“…Las mujeres;… son capaces de todos los entusiasmos y que los deseos de gloria y libertad para la patria”.
Bemoles de… ¡Viva Doña Leona Vicario! Un honroso Retrato y un merecido Réquiem para la más valiente de las mujeres insurgentes. Por Diego Nieto. Hoy millones de mexicanos exclamaremos la arenga del tradicional Grito de Independencia, en cada Alcaldía de nuestra República Mexicana, en las sedes de los Gobiernos Estatales y en el Palacio Nacional de México. Recordaremos aquél suceso, que cubrió de gloria a los héroes nacionales. Hombres y mujeres patriotas serán honrados por sus luchas, pensamientos, sueños y aportaciones en la lucha libertaria de nuestra Nación. Pues, “La voz de la libertad vibró en Dolores”, escribió Salvador Díaz Mirón. Entre esos nombres, Leona Vicario, retumbará más entre las mujeres con mayor ímpetu, pues las representa por romper con el paradigma de la época y sobresalir como una de más valientes. María de la Soledad Leona Vicario Fernández de San Salvador, hoy su nombre se escribe con letras de oro; Leona Vicario, apoyó por diferentes medios la causa de la independencia, actuando como informante, facilitó el paso de las tropas y les dedicó parte de su fortuna. Fue enjuiciada, pero rescatada por los insurgentes. Se casó con el también patriota Andrés Quintana Roo, juntos, acompañaron a las tropas del máximo dirigente independentista Don José María Morelos, viviendo peligros y penurias, renunciando así a los privilegios que le brindaban dentro del grupo social al que pertenecía. Al triunfo de la causa libertaria, en 1822 les fueron devueltos parte de los bienes que les habían sido confiscados y a su muerte en 1842, ha pasado a ser considerada heroína nacional. Es conocido que como parte de los “Guadalupes” Morelos fue financiado por Doña Leona, a quién “El Rayo del Sur” siempre le agradecería “Ya que la señorita Vicario está bajo las alas del águila mexicana, muy justo es protegerla” – narra Eugenio Aguirre, en su libro titulado “Leona Vicario. La insurgente”. En esa decorosa obra literaria se presenta a la “espía, organizadora de grupos de mujeres, correo y patrocinadora de la gesta de independencia hasta el grado de sacrificar su fortuna personal”, que enfrentó “la persecución de las autoridades virreinales, la miseria y la censura familiar y social. Luchó al lado de los oprimidos, los pobres y, en algunas ocasiones, de los vencidos; nunca se rindió ni acudió al indulto y perdón de la corona. Al lado de su esposo Andrés Quintana Roo y otros grandes insurgentes, compartió el triunfo de la causa, su inteligencia y corazón supieron mantener, en el caos, la esperanza y el amor” –describen en la espléndida novela histórica.
La figura de Doña Leona Vicario fue abordada por la industria televisiva en 1982, en la telenovela cuya producción corrió a cargo de Alexis Pola para el Canal 4 de la Televisión Independiente de México, siendo protagonizada por la hoy primera actriz Diana Bracho, acompañada de un gran reparto como lo fue por Aarón Hernán, Ana Bertha Espín, María Rivas, Queta Lavat, Julio Monterder, entre otros, siendo dirigida por Luis Guillermo Basurto con el guión de Ricardo López Aranda. En Gritos de muerte y libertad le rinden homenaje, en el episodio “Retrato de una Leona”, serie de televisión que aborda la guerra de la Independencia, producida por Televisa, los 13 episodios, fueron asesorados por grandes historiadores como Enrique Krauze, estrenada el 30 de agosto de 2010 con motivo del Bicentenario de la Independencia de México y finalizó el 16 de septiembre del mismo año. En el noveno episodio la retratan fielmente, encarnada por la actriz Cecilia Suárez, al aludir al año 1812, cuando la joven criolla, contra los deseos de la corona española y las de su propio tío, respalda a la causa insurgente, se enamora de un joven pasante de leyes, Andrés Quintana Roo. Al enterarse, el tío de Leona la denuncia con las autoridades y es juzgada por traición a la corona española con la sentencia de la confiscación de sus bienes y a quedarse incomunicada de por vida en el convento de Belén de las Mochas. Ya en 1813, Leona conoce a José María Morelos y Pavón y la reconoce como un ejemplo para la nación por demostrar ser la mujer más valiente de las insurgentes. Finalmente, en 1824, ya consumada la Independencia, Leona Vicario ve cristalizado el sueño que compartió con “El Padre de la Patria” y “El Siervo de la Nación”. Todo un honroso Retrato de la Benemérita de la Patria.
