y maduro y pueda engendrar. En relación con el género, el niño va integrando y aprendiendo los roles y exigenciassociales que su cultura y momento histórico letransmiten dependiendo de si lo educan como varón o como mujer. En cuanto al erotismo, el placer en los niños se obtiene inicialmente a través de la boca, para posteriormente ir cambiando de zona. Por último, respecto del vínculo afectivo puede señalarse que inicialmente es con la figura materna con la que el infante lo establece, para luego desarrollarlo con otras personas. Como puede observarse en las diferentes etapas de la vida de los individuos, se van agregando experiencias, desarrollos biológicos e interacciones sociales que conformarán la sexualidad, por lo que, en virtud de esto, puede señalarse que ésta es un proceso dinámico y que los distintos holanes que la conforman están estrechamente relacionados. En la figura 4.1 se muestran las interrelaciones que se dan entre estos diferentes holanes.

Figura 4.1. Interrelaciones entre holones.

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Las líneas que se representan en la figura 4.1 muestran que estos holanes están vinculados entre sí, en tanto son elementos de un sistema dinámico. El modelo de los holanes permite dar cuenta de la complejidad de la sexualidad, a partir de lo cual es importante considerar un acercamiento a estos aspectos desde una teoría de género. PERSPECTIVA DE GÉNERO y SEXUALIDAD Elvínculo, la reproducción, el erotismo y el género, dentro de nuestra cultura patriarcal, han estado asociados a prácticas y a significados diferentes en distintos momentos de nuestra historia; asimismo, han tenido diferentes connotaciones en función del género de las personas, mismas que se han instituido a través de los estereotipos sexuales. El ámbito de la sexualidad es de particular importancia para los análisis desde una perspectiva de género, en virtud de que es éste uno de los principales aspectos que la sociedad patriarcal ha pretendido controlar. El sistema patriarcal ha sido ampliamente estudiado por las antropólogas feministas, una de las más importantes es Gerda Lerner (1990), quien señaló que dicho sistema no surge a partir de los determinismos biológicos supuestos por la naturaleza propia de las personas. El patriarcado, afirmaba Lerner, es un producto histórico que tuvo un origen y que puede ser modificado en el transcurso de la misma historia; su periodo de formación se dio mediante un proceso desarrollado en el transcurso de casi 2500 años, aproximadamente del 3100 al 600 a. C. El control sobre la sexualidad de las mujeres desde estas primeras sociedades es un aspecto muy importante; en ellas se comienza a regular, controlar y legislar sobre su capacidad sexual y reproductiva y se establecen patrones de género que buscan normar su sexualidad, patrones que se institucionalizan en los primeros códigos jurídicos y son impuestos por medio de las diferentes instituciones sociales (el Estado, la familia, la Iglesia). Estosestereotipos de género establecen como modelo la heterosexualidad y la subordinación de la mujer al varón. La visión patriarcal ha explicado la sexualidad femenina y masculina recurriendo a la existencia de esencias,que no son sino rasgos inherentes, ahistóricos y esenciales de las personas, que están dados a partir de la estructura biológica y que explicarían la sexualidad


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femenina y masculina. Así se ha planteado que, por ejemplo, la sexualidad femenina es esencialmente receptiva y pasiva, mientras que la masculina es activa. La recuperación de una perspectiva de género permite cuestionar estas ideas y mostrar el carácter construido de estassignificaciones, así como los mecanismos de marginación y discriminación que están implícitos en estos estereotipos. Uno de estos mecanismos es la exclusiónde que son objeto las personas que muestran rasgosdistintos a los prescritos por los estereotipos sexuales patriarcales, como pasa con las personas con una orientación sexual distinta al patrón heterosexual establecido. Dentro de la sociedad existen muchas prácticas en las cuales las personas reciben un trato discriminatorio apelando a justificaciones que establecen como lo "natural" el seguimiento de los estereotipos sexuales. Así, por ejemplo, se ha pretendido justificar las violaciones a las mujeres dentro del matrimonio apelando a la noción que estableceque la mujer por su naturaleza"debe estar al servicio del esposo". El trato diferenciado que reciben las personas dentro de la sociedad se justifica con base en la idea que afirma que por su naturaleza intrínseca ciertas prácticas, privilegios o condiciones son propios de cada género. El sistema patriarcal con sus prescripciones sobre lo que significa ser varón o mujer funciona dentro de la sociedad y es visto como parte natural de las relaciones entre los géneros. Los estereotipos de género establecen estructuras dicotómicas que pretenden dar cuenta de la sexualidad humana, a partir de lo cual se busca encasillar la sexualidad de las personas, negando las diferencias y los valores propios de la individualidad; al hacer esto coartan la libertad y el pleno desarrollo sexual de los individuos. Algunos de los planteamientos de este sistema de creencias patriarcales son los siguientes: • El ejercicio de la sexualidad debe darse sólo a través de las formas de relación heterosexual. • El sexo al que pertenezcan las personas (sólo se admite la posibilidad de tener órganos sexuales femeninos o masculinos) debe guardar una estrecha correspondencia con el género y con la orientación sexual, de tal modo que los varones deben presentar los rasgos propios de la masculinidad, mientras que las mujeres deben comportarse, sentir y pensar de manera femenina.

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• La sexualidad masculina es activa, la femenina, pasiva. • Sólo es posible ubicar a las mujeres bajo dos parámetros, o bien son las que ejercen una sexualidad prohibida (las amantes, las prostitutas, las mujeres promiscuas, las lesbianas) o son las que ejercen su sexualidad dentro de los cánones sociales aceptados (las mujeres "decentes", las que satisfacen los deseos sexuales del esposo, las mujeres asexuadastales como las madres, las vírgenes). • Tanto los varones como las mujeres deben dar muestras constantemente de su "masculinidad" o su "feminidad" , respectivamente. • La sexualidad femenina debe guiarse bajo los parámetros de ser "un cuerpo para gustar o un cuerpo para procrear". • Losvarones deben reprimir, ocultar o eliminar cualquier rasgo femenino que los vincularía con prácticas homosexuales. • La sexualidad masculina debe manifestarse en ausencia de cualquier expresión de sentimientos y emociones. • Los varones en las relaciones sexuales deben ser los que tengan el control, el dominio y la experiencia. El seguimiento acrítico de estos patrones sociales ha significado que en muchos casos las personas no ejerzan su sexualidad de una manera libre, espontánea y auténtica, ya que el despliegue de la sexualidad bajo marcos distintos a los establecidos por la sociedad patriarcal es etiquetado bajo el rubro de "desviaciones sexuales". Lasinvestigaciones sobre la sexualidad humana realizadas desde una perspectiva de género permiten cuestionar estos estereotipos y proponer nuevas formas bajo las cuales las personas expresen su sexualidad de manera libre, auténtica y moralmente consciente. En los apartados siguientes se analizarán los diferentes holanes de la sexualidad (género, reproducción, erotismo y vínculo), a partir de una perspectiva de género. GÉNERO Los conceptos de género y sexo dentro de la tradición patriarcal se han confundido, al afirmarse que el sexo de las personas determinaría una serie de conductas, actitudes y comportamientos. Por el


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contrario, los estudios desarrollados desde una perspectiva de género ponen de manifiesto la necesidad de distinguir entre el sexo b~~lógicode las personas y los patrones de género que asignan significados, lugares y prácticas sociales a las personas. Mientras que el s~x~de las personas se refiere a las características biológicas que los distinguen como varones o como mujeres, el género hace referencia a las significaciones. sociales de lo que significa ser varón o mujer, las cuales van cambiando en función del momento histórico y de la sociedad particular de que se trate. Los trabajos en el terreno de la antropología nos han puesto de manifiesto la diversidad de roles y significaciones que en diferentes culturas tiene el pertenecer a un determinado género. Una de las constantes en los diversos sistemas s~ciales que ha atribuido significados a la diferencia sexual es el parti,r de un modelo dicotómico y jerárquico que ha opuesto la categona hombre a la de mujer y que le ha asignado un lugar privilegiado a los varones. ~os sistemas sociales establecen estereotipos de género a fin de legislar y regular las relaciones entre las personas; estos estereotipos se refieren al conjunto de normas y prescripciones que dictan la ~ociedad y la cultura sobre el comportamiento femenino y el masculino. Dentro de las sociedades patriarcales se ha asignado a los hombres lugares ~ significaciones asociadas con los espacios públicos, la fuerza.y la Independencia económica y emocional, mientras que a las mujeres .se les ha confinado dentro de los espacios privados y s~ les ha asocla~o con patrones de dependencia económica yemocional. Este conjunto de prácticas ha desembocado en situaciones discriminatorias en función del género de las personas. Las relaciones entre hombres y mujeres están estructuradas a partir de una jerarquía que establece prácticas, costumbres, valores, normas, leyes y reglas, condicionamiento social al que se le ha otorgado un carácter natural, biológico y ahistórico. Se ha pretendido establecer que esta división de significaciones y prácticas tiene un cará~ter e~encial, que proviene de cuestiones biológicas (el sexo) que es Imposible cambiar. Todo este conjunto de argumentaciones ha tenido como objetivo justificar las situaciones discriminatorias en cuanto a género. El condicionamiento social instituye roles de género través de las diferentes instituciones sociales (familia Estado escuela, Iglesia). ' ,

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Por las razones expuestas es importante, desde esta perspectiva, distinguir entre el concepto de género y el de sexo. Coloquialmente, la gente se refiere a sexo como coito, hacer el amor, encuentros eróticos. La palabra sexo, proveniente del latín, quiere decir 'cortar' o 'dividir'; por sexo, entonces, se entiende al conjunto de características biológicas que definen al espectro de los seres humanos como hembras y machos. Lo que queda incluido en estas características biológicas es: Se refiere a la presencia de cromosomas vx para los varones y xx para las mujeres o hembras. El sexo es designado por el varón, puesto que hay 50% de espermatozoides con cromosoma V y 50% con cromosoma x, así que desde el momento mismo de la fecundación, el sexo del futuro bebé ya está determinado. Puede haber algunas aberraciones genéticas como xxx (síndrome de Kinefelter), xxv, xo (síndrome de Turner), XYV, entre otras.

Sexo genético.

Después de la fecundación y conforme se va desarrollando el embrión a la séptima semana comienza el desarrollo diferenciado de los genitales del macho, es decir, la formación de pene, escroto, testículos, próstata, vesículas seminales, glándulas de Cowper, conductos deferentes, etc., y de la hembra en vagina, labios mayores y menores, clítoris, útero, trompas de Falopio, ovarios, óvulos.

Sexo genital.

Se refiere a la ubicación del recién nacido como "niño" o "niña" por parte del médico o la persona que atiende el parto, en función de la observación de sus genitales.

Sexo por asignación.

Se refiere al predominio de la hormona testosterona, considerada como propia del hombre, y a los estrógenos, hormona asociada con las mujeres; no obstante, es importante señalar que tanto hombres como mujeres cuentan con ambashormonas y que sólo lo que varía es la cantidad de ellas.

Sexo hormonal.

Sexo gonadal. Se refiere a la presencia de ovarios o de testículos.

Se refiere a que la persona puede sentirse perteneciente a un sexo o a otro; esto se conoce como transgénero, en

Sexo autoasignado.


