LA ESTELA DE LA ALMUDENA
Una obra maestra de la Orfebrería madrileña del siglo XXI en la Catedral de Madrid
2012
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Un trabajo hecho con amor
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E siento lleno de orgullo al contemplar la "Estela de la Almudena", una obra que, en sus escenas, recoge los momentos bíblicos más importantes y trascendentes de nuestra Historia Sagrada.
Desde mi niñez, seguí estos acontecimientos con gran interés por su significado y ejemplaridad. Posteriormente, durante toda una vida repleta de trabajo, viajes y experiencias, me ha acompañado el recuerdo de aquellas divinas y sabias enseñanzas. Cuando la Fundación Villa y Corte pensó en mí para realizar una obra dedicada a nuestra Virgen, vimos llegado el momento de construir, con aquellos recuerdos, con las escenas más significativas de la historia de la recién concluida catedral y con elementos representativos de nuestra ciudad, una gran obra, a la vieja usanza, con vocación de perdurar siglos. Tan inesperada para esta época como la propia catedral. Así nació la “Estela de la Almudena". Presentí que sería un gran éxito, no sólo por la ilusión puesta en el proyecto, sino por saber que contaba todavía con el mejor equipo posible de artistas y orfebres, capaces de culminar una gran obra; probablemente, la última gran obra de la platería utilizando las técnicas tradicionales. Por muchos motivos quiero agradecer y resaltar a todos los que han participado haciendo realidad este bello sueño. Gracias a la Fundación Villa y Corte de Madrid y muy especialmente a Ángel Manuel García; Presidente y luchador reconocido. A mi hijo Manuel Carrera Cordón, por su gran colaboración en el proyecto y, como no, a todo el equipo, algunos especialmente mayores de edad que, de una u otra forma, han hecho posible esta obra. Manuel Carrera
Diseño Ramón Dorado Palacios Antonio Villa de Isidro Rafael Cascajero Fernández
Escultura: Antonio Villa de Isidro Rafael Cascajero Fernández Adolfo Luceño Domínguez Blas Cueva Herrera
Cincelado: Rafael Cascajero Fernández Francisco Javier Atienza Bódalo
Fundición: José Luis Fernández Fernández Enrique Fernández Fernández Sergio Fernández Fernández Lapidación Ajuste y Armado: Cesar Sánchez Juan Arnold Cabato Norberte José Pedro Solano Chambra Forja y Dirección Platería: José Joaquín Atienza Expósito Pulido y Química: Juan Antonio García Alonso Francisco José Hernando Caro
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OR fin, la “Estela de la Almudena" embellece nuestra catedral. Esta monumental obra, orgullo de la platería y realizada por experimentados orfebres y escultores madrileños, puede ser el canto del cisne de una profesión que, como oficio artístico, no tiene sitio en el actual mercado, siendo el origen de la casi total desaparición de los grandes maestros. Así lo entendió la Fundación Villa y Corte cercana a ese dignísimo oficio y conocedora de que la rentabilidad indiscutible de las técnicas informáticas nos lleva a la desaparición de los grandes maestros del arte manual. La "Estela de la Almudena” es una obra original del maestro Don Manuel Carrera, considerado internacionalmente como el orfebre español contemporáneo más reconocido y con piezas en los mejores museos y colecciones del mundo. Ha sido realizada en su totalidad por su gran equipo, dirigida por él, con la inestimable colaboración de su hijo Manuel Carrera Cordón. Esta obra fue apoyada desde su inicio por el Gremio de Plateros de Madrid que, desde 1572, como Ilustre Colegio Congregación de San Eloy ha estado presente en los grandes momentos de la platería madrileña, realizando incluso, hace siglos, la urna de plata para los restos de San Isidro de la que, todavía hoy, custodia su llave. Allá por los noventa, cuando se concluía la Catedral, la edición de un hermoso libro; "La Almudena y Madrid", realizada por el Ayuntamiento por decisión personal de Don José María Álvarez del Manzano, nos franqueó en buena medida la posibilidad de abordar este hermoso proyecto, que se presentaba muy por encima de nuestras posibilidades a pesar del admirable altruismo mostrado, en todo momento, por todos los implicados. Nuestro emocionado agradecimiento no sólo a los autores materiales de la obra; también a las máximas figuras de la Cultura madrileñista y de la Prensa de Madrid que escribieron con absoluto altruismo aquel libro y a los madrileños que, con sus cinco mil pesetillas, pagadas en CajaMadrid por él, se acercaron a nosotros para ayudarnos a poner en marcha lo que parecía una obra imposible. También a maravillosas personas amigas que aportaron su plata a mayor gloria del proyecto. Con toda humildad pero, también, con todo convencimiento, todos los que hemos participado en esta, para su época, insólita obra, sabemos que hemos hecho historia.
