La Primera Guerra Mundial. La Primera Guerra Mundial fue un acontecimiento internacional que, iniciado en Europa en agosto de 1914 y terminó en noviembre de 1918.Por primera vez en la historia de la humanidad, una lucha armada que incluía países geográficamente lejanos; además de que su evolución y desenlace dejo grandes cambios en el mundo entero.
Introducción: La formación de alianzas. El dominio sobre las áreas coloniales provocó conflictos entre las potencias que se resolvían a través de acuerdos diplomáticos, o bien de guerras que se mantenían dentro de un mareo estrictamente local. Además, las alianzas que se formaban duraban poco y los países cambiaban de bando frecuentemente. Sin embargo, las reglas en estos acuerdos diplomáticos fueron cambiando, ya que medida que crecían las necesidades de expansión de las grandes potencias industriales, las confrontaciones se fueron haciendo incontrolables. Los enfrentamientos ya no sólo podían presentarse en Europa sino también en África, China o el Medio Oriente. Además, había nuevos competidores y eran muy agresivos. Estados Unidos y Japón se habían convertido en grandes potencias que se disputaban el dominio del área del Pacífico. Alemania aparecía pujante y poderosa, pero insatisfecha por haber llegado tarde al reparto colonial, sus intereses expansionistas en China y África del Sur chocaban con el dominio que los ingleses habían establecido en esas zonas. Justamente, las posiciones irreconciliables entre Alemania e Inglaterra fueron las que generaron un sistema de alianzas permanentes que puso en peligro la paz mundial. Por un lado, se formó la Triple Alianza, que en realidad fue sólo una alianza entre Alemania y Austria-Hungría, pues Italia, el tercer integrante, no tardó en apartarse. Por otro, Francia, el Imperio ruso y Gran Bretaña se unieron en la Triple Entente. La mayor parte del territorio de los Balcanes estaba dominada por los imperios turco y austro-húngaro. A principios del siglo XX, los Balcanes constituían una de las zonas más explosivas de Europa. En ella chocaban distintos intereses. Los serbios querían construir un Estado yugoslavo que reuniera a todos los eslavos de la región. Para ello, debían apropiarse de territorios que estaban en poder de los imperios austro-húngaro y turco. El imperio ruso, alejado del Extremo Oriente tras su derrota ante los japoneses en 1901 - 1905, estaba interesado en extender sus dominios hasta el Mediterráneo. Para lograrlo, prometió su ayuda a los serbios. Alemania, Francia e Inglaterra deseaban apropiarse del territorio que en la zona ocupaba el imperio turco para dominar un punto estratégico: el estrecho de los Dardanelos, puerta esencial para la comunicación entre el Mediterráneo y Asia central. En los Balcanes confluían todos los odios, las rivalidades y las insatisfacciones que se habían ido acumulando durante las últimas
d茅cadas. Era por lo tanto previsible que una crisis en la regi贸n pudiera provocar el estallido de una guerra generalizada.
La Paz Armada. A finales del siglo XIX, el Reino Unido dominaba el mundo tecnológico, financiero, económico y sobre todo político. Alemania y Estados Unidos le disputaban el predominio industrial y comercial. Durante la segunda mitad del siglo XIX y los inicios del siglo XX se produjo el reparto colonial de África (a excepción de Liberia y Etiopía) y de Asia Meridional entre las potencias europeas, así como el gradual aumento de la presencia europea y japonesa en China, un estado que para entonces se hallaba muy debilitado. Francia deseaba la revancha de la derrota sufrida frente a Prusia en la Guerra Francoprusiana de 1870-1871. Mientras París estaba asediada, los príncipes alemanes habían proclamado el Imperio (el llamado Segundo Reich) en el Palacio de Versalles, lo que significó una ofensa para los franceses. La III República perdió Alsacia y Lorena, que pasaron a ser parte del nuevo Reich germánico. Mientras tanto, los países de los Balcanes independizados del Imperio otomano fueron objeto de rivalidad entre las grandes potencias. El estado otomano, al que los comentaristas de la época denominaban el «enfermo de Europa», no poseía en Europa —hacia 1914— más que Estambul, la antigua Constantinopla. Todos los jóvenes países nacidos de su descomposición (Grecia, Bulgaria, Rumanía, Serbia, Montenegro y Albania) buscaron expandirse a costa de sus vecinos, lo que llevó a dos conflictos entre 1910 y 1913, conocidos como Guerras Balcánicas. Impulsados por esta situación, los dos enemigos seculares del Imperio otomano continuaron su política tradicional de avanzar hacia Estambul y los estrechos que conectan el mar Negro con el mar Mediterráneo. El Imperio austrohúngaro deseaba proseguir su expansión en el valle del Danubio hasta el mar Negro, sometiendo a los pueblos eslavos. El Imperio ruso, que estaba ligado histórica y culturalmente a los eslavos de los Balcanes, de confesión ortodoxa —ya les había brindado su apoyo en el pasado— contaba con ellos como aliados naturales en su política de acceder a «puertos de aguas calientes». Como resultado de estas tensiones, se crearon vastos sistemas de alianzas a partir de 1882: La Triple Entente: Francia, Reino Unido y Rusia. La Triple Alianza: Alemania, Austria-Hungría e Italia.
¿Qué fue La Primera Guerra Mundial? El 3 de agosto de 1914 era ya un hecho la primera guerra mundial, el ministro británico de asuntos exteriores Edward Grey se hallaba frente a su ventana de su despacho y veía sobre Londres el crepúsculo, entonces pronunció unas palabras que se han hecho famosa: “En toda Europa se apagan ahora las luces: puede suceder que jamás volvamos a verlas encendidas”.
Su predicción se cumplió, la guerra que entonces empezaba significó la muerte de la vieja Europa, el final de los viejos tiempos el desmoronamiento definitivo de una concepción del mundo. Esta guerra, que tendría que haber puesto fin a las guerras, dio origen a nuevos enfrentamientos, a nuevas guerras. El conflicto fue provocado en Sarajevo, el 28 de junio de 1914 cuando el heredero del trono austro-húngaro, el archiduque Francisco Fernando junto con su esposa, cayó víctima de un terrorista serbio.
LAS DECLARACIONES DE GUERRA Austria declaró la guerra a Serbia el 28 de julio, ya fuera porque creía que Rusia no llegaría a unirse a Serbia o porque estaba dispuesta a correr el riesgo de un conflicto europeo general con tal de poner fin al movimiento nacionalista serbio. Rusia respondió movilizándose contra Austria. Alemania advirtió a Rusia de que si persistía en su actitud le declararía la guerra, y consiguió que Austria accediera a discutir con Rusia una posible modificación del ultimátum enviado a los serbios. No obstante, Alemania insistió en que los rusos retiraran sus tropas inmediatamente. Rusia se negó a hacerlo y Alemania le declaró la guerra el 1 de agosto. Los franceses comenzaron la movilización de sus fuerzas ese mismo día; las tropas alemanas cruzaron la frontera de Luxemburgo el 2 de agosto y Alemania declaró la guerra a Francia el 3 de agosto. El día anterior, el gobierno alemán había informado al gobierno belga de su intención de marchar sobre Francia cruzando Bélgica, a fin de evitar que los franceses utilizaran esta ruta para atacar Alemania. Las autoridades belgas se negaron a permitir el paso por su territorio de las tropas alemanas y recurrieron a los países firmantes del Tratado de 1839 —en el que se garantizaba la neutralidad de Bélgica en el caso de un conflicto en el que estuvieran implicados Gran Bretaña, Francia y Alemania— para que se cumpliera lo establecido en dicho acuerdo. Gran Bretaña, uno de los países signatarios del Tratado de 1839, envió un ultimátum a Alemania el 4 de agosto en el que se exigía que se respetara la neutralidad de Bélgica; Alemania rechazó la petición y el gobierno británico le declaró la guerra ese mismo día. Italia permaneció neutral hasta el 23 de mayo de 1915, cuando rompió su pacto con la Triple Alianza para satisfacer sus aspiraciones territoriales y declaró la guerra a Austria-Hungría. La unidad de los aliados se fortaleció en septiembre de 1914 a través del Pacto de Londres, firmado por Francia, Gran Bretaña y Rusia. A medida que avanzaba la contienda, fueron sumándose al conflicto países como el Imperio otomano, Japón, Estados Unidos y otras naciones del continente americano. Japón, que había firmado una alianza con Gran Bretaña en 1902, declaró la guerra a Alemania el 23 de agosto de 1914, y el 6 de abril de 1917 lo hizo Estados Unidos.
El detonante y las causas de la Primera Guerra Mundial.
El evento detonante del conflicto fue el asesinato del archiduque Francisco Fernando de Austria y su esposa, Sofía Chotek, en Sarajevo el 28 de junio de 1914 a manos del joven estudiante nacionalista serbio Gavrilo Príncipe, miembro del grupo serbio "Joven Bosnia", ligado al grupo nacionalista Mano Negra, que apoyaba la unificación de Bosnia con Serbia. Francisco Fernando era el heredero de la corona austro-húngara después de la muerte de su primo, Rodolfo de Habsburgo(en 1889) y de su padre Carlos Luis de Austria (en 1896). Su asesinato precipitó la declaración de guerra de Austria contra Serbia, que desencadenó la Primera Guerra Mundial. El 23 de julio, después de acordarlo con el estado alemán, el gobierno austrohúngaro lanzó un ultimátum en diez puntos a su homólogo serbio, exigiendo entre otras cosas la posibilidad de investigar en territorio serbio. Al día siguiente, durante el consejo de ministros ruso, el zar Nicolás II ordenó la movilización general contra el estado austrohúngaro. El gobierno serbio, que tenía plazo hasta el sábado 25 a las seis de la tarde, no aprobó los puntos impuestos por Austria-Hungría, sobre todo los puntos cinco y seis que ordenaban «aceptar la colaboración en territorio serbio de representantes del gobierno austrohúngaro para la represión del movimiento subversivo» y «abrir una investigación judicial contra los participantes en el complot». Ante dicha negativa, el 28 de julio de 1914, Austria-Hungría declaró la guerra a Serbia. Acto seguido el 29 de julio Rusia ordenó la movilización general. En función de las alianzas militares, el 1 de agosto, Alemania le declaró la guerra a Rusia, al considerar la movilización como un acto de guerra contra Austria-Hungría. Ante esto, y en virtud, de la alianza militar franco-rusa de 1894 Francia tomó algunas medidas de precaución en sus fronteras. Alemania, al conocer la agitación que reinaba en Francia a causa del inesperado ataque contra Serbia y la movilización rusa, le declaró la guerra a Francia el 3 de agosto.
Las causas de la Primera Guerra Mundial se pueden resumir de la forma siguiente: Rivalidades territoriales y nacionalismos:
Alemania intenta borrar la cultura francesa en Alsacia y Lorena. Se forma la “Liga para la defensa de Alsacia y Lorena” • •
Caos en los Balcanes.
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Fronteras entre Grecia y Albania.
Los alemanes arman al ejército turco en los estrechos. Los rusos ven muy mal esto. •
Rivalidades económicas: • Alemania tenía un gran crecimiento. •
Muchos países compraban productos alemanes.
La razón de su crecimiento es que ofrecen mejores créditos que Inglaterra lo que origina una mayor rivalidad. •
Rivalidades psicológicas o político-diplomáticas: • Alemania tenía en 1913 850 mil hombres en pie de guerra. •
Austria 160 mil hombres.
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Francia aumenta el servicio militar.
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Rusia dos millones de soldados, pero mal armados.
