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El Gobierno Apostólico
Siete áreas
Activa Colombia
de la Iglesia Guía de Adoración e Intercesión Edición 89 • Mayo 2016
en que podermos esperar la restauración
en imágenes Suplemento de Edificación para el Cuerpo de Cristo A.M.M. de Rony Chaves
LA RESTAURACIÓN ES UNA NECESIDAD
Restauración, Reforma Apostólica y Restitución
Pág. 04, 05, 06 y 07.
El Gobierno Apostólico de la Iglesia Pág. 08
Mayo 2016
Restauración y Reforma
Contenido
Todos anhelamos la manifestación en Gloria de nuestro Señor y Salvador en la consumación de los tiempos, por esto ora y suspira la Iglesia del Señor. Más la Biblia es clara en afirmar que para que esto ocurra, primero debe ocurrir el proceso de Restauración de todas las cosas que hablaron los Profetas desde tiempos antiguos. Para que podamos disfrutar de esta Gloria postrera prometida, la Restauración en la Casa de Dios debe ocurrir pronto. En Arpas y Copas creemos que por tal razón debemos ponerle en manos al lector enseñanzas maduras sobre todo esto. Pedimos al Eterno que todos y cada uno podamos disfrutarlo.
Siete áreas en que podemos esperar la restauracion Pág. 09 Agenda de Oración / Seminario de artes en imágnes / Nuevos libros Pag. 10 Cruzada de la Familia en imágenes Pág. 11 Conferencia XXVII de la Palabra de Dios Pag. 12
La Esencia de Todo:
Reedificando la casa de Dios
La iglesia no es una idea del hombre sino que nació en el corazón de Dios. Ella está llamada a convertirse en un ayudante o una compañera del segundo Adán para acabar Su Obra en la tierra.
1 Juan 5:6 “Este es Jesucristo, que vino mediante agua y sangre; no mediante agua solamente, sino mediante agua y sangre. Y el Espíritu es el que da testimonio; porque el Espíritu es la verdad”.
Génesis 2:21-22
Efesios 2:20 “Edificados sobre el fundamento de los apóstoles y profetas, siendo la principal piedra del ángulo Jesucristo mismo”.
“Entonces Jehová Dios hizo caer sueño profundo sobre Adán, y mientras éste dormía, tomó una de sus costillas, y cerró la carne en su lugar. Y de la costilla que Jehová Dios tomó del hombre, hizo una mujer, y la trajo al hombre”. Ella salió de su costado cuando fue traspasado en la Cruz. Nació de sangre y agua. Fue un recipiente de Su Espíritu, es espíritu de Jesús, y fue envestida de poder por el Espíritu Santo que lo levantó de los muertos. Ella lleva el testimonio del hijo en si misma, que es la expresión de Su autoridad, poder y la manifestación física de Su vida y naturaleza aquí en la tierra. Juan 20:22 “Y habiendo dicho esto, sopló, y les dijo: Recibid el Espíritu Santo”. Hechos 2:33 “Así que, exaltado por la diestra de Dios, y habiendo recibido del Padre la promesa del Espíritu Santo, ha derramado esto que vosotros veis y oís”.
Apóstol Dr. Jonathan David
Necesitamos prestar mucha atención a estas páginas ungidas y descubrir por revelación los planos apostólicos para edificar con precisión esta Casa Gloriosa que pueda ser la morada del Señor. El Espíritu de Sabiduría puede ser impartido a través de estas páginas, para que se pueda lograr la construcción precisa de esta Casa. Hebreos 3:3-4 “Porque de tanto mayor gloria que Moisés es estimado digno éste, cuanto tiene mayor honra que la casa el que la hizo. Porque toda casa es hecha por alguno; pero el que hizo todas las cosas es Dios”. Hebreos 3:6 “Pero Cristo como Hijo sobre Su Casa, la cual casa somos nosotros, si retenemos firme hasta el fin la confianza y el gloriarnos en la esperanza”. Como Moisés, tenemos que conocer el patrón
cómo se nos muestra en los montes de nuestros encuentros con Dios. Necesitamos un plan detallado de cómo construir de acuerdo con lo que hemos visto y oído. La tentación alterar el patrón puede hacernos correr el riesgo de perder la gloria de Dios. La presión de ajustarnos a las preferencias del hombre puede obligar a Dios a abandonar y rechazar su Propia casa. Mateo 23:38 “He aquí vuestra casa os es dejada desierta”.
