Nueva York existe para tolerarlo todo; Reinaldo Arenas, un imprescindible – Publicado en: El estante Nº 13, julio de 1996
Leer a Reinaldo Arenas (1943 – 1990) produce el mismo efecto que Roberto Arlt; ambos escriben desde adentro de algo pesado que conocen bien. Arlt pobló su obra de personajes de conventillo y barrios pobres a quienes tanto daba trabajar o no porque de todas maneras terminaban presos.
“La loca de argolla”, como se define a sí mismo Reinaldo Arenas en Antes que anochezca, sabe que en su Cuba natal la promiscuidad se pena con cárcel, tortura, indignidad. De nada sirve proponerse una vida prolija que para los homosexuales no existe, parecen decir o dicen los personajes.
(…)
Cosas de la literatura, así como los círculos ilustrados de Buenos Aires nunca terminaron de aceptar a Roberto Arlt, también la revolución cubana, que presumió desde su origen de ilustrada, terminó expulsando a su mejor escritor de la manera más indigna: en el caos del puerto de Mariel, en 1980.