Pag. 05
Pag. 09
Pag. 09
ENEMIGA DE LA SERPIENTE
MADRES EMPRENDEDORAS Y PROFESIONALES
EL PRIVILEGIO DE PODER SER MADRES
Guía de Adoración e Intercesión Edición 115 • Agosto 2018
Suplemento de Edificación para el Cuerpo de Cristo A.M.M. de Rony Chaves
LA MATERNIDAD ESTÁ SIENDO AMENAZADA Cada día, la Maternidad de miles de mujeres en el mundo, está siendo amenazada. Millones de abortos son provocados legal o ilegalmente cada ańo en los países del planeta. Esta es una de la más graves faltan que pueden cometer nuestras sociedades ante el Creador Omnipotente.
Contenido
7000 Altares de Adoración
¿BENDECIDA O MALDECIDA ? Pág. 04
MATERNIDAD AGOSTO 2018
ENEMIGA DE LA SERPIENTE
Pág. 05-07
NO TIENES QUE SER PERFECTA PARA SER Pág. 08 BUENA MAMÁ
Ante una constante y diaria intención de algunos gobernantes de turno de nuestros pueblos, de llevar Proyectos de Ley en favor del aborto, debemos reaccionar . Estos abortos, además de privar a millones de mujeres de su especial derecho y privilegio de la MATERNIDAD, meterían a nuestros países ante un gran castigo y juicio divino. Por eso en Arpas y Copas, dirigidos por el Espíritu Santo, hemos preparado una serie de enseñanzas para resaltar ese Ministerio familiar extraordinario de la Maternidad. Nuestras oraciones son levantadas al Señor para que nuestros lectores solo la disfruten, sino que las defiendan con pasión. LA MATERNIDAD BIEN EJERCIDA ES LA BASE DE NUESTRAS SOCIEDADES.
MADRES: INTERCESORAS POR EXCELENCIA Pág. 08
¡AMÉN!
EL PRIVILEGIO DE PODER SER MADRES Pág. 09 MADRES EMPRENDEDORAS Y Pág. 09 PROFESIONALES MADRE:MUJER VIRTUOSA
La Esencia de Todo: No hay duda que la Biblia aprueba las familias numerosas el nacimiento de cada hijo, es siempre un maravilloso misterio que jamás pierde el toque de milagroso. Las familias numerosas tienen mucho a su favor, en cuanto a la educación práctica de los hijos, que se realiza en ellas casi de un modo automático, y en los lazos de lealtad y ejemplo que se engendran entre sus diversos miembros.Sin embargo no siempre es prudente desear muchos hijos. La salud de la madre puede ser un factor decisivo, o bien otras circunstancias negativas.En ningún caso deben procurarse hijos sin contar con la posibilidad de educarles para el Señor y supervisar personalmente su crecimiento en la gracia. ¿Significa esto que el marido y la esposa deben romper sus relaciones conyugales íntimas? Hacerlo así haría peligrar seriamente el bienestar del hogar y sembraría semillas de descontento e incontinencia. Parece que nada en la Biblia se opone a la paternidad planeada. Sin duda esta es una parte del matrimonio que merece seria atención ya que se trata de traer nada menos que un hijo al mundo. Tal decisión requiere meditación, propósito y oración pidiendo de Dios sabiduría y fortaleza. Su médico les informará acerca de los métodos para espaciar los hijos. Puede recomendarles uno enteramente natural que se llama el del “ritmo periódico de la mujer”, o puede aconsejarles el uso de ciertas precauciones terapéuticas. Lo que Vd. debe entender es que no hay ninguna prohibición
Pág. 10
EL PRIVILEGIO DE SER MADRES
escritural al respecto. Con el consentimiento de ambos, marido y mujer, y con el vivo deseo de tener el mejor círculo familiar, la decisión mutua merece la aprobación de Dios. Es indiscutible que los hogares son incompletos sin la bendición de los niños. ¡Cuán maravilloso es que Dios une el asunto del nacimiento de los hijitos con éxtasis del amor matrimonial! Por otro lado, los niños pueden enseñar lecciones prácticas. Aún cuando los padres son los que enseñan a los niños a comer, andar, hablar, y tantas otras cosas, el niño también enseña lecciones a los padres.
Los padres aprenden lecciones de paciencia cuando el niño inocente e indefenso depende de ellos; enseñan altruismo. ¡Cuántas madres y padres son entrenados en espíritu de propio sacrificio cuando se trata de alimentar o vestir al niño! Importantes lecciones espirituales son aprendidas en el afecto paternal a sus propios hijos, y estos les estimulan a vivir vidas ejemplares, para grabar en ellos beneficiosas impresiones. Resulta un genuino crecimiento hacia la madurez
en ambos padres el criar a sus preciosos hijos. El punto mas alto de la bendición es cuando los padres son testigos del proceso de salvación en sus propios hijos, criados sobre sus rodillas. Este es un gozo supremo. Deuteronomio 6: 7-48 CUANDO LLEGAN LOS NIÑOS ¡Qué glorioso privilegio es ser madre! Ahora puede sostener en sus brazos este milagro de la vida que ha estado realizándose en el nido de su propio seno durante nueve meses. Ahora puede ver por sus propios ojos la emocionante personificación del amor que unió su corazón al de su marido. Quizás la niña tiene una nariz, como Vd. pero los ojos son del papá; o quizás el niño tiene el cabello y la barbilla de papá. Sea como sea, cada hijito es de ambos, para gozarlo ambos y educarlo por el camino de Dios y del bien. Su posición como madre es super importante. Ningún otro trabajo o cuidado en el mundo lo es tanto. Vd. tiene el privilegio de moldear vidas que existirán eternamente. Las impresiones que Vd. dé a este niño o niña, jamás se desvanecerán. Sus hijitos son como blando barro en sus manos; serán exactamente lo que Vd. y su marido les hagan ser. Dicen los expertos en pedagogía que las tres cuartas partes de la educación infantil está completa cuando los niños alcanzan la edad de siete años. Dios ha planeado así. No es ningún secreto, que las actividades menos importantes de su vida y de su hogar deben ser pospuestas en favor de sus hijos. El señor bebé; o
“ Honra a tu padre y a tu madre ....” Éxodo 20:12
Maestro William W.Orr la señorita de la cuna, son gente muy importante. Piense que sus vidas han de prolongarse no sólo por los años del tiempo de sus vidas, sino por los siglos de la eternidad. Sus almas eternas estarán viviendo cuando las ciudades de la tierra se habrán derrumbado y hecho polvo.No levante sus manos con desaliento, diciendo que Vd. no es suficiente para tal tarea, Dios está pronto para aumentar su capacidad1 para esta responsabilidad especial, Vd. es una madre porque Dios la ha hecho madre. Aunque es cierto que él éxtasis de amor fue lo que produjo la unión de las dos pequeñas células dentro de su cuerpo, es también cierto que Dios desarrolló una operación maravillosa en su seno para dar lugar al nacimiento de su hijo. ¿Suponía Vd. que cuando Dios puso un niño en sus brazos él se inclinaría a ayudarle en la tarea de educarle? El está siempre pronto para ayudar2. Nadie puede ocupar su lugar. Dentro del círculo de su influencia existen dos fuerzas principales, la herencia y el ambiente. El niño naturalmente será semejante a Vd. (y a su padre también) no sólo en semejanza física, sino también moral y espiritual. Sus puntos fuertes serán también los suyos, y asimismo los puntos débiles. Las características que falten en su vida, faltarán también en la suya o la de sus hijitos. Nadie puede entender a su bebé como Vd. Vd. está especialmente designada para ello, y lo que es más, Vd. lo ama como nadie lo amaba. Afortunadamente, para esta tarea, Dios, Vd. su marido y el bebé, pueden constituir un grupo vencedor.
04
Edición 115 | Maternidad
¿BENDECIDA O MALDECIDA ? Las mujeres somos seres multifacéticos. Hacemos muchas tareas a la vez y cumplimos con infinidad de roles. Trabajamos más allá de nuestras fuerzas, gracias a las capacidades que Dios puso en nosotros. Yo reconozco esto como un privilegio. No obstante, sé que muchas mujeres sienten que llevan una pesada carga. Se sienten maldecidas, en vez de bendecidas, como en verdad son. Las situaciones se nos convierten en difíciles y frustrantes porque se nos olvida lo que en un principio nos llevó hasta allí. Veamos Génesis 3:1-3: “Pero la serpiente era astuta, más que todos los animales del campo que Jehová Dios había hecho; la cual dijo a la mujer: ¿ Conque Dios os ha dicho: No comáis de todo árbol del huerto? Y la mujer respondió a la serpiente: Del fruto de los árboles del huerto podemos comer; pero del fruto del árbol que está en medio del huerto dijo Dios: No comeréis de él, ni le tocaréis, para que no muráis” La serpiente utilizó a Eva para detener el plan de Dios, tanto para el hombre como para la mujer. Cuando vemos el momento en que Adán recibió la instrucción de parte de Dios, todavía la mujer no estaba manifestada, es decir que la instrucción la recibió Adán. La misma fue: “del árbol de la ciencia del bien y del mal no comerás ” Gen. 2:17. En ningún momento Dios dijo que no le tocaran. Sin embargo, cuando Eva habla a la serpiente, dice: “no le podemos comer ni tocar”. La instrucción de no tocarlo probablemente vino de Adán. Supongo que al repetir la instrucción recibida por Dios, añadió ese detalle para proteger a la mujer. Si el fruto no se tocaba, era imposible comerlo. El problema surgió porque Eva tocó y comió del fruto, y al ver que aparentemente nada pasó, decidió ofrecerlo al hombre. Las consecuencias del pecado traen confusión a muchas mujeres y no les permiten ver sin “o” bendecidas o maldecidas. Veamos las consecuencias que tuvo para la mujer el pecado de Adán. Génesis 3:16 nos dice: “A la mujer dijo: Multiplicaré en gran manera los dolores en tus preñeces: con dolor daras a luz los hijos; y tu deseo será para tu man o, y se enseñoreara de ti.” Consecuencia 1 Multiplicaré (Aumentaré) el dolor de tus preñeces Siempre que la Biblia habla de una mujer embarazada, representa la manifestación del propósito de Dios. Lo vemos en la vida de tantas mujeres que por medio de su tiempo de gestación y el nacimiento de aquello que llevaban dentro de sí, su propósito fue manifestado, Vemos en Sara y Abraham cómo el nacimiento de Isaac le dio cumplimiento a la promesa de Dios para sus vidas. Vemos, en el nacimiento de Moisés, la liberación de la vida de su madre Jocabed y con ella, la libertad del pueblo de Israel. Y por último, para sólo mencionar algunos, vemos a María con un llamado de parte de Dios para cargar en su vientre al Salvador del mundo. Cuando Dios habla de que aumentará el dolor de la preñez, lo que quiere decir es que iba a haber dolor en la manifestación del propósito que El puso dentro de la mujer. A veces no entendemos por qué sentimos que tenemos que trabajar más fuerte para obtener resultados que a nuestro entender
Pastora Omayra Font Todo el cuidado que reciben durante sus primeros años está acompañado de sacrificios, mayormente de parte de mamá. No importa la posición en que estemos, siempre tenemos que trabajar con nuestras emociones, pensamientos preconcebidos, y las expectativas de la sociedad y hasta de nuestra propia familia para criar a nuestros hijos. En la naturaleza de muchas mujeres está poner a sus hijos por encima de ellas mismas.
