SERIE: NOVELAS CORTAS DE LA COTIDIANIDAD
NOVELA N. 3 LA VECINA ¿Guillermina que hace ahí asomada a la ventana? Nada mami, solo estoy mirando. – en voz bajaMarinita ¿si vez ese carrazo que se compró la vecina de al lado? Sí, yo creo que esa vieja debe estar haciendo algo raro porque de un momento a otro resulto con automóvil y se ve que es costoso. Yo no creo. Mira en internet la marca y salimos de dudas.- Marina corrió al computador a investigar el valor. ¡ Tan caro ¡. Guillermina imagina que ese carro cuesta mucho. ¿Cómo haría esa vieja con que plata si no tiene ni marido es una solterona? –Dijo Guillermina, mientras sus ojos le lagrimeaban-. Y o no me voy a quedar atrás mañana lunes voy a solicitar un préstamo a la cooperativa, con la prima que llega en estos días completo la cuota inicial y me compro una nave para no dejarme echar cacho. Me parece muy bien Guillermina. A la mañana siguiente: Hola doña Bertica está muy hermoso su carro la felicito por esa adquisición. Gracias Guillermina lo tiene a la orden. ¿Va para la oficina?. Si señora. Si quiere la acerco. No gracias doña Bertica es que tengo que hacer otro asunto antes y me demoro. De todas maneras gracias. Chao. - Bertha pensando - yo creo que la dejé matada y con lo presumida que es, estará que se muere de la envidia. Su supiera que estoy debiéndolo y que me quedaron unas cuotas altísimas, pero bueno vale la pena el esfuerzo. En la oficina: Don pascual voy a solicitar un préstamo a la cooperativa para libre inversión. ¿Qué monto máximo me pueden prestar? Hasta tres veces lo que tiene ahorrado. Mmmm, grave porque necesito más. Ni modos Guillermina. Tocará, ya le lleno el formulario para que porfa me lo aprueben lo más pronto posible. A la semana siguiente: Marinita adivina que pasó. Te aprobaron el préstamo. Si y ya abonaron el valor de la prima, y aunque no es mucho espero que me alcance para la cuota inicial del carro, ¿me acompañas esta tarde después de que salga de la oficina y vamos a mirar en los concesionarios? Bueno Guillermina esta tarde nos vemos- colgó el teléfono-. En el concesionario: Don Uldarico ¿así me dijo que se llama? Si señora. Don Uldarico me gustó este auto cuanto debo dar de cuota inicial y como me quedan las cuotas mensuales. Déjeme ver –sacó la calculadora y efectuó algunas operaciones matemáticas. Doña Guillermina este carro como es de alta gama tiene un valor “X”. Tan caro don Uldarico ¿por qué tanto? Es por ser modelo nuevo. Pero si quiere le muestro uno que se acomode más a su presupuesto. No, no, ese está bien hagamos los trámites para poderlo llevar pronto. Bueno doña Guillermina tan pronto tenga una respuesta de la aprobación del crédito me comunico con usted –dijo el vendedor-. Muy bien hasta luego.
Saliendo del concesionario: Guillermina me gustó mucho ese carro es super elegante y no me imagino cuando la vecina la vea montado en él. Además es más costoso. Si me va a tocar trabajar duro para poder pagarlo, pero con tal de ver la cara que ponga vale la pena. A mí no me va a humillar con ese tiesto que se compró el mío va a ser mejor. A la semana siguiente: Si aló ¿con quién hablo? Con Uldarico el vendedor del concesionario. Ah, hola ¿cómo está? ¿Qué noticias me tiene? Doña Guillermina lamentablemente su crédito no fue aprobado. Pero ¿por qué?, si yo puedo pagarlo. La entiendo doña Guillermina pero el problema es que en su desprendible de pago usted tiene un crédito que está pagando y por reglas de la empresa su nivel de endeudamiento superaría el 40% de sus ingresos y no fue posible otorgarle dicho crédito. La única solución seria es que consiguiera más efectivo para reducir las cuotas mensuales. Gracias de todas maneras –dijo guillermina mordiéndose los labios con rabiaMarina imagínate que no me aprobaron el crédito pero yo no me voy a quedar así, quiero que me acompañes al mercado del usado y buscamos un auto bonito, no importa que sea más viejo y lo compro de contado. Me parece bien.- luego de andar mucho rato buscando por fin compro un vehículo-. Guillermina y Marina llegaron a la casa pitando para llamar la atención de la vecina quien al escuchar la algarabía se asomó con sigilo por detrás de las cortinas teniendo cuidado en no dejarse ver. Con que Guillermina se compró esa lata de sardinas. Ya la veré más adelante empujándolo para entrarlo al garaje. Ja, ja ja.
FIN TERMINOLOGÍA: Echar cacho: en el argot popular significa que una persona no se deja humillar, pisotear por otra por una u otra situación que se presenta en la vida diaria.