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donde algunas personas pueden sentir que el sexo de sus genitales no corresponde con el sexo que ellos creen tener internalizado en su mente. Es importante diferenciar el concepto de sexo y de género. Como se vio anteriormente, el sexo hace referencia a las características biológicas que determinan si una persona es hombre o mujer, mientras que el género da cuenta de la construcción social de la diferencia sexual. Investigacionesdesarrolladas en diferentes áreas del saber social (antropología, psicología, sociología, pslcoanálisis) han puesto de manifiesto el papel que juegan los factores socialesen la conformación de identidades de género. Por ejemplo, los estudios antropológicos han mostrado cómo en los grupos socialesse establecen reglasy significados distintos para los géneros femenino y masculino. En esta línea es importante mencionar los trabajos de Margaret Mead, que fueron el punto de arranque de numerosas investigaciones, luego de llegar a la conclusión de que las característicasbiológicas no son el único factor que explicaría los comportamientos, actitudes y lugares que se han asignado a la sexualidad de las personas. Al observarse la diversidad de prácticas sociales,de patrones que regulan la sexualidad, en estos trabajos se rescatael papel de los condicionamientos sociales. Otra de las áreas de investigación que contribuyeron a perfilar los fundamentos de la perspectiva de género fueron las desarrolladas dentro del campo psicoanalítico. Los estudios de Robert Stoller (1968) acerca de la conformación de la identidad sexual de personas que habían sido consideradas como mujeres, pero que en realidad tenían órganos sexuales masculinos que habían sido confundidos con órganos femeninos, pusieron de manifiesto el papel tan importante que tiene la socialización en la construcción de identidades femeninas y masculinas. Esoscasos hicieron suponer a Stoller que lo que determina la identidad y el comportamiento masculino o femenino no es únicamente el sexo biológico, sino que es muy importante en la construcción de la identidad sexual, el conjunto de experiencias, ritos y costumbres. Estos casos, en los que la carga genética, hormonal y biológica no coincidía con la identidad de género que socialmente se había atribuido a la persona, le mostraron a Stoller el peso tan importante de los factores sociales, dado que la identidad de género de estas personas correspondía con la socialización

que habían recibido, aunque sus rasgos biológicos fueran del otro sexo'. Dentro de la investigación psicoanalítica existen importantes trabaJ~s desde u~a perspectiva feminista, que han mostrado que la sexualidad femenina no puede ser explicada únicamente apelando a preten.di.dacastración que ha sufrido la mujer y a la correspondiente envidla del pene, como la tradición freudiana había establecido. Los trabajos sobre la sexualidad femenina de Emilce Dio Bleichmar Luce Irigaray, Norma Ferro, Alicia Fernández, Ana María Fernández y Nancy Chodorow, entre otras, han mostrado el papel de los factores so~iales y han cuestionado las ideas que consideraban al cuerpo femenino y a los factores biológicos como los únicos determinantes ?e la sexualidad. Si se piensa que la sexualidad de una persona está Integrada por su sexo, por la identidad de género y por la orientación sexual, se reconocerá la existencia de la diversidad sexual que existe entre los seres humanqs. La ideología patriarcal ha establecido que las p,ersonassólo pueden ser mujeres que se comportan, visten y actuan de manera femenina, o varones que siguen las formas de comportarse, vestirse y actuar propias de los hombres. De acuerdo con esto, las personas deberán tener una orientación heterosexual y una identidad de género que corresponda con sus características biológicas, de tal suerte que todo lo que se aleje de estos marcos, dentro de esta cultura patriarcal, habrá de ser visto como anormal como una desviación sexual, como una enfermedad. En la realidad' la diversidad sexual muestra que estos correlatos no se dan de esta manera necesariamente. La diversidad sexual pone de manifiesto que.pued~~ existir múltiples combinaciones respecto al sexo,género y ortentacíon sexual de las personas; en principio, además de las personas de sexo femenino o masculino también podemos encontrar herma~roditas, que cuentan con elementos biológicos femeninos y masculinos: en lo que respecta a la orientación sexual, además de la posibilidad de ser heterosexuales, se tiene que las personas pueden ser homosexuales o bisexuales; en relación con la identidad de género se observa que existe una gran diversidad de concepciones acerca del modo como las personas se comportan, sienten, piensan o se desarrollan. Esta diversidad sexual nos da múltiples combinaciones. Así, por ejemplo, existen personas cuyo sexo biológico es masculino, ~ue fueron educados con una identidad de género femenina y que tienen una orientación homosexual. Elreconocimiento de la diversidad


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sexual como un rasgo propiamente humano nos permite eliminar la estigmatización de que son objeto las personas que no cumplen con los patrones sexuales impuestos por la cultura patriarcal. REPRODUCCiÓN La reproducción es el segundo halón de la sexualidad. A lo largo de la historia de la humanidad, muchas de las instituciones sociales (básicamente las religiosas) han pretendido establecer que la única función de la sexualidad es la reproducción; ejemplo de esto es la tradición judeocristiana. En este sentido, se ha prohibido el uso de métodos anticonceptivos, se ha estigmatizado la masturbación y se han condenado prácticas sexuales que sólo tengan como objetivo el logro del placer sexual y no lleven a la reproducción humana. Desde una perspectiva de género, se abogaría por el derecho de las personas a gozar de una vida sexual integral, cuestionando los estereotipos de género que atentan contra la salud física yemocional. Esto implica que las personas deben tener el derecho a decidir el momento en que deseen tener hijos, así como el número de los mismos. Larealidad está alejada de estos anhelos en virtud de que en nuestras sociedades patriarcales las mujeres en muchas ocasiones no pueden tener estos márgenes de elección. La ideología patriarcal ha establecido que existe un "instinto maternal" que determina que la labor principal de las mujeres debe estar centrada en la reproducción y en las labores de maternidad. Respecto a esta afirmación, es importante destacar que son los factores sociales, y no los biológicos los que han influido para que las mujeres durante muchos siglos se hayan centrado en las labores de maternidad. Lasinvestigaciones psicoanalíticas acerca de la construcción de una identidad femenina centrada en la maternidad han enfatizado el papel de la transmisión social de estos estereotipos. Así tenemos, por ejemplo, a Nancy Chodorow (1984) y a Norma Ferro (1991), que investigan la construcción de una identidad femenina anclada en la maternidad y en las labores respectivas a partir del análisis de los procesos de identificación de las hijas con sus madres y del papel subordinado que las mujeres tienen al interior de las familias. Al enfatizar el papel de los factores sociales, estas investigaciones han

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planteado la hipótesis de que no son los aspectos biológicos los que explicarían el que las mujeres hayan sido confinadas a las labores de maternidad. Desde una perspectiva de género se abogaría por el establecimiento de condiciones que permitan a las mujeres decidir sobre sus cuerpos y las posibilidades de ser madres. Las condiciones sociales han cambiado y de esta forma muchas mujeres en la actualidad están compaginando sus labores de maternidad con sus actividades laborales. No obstante, es un hecho el control que las instituciones sociales tienen acerca de la capacidad reproductiva de las mujeres, pues dentro de las sociedades patriarcales muchas mujeres aún no pueden decidir sobre el momento y el número de sus embarazos; asimismo, tampoco tienen injerencia sobre su decisión de continuar o no con un embarazo no deseado. Aunque en nuestro país recientemente se ha pretendido despenalizar el aborto, se observa que esto en muchos casos es una ley de iure no de Jacto, dado que en la práctica se continúa condenando a las mujeres que deciden interrumpir sus embarazos. Christiane Olivier, una psicoanalista feminista que ha investigado los orígenes de este control sobre la capacidad reproductora de las mujeres, al respecto señala: Lamaternidadesel paraísoperdido del varón, él quiere serel dueño,el que deciderespectode ella.Siél no puedellevaren síal niño, puedeobligara otro a cargarcon él. La mujer queda embarazada. De ahí la extraña violencia de algunosvarones haciatemas tales como la toma de decisiónpor parte de las mujereshaciacontinuar o no con el embarazo.Promuevena la madreparaasíhacerdesaparecera la mujer,que no tendrá derechoa tomar la decisiónacercade su maternidad. Mucho de la identidad femenina en estas sociedades patriarcales está dado por la capacidad de ser madres. Desde su nacimiento una mujer es considerada como un ser que potencialmente puede convertirse en madre. A diferencia de los varones, para los cuales las expectativas de susfamiliares son mucho más diversas, en el caso de las mujeres el proyecto de vida está básicamente centrado en que se convertirán en madres. Así, desde niñas se les dan muñecas para que las cuiden y se vayan familiarizando con el papel de madres; se


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les ejercita en el cuidado de sus hermanos y familiares; se les prepara para la realización de las labores domésticas. Cuando son adolescentes ya se les ha preparado para buscar el fundamento de su ser en encontrar una pareja que les dé la posibilidad de realizar ~I proyecto de ser madres. Aun cuando comiencen a trabajar fuera de sus casas, muchas mujeres reproducen dentro de sus espacios laborales estos estereotipos de cuidadoras y así son enfermeras, maestras, secretarias, asistentes domésticas, cocineras, afanadoras, etc. Finalmente, en la menopausia, cuando las mujeres ya no cuentan con la capacidad de ser madres, muchas son consideradas como seres con un valor inferior. De este modo observamos cómo en esta sociedad patriarcal el valor de la mujer está íntimamente vinculado con su capacidad reproductora, no obstante que en muchas ocasiones ésta le es enajenada en virtud de que ella no cuenta con la capacidad para decidir si tiene o no hijos o cuándo los va a tener. La concepción patriarcal, la cual puede ser introyectada por las mismas personas, ha pretendido mostrar que las característicasparticulares de los cuerpos femeninos representaban una limitación para la participación de las mujeres en los ámbitos públicos. Esasí que la maternidad, la contracepción, el aborto, el lesbianismo y en general todos los aspectosrelacionadoscon la sexualidadfemenina pasana ser cuestiones sujetas a prácticas discriminatorias en las cuales se pretende afirmar la inferioridad de estos cuerpos respecto de los masculinos. Es importante cuestionar las concepciones dicotómicas que, por un lado, significarían a las mujeres como cuerpos para procrear o cuerpos para brindar un goce sexual. Esto enmarca que la sexualidad femenina sólo se puede vivir a través de cuerpos enajenados al deseo de las mujeres. Estosaspectos denotan el control que dentro de estas sociedades se ejerce sobre la sexualidad. El seguimiento y consentimiento de estos estereotipos sexuales puede traer como consecuencia la limitación de las personas a vivir una sexualidad estereotipada y enmascarada. Algunos de los fenómenos que evidencian el control que esta sociedad ejerce sobre las personasy su sexualidad serían los siguientes: • Lacosificación del cuerpo femenino y masculino a fin de lograr objetivos publicitarios. Actualmente se observa que de continuo se asocia el placer sexual con el consumo de múltiples bienes y servicios.