Inglaterra no tenía un ejército terrestre muy grande. Se aprovechaban de los soldados autóctonos de los ejércitos que colonizaban. Pero tenían un impresionante poder naval. •
Todos los ejércitos suponen muchos gastos a los países. Los gobiernos tienen que ir engañando a su población, les dicen que la guerra está a punto, que hay que estar preparado. Hacen un llamamiento patriótico. •
DESARROLLO DE LA PRIMERA GUERRA MUNDIAL. GUERRA DE MOVIMIENTOS:
Al comienzo de la guerra los dos bandos trataron de obtener una victoria rápida mediante ofensivas fulminantes. Los franceses agruparon sus tropas en la frontera con Alemania, entre Nancy y Belfort, divididas en cinco ejércitos. Previendo un ataque frontal en Lorena, organizaron el Plan XVII. Los alemanes tenían un plan mucho más ambicioso. Contaban con la rapidez de un movimiento de contorno por Bélgica para sorprender a las tropas francesas y marchar hacia el este de París (Plan Schlieffen de1905) y luego enfrentarse a las fuerzas enemigas y empujarlas hacia el Jura y Suiza. Tan sólo ubicaron 2/7 de sus tropas sobre la frontera para resistir el ataque frontal en Alsacia-Lorena. El comienzo del plan trascurrió perfectamente para el Reich. Sus tropas avanzaron sobre Bélgica el 4 de agosto, lo cual provocó la intervención inglesa. Posteriormente derrotaron al ejército francés en diversas batallas. Los franceses lanzaron simultáneamente el Plan XVII, pero resultó un fracaso debido a las armas automáticas que frenaron cualquier asalto y a un repliegue prematuro de las tropas hacia sus líneas. La derrota germana frustró el plan original y acabó con las expectativas de una conflagración breve, marcando el abandono definitivo de los planes anteriores a la guerra. En ese momento comenzó la «carrera hacia el mar»: los dos ejércitos marcharon hacia el mar del Norte; ataques y contraataques se sucedieron. La contienda se desarrollaría en territorio francés y belga. Las tropas británicas no tardaron en intervenir en mayor número, junto a los restos del ejército belga.
EL PLAN SCHLIEFFEN Los alemanes contaban con deshacerse enseguida de Francia y dirigir luego sus golpes contra Rusia. Su confianza se basaba en el Plan Schlieffen para rodear el poderoso sistema francés de fortificaciones. El plan preveía que el ala derecha, que concentraba el grueso de las fuerzas alemanas, efectuara un avance arrollador a través de Bélgica, mientras el ala izquierda, mucho menos potente, incitaría al enemigo al ataque. Al pasar los franceses a la ofensiva contra el ala izquierda, harían funcionar el dispositivo como una puerta giratoria: cuanto más presionara, con tanta mayor violencia giraría el ala derecha a la zaga. Sin embargo, el plan fracasó, los frentes llegaron a estabilizarse y las trincheras se extendieron desde la frontera suiza hasta el canal de la Mancha. En febrero de 1916, el alemán Falkenhayn desencadenó un violento ataque contra Verdún, que ocasionó una verdadera carnicería en ambos ejércitos y no se tradujo en éxito alguno para los atacantes.
FRENTE OCCIDENTAL El 4 agosto de 1914, el ejército alemán abrió el frente occidental invadiendo Bélgica y Luxemburgo, con un ataque a la ciudad de Lieja, y luego obteniendo el control militar de
regiones industriales importantes del este de Francia, derrotando al ejército francés en la batalla de Lorena, la batalla de Charleroi (21 de agosto) y en la batalla de Maubeuge una semana más tarde. La fuerza del avance fue contenida drásticamente con la primera batalla del Marne en septiembre de 1914, donde enfrentaron al Cuerpo Británico compuesto por 5 divisiones experimentadas y las tropas de reserva francesas. Las taxis de París ayudaron a trasladar a los efectivos ingleses al frente. El equilibrio de fuerzas y las nuevas armas facilitaron la defensa frente al ataque e impusieron la estabilización del frente. Ambos contendientes se atrincheraron en una línea sinuosa de posiciones fortificadas que se extendía desde el mar del Norte hasta la frontera suiza con Francia. Esta línea permaneció sin cambios sustanciales durante casi toda la guerra. Un asalto presentaba tal desventaja frente al adversario que los ataques aliados fueron infructuosos y Alemania pudo resistir a pesar de combatir en dos frentes. En estos ataques se recurrió a bombardeos masivos de artillería y al avance masivo de la infantería. Sin embargo, la combinación de las trincheras, los nidos de ametralladoras, el alambre de espino y la artillería infligían cuantiosas bajas a los atacantes y a los defensores en contraataque. Como resultado, no se conseguían avances significativos. Las condiciones sanitarias y humanas para los soldados eran
muy
crudas y las bajas elevadísimas. En otoño de 1915
el
general Jose ph Joffre intentó una ofensiva, con
apoyo
inglés, que concluyó en un gigantesco fracaso. Después de este éxito defensivo, a finales de año, el general Von Falkenhayn, Jefe de Estado Mayor, propuso al Kaiser su proyecto de atacar Verdún. Plaza fuerte e impenetrable según la propaganda francesa, pero que estaba en posición delicada por no poseer un camino o vía férrea para su reavituallamiento. Los alemanes esperaban que su caída debilitaría la moral de los soldados franceses. El 21 de febrero de 1916, el
ataque se inició con la artillería bombardeando violentamente las posiciones aliadas. Los alemanes avanzaron poco, pero las pérdidas francesas fueron enormes. El 25 de febrero, el general Langle de Cary decidió abandonar la ciudad, pero el mando francés no estaba dispuesto a perder Verdún y nombró en su lugar a Philippe Pétain, quien organizó una serie de violentos contraataques. El 1 de julio, los británicos desataron una gran lucha paralela en la batalla del Somme, a fin de dividir las tropas alemanas y reducir la presión sobre Francia. Los alemanes retrocedieron escasos kilómetros, pero en orden. Al final, el frente casi no se modificó ni en Verdún ni en el Somme, pese a los centenares de miles de bajas. En un esfuerzo por romper este callejón sin salida, este frente presenció la introducción de nuevas tecnologías militares, incluyendo el gas venenoso y los tanques. Pero sólo tras la adopción de mejoras tácticas se recuperó cierto grado movilidad.
de
FRENTE ORIENTAL La estrategia de guerra alemana funcionó contra Rusia. El ejército ruso contaba con 8 millones de hombres en 1914, pero estaba compuesto principalmente por campesinos sin ninguna formación militar, mal armada y equipada. El mando ruso era también mediocre. Los dos ejércitos se enfrentaron en la batalla de Tannenberg (Prusia Oriental) del 26 al 30 de agosto de 1914, y en la batalla de los lagos Masurianos del 6 al 15 de septiembre de 1914. Los rusos sufrieron grandes derrotas en los dos casos y fueron obligados a replegarse. Los comandantes alemanes en esta exitosa campaña defensiva fueron Paul von Hindenburg y Erich Ludendorff. Austria-Hungría, en cambio, no pudo repeler la invasión de Galitzia. En junio de 1916 tiene éxito una ofensiva rusa, dirigida por el general Alexéi Alexéievich Brusílov, que se interna en las líneas austrohúngaras. Regimientos enteros se pasaron a las filas rusas, demostrando la fragilidad del Imperio austrohúngaro. Motivada por esta circunstancia, Rumanía declara la guerra a los Imperios Centrales, y tras unas victorias iniciales es derrotada debido a la superioridad numérica alemana y austrohúngara, lo que hace que firme un tratado de paz, lo que compromete aún más la posición rusa. El Imperio de los Romanov no volvería a intentar ninguna ofensiva de relevancia en el resto de la contienda. Alemania pasó a la ofensiva y conquistó el golfo de Riga, destruyendo o capturando a buena parte de los contingentes rusos. El frente oriental estuvo en constante movimiento y no conoció la guerra de trincheras. La caballería jugó aún cierto papel en esta guerra de movimientos.
SISTEMA DE TRINCHERAS EN EL FRENTE OCCIDENTAL Los ejércitos en contienda de 1914 inicialmente plantearon una guerra de movimiento, y las trincheras realizadas fueron concebidas como una cobertura temporal. Pero de la batalla del Aisne en adelante, ambos ejércitos tuvieron que excavar trincheras, defenderse y mantener las posiciones sobre el terreno en el que estaban. Los sucesivos intentos de flanquear o rodear el sistema de trincheras enemigo acabaron a finales de noviembre de 1914. En ese momento, en un frente de unos 750 kilómetros, del Mar del Norte a Suiza y sin solución de continuidad había un complejo sistema de trincheras que formaba la línea del frente. La finalidad de las trincheras era proteger a los soldados de los tiros horizontales y de la visión enemiga. Se trataba de zanjas cavadas en la tierra, en forma de zigzag o almenada para evitar el tiro de enfilada. Entre los elementos que conformaban las trincheras estaban unos pequeños refugios denominados abrigos, puestos de guardia y de primeros auxilios y también nidos de ametralladoras excavadas también en la tierra. La protección que ofrecían las trincheras era relativa debido sobre todo al uso e invención de balones y aviones de observaciones juntamente con obuses de shrapnels y el empleo de armas químicas producidas industrialmente a gran escala durante el periodo 1914-1918. Del lado enemigo, una inextricable red de alambradas de espino y otros obstáculos convertían la toma de las trincheras en una odisea casi imposible, por eso las compañías de zapadores de ambos ejércitos se dedicaban a cavar túneles bajo las trincheras con el objeto de volarlas con enormes cantidades de explosivos. Si la distancia existente entre trincheras era mínima podía suceder que se cruzasen túneles en sentidos contrarios, y que la compañía más diligente y rápida ganase la partida convirtiéndose en un juego macabro, como fue el caso de la batalla de Messines de 1917.
OTROS FRENTES Frente Balcánico: En la región de los Balcanes, tuvieron lugar una serie de campañas militares entre las Potencias Centrales (Austria-Hungría, Alemania, el Imperio Otomano y Bulgaria) por un lado y los aliados (Serbia, Montenegro, Rusia, Francia, Reino Unido y más tarde Rumanía y Grecia), por otro. En este teatro de operaciones la guerra comenzó con la invasión austro-húngara a Serbia en 1914, que acabó con la conquista de Serbia y Montenegro a fines de 1915. Las fuerzas serbias fueron atacadas desde el norte y el este y se vieron obligadas a retirarse del país, sin embargo, el ejército serbio se mantuvo operativo, aunque emplazado en Grecia. En el otoño de 1915, los aliados intentaron ir en ayuda de los serbios, por medio de una expedición franco-británica que se estableció en el puerto de Salónica, en Grecia. El plan aliado consistía en socorrer a los serbios desde el sur, abriendo un frente en Macedonia. La expedición llegó demasiado tarde y con insuficiente fuerza para evitar la caída de Serbia, y se vio complicada por la crisis política interna en Grecia. No obstante, se logró mantener estable el frente macedonio, desde la costa albanesa al río Estrimón, en Bulgaria, hasta 1918. En 1916 Rumanía entra en guerra contra las Potencias Centrales, pero esta decisión resultó desastrosa para los rumanos. Poco después de la declaración de guerra rumana, una ofensiva combinada entre los alemanes, austro-húngaros, búlgaros y otomanos conquistó dos tercios del país en una rápida campaña que finalizó en diciembre de 1916. Sin embargo, los ejércitos ruso y rumano consiguieron estabilizar el frente y mantenerlo en Moldavia. En 1917, Grecia entró en la guerra del lado aliado, y en septiembre de 1918 se produjo la gran ofensiva aliada de una fuerza multinacional acantonada en el norte de Grecia, que dio lugar a la capitulación de Bulgaria y a la liberación de Serbia.
Frente de Oriente Medio: Los Aliados contaban con la debilidad del Imperio otomano para abrir una vía directa y apoyar a sus aliados rusos. La campaña de los Dardanelos fue iniciada por los ingleses, a sugerencia de Winston Churchill, para controlar el estrecho de los Dardanelos, lo que permitiría a Francia y al Imperio británico revitalizar a Rusia, neutralizar al Imperio otomano y encerrar a los imperios centrales. El ambicioso proyecto comenzó con el despliegue de una imponente flota inglesa y el desembarco de tropas en Galípoli, pero los otomanos, mandados por Mustafa Kemal Atatürk, se defendieron con una eficacia inesperada. Los aliados no
consiguieron penetrar en el Imperio otomano y fracasaron en las sucesivas ofensivas. La operación fue un sangriento desastre, convirtiéndose en una nueva batalla de trincheras (para colmo, esta vez con el mar a espaldas de los Aliados). Después de unos meses de inútiles tentativas, el mando inglés decidió evacuar Galípoli y dirigir su cuerpo expedicionario a Salónica, Grecia. Este ejército sostendría enseguida a los serbios que no se rindieron. Ante todo, se mantuvo a la espera de nuevas oportunidades, como convencer a Grecia de entrar en la guerra. Durante todo el conflicto, los británicos fomentaron el sublevamiento de las tribus árabes para perturbar a los otomanos. En esta misión destacó el célebre oficial T. E. Lawrence, Lawrence de Arabia. La Declaración Balfour propuso el establecimiento de un Estado judío en Palestina, para motivar a los judíos estadounidenses a que apoyaran el ingreso de ese país en la guerra. En 1916 los británicos atacaron Palestina, cuyo control mantendrían hasta 1948.
