Principios de trabajo colaborativo

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TRABAJO COLABORATIVO CAT-1

CENTRO DE INNOVACIÓN TECNOLÓGICA Y EDUCATIVA. CITE UNIVERSIDAD MARIANO GÁLVEZ DE GUATEMALA


PRINCIPIOS DE TRABAJO COLABORATIVO

Innovaci贸n Educativa Universidad Mariano G谩lvez de Guatemala 2014

Las 4 erres del trabajo colaborativo por Innovaci贸n Educativa - UMG Se distribuye bajo una Licencia Creative Commons Atribuci贸n-NoComercial-CompartirIgual 4.0 Internacional.


Introducción al Trabajo Colaborativo

La educación del siglo xxi, exige que se den procesos educativos renovados, que permitan la socialización y promuevan la participación del estudiante como agente que genere su propio conocimiento. Este conocimiento deberá ser orientado y guiado por docentes que poseen las competencias necesarias para ofrecer actividades colaborativas significativas, que se adaptan a las necesidades reales de los estudiantes. Es importante que los docentes del siglo xxi, comprendan cuáles son los procesos, técnicas, herramientas y pasos en la generación de esas actividades colaborativas. El presente material brindará una base para el aprendizaje del desarrollo de actividades colaborativas, basado en las 4 erres del trabajo colaborativo. Esta propuesta se ha planteado para que los docentes de la UMG, puedan diseñar actividades colaborativas basado en principios sencillos y prácticos.


Este material fue elaborado por la periodista chilena Luz María Zañartu Correa que posee un Master en la Universidad Autónoma de Barcelona, UAB y Doctoranda de la Universidad de Barcelona, UB. Trabaja hace más de quince años en temas de infancia, en el Servicio Nacional de Menores, SENAME. Actualmente está a cargo de coordinar un proyecto de educación con nuevas tecnologías que busca vincular al Estado con la empresas privada, de tal forma de crear 21 talleres con Tecnologías de la Información y Comunicación, TICs, en centro de infancia dependientes del Sename. La autora ha trabajado como docente en la escuela de periodismo de la Universidad de Chile, y tiene varias publicaciones en revistas acerca de temas vinculados a educación con nuevas tecnologías y sociedad de la información.

Lee con detención lo expuesto por la Dra. Zañartu, saca anotaciones de lo que ella expone, puede ayudarte en ampliar tu conocimiento y alguna actividad de trabajo colaborativo. Vea el link: https://drive.google.com/file/d/0ByZfrksD9KvqUFpiaWREV3B2TWs/edit

También te hemos colocado el documento en formato PDF, para que lo descargues.


Las 4 eres del Trabajo Colaborativo

El trabajo colaborativo debe ser impulsado por propuestas que el docente implemente en sus cursos (virtuales, semipresenciales o presenciales) que fomenten esta cultura de aprendizaje colaborativo. Para poder conformar una actividad colaborativa, hemos diseñado una estructura denominada " Las 4 eres del trabajo colaborativo". En esta integración se intenta conformar un patrón que guíe al docente en la tarea de diseñar actividades colaborativas de forma exitosa. La integración incluye: 1. Reglas Claras 2. Roles asignados 3. Rúbricas como forma de evaluación 4. Responsabilidad Esta es una integración práctica y sencilla que facilita la creación de actividades colaborativas aplicadas a la educación universitaria.


ROLES ASIGNADOS Wegner (1998) llama a los grupos formados para la colaboración “comunidades de aprendizaje” o “comunidades prácticas”. Dentro de estos grupos cada participante estará preocupado por la construcción del trabajo a desarrollar, así como ser parte importante en la búsqueda de recursos que puedan ser socializados dentro de esta comunidad. Hsu (2002) comenta que el objetivo del aprendizaje colaborativo es inducir a los participantes a que construyan conocimiento por medio de la negociación y debate. Esta forma de construir el aprendizaje nos lleva a nuevas formas de agrupación de los participantes, en el trabajo colaborativo, cada uno deberá cumplir un rol. El rol será la función que un participante debe cumplir dentro del grupo. Cada uno de los participantes seleccionará el rol que desea desempeñar dentro de la comunidad de aprendizaje. Este rol marcará o guiará las actividades que el participante debe desarrollar o los aportes que se espera que ejecute. Claro está que aunque un participante posee ya un rol, el éste puede cambiar o apoyar a otros roles. Un ejemplo típico podrá ser cuando se ha establecido a un participante para realizar la investigación de un tópico y otro participante colabora brindándole material que encontró como apoyo a la comunidad. También el rol del docente cambia en este modelo, pues su participación estará en motivar a la participación y proporcionar las condiciones que formen la comunidad de aprendizaje. En el trabajo colaborativo el docente nunca asigna los roles a los participantes, solamente publicará los roles que desea se efectúen dentro del grupo y cada uno libremente escogerá el rol que desea desempeñar. Si el docente asigna los roles, el trabajo se convertirá en un trabajo cooperativo (según varios autores), que marca el énfasis en el control completo del docente. Esta nueva forma de trabajo muestra el verdadero rol del docente, que lo coloca como facilitador del aprendizaje, más que en el eje central de la actividad. Claro está que el docente sigue siendo el experto en contenido, pero ya no es el eje central, pues el estudiante se convierte en constructor de su conocimiento.