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• La restricción de la sexualidad al ejercicio de la capacidad de reproducción. • El establecimiento de planteamientos dicotómicos que establecen lo que una mujer "decente" puede y no puede hacer, sentir o pensar. • Elconjunto de estereotipos que establecen los comportamientos, ideas, actitudes y sentimientos que debe presentar una persona para ser considerada "hombre". • La falta de posibilidad de decisión por parte de la pareja respecto de la continuación o no de embarazos no deseados. La penalización del aborto hacia la mujer que se lo practica. • El hostigamiento hacia sexualidades que no corresponden con el parámetro heterosexual (el lesbianismo, las relaciones sexuales fuera del matrimonio, la bisexualidad, la homosexualidad). • La violación dentro y fuera del matrimonio. • La exigencia de la virginidad femenina antes de matrimonio. • Laexistencia de la pornografía -fenómeno social- en ~I cual la sexualidad se presenta como una mercancía. Es necesario que las personas se reapropien de su sexualidad más allá de estos límites impuestos por estas sociedades patriarcales. A fin de seguir este camino es preciso el reconocimiento del papel de la reproducción dentro del extenso campo de la sexualidad, pues no agota el campo de la sexualidad, es tan sólo un aspecto. EROTISMO

Elerotismo se refiere a la capacidad humana de experimentar placer sexual; integra al conjunto de aspectos subjetivos (conductas, pensamientos, sentimientos, etc.) que los seres humanos hemos asociado con la experiencia del goce sexual. Enel desarrollo del pensamiento humano han existido a lo largo de la historia diferentes interpretaciones acerca del erotismo. El planteamiento freudiano representa una de las interpretaciones patriarcales más difundidas, en él la sexualidades la piedra angular a partir de la cual se construye su teoría. En la primera etapa del desarrollo del psicoanálisisfreudiano se plantea que la libido sexual es la fuerza básica que guía el actuar de las personas. Paraeste pensador la sexualidad


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humana pasa por una serie de etapas. Freud, en Esquema de Psicoanálisis y otros escritos de doctrina psicoanalítica, señaló que los individuosde ambossexosparecenrecorrer de la misma manera los primeros estadios de la libido -fases oral y anal- y que durante I~tercera fase -la fálica- el varón y la mujer seguirán caminos distintos. Durante la etapa fálica ya no intervienen los genitales de ambos sexos,sino que sólo tendrá significación el sexo masculino (el falo). La explicación freudiana puede ser caracterizada como una perspectiva androcéntrica que pretende explicar la sexualidad de las personas a través de la utilización de un modelo que ubica a la libido masculina como el patrón, y que considera a la libido femenina como la carencia. Freud señala que durante la etapa fálica se da el complejo de Edipo: el niño comienza a tener fantasías sexuales cuyo objeto es su propia madre, lo cual concluye con el miedo a la castración que experimenta el niño y que le permite trascender esta etapa. En el caso de las niñas, se plantea que ellas ya han sufrido la castración, razón por la que no pueden trascender esta etapa. De acuerdo con esta visión, la niña, después de un fracasado intento de emular al varón, llega a reconocer su falta de pene, o más bien la inferioridad de su clítoris, presentando consecuenciasdefinitivas para la evolución de su carácter. A causa de esta primera defraudación en la rivalidad con el niño, la niña a menudo comienza a apartarse de la vida sexual en general. En este contexto, la sexualidad femenina se explica por la envidia del pene y por el rechazo de su clítoris. A partir de su comparación con el varón, la niña experimentaba un complejo de castración. Así lo comenta el propio autor: Desdeel principio (la niña) envidiaal varón por el órganoque posee,y podemosafirmar quetoda suevoluciónsedesarrolla bajo el signode la envidiafálica (Freud,1970:117). Ladescripción freudiana de la experiencia como cuerpo sexuado, por parte de la niña, puede ser caracterizada por el intento frustrado de ésta de imitar al hombre mediante la masturbación de sus genitales. Según Freud, la niña al no obtener un placer por la estimulación de sus genitales, experimenta una inferioridad por su pene rudimentario, sentimiento que conducirá al rechazo a su persona, a su madre y a la condición femenina en general. De acuerdo con esta teoría, la niña, en su desarrollo psicosexual, abandona a

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la madre como objeto amoroso dado que no le puede perdonar el que la "haya traído al mundo tan insuficientemente dotada". (Freud, 1970:159). Este abandono de la hija hacia su madre implica que el nuevo objeto amoroso de la niña sea el padre; la niña, al principio, desea el falo del padre, pero posteriormente, su deseo será el que el padre le regale un hijo. Esta situación conlleva, para la niña, la necesidad de cambiar, también, de zona erógena. La zona erógena c1itorideana "peniana" debe ceder su importancia a la vagina que entonces adquirirá su valor en tanto que es alojamiento del pene y receptáculo del futuro hijo. Esasí que la mujer que ha pasado por estas etapas, que la conducen a lo que Freud denominó "condición femenina normal", deberá dirigir toda su atención a la procreación dejando de lado cualquier actitud denominada viril. Si, por ejemplo, la niña persistiera en procurarse placer, por medio de la masturbación de sus genitales podría terminar, en caso extremo, en convertirse en una homosexual manifiesta. De acuerdo con esta concepción, la mujer debe cambiar la satisfacción que obtiene por la estimulación de su clítoris por la satisfacción que obtiene al frotar un pene en su vagina o por la que obtiene al tener un hijo. Como puede observarse, la descripción freudiana de la sexualidad humana propone como parámetro la sexualidad masculina al mismo tiempo que considera las condiciones biológicas corno determinantes del futuro desarrollo de la sexualidad. De la misma forma que muchos otros pensadores patriarcales, Freud define a la mujer como un ser carente en comparación con el hombre: es un varón castrado. Esta interpretación, desde el momento de su aparición recibió múltiples críticas. Muchos planteamientos de mujeres, tanto psicoanalistas como provenientes de otras disciplinas, han rechazado la pretensión biologicista del planteamiento freudiano de dar cuenta de la sexualidadfemenina a través de la recuperaciónde un solo paradigma: el masculino; de ahí se han gestado teorizaciones que han intentado explicar la sexualidad humana a partir de paradigmas que dan cuenta de las experiencias recuperando la diferencia sexual. Por otra parte, también se ha buscado explicar la sexualidad humana considerando los factores sociales y culturales que han establecido el ejercicio del poder sobre los cuerpos sexuados. Desde diferentes plataformas epistémicas han surgido estas teorías. Lafilosofía marxista,


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la existencialista y, más recientemente, el pensamiento post estructuralista han brindado interpretaciones que dan cuenta del ejercicio y control de la sexualidad humana. Entre algunas de las pensadoras que se han dado a la tarea de explicar el modo en .que dentro de estas sociedades se pretende controlar la sexualidad femenina y masculina podemos señalar a las siguientes: Karen Horney, Melanie Klein, Carla Lonzi, Luce Irigaray, Kate Millet, Shulamith Firestone, Julia Kristeva, Emilce Dio Bleichmar, Mabel Burin. Karen Horney es una de las primeras psicoanalistas que rechaza que la sexualidad femenina pueda ser explicada a través de la envidia del pene. Ellacomenta que en los varones se observa la envidia por la capacidad reproductora de las mujeres; señalaba que en virtud de que toda creatividad palidece al compararla con el acto de dar vida a un nuevo ser humano, los hombres han envidiado profundamente la función procreadora de la mujer. Respecto de las mujeres ella comentan que no es que envidien el pene, sino el poder y control que los hombres tienen dentro de la sociedad. Apunta pues que desde el punto de vista biológico la mujer manifiesta en la maternidad o en la capacidad para la maternidad una superioridad fisiológica indiscutible, misma que -a su parecer- se refleja en el inconsciente de la psiquis masculina, en la intensa envidia de la maternidad que siente el niño. Susexperiencias con varones psicoanalizados la llevan a afirmar que en ellos se percibe la intensidad de la envidia por el embarazo,el parto y la maternidad, asícomo por los senosy por el acto de mamar (Horney,1976, p.70). Desde los planteamientos marxistas, otra de las pensadoras que ha cuestionado las ideas freudianas es Carla Lonzi (1981). Su investigación sobre la identidad sexual de la mujer constituirá una crítica al pensamiento psicoanalítico que había hipostasiado el placer vaginal. La consideración freudiana que afirma que el desarrollo psicosexual"normal" de la mujer debería de consistir en el paso de un placer clitorldeo a uno vaginal, es criticada por esta autora. Lonzi considera que la mujer, que en la pareja monógama pasa -a través de un esfuerzo consciente y voluntario- del estadio clitorídeo al vaginal y que se adapta, en este sentido, a su papel de esposa y madre, vive una situación esquizofrénica dado que al mismo tiempo que reclama una sexualidad propia vive la situación que le exige prodigarse a los otros olvidándose de sí misma.

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Ante la afirmación freudiana que planteaba que el placer clitorídeo era más inmaduro que el vaginal. Lonzi señala que: Para la mujer el placer vaginal no es más profundo, más completo,es,simplemente,el placeroficialde la culturasexual patriarcal.Cuandola mujer lo tiene se siente realizadaen el único modelo gratificante a su alcance:aquel que satisface lasexpectativasdel varón (lonzi, 1981:66). Desde la filosofía existencialista, también encontramos cuestionamientos hacia la propuesta freudiana. Uno de los trabajos más importantes es el de Simone de Beauvoir. Esta autora, con la publicación del Segundo Sexo, a mediados del siglo pasado marca un parteaguas en la constitución de una nueva interpretación de la sexualidad femenina. Frente a la tradición psicoanalítica que había pretendido explicar a la mujer a la luz de la experiencia masculina y que había intentado reducirla bajo la figura de cuerpo-castrado, la autora propone analizar la sexualidad femenina desde una posición que considere al cuerpo como la particular forma de aprehensión que tenemos las mujeres de nuestro mundo. La experiencia como mujer en tanto cuerpo vivido, de la que ella habla, ya no es la circunstancia del ejercicio cuerpo femenino en función del deseo masculino, sino la vivencia del cuerpo femenino como manifestación de una conciencia que existe como entidad autónoma, que asume su propio proyecto de vida. Esto implicaría transformar la visión de la mujer en cuerpo para gustar y para procrear en la de un ser que, al manifestarse como cuerpo, expresa la libertad inherente a todo ser humano. Posteriores trabajos desarrollados bajo una perspectiva posestructuralista han buscado establecer la relación entre el ejercicio del poder sobre el cuerpo humano y los significados que se le han otorgado a la sexualidad. Es así que se ha indagado sobre los modelos que disciplinan y vigilan lasdiferentes áreasy actividades permitidas y prohibidas para cada uno de los géneros. Algunas de las pensadoras que se encuentran dentro de esta corriente ubicarán como terreno de su estudio el campo del imaginario colectivo, tal es el caso del trabajo de Ana María Fernández (1993), quien señala que es a través de la utilización de tres mitos que en nuestras sociedades se dará forma al conjunto de significaciones que instituyen la familia y que inventan


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lo masculino y lo femenino. Estos tres mitos son: el de la mujer-madre, el de la pasividad erótica femenina y el del amor romántico. En este abordaje de la sexualidad ya hemos analizado los mitos de la mujer-madre y de la pasividad erótica, nos resta comentar el mito del amor romántico. VíNCULO La vinculación afectiva es la capacidad humana de desarrollar afectos intensos con otro ser humano, hay varias intensidades de esta vinculación, la forma más reconocida es el amor. Mucha de la investigación en torno a la sexualidad ha partido de la premisa de que lo problemas que experimentan las parejas en su sexualidad se deben al desconocimiento de las técnicas sexuales. Esasl que a mediados del siglo pasado se desarrollan los trabajos de Masters y Johnson. Esta premisa simplifica el problema olvidando el papel que juegan los vínculos amorosos en el desarrollo de su sexualidad. El modelo de holanes nos permite analizar esta dimensión. Dentro de nuestras sociedades patriarcales se condiciona a las personas a buscar una pareja. En el caso de las niñas, desde pequeñas se les enseña a esperar la llegada de un hombre que colmará todas sus necesidades, que les brindará amor y cuidado. Por lo que respecta a los hombres se les va condicionando, desde su primera infancia, para convertirse en el rescatador, cuidador y proveedor de una mujer. Tenemos así conformada la estructura del mito del amor romántico, en el cual están delimitados con claridad los papeles que cada uno de los participantes (hombre y mujer) desempeñará. Éste es el mito que impregnan muchas de las canciones, telenovelas, poesías, películas y cuentos infantiles. Cuando se confronta a las personas reales y concretas se observa que no corresponden del todo con estos estándares sociales, de ahí provienen múltiples problemáticas que enfrentan laspersonas en susrelaciones de pareja en nuestras sociedades. Si a esto aunamos el ejercicio de poder a fin de regular y controlar, se comprenderá las dificultades que representa este tipo de relaciones. El ejercicio del erotismo dentro de la pareja está vinculado a la capacidad de las personas para establecer relaciones maduras,