Frente Italiano: En 1915, Italia se une a los Aliados y ataca a Austria. Sin embargo, una larga serie de ofensivas sobre el río Isonzo fracasa. En 1917, son los austro-húngaros, reforzados por tropas alemanas, los que baten duramente a los italianos en Caporetto. Este desastre casi saca a Italia de la guerra, pero el frente se estabiliza sobre el río Piave.
La guerra en África: En África, británicos y franceses atacaron desde todos los frentes a las colonias alemanas, rodeadas por sus posesiones. Las fuerzas germanas en Togolandia y Camerún se rindieron rápidamente a las tropas anglo-francesas, mientras que la colonia de África del Sudoeste Alemana fue invadida por el ejército sudafricano y ocupada totalmente en 1915 (véase: Campaña de África del Sudoeste). Sólo la colonia de Tanganica, bajo la dirección del general Paul von Lettow-Vorbeck, resistió bajo dominio alemán hasta el final de la contienda.
La guerra en el Extremo Oriente y el Pacífico: Tras el estallido de la guerra, el Imperio japonés envió un ultimátum a Alemania, solicitándole la evacuación de Jiaozhou (noreste de China). Alemania se negó a cumplirlo, por lo que Japón entró en la guerra del lado de los aliados el 23 de agosto de 1914. Las tropas japonesas ocuparon las posesiones alemanas en las islas Carolinas y Marianas. En 1915, Japón presentó las Veintiuna exigencias a China que obligaban a China a no alquilar ni ceder ningún territorio frente a Taiwán a ningún país, excepto a Japón. En 1919, China cedió los derechos comerciales de Mongolia Interior y Manchuria a Japón. Mientras tanto, en el Pacífico también hubo movimientos aunque no batallas de importancia. Las tropas australianas estacionadas en Papúa ocuparon sin problemas la Nueva Guinea Alemana, mientras que Japón y Nueva Zelanda dirigieron ataques contra las bases alemanas en las Islas Marianas. El puerto chino de Qingdao, principal base alemana en Extremo Oriente, fue ocupado por los japoneses. Como resultado del acuerdo de paz de la guerra mundial, Japón recibió las islas del Pacífico que había ocupado.
La guerra en el mar La guerra naval en la Primera Guerra Mundial se caracterizó por los esfuerzos de los Aliados, especialmente Gran Bretaña, de imponer un bloqueo marítimo a los Imperios Centrales, utilizando sus grandes flotas navales; y por el empeño de estos de romper el bloqueo o establecer ellos mismos uno efectivo hacia el Reino Unido y Francia. Los alemanes, que contaban con una importante flota de submarinos, intentaron imponer un bloqueo completo a estas potencias ya nombradas, interceptar el apoyo de sus colonias y romper las rutas de aprovisionamiento entre América (carne de Argentina, armamento estadounidense) y Europa. El mar del Norte y el canal de la Mancha fueron los principales teatros de operaciones de la guerra en el mar. En ellos se enfrentaron la Gran Flota británica y la Flota de Alta Mar alemana, que protagonizaron tres grandes batallas. En agosto de 1914 se encontraron en la batalla de Heligoland, en enero de 1915 en la batalla del Banco Dogger, ambas a favor del Reino Unido. A mediados de 1916 ambas flotas se encontraron en pleno frente a la península de Jutlandia. En
la batalla de Jutlandia los alemanes, dirigidos por los almirantes Reinhard Scheer y Franz von Hipper, tenían
como
objetivo
impedir el abastecimiento británico
desde Noruega.
La batalla comenzó el 31 de mayo, y fue el mayor combate naval registrado durante
la
guerra.
No
hubo un total ganador, ya que la Marina Real Británica, bajo mando de los almirantes John Jellicoe y David Beatty, perdió más hombres y naves, pero los alemanes no pudieron romper el bloqueo y tuvieron más buques dañados. Además la guerra en el mar se disputó en otros escenarios. En el Atlántico la actividad alemana se caracterizó por la guerra submarina. En el Mediterráneo, las flotas aliadas (británica, francesa e italiana) se enfrentaron a la Armada AustroHúngara en el Adriático, siendo el mayor enfrentamiento la batalla del canal de Otranto en 1917 y a la Armada Otomana durante la campaña de los Dardanelos. En el océano Pacífico se enfrentaron el Escuadrón Alemán del Lejano Oriente, comandado por el almirante Graf von Spee, con el 4° Escuadrón de la Real Marina Británica, la Real Marina Australiana y algunas unidades de la Marina Imperial Rusa y de la Armada Francesa. Las principales batallas de este teatro de operaciones fueron la batalla de Coronel y la batalla de las Malvinas.
LA CRISIS DE 1917 El equilibrio militar de finales de 1916 y la imposibilidad de dar fin a la guerra a corto plazo puso en dificultad a los beligerantes. Tropas y retaguardia fueron presa de una creciente desmoralización. Durante 1917 se desencadenaron protestas de soldados y mandos que se transformaron en auténticos motines que fueron duramente reprimidos. La unidad política se quebró en el seno de cada una de las potencias e innumerables voces clamaron contra la guerra, exigiendo una paz negociada. Surgieron iniciativas de paz como la de Wilson, presidente de los Estados Unidos o la del papa Benedicto XV, pero finalmente se impusieron las tesis de los partidarios de continuar la guerra. En Francia la especial dureza de los combates en las trincheras, unida a la escasez de víveres, provocaron huelgas en la industria metalúrgica y la sucesión
de una serie de motines, primavera de 1917 que fueron frenados mediante numerosos fusilamientos, El general Nivelle fue sustituido por el mariscal Pétain quien logró restaurar la disciplina militar. El gobierno fue asumido por Georges Clemenceau En gran Bretaña los laboristas se alejaron del gobierno al tiempo que se sucedían numerosas huelgas. Se hizo cargo del ejecutivo David Lloyd Georges, partidario de proseguir la guerra y promotor de una serie de medidas que lograron incrementar la eficacia del ejército. En Alemania se libraron enconadas luchas políticas entre los partidarios de continuar la lucha y los que propugnaban su fin. A la postre se impusieron los primeros, significados por Hindergurg y Ludendorff, generales del Estado mayor. Los más moderados, representados por el canciller Bethann-Hollweg, estaban decididos a limitar la lucha submarina al considerar que incrementaba el riesgo de una intervención militar norteamericana. Los submarinos alemanes habían declarado la guerra total tanto contra los buques de países beligerantes, como los neutrales. En Austria-Hungría el ejército que combatía en varios frentes comenzó a dar signos de desplome, A ello se unió la escasez de abastecimientos en las ciudades. Los descontentos crecieron y se transformaron en reivindicaciones nacionalistas, de modo que húngaros, checos y polacos empezaron a demandar su independencia del Imperio. En Italia, a la que los austro-húngaros habían infligido severas derrotas, es encontraba en una delicada situación y reclamaba la ayuda del mando aliado, que envió varias divisiones franco-británicas para evitar su derrumbe militar. En el Imperio Turco, tras una serie de reveses que hicieron perder Palestina y Mesopotamia a manos británicas, la situación se tornó insostenible. Rusia constituyó sin duda el escenario más convulso de esta etapa. Presa de un fuerte descontento motivado por la escasez de víveres y los continuos descalabros militares, sufrió diversos motines que finalmente desembocaron en la Revolución de febrero de 1917. El Zar Nicolás II se vio obligado a abdicar y se formó un gobierno provisional de corte occidental liderado por Kerenski, que en contra de la mayoría de los rusos decidió proseguir la lucha. Meses más tarde, en octubre del año 1917, un golpe de estado acabó con el gobierno burgués de Kerensky y aupó al poder a los comunistas de Lenin. Éste entabló conversaciones con las potencias centrales con elfin de poner término a la guerra en el frente oriental, hecho que se materializó finalmente con la firma del Tratado de Brest-Litovsk en marzo del año 1918. Por él se imponía a Rusia la
perdida de extensos territorios, Estonia, Letonia, Lituania, Finlandia, etc. El abandono ruso significó un giro radical en el conflicto: el frente oriental quedaba libre de contiendas y ello permitió a las potencias centrales concentrar la totalidad de sus ejércitos en el frente occidental. Sin embargo, la entrada en guerra de Estados Unidos (también lo hizo Grecia) en la primavera de 1917 alteró radicalmente las expectativas de alemanes y Austrohúngaros: supuso la apertura de un nuevo frente en los Balcanes pero, ante todo, la irrupción de una potencia extraordinaria que con su formidable peso económico, demográfico y militar, inclinó la balanza definitivamente del lado de los aliados. Las razones que llevaron al estadounidense a intervenir en la guerra se debieron en parte a la agresiva ofensiva en la mar desarrollada por los germanos. Las tesis belicistas se habían logrado imponer a las más moderadas y Alemania había declarado una guerra submarina total. El torpedeamiento del carguero estadounidense Vigilantia en marzo de 1917 tuvo una enorme repercusión en la prensa estadounidense, influyó en el cambio de actitud de la opinión pública, hasta entonces remisa a entrar en acción en la guerra. También influyó en esa decisión la interceptación por los servicios de espionaje británicos del llamado “Telegrama de Zimmermann” por el que Alemania daba instrucciones a su embajador en México para que intentase incorporar a este país en la contienda en contra de los Estados Unidos. El 2 de abril de 1917 el presidente Wilson (Estados Unidos) declaró la guerra a Alemania.
Telegrama Zimmermann: El 16 de enero de 1917, el ministro alemán del Exterior, Arthur Zimmermann, envió un telegrama al embajador en México, Heinrich von Eckardt, con indicaciones precisas para convencer al presidente Venustiano Carranza, de que México entrase a la guerra del lado de los Imperios Centrales. A cambio, el telegrama prometía a México la restitución de los territorios anexionados por Estados Unidos en la guerra de 1847-1848 por el Tratado de Guadalupe-Hidalgo. Dicho telegrama también sugería que el presidente Carranza se comunicase con Tokio para llegar a un acuerdo que hiciera que el Imperio japonés se pasase al lado alemán. El telegrama fue interceptado por fuerzas de inteligencia británicas, lo que provocó la entrada de Estados Unidos en la guerra. Carranza no aceptó la oferta, puesto que México estaba inmerso en la Revolución mexicana y no se encontraba en condiciones económicas adecuadas. Además, el
mandatario se encontraba preocupado por la Expedición Punitiva estadounidense. México no sólo no entró en la guerra, sino que envió a Francisco León de la Barra como alto comisionado mexicano de la Paz.
EL FINAL DE LA GUERRA AÑO 1918 En 1918 ambos mandos atravesaban serias dificultades tanto militares como económicas. Sin embargo, la fatiga era más visible en el bando de los potencias centrales que en el aliado, pues la incorporación de los Estados Unidos al conflicto había supuesto una auténtica inyección de recursos materiales y humanos. No obstante, en 1918 los germanos consiguieron eliminar definitivamente del escenario bélico a los rusos que habían iniciado negociaciones para poner fin a la guerra. Una serie de derrotas continuadas habían animado al gobierno revolucionario soviéticos a firmar en marzo el Tratado de Brest-Litovsk. Con las manos libres en el frente oriental, el general alemán Ludenrdorff inició una ofensiva en el lado occidental. Fue la conocida 2º Batalla del Somme para diferenciarla de los combates que se habían desarrollado en la misma zona en 1916. La iniciativa fracasó, pues los aliados frenaron la ofensiva en el Marne en el mismo lugar donde Joffre había hecho abortar en 1914 el plan Shieffen. La contraofensiva aliada al mando del general Foch fue iniciada en julio de 1918 y forzó el repliegue de las tropas alemanas. En agosto un nuevo ataque aliado que empleó abundantes carros de combates desplazó a los germanos hasta la frontera belga. La crisis militar se tradujo en deserciones masivas. El 8 de noviembre de 1918 estalló en Berlín un movimiento revolucionario y el Káiser Guillermo II abdicó. Se formó un nuevo gobierno que encabezó el socialdemócrata Elbert. Alemania firmó el armisticio el 11 del mismo mes.