RÚBRICA COMO FORMA DE EVALUACIÓN

Cuando hablamos sobre evaluación tendremos que señalar los instrumentos, procesos y formas en que podemos llevar a cabo esta evaluación. El docente tiene a mano diferentes formas de evaluación, pudiendo utilizar la evaluación diagnóstica, la autoevaluación, la coevaluación y la heteroevaluación, que es la más utilizada y se efectúa cuando el docente evalúa el desempeño del alumno. Pueden utilizarse diferentes herramientas que muestren o señales cual ha sido el desempeño que un alumno al momento de desarrollar una actividad. Entre ellas están los portafolios, lineamientos de observación, la autoevaluación sobre la forma como se desarrolló una actividad, diarios de clase y las rúbricas o matrices de valor. Esta evaluación puede realizarla por diferentes procesos y herramientas, entre ellas la rúbrica. Una rúbrica es un conjunto de criterios y estándares, generalmente relacionados con objetivos de aprendizaje, que se utilizan para evaluar un nivel de desempeño o una tarea. Estas herramienta es una forma de evaluación auténtica porque sirve para medir el trabajo de los estudiantes de acuerdo con "criterios de la vida real" y porque implican una evaluación progresiva, así como el ejercicio de reflexión y autoevaluación (Díaz Barriga, 2004). De acuerdo con Airasian (2001), la rúbrica es una estrategia de evaluación, como sería una elaboración de proyectos, producción oral y escrita, las investigaciones y trabajo práctico que los estudiantes hacen en escenario reales. Díaz Barriga (2004), señala que lo importante en una rúbrica es evaluar el grado en que ciertos atributos están o no presentes en el desempeño del estudiante. La rúbrica es un juicio de valor acerca del nivel de calidad que un estudiante realiza en una tarea asignada. Una rúbrica está formada por criterios, indicadores o categorías que estarán colocadas en forma de lista. Cada criterio o categoría tendrá diferentes niveles o grados (de menos o mayor o viceversa) con la variación de desempeño, que mostrará si en ese criterio se logró como un novato o como experto. Conde y Pozuelo (2007) mencionan que la rúbrica viene a desarrollarse como un recurso interesante para realizar una evaluación integral y formativa. Tierney & Simon (2004) señalan que también la rúbrica se presenta como un instrumento de orientación y evaluación de la práctica educativa. Cuando un alumno verifica cuáles son los niveles que ha obtenido en los diferentes criterios de la evaluación, podrá hacer una autoevaluación de su desempeño en la actividad evaluada. Existen básicamente dos tipos de rúbricas, una son rúbricas holísticas y otras llamadas rúbricas analíticas. La rúbrica holística es una evaluación más general e integrada de todo el proceso que el estudiante hizo en su tarea. La rúbrica analítica se utiliza para evaluar cada parte del trabajo que el estudiante llevó al momento de realizar la tarea. La rúbrica analítica es útil cuando deseamos conocer las fortalezas y debilidades en el desempeño que el alumno mostró en la actividad. Es importante saber que la rúbrica deberá publicarse o enviarse al estudiante, en el momento en que se asigne la actividad. Navarro García, Ortells Roca y Martí Puig, elaboran un resumen sobre la rúbrica, colocando como una matriz de valoración que es útil para averiguar, no solo cuánto, sino también cómo está aprendiendo el estudiante, y en ese sentido se puede considerar como una herramienta de evaluación formativa, pues la rúbrica se convierte en parte integral del proceso de aprendizaje.


