Introducción

El estudio del origen de nuestra especie ha ocupado durante siglos nuestro interés. Se han desarrollado teorías creacionistas herederas de nuestro pasado religioso pero también formulaciones que fueron comprobadas científicamente. El hombre en busca de una respuesta a su origen hace uso de la ciencia y logra hacer revisiones biológicas, arqueológicas, antropológicas y genéticas, apoyado, en los innumerables hallazgos fósiles, se han dedicado al estudio de la evolución del ser humano, de las cuales existen numerosas evidencias científicas que afirman nuestro parentesco con otros primates. Las evidentes similitudes físicas y biológicas, e incluso de comportamiento instintivo, reflejan una cercanía genética. La evolución humana o evolución del ser humano, fue un lento proceso de cambio y adaptación que produjo a los seres humanos contemporáneos, ha sido atreves del tiempo un proceso complejo que duró unos seis millones de años aproximadamente. Abarca la aparición y extinción de diversas especies del género Homo, es decir, parientes no muy lejanos de nuestra especie, que nos antecedieron en el tiempo. De ellos heredamos muchas de nuestras propiedades biológicas. Homínido es el nombre que reciben, en el estudio de la evolución de las especies, los individuos del orden de los primates superiores y de la clase de mamíferos, caracterizados por su postura erguida y por el bipedismo. Entre los homínidos actuales están los humanos y sus parientes cercanos, orangutanes, gorilas, chimpancés y bonobos. La paleontología humana ha definido que el homínido más antiguo de la historia es el Australopithecus anamensis, el cual vivió hace aproximadamente 4 millones de años, fue una especie localizada en Kenia, los primeros fósiles fueorn encontrados en el 2005. El nombre de Australopithecus viene de "Australo" , que significa "del sur" , y "pithecus" , que significa "mono" , por lo que Australopithecus quiere decir "mono del sur" .