G.R.S. Mead - Apolonio de Tyana

Page 14

G. R. S. Mead – Apolonio de Tyana

I INTRODUCCIÓN Para el que estudia los orígenes del cristianismo no hay naturalmente un período en la historia de occidente de tan gran interés e importancia como el primer siglo de nuestra era, que comparativamente es aún poco conocido en cuanto a su real y verdadera naturaleza. Más, aunque sea objeto de constante sentimiento, el que de ningún modo los escritores no cristianos del primer siglo tuvieran suficiente intuición de lo futuro para dejar una línea de información respecto del origen y desarrollo que tuvo la religión en el mundo de occidente, igual descuido se observa en lo que toca a su exigua información sobre las condiciones sociales y religiosas de la época. Las leyes y las guerras del Imperio parece que constituyeron el principal interés de los historiadores del siglo siguiente, y aún en esta parte de la historia política, aunque los actos públicos de los emperadores pueden perfectamente conocerse, en razón de que podemos revisarlos por relatos e inscripciones, cuando seguimos sus motivos y hechos privados nos encontramos no sobre el terreno histórico, sino más bien en la atmósfera del prejuicio, del escándalo y de la infamia. Sin embargo, los actos públicos de los emperadores y de sus guardias pueden arrojar alguna luz sobre el general estado social de la época, aunque no viertan ninguna sobre las condiciones religiosas, salvo las que tuvieron un contrato particular con el dominio político. Así, pues, podemos intentar reconstruir el cuadro de la vida religiosa de la época de las leyes y los edictos del Imperio, esforzándonos en casar alguna idea luminosa de la íntima religión de ese país por medio de la lectura de los códigos o de las noticias referentes a la formación de las leyes. Las llamadas historias romanas, a las que estamos desde hace tiempo acostumbrados, no pueden ayudarnos a reconstruir el cuadro del medio en que, por un lado, Pablo enseña nueva fe en Asia Menor, Grecia y Roma, y en que, por otro, se halla ya establecida en los distritos limitados por el sureste del Mediterráneo. Es únicamente por medio de fragmentos esparcidos, de migajas y restos de información, trozos de inscripciones, por lo que llegamos a darnos cuenta de la existencia de la vida de un mundo de asociaciones religiosas, y de que existió en este período un culto privado. No tenemos aún por eso una verdadera información de lo que pasaba en esas asociaciones, 14


Turn static files into dynamic content formats.

Create a flipbook
Issuu converts static files into: digital portfolios, online yearbooks, online catalogs, digital photo albums and more. Sign up and create your flipbook.