EL SER ALIENADO III
Carlos Marx
Tréveris 1818- Londres 1883
MARIO BLACUTT MENDOZA 1
Marx ha heredado algo de cada uno de nosotros, para bien o para mal
En ĂŠl vemos gran parte de nuestro legado, transformado por el tiempo
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Descubri贸 la Alienaci贸n y quiso dejarnos la forma de evitarla; pero no pudo ser
Su concepto de Alienaci贸n no tiene parang贸n en la historia del pensamiento
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¿Nos dejó un pensamiento nuevo? Fue su idea de la alienación algo que estaba aún por develar?
Creemos que sí; aun separados por la brecha del tiempo, sabemos que develó algo nuevo
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Veamos la manera en que llegó al concepto de Alienación
Corren los años de 1843 Marx polemiza con Bruno Bauer, ambos de la juventud hegeliana
Sostiene que los judíos no podrían obtener su emancipación política
Bruno Bauer ha escrito un ensayo referido a la situación de los judíos en Alemania
Pues el Estado Alemán era cristiano, lo que impediría la emancipación política judía
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Marx escribe «La cuestión Judía» en la que analiza el tema planteado por Bruno Bauer
Pero que aún quedaban tareas pendientes sobre los procesos de Alienación del hombre
Dice que el Estado burgués había liberado a la sociedad de la enajenación religiosa
Cree que es llegada la hora de identificar plenamente la autoenajenación humana
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Plantea que, paralela a la autoenajenación humana, estaba la tarea de la emancipación
Pero no sólo una emancipación política, tal como lo señala Bruno Bauer
No sólo una emancipación religiosa, como la había propuesto Feuerbach
Afirma que era necesario referirse a la necesidad de una emancipación plena del hombre
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La Revolución Francesa había liberado al hombre del yugo terrible impuesto por el feudal
Los feudales habían declarado y establecido su dominio en nombre de la divinidad
Los burgueses habían impuesto su dominio, dice, no en nombre de Dios, sino de la Libertad
Con la Revolución Francesa, el Estado había sido despojado de su manto religioso
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Pero, declara, la Revolución no ha eliminado la Religión, la enajenación del hombre
Afirma que la Sociedad de los EEUU había puesto la religión en la Sociedad Civil
Deduce que la emancipación política no termina con la enajenación religiosa
La emancipación política tampoco es, dice, la solución a la enajenación integral del Ser
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Dice que es necesario emancipar al hombre de todas las enajenaciones
Señala que la cuestión judía no podía ser solucionada sólo con la emancipación política
Apunta al hecho de que tanto judíos como cristianos están enajenados a la religión
Que ambos están enajenados a un Estado que priva al productor de gran parte de lo que produce
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Es entonces que, por vez primera, habla no de enajenación, sino de Alienación
El Ser Humano está Alienado a la Religión, al Estado y a los intereses de la burguesía
La Alienación, así concebida, es el nervio que lo lleva al centro mismo de lo que sería su idea
Era preciso liberar a la Humanidad íntegra de toda clase de Alienación
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Queda pendiente una de las interrogantes de mayor importancia en su visión
¿Quiénes se encargarían de liberar al hombre de la Alienación general?
Había tenido que emigrar de Alemania para residir en la Francia de las Revoluciones
Allí vio a los trabajadores; estaban más organizados y tenían ya conciencia social
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Comparó la gran diferencia con el sistema feudal todavía imperante en Alemania
La emancipación total del hombre exigía la acción práctica que concretara la teoría
Pensó que la emancipación no podía lograrse esgrimiendo la idea abstracta o el amor
¿Quiénes se encargarían de liberar al hombre de la Alienación general?
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Sólo los que sabían del sufrimiento que significa ser una parte de la máquina productiva
Sólo el proletariado
Únicamente los que no explotaban a nadie ni expropiaban el trabajo ajeno
¡Fue del análisis de la «Cuestión Judía», que llega al concepto más importante : la Alienación!
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De allí nace el slogan que se haría universal en todos los idiomas: ¡Proletarios del Mundo Uníos!
Del análisis de la Alienación surgiría un nuevo sistema de pensamiento
El que se apoderaría de la imaginación y las esperanzas de miles de millones de seres
Y también, el que les traería frustración, desencanto y desaliento y resignación
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Lo sorprendente para mí fue la manera en que Marx llega al concepto de Alienación, partiendo de un polémica sobre los judíos
¡Quedé encandilado! Nunca había visto una muestra tan precisa de deducción e inferencia
Leí «La Cuestión Judía» cuando estaba en primero de facultad de la Universidad Juan Misael Saracho de Tarija
En realidad, fue mi primera lección sobre Metodología o, lo que enseño ahora: Epistemología
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En ese tiempo, nuestros mayores decían:
Quien no ha sido marxista en su juventud, nunca ha tenido conciencia de ser joven Quien sigue siendo marxista después de ser joven, no tiene conciencia de la realidad
Es cierto; debo admitirlo: los años cubren de polvo las ilusiones y los corazones las dejan atrás: sé que nunca veré la emancipación total del Hombre Pero, nada ni nadie me puede prohibir convocar en mi mente el recuerdo de los tiempos en los que yo era joven; esto es, cuando era iluso
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Cuántas ilusiones perdidas, cuánto desengaño, cuánto sufrimiento
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En la actualidad hay dos sistemas mundiales de pensamiento Cada uno con su propia Utopía El Liberalismo Clásico: Algún día la suma de los intereses individuales conformará el interés general Por el otro lado, está la utopía de Marx Algún día la Naturaleza será parte de la Naturaleza Humana y la Naturaleza Humana será parte de la Naturaleza Al comparar los dos sistemas, tan diferentes uno del otro, sin embargo hay algo que no podemos pasar por alto: Un Sistema de Pensamiento sin una Utopía, es sólo una racionalización ideológica vacía La Utopía es el alma de un Sistema Por eso es que ambas visiones perduran en la historia
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