Siento fuertemente que el espíritu de sabiduría y revelación será nuestra porción mientras incansablemente proseguimos en nuestros esfuerzos para construir una iglesia que no puede ser tomada ni conmovida. Recibe la revelación de cómo construir con precisión una iglesia que influirá en la ciudad e impactará la nación; construir la iglesia que tomará la ciudad y cambiará al mundo. Edifica con el Maestro de la obra, quien es el constructor de todas la cosas.
“Y os restituiré los años que comió la oruga, el saltón, el revoltón y la langosta…” Joel 2:25
ESPERA EL NUEVO LIBRO DEL APÓSTOL RONY CHAVES 71
OS
LIC Ó T S O P
SA
ÑO E S I D Y 71
Más info: 2236-9118 / avance@ronychaves.org
XXVII
Fecha: Del 12 al 16 de julio 2016 Hora: De 8:30 am a 9:30 pm Lugar: Centro Mundial de Adoración Dirección: De Correos de Tibás 35 mts sur, Costa Rica.
de CONFERENCIA la
Palabra de Dios
Manifiesta el Reino "Dirigida para jóvenes menores de 35 años"
Profeta
Dionny Baez
Invitado Especial
Organiza
Con el Apóstol
Profeta Pavlo Chaves
Rony Chaves
Entregando la conferencia como su legado a la juventud
Más info: h avance@ronychaves.org / 1 2236-9118
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Edición 89 | Restauración y Reforma
RESTAURACIÓN, REFORMA APOSTÓLICA Y RESTITUCIÓN Apóstol Dr. Rony Chaves “Y os restituiré los años que comió la oruga, el saltón, el revoltón y la langosta, mi gran ejército, que envié contra vosotros. Comeréis hasta saciaros, y alabaréis el nombre de Jehová vuestro Dios, el cual hizo maravillas con vosotros, y nunca jamás será mi pueblo avergonzado. Y conoceréis que en medio de Israel estoy yo, y que yo soy, Jehová vuestro Dios, y no hay otro; y mi pueblo nunca jamás será avergonzado”. Joel 2: 25-27 Recientemente viajé al Canadá para ministrar la Palabra del Señor en la ciudad de Toronto. Allí se realizó el Primer Congreso Apostólico y Profético, con la participación de mis queridos amigos Luis Mercedes, Apóstol de Jesucristo y el Profeta Steven Swisher. En una de las tardes del evento, Luis dio una clase magistral. Para mi, una joya verdadera de conocimiento del Programa Profético de Dios con la Humanidad. El énfasis de la enseñanza de dos días a través de Luis Mercedes fueron tres palabras: Restauración, Reforma y Restitución. El conocer los detalles más relevantes y las implicaciones alrededor de cada uno de estos términos nos ayudarán a entender con claridad qué sucederá con la Iglesia y Las Naciones en esta primera década de los años 2000. Fue a través del Profeta Joel que Dios nos anunció una obra restauradora profunda en Su Pueblo. Él dijo en Joel 2:25 que Él nos restituiría los años que comió la oruga, el saltón, el revoltón y la langosta. Es por medio de Joel y su libro que el Señor presenta una obra restauradora que le llevará a restituir en Su pueblo todo lo que le fue quitado en los años de la devastación de sus enemigos. Para poder entender con claridad lo que anuncia el Profeta hay que entender que toda Profecía Bíblica tiene “tres esferas de cumplimiento”. La primera es la aplicación literal concerniente a profecías dadas al Israel natural. Cuando la profecía se cumple allí, debemos esperar que también se cumpla más ampliamente con el Israel espiritual, la Iglesia. La Profecía en la Iglesia tiene las otras dos esferas de cumplimiento mencionadas: Una parcial que vendría a cumplirse en los primeros años de la Iglesia Primitiva (restringida, geográfica y racialmente) y la otra, el cumplimiento universal, reservado para los últimos días de la historia. En esta última forma de Cumplimiento Profético, la Profecía se cumpliría en toda tribu, nación y raza en la misma época. Un ejemplo gráfico de esto, nos lo da el mismo Joel en el capítulo 2 y versos 28 y 29 donde afirma que el Espíritu Santo sería derramado sobre toda carne. Con Israel en sus días, la Profecía comenzó a cumplirse pero parcialmente. Con la Iglesia del Nuevo Testamento se cumplió también en forma parcial en el Día de Pentecostés cuando como un viento recio el Espíritu del Señor se derramó en el Aposento Alto. Recuerden que, Pedro, en esos días, para explicar lo sucedido allí, argumentó basado en la Profecía o promesa de Dios dada por el Profeta Joel. Aunque el cumplimiento vino, sólo fue parcial y reducido al ámbito geográfico de la Tierra Santa. Obviamente, ha quedado para nuestro tiempo, el cumplimiento universal de la misma profecía.
