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opinión MARÍA LUY Y FRANCESCO MARIOTTI: EL RETORNO DE LAS LUCIÉRNAGAS

Si nos quedamos callados nos matan y si hablamos también, entonces hablamos (Cristina Taquina Bautista).

Por Israel Tolentino

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“Luciérnaga que te apagas y prendes/ que te marchas y vuelves (…) Luciérnaga me iluminas me opacas/ me das vida y me matas…” el lugar donde habitan estas estrellitas con alas, mide por su cantidad, el grado de contaminación, algo así, deduce Francesco, muchos años observándolas, empatando su vida con ellas.

La tarde apaga el cielito azul, una humareda de llantas en la pista empieza a compartir la noche, desde arriba se ven las invasiones como ruinas precolombinas, la luz diagonal ayuda en ese efecto. Habitar en lo alto, no es necesariamente sabiduría, espiritualidad y paisaje, algo de ello sobrevive, pero es, en profundo, como sucedió con los animales y las plantas, el reducto,

Mariotti (Berna, 1943) desde que se conocieron, son dos artistas que llevan sobre su vida y obra la alegría y la tristeza de ser peruanos, aman esta patria ancha y ajena partida en tres mitades. Francesco recuerda al amigo que visitó en Tingo María y no pudo resistir los embates del terrorismo; María, por fin, pudo caminar por el entramado de árboles donde vió la luz pluricultural.

El contexto social peruano no es una coyuntura sino una repetición: los 60s: Velasco y la FFAA. Los 80s: Belaunde, Sendero Luminoso, Alan, el MRTA; los 90s: terrorismo, fujimorismo, toledismo, ollantismo... En este momento, Dina Boluarte, dictadura congresal y los partidos que han sido literales a su infinitivo, subsisten partidos.

“un festival de arte total que quiere presentar todas las manifestaciones culturales”. Mover de sus casillas al establishment limeño. “Romper con el individualismo y circuito de Galerías y Museos. Se acercaron artistas, como Herbert Rodríguez y Armando Williams; éramos un colectivo y no un grupo cerrado”, recuerda María. El manifiesto de entonces, tan actual como los problemas de agua y luz: “las artes tradicionales, la evolución de nuestras expresiones artísticas populares, las artes aplicadas, las técnicas modernas de masificación integradas como acto conceptual con los rituales de la vida diaria, (…) Las experiencias de grupos y talleres colectivos son un aporte importante para lograr expresiones artísticas masivas basadas en los rasgos auténticos de la cultura y la vida material Nacional y Latinoamericana hacia la autodeterminación y por el ascenso de las luchas de liberación en favor del progreso la huida frente al estado asesino, matador de cuerpos, conciencias y almas.

Pareciera que el sistema/nación no ha cambiado, en broma a alguien que retorna al país le podemos decir: no te preocupes, a tu regreso la patria seguirá siendo la misma. Entonces, viene el mito de Inkarri a la escena neuronal y en la mirada aparece una lucecita, como la de una luciérnaga y en ese frágil instante se lee: las provincias se unen, el cuerpo descuartizado hace centurias se está juntando, las formas no serán con la delicadeza del aroma de la rosa o la caricia de un hijo, pero se unen, vuelven las conexiones, las articulaciones. ¡Inkarri está con nosotros y somos millones!

Maria Luy (Puerto Maldonado, 1950) y Francesco

María y Francesco, junto con Mariella Zevallos, Juan Javier Salazar y Charo Noriega fundaron Huayco EPS (Estética Proyección Social) en 1979. Años atrás, Mariotti, invitado por Alfonso Castrillón a realizar una muestra individual, le propone producir CONTACTA social, como contrapartida al subdesarrollo, la represión y la dominación”.

Mariotti venía de estar presente en 1968 en la IV documental de Kassel: Proyecto Geldmacher – Mariotti. Momento vital en su joven carrera, algo así como estar convocado a jugar en la selección Nacional con 17 años. María se había “formado” en Bellas Artes y en ese ánimo y sexto sentido, intuía que la cosa no iba por esos derroteros que cuadriculaba la cabeza.

María y Francesco permanecen atentos a lo que sucede en Latinoamérica, desarrollan el Proyecto de: Fireflies Memorial 2022. Para no olvidar a los defensores medioambientales asesinados. No huyen de los peligros y el Perú continúa siendo el cordón umbilical de sus vidas, con el mismo espíritu de cuando se conocieron y vieron cómo un huayco, no sólo modifica el territorio sino las utopías (Amarilis, enero 2023).

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