Fundación Villa y Corte de Madrid
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La estela de la Villa y Corte’
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Una joya en la Catedral de la Almudena
UNDACIÓN Villa y Corte! Orgullo de todos los madrileños y de cuantos no nacidos en la gran Ciudad nos consideramos hijos de ella. Villa y Corte. Institución fundada por el gran madrileño D. Ángel Manuel García en 1982, con el fin de promover y potenciar tantos valores madrileños incluidos en el ámbito social, benéfico y cultural. Desde aquí mi más sincera felicitación a él y a cuantos la integran, la mantienen y la desarrollan en bien de todos. Se comprende así, y con cuánto gozo lo manifiesto, que a pocos días de saber que el Sr. Cardenal D. Angel Suquía (q.e.p.d.), alentado por tantos madrileños pidiéndole que se reanudaran las obras de la Catedral, fueran los responsables de Villa y Corte, junto con otras instituciones quienes con tanto entusiasmo reaccionaran a favor del proyecto ofreciéndose incluso en lo económico y aún llegando a sugerir la posibilidad de responsabilizarse en el ámbito de la Institución a donar las puertas de la nueva Catedral realizándolas en materiales de alto valor.
llegaría a ser la primera Catedral en el mundo dedicada por un Papa fuera de Roma. Y así fue, como bien sabemos todos. Consecuentemente, a las obras se les dio un gran impulso, noticia que también llegó a los miembros que integraban Villa y Corte y que provocó en los mismos la ilusión de volver a ofrecer su colaboración. Fue entonces cuando se pensó en la posibilidad de sugerirles la donación de una gran lámpara realizada principalmente en plata para situarla bajo la cúpula central. Lámpara que en poco tiempo planificaron, enriqueciéndola don diseños y figuras de los apóstoles y otras de nuestra fe. Sí; era la gran Fundación Villa Corte, entre quienes destacaba por su categoría profesional y artística el orfebre D. Manuel Carrera, que apoyado por su gran equipo de diseñadores, orfebres, plateros y escultores se hizo cargo del proyecto. Pero también el desarrollo de las obras y a juicio de los referidos arquitectos, con su reconocida autoridad, hizo que tuviéramos que prescindir del referido templete central renunciando así a tan impresionante y bella lámpara.
Ofrecimiento que tanto valoramos y agradecimos los miembros de la primera Etapa del Patronato, integrado por personalidades de elevada categoría cultural y social como eran los Arquitectos D. Fernando Chueca y Dª Emmanuela Gambini, el entonces Jefe de la Casa de El Rey, Marqués de Mondéjar, el General Lacalle Leloup, Julián Marías, Joaquín Ruiz-Jiménez, Adrián Piera, Leopoldo Stampa, Pedro Ojalvo, Francisco Muñoz, Alfonso Ramonet y, obviamente, quien esto escribe.
No obstante, Villa y Corte comprendió y aceptó el criterio de los arquitectos y hubo que renunciar también a su instalación. Pero, como antes he referido, Villa y Corte nunca renunció a la ilusión de colaborar. Pasaba el tiempo y logramos terminar lo necesario para que el Papa pudiera cumplir su agradecido y personal ofrecimiento. ¡Inolvidable acontecimiento para tantos madrileños aquel 15 de Junio de 1993! Porque el templo de Santa María la Real de la Almudena había sido ya, en su realidad principal, consagrado por el inolvidable Juan Pablo II, sucesor de Pedro. ¡Laus Deo!
Diseñado el proyecto de reanudación de las obras se vio con toda objetividad que la realización de las puertas como la Fundación Villa y Corte nos proponía no coincidía con el referido proyecto.