La monarquía de los Hohenzollen dejó paso al establecimiento de una república demócrata, llamada Weimar, regida por un frágil sistema parlamentario, que fue presa de una gran inestabilidad hasta 1933, fecha en que Hitler abolió la democracia. Esa fragilidad fue causada principalmente por la crisis económica de posguerra y sus secuelas sociales y políticas. El imperio Austro-Húngaro se rindió a mediados del mes de noviembre, en tanto que búlgaros y turcos lo habían hecho ya en septiembre y octubre respectivamente.
TRATADOS DE PAZ El Tratado de Versalles: Firmado el 28 de junio 1919 entre los aliados y Alemania, acepta la responsabilidad del conflicto, devuelve Alsacia y Lorena a Francia, La Posnania a Polonia (Alemania se divide de Prusia oriental por el pasillo de Danzing) y se reparten sus colonias entre los vencedores. Además tuvo que pagar altas reparaciones de guerra, entregar las minas de carbón del Sarre, sus bienes en el exterior y su marina mercante. Tuvo que abolir el servicio militar y restringir a su ejército a sólo 100.000 hombres y se prohibía su unión territorial con Austria. En la foto David Lloyd George del Reino Unido, el Primer Ministro Vittorio Emanuele Orlando de Italia, el Primer Ministro Georges Clemenceau de Francia, y el Presidente Woodrow Wilson de los Estados Unidos.
Tratado de Saint Germain –en –Laye: Firmado el 10 de septiembre de 1919 entre los aliados y Austria. En este tratado se establecía el desmembramiento de la antigua monarquía de los Habsburgo. El imperio Austrohúngaro, y Austria quedó limitada a algunas zonas en las que se hablaba solamente el alemán.
Tratado de Trianon: Acuerdo impuesto a Hungría el 4 de junio de 1920 por los aliados en el que dictaminó la entrega de territorios a Checoslovaquia, Rumanía y Yugoslavia. Fue firmado el 27 de noviembre de 1919 entre el Reini de Bulgaria y las potencias vencedoras. De acuerdo con el tratado estipulado en el tratado, Bulgaria reconocía el nuevo reino de Yugoslavia, se comprometía a pagar 450 millones de dólares en concepto de indemnización y reducía su ejército a 20.000 efectivos. En la foto Firma por el primer ministro búlgaro Alejandro Stamboliski del Tratado.
Tratado de Sévres: Firmado el 10 de agosto de 1920 entre Imperio Otomano y los aliados (a excepción de Rusia y Estado unidos). El tratado dejaba a los otomanos sin la mayor parte de sus antiguas posesiones, limitándolo a Constantinopla y parte de Asia Menor. Tratado Neuilly-sur-Seine En la foto vemos a los firmantes del Imperio otomano, de izquierda a derecha, Rıza Tevfik, el gran visir Damat Ferid Pasha, embajador Hadi Pasha y el ministro de educación.
CONSECUENCIAS DE LA PRIMERA GUERRA MUNDIAL El 27 DE Octubre de 1918 Alemania consintió en aceptar las negociaciones de paz, Guillermo II debió entregar el poder, se extendía por toda Alemania una revolución proletaria que fue posteriormente sofocada. En Europa comenzaron los preparativos para conferencia de Versalles. En 1919 se reunieron en Versalles los representantes de los países vencedores para preparar el tratado definitivo de paz. En ese mismo año, Alemania firmó el Tratado de Versalles, por lo que quedaba obligada a reducir drásticamente su ejército y armamento y a pagar fuertes sanciones económicas como reparación por los daños cusados a los aliados durante la guerra. Además, Alemania perdió su imperio colonial y numerosos territorios en Europa. Tras la derrota de Alemania en la I Guerra Mundial, los vencedores no llegaban a un acuerdo sobre las reparaciones de guerra que debía pagar la nación vencida. Los líderes de Estados Unidos, Gran Bretaña, Francia e Italia celebraron la Conferencia de Paz de París en 1919 y elaboraron el Tratado de Versalles. Éste imponía a Alemania una serie de medidas restrictivas y compensatorias que incluían su desmilitarización a gran escala y el pago de indemnizaciones. Los representantes de la reunión fueron el primer ministro británico Lloyd George, el ministro de Asuntos Exteriores italiano Giorgio Sonnino, el jefe de gobierno francés Georges Clemenceau y el presidente de Estados Unidos Thomas Woodrow Wilson (foto). A pesar de que todas las naciones confiaban en que los acuerdos alcanzados después del conflicto restablecerían la paz mundial sobre unas bases estables, las condiciones impuestas promovieron un conflicto aún más destructivo. Los Imperios Centrales aceptaron los catorce puntos elaborados por el presidente Wilson como fundamento del armisticio, esperando que los aliados los adoptaran como referencia básica en los tratados de paz. Sin embargo, la mayor parte de las potencias aliadas acudieron a la Conferencia de Versalles con la determinación de obtener indemnizaciones en concepto de reparaciones de guerra equivalentes al coste total de la misma y de repartirse los territorios y posesiones de las naciones derrotadas según acuerdos secretos. Durante las negociaciones de paz, el presidente Wilson insistió en que la Conferencia de Paz de París aceptara su programa, pero finalmente desistió de su propósito inicial y se centró en conseguir el apoyo de los aliados para la formación de la Sociedad de Naciones. La muerte de más de 12 millones de personas, equivalente a casi la mitad de los habitantes de Venezuela, y varios millones de heridos, en su mayoría jóvenes, principalmente de Rusia, Alemania, Francia y el Reino Unido.
Las pérdidas materiales fueron enormes se supone que pasó los 186.000 millones de dólares. En tan sólo las tres primeras semanas de la guerra, los alemanes perdieron 600.000 hombres. El territorio de Turquía se redujo. El imperio austrohúngaro desapareció y dio lugar a cuatro nuevos Estados: Austria, Checoslovaquia, Hungría y Yugoslavia. La Primera Guerra Mundial marcó el fin de la supremacía de las potencias de Europa y fortaleció la posición de los Estados Unidos y de Japón. En casi toda Europa los medios de comunicación, el transporte, los cultivos, los edificios, etc. quedaron destruidos. Todas las pérdidas ocasionaron una disminución de la producción industrial y agrícola. Las reservas de oro y las inversiones se redujeron, toda Europa entró en una grave crisis económica. Por el contrario, la contienda generó un intenso desarrollo de los instrumentos y técnicas de guerra: fusiles de repetición, ametralladoras, gases asfixiantes dando origen a la guerra biológica y química, hubo tanques, dirigibles y aviones, también se practicaron los bombardeos a las ciudades. La artillería multiplicó los calibres, aumentó el alcance y mejoró los métodos de corrección. El transporte motorizado se generalizó. Hubo una intensa participación de la sociedad civil implicándose en operaciones bélicas, de igual forma participaron instituciones como la Cruz Roja donde la mujer desempeñó una gran labor. A pesar de la labor desempeñada por la Cruz Roja, se desataron grandes epidemias de enfermedades infectocontagiosas. La acción de los submarinos alemanes provocó el hundimiento de las naves aliadas causando un gran número de bajas; al abandonarse el principio por el cual se permitía la evacuación de las naves civiles antes de su hundimiento. En mayo, un submarino alemán torpedeó al Lusitania, un vapor de pasajeros británico. Éste se hundió en menos de 20 minutos frente a la costa meridional de Irlanda, y fallecieron 1.198 civiles, entre los que se encontraban 128 estadounidenses. El incidente estuvo a punto de anticipar la intervención de Estados Unidos en el conflicto mundial, que se produjo en 1917. A pesar de los esfuerzos realizados para provocar la paz mundial con el Tratado de Versalles, las potencias vencedoras permitieron que se incumplieran algunos de los términos establecidos lo que provocó el resurgimiento del militarismo y del nacionalismo agresivo de Alemania y de los desórdenes sociales en gran parte de Europa, agudizó la crisis económica, hubo una fuerte agitación social y hubo el resurgimiento de movimientos bélicos producto de graves disputas que quedaron sin resolver.
ALGUNAS IMÁGENES DE LA PRIMERA GUERRA MUNDIAL
SEGUNDA GUERRA MUNDIAL
¿QÚE FUE LA SEGUNDA GUERRA MUNDIAL? Fue el conflicto armado más grande y sangriento de la historia universal en el que se enfrentaron los países que conformaban las Potencias Aliadas y las Potencias del Eje, entre 1939 y 1945. Tras seis años de dura lucha, el 14 de agosto de 1945, se declara el final de la guerra con la victoria de los Aliados ocurrida tras la caída de los regímenes de Adolf Hitler en Alemania y Hideki Tojo en el Imperio del Japón. Cifras conservadoras establecen que la guerra causó la muerte de alrededor de 60 millones de personas, siendo la Unión Soviética, China y Alemania, las naciones que más víctimas tuvieron. Luego de finalizada la guerra el mundo quedó divido en dos bloques, el bloque capitalista, liderado por los Estados Unidos y con influencia sobre Europa Occidental y otros dominios, y el bloque comunista, liderado por la URSS y con influencia sobre Europa del Este. En la Segunda Guerra Mundial tomaron parte 72 Estados, los efectivos de todos los ejércitos participantes fueron 110 millones de hombres, de los cuales murieron 34 millones, 28 millones de hombres quedaron mutilados, las bajas en la población civil sobrepasaron los 24,8 millones de personas, desaparecieron más de 5 millones de personas y los gastos se calculan en más de 935 000 millones de dólares. Como consecuencia de la agresión nazi fascista la Unión Soviética perdió el 50 % de su potencial económico, entre ellos la vital industria pesada de la Cuenca del Donez y los centros agrícolas de Ucrania y Bielorrusia. Lo cual se explica porque hasta mediados de 1944, un 95 % del potencial de guerra alemán estaba en el frente oriental. Alrededor de 20 millones de ciudadanos de la Unión de Repúblicas Socialistas Soviéticas perdieron su vida y 25 millones sus casas, pues quedaron destruidas por aquella guerra. A los soviéticos les destruyeron más de 30 000 fábricas; Alemania prácticamente perdió toda su infraestructura industrial: se destruyeron más de 2 250 000 viviendas y otras 2,5 millones fueron parcialmente destruidas. Se dice que quedaron más de 400 millones de metros cúbicos de escombros. China perdió entre 3 y 8 millones de personas, 6 millones de judíos fueron exterminados, dentro del llamado Holocausto judío. El 13 de febrero de 1945, la aviación aliada destruyó la ciudad de Dresden, en Alemania, donde casi 130 mil personas, (la mayoría de ellos refugiados) murieron a causa de este bombardeo. Otras ciudades como Berlín, Hamburgo, Munich y Nuremberg fueron destruidas en la
misma campaña aérea, en cuyos ataques masivos participaron más de 1000 bombarderos. Centenares de cuerpos de prisioneros muertos en el campo de concentración de Nordhausen (foto tomada el 12 de abril de 1945) Uno de los crímenes más horrendos cometidos por el fascismo alemán durante la Segunda Guerra Mundial, fue el llamado holocausto donde millones de personas, entre ellos judíos, islámistas, homosexuales y comunistas, fueron exterminados en cerca de 20 campos de concentración y exterminio humanos creados para asesinar a seres humanos. Aún no se ha determinado con exactitud, el total de personas que perdieron sus vidas en esos campos de la muerte, aunque cifras conservadoras estiman las víctimas en 20 millones de personas en su gran mayoría civiles, mujeres, niños, ancianos, minusválidos y discapacitados.