otros alcanzan con más facilidad. Esta impresión que tienen muchas mujeres es resultado de la primera consecuencia del pecado del hombre. Claro, no podemos dejar a un lado que muchos derechos de las mujeres, a través de la historia, se consiguieron mediante dolor y sacrificio. Un vivo ejemplo es la disputa que hubo en los Estados Unidos durante casi dos siglos para conceder a las mujeres el derecho al voto. Lydia Chapín Taft recibió el derecho a votar en el 1756 en una reunión de su pueblo, luego de la muerte de su esposo y su hijo mayor. Sin embargo, no fue hasta que se creó la decimonovena enmienda de la Constitución de los Estados Unidos en el 1920, que se puso fin a la controversia sobre el voto femenino. Todavía hoy muchas estadísticas demuestran que en promedio las mujeres ganan 23% menos en la fuerza laboral que lo que devengan los hombres haciendo el mismo trabajo. Aunque entiendo que esto no necesariamente representa discriminación, mas bien la desigualdad que aún existe en la remuneración económica, las estadísticas no dejan de ser la realidad que enfrentan las mujeres. En nuestra vida cotidiana vemos que es común que la mujer trabaje el doble en todas las áreas. No le toma el mismo tiempo a una mujer prepararse para una fiesta que lo que le toma al hombre. Treinta minutos antes de salir para la fiesta, el hombre se da un baño, se viste, se perfuma y sale. La mujer, por el contrario, tarda semanas en conseguir el vestido apropiado, para entonces enfrentarse a la interrogante de los zapatos que acompañarán el vestido. Ocho horas antes de la fiesta hay que ir al salón de belleza para arreglarse el cabello, y pasar prácticamente medio día en esta gestión. Ya de regreso a la casa, hay que correr para dejar todo en orden: cocina limpia, niños acomodados (si no van a la fiesta, si van ¡hay que prepararlos también!), y hasta los animales hay que dejarlos atendidos. Entonces comenzamos a vestirnos, a escoger accesorios y el maquillaje. En fin, salimos para la fiesta dos horas más tarde de la hora citada, muchas veces insatisfechas de cómo lucimos y sabiendo que se nos quedaron mil cosas sin hacer. Estos son sólo algunos ejemplos que dan lugar a que la mujer muchas veces sienta que tiene que trabajar dos veces más para alcanzar aquello que desea. A través de la historia, la mujer ha tenido que vencer con dolor todos los retos que se han presentado en su vida.
de ellos se produce bajo la tensión y la manifestación del dolor más agudo que probablemente muchas mujeres han experimentado. De hecho, estoy segura que muy pocas mujeres han experimentado un dolor más fuerte y profundo que el de dar a luz. Si analizamos con sinceridad, los hijos nos producen dolor, aún desde antes de nacer. Tengo muchas amigas que han tenido que trabajar con los retos de la esterilidad e infertilidad. Incluso antes del nacimiento de nuestra hija más pequeña, yo misma me enfrenté, durante cinco años, al reto de la infertilidad. Es una situación muy difícil. La tensión que se vive mes a mes... las pruebas de embarazo negativas... el peso emocional de ver a otras madres con sus bebés en la calle y tú esperando recibir el tuyo. Solamente una mujer puede entender el dolor que siente otra mujer cuando busca quedar embarazada y no puede. Mujeres cuidan a los padres, a los hermanos y a los maridos; trabajan arduamente en su casa, en sus empleos o negocios y se enfrentan a miles de retos diariamente. A nosotras las mujeres nos pueden abandonar los maridos o nuestros padres, podemos perder un empleo o un negocio, se nos puede quemar la casa, pero ¡que le pase algo a nuestros hijos! que hasta ahí llegamos nosotras. Ahora, permíteme hacer una pausa para aclarar algo muy importante. ¡Tu marido no produce dolor! Si tú piensas que tu marido produce dolor, tu enfoque está en el lugar incorrecto. En ningún lugar en la Biblia dice que el marido le causa dolor a la mujer. Si tú sientes dolor en la relación con tu marido, tienes que evaluar esa relación y ponerla en orden con la Palabra de Dios porque cabe la posibilidad que esté siendo atacada por el enemigo. Los hijos son los que producen verdadero dolor. Se produce dolor cuando el enemigo ataca a nuestros hijos, por ejemplo, con las drogas, alcohol o alguna enfermedad en sus cuerpos. ¡Qué gran reto enfrentamos las mujeres cuando algo negativo toca a nuestros hijos! Siento dolor cada vez que veo a una madre derramar lágrimas por sus hijos cuando por alguna razón están siendo atacados.
Consecuencia 2 Con dolor dará a luz a sus hijos
Cosas tan pequeñas como un simple desacuerdo de nuestros hijos con algún compañerito de la escuela, hasta verlos sumergidos en vicios o padeciendo alguna enfermedad, tocan las fibras más intimas de nuestros corazones.No importa cuán leve o complicada sea la situación, siempre estamos involucradas y aludidas.
Cuando hablamos de verdadero dolor en la vida de una mujer, muchas veces está relacionado con los hijos. El nacimiento
Cada etapa de la vida de nuestros hijos va acompañada de dolor. Su nacimiento, como ya explicamos, llega con dolor.
Yo podría mencionarte miles de etapas en la vida de los hijos que producen dolor a la mujer, por ejemplo, cuando están enfermos. Me refiero desde el más simple catarro hasta enfermedades más complicadas, o cuando no hay manera de darles de comer, ya sea que no tienen apetito por cualquier razón, o sencillamente son selectivos con su comida. Piense en ese primer día cuando los llevamos a la escuela o la guardería, sin dejar a un lado el día que comienzan en la universidad... cuando sufren un accidente desde un tropiezo hasta cosas que prefiero ni mencionar... y ni pensar en el terrible día cuando se van del hogar, ya sea por matrimonio o simplemente porque les llegó el momento de independizarse. Ser madre es una de las cosas más maravillosas que puedas experimentar en tu vida, pero no deja de estar acompañado de dolor. En el 1996 recibí el don de ser madre por primera vez con nuestra hija Joanirie. Luego, en el 1998, nació nuestra segunda hija Janaimar y tan reciente como el 2009, nació la bebé de la casa, Jenibelle. Le pido al Señor que nuevamente me de la oportunidad de ser madre. Sin embargo, cada etapa de las vidas de mis hijas, igual que para todas las madres en la humanidad, ha ido acompañada de dolor, muchas veces incertidumbre e incontables sacrificios. De ninguna manera pretendo que pienses que los hijos están solamente para causar dolor. Eso es algo que no podemos perder de perspectiva. Cada triunfo o fracaso de nuestros hijos viene acompañado de muchas emociones que tenemos que aprender a manejar e identificar correctamente, para poder cumplir el propósito divino que Dios nos dio al asignar cada uno de nuestros hijos a nuestra vida. En realidad, son más las alegrías que producen que las tristezas. Es un privilegio ser madre, algo que desafortunadamente ningún hombre jamás podrá experimentar, por mejor padre que sea. Para los hombres está reservado el gozo de la paternidad, algo que para nosotras es un misterio.
“Sus hijos se levantan y la llaman bienaventurada...” Proverbios 31:28
Maternidad | Edición 115
05
ENEMIGA DE LA SERPIENTE
Profeta Pavlo Chaves Es de sobra conocido que la mujer históricamente ha sido marginada dentro de las estructuras sociales de la humanidad. Eso no es nada nuevo. No importa cuál sea el idioma, la tradición o la misma religión; siempre ha ocupado un papel secundario. Actualmente encontramos bib’iotecas repletas que explican las razones tanto geopolíticas, como sociocultu rales de esa marginación, sin embargo, ¡a atención de este libro es ubicar la raíz espiritual del problema. No solo con la intención de denunciarla, sino también para destruirla. Es vital que descubramos la fuente de esta maldición, unos para detenerla y otras para nunca más aceptarla. A través del tiempo las mujeres se han visto condicionadas a un sitio de resignación horrendo, donde su destino queda expuesto a los vaivenes que vivencian los hombres a su alrededor. Al contemplar esa fragilidad, casi convaleciente en la que se ha ubicado a las mujeres, la Iglesia de Cristo debe cuestionarse seriamente si todo ese sistema opresor es lo que el Creador concibió originalmente. ¿Cuántas de esas cargas se las hemos impuesto injustamente? ¿Cuánto de ¡o que pueden o no hacer es el resultado de los caprichos ingratos, y cuáles de esas faenas terrenales son realmente los deseos del corazón del Padre?