REGLAS CLARAS

Al referirnos a reglas claras, estamos hablando que el docente debe crear reglas claras al momento de diseñar y plantear la actividad colaborativa. Dentro de estas reglas deberán indicarse la forma como los alumnos se agruparán. Recordemos que podemos utilizar la opción de “Grupos” que posee la plataforma virtual. Esta opción nos ayudará a establecer agrupaciones de forma rápida y sencilla. Recordemos que estos grupos pueden ser creados bajo diferentes criterios y que los mismos pueden ser modificados según consideremos necesario. La opción de grupos nos ayudará a ahorrar tiempo. También podríamos establecer que los estudiantes integren los grupos. No importando cual sea el método de realizar la agrupación, lo que es sumamente importante será establecer bien los criterios para que los grupos puedan integrarse. Para establecer reglas claras en la asignación de una tarea colaborativa, debemos: Publicar los roles que estarán disponibles en la actividad. Aunque cada estudiante seleccionará el rol que desempeñará dentro del grupo, en algunos momentos los roles pueden ser intercambiables, pues el que supervisa, puede ser supervisado también. Indicar los tiempos que tomará la actividad. El docente deberá establecer el tiempo que deberá tomar el grupo para realizar la actividad.

Recordemos que dentro del grupo se darán interacciones,

construcciones, reflexiones y consensos que darán forma al trabajo a realizar. Recordemos que aunque el trabajo es colaborativo, el alumno hará sus propias reflexiones e interiorizaciones. Describir las actividades generales que el grupo deberá desempeñar. Deberá incluir los lineamientos que desea que el grupo cumpla. Las actividades pueden generarse por medio de las áreas de una Webquest o bien definir el trabajo en un foro colaborativo o grupal. Enviar la rúbrica, lista de coteo o formato de evaluación de la actividad a realizar. Recordemos que será muy importante enviar esta información en el momento de generar la actividad.


RESPONSABILIDAD La responsabilidad es un factor importante y trascendente en la configuración y realización de actividades colaborativas. En principio veremos que la responsabilidad dentro del trabajo colaborativo cambia del docente al estudiante.

Dentro de una actividad colaborativa será el estudiante quién tome el compromiso de construir

conocimiento, ya no será el docente quién le brindará el 100% de la información, sino que él mismo hará la búsqueda, organización y presentación del contenido. El docente será un guía y orientador de este proceso. Covey (1998) comenta que trabajar en un verdadero ambiente colaborativo exige de los integrantes del grupo una ética personal que casi solo se puede encontrar en individuos adultos, que poseen una conciencia clara de cómo vivir la vida en comunidad. En mucos casos, serán estas actividades las que ayudarán a los estudiantes a mejorar estas virtudes por medio del aprendizaje comunitario. El docente tendrá la responsabilidad de crear el ambiente donde se desarrollará esta actividad colaborativa. Cómo guía, generará los posibles roles que cada alumno tomará, generará las instrucciones claras que guiarán al estudiante en el desarrollo de la actividad colaborativa y creará la rúbrica donde el estudiante podrá verificar las categorías y niveles que deberá alcanzar. El alumno tendrá una responsabilidad en principio individual, donde deberá cumplir las estipulaciones del rol que ha decidido trabajar. Claro está que todos los integrantes colaborarán para el mutuo aprendizaje y no solamente para el aprendizaje de algunos miembros del grupo. Luego esta responsabilidad individual se convertirá en grupal, pues la construcción de conocimiento, ideas, procesos y al final un producto, se establece en todos. En este sentido es una responsabilidad compartida. Si cada actor (docente y alumno) cumplen su responsabilidad, tendremos un trabajo exitoso.


CONCLUSIONES

La fabricación de una actividad colaborativa deberá llevar como mínimo 4 ejes que son:

Roles asignados: El docente presentará la gama de roles que deberán intervenir en la actividad

Rúbrica como forma de Evaluación: El docente utilizará el instrumento de rúbrica para realizar la evaluación

Reglas claras: El docente debe proporcionar las reglas que guiarán esta actividad

Responsabilidad: Este será uno de los motores que deberá impulsar la actividad. Tanto el docente como el alumno tiene ciertas actividades que deberá realizar para lograr el éxito del trabajo.

Las 4 erres del trabajo colaborativo por Innovación Educativa - UMG Se distribuye bajo una Licencia Creative Commons Atribución-NoComercial-CompartirIgual 4.0 Internacional.


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