No será derramado el Espíritu sólo en Jerusalén o Judea sino en todas las naciones del mundo a la vez. Por tanto, la promesa dada por Dios de Restaurar y Restituir no sólo tenía que ver con Israel o con la Iglesia Primitiva, sino sobre todo con la Iglesia de nuestro tiempo, la del Tercer Milenio, en la cual la posibilidad de cumplimiento es más amplio, trascendente, rápido y universal. La Promesa Divina de Restituir lo que destruyó la obra de satanás al paso del tiempo, figurada en la devastación hecha por la oruga, el saltón el revoltón y la langosta está por venir en nuestros días de la “Restitución” o “Devolución” de lo perdido o robado por el diablo a la Iglesia. Vendrá en este Tercer Milenio sin duda alguna. Para ello era necesario, que primeramente Dios trajera al Cuerpo de Cristo la Restauración de la Verdad Perdida. Esa Restauración de las Verdades Apostólicas producirá una maravillosa “Reforma Apostólica” y ésta a su vez traerá de la mano amorosa del Espíritu Santo, la “Restitución de lo Perdido”. LA RESTAURACIÓN La Biblia de hecho es un libro de Restauración. Dios nos presenta en cada página de Su Libro Santo el Plan de Restauración de Su planeta tierra y del hombre creados por Él. La palabra “restauración” proviene del término griego “apokatistemi”; el cual es raíz para el nombre del último libro de la Biblia, el Apocalipsis o Revelación. Jesús usó esta palabra al restaurar o sanar al hombre de la mano seca (Mt. 12:9 14). El concepto allí expresado implica devolverle a ese hombre enfermo su mano sana, pero según como ésta estuvo en el momento de su nacimiento, en su estado original. Restaurar implica hacer posible que todas las cosas vuelvan a estar como fueron creadas en su estado original. Restauración implica traer las cosas otra vez a su origen o posición original, tal y como fueron creadas por Dios. Restaurar implica recobrar, reedificar lo caído o hacer posible que todo vuelva a ser como al principio. Cuando hablamos de Restauración Bíblica estamos tratando con un proceso gigantesco del Espíritu Santo para hacer posible que todas las cosas en Su Universo creado vuelvan a ser como al principio de su creación. Es Dios mismo el originador del proceso restaurativo de Su Creación, movimiento que ni siquiera surge con el hombre sino antes de éste, en la Eternidad. Aleluya. El caos originado por la rebelión de lucifer en los Cielos y su caída al Segundo Cielo, puso en marcha un Plan de Restauración Divina desde antes de que el mundo existiera. Con la creación del hombre y su posterior caída, Dios tuvo que expandir su Plan de Restauración para levantar a la Humanidad de la esclavitud del diablo. La restauración nace en Dios; Él inicia el Proceso Redentivo y Restaurador del Universo. La Sabiduría Infinita del Creador se ve manifestada en Su Plan Redentor, a través de enviar a su Hijo Jesucristo para
derrotar a satanás en el Calvario, y desatar la restauración del género humano y la creación, Jesús vino a restaurar lo que se había perdido. Aleluya. El concepto de Restauración está en Dios mismo. Él es el Restaurador por excelencia. Es Su Espíritu Santo el que está llevando todas las cosas por el proceso restaurador para devolverlas a su estado original. Por eso el profeta Isaías, inspirado por Dios anuncia que en el tiempo en que todo sea restaurado, la creación volverá a ministrar al Señor en forma unánime. Los árboles del campo, el ciprés y el arrayán darán palmadas de aplauso al Señor. Amén. El resultado de la rebelión de lucifer, afectó al hombre y luego a la Iglesia. El diablo trabajó por siglos para devastarle y robarle las Verdades Apostólicas que le dieron poder y esplendor. Satán como si fuera un devastador, envió un proceso destructor para comer sus raíces apostólicas y proféticas. El Profeta Joel lo describió en su capitulo 1 como si fuera un animal llamado langosta, que en su proceso de crecimiento y desarrollo o metamorfosis, va dañando diferentes partes de una planta, hasta consumirla en su madurez como langosta (oruga, saltón, revoltón y langosta). En su Plan Magistral de Restauración el Dios Eterno incluyó a Su Iglesia, Él prometió restaurarla como al principio. Él hará que Su Casa sea como Él la diseñó originalmente con sus dones, ministerios y autoridad. La Restauración del Espíritu Santo ha incluido desde luego la Reedificación de la Iglesia; el