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sanas y gratificantes. Esto estará estrechamente relacionado con el desarrollo psicoemocional que tienen las personas. Un aspecto que es importante destacar es el efecto que tienen sobre las relaciones de pareja las prácticas familiares que pretenden imponer y reproducir los estereotipos sexuales.Laincorporación de la noción de un ejercicio del poder dentro de las relaciones familiares ha sido un elemento muy útil en la formulación de interpretaciones acerca del establecimiento de vínculos amorosos entre las personas. Lasrelaciones de pareja están influenciadas por la manera en que el niño y la niña experimentaron sus primeras vivencias con su figura materna y paterna. Dentro de nuestras sociedades patriarcales, tanto los niños como las niñas se vinculan afectivamente con una figura materna desde su nacimiento; es una práctica común que sea una mujer (la madre biológica, la abuela, la niñera, la maestra, la sirvienta) la que cuida de los niños y de las niñas en su primera infancia. De esta forma, en nuestro desarrollo afectivo por lo regular en un principio nos vinculamos con una figura femenina. En un momento dado de su desarrollo, niños y niñas comienzan a observar la distribución desigual que dentro de muchas familias tiene el ejercicio del poder, el cual es habitualmente ejercido por una figura masculina. Dentro de los estereotipos de género, se ha establecido un lugar más importante dentro de la familia para los varones, ellos tiene acceso a un mayor número de privilegios, se les concede mayor importancia que a las mujeres; en el momento en que los niños y las niñas se percatan de esta diferencia de poder en función del género de las personas, comienzan los conflictos en cuanto a su identidad de género. Los niños pueden identificarse con la figura paterna y alejarse en muchas ocasiones con sentimientos de culpa, de la figura materna, o bien pueden seguir con una identificación con la figura materna, lo que los llevaría a presentar rasgosfemeninos que dentro de esta cultura pueden ser asociados con la homosexualidad. En el caso de las niñas, el conflicto se da entre el elegir identificarse con una figura devaluada en la familia o asumir patrones masculinos que la llevarían a transgredir los patrones de género que se han establecido para ellas (Firestone, 1976). Luegoentonces se podría señalar que el paso del afecto de la madre al padre en niños y niñas no se da por el miedo a la castración, como Freud lo había señalado, sino por


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el hecho de que los infantes empiezan a comprender la relación de inferioridad que el mundo femenino representa en comparación con el mundo masculino. Estas situaciones son el germen de muchos de los conflictos que se dan en las relaciones amorosas. En muchas ocasiones cuando las personas no han asumido la responsabilidad por trascender los conflictos originados durante su primera infancia reproducen en sus relacionesde adultos las relacionespatológicasque tenían con susfiguras parentales. Loscelos, los resentimientos, la dependencia que se experimenta en las relaciones de pareja afecta el ejercicio de la sexualidad; en ocasiones ésta se convierte en un medio para atacar, violentar, manipular, defenderse o proyectar muchas de las relaciones no resueltas con los padres. Las relaciones de dominio que dentro de las familias reproducen la discriminación de género social afectan el ejercicio de una sexualidad plena, auténtica y consciente, de ahí la importancia de construir dentro de las familias condiciones que permitan el respeto y el desarrollo del potencial de las personas, bajo una estructura de equidad de género. Esto redundará entre otros muchos aspectos en la posibilidad de que las personas puedan vivir plenamente su sexualidad. MORAL SEXUAL y EQUIDAD DE GÉNERO El tema de la sexualidad ha estado estrechamente vinculado con cuestiones morales, por ejemplo, la tradición judeocristiana ha considerado que la sexualidad sólo debería circunscribirse a tener como fin la reproducción, por lo que mucho de esta tradición ha pretendido reprimir una sexualidad vinculada con el placer. Después de la moral victoriana, que intentó controlar la sexualidad, en nuestros días observamos un repunte en el interés al respecto. En este punto, un tema que debe ser abordado es el referente a la moral sexual. Cuando se considera la moral sexual es preciso identificar que en nuestras sociedades patriarcales ha existido una doble moral que establece normas distintas si se trata de una mujer o de un hombre. Así por ejemplo esta doble moral patriarcal acepta que los varones desplieguen su sexualidad para obtener placer, mientras que niega esto a las mujeres, las cuales debe acatar normas que las lleven a estar al servicio de los demás. Esta doble moral establece que lo

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natural para el varón es gozar de su sexualidad, mientras que para las mujeres es la procreación (Hierro, 1985). Esta sociedad patriarcal ha asociado el ejercicio de la sexualidad de las mujeres con una carga negativa. En muchos mitos sociales se ha significado a la sexualidad de las mujeres como culpable de los sufrimientos humanos. Tenemos el mito de Eva,una mujer que es la culpable, a través de su seducción, de la caída de Adán y del posterior destierro del paraíso. Otro ejemplo es Pandora, quien a causa de su curiosidad insana abre la puerta a las desgracias humanas. La sociedad patriarcal ha pretendido ejercer un domino sobre el cuerpo femenino y masculino y el ámbito de lasexualidad es una de lasáreas de la existencia humana en que este dominio ha sido más patente, lo que se ha llevado a cabo por medio del establecimiento de estereotipos sexuales que marcan cómo deben experimentar su sexualidad las personas. La sociedad patriarcal establece una serie de lineamientos que pretenden regular la sexualidad de las personas. Entre las prescripciones generales acerca de la sexualidad femenina y masculina se tiene el establecimiento de la heterosexualidad como el patrón "normal", la circunscripción de la sexualidad al campo de reproducción, la represión del placer sexual, entre otros. Desde estos condicionamientos sociales, también se han establecido diferentes normas y valores para experimentar la sexualidad dependiendo del género de las personas. Mientras el ejercicio de una sexualidad sin compromisos es bien visto en el caso de los varones lo mismo no ocurre para las mujeres; mientras que el papel de la re~ producción y el vínculo es considerado fundamental en la vida de las mujeres, el papel del erotismo se considera que es más importante para los hombres. Bajo esta perspectiva se ha considerado que los hombres son más visuales en cuanto a su sexualidad, en tanto que las mujeres enfatizan más las relaciones afectivas. Asimismo se ha ubicado como espacio de control al cuerpo femenino. Nuestra sociedad actual está viviendo una serie de conflictos respecto de la sexualidad, en virtud de que por un lado se está presionando a las personas para reprimir su sexualidad, mientras que por el otro los medios de comunicación (televisión, radio, internet, periódicos, revistas) están presentando modelos que vinculan la sexualidad con una sociedad de consumo. En ambos casos, los patrones de sexualidad que se pretenden establecer están alejados


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de las circunstancias particulares de vida de las personas. El seguimiento acrítico de estos parámetros además ha implicado la enajenación de una sexualidad auténtica y libre. Por otra parte, estos condicionamientos sociales se han transformado en una serie de expectativas que para muchas personas marcan los cánones de lo que debe ser su sexualidad. Muchas personas demandan que su sexualidad cumpla los cánones impuestos por los patrones sociales, así por ejemplo los hombres se autoimponen estándares que demandan de ellos una potencia sexual que implica la posibilidad de que tengan erecciones más frecuentes o de mayor duración. En el caso de las mujeres, ellas pueden haber introyectado modelos que les exigen contar con los atributos físicos que conduzcan a desarrollar su capacidad de seducción sexual, de tal forma que su autoestima está en función de qué tanto se alejen o se acerquen a los cánones de belleza femenina que demandan de ellas que tenga un cuerpo que atraiga los deseos masculinos. La comparación de las formas de sentir y actuar concretas respecto de su sexualidad con los ideales que se les presentan puede redundar en un sentimiento de frustración, el cual puede tomar dos caminos: una abierta confrontación e intentos de manipulación o una aceptación pasiva que esconde una autoagresión. Mucha de la supuesta "liberación sexual" experimentada por algunos adolescentes puede ser explicada como una rebeldía ante los cánones que pretenden restringir el ejercicio de su sexualidad; por otro lado, muchas mujeres ante las demandas familiares que les imponen que restrinjan su sexualidad a su capacidad reproductiva pueden asumir una actitud pasiva que puede resultar en depresiones. CONCLUSIONES En virtud de que los estereotipos constituyen patrones sociales que establecen desde fuera pautas, comportamientos, creencias y valores asociados al ser hombre o mujer, es necesario el establecimiento de una distancia respecto de estos estereotipos a fin de construir identidades propias. En conclusión, podemos señalar que ante la presión social que establece que debe encuadrarse la sexualidad humana a los patrones patriarcales, las personas pueden asumir dos caminos, una primera vía es la de rebelarse contra estas demandas

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asumiendo actitudes de franca confrontación; otra de las vías es la del autocastigo; dado que de acuerdo con nuestras creencias patriarcales la sexualidad está asociada con la transgresión, entonces el deseo sexual se experimenta con culpa, lo cual se traduce en una autoagresión que la persona dirige hacia sí misma (no se cuida cuando se enferma, se deprime, permite agresiones). En ambos casos, la presencia de estos conflictos va aunada a sentimientos de culpa en virtud del significado que esta sociedad le atribuye al ejercicio de la sexualidad. Muchas personas al experimentar una sexualidad que no puede ser encuadrada dentro de los estrechos márgenes que permiten los estereotipos viven en secreto estos conflictos, ya que se presentan a su consciencia como inaceptables, lo cual implica efecto nocivos para su salud física y su bienestar emocional. Tal es el casode la depresión postparto, que se he pretendido explicar recurriendo tan sólo a aspectos hormonales, olvidándose el papel tan importante que tienen los factores sociales que demandan de las mujeres un "amor incondicional" y una entrega toral al hijo. Ladepresión en estos casos puede deberse también a la autoagresión que se inflige la mujer por no cubrir este nivel de expectativas en su ejercicio como madre. La incapacidad de cuestionar estos estereotipos sociales que establecen ideales respecto de lo que debe ser el ejercicio de la sexualidad humana limita la posibilidad de encontrar nuevos caminos constructivos que alivien estos conflictos. El reconocimiento de la existencia de estos condicionamientos sociales permite a las personas el desarrollo de vías alternas para el ejercicio de una sexualidad más libre, auténtica y, sobre todo, basada en valores morales más equitativos. Si se marca una distancia respecto de estos estereotipos que establecen estándares poco realistas y en su lugar se acepta la existencia de personas reales que se comportan de acuerdo con sus historias de vida, sus creencias y los recursos con los que cuentan, es posible que la empatía, la comprensión y la aceptación de las diferencias proporcionen nuevos horizontes en el ejercicio de la sexualidad humana. Si se reconoce el derecho de las personas de apartarse de los modelos de sumisión y seguimiento acrítico de estos patrones será más factible la construcción de nuevas formas de experimentar una sexualidad más funcional. Este cuestionamiento implica la toma de conciencia por parte de las personas de que sus problemas de sexualidad no provienen únicamente de sus


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limitaciones fisiológicas, carencias personales o de su escasa capacidad, sino de que pueden provenir de un sistema social que establece los lugares y los papeles que deben asumir las personas en función de su género, independientemente de sus identidades particulares, deseos o necesidades. Este cuestiona miento de los estereotipos podrá liberar a las personas de la imposición de deberes externos que establecen cómo debe experimentarse la sexualidad. Frente a estas imposiciones, provenientes de múltiples instituciones sociales (la familia, el Estado, la escuela, la Iglesia, los medios masivos de comunicación, por señalar los más importantes) las personas nos encontramos frente a la enorme tarea de construir una identidad propia que satisfaga nuestra necesidad primordial de desarrollar nuestro potencial sexual como seres humanos. Tenemos el derecho inalienable de construir nuevas formas de vivir nuestra sexualidad, independientemente de los parámetros que esta sociedad establezca de acuerdo con nuestro estado civil, edad, preferencia sexual, etc. Este reconocimiento permitirá que las personas nos enfoquemos en perfilar las nuevas formas de vivir nuestra sexualidad en lugar de anclarnos en los sentimientos de culpa y frustración.