Asimismo, "Réquiem por Leona Vicario", estrenada el 3 de junio de 2015 por Canal Once, basada en la obra del escritor Carlos Pascual, escritor que redactó también el capítulo de “Retrato de una Leona” y que fue galardonado con del Premio Alfaguara 2010 por su obra "La Insurgenta", novela en la que se basa dicha serie del canal del Politécnico, producida por Patricia Arriaga, dirigida por Natalia Beristaín, protagonizada por Ileán Almeguer y Miguel Pizarro, participando actores de renombre como Ana Ciocchetti y Raúl Abalid. En la trama reiteran que Doña Leona financió la guerra de la Independencia, apoyó económicamente los periódicos de los insurgentes y se convirtió en la primera gran mujer
periodista de México. En esa obra televisiva, en los cuatro capítulos se presenta el dilema que ánima la historia. Ya que el Ayuntamiento de la Ciudad de México convoca a que los ciudadanos emitan su voto a favor, como el poeta Guillermo Prieto, o en contra, como lo hiciera la “Güera” Rodríguez, de que la recién fallecida sea nombrada “Dulcísima Madre y Benemérita de la Patria”, para celebrarle funerales de Estado, los únicos hechos a una mujer en México hasta ahora, a los que el pueblo asistió agradeciéndole los servicios brindados, a los cuales se hizo acreedora , para orgullo de las mujeres que participaron en la guerra y que ella representó dignamente. En este merecido homenaje, producto televisivo además de las bellísimas escenas encuadradas en escenarios reales del centro histórico de México, se retrata con rigor histórico la época en que vivió, entre los diversos argumentos de los personajes de su sociedad, que logró superar por ser una auténtica y brillante heroína insurgente mexicana.
Es un ejemplo de vida primeramente para todas las mujeres mexicanas, es un gran personaje histórico que merece seguir siendo homenajeado y recordado por sus aportes a la Independencia Nacional Mexicana. Protagonista que marcó la historia de nuestra nación, pese a las adversidades jamás claudico ni se dejó intimidar en su juicio. La gran mujer fiel a la causa libertaria, primero a las órdenes de Hidalgo, luego a los mandatos de Morelos y finalmente a las decisiones de Guerrero. Nunca aceptó premio alguno. En 1990 sus restos fueron trasladados a la Rotonda de los Hombres Ilustres del panteón de Dolores, su lápida testifica: A la memoria de Leona Vicario de Quintana Roo, la mujer fuerte que consagró su fortuna y sus servicios personales a la cusa de la Independencia, asociándose después a la patriótica tarea de su ilustre esposo. En 1925 serían trasladados a la Columna de la Independencia donde descansan, junto a otros héroes insurgentes. Mujer de valor indiscutible para la historia nacional mexicana, como Sor Juana lo es para la Literatura o Frida Kalho para la pintura. Hoy, casi nadie hace lo que hizo Doña Leona Vicario. Aplaudamos por siempre a la patriota que iluminó a Morelos no sólo económicamente sino ideológicamente. Pues la libertad, apuntó Octavio Paz, se ejerce diciendo sí o no. Ella, al igual que los demás héroes patrios, dijo que sí participaba, que sí donaba, que sí quería una nación libre, contribuyendo así en la construcción del futuro de la República Mexicana. Por todo ello. Que sí; ¡Viva México! ¡Viva la Independencia! ¡Viva Doña Leona Vicario!