La era de ¿La comunicación o información? Está claro que la civilización y con está los avances tecnológicos han crecido, mejorado y desarrollado cosas y circunstancias que quizá ya no provoquen mayor impacto para los seres de nuestras sociedades, basta con un “Ah wey!... que chido”, para dar a conocer que 4 palabras manifestamos todo un sinfín de emociones, mismas que hace tiempo tuvieron gran importancia y eran representadas con la mayor cantidad de gestos, signos y palabras posibles. Quizá nos suena absurdo, o tonto el hecho de pensar que estas circunstancias podrían repercutir a nuestra sociedad, quizá no sea más que una simple exageración de mi parte el replantear lo que autores como Migdalia Pineda, han tratado de hacer comprender a la comunidad de comunicólogos; o quizá mis palabras logren hacer un eco en la mentalidad de cada uno de ustedes y podamos analizar el futuro no solo de la comunicación, sino de la civilización. Comparto al igual que todos los jóvenes y no tan jóvenes de nuestra edad, su impresión al respecto de la tecnología y como es que ha venido a mejorar la calidad de vida de las sociedades, como es que el surgimiento, llegada e implementación de esta a beneficiado en todo sentido a la humanidad, sin embargo existen circunstancias que han sido provocadas desde el surgimiento de las nuevas tecnologías, mismas que con el paso de los años han provocado daños que a simple vista son diminutos, pero que si se analizan con detenimiento, pueden provocar un colapso social. Es irónico como en la era de la información, donde la comunicación juega un rol importantísimo, es justamente esta (comunicación) el elemento que se va desvaneciendo de a poco y que puede colapsar a la civilización. Este fenómeno se ha dado a medida que las nuevas tecnologías de la información han ido tomando fuerza y gran alcance; aun cuando en nuestra sociedad es mínimo el porcentaje de la población que cuenta con acceso a ellas, el porcentaje que si tenemos acceso a estas hemos contribuido al desarrollo de este fenómeno comunicacional que ha ocasionado la ruptura en el modelo de la comunicación, misma que exige la creación de un nuevo paradigma que rescate el proceso comunicativo y genere consciencia en todos nosotros. El verdadero problema con este proceso de comunicación, es que el ser humano ha dejado de comunicarse, la comunicación ya no impera en los seres humanos, ahora lo es la información y justo este es el verdadero problema: los seres
humanos ya no se comunican, solo transfieren información, códigos, signos, emoticonos, y otros tipos de informaciones digitales, que eliminan el proceso de la comunicación, la retroalimentación ya no es importante, ahora solo importa la transferencia de códigos que desplieguen un sinfín de información que represente algún tipo de utilidad, económica o cognitiva para nosotros. Si crees que esto es una verdadera exageración y que lo que estoy tratando de decirte en verdad no tiene sentido, o simplemente te es irrelevante, entonces espera a que tu descendencia te escriba una carta en un lenguaje que no puedas entender, o te mande un E-mail, con solo emoticonos, puntos y comas, paréntesis y comillas diciéndote cuanta cosa se le plazca y te llame anticuado por no saber de que se trata. A comparación con muchas otras ciencias las ciencias de la comunicación tardaron mucho más tiempo para llegar a ser reconocidas como lo que son, para que en un breve instante en el progreso de la humanidad dejen de tener tal importancia, y con ello pierdan todo lo que durante años buscaron obtener; ¿Sigues pensando que es tonto? Nuestros niños ahora juegan solos, ya no se hacen rodear de amistades tangibles sino digitales, ¿Eso tampoco te preocupa?, me pregunto si acaso ¿Tienes la menor idea de lo que hace tu hermano(a) sobrino(a) primo(a) menor tanto tiempo frente a una computadora? Si bien es cierto que la era de la información ha logrado desarrollar en los niños habilidades, motoras y cognitivas superiores a las que en cualquier época, también lo es el hecho que los niños corren mayor peligro que nunca frente a un computador, que no solo corren el riesgo de corromper e interrumpir su infancia, sino de crecer siendo seres solitarios relacionados solo con personajes digitales que han conocido a lo largo de sus inocentes vidas. Piénsalo un segundo quizá no es tan descabellado o absurdo como parecía, o tal vez está en tus manos el salvar la inocencia de un menor, debo aclarar que no intento ni por un segundo decir o hacer valer la idea que la tecnología es mala, o que debemos oponernos al progreso de esta, solo que debemos estar conscientes del riesgo que implica para nuestros niños en el presente y como puede afectarlos en el futuro.