Pero aun quedaba mucha obra por realizar, principalmente en decoración y ornamentación del templo interior y exteriormente.
Pero ellos, sin mostrar contrariedad alguna, dijeron: ”pues sepan ustedes que nuestra ilusión es colaborar asumiendo la realización de algo importante en el edificio catedralicio” Y, efectivamente, las obras se reiniciaron según proyecto de los grandes arquitectos Chueca y Gambini y contando siempre con la generosa contribución de los madrileños. Tanto que, aparte de lo recaudado por colectas en los templos y por colaboración de empresas como ABC y otras Entidades, fue conveniente y todo un acierto, situar a una persona en las Oficinas del Obispado para recibir “donativos populares”. Porque, aunque pudieran ser pequeños eran también sorprendentemente abundantes, lo cual rebelaba el deseo e ilusión de los madrileños de poder gozar cuanto antes de la realidad de su templo catedral. Y en esta actitud permanecieron cuantos integraban la Fundación Villa y Corte, con sus directivos, como Ángel Manuel García, Presidente, Manuel Carrera, orfebre, Francisco Portela, catedrático y otros también de alta condición cultural y social. Las obras del templo seguían avanzando y más aún cuando llegó la noticia, ¡gratísima noticia!, de que el mismo Papa, hoy ya Beato, Juan Pablo II, había hecho referencia en la visita “ad limina” del entonces Cardenal D. Ángel Suquía a las obras que por noticias llegadas al Santo Padre se habían iniciado y que si lográbamos terminarla viviendo él, era su ilusión proceder personalmente a su Dedicación-Consagración, lo cual supondría el hecho histórico de que la Catedral de la Almudena
El Patronato había concluido su misión y lo suplía la llamada Junta Técnica que integrábamos tan buenas y generosas personas como Luis Armada, José Luis Martínez Almeida, Juan José Echevarría, María Rosa de la Cierva, Francisco Portela, Francisco Muñoz, Mª Teresa Fernández Talaya y Alfonso Ramonet. Pero Villa y Corte permanecía en su ejemplar decisión de hacerse presente con la más adecuada colaboración y así ellos mismos concibieron algo muy singular y extraordinariamente bello que ya podemos contemplar en el mismo templo. ¡Gracias querido Angel Manuel, Manuel Carrera y compañeros!. Porque concebisteis la maravillosa ESTELA que resume LA HISTORIA DE LA SALVACIÓN y también con referencias a la historia de Santa María la Real de la Almudena y en la que el arte tan comprobado y reconocido del Sr. Carrera tuvo su parte sustancial. Tú, hermano que me lees, anímate a visitar la Catedral. Entra en el templo por la puerta de la calle de Bailén y a pocos metros podrás disfrutar de la maravilla a la que hago referencia, situado ante otra maravilla en pintura del gran Berruguete. Consecuentemente, gracias, muchas gracias a quienes lo han hecho posible, comenzando por la aceptación de nuestro Cardenal, Don Antonio María Rouco y a tantos por su generosa colaboración. Antonio Astillero Bastante Deán de la Catedral de la Almudena
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OS plateros de Madrid, quieren asomarse a la Catedral de Madrid para testimoniar así su veneración a Nuestra Señora de la Almudena.