un mensaje que le impida a Satanás seguir esclavizando a las mujeres del Pueblo del Señor. En las manos de los varones está la oportunidad de multiplicar un discurso, que no nos necesita para que sea validado, por el contrario, nosotros lo necesitamos para convertirnos en mejores cabezas de familia. Llegó el tiempo de darnos cuenta que dentro del mundo occidental no solo hay una decadencia moral, como viene denunciando la Iglesia de Cristo. También hay que reconocer que se han peleado luchas dignas décadas atras, que le dieron una mejor calidad de vida a ciertos sectores. En medio de revoluciones que parecieron ser anti-bíblicas, como lo fue en su
El Todopoderoso a través de sus Escrituras se ha revelado como un ser restaurador y perdonador, a tal punto que envió a Su Hijo para redimirnos. ¿Por qué desearía el Señor continuar castigando a las mujeres si ahora hemos sido hechos nuevas criaturas? Históricamente la Iglesia gentil ha sido llamada a vivir en Cristo bajo un manto de libertad y fuera de la imposición de legalismos judaicos. ¿Cuál es el argumento que se ha ostentado para que se emancipasen de la ley los hombres, y por otro lado dejar esclavizada a la mujer? ¿Esto es realmente lo que Dios quiere? ¿No merecen ellas, como hijas de Dios, el mismo sitio que los varones delante de Su Presencia? Todas preguntas, que intentaré responder a través de la Palabra con una óptica profética. En los últimos años de mi ministerio, he recibido un fuerte llamado para restaurar la posición de la mujer dentro del Reino de Dios. A través de múltiples proyectos he sentido un llamado cada vez más fuerte para golpear espiritualmente las estructuras que mantienen aprisionadas a tantas ministras en potencia. Confieso que al principio de todo este proceso no creía que habría tanto énfasis en mi mensaje sobre la redención femenina, sin embargo, he visto al Espíritu Santo encajar muchas piezas para darle sentido a lo que antes era un puzle desarmado. También he llegado a comprender que este trabajo no es solo una labor de ellas, los varones debemos involucrarnos. Alguna vez una pastora, luego de escucharme predicar en nuestras reuniones de damas me dijo. a no tiene idea lo importante que es lo que usted está haciendo cuando le predica a las mujeres, porque históricamente han sido los hombres los que le han quitado el lugar a la mujer, las han violado, herido, les han robado su dignidad, y es muy importante que ahora las mujeres puedan escuchar un mensaje redentor por boca de un varón”. Aquellas palabras sin duda sacudieron mis fibras más profundas. Es urgente que el liderazgo masculino dé un paso al frente para darle la mano a aquellas que vienen emergiendo. Es imperativo que muchos hombres comiencen a comportarse como sacerdotes y dejen de ser sus verdugos. ¡Basta ya de tanta ceguera dentro de la Iglesia! Padres y esposos son llamados a abanderar
sus hijos escogieron ni merecen? Al no haber estado presente una óptica cristiana correcta que luchara por las necesidades de aquellas madres y sus familias, los enemigos de Dios han sacado ventaja. Con sutileza se han infiltrado en el tejido social para convertir este tipo de reivindicaciones en una especie de revanchismo. Han puesto a todos los varones en el saco de los victimarios y a las mujeres como víctimas de todo. Es quizá por esto que dentro de las congregaciones la igualdad de la mujer se ha satanizado como un intento de ellas por gobernarlos a ellos. Convirtieron una reivindicación moralmente justa en una batalla campal, no solamente entre sexos, ahora el blanco es atacar el concepto mas elemental de la familia. Hoy ganan los divorcios a los matrimonios, las nuevas generaciones ni siquiera quieren casarse y otros llaman casamiento a cualquier cosa. Y no se han saciado con eso, ahora se han comenzado a reasignar los roles masculinos y femeninos bajo conceptos que son contra natura. En consecuencia con la gran distorsión social que hoy se tiene sobre el papel femenino, dedicaré los siguientes párrafos para analizar el libro de Génesis, base de las tres religiones monoteístas más importantes del mundo, y cuya tergiversada interpretación ha llevado a impedirles el acceso a las mujeres a su verdadero lugar dentro del Reino de los Cielos. Mi principal deseo es conocer el corazón de Dios fuera de una ortodoxia teológica, que tanto daño le ha hecho a la humanidad históricamente. En el ámbito legal se d:-ce que toda ley fue inspirada con una intención, a la cual se le llama “el espíritu de ¡a ley”. La Iglesia se ha dedicado a releer una y otra vez la legislación bíblica dejando por completo de lado la intención que hubo detrás de ella. Conocer “el espíritu de la ley” bíblica nos ayudará enormemente a entender lo que el Eterno siempre ha tenido en su corazón para con Sus hijas.
tiempo el feminismo. Un movimiento que libró batallas para otorgarle oportunidades a tantas mujeres y simultáneamente a sus familias para salir adelante. Peleas que fueron el resultado de un saco roto por la discriminación y la precariedad. A mitad del siglo pasado era sumamente común que las madres solas tuvieran que llevar vidas durísimas junto a sus hijos, porque ninguna ley tutelaba la responsabilidad de los padres para con sus vastagos. Mi propia abuela fue un caso dramático cuando quedó en el desamparo con ocho hijos que alimentar, y asi ha sido lastimosamente durante generaciones. Son incontables las criaturas que se han dado a luz en medio del abandono absoluto. ¿Cuán bíblico es ese modelo por el que tantos luchan por perpetuar, teniendo oprimida a la mujer? Por momentos pareciera que la verdadera intención de esos discursos desde los pulpitos es mantener el estatus quo, donde los ganadores siempre son los mismos. Es tétrico recordar cuántas familias han sido victimizadas sexual y físicamente por las figuras paternas del hogar sin que haya consecuencia alguna. ¿Qué sentido cristiano tiene que la Iglesia ayude, cual carnicero siniestro, a cercenarle a la mujer cualquier voluntad de velar por la salud de su familia, viviendo resanada a un destino que ella ni
Si pudiéramos hacer un gran resumen de porqué hoy las mujeres han aceptado tanta marginación, encontraríamos que mucho tiene que ver con la culpa que se les ha otorgado ancestralmente a través de un mensaje religioso. Cualquiera que lea la Escritura en sus primeros capítulos, podría pensar que la principal responsable de la caída fue la mujer, y trasladarle ese error a todas las demás a través de los púípitos ha sido muy simple. Bastaría con hacer un pequeño cuestionarlo para darnos cuenta que muchas de las decisiones que las crist’anas toman o dejan de tomar depende de su nivel de cupa, aun cuando es evidente que no la tengan. ¿Cuántas esposas abnegadas han soportado abusos durante décadas solo por un remordimiento ilógico de lo que ocurrirá con sus hijos? ¿Cuántas madres cargan con los errores de sus proles únicamente por el mal de conciencia de haberlos engendrado? La culpa es el paquete más pesado con el cual la Iglesia ha cargado sobre las mujeres, corriendo el riesgo de hacer nulo el sacrifico de Cristo en la cruz, de quien el profeta Isaías dijo: Isaías 53: 4-5 (DDHH) “Y sin embargo, él estaba cargado con nuestros sufrimientos, estaba soportando nuestros propios dolores. Nosotros pensamos que Dios 1 o hab/a herido, que le habla castigado y humillado. Pero fue traspasado a causa de nuestra rebeldía, fue atormentado a causa de nuestras maldades; el castigo que sufrió nos trajo la paz, y por sus heridas alcanzamos la salud”. En la versión hebrea la palabra “paz” se traduce “Shalom”, evocándonos una tranquilidad más
allá de la normal. Se nos está predicando de “la paz que sobrepasa todo entendimiento (Filipenses 4:6-7), la cual es el resultado de poner nuestras cargas de’ante del Señor. Ese peso de culpa que le hemos querido asignar a las mujeres no es ni bíblico ni justo. A pesar de que todos hemos sido perdonados, ellas siguen siendo delincuentes. Continúan siendo culpables por la forma en la que se visten, por cómo, dónde o con quién caminan, si se maquillan o no, por el largo de su cabello. ¡Basta de pisotear el sacrificio de Jesús! Como consecuencia de este error doctrinal, la mujer ha intentado sobrevivir dentro de la casa del Señor asumiendo una perene posición de víctima. Adoptando una figura inmóvil que no disguste a nadie, se le ha prohibido orar en voz alta o predicar el Evangelio con liberalidad, como si los mandatos de Cristo (Marcos 16:1518) hubieran sido solo para los varones. Con un poco de lógica nos podríamos preguntar quién gana cuando la mayor población de las iglesias tiene que andar a hurtadillas preguntándose si puede o no hacer algo en lugar de avanzar con fuerza hada el establecimiento del Reino de los Cíelos. No hay que meditarlo mucho para darse cuenta que quien sale ganancioso es el diablo. Ese papel de criatura sufrida y desamparada no tiene nada que ver con el rol, que el Todopoderoso le asignó a la mujer después de la caída. Aun señalándola como responsable de la situación, Dios también le mostró el camino de su redención, vinculando esa puerta de salida con el castigo que experimentaría Satanás, representado en la figura de la serpiente. Dentro de la maldición que el Padre celestial desató sobre Lucifer no solo lo condicionó a arrastrarse y comer polvo, le asignó una rival en la tierra que destruiría todo lo que tratara de edificar, que le perseguiría donde quiera que estuviera. Ei Todopoderoso jamás concibió a la mujer como víctima, sino como enemiga de la serpiente. Génesis 3:15 (DDHH) Haré que tú y ¡a mujer seáis enemigas, lo mismo que tu descendencia y su descendencia. Su descendencia te aplastará la cabeza, y tú le morderás el talón”. •Qué clase de poder y autoridad le confirió Dios a la mujer! La hizo capaz de pelear centímetro a centímetro por su herencia, su matrimonio, sus hijos, sus finanzas y territorio. En el mismo lugar del juicio por su pecado le advirtió al diablo que ese sería el últmo d a en el calendario en que pudo hablare, mismo lenguaje que ella. Desde entonces toda mujer cuando le dicen muerte, habla vida; cuando le apuntan con enfermedad, proclama sanidad. Es por esta razón que cuando a una madre le dicen que no alcanza, ella lo multiplica. Le gritan: “no puedes”, y ella logra sacar adelante a su descendencia contra todo pronóstico. Desde el mismo día en que la humanidad cayó, el Eterno se encargó de levantar a la mujer como una guerrera formidable. Preparando una enseñanza para un grupo de mujeres que dirijo, en mis momentos de intimidad con el Señor, le pregunté: ¿Por qué el diablo escogió a la mujer en lugar del varón para hablarle? El Espíritu Santo me explicó que la mujer tiene un don natural dado por Dios para interpretar el mundo invisible. Lo relacioné con la famosa frase que proclama que toda mujer tiene un sexto sentido. Recordé las muchas veces que mi madre me advirtió de algo, que terminó pasando y cómo esto ocurría en prácticamente todas las familias. Lo que el mundo llama “sexto sentido” es una habilidad profética natural que Yo les doy a mis hijas, me intervino Dios. Es por esa razón que el diablo
“Oye, hijo mío...no abandones la enseñanza de tu madre ...” Proverbios 1:8
06
Edición 115 | Maternidad -Nunca más habría acuerdo entre ellos. -Hablarían distintos idiomas para que no pudieran entenderse. La habilidad natural para captar el mundo invisible nunca más podría ser usada por la serpiente para engañarla. La serpiente buscaría la manera de atacar permanentemente y ella debería hacer lo propio.
escogió a Eva, él conocía esa ventana y la utilizó, continuó el Señor. Si hubiera buscado al varón posiblemente ni se hubiera percatado de que le estaba dirigiendo la palabra una serpiente, pensé. Es por esta causa que Yo me encargué de cerrar para siempre esa grieta, dándoles la tarea de pelear constantemente contra Satanás en la tierra y profetizándole que así como ella trajo el pecado, también traería en su vientre la salvación al mundo, me sentenció el Espíritu. Luego de semejante conversación quedé absorto por unos momentos, viendo cambiar completamente el panorama de cómo Dios ve a la mujer. Sentí que en fracción de segundos el Señor me destruyó todos los estereotipos del rol femenino dentro y fuera de la Iglesia. Comprendí porqué las mujeres masivamente asisten a las congregaciones, mientras que cuesta tanto que los varones se congreguen. Ellas tienen una mayor disposición hacia el mundo sobrenatural. Mientras nosotros necesitamos ser convencidos con argumentos o números, ellas tienen una mayor facilidad para creer; han sido diseñadas para tener fe. Falta convocar a una jornada de oración o ayuno para que los asistentes sean en un 99.9% mujeres, donde posiblemente el único varón sea el pastor. Fue como el sobrevenir de una catarata de ideas en mi mente, las que me hicieron darme cuenta que nuestra sociedad, guiada por Satanás, ha tratado de convencerlas de que crean que sus fortalezas realmente son debilidades. ¡Vaya trabajo ha hecho el diablo!, pensé. No solo nos ha movido como varones a predicar semejantes atrocidades, sino que también ha convencido a muchas de ellas para hacerlas pensar que no son capaces, que no pueden hablar y mucho menos ejercer el servicio a Dios dentro del ministerio. De repente también me di cuenta cómo Luzbel mira a las mujeres. Él no piensa en ellas como víctimas, mucho menos como frágiles criaturas que no pueden defenderse. Las mira como verdaderas armas nucleares espirituales en potencia, que llegado el d>a que se den cuenta, podrán destruir todo lo que las tinieblas hayan edificado. Es como que el reino de la oscuridad ha intentado mantener anestesiada la naturaleza de la mujer. Ya sea mediante mensajes legalistas o la violencia doméstica, existe sobre la tierra una fuerza destructora que las persigue. Palabras hirientes, discriminación, acoso sexual, abuso patrimonial, incesto, prostitución, violación, contagio de enfermedades venéreas, trata de personas, esclavitud infantil, infidelidad matrimonial son solo algunas de las armas que constantemente el infierno usa en su contra. Pareciera que no les da tregua, y por si esto fuera poco en la Iglesia en lugar de empoderarlas bajo su llamado, les hemos cortado las manos y los pies. ¡Es hora de cambiar esto! Debemos predicar más que
nunca en nuestro templos que “ya no hay judío ni griego; no hay esclavo ni libre; no hay hombre ni mujer, porque todos vosotros sois uno en Cristo Jesús” (Gálatas 3:28). Eva: La madre perfecta. La idea religiosa, que se ha construido acerca de Eva, es el .ejemplo perfecto del tremendo odio que el infierno tiene contra las mujeres. Basta con intentar describir las características de este personaje en nuestra mente para darnos cuenta que la mayoría son negativas. Nadie, ni las mujeres mismas, le perdonan todavía a Eva lo que hizo. Le seguimos asignando los delitos de la humanidad hasta el presente. Hemos sido educados para pensar que ella fue la responsable de seducir al hombre y desobedecerle a Dios. A partir de ese argumento todos lo demás se desgrana como mazorca: chismosa, entrometida, indómita, seductora, desubicada, mentirosa, falsa, hipócrita y cuantos adjetivos se nos ocurran. Para alcanzar la restitución de la posición de la mujer, primero hay que redefinir este personaje tan ;mportante para la historia bíblica. En otras palabras, Eva merece ser entendida, como lo haría un abogado defensor que se prepara para presentar los descargos. Si bien su culpa no puede ser borrada, sí podemos ver más allá de io obvio para penetrar con un ojo profético, que nos permita comprender la óptica divina detrás de la sentencia. Génesis 3: 14-15 (Versión Kadosh) Elohim dijo a la serpiente: Porque has hecho esto, tú eres más maldita que todo ganado de cria y todas las bestias de la tierra. Te arrastrarás sobre tu pecho y panza, y comerás tierra por el tiempo que vivas. Pondré enemistad entre tú y la mujer, y entre tu zera (semilla) y la zera (semilla) de ella; él vigilará contra tu cabeza, y tú vigilarás contra su calcañar”. Retomemos un poco el tema de la enemistad entre el diablo y Eva. Empecemos definiendo qué implica esta rivalidad. Según lo define el diccionario la enemistad “es una relación de aversión, odip u oposición entre dos o más personas. Es lo contrario a la amistad. Consiste en un rechazo, no necesariamente mutuo, aunque si frecuentemente, entre varias personas. Se manifiesta con: agresiones verbales, continuos intentos de intimidación, agresiones físicas, intento de hacer al otro/otros la vida imposible y profundo sentimiento de odio. No obstante, puede haber enemistad entre ciertos colectivos, causadas por las distintas ideologías u opiniones, y ser consecuencia de la envidia”. Basándonos en la definición de enemistad podemos concluir que la sentencia divina buscaba producir una contienda, que implicaría varias cosas, las cuales podemos resumir en: Ninguna de la partes buscará la paz con el otro.
Cuando hacía el estudio previo a este material, me llamó mucho la atención en la definición de enemistad la última causal para que dos grupos se vieran enfrentados: envidia. Reflexioné por un instante en esto y pude entender que gran parte del motor satánico que va contra las mujeres es movido por los celos. La pregunta obvia sería: ¿Qué podría envidiarle el diablo a Eva? La respuesta es sencilla: la redención. Lucifer al igual que e!ia cayó (Lucas 10:18), fue juzgado (Ezequiel 28:15-17), pero nunca tuvo acceso al perdón divino y muchísimo menos a ‘a restitución de forma tan gloriosa. Para entender cabalmente a Eva necesitamos comprender la dimensión del veredicto celestial en su contra. Es innegable que la caída trajo consecuencias, tanto para ella como para Adán, sin embargo, eso no fue todo. Cuando enseñamos sobre estos pasajes, trad.’oonalmente el enfoque está en el pecado, pero detrás de las repercusiones de la maldad hay una enorme puerta de salvación. Literalmente Dios le profetizó a la mujer sobre su destino, le anunciaron que al ser ella la vía que el infierno usó para hacer caer a la humanidad; Dios la emplearía también como canal para restituir todo lo quitado. Esa promesa es quizá la más poderosa, que se registra en las Escrituras. La conexión entre el cieio y la mujer fue fuertísima. María, siglos después, sería ía receptora de esas palabras, ya que través de su vida fue traído el Mesías a la ríema. ¡Impresionante! Gracias a esta perspectiva nos damos cuenta que la concepción divina sobre la mujer está lejísimos de la que se ha construido dentro de la Iglesia. Ellas no son víctimas, tampoco culpables; son el instrumento profético perfecto creado por Dios para traer Su respuesta a la humanidad. El Todopoderoso dotó a la mujer con la capacidad de producir vida en su interior, eso le permite saber con certeza cuándo algo grande viene. Antes de que nazca, ya ella lo porta dentro. No necesita ver, ni tocar para creer, porque su naturaleza profética se lo confirma y les permite confiar. En las próximas páginas me dedicaré a demostrar, que cada vez que el Señor quiso desatar algo nuevo y sobrenatural en la tierra, primero buscó a las mujeres. Ellas sí están en Su lista, y para los que no lo sabían, son prioridad. Al regresar a la promesa que recibió Eva podemos seguir ahondando en temas interesantes. Como por ejemplo, la forma en la que se libraría esa guerra. Evidentemente no sería mediante armas convencionales. Sería una batalla de linajes. La simiente de ella enfrentaría a la semilla del infierno. Cuando mencionamos este texto la tradición cristiana nos evoca a Cristo, como yo mismo lo he hecho, pero ahora quisiera centrarme en Eva, como mujer, pero sobre todo como madre. A partir de este punto ella se convertirá en el centro del conflicto que le sobrevendrá a la humanidad de aquel tiempo. No podemos olvidar que la profecía dada por Dios le anunciaba al diablo su derrota, y aunque esto es inevitable, satanás nunca ha tenido fama de resignarse. Él pelea por cambiar el curso establecido, quiere evitar a toda costa que las palabras del Altísimo se cumplan. Cuando él escucha aquella sentencia en su contra las tinieblas empiezan a movilizarse. Traman un plan. Buscan el punto más frágil y lo encuentran en la semilla. Mientras esta no muera y brote podrán robarla, porque el
día que la simiente nazca el resto es historia. Dios cumplirá. Rebelará su naturaleza infalible, ya que Él no es hombre para mentir ni hijo de hombre para arrepentirse. Es entonces que a partir de este punto las fuerzas diabólicas se concentran en robarle a Eva su descendencia. Pienso que debieron imaginar que sería fácil, al igual que ‘o hicieron con ella, seducirían a sus hijos para que se apartaran de! propósito y así evitarían Génesis 4:1-2 (Versión Kadosh) “El hombre tuvo relaciones sexuales con Eva su esposa; Ella concibió, dio a luz a Caín (adquisición), y dijo: “He adquirido un hombre de parte de YAHWEH”. Además, ella dio a luz a su hermano Abel (aliento). Abel pastoreaba ovejas, mienrtas que Caín trabajaba la tierra” Ya es conocida la historia, el primer embate de Lucifer fue sobre Caín. Como promogénito era el candidao perfecto para que se cumpliese la profecía sobre su vida. No había nadie mejor, el significado de su nombre (adquisición) nos demuestra con claridad la esperanza que su madre tenía en él. Caín era la herencia, el resumen de las palabras divinas sobre Eva. Para la vida de Caín había un diseño claro: acabar con la serpiente. Por su parte Abel, era también una gran alternativa. Era el aliento para que su madre creyera, si no era a través del primero, el segundo podría tomar su lugar contra la serpiente. Abel significaba una mayor esperanza. Cada uno tomó caminos distintos, pero la oración de Eva era la misma: cumplan el propósito de Dios para sus vidas. Satanás, conociendo el diseño profético original de Caín, lo torció convenciéndolo de manifestar el anti-diseño. En lugar de ser el asesino de la serpiente terminó acabando con la vida de su hermano. En vez de convertirse en e¡ formidable rival del diablo, que la profecía anunciaba, se transformó en el portador de la simiente de Satanás y verdugo de las esperanzas de su madre. Dentro de ese escenario, Eva pudo caer en desesperanza. Uno de sus dos hijos había muerto y el único que sobrevivía ahora había sido maldecido por Dios. El único linaje que continuaría sería el de la transgresión (Génesis 4:17-24). Era un panorama bastante sombrío para la humanidad, pero sobre todo para la madre. No tengo duda de la sensación de cuipabilidad que pudo haber embargado a Eva eri ese momento. E ¡a había abierto una puerta para e. pecado en su familia, que ahora que le pasaba factura. Si bien etia no tuvo que ver directamente con ¡a terrible decisión de Caín, los dedos le señalaban a elle como corresponsable por haberle hecho caso a la serpiente. A pesar de que la Biblia no lo dice explícitamente, frente aquello Eva decide volcarse en clamor hacia Dios por la situación de su casa. La desazón que le pudo traer la muerte de Abel la llevó a orar incansablemente para que el futuro profético de su descendencia no se perdiera. Esta idea la podemos basar en el nombre que recibe su tercer hijo: Génesis 4:25 (Versión Kadosh) “Adán tuvo relaciones sexuales de nuevo con su espose, y ella dio a luz a un hijo a quien llamó Set (otorgado), y dijo: “Porque YAHWEH me ha otorgado otra semilla en lugar de Abel, puesto que Caín lo mató.” Como el nombre Set significa otorgado tenemos que ir a la raíz de este concepto para comprender qué fue lo que pasó detrás de su nacimiento. La idea de otorgar algo está relacionado con dos posibles vertientes. Está vinculado a conceder o dar una cosa, generalmente como mérito o recompensa y también el de entregar un donativo, osea, algo no merecido. Cuando fusionamos ambas ideas encontramos que muy posiblemente Eva tuvo que haber elevado una plegaria al cíelo antes de concebir al niño. No creo que haya
“Alégrense tu padre y tu madre, y regocíjese la que te dio a luz”. Proverbios 23:25
Maternidad | Edición 115 sido cualquier oración, debió ser un clamor desgarrador al ver a sus vástagos arrasados. Conociendo la naturaleza de la mujer, de la que tanto hemos hablado ya, su mal de conciencia debió ser enorme al haber sido ella quien abrió la puerta del pecado. Mientras tanto, en el otro extremo estaba la misericordia del Eterno. La humanidad no merecía otra oportunidad, pero el Señor se las dio y fue a través de Eva como Él mismo lo había prometido. Pavlo Che ¡rfico esa un mensa mujer act y nene w mino. De* levantó ui no llama! vés del tn restaurar en Amén vitado fr eventos f comparte fétíca sol mujeres t Los even na han II continen! das, que nombre I impactac gentes á Tanto en sional, c< destacad desarroll tro del ir suceso, avocad» redimir i con reíd femenir» impedid porfigul entendí* de direq va geni siendo II Dicho de otra forma, Set fue el resultado de lo que su madre pidió. Eva muy posiblemente hizo memoria de lo que le había sido prometido y se puso en la brecha por ello hasta conseguirlo. La justificación del nombre del niño significa que Dios siempre nos dará la semilla suficiente para alcanzar Su propósito. Es imposible que los anti-diseños puedan prevalecer frente a una mujer profética. “A Set también le nació un hijo, a quien llamó Enós. En este momento la gente comenzó a invocar el Nombre de YAHWEH”. Prácticamente en cualquier versión de lengua castellana el verso comienza de la misma forma. “A Set también le nació un hijo”, haciendo una clara alusión a la batalla entre las dos simientes. Ya para ese momento Caín se había multiplicado y sus descendientes habían poblado la tierra. A partir de ahí se levantaron dos linajes, concebidos por el mismo vientre. Por un lado el de Set, quien representaría la promesa, y por el otro, el que adversaría a Dios representando al bando de satanás, a tal grado que algunos de ellos serían expertos en música, como también lo fue Luzbel cuando habtaba en la Presencia de Dios. La guerra continuaría.
en el que los estudiosos han encontrado un consenso significativo. La descripción bíblica hace alusión a relaciones fuera la de norma. Cuando las Escrituras usan el término “hijos de Dios”, que en el original se traduce “bene Elohim”, solo aparece en dos versículos en todas las Escrituras. Las demás referencias bíblicas, que tanto conocemos, que se traducen como “hijos de Dios” en el hebreo provienen del concepto “hijos de Yaweh”. La primera vez que aparece “bene Elohim” es en este de Génesis, y el segundo está en el libro de Job, donde alude más claramente a los ángeles: Job 2:1, 1:6, 38:7. (VRV) “Aconteció cierto día que vinieron los hijos de Dios para presentarse ante Jehovah, y entreellos vino también Satanás, para presentarse ante Jehovah”. A! sumarie este verso al texto de Génesis comprendemos que la referencia es sobre angeles caídos, que se vieron seducidos no solo sexualmente, sino también en el ámbito profético. Ellos intentaron impedir el cumplimiento de la promesa dada a Eva. Trataron de involucrarse sexualmente con las mujeres de los hombres.
Haciendo memoria de la profecía que le fue dada a Eva, el mundo de los ángeles caídos ahora tenía otro flanco de ataque. Querían contaminar la semilla de la mujer en la tierra. Continuaron buscando la forma de impedir que se cumpliese la Palabra y abrieron una puerta jamás traspasada: descendieron para mezclarse con la humanidad. El texto marca una clara diferencia entre los progenitores, como hijos de Dios, y las mujeres, com0 hijas de los hombres, dando como resultado gigantes. Diferenciación que resultaría innecesaria para quien entiende que |a reproducción solo se logra entre machos y hembras de una misma especie. esa distinción se une la explicación de que “a los hombres les nacieron hijas”, las cuales fueron vistas por “los hijos de Dios”. Aunque es un tema bastante controversial, también es un asunto
Sé que en este punto empezarán a surgir muchas dudas sobre el actuar de los demonios, pero como el interés de este libro no es profundizar en el tema de los ángeles caídos, cualquier duda adicional sobre el tema le recomiendo buscar mi material RESIDENTES INMORTALES para evacuarla. Por lo pronto, y para continuar el hilo del mensaje, me quedaré con la idea, ya expuesta de la contaminación de la simiente de la mujer. Recordemos que justo después de describir el nacimiento de estas criaturas híbridas, la Palabra nos remite a la Ira de Dios contra lo que sucedía en la tierra. Lo que ocurría era absolutamente intolerable. Él debía intervenir y acabar con la raza humana junto con toda otra criatura que habitara en ella. No podía dejar rastro de semejantes aberraciones. Es entonces, que se prepara un diluvio para derramarse sobre ellos. Genesis 6:8-12 pero Noé encontró grada a ios °ios de YAHWEH. Y éstas son las generaciones de Noe. Noé era un hombre recto y siendo perfecto en su generación, Noé era bien placentero a Elohim. Noé engendró tres hijos, Sem, arn, y Jafet. La tierra estaba corrompida ant® E’°|a tierra estaba llena de violencia. YAHWEH Elohim vio la tierra, y estaba corrompida, porque toda carne había corrompido su camino sobre la tierra.
Segundo embate: los gigantes Después de intentar acabar con la esperanza de la mujer contaminando el corazón de Caín, empezó a fraguarse un nuevo p’an diabólico. La mirada estaba siempre enfocada en ia simiente. Había que robar la semil a. Yo le llamó a este plan perverso: El segundo gran pecado de los ángeles, del cual hablo ampliamente en mi libro RESIDENTES INMORTALES, que trata sobre ángeles y demonios. Génesis 6: 4-6 (DDHH) Los gigantes aparecieron en la tierra cuando los hijos de Dios se unieron con las hijas de los hombres para tener hijos con ellas, y también después. Ellos fueron los famosos héroes de los tiempos antiguos. El Señor vio que era demasiada la maldad del hombre en la tierra, y que siempre estaba pensando en hacerlo malo; y le pesó haber hecho al hombre. Con mucho dolor”.
Podemos entender cuáles fueron las verdaderas intenciones detrás de aquel acto. Al leer esos textos superficialmente se puede pensar que aquel movimiento de los demonios fue provocado por la lascivia, sin embargo, hay algo mucho más profundo. No podemos olvidar, que la profecía que Eva recibió decía, que uno de sus vástagos se encargaría de derrotar a Satanás. ¿Qué pasaría si esta nueva interacción lograba que todos los seres en la tierra fueran híbridos y no exclusivamente humanos? La sombría respuesta nos muestra el camino que transitaron aquellos demonios. Lo que el reino de las tinieblas buscaba era que la profecía no se cumpliera. A través del libre albedrío humano estaban retando directamente a Dios y Sus palabras. Intentaban a través de la reproducción impura diseminar la simiente demoniaca. Un plan macabro sin duda, pero digno de una criatura como Satanás.
La Palabra, más adelante, denuncia con contundencia que ese vínculo era ¡legítimo, sobre todo por su resultado. La traducción aí español deja la sensación de que aquellas criaturas nacidas entre las hijas de los hombres y los hijos de Dios fueron grandes personajes de la historia. Un concepto que no se apega a la traducción hebrea o griega. La palabra de la cual se deriva la traducción de concepto gigantes, en hebreo es “nephilim” y en griego “gegenes”. En el primer caso el significado es “los caídos” y en el segundo “,nacidos en la tierra. La fusión de ambos conceptos nos revela que no eran solo personas de gran estatura. Una mezcla había tenido lugar entre dos especies creadas por Dios. Los demonios, ángeles caídos, habían logrado introducir su semilla en las mujeres de la época para que el resultado no fuera humano, sino una criatura híbrida. Monstruos de naturaleza mixta. El plan satánico nos va siendo revelado.