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AUTOEVALUACIÓN 1. ¿Cuáles son los principios en los que se sustenta la teoría de holones en su abordaje al campo de la sexualidad? 2. ¿Cuál es la diferencia entre el concepto de género y el de sexo? 3. ¿De qué manera las feministas han explicado el ejercicio del poder sobre la sexualidad femenina? 4. ¿Cómo afectan los estereotipos sexualidad humana?

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5. ¿Cuáles son las aportaciones de la perspectiva de género al campo de la investigación de la sexualidad humana?

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PODER Y GÉNERO Alba Luz Robles Mendoza

OBJETIVOS PARTICULARES • Conocer lasdiversasacepciones que tiene el concepto de poder. • Identificar los mecanismos existentes en torno al control del cuerpo femenino/masculino. • Identificar algunasexpresionessocialesdel ejercicio del poder. • Conocer los procesos de interrelación entre las expresiones de la violencia y el ejercicio del poder. • Identificar las características del ejercicio del poder en el género masculino. • Analizar las diversas expresiones de la violencia de género en nuestra sociedad contemporánea. • Discutir las diversas características del empoderamiento femenino versus el ejercicio del poder en el género femenino. INTRODUCCiÓN Si para oponerse a un poder impositivo se utiliza otro poder del mismo género, el círculo de la dominación perdura y con él, la violencia. Si para oponerse al poder impositivo se utiliza otra forma de poder, el que no se im pone a la voluntad del otro sino la que ex pone a la propia, la violencia desaparece. ANÓNIMO


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Se denomina a la ciencia y estudio del poder con el término cratología, siendo una disciplina política poco desarrollada e insuficiente para las personas que ejercen las profesiónes de juristas, sociólogos y psicólogos, que se han interesado en las expresiones del poder a través de las relaciones humanas. Históricamente, el poder ha presentado una serie de concepciones que lo caracterizan y lo forman de acuerdo con la sociedad establecida para cada tiempo; entre algunas de sus definiciones encontramos la realizada por Hobbes en el siglo XVII, considerando al poder como los medios presentes para obtener algún bien futuro, sentido en el que el poder se hace una característica inherente al individuo y se confunde con la "calidad o aptitud" de la persona. Ejemplo de ello son las capacidades presentes en las personas dedicadasa la oratoria, líderes organizacionales y espirituales, dedicados a la filosofía, invenciones y a la ciencia. Hauriou, a principios del siglo XVIII, manifiesta que el poder es una libre energía que, gracias a su superioridad, asume el Estado político por la creación continua del orden y del Derecho; de este modo surge como un hecho social producto de las interacciones individuales y grupales, caracterizado por su coactividad. Esuna potencia que se impone, siendo la más alta expresión social (Mendieta, 1976). La idea de dominación y de obediencia que se plantea en el párrafo anterior suele hallarse en la mayoría de las definiciones de poder. Así, el Diccionario Académico de la Lengua Española lo define como "el dominio, imperio, facultad y jurisdicción que uno tiene para mandar o ejercer una cosa. Son las fuerzas de un Estado". Del mismo modo, el Diccionario de Sociología expresa que el poder es "la capacidad o autoridad para dominar al otro, refrenarlo y controlarlo, obtener su obediencia, coartar su libertad y encauzar sus actividades en dimensiones determinadas" (Mendieta, 1976). En este sentido, las características básicasde las concepciones de poder vertidas en este apartado son: dominación, fuerza, influencia y control. Dichos elementos han construido las relaciones sociales y han estructurado el papel o rol que cada individuo conlleva; sin embargo, los estudiosos del poder han encontrado atribuciones de éste en relación con lasestructuras políticas de las culturas, haciéndolo un rasgo inherente al sujeto y, por ende, antagónico socialmente. Ladiscriminación de género se encuentra permeada por este concepto de

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poder, en donde lo legitima y lo estructura como natural y no como una construcción creada socialmente. CONCEPTO DE PODER El poder presenta una diversidad ae definiciones, siendo un proceso conceptualizado como "la base de todas las relaciones humanas". El concepto de poder ha sido usado como término genérico para abarcar todas las manifestaciones de la autoridad la coerción . la infl~encia, la fuerza, la dominación y el control, siend~ un concep~ to SOCialmentecreado y estructurado a través de las relaciones e intercambio entre las personas. Sin embargo, también existen acepciones sobre el poder basadas en la noción de recursos dirigidos hacia la habilidad para alcanzar una meta, incluso contra la resistencia de otras personas, utilizando la capacidad para influir sobre ellas (Prada, 2001). Ladiversidad de autores y autoras que han trabajado este concepto es infinita, sin embargo, podemos mencionar a quienes marcaron la pauta de teorías completas relacionadas con el concepto. Uno de ellos es Maquiavelo, quien menciona que no existen leyes sobre el comportamiento del poder, ya que no hay una ciencia que guíe las acciones de los agentes políticos, lo único que realmente existe es el escenario en donde cada persona despliega sus estrategias buscando satisfacer sus intereses personales. Hobbes, por su parte, menciona que el poder existe desde la relación causal y mecanicista de los autores que se vinculan con ésta,.de tal forma que el poder tiene como origen un sujeto que por medio de su propia actividad entra en relación con otra persona y detenta el poder porque la otra no lo ejerce; es decir, si A tiene poder es a expensas y a la no decisión de B. Por otro lado, según Weber, el poder significa la probabilidad de imponer la propia voluntad dentro de una relación social aun contra toda resistencia. Eneste sentido, para definir las relaciones de poder es necesario conocer sus dimensiones de análisis: a) Causalidad. El poder es la capacidad de influir en la conducta, de cambiar el curso de los acontecimientos, de vencer


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resistencias y de conseguir que la gente haga algo que de otro modo no haría. Está basado en el modelo causal-mecanicista donde "A tiene poder sobre 8 y 8 hace algo impuesto por A que de otra manera no haría". b) Intencionalidad. El poder se define por el carácter intencional de los efectos producidos en la persona. c) Conflicto. El poder se une al conflicto cuando no todos están de acuerdo con su ejercicio. d) Potencialidad. El poder es una capacidad adscrita a un agente que lo caracteriza de inmediato, independientemente de lo que diga o haga después. e) Empleo de sanciones. El poder está presente en la medida en que una persona controla por medio de las sanciones (castigos o recompensas de cualquier tipo) y actuaciones de otra. f) Restricción de alternativas. Se alude al poder como la relación en donde las actuaciones del agente no dejan abierto más que un solo y único camino al otro. . g) Gradación. El poder puede manifestarse con varios grados de intensidad bajo tres dimensiones: peso (cantidad de esfuerzo que se ejerce), dominio (gama de personas o grupos influidos) y alcance (variedad de respuestas afectadas). h) Dependencia. El poder reside en la dependencia que se establece entre las partes. i) Intercambio. Elejercicio del poder está relacionado con el que se impone a través del que se deja imponer. Radica en la desigual distribución de las decisiones entre las partes involucradas en una relación. De igual manera, existen algunas características que se manifiestan en el uso del poder: a) Existe una relación asimétrica dada a través de un ordenamiento jerárquico. En esta relación habrá dominadores y dominados. b) Legitimización del poder. El ejercicio del poder se encuentra de común acuerdo, con regularidad y normatividad entre los dominados y dominadores. e) Es la capacidad para distinguir la diferencia entre los seres humanos.

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d) Relaciones de oposición. Laspartes están constituidas con necesidades, intereses y prioridades distintas y opuestas a los de otros (negociación versus imposición). e) Secrea en realidades objetivas institucionalizándose. f) Tiene un carácter relacional, dinámico, construido y polisémico. g) Los medios para ejercer el poder son: la fuerza física, el uso de recursos económicos, el convencimiento mediante argumentos, el uso del prestigio, la seducción, la autoridad, la intimidación, el chantaje, la amenaza, la coacción, el soborno y el engaño, entre otros. Las características mencionadas estructuran la forma con que el poder se diversifica en cada sujeto, entre éstas encontramos cuando el cuerpo humano entra como un mecanismo de poder al que se le explora, desarticula y recompone. La anatomía del saber, igualmente que una mecánica del poder, interfiere en el cuerpo individual haciéndolo presa en el cuerpo de los demás no simplemente para que ellos hagan lo que se desea, sino para controlar también lo que no se hace. PODER Y CUERPO Lasteorías sobre el poder han desarrolladosu comprensión tanto en aspectos políticos y socialescomo personales"Lasposiciones de análisis más tradicionales han ligado el poder al acceso de los recursos económicos y de propiedad; sin embargo, las críticas posmodernas mencionan que el poder se conceptualiza a través de las relaciones entre los individuos, donde se ponen en juego responsabilidades, capacidades de acción y conflictos de intereses. Así, el poder no sólo está basado en lo material, sino en el ejercicio de éste dentro del contexto de los intercambios sociales. El autor representativo de esta perspectiva es Foucault, quien menciona que la red del poder-saber penetra la vida social y hace de cada individuo un eslabón en el control y la vigilancia del orden establecido. La articulación de género y poder permite analizar cómo la dominación y el control inciden en la construcción de las identidades masculina y femenina; esto es, para el mantenimiento de la


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subordinación de la mujer ante el hombre se requiere de un poder económico y social que acote espacios y pensamientos, que clasifique y ordene el discursoy lasprácticassocialesy, en consecuencia,que las relaciones desiguales de género estructuradas por división del trabajo, estructuras de poder y uso de la violencia profundicen sobre la subjetividad de los seres humanos. En este sentido, las relaciones de poder pueden penetrar materialmente en los cuerpos, distinguiendo al poder como el conjunto de instituciones y aparatos que estructuran las relaciones de fuerza permanente y dominio hacia los seres humanos (cuerpo). Así, las instituciones de poder controlan nuestras vidas, nuestras conciencias, nuestras expresiones corporales (incluyendo la sexualidad), nuestras actitudes y manifestaciones cognitivas, todo cuanto despliega la necesidad de relacionarnos entre hombre y mujer, entre personas adultas e infantes, a través de la dominación de unas personas sobre otras. El padre, el marido, el patrón, el adulto, el profesor, desde lo masculino, representa un poder de Estado, el cual a su vez representa los intereses de una clase, es decir, "el cuerpo social" que define las relaciones de género. Por tal, el poder no se construye a partir de las voluntades individuales o colectivas, ni tampoco se deriva de intereses. Por el contrario, se construye y funciona a partir de poderes de Estado, de cIase, de aparatos ideológicos sociales, de procesos económicos, los cuales permiten un dominio complejo y soberano. Ejemplo de esta construcción es la acumulación del poder a través de la institución familiar como forma absoluta y específica para ejercer, en el interior de los miembros de la familia, mecanismos de control, vigilancia y dominación, por medio de las relaciones de poder "consensuadas y aceptadas intrínsecamente" por los miembros de la misma. Esta justificante la eleva a jerarquía incuestionable y al uso del poder a través de la asignación de género. . Enconsecuencia, no podríamos hablar de género si no lo comprendemos, en principio, como un gran movimiento social, conflictuado, contextuado y controlado, donde se configuran y desarrollan relaciones de complementación, de contradicción y de cuestionamiento, lo que hace que el sujeto se revele contra su sistema de relaciones institucionales, buscando respuestas a sus dudas y sus

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angustias, lo cual a su vez provoca que el sujeto esté en movimiento biológico y social constante, pasando de manera cíclica del orden al desorden en relación con su entorno. Finalmente, todo el movimiento biológico y social que el sujeto desarrolla se da a través de la transformación de la sociedad, la cual también se encuentra en continuo cambio, evidentemente construyendo al ser social, y se estudia desde la perspectiva de la sociología y la cultura a través de las diversas manifestaciones del poder. EXPRESIONES SOCIALES DEL PODER

El poder es un fenómeno social multiforme, dinámico e interactivo, que afecta comportamientos, sentimientos, creencias, actitudes, valores y normas de conducta de los seres humanos. Lasteorías psicosociológicas conceptual izan al poder como el reflejo sistematizado del cómo y el por qué en extensos ámbitos de la vida social impera una determinada racionalidad. El poder para controlar e influir en el (la) otro(a) entonces reside en un control sobre las cosas que éste(a) valora, desde los recursos físicos hasta los relacionados con su propia existencia. ParaWeber existe una distinción entre el poder y la autoridad. En tanto que el poder comprende el uso de cualquier recurso incluyendo la fuerza física o coerción, la autoridad es una forma de poder sin implicación de fuerza, ya que las órdenes son cumplidas por la jerarquía que presenta el agente impositor. El cumplimiento de éstas se apoya en la legitimidad social que justifican su imposición yordenan su obediencia. Estetipo de acatamiento voluntario requiere de un código común de valores creado socialmente en donde se reconoce el derecho de mandar y el deber de obedecer (Weber, 2001). Raveny French (Prada, 2001) distinguen cinco tipos de poder: a) Gratificante. Cuya base es la habilidad para recompensar por las acciones requeridas. b) Coercitivo. Basado en la posibilidad de administrar castigos ante la falta de conformidad del comportamiento. e) Referente. Con base en la identificación personal e ideológica del que recibe con el portador del poder. d) Experto. Apoyado en las capacidades técnicas o conocimiento especial que el que recibe atribuye al portador de poder.