No les falta destreza, imaginación y ganas de crear una obra de arte singular, con la que materializar su deseo de dejar la muestra de su ilusión a los pies de la Virgen. Desde el mismo momento en que se reanudan los trabajos para la terminación de la Catedral, dejaron conocer su deseo de participar en la tan importante obra. Y lo hicieron contando con la permanente ayuda de Ángel Manuel García a quien tanto debe Madrid, ya que a través de la Fundación Villa y Corte, o directamente por su esfuerzo personal, siempre trabajó para mejorar la ciudad y su comercio tradicional. En todo momento vivió y colaboró en la reconstrucción de nuestra Catedral de una manera muy eficaz, e hizo llegar a las autoridades la intención de los plateros madrileños. Tras diversas ideas para dejar constancia de su trabajo, –artesanía excelente–, al fin lograron, con la aquiescencia de las autoridades religiosas, –el propio Cardenal Antonio María Rouco Varela y el Deán de la Catedral D. Antonio Astillero–, una verdadera obra de arte, una columna que, en su entorno, va plasmándose la vida de Nº Señor y termina con una bella talla de la Virgen. Hay un espacio con la representación de quienes hicieron posible la reconstrucción del Templo y especialmente los Cardenales Suquía y Rouco Varela; también se incluyen los último Pontífices y Sus Majestades los Reyes de España; así como la incorporación de la vida actual de la Iglesia, hasta la presencia de los voluntarios que hicieron posible el encuentro de los jóvenes con Su Santidad, el pasado verano. Y todo esto, plasmado en unas prodigiosas láminas de plata, confeccionadas por los artistas plateros más antiguos e importantes de la ciudad, y que van entrelazándose, abrazando una columna que le sirve de base. El gremio de plateros madrileños, conducidos por Manolo Carrera y su hijo Manuel Carrera Cordón, ha hecho posible esta extraordinaria muestra de una artesanía que, desgraciadamente, va desapareciendo, pero a la que todavía podemos admirar en las obras de nuestros artesanos. Nuestro Cardenal, Antonio Mª Rouco Varela, tuvo la ocasión de presentar la Estela a S.S. Benedicto XVI, en la visita que este verano hizo a la Catedral, y el Papa quedó muy gratamente sorprendido de la belleza de esta aportación generosa de los madrileños. Así se ha incorporado entre los temas de la Catedral la ilusión materializada de los artesanos y de la sociedad madrileña. José María Álvarez del Manzano y López del Hierro Presidente de la Junta Rectora de Ifema
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Estela de la Almudena’
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UANDO se contempla una obra de arte, desde el asombro no se puede hacer otra cosa que mirar en silencio, pues dejándose interpelar por la obra consigues sentir felicidad.
Este sentimiento lo ha conseguido de forma muy especial el maestro Manuel Carrera y su equipo de artesanos. Contemplando la Estela coronada por la imagen de la Virgen, se ve la historia de la salvación que emerge cincelada de las plateadas placas y te llama a recorrer desde la creación hasta la resurrección, sintiéndote participe del mensaje de la obra, y todo sostenido por los jóvenes de la J.M.J. futuro de la Iglesia y coronado por nuestro querido Madrid en sus monumentos y dos momentos especialmente significativos, la primera piedra de la Catedral y la visita del Beato Juan Pablo II con los Reyes, formando todo un armonioso conjunto que, como empecé diciendo, lleva la íntima contemplación de quien la admira. Jesús Junquera Prats Canónigo encargado del templo y patrimonio de la Catedral
Gremio de Joyeros, Plateros
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y Relojeros de Madrid
L Gremio de Joyeros, Plateros y Relojeros de Madrid que, desde hace siglos, está estrechamente unido a la ciudad de Madrid, se enorgullece de la Estela de la Almudena, una obra que recoge la esencia de la orfebrería madrileña y que es testimonio del saber hacer de escultores, orfebres y cinceladores de nuestro gremio.
Como Presiente del Gremio de Joyeros, Plateros y Relojeros de Madrid y profesional del sector quiero manifestar la alegría que me produce que trabajos de la magnitud de la Estela de la Almudena sean legados a las futuras generaciones para asombro y disfrute. La figura, reconocida mundialmente, de D. Manuel Carrera al frente del proyecto, solo podía producir una obra de referencia para los amantes de nuestro oficio y emblemática para nuestra ciudad. Nos produce especial satisfacción que la promoción de este gran proyecto corresponda a la Fundación Villa y Corte, entidad creada, en buena medida por gentes estrechamente relacionadas con la joyería, la platería y la relojería. José Luis García Lubén Fernández Aldao Presidente
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OMO profesional y colega de Manuel Carrera, conozco su obra "Estela de la Almudena", para la Catedral de Madrid y opino que únicamente un orfebre de la talla de Manolo, puede pensar, diseñar y ejecutar tan maravillosa obra de arte en pleno Siglo XXI.
Carrera, es continuador de los grandes orfebres madrileños como Martínez, Sellán y Juan José. Considero que es un orgullo para la ciudad de Madrid contar con un artista de tan alta categoría. Alfredo Montejo Presidente de Honor
La Piedad
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N la parte superior la obra se remata con una bellﾃｭsima escultura de plata de la Virgen Marﾃｭa con Jesﾃｺs yacente, inspirada en la famosa Piedad de Miguel ﾃ］gel.
