4 minute read

Propuesta cristiana

Next Article
ATRIO

ATRIO

Templos vivos del Dios vivo

Queridos hermanos y amigos:

Advertisement

En la segunda lectura de la Misa de este domingo (1 Corintios 3, 16-23), el apóstol san Pablo nos pregunta a cada uno de nosotros: “¿No sabéis que sois templo de Dios y que el Espíritu de Dios habita en vosotros?”.

Seguramente, los que oyeran en tiempos de san Pablo esta pregunta quedarían sorprendidos; por una parte, les evocaría una construcción o un edificio con un uso religioso y morada de la divinidad. A los judíos les recordaría el templo de Salomón en Jerusalén, lugar donde estaban depositadas las tablas de la Alianza y era signo de la presencia de Dios en medio de su pueblo. A nosotros mismos, nos puede también recordar la iglesia en la que celebramos el culto a Dios.

San Pablo emplea esta palabra, “templo”, dándole un nuevo sentido, ya que, el templo al que hace referencia no es el construido por piedras y otros materiales, este templo somos nosotros mismos. Es decir, somos un templo “vivo”, en el que Dios mismo, el Espíritu Santo, habita en nosotros. El papa Francisco dedicó una catequesis del miércoles a este tema (26 de junio de 2013), y lo explicaba con estas palabras: “Lo que estaba prefigurado en el antiguo Templo, está realizado, por el poder del Espíritu Santo, en la Iglesia: la Iglesia es la «casa de Dios», el lugar de su presencia, donde podemos hallar y encontrar al Señor; la Iglesia es el Templo en el que habita el Espíritu Santo que la anima, la guía y la sostiene. Si nos preguntamos: ¿dónde podemos encontrar a Dios? ¿Dónde podemos entrar en comunión con Él a través de Cristo? ¿Dónde podemos encontrar la luz del Espíritu Santo que ilumine nuestra vida? La respuesta es: en el pueblo de Dios, entre nosotros, que somos Iglesia. Aquí encontraremos a Jesús, al Espíritu Santo y al Padre”.

Este templo nuevo, ha tenido su inició, como señala el Papa en su catequesis, con la Encarnación de Jesús: “El antiguo Templo estaba edificado por las manos de los hombres: se quería «dar una casa» a Dios para tener un signo visible de su presencia en medio del pueblo. Con la Encarnación del Hijo de Dios, se cumple la profecía de Natán al rey David (cf. 2 Sam 7, 1-29): no es el rey, no somos nosotros quienes «damos una casa a Dios», sino que es

Charla de Cáritas en Illueca

CÁRITAS EN EL MUNDO RURAL. El voluntariado de Cáritas haciendo camino

Día: Martes, 25 de febrero 2020 Lugar: Salón de actos del Ayto. de Illueca, a las 18.30 h. Proyecto cofinanciado por el Gobierno de Aragón

Dios mismo quien «construye su casa» para venir a habitar entre nosotros, como escribe san Juan en su Evangelio (cf. 1, 14)”.

Con la Encarnación de Cristo Él se ha asociado a nosotros, a la humanidad y, por lo tanto, unidos a Él nos convertimos en templos del Dios vivo. Es lo que señala Francisco: “Cristo es el Templo viviente del Padre, y Cristo mismo edifica su «casa espiritual», la Iglesia, hecha no de piedras materiales, sino de «piedras vivientes», que somos nosotros”.

Esta es nuestra grandeza, de la que cada día debemos ser más conscientes y, a la vez, más responsables. Esta semana comenzaremos la Cuaresma y este tiempo puede ser un momento privilegiado para tomar una mayor conciencia de nuestra vocación de ser templos vivos del Dios vivo. Todos somos necesarios, en la catequesis que hoy comento con vosotros del papa Francisco nos lo plantea así: “Nadie es inútil en la Iglesia, y si alguien dice a veces a otro: «Vete a casa, eres inútil», esto no es verdad, porque nadie es inútil en la Iglesia, ¡todos somos necesarios para construir este Templo! Nadie es secundario”.

Al comenzar próximamente la Cuaresma, nos podemos plantear estas preguntas: ¿Cómo vivimos nuestro ser templos vivos?; como pregunta el Papa en su catequesis: “¿Somos piedras vivas o somos, por así decirlo, piedras cansadas, aburridas, indiferentes? ¿Habéis visto qué feo es ver a un cristiano cansado, aburrido, indiferente?”.

Ojalá sepamos descubrir en esta Cuaresma esta vocación y abrirnos al Espíritu Santo para vivir esta belleza de formar parte del pueblo de Dios que es la Iglesia y ser templos vivos.

Con todo afecto os saludo y bendigo.

Peregrinación a Tierra Santa del 3 al 10 de julio con la diócesis de Tarazona

Presidida por el obispo de Tarazona, Mons. Eusebio Hernández Sola, y guiada por el doctor en teología bíblica, Pedro Fraile Yécora.

-Autocares desde Tarazona y Calatayud hasta el Aeropuerto de Madrid y viceversa. -Vuelos con Air Europa, clase turista -7 noches de alojamiento en Hoteles de 4 estrellas -Pensión completa -Seguro de viaje Precio por persona 1.630 euros / Suplemento individual 480 euros

Más información: Dpto. de Turismo Religioso Grupo Nuba juancorpas@nuba.net- Telf. 620328028

This article is from: