CEBE N°14 “ROTARY CLUB LA MOLINA
EQUIPO S.A.A.N.E.E. SERVICIO DE PSICOLOGÍA
DRA. ESPERANZA BERNAOLA CORIA
Se estima que entre un 9% y un 13% de ni単os y adolescentes entre los 9 a単os y 17 a単os de edad, tienen trastornos graves y diagnosticables de salud emocional y de conducta, los cuales producen impedimentos considerables y hasta extremos. (Friedman, 2002)
2
Los estudiantes con tales trastornos pierden más días de escuela que los estudiantes en todas las demás categorías de discapacidades. Más de la mitad de dichos estudiantes abandonan la escuela entre el 9no. y el 12avo. grado, la mayor tasa de abandono entre todas las categorías de discapacidades . Entre los estudiantes con los susodichos trastornos que abandonan la escuela, se arresta al 73% de los mismos durante los cinco años inmediatos al abandono de la escuela .(Jay y Padilla, 1987) 3
Si se identifica a los niĂąos como difĂciles de manejar a los 3 y 4 aĂąos de edad, tienen una probabilidad elevada (50%) de seguir experimentando dificultades hasta la adolescencia ( Campbell y Ewing, 1990; Egeland et al., 1990; Fischer, Rolf, Hasazi y Cummings , 1984). 4
Los problemas comienzan temprano:
5
La conducta agresiva a temprana edad representa el mejor factor de predicci贸n de la violencia y de la pertenencia a una pandilla durante la juventud. (Reid, 1993)
6
En el caso de que la conducta agresiva y antisocial persista hasta los 9 aĂąos de edad, las intervenciones posteriores tienen poca probabilidad de ĂŠxito. (Dodge, 1993)
7
“Nuestra Infancia no tiene que ser perfecta para ser unos adultos razonablemente bien adaptados, sólo
tiene
que
suficientemente buena”
ser
lo
1.
SEGURIDAD BÁSICA
2.
RELACIÓN CON LOS DEMÁS
3.
AUTONOMÍA
4.
AUTOESTIMA
5.
AUTOEXPRESIÓN
6.
LÍMITES REALISTAS
La trampa vital es un patrón o un tema que aparece en la infancia y se repite a lo largo de la vida.
“De adultos recreamos las condiciones más dolorosas de nuestra infancia” “Daña el concepto que tenemos de nosotros mismos,
la salud, las relaciones de los demás, los estados de ánimo, es decir se manifiesta en todas las áreas de nuestra vida”
Un niño necesita la seguridad de un ambiente
familiar estable, seguro, donde los padres estén presentes de manera previsible, tanto física como emocionalmente.
Nadie
es
despreciado,
las
discusiones se establecen dentro de los límites
razonables y nadie muere o deja al niño solo durante mucho tiempo.
Trampa: abandono, desconfianza y abuso
La trampa vital del abandono se basa en la creencia de que las personas que quieres te dejarán y te quedará solo para siempre. Sientes que te ocurrirá esto porque crees que las personas cercanas a ti morirán, se marcharán de casa para siempre o te abandonarán.
Como consecuencia de esta creencia, te aferras demasiado a las personas que est谩n cerca de ti y, parad贸jicamente, fuerzas su distanciamiento. Hasta en las separaciones normales puedes sentirte muy disgustado o enfadado.
La trampa vital de la desconfianza y el abuso es la expectativa de que las personas abusarán de ti; se burlarán, te mentirán, te manipularán, te humillarán, te harán daño físico o se aprovecharán de ti. Si esta trampa vital te describe, te escondes detrás de un muro desconfianza que te impide intimar demasiado con otras personas.
Eres suspicaz con las intenciones de los demรกs y tiendes a pensar en lo peor. Es posible que evites por completo las relaciones con los demรกs. No
obstante,
si
te
relacionas,
estableces
uniones
superficiales en las que no te abres a los demรกs o buscas personas que te traten mal, lo que provoca que te sientas enfadado y con ganas de vengarte.
Para desarrollar esta capacidad necesitamos amor,
atención,
comprensión
y
empatía, una
guía
respeto,
cariño,
para
seguir.
Necesitamos estos elementos tanto de nuestra familia, docentes, como de nuestros amigos y compañeros.
Hay dos maneras de relacionarnos con los demás: 1. Intimidad (se establece con la familia, con la
pareja, los amigos, vínculos emocionales más cercanos).
2. Relaciones sociales: sentimiento de pertenencia, de encajar en la sociedad (se establece en círculos de amigos o en la escuela y la comunidad)
Trampa: Privación emocional y exclusión social
La privación emocional se basa en la creencia de que tus necesidades de amor nunca serán satisfechas de forma adecuada, que no te querrán ni comprenderán como te sientes, te atraen las personas frías y egoístas, por lo que inevitablemente las relaciones que estableces te resultan insatisfactorias.
Te sientes estafado y el estado de ánimo te fluctúa entre el enfado por la insatisfacción y el dolor y la soledad. Paradójicamente, el enfado sólo consigue distanciar a las personas, de modo que tu carencia emocional continúa presente. Los personas transmiten una soledad que nos conmueve, esta es la esencia del vacío, de la desconexión emocional: estas personas, por supuesto, desconocen lo que es el amor.
La exclusión social se observa en la relación que tenemos con los amigos y los grupos. Esta trampa vital presente sentimientos de aislamiento del resto del mundo y la creencia de que se es diferente a los demás, si esta trampa vital te describe, en la infancia te sentiste excluido por el resto de niños y no perteneciste a ningún grupo de amigos.
Quizá tenías algunas características poco habitual que te hizo sentir diferente. Ya en edad adulta, la trampa vital se manifiesta en la evitación: evitas relacionarte con grupos y hacer nuevos amigos. Pudiste sentirte excluido porque había algo en ti que los otros niños rechazaban.
Por lo tanto, creíste que eras socialmente poco aceptado,
con una baja posición social, con escasas habilidades de conversación, aburrido o cualquier otra deficiencia. Reproduces el rechazo de la infancia; te sientes y te comportas como inferior en las situaciones sociales. La exclusión social puede ser difícil de detectar, están bastante cómodas en situaciones íntimas y tienen habilidades sociales. Es posible que el patrón no se muestre en las relaciones individuales. Algunas veces nos sorprende la gran ansiedad que sienten y lo reservados que se muestran en las fiestas, en las clases, en las reuniones o en el trabajo.
Es la habilidad de separarnos de nuestros padres y de funcionar con independencia del mundo, tal como lo hacen los adultos. Es la capacidad de comportarse como un individuo con
una identidad propia, de dejar nuestra casa y de tener una vida con nuestros objetivos e instrucciones, sin depender del soporte o direcci贸n de nuestros padres. Trampa: dependencia y vulnerabilidad
Eres incapaz de enfrentarte a la vida cotidiana si no recibes ayuda de los demĂĄs. Dependes de ellos de la misma manera que una persona que se ha roto la pierna necesita de una muleta para sostenerte: requieres un apoyo constante. Cuando era niĂąo, te hicieron sentir incompetente cuando intentabas reafirmar tu independencia. Como adulto, buscas figuras fuertes de las que depender para que gobiernen tu vida. En el trabajo, no te atreves a actuar por ti mismo
Viven con el temor de que va a ocurrir un desastre en cualquier momento, ya sea natural, delictivo, mĂŠdico o financiero. No te sientes seguro en el mundo.
Cuando eras niĂąo hicieron que sintieras que el
mundo era un lugar peligroso. Probablemente tus
padres te sobreprotegieron y se preocuparon demasiado de tu seguridad.
