SERIE: NOVELAS CORTAS DE LA COTIDIANIDAD
NOVELA N. 1 LA OLLA Como de costumbre Emanuel pasaba por esa calle todas las tardes rumbo a la alma mater, ese día hacía un calor sofocante, del envejecido pavimento se levantaba vapor era algo extraño para una ciudad tan fría como era esa. Los tejados viejos llenos de musgo y pasto daban un aspecto pintoresco al lugar. A Emanuel le intrigaba esa puerta verde desvencijada que se abría dando paso a personas con un aspecto desaliñado, allí entraba toda clase de gente hombres y mujeres con caras sucias y grasientas. Pudo más la curiosidad y decidió a acercarse en el momento que se abrió la puerta, para tratar de ver hacia su interior, pero en el momento que lo hacía alguien le cayó por la espalda, empujándolo contra la pared. ¿Qué le pasa pirobo?, ¿se le perdió algo?. No, no solo tenía curiosidad…,. No se meta donde no le importa más bien bájese de lo que lleva. Emanuel estaba pálido los cuadernos que llevaba en el brazo se le cayeron al piso y su cuerpo se estremecía al ver tamaño puñal que estaba oxidado, se trataba de una arma hechiza con un mango de madera amarrado con caucho. La mano del individuo que lo empuñaba estaba negra del mugre y sus uñas largas conjugaban perfectamente con el filo de aquella arma letal. -tranquilo, tranquilo, yo le entrego todo lo que tengo pero no me haga daño. -Bueno gonorrea pero ¡rapidito!, ¡rapidito!. –mientras decía eso esculcaba por todas partes al muchacho. Tan pronto se cercioró que no traía nada más encima se alejó tranquilamente con la billetera, el reloj y el celular de Emanuel. Emanuel tembloroso recogió como pudo sus cuadernos, su corazón latía con fuerza, y echando un vistazo hacia la puerta verde observó que el individuo que lo había atracado ingresaba al lugar. Pasado el susto salió de esa calle e ingresó a una cafetería que quedaba en una cuadra aledaña. El tendero le preguntó: ¿le sucede algo señor?,. Si me acaban de atracar allá.- Indicó Emanuel con su dedo índice.
Es usted muy ingenuo cómo se le ocurre pasar por esa calle, es muy peligrosa. Si pero yo había pasado antes y nada me había ocurrido. Pues contó con suerte porque a esa calle llegan todos los raponeros y se meten a la olla a consumir drogas. O sea que en esa puerta de madera verde es una olla- Pues claro- contestó el tendero- Yo he visto apuñalar a muchas personas por quitarles cualquier cosa que lleven encima y se esconden ahí. Porque no ha denunciado eso señor. ¡Ah amigo! parece que usted no conoce esta ciudad. Si me pongo a abrir la boca no falta el chulo que me sapié y me matarían. Y porque no va a la policía. Ja, ja, ja, que buen chiste, porque los polochos trabajan con los reducidores y hasta los protegen. Gracias señor hasta luego- Emanuel salió presuroso del lugar mirando hacia todos los lados rumbo a la universidad.
FIN TERMINOLOGÍA:
Pirobo y gonorrea: Expresiones populares de insulto u ofensa a las personas, similar a decir maricón, malparido etc. En el diccionario de la lengua tiene otro significado diferente. Polocho: policía Olla: lugar de consumo de drogas de diversa índole (bazuco). Raponero: persona que arrebata algo a otra al cogerla desprevenida. Se trata de un ladron callejero. Chulo o sapo: se trata de un informante.