Causas de la Segunda Guerra Mundial. Causas en Europa: Resentimiento alemán: El 9 de noviembre de 1919, el Imperio Alemán, uno de los promotores e impulsores de la Primera Guerra Mundial había caído tras la abdicación del kaiser Guillermo II y la posterior proclamación de la República alemana o República de Weimar. El nuevo gobierno, dividido entre socialistas y conservadores tuvo que encarar las consecuencias de la aplicación de los acuerdos del Tratado de Versalles[3], el cual establecía en algunas de sus cláusulas las siguientes medidas: Pago de indemnizaciones por parte de Alemania a los Aliados por las pérdidas económicas sufridas por los mismos a causa de la guerra. Reducción del ejército alemán a la cantidad de 100 mil hombres, sin el derecho de poseer ninguna arma moderna de combate (tanques, aviación y submarinos). Reducción de la Flota Alemana a buques menores a las 10 mil toneladas. Pérdida de importantes y estratégicos territorios alemanes como Alsacia y Lorena, Sarre, Schleswig-Holstein, gran parte de la región de Prusia Occidental y la mayoría de las colonias alemanas en África y Oceanía. Tales medidas condicionaron la formación de un resentimiento hacia la pérdida de territorio nacional así como por el robo de la soberanía de Alemania y su gobierno, los cuales pasaron a ser controlados por entes externos como los gobiernos de Francia y Reino Unido así como la Sociedad de Naciones. Dentro de ese contexto, se comienza a formar el llamado movimiento “nacionalsocialista" el cual en sus inicios estuvo dirigido por el Partido Obrero Alemán hasta que el 24 de febrero de 1920 el partido cambiara de nombre para convertirse en Partido Nacionalsocialista Obrero Alemán cuya figura principal era Adolf Hitler.
Causas en Asia: Expansionismo japonés: Tras la Gran Depresión, el Imperio del Japón, comenzó un gran acercamiento hacia el modelo fascista, utilizando una campaña en la cual se presentaron como un imperio moderno y expansionista con grandes intereses de llevar a Asia hacia el camino de la modernización. Sin embargo, a diferencia de Adolf Hitler y de Víctor Manuel III, Japón tenía dos objetivos económicos para desarrollar un imperio.
El primero, al igual que sus homólogos europeos, nace una industria militar doméstica estrechamente controlada, la cual fue golpeada drásticamente por la crisis mundial de finales de la década del 20 e inicios del 30. En ese sentido, la falta de recursos en las islas de Japón, para poder mantener a un creciente sector industrial, las materias primas como el hierro, petróleo y el carbón debían ser importadas en su mayoría desde Estados Unidos, convertido en el principal socio comercial japonés. Así, por el esquema de desarrollo militar industrial y el crecimiento industrial, las teorías mercantilistas prevalentes, hacían imprescindibles el control de varias colonias en el área del sureste y centro asiático, principalmente en enclaves estratégicos de China, Rusia e Indochina. Las primeras acciones expansionistas ocurrieron en 1895 con la invasión a Formosa (actual Taiwán) y la invasión a Corea en 1910, las cuales fueron anexas como colonias agrícolas, dedicadas exclusivamente a la producción de alimentos que permitieran el sustento agroalimentario del naciente Imperio expansionista. Los ojos del expansionismo japonés estaban puestos en los vastos recursos en hierro y carbón en la zona de Manchuria (norte de China y Mongolia), el caucho en Indochina y los vastos territorios pertenecientes a China. Con pocos problemas, Japón invade y conquista toda la región de Manchuria (denominada Manchukuo) en 1931. Aparentemente, Japón lo justifica para liberar a los manchús de los chinos, justamente como en el caso de la anexión de Corea, que era supuestamente un acto de protección. Al igual que Corea, se crea un gobierno títere, gobernado bajo la figura del depuesto emperador chino, el niño Piyu. Más adelante, Jehol, territorio chino que hace frontera con Manchuria, fue controlado en 1933. Japón invade China en 1937, creando lo que era esencialmente una guerra de tres ramas entre el Japón, los comunistas de Mao Zedong, y los nacionalistas de Chiang Kai-Shek. Japón toma el control de muchas de las costas de China y de las ciudades portuarias, pero evitaba atacar las colonias europeas y sus esferas de influencia. En 1936, antes de la invasión de China, Japón firma un Tratado Anticomunista con Alemania y otro con Italia en 1937.
PODEMOS RESUMIRLO DE ESTA MANERA: - La opresión del tratado de Versalles a Alemania que le obligaba a pagar cantidades exageradas a los países que
salieron vencedores en la primera guerra mundial.
-La debacle económica en estados unidos el 29 de septiembre de 1929.
-La invasión a Polonia por parte de los alemanes, y ataques japoneses contra china, los estados unidos de América y las colonias británicas y neerlandesas en Asia. Combinado con la gran depresión de inicios de los 30 hizo que la débil república de Weimar no fuera capaz de mantener el orden interno, los continuos disturbios y conflicto en las calles incrementaron la exigencia de orden y seguridad por parte de sectores de la población cada vez más amplio sobre esa ola de descontento y rencor, el partido nazi liderado por Adolf Hitler se presentó como el elemento necesario para devolver la paz, la fuerza y el progreso a la nación.
TRANSCURSO DE LA GUERRA. Invasión a Polonia: El 1 de septiembre de 1939, los ejércitos alemanes cruzaron la frontera polaca, y en cuestión de días neutralizaron al ejército polaco, que no estaba preparado para afrontar las consecuencias de la doctrina Blitzkrieg. El 3 de septiembre los gobiernos de Francia y Reino Unido declararon la guerra a la Alemania nazi, para sorpresa de Hitler, pero esto no significó ningún cambio en el curso de la guerra en Polonia, ya que los aliados no se plantearon enviar tropas a este país pues aspiraban a que la declaración de guerra sirviese como elemento disuasivo con el fin de evitar ser atacados por los nazis. Cuando el 1 de octubre, la Wehrmacht ocupó Varsovia[12], el Alto Mando Militar Polaco decidió dirigir sus fuerzas al sur, hacia la frontera con Rumania, donde planeaban contener indefinidamente a los alemanes hasta la llegada de la ayuda prometida. Este plan se vino abajo cuando la Unión Soviética invadió a Polonia desde su otra frontera el 17 de septiembre, bajo el pretexto de proteger a los ucranianos y bielorrusos que vivían en la parte oriental de Polonia, debido al colapso de la administración polaca tras la invasión nazi. Tras esto, las fuerzas del Ejército polaco huyeron hacia Rumania, mientras los nazis colocaban un gobierno títere el cual se mantendría hasta 1945.
Invasión a Finlandia: Stalin, preocupado todavía por una muy posible guerra con Alemania, procedió a acelerar la organización de las fuerzas armadas soviéticas, y enfocó su mirada en las fronteras occidentales. En ese sentido, consciente del hecho de que Finlandia había declarado su simpatía con el Eje Nazi, el mando político soviético previó la posibilidad de que dicho territorio fuera utilizado por Hitler como punto de acceso de una inminente invasión. Es por ello que realizan un intenso esfuerzo de convencimiento con las autoridades de dicha nación, ofreciéndolas mayores territorios al norte a cambio de recibir territorios alrededor del lago Ladoga, el cual serviría para proteger a la ciudad de Leningrado muy cercana al nuevo teatro de operaciones de la guerra. El gobierno finés de Carl Gustaf Mannerheim se negó, y después de fallidas negociaciones, la Unión Soviética inició la invasión del pequeño vecino. El resultado de la ofensiva soviética fue decepcionante, los ejércitos soviéticos, numéricamente superiores, no pudieron hacer frente a las fuerzas finesas, mejor
adaptadas al duro clima del campo de batalla ártico, y miles de soldados soviéticos murieron debido a la ineficiencia de sus comandantes. Entonces, Stalin remueve del mando a su protegido Kliment Voroshílov, y con tropas frescas al mando de Semión Timoshenko reinician el ataque. Esta vez los exhaustos defensores fineses fueron sobrepasados y Finlandia tuvo que ceder gran parte de su territorio a la Unión Soviética. El fracaso soviético en Finlandia no pasó desapercibido para Hitler, quien empezó a subestimar al Ejército Rojo y considerar la posibilidad de un ataque lo más rápido posible. Por su parte, Stalin empezó a otorgar más autonomía al proceso de designación de comandantes del ejército.
Campaña del Norte o de Noruega: Hitler a quien le preocupaba lo posibilidad de que los británicos atacaran Noruega y Suecia como forma de cortar el importante suministro de hierro a las tropas nazis, decidió dirigir sus fuerzas hacia Noruega, Suecia y Dinamarca hecho concretado durante la primavera de abril de 1940. La ocupación de dichos territorios terminó por convencer al Reino Unido de la necesidad de concretar un ataque para expulsar a los nazis de Noruega con el objetivo de evitar por todos los medios de que la Luftwaffe (Fuerza Aérea nazi) pudiera dirigir ataques directos hacia la débil zona del norte británico. Durante el enfrentamiento fueron utilizados aproximadamente 45 mil soldados por el bando nazi mientras los británicos utilizaron un total de 80 mil soldados como aproximado, aunque la diferencia era notable y se inclinaba a favor del bando británico, la invasión culminaría en fracaso para las tropas de Hugh Massy y Claude Auchinleck (Comandantes británicos). Además se utilizaron las bases noruegas como punto de partida de los bombarderos y cazas de la Luftwaffe que participaron en la Batalla de Inglaterra.
Batalla de Francia:
Con los ojos del mundo fijos en el conflicto en Noruega, el Alto Mando Militar de Alemania empezó a planificar la reapertura del frente occidental, con un claro objetivo, evitar la reutilización del método de guerra de trincheras que de gran efectividad había sido para retrasar los resultados durante la Primera Guerra Mundial. Como los Países Bajos y Bélgicase habían declarado neutrales, los ejércitos franceses se habían replegado a sus fronteras, esperando el ataque desde este punto, ya que su frontera con Alemania era considerada impenetrable. El general Erich von Mansteinse dio cuenta de que la región de las Ardenas, al sureste de Bélgica, no había sido protegida lo suficiente, ya que el Mariscal francésMaurice Gamelin consideró que los tupidos bosques harían difícil el cruce de tanques por esa región. El Mariscal Gamelin tenía razón, pero dejó casi sin protección esta región, que fue por donde las principales fuerzas alemanas se encaminaron el 10 de mayo de 1940.
El día de la invasión, una importante fuerza alemana entró a Holanda y a Bélgica, violando su neutralidad, los aliados avanzaron desde Francia hacia estos países. Mientras tanto, otra importante fuerza alemana al mando del general Gerd von Rundstedt cruzó las Ardenas, formándose congestionamientos de tanques en las estrechas carreteras, cuando salieron del bosque dos días después, los aliados se dieron cuenta de que iban a ser rodeados, y el gobierno francés entró en pánico. El 18 de mayo de 1840 el cerco alemán fue cerrado, y el grueso de los ejércitos aliados quedó atrapado en Bélgica. Contraataques desde adentro y desde afuera para levantarlo no tuvieron éxito, y los británicos iniciaron la evacuación de sus hombres mediante la Operación Dinamo. Es en ese mismo momento en que Mussolini decidió finalmente actuar e involucrase en la guerra cumpliendo con lo acordado dentro del Pacto de Acero, y el 5 de junio le declaró la guerra a los Aliados, e intentó invadir a Francia desde el sur. El 10 de junio París fue declarada ciudad abierta, y cayó poco después. Sin reservas para contener el avance alemán, Francia se rindió el 22 de junio de 1940. El entonces Coronel Charles de Gaulle escapó a Inglaterra, y desconociendo el nuevo gobierno pro-alemán de Vichy, creando la Resistencia francesa mediante el histórico Llamamiento del 18 de junio hecho desde los micrófonos de la BBC en Londres. Los pobres resultados en el manejo de las tropas británicas, terminaron por concretar la renuncia del entonces Primer ministro Británico Neville Chamberlain quien fue sustituido por Winston Churchill.
