Hombre que mira al cielo * La sociología es una ciencia y no una “ingeniería social”. Decir que es una ciencia nos lleva a comprender que tiene un objeto de estudio definido y un bagaje teórico importante. Los esfuerzos por arrastrar a la sociología al cinismo de los intereses políticos han hecho que sea humillada al punto de encontrarse, en la actualidad, en un momento de incertidumbre por no poder abordar concretamente los acontecimientos de la sociedad moderna. * La sociología existe como teoría y como práctica (al menos esto es lo ideal). Las aspiraciones de los científicos sociales han dependido de las coyunturas económicas, políticas y culturales de los países en los que han elaborado sus teorías, sin embargo la herencia teórica responde a necesidades generales, como la búsqueda de la igualdad, la libertad, la solidaridad, etc. * La búsqueda de una sociología autónoma aun es asunto del quehacer del sociólogo, como también aplicar las teorías sensatamente e incurrir en la intervención social de una manera transparente, el libre mercado ha excluido muchas de estas tareas y el que hacer del sociólogo se subordina al consumo. * La facultad de sociología, es un espacio de relaciones, teóricas y prácticas, en ellas no se forman sociólogos, a no ser por el membrete del titulo profesional, el sociólogo se forma en su inserción con los actores sociales, en la sociedad misma.
Mientras pasa la estrella fugaz acopio en este deseo instantáneo, montones de deseos hondos y prioritarios. Por ejemplo que el dolor no me apague la rabia, que la alegría no desarme mi amor, que los asesinos del pueblo se traguen sus molares, caninos e incisivos y se muerdan juiciosamente el hígado. Que los barrotes de las celdas se vuelvan de azúcar o se curven de piedad, y mis hermanos puedan hacer de nuevo el amor y la revolución. Que cuando enfrentemos el implacable espejo no maldigamos ni nos maldigamos. Que los justos avancen, aunque estén imperfectos y heridos. Que avancen porfiados como castores, solidarios como abejas, aguerridos como jaguares. Y empuñen todos sus no es para instalar la gran afirmación. Que la muerte pierda su asquerosa puntualidad. Que cuando el corazón se salga del pecho pueda encontrar el camino de regreso. Que la muerte pierda su asquerosa y brutal puntualidad, pero si llega puntual no nos agarre muertos de vergüenza. Que el aire vuelva a ser respirable y de todos. Y que vos muchachita sigas alegre y dolorida, poniendo en tus ojos el alma. Y aparte tu mano en mi mano, y nada más. Porque el cielo ya está de nuevo torvo y sin estrellas. Con helicóptero y sin dios. Mario Benedetti* ——————————— * Poeta uruguayo, murió el domingo 17 de mayo del 2009. Hasta siempre camarada Benedetti.
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efinir la Sociología como la ciencia que estudia la sociedad humana seria una afirmación vacía y poco entendible. Y es que responder a esta pregunta no es nada sencillo, y se complica aún más en tiempos, como los actuales, en que la Sociología atraviesa una severa crisis. Emile Durkheim, por ejemplo, quien se inspiró en algunas teorías de Auguste Comte para renovar la sociología, afirmaba que esta debía estudiar los HECHOS SOCIALES, pero debería acercarse a ellos como si fueran cosas. Para Durkheim uno de los retos de la sociología era desarrollarse como una ciencia autónoma. Durkheim buscó distinguir a la sociología de la filosofía por un lado y de la psicología por el otro, es por esta razón que se le considera como uno de los padres fundadores de la sociología. Por otro lado, Max Weber, contemporáneo de Durkheim, tomó un camino diferente. El empleó la Ciencia política, la Economía política, la Filosofía de la cultura y del derecho, los estudios religiosos. Basándose en una tradición de la filosofía alemana (sobre todo Wilhelm Dilthey), Weber afirmaba que estas ciencias son diferentes de las ciencias naturales ya que tienen su propio método. Ellas proponen una comprensión de los fenómenos colectivos antes que la búsqueda de leyes (es el método comprensivo).
Por su parte Marx desarrolló una teoría muy particular en función a la sociedad. Marx, sin embargo, no se refiere a esta como sociología sino como materialismo histórico, ya que bajo su epistemología (la dialéctica heredada de Hegel y convertida en materialismo dialectico por Marx y Engels) seria imposible afirmar la idea de una sociología similar a los demás teóricos. Y precisamente ahí radica la grandeza de la teoría marxista de la sociedad: en entregarnos un corpus teórico total para el entendimiento de la sociedad como un todo entrelazado, dinámico y en constante desarrollo.
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a diferencia de estas perspectivas radica en su epistemología (forma de obtención del conocimiento científico) y por ende en su filosofía (concepción del mundo). En la actualidad, sin embargo, estas definiciones se debilitan debido a que el modelo estructural – funcional que domino la reciente sociología mundial no logró reponerse de la crisis de los sesenta y se difumino en un centenar de modelos como la teoría de intercambio, etnometodología, fenomenología, nuevo interaccionismo simbólico, approach estructural – individualista, etc. Es decir, “lo que fue concebido como el paradigma de la sociología es hoy sólo uno de los muchos y ni siquiera el más aceptado. Ello a deslegitimizado la sociología como profesión” (Emilio Lamo de Espinoza). En efecto, dicha crisis se ha agudizado al punto que sociólogos de la talla de R. K. Merton (Sociological Ambivalence) y Pierre Bordieu (La sociología. ¿es una ciencia?) no evadan el problema y mas bien afirmen el carácter científico de la esta.
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n el Centro de Estudios Sociales “Manuel Gonzales Prada” pensamos, sin embargo, que la sociología aún puede reflotarse de la severa crisis que atraviesa. Este trabajo, pensamos, debe ser desarrollado desde cada espacio vinculado al quehacer sociológico, para de este modo integrar dos realidades (producto de la crisis señalada), que particularmente en la sociología peruana, han caído en una aparente contradicción irreconciliable. La diferenciación entre la sociología como ciencia (teórica) y la sociología como profesión (proyectos), pensamos, debe ser entendida de manera correlacional y no excluyente. Se ha pretendido difundir la idea de que ambos espacios – la sociología como ciencia y la sociología como profesión – no se necesitan una de otra, en el CES “MGP” pensamos que esta afirmación es equivocada. Pensamos que la sociología como profesión al apartarse de la teoría sociológica dejaría de ser sociología para convertirse en una disciplina similar al trabajo social, pero a su vez asumimos que una sociología como ciencia por si sola se acercaría más a la filosofía y por ende se apartaría del camino de la sociología. La teoría (sociología como ciencia) es importante para optar por un rumbo, y la aplicación (sociología como profesión) es básica para concretar dicho rumbo. Separar estos elementos debilitaría el que hacer sociológico y lo apartaría de su camino como, nosotros en el CES “MGP”, lo entendemos: como el estudio de la interacción humana en relación al proceso histórico lógico de la sociedad.