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La Piedad
El Capitel El Capitel, Nuestra ciudad.
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N “collage” espectacular de Madrid de siempre y del Madrid actual, nos sitúa ante dos acontecimientos históricos para nuestra ciudad: la primera y la última piedra de nuestra Catedral. El Cardenal Moreno y el rey Don Alfonso XII, en abril de 1883, prestan bellos discursos al acto de Bendición y colocación de la primera piedra del Templo. La Reina Mercedes, fallecida poco antes, e impulsora de su construcción, observa la escena, sin duda, complacida. Más de cien años después, Su Santidad Juan Pablo II, acompañado por Don Juan Carlos y Doña Sofía, consagra e inaugura la Almudena, en unos años en que parecía imposible su terminación.
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El Capitel
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Imágenes del Madrid moderno y del Madrid de siempre se dan cita en el capitel para mostrarnos la evolución experimentada por la ciudad a través de sus edificios más señeros.
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Figuras cinceladas del Cardenal Moreno y del Rey Don Alfonso XIII en el momento de pronunciar sus discursos protocolarios un mes de abril de 1883. Emergen de la escena el rostro de la reina Mercedes, inspiradora del proyecto, y la representación de algunos personajes del Madrid castizo. Debajo, el Papa Juan Pablo II con los Reyes de España.
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El Capitel
El Fuste El fuste, Escenas Bíblicas.
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La parte central de la columna, o sea, el fuste, es una impresionante talla realizada en sodalita, una bellísima gema azulada, con vetas blancas. A su superficie, se abraza en espiral, una franja de plata de 3,78 metros de longitud, que narra, con sus cincelados, la historia de la Salvación. En esta franja están representadas “La creación del Mundo”, “Adán y Eva”, “El Pecado”, “La Expulsión”, “El diluvio”, “Sacrificio de Isaac”, “Moisés”, “El Nacimiento y la Adoración”, “El Bautismo”, “La Última Cena”, “La Crucifixión”, y “La Resurrección”. Escenas Bíblicas de las más representativas de la Cristiandad.
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En el principio, creo Dios el cielo y la tierra (Gn 1, 1-2).
I 14
Aparece la creaci贸n en todo su esplendor. Se une el cielo y la tierra, el sol y la luna y todo proclama la obra del Creador.
El Fuste
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La plenitud de la creaci贸n, es el hombre y la mujer creados a imagen y semejanza de Dios su creador.
II
Hombre y mujer los cre贸 y los bendijo (Gn 1, 27).
III
El hombre y su mujer se ocultaron de la vista de Dios (Gn 3, 8).
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El Fuste
Dios pone toda la creaci贸n, al servicio del hombre y de la mujer, para que vivan felices y formen la primera familia.
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IV
La soberbia y el deseo de poder, apartaron al hombre de Dios y fueron expulsados del ParaĂso.
Establezco mi alianza con vosotros y con vuestra descendencia (Gn 9, 8).
V Por tu descendencia se bendecirรกn todas las naciones de la tierra (Gn 22, 16-18).
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El Fuste
El amor de Dios siempre es fiel, por eso establece Alianzas con la humanidad, siempre perdona.
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VI
La Ley del Sinai, los Diez Mandamientos, establecen la relación de Dios con los hombres, es la Ley natural por la que se rige toda conciencia.
No tendrás otros dioses fuera de mí (Ex 20, 2-3).
VII
Vieron al niño con María, su madre y cayendo de rodillas lo adoraron (Mt 2, 2-3).
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El Fuste
En Belén, Dios se hace hombre, Misterio de amor, Alianza plena de Dios con los hombres. Dios esta aquí, entre nosotros.
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VIII
JesĂşs recibe el bautismo de Juan, pero promete un Bautismo de EspĂritu Santo, por el que nos incorporamos a su Iglesia.
Este es mi Hijo el amado mi predilecto (Mt 3, 16-17).
Cristo Jesús quiere seguir presente entre los hombres y lo hace a través de la Eucaristía. Los primeros cristianos eran conocidos por que “compartían el Pan”.