Bombardeos a Inglaterra:
Bomberos británicos luchando contra el fuego entre edificios en ruinas tras la ola de bombardeos ocurridos durante la Segunda Guerra Mundial. Los estrategas alemanes habían estudiado la posibilidad de una invasión a Inglaterra, que fue condensada en la operación León Marino. Habían concluido que antes de considerar el desembarco alemán era necesario neutralizar a la Fuerza Aérea Británica para que la Fuerza Aérea Alemana acabará con la Armada británica, ya que la Armada alemana no podía lograrlo. De esta manera todas las miradas cayeron sobre el General Hermann Göring, comandante de la Luftwaffe. El General Göering inició una serie de bombardeos estratégicos sobre Inglaterra, enfocándose en aeródromos y zonas industriales. Los resultados fueron devastadores, especialmente el de la operación «Día del Águila», donde 1000 bombarderos protegidos por 700 cazas atacaron Inglaterra, destruyendo decenas de aviones en el suelo. No obstante, la RAF encontró un respiro cuando accidentalmente los puertos de Londres fueron bombardeados, lo que motivó que los británicos bombardearan Berlín. Este ataque en suelo alemán motivó a Hitler a que ordenara a Göering el cambio de estrategia, iniciándose la Blitz. En esta etapa se bombardearon objetivos civiles, muriendo unas 43 mil personas y destruyéndose 1 millón de casas. La RAF aprovechó el cambio de estrategia para incrementar sus números, y finalmente pudieron hacerle frente a la Luftwaffe. El 12 de octubre, Hitler se cansa de esperar y ordena la suspensión de la invasión de Inglaterra. No obstante, los bombardeos sobre Londres no pararían hasta el 16 de mayo de 1941, cuando Hitler enfocaría su mirada de nuevo hacia el este.
Campaña de los Balcanes (1941): Conseguido el control sobre Francia y con las fuerzas británicas desarmadas tras la terrible Blitz, el próximo objetivo de Alemania era la Unión Soviética mientras Italia se preparaba para buscar el control sobre Grecia. En ese sentido, Mussolini había presionado al primer ministro de Grecia, Ioannis Metaxas, a que cediera ante las exigencias italianas. La respuesta negativa de Grecia desencadenó la invasión italiana desde Albania octubre de 1940, que terminó en el estancamiento del frente. En marzo de 1941, Hitler se enteró que la RAF estaba utilizando las bases aéreas griegas, y finalmente acudió en ayuda de Italia. Para realizar un ataque sorpresa, los ejércitos alemanes debían atravesar Macedonia, parte de Yugoslavia, por lo que se presionó al regente Pablo para uniera su país al Pacto Tripartito. Dos días después de ocurrir esto, el Regente fue derrocado, y aunque los nuevos gobernantes de Yugoslavia decidieron unirse al bando alemán de todas maneras, esto no calmó a Hitler, que ordenó el inicio de la
invasión el 6 de abril. Después de 11 días de combates, Yugoslavia fue ocupada completamente. Al mismo tiempo, los ejércitos de Bulgaria, Italia y Alemania habían iniciado la invasión de Grecia, cuyos defensores no pudieron contener la avalancha enemiga, a pesar de contar con unidades británicas entre sus fuerzas. El 27 de abril Atenas cayó y se inició la evacuación aliada hacia Creta. El 20 de mayo Alemania también invade Creta, sufriendo fuertes bajas. No obstante, a pesar de haber perdido casi 16 mil hombres, las Fuerzas del Eje logran expulsar a las fuerzas aliadas, conquistando la isla el 1 de junio. La campaña alemana de los Balcanes es conocida como la Distracción o la Diversión de los Balcanes, ya que una de su consecuencia fue el atraso de la ofensiva alemana sobre la Unión Soviética. En efecto, Hitler inició su ansiada «cruzada» dos meses después de lo planeado inicialmente, lo que causaría que las tropas alemanas llegarían a Moscú al iniciarse las lluvias de otoño, dificultando el avance blindado alemán.
Apertura de los Frentes Europeos. Frente del Mediterráneo: Luego del éxito alcanzado por los aliados en su lucha contra las Afrika Korps de Erwin Rommel en el norte de África, el próximo objetivo de las fuerzas aliadas en el Mediterráneo, sería Italia y con ello la posibilidad de derrocar a Mussolini y propinar un duro golpe a Hitler. El 10 de julio de 1943, fuerzas británicas comandadas por el mariscal Bernard Law Montgomery desembarcaron cerca de la ciudad siciliana de Siracusa mientras que el general George Patton desembarcaba cerca de Gela. A pesar de que Mussolini había insistido en que solamente divisiones italianas defendieran Sicilia, dos divisiones panzer al mando del general Albert Kesselring se encontraban en la isla. Debido al rápido derrumbe italiano, Kesselring se retiró al noroeste del Monte Etna, con el objetivo de mantener libre la vía de escape a Mesina. Montgomery avanzó rápidamente hasta las faldas del Etna, cuando su ofensiva fue parada en seco. Por su parte, Patton avanzó libremente hasta liberar Palermo el 22 de julio. Después de perder varios días en la línea defensiva de Santo Stefano, los dos ejércitos aliados iniciaron una carrera a Mesina. Varios intentos aliados por realizar desembarcos anfibios en los flancos enemigos
fracasaron, pero al final la resistencia fue rota y Patton llegó primero a Mesina el 17 de agosto. Sin embargo, para aquel momento, la mayoría de las fuerzas enemigas ya habían escapado de Sicilia. El propio Kesselring se había logrado escapar con suerte un día antes de la llegada de Patton. A pesar de la derrota, el primer intento de desembarco aliado en Sicilia tendría resultado en el plano político, pues ante el peligro de una agresión directa, el 25 de julio de 1943 el Gran Consejo Fascista decidió nombrar a Pietro Badoglio como primer ministro de Italia en lugar de Mussolini. La acción que contó con la anuencia del rey Víctor Manuel III, fue una traición contra Mussolini quien sería arrestado y enviado a múltiples prisiones, con el objetivo de burlar a los posibles rescatistas. El principal objetivo de Badoglio seria pactar en secreto una rendición con los aliados que incluyera la perpetuación de la monarquía. Hitler quien desconfiaba de las nuevas autoridades italianas, ordenó a las tropas alemanas realizar un golpe de estado con el fin de restaurar a Mussolini en el poder, hecho que se consumaría el 12 de septiembre, cuando un comando de paracaidistas SS liderados por Otto Skorzeny, liberó a Mussolini de su cautividad. Una vez libre, Mussolini fue proclamado primer ministro de la República Social Italiana, un territorio situado al norte de Italia. La invasión de Italia continental fue planificada en tres operaciones no simultáneas: Baytown, Avalanche y Slapstick. Baytown se ejecutó el 3 de septiembre, cuando las tropas de Montgomery cruzaron el estrecho de Messina y ocuparon la región de Calabria. La rendición masiva del ejército italiano dejó todo el peso de la defensa en Alemania. Sin embargo, la táctica alemana de destruir puentes y caminos retrasó el avance de Montgomery. El 9 de septiembre se ejecutó Slapstick, que estipulaba desembarcos en Tarento con el objetivo de obligar a las unidades alemanas, pues las italianas ya se habían rendido, a alejarse de Salerno, que es donde se iba a ejecutar Avalanche. Tarento fue rápidamente asegurada y pronto todas las miradas se volcaron a Salerno, que es donde debía ocurrir el principal desembarco. El desembarco en Salerno, comandado por el general americano Mark Wayne Clark, se inició el mismo día que el desembarco en Tarento al sur. Después de tomar las playas, un contraataque alemán causó altas bajas en las tropas aliadas, sin embargo, la artillería naval destruyó a los panzer que se acercaron a las playas. Las tropas invasoras intentaron moverse al sur, con el objetivo de contactar con Montgomery, pero la fuerte presencia alemana los hizo detenerse. Entre el 12 y el 14 de septiembre un contraataque alemán hizo retroceder a los aliados hasta su última línea de defensa, haciéndolos luchar con la playa en la espalda. Sin embargo, el oportuno uso de las tropas de reserva salvó a la fuerza de desembarco del desastre. Finalmente, la cabeza de playa fue asegurada y se pudo contactar a las fuerzas de Montgomery ubicadas en el sur. Tras la ocupación de Nápoles el 1 de octubre de 1943, la zona sur de Italia terminó en manos aliadas mientras que en el norte los alemanes se preparaban para desde la llamada Línea Volturno contener a los aliados. Ante los rápidos avances
aliados, Kesselring se alarmó ante la perspectiva de que los aérodromos del norte de Italia cayeran en manos enemigas, permitiendo incrementar el bombardeo sobre Alemania. Por ende, tomó la decisión de retener indefinidamente a los aliados en el centro de Italia, utilizando los Montes Apeninos como defensa natural. Se construyeron rápidamente dos líneas defensivas temporales, la línea Volturno y la línea Barbara, cuyo objetivo era permitir la construcción de una línea más poderosa: la línea Gustav. Al frente de esta línea y en su retaguarda, alrededor del área de Monte cassino, se construyeron dos líneas que protegían el flanco occidental de Italia: la línea Bernhardt y la línea Adolf Hitler. Mientras los americanos sufrieron retrasos al cruzar las líneas Volturno y Barbara al oeste, los británicos cruzaron sin muchos problemas por el este, llegando a la misma línea Gustav, donde las fuertes nevadas decretaron el fin de la ofensiva británica por 1943. Las operaciones de invierno en el frente oriental italiano se limitaron a realizar incursiones y patrullas nocturnas. Por el lado americano, la ofensiva continuó, pero después de seis semanas sufriendo 16 mil bajas, el V Ejército Estadounidenses sólo había logrado avanzar menos de 10 kilómetros, superando la línea Bernhardt. Para el 15 de enero de 1944, los aliados habían logrado expulsar a los alemanes bajo el mando de Heinrich von Vietinghoff del Monte Trocchio, si bien esto no podía considerarse como una victoria, ya que las expectativas aliadas habían sido mayores. Como se consideraba que la manera más rápida de llegar a Roma era cruzando el valle del Liri, en el frente occidental italiano, se realizaron planes para desbordar las líneas defensivas alemanas rápidamente a través de un desembarco anfibio en la retaguardia de la línea Gustav, al mismo tiempo que se llevarían a cabo dos ataques a los flancos de la misma por el valle del Liri. Sin embargo, tanto el desembarco (Batalla de Anzio) como los ataques por el valle del Liri (Batalla de Monte cassino) no arrojaron los resultados deseados, ya que tropas alemanas de relevo recién llegadas aislaron a los aliados en Anzio, y un puesto de observación en Monte cassino proporcionó a la artillería alemana de la ventaja para neutralizar cualquier intento aliado de entrar al valle. No fue hasta el 18 de mayo de 1944 que un regimiento polaco conquistó la cima del Montecassino. Después los ejércitos aliados se dirigieron a la línea Adolf Hitler, desbordándola en una semana. Con los alemanes en retirada hacia el norte de Italia, las fuerzas aisladas en Anzio lanzaron un taque para liberarse, formándose una oportunidad única para cortar la retirada a las fuerzas alemanas que venían desde el sur. Pero el general Mark Wayne Clark dejó escapar a los alemanes, ya que prefirió dirigirse directamente a Roma para tener el honor de liberarla antes que los británicos. El 4 de junio de 1944, los estadounidenses entraron a Roma. Sin embargo, esta victoria quedó opacada, no sólo por la enorme pérdida de vidas no estimada, sino porque dos días después se inició el Desembarco en Normandía y el frente de Italia quedo relegado en un segundo lugar definitivamente, pues los generales
británicos y estadounidenses se enfocarían de ahora en adelante en el frente occidental.
