Aunque el suicidio se presenta en todos los estratos sociales he querido hacer énfasis en las personas acaudaladas, que aparentemente lo tienen todo.
En realidad, lo hacen motivados por causas diferentes al dinero, ya que este solo es un factor que satisface las necesidades materiales y no espirituales de los individuos.
Muchas personas acaudaladas desafortunadamente consumen sustancias psicoactivas como forma de evadir la realidad, lo que se constituye en un factor de riesgo para su salud mental, el deterioro de su relación afectiva y el entorno, siendo propensos a desarrollar cuadros depresivos permanentes.
Los suicidios llevados a cabo por personas exitosas se deben analizar en su propio contexto, teniendo en cuenta que ha estado siempre presente en las diferentes sociedades y señalado por la religión cristiana como un hecho contrario a la ley natural.
Si bien es cierto que a cada individuo los problemas lo afectan de una u otra manera dependiendo de la actitud que asuman frente a la vida,