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e) Legítimo. Cuando se reconoce al portador del poder el derecho de mandar con la consiguiente obligación de obedecer. Dentro de la teoría feminista encontramos cuatro tipos de expresiones del poder social: a) Poder con. Esla capacidad de articular el poder personal con el de otras personas, a fin de potenciar cuantitativa y cualitativamente los objetivos y los resultados. b) Poder par'i!. Esel que es capaz de generar cambios y producir formas de autodesarrollo. Está dirigido a una meta, objetivo o fin a través de una fuerza motivante interna y externa. e) Poder desde. Es la habilidad o poder interior para afirmarse y resistir el poder de otros(as). d) Poder sobre. Son aquellas formas de poder explícito o implícito, ejercido de manera coactiva y potencialmente generadoras de conflicto. Estos abordajes son de gran utilidad para demostrar esencialmente que el poder lo ejercen de manera predominante los hombres sobre otros hombres, sobre las mujeres y también sobre otros grupos sociales marginados. Este poder es susceptible de ser conquistado, desarrollado y cultivado. Esel poder entonces un instrumento de dominación que se percibe cotidianamente y que también puede servir y utilizarse no sólo en las relaciones interpersonales, sino también en las relaciones de las comunidades y hasta en ámbitos que van más allá de lo comunitario. Debido a que el poder es un fenómeno multidimensional, todas estas clasificaciones se encuentran interrelacionadas y mezcladas dentro del desarrollo de las relaciones humanas, por lo que rara vez se presentarán en expresiones únicas. Asimismo, las expresiones del poder social pueden estar apareadas con el uso de la violencia. RELACiÓNDIÁDICA: VIOLENCIA V PODER

La violencia social se ha desarrollado como un fenómeno de gran relevancia dentro de las sociedades actuales. No existe actividad humana de la cual setenga noticia que no se encuentre permeada por la

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violencia en alguno de sus aspectos. Dada su importancia, la violencia ha sido abordada por una multiplicidad de disciplinas científicas que finalmente entienden a este fenómeno desde su particular punto de vista y que permiten ver a esta problemática multidimensionalmente. Desde este enfoque, en la violencia convergen aspectos como lo legal, lo económico, lo biológico, lo psicológico, lo social y lo cultural de las y los individuos. Laviolencia se conceptualiza como un aprendizaje social construido a través de la experiencia de los individuos en su entorno. La violencia requiere de sofisticados sistemas pedagógicos de reproducción social, cultural y política; se aprende, se enseña, sefomenta, se legitima, se le autoriza y se le convierte en valor, virtud, cualidad, en atributo de género, clase o edad. Por tal, hablar de violencia de género implica el uso legítimo del poder permeabilizado por los estatus económico y social, que permiten que la sociedad justifique la presencia de la violencia estereotipada por los sexos poniendo a losdébiles socialmente hablando (mujeres, niños, niñas, adultos mayores, indígenas) en desventaja del género estructurado como dominante. Loscambios y cuestionamientos que día a día se han marcado dentro de la perspectiva de la teoría de la equidad de género han ayudado a que los roles y estereotipos tradicionales que se han gestado en la casa, en la escuela y en la relación diaria entre hombres y mujeres se modifiquen, dando pauta a una deconstrucción del aprendizaje de la violencia que permita entender al otro sin imponer elementos intrínsecos de cada género, haciéndonos más seres humanos y menos desiguales. Por último, el sexo constituye un elemento diferencial en el desarrollo de las conductas y relaciones interpersonales, permeado por valores relacionados con estereotipos sexuales socialmente aceptados no sólo en la construcción de una identidad sexual, sino también en el desarrollo de las relaciones de poder y del proceso de organización de las culturas. Aunque actualmente tales estereotipos están en proceso de transformación, siguen dominando las ideas de racionalidad, análisis, estrategia y competencia muy asociadas a la masculinidad, presentando problemas prácticos en la manera de actuar de las personas sobre las bases cotidianas del uso del poder.


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La incorporación de los modelos de autoridad asociados al sexo masculino como un soporte de la estructura del poder conlleva a la desigualdad de la toma de decisiones y a concentrar a las mujeres en los puestos de escala inferior, lo que desafortunadamente produce valores y normas sociales implícitas y, por tanto, el uso del poder impositivo y de la violencia de género. MASCULINIDAD V PODER

Weber menciona que el poder es un fenómeno ubicuo, componente necesario de todas las relaciones sociales, legitimándose a través de la autoridad, sea ésta tradicional, carismática o legal. El poder entraña algún tipo de violencia, de conflicto y de desigualdad, que se hace inherente a cualquier tipo de organización social, por ende, las desigualdades sociales se representan en la humanidad a través de los ámbitos económico, histórico, cultural, institucional y, en consecuencia, entre los sexos (Jiménez, 2006). Esto lleva inevitablemente a concebir a la sociedad en términos dicotómicos y estratificados, creando las diferencias extremas y soslayando la existencia de la desigualdad. Las diferencias de género estructuran una jerarquización política (algunos mandan y muchas obedecen) que ponen de manifiesto la autoridad como desigualdad natural y, por tal, al concepto de poder como exclusivodel sexo dominante. En este sentido, la descripción de los pueblos antropológicamente se presenta con una imagen de sociedad controlada por hombres, por lo que la explotación y uso del poder se trasladaba del ámbito económico al de las relaciones de género. El estatus de la mujer estaba subordinado universalmente al hombre, atribuyéndole el cuidado de los hijos y, en consecuencia, separando los ámbitos de lo privado o doméstico y lo público. Estadicotomía entre lo público y lo privado permite que el rol dominante del hombre se legitime y, en consecuencia, el uso del poder como característica inherente a este sexo. Esta masculinidad vinculada al poder y al prestigio conlleva una posición social más elevada para los hombres y más baja para las mujeres, razón por la que incluso esto está basado en el reparto de papeles o roles estereotipados y en la posición de características

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definidas por los valores en la sociedad. En este sentido, las categorías sociales existentes no son equivalentes respecto a la posición y uso del poder, ya que este concepto se maneja como atributo de virilidad, actuando como una señal de posición dominante ante las y los demás. Por ello, cuando algunas mujeres ejercen un poder político, se sostiene la presencia en ellas de actitudes, roles y valores "masculinos", manteniendo así la discriminación de género. De acuerdo con Montesinos (2002), el poder es la capacidad . de un individuo o grupo de individuos para hacer que otros hagan lo que él o ella desea. Este uso de poder se ejerce a través de la violencia física o simbólica porque el hombre aparece en las estructuras jerárquicas más altas simbolizando este uso de poder. Sin embargo, la monopolización del poder por parte del hombre poco a poco está decrementando, debido a la resignificación simbólica que se expresa por las nuevas identidades genéricas, en donde el nuevo papel de la mujer contemporánea precisa el desplazamiento de las maneras tradicionales de ejercer el poder a otros mecanismos de estructuras sociales donde la mujer adquiere conocimientos profesionales, ubica sitios dentro del mercado laboral y presenta una visible movilidad en los niveles jerárquicos de las organizaciones públicas y privadas, abarcando cada vez mayores oportunidades de acceder a los ámbitos sociales. Este fenómeno se ha limitado a través del "techo de cristal" r entendido como los obstáculos que se les presentan a las mujeres que desean tener acceso a los ámbitos privilegiados, siendo así pocos los espacios sociales en donde la mujer asciende en la escala del uso del poder (Montesinos, 2002). Esto demuestra que la participación de las mujeres en los niveles jerárquicos donde se ejercita el poder pone en tela de juicio que el poder sea un atributo y cualidad exclusivamente masculino, aunque existan procesos de construcción de la identidad masculina que refuerzan este patrón conductual. Desde la perspectiva de género, la masculinidad surge dentro de un sistema de relaciones jerárquicas de género que estructuran al varón histórica, social y culturalmente, así pues, la masculinidad se estructura a través del ordenamiento de la práctica social, involucrándolo en un proceso de reconstrucción constante y cambiante de acuerdo con los elementos de las sociedades y de


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su contemporaneidad. Esto implica representaciones, significados e identidades diferentes acordes a los diversos escenarios de esta práctica social. En este sentido, el proceso de construcción de la identidad mascul!na no es único, sino que presenta formas hegemónicas y subordinadas que van construyéndolo desde su "ser" y "hacer" de acuerdo con sus procesos económicos, sociales y culturales. Aunque la identidad de género masculino se vaya construyendo a cada momento, el proceso de desarrollo de la misma se ha estudiado desde la diferencia sexual y construcción cultural del sistema sexo/género, en donde las prácticas, símbolos, representaciones, normas y valores de los sujetos se elaboran a partir de la diferencia sexual, definiendo los atributos y modos de relacionarse. Este siste ma de relaciones entre los diferentes sexos,y aun entre el mismo sexo son construidos de manera desigual, en donde el poder social está distribuido diferencialmente y los estereotipos masculinos y femeninos están determinados por el uso del poder (Salguero, 2008). Los diversos discursos científicos enfocados al estudio de la desigualdad social de los hombres y las mujeres han llevado a formular hipótesis explicativas sobre estas relaciones de poder. Losenfoques biologicistas mantienen que la dominación masculina es un hecho adaptativo en la historia de la humanidad, en donde la base de la división del trabajo en función del sexo subordina a la mujer por sus funciones en el ámbito privado, caracteriza al hombre por su actividad en el ámbito público y, por ende, da connotación yatribuciones psicológicas de agresividad, iniciativa y uso de poder como forma de preservar la especie (Fernández, 1998). Otra explicación también biologicista parte del papel de la reproducción, subordinando a estas últimas al cuidado y educación de los hijos y, por ello, a características de pasividad ante la sexualidad. La dominación del hombre mantiene la estabilidad de la sociedad a través del ejercicio del poder y control de la reproducción sobre las mujeres desarrollando el significado de sexualidad activa en el varón asociado al concepto de "virilidad sexual o macho". Por otro lado, desde la teoría sociobiológica se atribuye la dominación masculina a la predisposición biológica que determina la división de los papeles o roles de género. Lascaracterísticas relacionadas con el uso del poder en los hombres están marcadas, desde