A! señalar que la tierra se había llenado de violencia y que toda carne se había contaminado, hace directa alusión a la simient de Caín por un lado, y a la profanación sexual que expliqué. Tanto hombres como mujeres por igual habían copado todo con pecado. Solo prevalecía Noé, como representante del linaje de Set. y por lo tanto, también portador de a promesa que recibió Eva. Para ese momento, el plan divino ya estaba en marcha. Jehova borraría el rastro de los errores de Eva para dejar solamente la herencia de la profecía, una nueva contienda daba comienzo. La simiente de la serpiente consiguió diseminar su mensaje a través de la corrupción íntima. Hizo penetrar el pecado hasta los mismos genes de aquellas criaturas. Para este punto su victoria estaba casi completa, solo que las tinieblas no contaban con que el Eterno volvería a adelantárseles. Jehová volvió a extender Su mano poderosa de misericordia sobre el linaje de Eva. Génesis 7:1 “Dijo luego Jehová a Noé: Entra tú y toda tu familia en el arca, porque solo a ti he visto justo delante de mí en esta generación”. Luego de todo lo planteado, el diluvio mismo cobra otro sentido. No solo se quería destruir la maldad que cundía. La tempestad también serviría para llevarse consigo todos los fracasos de aquella mujer. Una vez más, el Todopoderoso recordaba sus promesas para
07
abrir una puerta de salvación, que dejaría en el olvido los errores de Eva. El Padre celestial muestra su forma profética más poderosa, permite que sean alineados ei cielo y la tierra para alcanzar el cumplimiento. Ya la madre de Caín, Abel y Set no caminaba por la tierra, pero las promesas que había recibido seguían gravitando sobre la tierra. ¡Impresionante! La memoria celestial no tiene fin. El Eterno se preparaba para edificar un nuevo linaje, gracias a que un día una madre desesperada clamó y le fue otorgada la justicia divina: Génesis 9:9-13 “Yo establezco mi pacto con vosotros, y con vuestros descendientes después de vosotros; con todo ser viviente que está con vosotros: aves, animales y toda bestia de la tierra que está con vosotros, desde todos los que salieron del arca hasta todo animal de la tierra. Estableceré mi pacto con vosotros y no volveré a exterminar a todos los seres vivos con aguas de diluvio, ni habrá más diluvio para destruir la tierra. Asimismo dijo Dios: Esta es la señal del pacto que yo establezco a perpetuidad con vosotros y con todo ser viviente que está con vosotros: Mi arco he puesto en las nubes, el cual será por señal de mi pacto con la tierra”. Ese hermoso arcoíris, que hasta el presente sigue iluminando nuestros cielos, no solo rememora el pacto divino de preservar la tierra. También debe servirle a toda mujer para recordarle que aquellas aguas se llevaron sus errores y sus culpas. Nadie puede traer al presente un pecado, que el propio Dios se encargó de sepultar bajo las aguas. Máxime que hoy disfrutamos de la plena manifestación de las profecías a través de advenimiento de Cristo. Aquel fue un nuevo comienzo para la memoria de Eva, pero igualmente lo es para toda mujer sin excepción. No hay yerros que seguir cargando. No aceptes ningún argumento que lesione tus potestades como hija de Dios por causa de un episodio que ya fue cerrado en el cielo. Ya no existen argumentos válidos que puedan impedirte tomar el lugar que el mismo cielo te ha dado. No eres una víctima de las circunstancias, ni de tu entorno, ni de tu marido y tus hijos. Has sido concebida con una misión determinante en la tierra. No hay otro ser que pueda cumplir el papel que fuiste llamada a ejecutar. Eres el instrumento profético por excelencia para la humanidad, Al diablo le fue quitada posibilidad de entraren acuerdo contigo, hablas un idioma totalmente distinto, porque eres ENEMIGA DE LA SERPIENTE, y a través de Cristo Jesús ya tienes la victoria. ¡Es tiempo de reclamarla! Avanza con determinación sobre tus enemigos. No dejes que te silencien, tu voz puede determinar el inicio de una nueva estación espiritual en tu casa. Si logras dimensionar lo que significas, tanto para cielo como para el infierno, tus labios serán el inicio de muchas cosas buenas. Puedo ver con claridad en mi espíritu al diablo temblando, mientras mujeres leen estos párrafos. Ya no aceptarás un “no” como respuesta ante tu deseo de servir a Dios. Revístete de la Gloria que te fue concedida. Cuando el Eterno dijo que ya no sería necesario volver a destruir la tierra de la misma forma, también estaba justificando a la mujer. Ya no podrás ser acusada, porque delante del Trono celestial, la maldición de Eva ya ha sido declarada ilegítima. Apodérate de las promesas que son tuyas, haz memoria de ellas, educa a tus hijos en Su Verdad, porque sea con la lluvia temprana o tardía la respuesta divina llegará.
“Cada uno de vosotros ha de reverenciar a su madre y a su padre”. Levítico 19:3
08
Edición 115 | Maternidad
NO TIENES QUE SER PERFECTA PARA SER UNA BUENA MAMÁ
Profeta Fabiola Castro
Hoy tengo esta oportunidad para abrir mi corazón, y a sincerarme con las madres que leerán este artículo.
porque tienes que saber qué dice. 3.Escuché a un Psicólogo decir: Cuando quieras saber cómo estuvo el día de tu hijo (a), pregúntale con: ¿Cómo estuvo tu día? No importa la edad que tenga, en los próximos 3 minutos te dirá en talvez 2 ó 3 palabras lo que está en su corazón. Yo lo practico y me ha funcionado.
Ser mamá es todo un acontecimiento. No dejamos de aprender de nuestros hijos y de sorprendernos de lo que hablan y cómo se expresan tan fácil para pedirnos algo que desean. Nos damos cuenta que en dos palabras dicen tanto, y son palabras tan profundas, que nos llenan el espíritu de verdad y libertad. Ser mamá no es sencillo, creo que ninguna mujer puede decir cuando llegan los hijos, (como he escuchado), que la criaron para ser mamá, porque hasta que los tenemos, el instinto materno se activa y se desarrolla ese período que estuvo dormido por algún tiempo. Los hijos te forman, te enseñan a ser maternal, a proteger, a enseñar, a amar, a disciplinar. Aunque traemos de forma grabada en el corazón y en la mente como nos criaron, creo vehemente, que necesitamos crear nuestra propia cultura con nuestros hijos, y el Maestro por Excelencia siempre será el Espíritu Santo. Soy mamá de dos niños con carácter fuerte, con una personalidad bien definida, en donde he tenido muchas veces que pedir ayuda al Espíritu Santo porque no sé qué responder ante preguntas que me retan, no sé qué puedo aconsejar, no sé como sostenerme en un NO rotundo y mantenerme ahí, y me he dado cuenta que esta fórmula, la de pedir ayuda a este Ser Supremo, es la única que funciona. Muchas veces he llorado
4.En la situación que te cuenten, siempre regálales un versículo bíblico y diles “esta es tu espada, pelea con esto”.
tratando de corregir lo que creo que debe ser corregido, otras me he sentido confrontada, otras me he sentido ganadora, otras no sé cómo orar por ellos, no sé lo que les pasa y otras veces me he sentido que no soy una buena mamá. En estas etapas, he aprendido que, sin Su ayuda, no las podría enfrentar. Con los hijos no hay receta que funcione, no puedes copiar a otros lo que les ha funcionado con los hijos propios. La sociedad que ha venido cambiando tan ferozmente, pareciera que no nos da el espacio para desarrollar en ellos lo que Dios nos ha hablado acerca de su futuro desde que estaban en nuestros vientres. Muchas veces me pregunté ¿será que tenemos que encerrarlos? ¿Será que no debemos enviarlos a los Centros Educativos para que no los bombardeen con ideas anti Dios?
Y este maravilloso Espíritu Santo, me ha estado enseñando a darles las armas para que peleen cuando estén en medio de una batalla. ¿Cuáles son esas armas? Te las voy a compartir, espero que alguna te sirva: 1.La enseñanza familiar espiritual es sumamente importante. No trates de hacer un culto como estamos acostumbrados. Pero sí es necesario leer la Palabra con ellos, en familia, qué dice la Biblia acerca del temor, de la desobediencia, habla de temas que sabes que a ellos les cuesta enfrentar o que están empezando a vivir, temas simples y fáciles de desmenuzar. Recétales la Palabra. 2.Para cualquier situación, siempre diles: “la Biblia dice…”; claro, esto será un reto para ti
5.Saca tiempo para tener citas “mamáhijo(a)”, un día para ir al cine, para quedarte solo en la casa con el o ella y ver películas, hablar, etc. Esto es importante que sea un día, por separado, para cada hijo. Esta es una estrategia para que conozcas su pensamiento, su relación con sus amigos, compañeros, etc. Algo importante es que aprendas a disimular, no te alarmes, no lo regañes, si te cuenta algo que te asusta, Dios te ha dado la sabiduría y la prudencia para atrapar su atención y aconsejar lo que es debido. Y, pueden haber muchas más, ¡súmale las tuyas!. ¿Cuál es el arma para ti? La oración. No hay maneras malas ni buenas de orar, la oración va madurando. La oración que hagamos por nuestros hijos y familia, debe ser tan intensa espiritualmente, que debemos entregar nuestra vida en orar, con el único fin de defender, proteger y pelear por ellos. Recuerda Jeremías 33:3 “Clama a mi, y yo te responderé”.
MADRES: INTERCESORAS POR EXCELENCIA de Dios en su vida. Al nacer Moisés lo escondió durante tres meses e hizo lo que humanamente podía hacer. No obstante, pasado ese tiempo no tuvo otra opción que echarlo al agua según la orden que había sido dada. Y fue ahí donde puso en práctica el plan divino, confiando en la protección de Dios sobre su hijo.