El Pacífico (abril de 1941-junio de 1943): En el verano de 1941, los Estados Unidos, el Reino Unido y los Países Bajos comenzaron un embargo de petróleo contra el Japón, amenazando con impedir su capacidad para librar una guerra importante tanto en el mar como en el aire. Sin embargo, las fuerzas japonesas continuaron avanzando hacia el interior de China. Durante los meses de verano, Japón trató de sondear las posibilidades de lograr que los Estados Unidos levantasen el embargo de petróleo contra el Imperio de Japón. La respuesta estadounidense fijaba como condición sine qua non la retirada de las tropas japonesas en China. Rechazando estas condiciones, Japón planeó un ataque a Pearl Harbor para mermar gravemente a la Flota del Pacífico de los Estados Unidos, y después apoderarse de los campos de petróleo de las Indias Orientales Neerlandesas. El 7 de diciembre, Japón lanzó ataques por sorpresa, prácticamente simultáneos, contra Pearl Harbor, Tailandia y los territorios británicos de Malaya y Hong Kong. Una flota de portaaviones japoneses lanzó un ataque aéreo por sorpresa sobre Pearl Harbor. El ataque destruyó la mayor parte de los aviones estadounidenses de la isla y dejó fuera de combate a la principal flota de batalla estadounidense (tres acorazados fueron hundidos, y cinco más gravemente dañados, aunque solo se perdieron definitivamente el USS Arizona y el USS Oklahoma, los otros seis acorazados fueron reparados y pudieron regresar al servicio activo). Sin embargo, los cuatro portaaviones estadounidenses (que eran el principal objetivo del ataque japonés) estaban fuera, en alta mar. En Pearl Harbor, el muelle principal, las instalaciones de suministro y de reparación fueron reparadas rápidamente. Más aún, las instalaciones para el almacenaje de combustible de la base, cuya destrucción habría dejado gravemente mermada a la flota del Pacífico, fueron dejadas intactas. El ataque unió a la opinión pública estadounidense pidiendo venganza contra el Japón. Al día siguiente, el 8 de diciembre, los Estados Unidos declararon la guerra al Japón. A la vez que atacaban Hawái, los japoneses atacaron la isla de Wake, un territorio estadounidense en el Pacífico Central. El intento de desembarco inicial, fue rechazado por la guarnición de Marines, y una resistencia muy dura continuó hasta el 23 de diciembre. Japón también invadió las Filipinas, un protectorado de
los Estados Unidos, el 8 de diciembre. Las fuerzas estadounidenses y filipinas, bajo el mando del general Douglas MacArthur, fueron forzadas a retirarse a la península de Bataán.
Reapertura del Frente Occidental: Mientras la Unión Soviética se enfrentó sola a los ejércitos del Tercer Reich, los aliados occidentales empezaron a planear el desembarco en Europa, realizando primero una pequeña incursión que sería conocida como la batalla de Dieppe. El 19 de agosto de 1942, 6 mil soldados canadienses desembarcaron en Dieppe, con el objetivo de permanecer un corto período en el que recolectarían información y probarían nuevos métodos de asalto a las playas. El resultado fue desastroso, muriendo o siendo capturados casi todos los soldados, perdiéndose muchos barcos y aviones. Afortunadamente para Stalin, el presidente Franklin D. Roosevelt era partidario de finalizar la guerra en Europa primero, antes de ir contra Japón, por lo que después de las relativamente exitosas campañas en el norte de África, las tropas aliadas saltaron a Sicilia el 10 de julio de 1943. Finalmente, ante la continua insistencia de Stalin, se definió en mayo de 1943, que la reapertura del frente occidental se haría en 1944. Barcazas de desembarco trasladan hasta la costa de Normadia a soldados y pertrechos de militares durante el desembarco Después de seleccionar distintos lugares para el desembarco, se concluyó que debería ocurrir en las playas de Bretaña, Normandía o en el Paso de Calais. Debido a que Calais estaba muy bien defendida, se descartó casi inmediatamente, y debido a que Bretaña estaba muy lejos de París y Alemania, y como su clima era muy inestable, se decidió que las playas de Normandía serían las seleccionadas. En junio de 1943se le confirmó a Stalin que la invasión se haría en mayo de 1944. Dicha invasión, hasta entonces Operación Round-Up, fue renombrada Operación Overlord. Etapas del Frente Occidental de 1944 a 1945: Reapertura del Frente: Batalla de Normandía, Operación Market Garden. Contraataque alemán: Batalla de las Ardenas. Conquista de Alemania: Operación Plunder. Luego de que importantes recursos fueran invertidos en la operación "Guardia del Rin" durante la Batalla de las Ardenas, la cual no había obtenido dado ningún
resultado, la defensa alemana dependía del control sobre dos ríos: el Rin en el oeste y el Oder en el este. Tras el fracaso de Bernard Montgomery, Eisenhower tuvo que plantearse de nuevo el camino para invadir Alemania. Mientras que los británicos presionaban para realizar el cruce frente a las posiciones que ocupaban sus ejércitos, los estadounidenses presionaban para hacerlo frente a sus propias posiciones. Eisenhower decidió realizar los dos planes, permitiendo que Montgomery ejecutara la operación Veritable con el 21º Grupo de Ejércitos, que colocaría sus fuerzas en el lugar adecuado para cruzar el Rin frente a Wessel. Al sur, el general Omar Bradley haría lo mismo entre Coblenza y Colonia con el XII Grupo de Ejércitos. El Tercer Ejército de Patton se dirigiría al sur, entre Maguncia y Mannheim para enlazar a tropas estadounidenses que vendrían desde el sur de Francia. Una vez Montgomery hubiera iniciado el cruce del Rin, Bradley tendría luz verde para hacerlo también. Al frente de Montgomery se encontraba el Grupo de Ejércitos de Model, siendo una fuerza relativamente pequeña, Montgomery pensó en rodearla, por lo que pidió prestado el Noveno Ejército a los estadounidenses (Operación Grenade). De esta manera, mientras las fuerzas de Bradley cruzaban río arriba, Montgomery lo haría río abajo, rodeando el valle del Ruhr donde se encontraba Model. El 8 de febrero se ejecutó Veritable, sin embargo, la fuerte resistencia alemana retrasó el avance de las fuerzas de Montgomery. Peor aún, los alemanes destruyeron las represas del valle del Ruhr, inundándolo, lo que evitó que se ejecutara Grenade hasta dos semanas después. Mientras tanto, las fuerzas de Montgomery se enfrentaron a las de Model solas, hasta el 23 de febrero, cuando el Noveno Ejército de William H. Simpson cruza, enlazando con las fuerzas de Plunder dos semanas después. Bradley al sur, tomó Colonia el 6 de marzo y luego Bonn. Un comando del Primer Ejército estadounidense se acercó a Remagen para contener a las fuerzas alemanas mientras el Tercer Ejército que venía del sur enlazaba con ellos. Para su sorpresa, este comando encontró un puente sobre el Rin intacto, que inmediatamente fue tomado. Este fue el primer paso que los aliados consiguieron, y si bien permitió el paso de material y soldados a la otra orilla, se desplomó el 17 de marzo, ya que había sido dañado durante su captura. Lo que se vio después fue una lucha entre los generales aliados por ver quien avanzaba más allá del Rin. Para el 28 de marzo, Montgomery poseía una cabeza de puente firme y, como se había discutido antes, empezó a preparar la toma de Berlín. Para su sorpresa, Eisenhower cambió de plan al último minuto, y ordenó que los ejércitos de Bradley ahora se moverían hacia Dresde, con la finalidad de dividir Alemania en dos. Montgomery por su parte, debería cortar el paso a Dinamarca al ejército Rojo. Una fuerza menor se dirigiría aAustria, donde corrían los rumores de que los fanáticos nazis estaban atrincherándose en una serie de inexpugnables fortalezas en los Alpes.
Como habían predicho los generales de Hitler, las fuerzas aliadas rodearon al Grupo de Ejércitos B alemán de Walther Model, quien había quedado aislado en la bolsa del Ruhr. Después de resistir hasta mediados de abril, la bolsa fue dividida en dos por los aliados, siendo capturada una mitad rápidamente. Al caer las peticiones de Model en oídos sordos en Berlín, éste decidió dar libertad de conciencia a sus soldados, permitiendo que aquel que quisiera entregarse lo hiciera, mientras que aquel que quisiera seguir luchando podría hacerlo. Model se suicidó cerca de Duisburgo poco después, alegando que un general no podía rendirse, si bien algunos historiadores aseguran que tenía miedo de ser juzgado y ejecutado. De los 430 mil soldados atrapados, unos 325 mil fueron capturados con vida. Para mayo de 1945, toda defensa organizada había desaparecido, debido a las rendiciones masivas, la Wehrmacht había procedido a reclutar niños y ancianos en los batallones Volkssturm, que no lograron un cambio significativo. El 11 de abril fue liberado el campo de concentración de Buchenwald, y luego, el 29 de abril, el campo de concentración de Dachau. Los generales aliados ya había sido alertados respecto a la naturaleza de estos campos, en parte por la información que habían dado 16 sobrevivientes del campo de concentración de StruthofNatzweiler en la frontera francesa con Alemania, liberado el 23 de noviembre del año pasado. El 24 de abril, las fuerzas estadounidenses hicieron el primer contacto con las fuerzas soviéticas en Torgau, sobre el Elba. El 5 de mayo los aliados entraron a Austria. Habiendo caído todas las ciudades importantes alemanas, excepto Berlín, los aliados se preocuparon por ocupar todos los rincones de Alemania posibles, dejando la capital del Reich a los soviéticos.
Batalla de Berlín: Para abril, todos los frentes soviéticos estaban listos para iniciar el avance final sobre Alemania, juntando 2 millones y medio de hombres, 6.250 tanques, 7.500 aviones, 41.600 piezas de artillería, 3.255 lanzacohetes Katyusha, y casi cien mil vehículos de transporte, la mayoría prestados por los Estados Unidos. El 16 de abril de 1945, la llamada batalla de Berlín empezó, y si bien Georgi Zhúkov encontró problemas en las llamadas Colinas de Seelow, en el sur, el I Frente Ucraniano de Koniev llegó sin problemas al sur de Berlín. El I Frente Bielorruso de Zhúkov se vio presionado a acelerar el paso, ya que este deseaba conquistar Berlín primero. De esta manera, Zhúkov rodeó Berlín y atacó desde el noroeste, mientras que Koniev, que se detuvo momentáneamente por órdenes de Stalin, llegó de segundo a Berlín y atacó por el sur. El 24 de abril, el General Helmuth Weidling, comandante del LVI Cuerpo Panzer, se dirigió al bunker de Hitler para ser fusilado después de haber sido acusado de haber escapado a Potsdam. Sin embargo, como síntoma de la inestabilidad mental que Hitler mostró en sus últimos meses, Weidling no solo no fue ejecutado,
sino que fue nombrado Comandante en Jefe de las fuerzas en Berlín, ya que Goebbels, el Defensor nominal de Berlín, no tenía la preparación militar. La batalla de Berlín fue dura, ya que la población civil fue obligada a usar las armas, por lo que era normal ver niños de diez años, así como ancianos e inválidos, en los puestos de artillería o usando Panzerfausts. Las bajas soviéticas fueron elevadísimas, y la arquitectura de Berlín sufrió grandes destrozos, incluyendo la Cancillería del Reich, el Reichstag y la puerta de Brandeburgo. Aquellos civiles que se negaban a luchar eran ejecutados inmediatamente por los alemanes, mientras que los que luchaban eran ejecutados por los soviéticos, la cantidad de prisioneros fue baja comparada con los conseguidas en otras batallas. Hitler todo el tiempo se negó a abandonar la capital para ir al Berchtesgaden, por lo que los altos oficiales de laWehrmacht rehusaron rendirse, ya que todos habían tomado un juramento de lealtad al Fuhrer. El 30 de abril, Adolf Hitler, se suicidó junto con su nueva esposa Eva Braun. Varios personajes importantes del gobierno de Alemania hicieron lo mismo, incluyendo Joseph Goebbelsy su esposa, que antes envenenaron a sus seis hijos. El secretario de Hitler, Martin Bormann desapareció en la batalla, si bien varios personas aseguran que lo vieron muerto con dos tiros en la espalda en una estación de metro de Berlín. Weidling rindió la ciudad a lus rusos el 2 de mayo. El Feldmarschall Wilhelm Keitel fue capturado y luego participó en la firma del documento de rendición. En la batalla murieron 360 mil soldados soviéticos, las cifras alemanas son dudosas, pero se estima que fueron mucho menores, ya que solo habían 90.000 defensores alemanes. El almirante Karl Dönitz fue nombrado Canciller por Hitler antes de morir, y este dio permiso al general Alfred Jodl de firmar la rendición incondicional con la Unión Soviética el 7 de mayo, haciéndose efectiva al día siguiente. Los otrora hombres de confianza de Hitler, Hermann Goering y Heinrich Himmler habían caído en desgracia al intentar hacer la paz por separado con los aliados. Ambos se suicidaron después de ser capturados por los estadounidenses. El 9 de mayo, día de la victoria para la Unión Soviética, se convirtió en fecha festiva, y el 24 de junio se celebró un impresionante desfile en Moscú, culminando asi la etapa europea de la Segunda Guerra Mundial.