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esta teoría, por la predisposición biológica diferencial expresada mediante pautas sociales, la distribución sexual del trabajo, la historicidad y los procesos de interiorización como elementos "naturales" del esencialismo biológico (Fernández, 1998). Por último, desde el enfoque cultural, la existencia de la dominación masculina está relacionada con el carácter y la fuerza de los mitos sobre el papel del varón ante la mujer; en donde su dominación es medida tanto por los derechos económicos y políticos dentro de la sociedad como por la violencia ejercida hacia las mujeres. De este modo, el varón se define por la fuerza, la valentía y la agresividad como características intrínsecas al sexo masculino elaboradas cultural e históricamente. El sistema patriarcal-capitalista reforzará esta posición social de lo masculino y mantendrá las relaciones de poder a través del uso de la violencia entre los sexos. Así, el análisis de la explotación se traslada del terreno puramente económico al de las relaciones de género. La atribución a la mujer del cuidado de la prole origina en toda sociedad una separación entre dos ámbitos: el doméstico y el público; no obstante, la Escuela de Frankfurt menciona que esta dicotonomía se manifiesta como un proceso histórico y evolutivo vinculado con la necesidad de la sociedad de adaptarse a su medio, en este sentido, tendría que esperarse un cambio en el desarrollo de los papeles y funciones que hombres y mujeres adoptaran en una sociedad más contemporánea. Las investigaciones antropológicas sobre la desigualdad y jerarquización del género reflejan en gran medida los problemas que debaten las sociedades contemporáneas, que van desde la creciente e incompleta incorporación de la mujer al mercado de trabajo y a puestos de poder, sus luchas por conseguir la equiparación con los hombres en las tareas del hogar, hasta el terreno profesional y en el ámbito público, la injusta asignación de papeles o tareas por aspectos biológicos sexuales de ser macho o hembra, la injusta legitimidad social del poder como atributo predominante para el hombre que pone en desventaja a la mujer. Esta desigualdad en el uso del poder ha permitido que ellos accedan al mismo desde las manlfestaciones de la agresión física, legitimándose su.uso como parte intrínseca de la identidad masculina. Este proceso de "violencia legitimada socialmente" asignadaal varón se ha mantenido a través de los años y es un problema actual no sólo


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de salud pública, sino de desigualdad social, que ha limitado el desarrollo integral de la mujer en todos sus aspectos. VIOLENCIA Y GÉNERO Laviolencia es un problema mundial que afecta a todas las personas de todas las culturas, clases sociales y edades. En octubre de 2008, la Organización Mundial de la Salud (OMS) presentó el/nforme Mundial sobre la Violencia y la Salud, en el cual se aborda la violencia como un problema de salud pública en el mundo: cada año, más de 1.6 millones de personas pierden la vida de manera violenta. Es importante reconocer la existencia de diferentes tipos de violencia en el mundo: 1. Física. Toda aquella acción que implique el uso de la fuerza contra otra persona atentando contra su integridad física. 2. Verbal. Es una manifestación de la violencia emocional y se da cuando una persona insulta, ofende o dirige palabras denigrantes a otra. 3. Emocional. Todo acto que realiza una persona contra otra para humillarla y controlarla. 4. Sexual. Toda acción que implique el uso de la fuerza, la coerción, el chantaje, el soborno, la intimidación o la amenaza para hacer que otra persona lleve a cabo actos sexuales o acciones sexualizadas no deseadas. 5. Patrimonial. La dirigida contra bienes y pertenencias, disponiéndose de ellas sin consentimiento del poseedor de los mismos. Un tipo específico de violencia es la violencia de género, que va encaminada a perpetuar la subordinación femenina, esto es, a mantener a la mujer en una posición jerárquica inferior no sólo en el ámbito doméstico, sino en el orden social. En este sentido, la Organización de las Naciones Unidas (ONU) refiere que la violencia de género es el tipo más frecuente de manifestación de la violencia y el poder a nivel mundial. Esinnegable que las mujeres viven bajo el riesgo diario de recibir agresiones físicas, psicológicas y sexuales en formas que no tienen un paralelo directo

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para los hombres. La violencia o la amenaza de violencia limita las opciones de que disponen las mujeres y las niñas en todas las esferas de la vida: en el hogar, en la escuela, en el lugar de trabajo y en la mayor parte de los espacios comunitarios. Todos estos modos de violencia impiden la cabal participación de la mujer en la sociedad (Boletin ONU, 2008). Enel informe de la OMS se señala que son las mujeres quienes corren más riesgos en entornos domésticos o familiares. Se registran datos alarmantes: casi la mitad de las mujeres que mueren por homicidio son asesinadas por sus maridos o parejas actuales o anteriores, cifra que se eleva a 70% en algunos países. la ONU ha definido a la violencia de género como: "Todo acto de fuerza física o verbal, coerción o privación amenazadora para la vida, dirigida al individuo, mujer o niña, que cause daño físico o psicológico, humillación o privación arbitraria de la libertad y que perpetúe la subordinación femenina, tanto si se produce en la vida pública como en la privada". la violencia de género implica el uso legítimo del poder permeabilizado por los estatus económicos y sociales que permiten que la sociedad justifique la presencia de la violencia estereotipada por los sexos poniendo a los débiles socialmente hablando (mujeres, niños(as), ancianos(as), indígenas) en desventaja del género estructurado como dominante. A nivel mundial, las estimaciones más precisas sobre violencia de género muestran que al menos: • Una de cada cuatro mujeres sufren de violencia doméstica. • 25% de las mujeres sufren una violación o intento de violación. • 25% de las niñas son objeto de algún tipo de abuso o intromisión en su intimidad durante su niñez. • 25% de las mujeres son acosadas sexualmente en sustrabajos o en espacios públicos. • Entre 15 y 69% de las mujeres han sido objeto de agresiones físicas por parte de una pareja masculina en algún momento de su vida (OMS, 2006). Las mujeres pueden también agredir y ser violentas, pero la mayor parte de la violencia física, sexual y emocional o psicológica es cometida por el hombre contra la mujer. Los datos con los que se


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cuenta para diversos países señalan que entre 60 y 90% de los agresores de mujeres son hombres. Los estudios relacionados con este tema consideran que los patrones culturales y los estereotipos sexistas fomentan y agudizan el problema de la violencia contra las mujeres y las niñas. En este sentido, eliminar estos estereotipos y corregir las desigualdades son dos imperativos para erradicar la violencia contra las mujeres. Loscambios y cuestionamientos que día a día se han marcado dentro de la perspectiva de la teoría de la equidad de género han ayudado a que los roles y estereotipos tradicionales que se han gestado en las casas,en la escuela y en la relación diaria se modifiquen, dando pauta a una deconstrucción del aprendizaje de la violencia que permita entender al otro sin imponer elementos intrínsecos de cada género, haciéndonos más seres humanos y menos desiguales. Para ello, el conocimiento que las propias mujeres tienen sobre el concepto de violencia de género es muy importante, ya que permitirá construir nuevos elementos para el aprendizaje del comportamiento no violento entre los géneros masculino y femenino. Una de las formas para hacerle frente a la violencia de género y construir un poder desde el interior de las mujeres es lo que se denomina empoderamiento femenino. EMPODERAMIENTO FEMENINO VERSUS PODER FEMENINO

Elempoderamiento de las mujeres es un proceso por el cual ellas van adquiriendo la capacidad de descubrir los diferentes tipos de poder que pueden ejercer, la manera más conveniente de hacerlo para sus fines y la posibilidad de lograr un autodesarrollo, autoconcepto y autoestima que les permitan romper la barrera que aparentemente siempre había estado allí y que no habíadado lugar a la confianza en sí mismas y a la exploración de sus habilidades y capacidades. Dado que las mujeres representan más de la mitad de la población mundial, no puede dejar de recalcarse la importancia de "invertir en las mujeres y las niñas". Sin embargo, el auténtico empoderamiento de la mujer sólo se logrará cuando reunamos la voluntad necesaria, a nivel mundial, para cumplir plenamente los compromisos contraídos y ofrezcamos los recursos humanos, financieros y

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educativos apropiados. Aparte de esos esfuerzos, es fundamental y resulta cada vez más evidente que necesitamos un cambio de actitud hacia el papel y la condición de la mujer en la sociedad. Hace más de seis decenios, en la Carta de las Naciones Unidas se reafirmó la fe en los derechos fundamentales del hombre, en la dignidad y el valor de la persona humana y en la igualdad de derechos para todas las personas; no obstante, incluso ahora, prácticamente en todas partes del mundo sigue habiendo diferencias por motivo de género, bien, en el acceso a la salud y la educación, o bien en el logro de igual remuneración por igual trabajo. Espor esto que los fondos, programas y organismos especializados de las Naciones Unidas otorgan una importancia esencial al empoderamiento de la mujer (ONU, 2008). Empoderamiento significa ejercicio del poder, constituye un concepto complejo y problemático, el cual se ha vuelto objeto de interés en los debates de las ciencias sociales, esto debido a su concepto raíz, es decir, al concepto del poder, concepción por demás polémica y con muchas acepciones. Suorigen proviene del concepto inglés empowerment, que significa 'dar poder', de ahí que se hable de un sujeto que pasivamente recibe poder. Por otro lado, etimológicamente desciende de la palabra apoderar, que es una connotación jurídica de adquirir poder o atribución sobre objetos o personas, acentuando la dimensión de la exterioridad. Por último, se ha definido la palabra "empoderamiento" como la acción del sujeto que tiene efectos reflexivos sobre lo que ejecuta. Hoy por hoy, se le usa muy ligado al tema del desarrollo. No es raro oírlo en los planteamientos de las organizaciones de la denominada sociedad civil, así como en los discursos de políticos convencionales muy afines al sistema. De ahí que cuando se usa no se deja de caer en la tentación preocupante de emplearlo, dejando fuera de escena los problemáticos conceptos del poder y de la distribución del mismo. El poder tiene un sentido emancipador, pero la sutileza no falta en sus definiciones, sobre todo cuando en relación con los procesos de toma de decisiones, en el conflicto y la fuerza se entiende a éste como la capacidad de que dispone una persona o un grupo para lograr que otra persona o grupo haga algo en contra de su voluntad, pues lo asumen disímiles agentes sociales que van desde los internacionales


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y el Estado, hasta los patrones y empresarios. Se incluye así diversidad de distinciones en la concepción del poder, como: el poder de amenaza, el poder económico, el poder integrador o el poder para crear relaciones como el amor, el respeto, la amistad o la legitimidad. El empoderamiento, desde la visión feminista, se interpreta sobre la base de que "la dimensión personal es política". Concepción que inevitablemente conduce a una interpretación más amplia del poder, pues abarca la comprensión de las dinámicas de la opresión y de la opresión interiorizante, que impiden la participación en la toma de decisiones formal e informal de ejercer influencia por parte de los grupos con menos poder. Esdecir, se toma en cuenta también el modo como las personas y los grupos se perciben a sí mismos para actuar en el medio que los circunda. La importancia del empoderamiento radica en que es un mecanismo que sirve para desarrollar la autoestima y la convicción de las limitaciones y aptitudes en la conducción de un sistema social, un organismo, un grupo, etc. Desde 1948, el derecho a la igualdad está consignado en la Declaración Universal de los Derechos Humanos y, de una manera u otra, también aparece recogido en las constituciones de los países centro y sudamericanos: es parte de principios "universales" aplicables a todas las personas; sin embargo, si se analizan con detenimiento, los componentes normativos y estructurales de estos instrumentos internacionales de protección de los derechos humanos, incluyendo la Convención Interamericana de Derechos Humanos, el Pacto de Derechos Civiles y el Pacto de Derechos Sociales, excluyen situaciones esenciales en cuanto a los derechos de las mujeres. Entre uno de los muchos casos está, por ejemplo: el derecho a participar en la toma de decisiones, la nacionalidad de las mujeres casadasen forma autónoma a la de su marido, vivir sin violencia, contar con apoyo en la crianza de los hijos y en el trabajo doméstico, decidir sobre su maternidad, entre otros. Todas estas cuestiones están relacionadas con el miedo de establecer igualdades de poder entre los hombres y las mujeres. En los inicios del siglo XXI, a pesar de legislaciones y procedimientos legales, las barreras culturales, económicas y sociales que se imponen a las mujeres, por el sólo hecho de serlo, les impiden ejercer realmente el derecho al poder. Estadísticasrecientes identifican el reducido nombramiento de mujeres en puestos de elección y