Las mujeres tenemos una sensibilidad especial, pero cuando se trata de nuestros hijos, ésta se duplica. El instinto maternal que se despierta desde el mismo instante en que nos damos cuenta que en nuestro vientre se encuentra el regalo más hermoso y maravilloso que puede existir, es decir un hijo o una hija, nos hace desarrollar una habilidad para cuidar, proteger, instruir, ayudar, corregir, pero sobre todo para percibir lo que puede estar afectando a nuestros hijos. El amor de madre nos provoca a hacer hasta lo indecible por ver a nuestros hijos felices y plenos. Sin embargo, somos seres limitados, y aunque quisiéramos protegerlos del dolor, la tristeza, las malas influencias, así como de toda decisión errónea que pueda dañarles, no siempre podemos hacerlo. Pero Gloria al Señor, que entendemos que tenemos un Dios de amor y misericordia, que escucha la
oración de una madre e interviene a favor de sus hijos, y es en El en quien tenemos puesta nuestra confianza. Jocabed es un ejemplo de madre con total dependencia de Dios. Antes de que naciera su hijo había sido dado un decreto de muerte, por parte del Faraón para todo aquel que naciese varón. Me imagino, la angustia que tuvo que haber vivido al momento en que su hijo nació, pero decidió recurrir al Dios de milagros y maravillas, y entregar la vida de su hijo Moisés en sus manos. ¿Cuántas oraciones, cuántas lágrimas derramadas, cuánto tiempo debió haber estado intercediendo por su hijo delante de Dios, antes de que Él le diera la estrategia divina? no solo para salvar la vida de su hijo, sino también para que en medio de toda circunstancia se cumpliera el propósito
Cuando Moisés fue encontrado por la hermana de Faraón, esta tuvo compasión de él, aun sabiendo que era hebreo, lo tomó, lo rescató y hasta pidió se lo diesen a su propia madre para que lo criara y educara. Casualidad NO, eso fue el resultado de una madre intercesora, orando por la vida de su hijo, declarando protección y gracia delante de los hombres. La realidad del mundo en que vivimos no está tan alejada de esta historia, hay tantas situaciones que pueden afectar a nuestros hijos, tanto que en estos días, hay mujeres que prefieren no traer al mundo hijos para que no tenga que enfrentarse a la maldad y perversión que existe. Pero al igual que Jocabed entendió que su propósito en la vida era levantar una generación para Dios, hoy existen mujeres valientes, que también lo entienden así y se atreven a creer en la protección de Dios para con sus hijos y sus generaciones. Esa sensibilidad especial que mencioné anteriormente, es precisamente el discernimiento con el que el Señor dotó a las madres para estar apercibidas de lo que está aconteciendo o puede acontecer con sus hijos, para así interceder por ellos.
Profeta Geanina Soto Si hay un área en la que se puede evidenciar que la mujer es una intercesora por excelencia, persistente, atrevida y determinada, que no se detiene hasta ver contestada su oración, es cuando intercede por sus hijos. Es a través de la oración que una madre arrebata cada una de las bendiciones de Dios para sus hijos, y marca el destino de sus generaciones. Mujer si no te has determinado a orar, interceder y guerrear por tus hijos, es tiempo de que te actives, te aseguro que verás a Dios operar a su favor!!! En la Palabra de Dios encontramos las siguientes promesas y muchas más, decláralas: 1) Salvación. Isaías 49:25: “Tu pleito yo lo defenderé, y yo salvaré a tus hijos” 2) Un corazón que ame a Dios. 1 Crónicas 29:19 “Encamina su corazón a ti. Da a mi hijo corazón perfecto, para que guarde tus mandamientos, tus testimonios, y tus estatutos.” 3) Guía del Espíritu Santo. Isaías 59:21”… dijo Jehová: El Espíritu mío que está sobre ti, y mis palabras que puse en tu boca, no faltarán de tu boca, ni de la boca de tus hijos, ni de la boca de los hijos de tus hijos...” Isaías. 59:21 4) Bendición. “Mi Espíritu derramaré sobre tu generación, y mi bendición sobre tus renuevos” Isaías 44:3
“...y no desprecies a tu madre cuando envejezca” Proverbios 23:22
Maternidad | Edición 115
09
EL PRIVILEGIO DE PODER SER MADRES
Pastora Elizabeth chaves Salmo 127:3 “He aquí, herencia de Jehová son los hijos; cosa de estima el fruto del vientre” Quiero compartir a través de esta reflexión acerca de la grandiosa experiencia que Dios me ha dado al otorgarme el privilegio de ser madre. Tuve la bendición de experimentar la maternidad en cuatro ocasiones, y cada una fue diferente, pero todas llenas de gozo, con grandes expectativas por lo que iba a significar un hijo más, pero con la seguridad de que iban a ser de gran bendición para mí, para mi esposo, como padre, y el resto de la familia. Como mujer cristiana, no puedo menos que glorificar al Señor por haberme bendecido de esa manera, dos hijos y dos hijas, ya todos adultos, y sólo puedo decir que nada puede sobrepasar el gozo de la maternidad. Por supuesto, que ser madre conlleva una gran responsabilidad, porque sabemos el rol que ésta debe desempeñar dentro de la familia. Al haber hecho el sueño de ser madre una realidad, se tiene que tomar conciencia de que es en ese momento en que empieza la formación de sus hijos, todo un reto, pero que con la ayuda de Dios todo es posible. Es ahí donde su condición de mujer cobra relevancia, es ahí donde va a ponerle su sello “inconfundible: el de mujer”. Y ¿por qué digo inconfundible? porque Dios ha dotado a la mujer de una gran capacidad para llevar adelante esa tarea. En muchos casos trabajando dentro y fuera
de la casa, atendiendo las necesidades de cada uno. Velando por su formación tanto en lo natural como en lo espiritual; inculcándoles los principios morales y espirituales para una formación integral de su personalidad que les ayude a moldear su carácter, para que lleguen a ser personas de bien, que puedan integrarse a la sociedad y ser aceptadas como tales. Sabiendo y entendiendo que separados de Dios nada de lo que logren hacer les traerá la completa felicidad.
les pueda ofrecer el mundo. También la mujer debe mantener un equilibrio para poder salir adelante con todos los quehaceres que el hecho de ser madre le demandan. Distribuir bien su tiempo, porque además de atender a sus hijos, debe cumplir con su rol como esposa, con su trabajo fuera y dentro del hogar, y algo que no puede dejar pasar es el de ocuparse por su propio bienestar. Proverbios 31:27-29 dice acerca de la mujer: Considera los caminos de su casa, Y no come el pan de balde. Se levantan sus hijos y la llaman bienaventurada; Y su marido también la alaba. Muchas mujeres hicieron el bien; Mas tú sobrepasas a todas. La mujer, en su función de madre, es un miembro imprescindible en todo hogar. Es el pilar sobre el que se levantan generaciones con el sello del Reino de Dios.
Ser madre nos permite vivir experiencias muy lindas con los hijos, pero en muchas ocasiones vivir circunstancias difíciles, las cuales tomamos como nuestras y clamamos al Padre en busca de Su intervención para ayudarlos, pidiéndole su dirección para poder resolverlas de la mejor manera, sin afectarlos y sin dejar una marca en ellos. Entender que entre madre e hijos existe una comunicación especial, única y, según leí de un sociólogo: “la pareja irremplazable del niño es la madre”, y yo diría del hijo, sin importar la edad, porque nosotros las madres somos incondicionales, no importa lo que estén atravesando, ahí estamos siempre para apoyarles.
Dios creó a la mujer con una sensibilidad muy especial para amar, y eso se profundiza más cuando se convierte en madre. Nos debe de quedar claro que somos canales de bendición, donde debe existir siempre la comunicación, la comprensión y sabiduría, perdón, sacrificio y sobre todo la manifestación del amor de Dios a través de nosotras. Saber que como madres debemos esforzarnos por mantener una relación muy fuerte con Dios, de intimidad con El, para así cumplir como madres, con la satisfacción del deber cumplido y de esta manera conseguir alegrar el corazón de Dios .
Es fundamental enseñarlos a valerse por sí mismos, porque llega el momento en que tienen que integrarse y enfrentarse a la sociedad, de ahí la importancia de su formación moral y espiritual, del amor y comprensión del hogar para que puedan mantenerse firmes en sus principios sin ceder ante la influencia y las tentaciones que
“Amadas, la maternidad es un regalo de Dios a las mujeres”.
MADRES EMPRENDEDORAS Y PROFESIONALES
Empromujer Monica Segnini
En una ocasión, una revista regional de negocios me hizo la siguiente pregunta: ¿Cuál es su mayor logro, y por qué? De inmediato pensé en mis hijos, en todo lo que había pasado en mi vida para poder estar allí sentada, siendo entrevistada como una empresaria exitosa y a la vez, haber conformado una familia con 4 hijos y un matrimonio de 25 años. Sabía que la periodista esperaba una respuesta relacionada con mi trayectoria profesional y empresarial; sin embargo, la respuesta más sincera a esa pregunta era: ser mamá. La maternidad es un reto, no importa que tan preparadas creamos estar, o qué tanto apoyo tengamos durante las distintas etapas, siempre será el mayor reto de cualquier mujer. Por eso, cuando al mismo tiempo queremos ser emprendedoras en otros campos, lograrlo se torna en la más extraordinaria aventura que demandará de nosotras una gran capacidad física, espiritual y, sobre todo, emocional. La palabra de Dios dice que las mujeres sí podemos lograrlo, eso dice en Proverbios 31:10; fácil no es, para mí no lo ha sido, pero sí se puede lograr. La sabiduría es quizá el ingrediente principal, “la mujer sabia edifica la casa”, ¡qué verdad inmutable es esta! Son muchos los momentos en que nos tocará enfrentar imprevistos sin estar preparadas, responder preguntas difíciles a nuestros hijos, combinar amor con disciplina y formación, y organizar mil tareas que parecen interminables en días de 24 horas; todo eso, manteniendo a
la familia unida, saludable y feliz; y a la vez, dando la talla en lo profesional o empresarial. Las mamás queremos estar con nuestros hijos y el sentimiento de culpa nos afecta, aunque no queramos. Sin embargo, lo que debemos hacer es saber administrar ese sentimiento. Por ser madres no dejamos de ser profesionales y mujeres con deseos de desarrollarnos en otras áreas. Querer estar en dos momentos diferentes a la vez, se nos presentará en varias ocasiones; por ejemplo, atender una reunión profesional importante versus asistir a una actividad escolar. Allí es donde debemos desarrollar la creatividad, la capacidad emocional, la organización y contar con otras manos que nos apoyen. Lo más fácil sería decir “no puedo” a alguna de las dos demandas, pero eso no estaría exigiendo nada extraordinario de nosotras mismas, y a la postre, terminaría cercenando alguno de los dos roles. “Lo que los hijos necesitan no es cantidad de tiempo sino tiempo de calidad”, nos dicen, pero ¿Cómo hacemos para medir la calidad del tiempo? Lo primero que debemos tener presente es que nosotras podemos delegar el cuido y la educación académica de nuestros hijos, pero nunca la crianza. La crianza es la cultura que moldeamos en ellos; es el nutriente que vamos poniendo en nuestros hijos para que dé fruto. Habrá otras personas que influyan en nuestros hijos, pero seremos nosotras las que inclinaremos la balanza hacia uno u otro lado.