Tus
miedos,
excesivos
y
poco
realistas,
controlan tu vida y gastas tu energĂa en sentir un poco de seguridad. Tus
temores
se
pueden
centrar
en
las
enfermedades (tener un ataque de pĂĄnico, contraer SIDA o volverse loco) o pueden centrarse en preocupaciones financieras (ir a la bancarrota o vivir como un vagabundo).
La autoestima procede del sentimiento interno de
que
somos
personales,
dignos
sociales
y
en
nuestras
laborales.
vidas
Surge
de
sentirnos queridos, respetados en la infancia por nuestra familia, amigos y en la escuela. Haber recibido alabanzas, haber sido animado sin excesiva cr铆tica y rechazo. Trampa: imperfecci贸n y fracaso
Sientes
que
eres
internamente
imperfecto
y
defectuoso. Crees que si alguien próximo a ti te conociera tal como eres, no te podría querer, ya que la imperfección que sientes se podría descubrir. Cuando eras niño, no sentiste que tu familia te respetara e incluso criticaron tus “defectos” y no te valoraron y, por este motivo, esperabas que te rechacen.
Si crees que eres un inútil en áreas como la escuela, el trabajo y los deportes, el fracaso como trampa vital puede describirse. Cuando te comparas con tus compañeros y amigos te sientes un fracasado. De niño te hicieron sentir inferior en cuanto al rendimiento. Puedes haber tenido alguna dificultad en el aprendizaje o quizá nunca hayas tenido la suficiente disciplina para dominar las habilidades importantes, como por ejemplo la lectura, los otros niños siempre eran mejores y te llamaban “estúpido”, “sin talento” o “vago”.
Es la libertad de expresar nuestras necesidades, sentimientos (incluyendo la ira) e inclinaciones naturales. Implica la creencia que nuestras
necesidades cuentan tanto como las de las otras personas y de que somos libres de actuar espont谩neamente desesperada.
sin
una
inhibici贸n
Las
personas
que
se
auto-expresan
se
conceden tiempo para divertirse y jugar, en vez de dedicarse a trabajar y competir sin parar. Trampa: Subyugaci贸n y normas inalcanzables
Sacrificas tus propias necesidades y deseos para agradar a los demás o para satisfacerlos. Permites que te controlen por dos motivos: el primero para evitar la culpa-dañarás a las otras personas si sólo piensas en ti – y en el segundo para huir del miedo – de ser castigado o abandonado si desobedeces-. Alguien próximo a ti (padres), te subyugó. Ya en edad adulta, entablas relaciones con personas dominantes y controladoras y te sometes a ellas o te relacionas con personas desvalidas que no pueden cubrir tus propias necesidades.
Te esfuerzas por satisfacer unas elevadas expectativas que tú mismo te has impuesto. Pones
excesivo
énfasis
en
la
posición,
el
dinero,
el
rendimiento, la belleza, el orden o el reconocimiento, todo ello a expensas de la felicidad, el placer, la salud, la resolución de conflictos y de unas relaciones satisfactorias. Probablemente también
impones normas rígidas y juzgas a
las otras personas. Cuando eras niño se esperaba que fueras
el mejor y te enseñaron que cualquier otra opción era un fracaso.
Significa poner lĂmites realistas a tu propia conducta, tanto internos como externos. Esto incluye la capacidad de entender y de tener en cuenta las necesidades de los demĂĄs y de mantener un equilibrio justo entre las propias necesidades y las de los demĂĄs.
Implica
ademรกs,
ejercitar
el
suficiente
autocontrol y disciplina para alcanzar nuestros objetivos y evitar el castigo de la sociedad. Los padres no fueron demasiado permisivos, ni permitieron una excesiva libertad. Trampa: grandiosidad
Se asocia con la habilidad para aceptar los lĂmites reales de la vida.
Las personas se sienten especiales. Insisten que tienen que hacer, decir o tener todo lo que quieran inmediatamente.
No hacen caso de lo que los demĂĄs consideran razonable, de lo que es en realidad, del tiempo, de la paciencia requerida y del esfuerzo. Estas personas tienen dificultades con la autodisciplina.