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en cargos públicos, y las que logran incursionar en estas actividades, por lo general y muchas veces con la oposición de ellos, no se libran de enfrentar enormes dificultades para su desarrollo. Elestilo de poder ejercido hasta hoy, incluso desde instituciones que se consideran defensoras del humanismo, es centralizado por y para varones. Es esta situación cultivo propicio para que las mujeres no puedan pensarse a sí mismas a través de la propia experiencia, la propia historia. Esto en muchas ocasiones las obliga a medirse con el hombre para encontrar una medida de sí. El empoderamiento femenino entonces, desde su acceso a la producción no doméstica, se entiende como el proceso a través del cual las mujeres llegan a ser capaces de organizarse, trabajando para aumentar su propia autonomía, para hacer valer su derecho independiente a tomar decisiones y a controlar los recursos que les ayudarán a cuestionar y a eliminar su propia subordinación. El empoderamiento representa un desafío en las relaciones familiares y sociales patriarcales, pues no sólo es un "desempoderamiento" o pérdida de la posición privilegiada de los hombres, sino también libera y empodera a éstos, tanto en lo material como en lo psicológico cuando la mujer, además de lograr el acceso a recursos materiales que benefician a la familia y la comunidad, comparte responsabilidades con ellos. Desde la labor empoderada de la fémina, se liberan ambos en tanto que es un "poder con" que permite acabar con estereotipos de género y propiciar la presentación de soluciones compartidas. Por tanto, la conquista del poder por las mujeres es un reto, un elemento de la alternativa ética de resistencia al sistema, por lo que son importantes cualesquiera ejercicios del poder; sin embargo, hay un empoderamiento fundamental, el del ámbito de la producción no doméstica, el que permite la emancipación económica, pero desde la participación en la base y sustento de toda sociedad, la producción de los bienes de subsistencia, pues lleva como elemento necesario asegurar la educación de las mujeres en tanto implica un cierto grado de desarrollo personal, así como su plena participación en la formulación de políticas y en la toma de decisiones, la eliminación de políticas establecidas y de los obstáculos que la discriminan en el empleo y la salud, y que promueve la explotación y la violencia. Asimismo, existe la necesidad de apoyar a las mujeres en la crianza


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de los hijos y propiciar que los padres compartan equitativamente estas responsabilidades. En este sentido, se ha pretendido igualar el concepto de empoderamiento femenino con el de poder femenino, pero son procesos complementarios que implican el poder desde el interior de las mujeres para el crecimiento de la autoestima, autoconcepto y autodesarrollo que permita, en un segundo momento, "posesionarse del poder social" que se le ha confinado para ofrecer pautas de comportamientos más equitativos a la igualdad de oportunidades entre los hombres y las mujeres. Toda alternativa en estos tiempos de exclusión globalizada exige que los grupos excluidos demanden formas de poder que desarticulen los poderes enajenantes, destructivos y opresivos vigentes en la sociedad. De ahí la urgencia de instaurar un "poder" femenino que, desde los cimientos de la sociedad, elimine el poder autoritario, el poder con abuso, el poder de lastimar a otros y otras, el poder de expropiar las posibilidades de vida de las personas, ya que estos cambios son pilares que sostienen la verdadera democracia. Hoy se acepta ya como incuestionable verdad que el trabajo es "creador de los seres humanos", y como la autoestima se alimenta del alto aprecio a dicho trabajo, por tanto, la de la mujer tendrá que crecer con la realización del liderazgo desde un trabajo que ya no sea exclusivo. El salir del confinamiento privado para alcanzar el estatus social de ser creadoras, desde el trabajo productivo liderado por ellas, humanizará y acrecentará más el espíritu de solidaridad que la dura lucha por la supervivencia ha desarrollado en las mujeres (Aldana, 2006). El empoderamiento surge del interior, son las mismas mujeres quienes se empoderan. Los instrumentos utilizados para promover el empoderamiento de las mujeres deben simplificar el proceso de comunicar las necesidades y prioridades de las mujeres y fomentar un papel más activo en la promoción de estos intereses y necesidades. Entre los instrumentos importantes de empoderamiento se encuentran la información y las redes de apoyo. El empoderamiento de las mujeres no puede ocurrir en el vacío, también se debe incorporar a los hombres al proceso de cambio, idea que avalan quienes abogan por que se lleve a cabo. Es importante determinar las posibles repercusiones que el empoderamiento

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femenino pueda tener en ellos, así como los efectos potenciales que pueda tener en sus actitudes y comportamiento. El empoderamiento de las mujeres, sin embargo, no se debe considerar como un juego de suma o resta, en donde los beneficios de la mujer se traducen en perjuicios para los hombres, también se deben identificar y dar a conocer los beneficios que trae para la sociedad y para el hombre mismo (Alfara, 1999). La autodeterminación, la habilitación y la creatividad son condiciones necesarias para que surjan los procesos de empoderamiento, los que pueden ser facilitados mediante técnicas de intervención dentro de las familias que coloquen a los miembros de éstas en un decisivo papel de participación y de aprendizaje de nuevas formas de organización. En este sentido, el empoderamiento es un proceso mediante el cual las personas asumen el control de sus vidas, establecen sus necesidades e intereses, determinan la manera de satisfacerlos y ponen en acción recursos y estrategias para actuar en pro de sus logros, de ahí que sea un factor significativo para el desarrollo de las mujeres principalmente para desarrollar capacidades para cambiar su posición y condición. Su propósito es dar mayor poder a las mujeres mediante una mayor confianza en ellas mismas, lo que permitiría la participación femenina en la toma de decisiones familiares, sociales, económicas, políticas y culturales del país. CONCLUSIONES Las relaciones e interacciones de hombres y mujeres que cada cultura presenta forman la base que configura los diversos significados otorgados a cada sexo. El sexo configurado desde el género es una construcción histórica y social que nutre de significados culturales a la dinámica de las relaciones interpersonales. Históricamente, el orden jerárquico social y los papelesgenéricos permiten el desarrollo de códigos significativos no sólo del comportamiento entre los sexos, sino de sus posiciones en los recursos y en la división del trabajo, creando características de desigualdad y de dominio de unos(as) sobre otros(as). Es en el seno de los procesos interpersonales y sociales donde se crea el género, por lo que género y poder están íntimamente


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conectados, siendo el género usado como un modo de control social. Las relaciones asimétrica-s son producto de la jerarquización y dominio entre los sexos,así como una valoración diferencial de comportamientos, actitudes, derechos y deberes entre hombres y mujeres emanada de la estratificación social y genérica. Esta diferencia marca las relaciones de poder que constituyen la .normatividad y valor en los intercambios entre los sexos (Fernández, 1998). Las desiguales relaciones de género posibilitan la reproducción de subjetividades masculinas y,femeninas permeadas por las estructuras de poder. Así, las personas legalizan dichas posiciones conformando las normas que definen las relaciones entre ellos; por ello, las relaciones asimétricas estructuran a los hombres como fuertes, inteligentes, trabajadores, audaces y detentadores del poder y, antagónica mente, definen a las mujeres como pasivas, débiles, sumisas y obedientes a la jerarquía de poder impuesta. El orden social de las relaciones entre los sexos tiene su base en una estructura jerarquizada, opuesta y complementaria, y sobre contenidos y representaciones del poder social. Ladiscriminación que actúa sobre las mujeres se impone a través de un sistema de trato desigual, en donde el grupo dominante -Ios varones- utiliza el poder para producir la exclusión de las mujeres a los medios sociales y públicos. Esta política discriminatoria, caracterizada por elementos de poder, favorece la existencia de la violencia física, psicológica y sexual hacia las mujeres, permitiendo la distinción social en el proceso que crea, expresa y mantiene las diferencias de género. En la jerarquía de género se pone de manifiesto que el poder social y el control en el trabajo, los recursos o productos están asociados con la masculinidad, lo que implica características atribuidas a cada sexo como propiedades con valores diferenciales, siendo más positivas las referidas a los varones, constituyéndose así un juego de relaciones sociales desiguales. En la actualidad, aunque la transformación de las sociedades contemporáneas ha criticado la persistencia de algunos mitos sociales sobre las mujeres y sus roles, el poder social tradicional continúa asociado con características y atributos considerados como masculinos, así pues, la discriminación refuerza ideológicamente los papeles sociales en su simbología masculina y, a pesar de que existan

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cambios en las formas que adopta esta jerarquía, la masculinidad aparece asociada con el poder y el prestigio social (Fernández, 1998). De ahí que sea necesario realizar un análisis del papel que la mujer desempeña en la sociedad actual a fin de que adopte nuevos patrones de conducta que le permitan un desarrollo más equitativo en el mundo en que vivimos. El empoderamiento femenino es una herramienta que otorga a las mujeres el acceso y el control sobre los recursos internos necesarios para tomar decisiones y transformar su situación social (Cacique, 2004). El empoderamiento comprende la alteración radical de los procesos y estructuras que reproducen la posición subordinada de las mujeres como género y promueve la movilización de las mujeres desde las bases,a partir de la satisfacción de necesidadesprácticas de género para lograr a largo plazo necesidades estratégicas. Significa un proceso inmanente de acrecentamiento de poder interno, personal, desencadenador de efectos objetivos en la persona, en su entorno y en sus relaciones interpersonales. Esto incluye la crítica y la deconstrucción de las condiciones socioculturales que nos sujetan y la elaboración personal que nos permite legitimar el cambio. Auxilia en la necesidad de incrementar el poder sobre las mujeres a través de su autoconfianza, haciendo una redistribución del poder entre hombres y mujeres, y entre sociedades, mejorando la calidad de vida de las mujeres y transformando las estructuras y fuerzas sociales existentes. Asimismo, se requiere de un análisis del papel que el hombre desempeña en la sociedad contemporánea, que permita una constante construcción del "yo masculino" con nuevos significados e identidades, posibilitando así la resignificación de su ser y su hacer en el mundo social. AUTO EVALUACiÓN

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Definir poder. Mencionar las formas de expresión del poder social. Explicar cómo se construye el poder en la masculinidad. Definir violencia de género. Caracterizar los elementos que estructuran al empoderamiento femenino.


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genero UNA VISiÓN MULTIDISCIPLlNARIA

Es una obra editada y publicada por la Universidad Nacional Autónoma de México en la Coordinación Editorial de la Facultad de EstudiosSuperiores Iztacala, Avenida de los Barrios N.O 1, Los Reyes Iztacala, CP 54090, Tlalnepantla, Estado de México. Se concluyeron los trabajos de impresión y encuadernación el 31 de mayo del 2011 en los talleres de Master Copy,SAde CV, Av. Coyoacán 1450 bis, Col. Del Valle, CP 03220. En la impresión de tipo digital se tiraron 300 ejemplares sobre papel cultural de 78 g/m' a 1x1 tintas para interiores y papel couché de 250 g/m' a 4xOtintas para la portada. Se utilizaron en la composición tipográfica las familias Garamond Premier Pro 12.5:14.5, y Calibri 10:12 y 9:11 puntos. El cuidado de la edición estuvo a cargo de JoséJaimeÁvila Valdivieso Pedidos: Librería FESIztacala:5623-1194 Coordinación Editorial: 5623-1203 ·Correo-e: joseja@campus.iztacala.unam.mx LosReyesIztacala,2011



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