No existe un tiempo mínimo o máximo para estar con nuestros hijos, lo importante es qué hacemos durante esos momentos en que estamos con ellos. Un tiempo de calidad es aprovechar cada momento para marcar sus vidas de manera positiva. Cuando nos cuenten de sus sueños, no aterrizarlos de golpe; cuando nos cuenten de sus necesidades, no ignorarles; cuando nos cuenten de sus errores, no condenarles.
entre muchas otras cualidades. Si usted quiere, usted puede ser esa mujer de la que habla Proverbios 31:10, pero esa capacidad no la va a desarrollar hasta que no se vea enfrentada a los retos de ser mamá y profesional o emprendedora a la vez.
Converse con sus hijos, que sus mejores tertulias sean con ellos, demuéstreles que para usted, nada es más interesante que las anécdotas que ellos les quieren compartir. Y usted, saque provecho de cada conversación con ellos para dejarles alguna enseñanza. Debemos recordar que las mamás tenemos corazones a nuestro cuidado, que vamos a influir en nuestros hijos como ninguna otra persona en el mundo y que les vamos a transmitir de nuestra cultura, pensamientos y sentimientos; es fundamental que seamos mujeres con corazones sanos y emocionalmente fuertes. Si estamos amargadas, enojadas o infelices, indudablemente se lo transmitiremos a nuestros hijos. Dios debe ser su acompañante diario en esta tarea y después de él, es fundamental que pueda contar con un esposo que comparta sus sueños y junto a usted, lleve ese maravilloso barco del hogar a buen puerto. No tenga temor, Dios creó a la mujer con capacidades extraordinarias de liderazgo, influencia, resistencia, empatía y carácter;
“No descubrirás la desnudez de tu padre, o la desnudez de tu madre”. Levítico 18:7
10
Edición 115 | Maternidad
Agenda de ORACIÓN PROCLAMA PROFÉTICA PARA LAS MADRES Activamos la bendición de la recompensa sobre cada madre de familia, decretamos que todo lo que comió la oruga, el saltón y el revoltón se les será devuelto y retribuido. Declaramos que son coronadas con Honra, en su propia casa, que todo lo que sembraron con lágrimas, recogerán con gozo y alegría ORAR POR: -Por la bendición de Dios sobre las madres. Por sabiduría, fortaleza, y guianza del Espíritu Santo. Desatamos salvación sobre toda mujer que no conozca de Jesús. -Por sabiduría de Dios en los padres en la crianza de los hijos, para que sean instruidos en el Temor de Dios. -Por la protección de Dios en mujeres en etapa de embarazo. Declaramos que los vientres y los niños son protegidos llevados a su etapa final de gestación. -Por la protección de Dios por los no nacidos. Orar contra proyectos del aborto, eutanasia y sus promotores. Decretamos que el Plan y Diseño de Dios se establece en cada uno de ellos desde antes de sus nacimientos, Serán resguardados y Cubiertos. -Por la Protección de la mujer, contra toda ola de Feminicidios. Atar espíritus de violencia, muerte temor, intimidación. Decretamos nula toda operación y asignamiento demoniaco en contra de la mujer. -Por la Salvación, Liberación y Restauración de las Familias. Decretamos que los ojos y los oídos de la nación son abiertos para el conocimiento de Jesús, proclamamos lo establecido en Isaías 42:7. -Contra todo adoctrinamiento perverso y liberal en nuestros niños y adolescentes a través de la Guías Sexuales y todo tipo de ideología. Cubrimos la mente y el corazón de las generaciones, decretamos que toda semilla perversa es desarraigada, no queda raíz ni rama. -Decretar la cobertura del Señor sobre la niñez. Orar contra espíritus de agresión, abuso, suicidio, ideologías anti – Dios, muertes prematuras, enfermedades, trata de órganos, drogadicción. Decretamos que la Sangre de Jesús es por protección y preservación. Pedir ángeles protectores. -Por un derramamiento del Espíritu Santo en las nuevas generaciones (niños y jóvenes). Decretamos que los hijos de esta nación serán por señales y presagios en la nación según Isaías 8.18
MADRE: MUJER VIRTUOSA
Pastora: Rosemary Vidal
Proverbios 31:10 10 Mujer virtuosa, ¿quién la hallará? Porque su estima sobrepasa largamente a la de las piedras preciosas. Meditando en esta cita bíblica pensamos quien la hallará? Porque nos habla de una mujer extraordinaria casi imposible de imitar, pero cuando sabemos que es Dios quien nos capacita y nos da los recursos; no dudaremos y caminaremos confiadas. Algo que me gustó mucho fue la definición de virtuosa, dice lo siguiente: Tiene la capacitad o habilidad para realizar una encomienda especial. Sin duda alguna el mayor reto que tenemos en nuestra vida y lo más bello es la misión que se nos ha encomendado de ser madres, pareciera que es fácil, no obstante hay que prepararse para esto. Muchas madres enfrentan cada día este reto y se preguntan; cuál es la mejor manera de educar y criar a nuestros hijos? La verdad no existe una receta o manual que nos indique los pasos a seguir en esta etapa, no obstante sí encontramos en la biblia muchas consejos y enseñanzas que son de mucha ayuda para instruir y guiar a nuestros hijos, a través de la Palabra de Dios aprendemos a ser madres afectivas, a manifestarles amor, a transmitirles valores y rodearlos de seguridad en cada etapa de sus vidas. Las madres tenemos un regalo de Dios dentro de nosotras, una sensibilidad especial, es un amor incondicional que nos capacita para ver las necesidades y detectar en nuestros hijos aquello que les está afectando, esa sensibilidad y amor nos permite encontrar soluciones efectivas que los ayuden a salir adelante ante cualquier situación. En el deseo de que nuestros hijos no tengan ningún tipo de situaciones tratamos de hacerlo a nuestra manera, como consecuencia en algunas oportunidades cometemos errores. La solución no es enojarnos o angustiarnos, la manera correcta para salir adelante ante cada situación es que tomemos las herramientas que Dios nos ha brindado y una de ellas que siempre está a nuestra disposición es la intercesión, debemos presentar ante Dios las
necesidades de nuestros hijos sabiendo que la respuesta y solución siempre vienen de él. Es importante aprender a confiar en la capacidad de nuestros hijos, darles el espacio para que desarrollen el potencial que Dios ha depositado en ellos. No nos cansemos pues de hacer el bien, porque a su tiempo segaremos si no desmayamos. Gátalas 6:9 La maternidad es una tarea que no podemos abandonar porque sabemos que veremos el fruto en nuestros hijos. la semilla que sembremos en nuestros hijos por más pequeña que sea cumplirá su propósito en medio de cualquier adversidad. La madre no solo se encarga de satisfacer las necesidades básicas y físicas de sus hijos, sino que se encarga de la seguridad emocional y espiritual tan importante en la vida de ellos. El hogar en un centro de aprendizaje en el cual bajo la dirección de los padres los hijos se desarrollan en un ambiente de seguridad, la esposa también brinda a su esposo un importante apoyo emocional animándolo en su papel de padre espiritual. La influencia de la madre tiene consecuencias eternas y de esto nosotras madres tenemos una gran responsabilidad.
-Desatar el espíritu de Elías en las generaciones. Declaramos que el corazón de los padres se vuelven hacia los hijos y el de los hijos hacia los padres. -Pedir perdón por los pecados de la idolatría, adoración a los ídolos, entregas de ofrendas. Atar y echar fuera de la nación espíritus de tradicionalismo, mentira, error, confusión, engaño y falsedad. Anulamos todo pacto idolátrico a través de la Sangre de Jesús, decretamos que las aguas del Espíritu limpian la nación de toda inmundicia, sanándola y libertándola -Protección sobre las carreteras principales de la nación, atar espíritus de accidente y de muerte. Orar contra espíritus de venganza. Pedir ángeles de alto rango para la protección de los viajeros.
Profeta Dania Navarro
“La mujer sabia edifica su casa ...” Proverbios 14:1
Lo más importante es que El Señor estableció la familia con el propósito de que los padres tuvieran sobre sus hijos(as) mayor influencia que ninguna otra institución, por lo que la madre es la primera maestra que tiene el niño(a) ya que a lo largo del tiempo se presentan una gran cantidad de oportunidades para instruirlo tanto en lo espiritual como en el mundo que lo rodea. La dedicación que se aplique determinará en parte el deseo del hijo(a) de obtener conocimientos a través de la vida, ella le ayudará a saber la verdad. Apocalipsis 4:11 Digno eres Señor y Dios nuestro de recibir la gloria y el honor y el poder, porque creaste todas las cosas y por tu voluntad existen y fueron creadas. Amen. Quisiera manifestarles sin temor a equivocarme que solamente la mujer sabia que educa buenos hijos hallará satisfacción y alegría de haber contribuido a la humanidad. Muchos hombres y mujeres que son exitosos, manifiestan que gran parte de su éxito se lo deben al apoyo incondicional, amor, confianza y liderazgo recibido de sus padres, gracias al hogar donde crecieron. Para concluir quisiera recalcar lo siguiente; las madres tenemos una misión muy sagrada, ya que somos copartícipes con Dios, así como con nuestros esposos también, primero al dar a luz a los hijos de Dios y luego al criarlos y que sean hombres y mujeres de bien. No existe una responsabilidad más sagrada y privilegio más grande que la de ser formadores y guardianes de nuestros hijos.
Maternidad | Ediciรณn 115
11