Con ansia he deseado comer esta Pascua con vosotros antes de padecer (Lc 22, 14-15).
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El Fuste
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La Alianza se hace plenitud en la entrega de Cristo, El nos redime, nos renueva el Amor de Dios Padre y nos hace hijos.
Padre a tus manos encomiendo mi esp铆ritu. Y dicho esto expir贸 (Lc 23, 46).
La muerte ha sido vencida, Cristo con su resurrección nos abre el camino a la eternidad, al encuentro con el Creador.
¿Por qué buscáis entre los muertos al que vive? No está aquí. Ha resucitado (Lc 24, 5-6).
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El Fuste
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El Reino de Dios, el cielo nuevo y la tierra nueva, son posibles gracias a Cristo Resucitado, que uni贸 a los hombres con su Creador, y nos env铆a a ser testigos de su Resurrecci贸n.
Yo estoy con vosotros todos los d铆as hasta el fin del mundo (Mt 18, 20).
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El Fuste
La Basa
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A base de la columna consta de cuatro lados, en cada uno de los cuales se reproducen diferentes escenas y motivos que forman parte de la simbología de la obra. Diversas imágenes y escudos en bellísimos cincelados en plata se presentan rodeados de esa imagen de futuro y esperanza que representan los jóvenes del JMJ Madrid 2011. La basa, realizada en plata, salvo aquellos elementos que sustentan el peso de la columna, que técnicamente se tuvieron que realizar en bronce chapado en plata.
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La basa
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En su frente, medallón de la Virgen de la Almudena. A continuación, escudos de S.S. el Papa Benedicto XVI y de los Cardenales Suquía y Rouco Varela.
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El escudo de Madrid, flanqueado por medallones del patrón San Isidro y de Santa María de la Cabeza. En la parte trasera, San Eloy, patrón de los orfebres, trabaja afanosamente la plata y, curiosamente, fuera de su época y del que fue su entorno habitual. Un rincón emblemático de Madrid le sirve de improvisado taller.
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La Basa
Detalles de la obra
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Medall贸n de la Virgen de la Almudena, a la que imploran los j贸venes de todo el mundo llegados a Madrid con motivo de la JMJ.
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Patrón de Madrid
Está también presente el santo patrón de la ciudad, San Isidro, acompañado de su esposa, Santa María de la Cabeza, que en la basa parecen custodiar el escudo de Madrid.
Escudos
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Detalles de la heráldica perteneciente a las personalidades eclesiásticas presentes en la última época de la Catedral.
Arriba, el escudo de Monseñor Suquía, y abajo, el de Monseñor Rouco Varela.
Sobre la imagen de la basa, detalle del escudo de S.S. El Papa Benedicto XVI.
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Peregrinos JMJ 2011
El soporte de la Estela son los jóvenes católicos del mundo que acudieron multitudinariamente a Madrid y que mañana estarán pendientes, en cualquier otro lugar, de las necesidades espirituales y físicas de los hombres y mujeres que pueblan el mundo.
El orfebre se ha recreado en pequeños detalles, como los anagramas del JMJ en las camisetas de los peregrinos.
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Jóvenes de toda procedencia y condición, unidos por un sentimiento idéntico de entusiasmo y servicio al prójimo.
Minuciosas esculturas recrean a los jóvenes religiosos y seglares, perfectamente reconocibles por sus camisetas conmemorativas.
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Presentación de la Obra
La Estela nace de la fuerza de voluntad de muchos artesanos y ciudadanos anónimos movidos por el ánimo de crear y ofrecer belleza conmovedora y perdurable. Su ejecución ha estado muy marcada por sincero altruismo.
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ANUEL Carrera Díaz, probablemente el orfebre español más internacional, fundador de la firma de alta joyería Carrera y Carrera, posa junto a su creación. Abajo, detalle de la inscripción que acredita su autoría bajo el patrocinio de la Fundación Villa y Corte.
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Monseñor posa entre un boceto del proyecto y la propia obra todavía inconclusa.
El presidente de la Conferencia Episcopal Española, Monseñor Antonio María Rouco Varela, conoció la obra en las instalaciones del Teatro Real de Madrid, donde escuchó las explicaciones de los patrocinadores y del autor acerca de los desvelos, empeños y vicisitudes que dieron lugar a esta singular creación. En esta reunión, tuvo la oportunidad de exponer su opinión sobre la pieza antes de los últimos y definitivos golpes de cincel.
