para dior
y vos, ¿qué harías por amor? Mucho menos de lo que todos se imaginan. Tengo otras prioridades. La Maga
Cambiar de país, de idioma, de cultura, de planes. Sueño con uno de esos amores que atraviesan tu destino. Mae
Compartir una cuenta bancaria. Es bastante ¿no?
Criar los hijos que tuvo con otra mujer como propios. Lunita
Aprender a no ser tan autosuficiente e individual. Dejar de lado el mambo de la todopoderosa. Mujer Maravilla
Compartir mi espacio más intimo y personal: ¡el baño! Estrella
Cindy
¿Qué no haría por amor? Rochi
Soy atea pero no tendría problemas en casarme por iglesia, bautizar a mis hijos o hacer un bar mitzvah. La Tana
Sacar de mi cama al otro gran amor de mi vida ¡mi gato Carmelo! MissMiau
Cortaría las rosas más hermosas de mi jardín ¡y se las llevaría de regalo! Miss Dior
Sutil, embriagador, etéreo y mágico. Un perfume y un gran amor pueden tener mucho en común. Si las fragancias, como los amores, se llevan en el cuerpo, se transmiten en el aire y se perciben alrededor, tal vez el amor tenga un aroma propio. Si el amor fuera una flor sería una rosa, como el corazón de esta emblemática fragancia. De eso se trata la asombrosa alquimia de un perfume: capturar emociones en notas olfativas que mutan cuando entran en contacto con nuestra piel y con el roce de otra. Los cambios no son del todo predecibles y siempre son mágicos, como sucede cuando vivimos un gran amor.