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Buscas explotar tus ventas en línea pero ¿tú comprarías tu producto o servicio?
De cierta manera, el sólo hecho de pensar resolver la pregunta, ¿Tú comprarías tu producto o servicio?
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Podría ser uno de los principales errores que se cometen al momento de vender en línea actualmente.
NO SE TRATA DE TI, SE TRATA DE TU CLIENTE.
Pensar si lo comprarías o no, sólo significa que tienes cierto desconocimiento de quiénes están comprando en línea un producto como el tuyo, o no defines concretamente a quién va dirigido todo tu esfuerzo digital. Hay quienes creen conocer al público que comprará, por el simple hecho de que comprarían su propio producto o servicio, y ¡claro! ¿Quién no lo haría, cierto?
¡Pero tu no eres tu cliente!, Empresas que pien‐san en vender como si ellos mismos están comprando, son las que no están entendiendo el poder de los datos y herramientas digitales.
Fundamenta tus decisiones y esfuerzos digi‐
tales en datos y experiencia.
Imagínate este escenario: Eres un apasionado del ciclismo de montaña, lo practicas y cono‐ces todo al respecto, por su puesto que cumples con las características de un cliente potencial para un sitio que vende bicicletas. Esa pasión te lleva a crear tu propio sitio para vender artículos de ciclismo. Ahora eres un amante del ciclismo de montaña con una tien‐da en línea y ahí cambia la perspectiva al mo‐mento que tus prioridades, junto con las deci‐siones, se ven influenciadas ante los objetivos comerciales que se quieren alcanzar.
Aprende a interpretar los datos y estadísticas que las plataformas digitales te ofrecen, ahí está el ver‐dadero valor de todos los esfuerzos que hagas en cualquier red digital, ¡deja de adivinar y comienza a interpretar! Si los resultados arrojan que tu audiencia está comprando envuelto, ¡vendelo envuelto!, no importa si tu prefieres sin envoltura o si cuesta un poco más de trabajo, puedes ajustarte a ello. No to‐mes decisiones basadas en ti, mejor toma decisio‐nes basadas en tus clientes potenciales.
Seamos sinceros, todos romantizamos en algún momento nuestro negocio, creemos que sabemos todo sin fundamentar, o que es igual que hace 1 mes; mientras que el mundo digi‐tal cambia todos los días.
Al final lo importante no es detenerte a pensar si te comprarías a ti mismo o no, siempre y cuando, separes tus acciones digitales perso‐nales de las decisiones empresariales y co‐miences a interpretar datos para decidir.