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Presentación de la Obra Urgía presentar la obra a Don Antonio María Rouco y mantener unos minutos de conversación con nuestro Cardenal para que, con su docta opinión, dejara su impronta en la “Estela”, marcando los “últimos golpes de cincel.”
Foto de familia de la primera presentación de la Estela en dependencias del madrileño Teatro Real.
“una pieza única de orfebrería por su valor y trabajo (…) y por el recuerdo que hará presente a la Jornada Mundial de la Juventud (JMJ) Madrid 2011 en el Templo Catedral y en la Diócesis”. Monseñor Rouco Varela
Orfebre y Fundación presentan al Cardenal Rouco Varela la “Estela”, poco antes de concluir la obra.
39 Tú, hermano que me lees, anímate a visitar la Catedral. Entra en el templo por la puerta de la calle de Bailén y a pocos metros podrás disfrutar de la maravilla a la que hago referencia, situada ante el gran retablo de Berruguete.
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San Eloy
San Eloy, patrono de los orfebres, que figura en la basa de la Estela de la Almudena.
Consejeros y Miembros de la Fundación Villa y Corte relacionados con “La Estela de la Almudena” † Antonio Mingote, † Fernando Chueca Goitia, † Alberto Corazón Iglesias, † Ángel César Beltrán Sanz, † Benito Fernández Ríos, † Manuel Montero Vallejo, † Enrique Tablada. Manuel Abella Poblet, Enrique de Aguinaga, Manuel Alegre Palazón, Antonio Ayllón Antroino, Félix Colomo Domínguez, Alberto Corazón Climent, Sabina Luisa Díez Moreno, Concepción Gansó, Ángel Manuel García, Raúl García Ovejero, Roberto García Ovejero, José Luis Gómez Calvo, Antonio Gómez Verdugo, Antonio González-Elipe, Luís Esteban Izquierdo, Francisco Jiménez Martínez, Federico López de la Riva, Juan Montero Castillo, Alfonso Mora Palazón, José Ramón Pérez Acevedo, Francisco Portela Sandoval, José Carlos Toledano Gasca, Tomás Torralba Ropero, Manuel Vérez Rego, Antonio Valcárcel Moreno, Soledad Valcárcel Moreno, Miguel Ángel Yustas Fonseca.
Autores del libro “La Almudena y Madrid” 1993 Base económica de la Estela † Nicolás Sanz Martínez, † Manuel Montero Vallejo, † José Mª Sanz García, † José Fradejas Lebrero, † José del Corral Raya, † José Mª Bernáldez Montalvo, † Fernando Chueca Goitia, † José Mª de Azcárate Ristori. Ángeles Afuera, Curro Castillo, Alberto Corazón Climent, Javier Domingo Gómez, María del Rosario González Vega, Pedro Montoliú Camps, Áurea de la Morena Bartolomé, Francisco Portela Sandoval, Ángel del Río, José Simón Díaz, Virginia Tovar Martín, Soledad Valcárcel Moreno. Como Colaboradores, queremos destacar también, de forma muy especial, a esos miles de “madrileños” que, anónimamente, con su colaboración de trabajo, asesoramiento e incluso económico, han mantenido viva a la Fundación Villa y Corte en su decisión de promocionar la Cultura y el Patrimonio madrileños, apoyando con energía su vinculación a la Catedral de la Almudena, “La Estela de la Almudena” y el libro La Almudena y Madrid.
Dep. Legal: M-00.000-2012 • Edita: M. Abella y Asociados, S.L. Fotografías: Manuel Hernández de León, Julio Esteban Canalejas y Javier Abella Proyecto de Manuel Carrera y Fundación Villa y Corte Con la colaboración de la revista ILUSTRACIÓN DE MADRID
Escudo de Madrid Creaci贸n de Manuel Carrera, patrocinado por la Fundaci贸n Villa y Corte. Basado en el escudo que figura en el plano de Madrid de Pedro Texeira de 1656. Est谩 situado en la Catedral de Madrid, debajo del altar de la Virgen de la Almudena.