La Guerra acaba en Europa: Roosevelt, Churchill, y Stalin llegaron a acuerdos para la Europa de posguerra en la Conferencia de Yalta en febrero de 1945. Su encuentro llegó a muchas resoluciones importantes, tales como la formación de las Naciones Unidas, elecciones democráticas en Polonia, las fronteras de Polonia se movieron hacia el oeste a expensas de Alemania, los nacionales soviéticos serían repatriados, y se acordó que la Unión Soviética atacaría a Japón a los tres meses de la rendición de Alemania. Los Aliados reasumieron su avance hacia el interior de Alemania a finales de enero. El obstáculo final para los Aliados era el Río Rin, que fue cruzado a finales de marzo de 1945, ayudados por la captura fortuita del Puente de Ludendorff en Remagen. Una vez que los Aliados hubieron cruzado el Rin, los británicos se dirigieron en abanico hacia el nordeste en dirección a Hamburgo, cruzando el Río Elba y moviéndose hacia Dinamarca y el Mar Báltico. El 9.º Ejército de los Estados Unidos se dirigió al sur para formar la pinza norte del embalsamiento del Ruhr, mientras que el 1.º Ejército fue hacia el norte como la pinza sur del embalsamiento. Estos ejércitos estaban comandados por el general Omar Bradley, que tenía bajos su mando a 1 300 000 hombres. El 4 de abril, el cerco estaba completado, y el Grupo de Ejército Alemán B, que incluía al 5.º Ejército Panzer, al 7.º Ejército y al 15.º Ejército comandados por el Mariscal de Campo Walther Model, estaban atrapados en la Bolsa del Ruhr. Se cogió a unos 300 000 soldados alemanes como prisioneros de guerra. El 1.er y 9.º ejércitos de los Estados Unidos giraron entonces hacia el este. Pararon su avance en el río Elba, donde se encontraron con las tropas soviéticas a mediados de abril. Los avances Aliados hacia el norte de la Península Italiana, en el invierno de 194445, habían sido lentos debido al terreno montañoso y al redespliegue de tropas en Francia. Pero para el 9 de abril, el 15.º Grupo de Ejército Brito estadounidense, penetró a través de la Línea Gótica y atacó el valle del Po, cercando gradualmente las principales fuerzas alemanas. Milán se conquistó a finales de abril. El 5.º Ejército de Estados Unidos continuó su avance hacia el oeste y enlazó con unidades francesas, mientras que los británicos entraron en Trieste, y se encontraron con los partisanos yugoslavos. Unos pocos días antes de la rendición de las tropas alemanas en Italia, partisanos italianos capturaron a Mussolini, que trataba de escapar a Suiza. Fue ejecutado, junto con su amante Clara Petacci. Se llevaron sus cuerpos a Milán, donde fueron colgados boca abajo, para escarnio público.
Después de la muerte de Hitler, Karl Dönitz se convirtió en el jefe del gobierno alemán pero su poderío se desintegraba rápidamente. Las fuerzas alemanas en Berlín entregaron la ciudad a las tropas soviéticas el 2 de mayo de 1945. Las fuerzas alemanas en Italia se rindieron el 2 de mayo de 1945, en el cuartel general del General Alexander, y las fuerzas alemanas en el Norte de Alemania, Dinamarca y los Países Bajos se rindieron el 4 de mayo. El Alto Mando Alemán bajo el Generaloberst Alfred Jodl rindió incondicionalmente todo el resto de fuerzas alemanas el 7 de mayo en Reims, Francia. Los Aliados occidentales celebraron el «Día de la Victoria en Europa» el 8 de mayo. La Unión Soviética celebró el «Día de la Victoria» el 9 de mayo. Algunos restos del Grupo de Ejército Centro Alemán continuaron resistiendo hasta el 11 de mayo o el 12 de mayo (véase Batalla de Praga).
La Guerra acaba en Asia: La última conferencia aliada de la Segunda Guerra Mundial fue celebrada en la ciudad de Potsdam, cercana a Berlín, desde el 17 de julio hasta el 2 de agosto. Durante la Conferencia de Potsdam, se alcanzaron acuerdos entre los Aliados sobre la política a llevar en la Alemania ocupada. También se lanzó un ultimátum a Japón pidiendo su rendición incondicional. El presidente de los Estados Unidos Harry Truman decidió usar la nueva arma atómica para acelerar el final de la guerra. La batalla de Okinawa había mostrado que una invasión en las islas de origen japonesas (planeada para noviembre) significaría un gran número de bajas estadounidenses. La estimación oficial que fue dada por la Secretaría de Guerra era de 1.4 millones de bajas aliadas, aunque algunos historiadores discuten si esto habría sido el caso o no. La invasión habría significado la muerte de millones de soldados japoneses y civiles, que estaban siendo entrenados como milicia. El 6 de agosto de 1945, un B-29 Superfortress, el Enola Gay, lanzó una bomba atómica apodada Little Boy sobre Hiroshima, destruyendo la ciudad. El 9 de agosto,
un B-29 llamado Bockscar lanzó la segunda bomba atómica, apodada Fat Man, sobre la ciudad portuaria de Nagasaki. El 8 de agosto, dos días después que se hubiese lanzado la bomba atómica sobre Hiroshima, la Unión Soviética, habiendo denunciado su pacto con Japón en abril, atacó a los japoneses en Manchuria, cumpliendo su promesa hecha en Yalta de atacar a los Japoneses tres meses después de que hubiese acabado la guerra en Europa. El ataque fue hecho por tres grupos de ejército soviéticos. En menos de dos semanas, el ejército japonés en Manchuria, que consistía en aproximadamente un millón de hombres, había sido destruido por los soviéticos. El Ejército Rojo se movió hacia Corea del Norte el 18 de agosto. Corea fue seguidamente dividida en el paralelo 38 en las zonas soviética y estadounidense. El uso estadounidense de las armas atómicas contra Japón y la invasión soviética del Manchukuo, hicieron que Hirohito se apresurase a puentear al gobierno existente e interviniese para finalizar la guerra. En su alocución radiofónica a la nación, el Emperador no mencionó la entrada de la Unión Soviética en la guerra, pero en su «reescritura a los soldados y marineros» del 17 de agosto, ordenándoles el alto el fuego y entregar las armas, acentuó la relación entre la entrada de los soviéticos en la guerra y su decisión de rendirse, omitiendo cualquier mención a las bombas atómicas. Los japoneses se rindieron el 14 de agosto de 1945, o el Día de la Victoria sobre Japón, firmando el Instrumento Japonés de Rendición el 2 de septiembre. Las tropas japonesas en China se rindieron formalmente el 9 de septiembre de 1945.
Consecuencias territoriales en el mundo: Rusia se anexionó Estonia, Letonia, Lituania, el este de Polonia y partes de Finlandia y Rumanía. Polonia recibió territorios de Alemania (Pomerania, Silesia y la mitad de Prusia Oriental). Austria recuperó su independencia en 1955.
Alemania quedó dividida en cuatro zonas de influencia: Estados Unidos, Francia y Reino Unido unificaron sus respectivas zonas en la República Federal Alemana y la URSS hizo lo mismo con su zona que se convirtió en la República Democrática Alemana, hasta 1990, cuando los Länder que la conformaban se incorporaron a la República Federal de Alemania, dando lugar a la reunificación alemana y a la creación de la actual Alemania. La guerra dejó al descubierto la debilidad de los países europeos y los movimientos de independencia de las colonias se generalizaron con el apoyo de las dos superpotencias. Los ejércitos de las potencias coloniales no tenían ya capacidad para controlar dichos movimientos, por lo que a lo largo de la segunda mitad del siglo XX se produjo la llamada descolonización. El mundo quedó dividido en dos bloques: El bloque capitalista: liderado por los Estados Unidos y con influencia en Europa Occidental. El bloque comunista: liderado por la URSS y con influencia en Europa del Este.
Consecuencias históricas: Además de los horrores propios de toda guerra, la Segunda Guerra Mundial introdujo formas de sufrimiento no achacables a la propia escala de la misma: -Deportaciones masivas a campos de concentración y de trabajo forzado, organizados en Europa por Alemania (contra judíos, homosexuales, eslavos, discapacitados, gitanos, Testigos de Jehová, comunistas, españoles republicanos, sacerdotes católicos y ministros de otras religiones, etc.), que se convertirían en campos de exterminio donde tendría lugar el Holocausto; también en Estados Unidos y otros países de América, internando a sus ciudadanos de ascendencia japonesa. -Masacres masivas de población y de prisioneros enemigos perpetrada por las fuerzas japonesas, principalmente en China, y las alemanas, en Rusia. Tras la guerra, malos tratos a prisioneros de guerra, sobre todo por parte de la Unión Soviética. -Violaciones masivas de mujeres por parte de tropas soviéticas y japonesas. -Experimentos científicos usando prisioneros realizados por médicos nazis y japoneses, que solían acabar con la muerte del individuo. -Bombardeo aéreo masivo de civiles y lanzamiento de cohetes V-1 y V-2 iniciado por el Eje en Varsovia, Londres, Coventry y otras ciudades, que fue continuado por los aliados a una escala mucho mayor (Tokio, Berlín, Dresde y Hamburgo entre otras). Además, por primera y única vez, la bomba atómica fue utilizada en una
guerra: dos bombas arrojadas por Estados Unidos explotaron con tres días de intervalo, en Hiroshima y Nagasaki. -Como consecuencia de los cambios territoriales, millones de personas se vieron desplazadas y desarraigadas de sus lugares de origen. -En el ámbito intelectual y artístico, queda de forma oprimente y, a veces, obsesiva, la pregunta de cómo fue posible la guerra y cómo fueron posibles las circunstancias históricas que llevaron a ella. En muchos casos esta cuestión se ve agravada por el saber de qué intelectuales y artistas colaboraron con los totalitarismos y el clima bélico o, al menos, no se opusieron decididamente a ello. -Guerra después de la guerra: Combates en Indochina entre franceses y movimientos separatistas creados tras el vacío de poder que ocasionó la guerra, guerra civil en Grecia y Turquía, etc. La Segunda Guerra Mundial contribuyó a que emergieran dos superpotencias que buscaban repartirse el mundo: Estados Unidos y la URSS. La Sociedad de Naciones, a la que se responsabilizó de contribuir a desatar la guerra, fue reemplazada por la ONU. La carta de las Naciones Unidas se firmó en San Francisco el 26 de junio de 1945. En los Juicios de Núremberg y Tokio, parte de la jerarquía nazi y del Tenno nipón fue juzgada y condenada por crímenes contra la humanidad. La investigación científica y técnica, en su conjunto, se benefició de un fuerte impulso en particular: el dominio del átomo tras el Proyecto Manhattan. También contribuyó a la creación del helicóptero, los aviones de reacción y la creación del ICBM. En Alemania tras la firma del armisticio por parte del Eje, el Plan Marshall contribuyó a la reconstrucción de Alemania. Si bien los alemanes perdieron la guerra, sus adelantos en tecnología punta en cadenas de industrias, fabricación de componentes para cohetes, misiles y diversos tipos de armas ayudaron a los Aliados del Oeste y sirvieron para el llamado «milagro alemán». Los Estados Unidos tomaron la iniciativa de una actitud «positiva». Impusieron la democracia (particularmente al Japón), a través de una depuración y de un control del Estado y la educación. Al final del conflicto la Organización de las Naciones Unidas (ONU) reemplazó a la Sociedad de Naciones (SDN), fundada en 1919, y se otorgó a sí misma la misión de resolver los conflictos, en general bélicos, de carácter internacional.
MAPA TRAS LA GUERRA:
LA PRIMERA Y SEGUNDA GUERRA MUNDIAL
ASHLY CAMILA JARAMILLO SANTIAGO ANGIE CAMILA MONRROY ROMERO DANGHELLY CASADIEGO SANABRIA
PROF. ZULAY GOMEZ
INSTITUTO TECNICO ALFONSO LOPEZ CIENCIAS POLITICAS GRADO: 11-3 OCAÑA, 2016