Señor sanará su esterilidad y le devolverá la vida y movimiento como tenía al instante de su creación. Restauración tiene que ver ineludiblemente con Su Iglesia. Amén. LA IGLESIA ORIGINAL Para entender el Proceso de Restauración en el pueblo de Dios hay que buscar lo que debe ser restaurado del modelo original. Este modelo del principio fue conocido como “La Iglesia Primitiva” y los planos de su construcción y funcionamiento los encontramos en el libro de Hechos. Allí con confianza y apertura de corazón, debemos mirar. Dios hizo nacer a Su Iglesia desde luego a través de la “Sangre del Cordero”. Con Cristo nació la Iglesia. Pero el Día de Pentecostés fue el momento de su alumbramiento pleno. Allí la Iglesia comprada en la Cruz, nació al mundo como organismo lleno del poder del Espíritu. Desde ese instante, el Espíritu Santo, descendió para edificar La Casa del Señor y establecer los diseños y estructuras del Padre; el Arquitecto y Diseñador de Su Obra. Amén. Esta fue una Iglesia con dos ministerios de fundamentos principales: Apóstoles y Profetas. Por tanto, esta fue una Iglesia de fundamento, visión, poder, autoridad y comisión Apostólica y Profética. Basó su estructura en cinco Ministerios u oficios ministeriales que interactuaban en su unción
“A quien de cierto es necesario que el cielo reciba hasta los tiempos de la restauración de todas las cosas,...” Hechos 3:21
Restauración y Reforma | Edición 89
desde 1517 y que no ha detenido hasta nuestros días, acelerándolo más en el Siglo XX. El Espíritu Santo restauró con Lutero la verdad de la Salvación por la Sangre de Cristo; mediante sus discípulos, el Bautismo en agua en 1535 y para el Siglo XVII la doctrina de la Santidad con Juan Wesley. En el siglo XIX, llenó Europa con el mensaje de la Sanidad Divina, con el cual nos introdujo al Siglo XX, siglo de obra restaurativa monumental. Cada una de estas verdades, curiosamente corresponderían a diversas verdades bíblicas expresadas en símbolos del Tabernáculo de Moisés. La Salvación gratuita a través de la Sangre de Cristo, correspondía a la Puerta del Tabernáculo y el Altar del Sacrificio en el patrón del Santuario de Moisés. El Bautismo en agua restaurado cumplía Proféticamente la verdad del Lavacro o Fuente para lavar las manos y los pies del sacerdote. También esta verdad anunciaba el retorno a la Palabra de Dios; velada hasta esos días al hombre.
Es cierto que un amplísimo sector de la Iglesia ha seguido resistiendo a lo que Dios está haciendo, pero también es cierto que el pueblo que va en pos de la Visión Apostólica Renovada es mucho mayor de lo que se piensa. particular para edificar juntos y movilizar poderosamente al Cuerpo de Cristo (Apóstoles, Profetas, Evangelistas, Pastores y Maestros). Esta fue la Casa de Dios, ataviada de dones del Espíritu Santo activos y poderosamente manifestados. En ella, los milagros, las señales, y los prodigios eran el pan de cada día. La Adoración y la Alabanza bajo principios Proféticos davídicos, movían al pueblo a darle al Señor lo mejor. Por esta Alta Alabanza, Dios descendía y se movía con ellos y entre ellos; su ángeles se manifestaban espectacularmente y el Espíritu Santo era el Guía en todos sus pasos. La Iglesia Primitiva fue una Iglesia evangelizadora, de milagros, poder y fe en Dios. La Gloria derramada por el Padre para cubrirla era temida por paganos y judíos. Dios demostró a través de Su Novia, el poder de Su Trono literalmente, los pueblos temblaban ante la demostración de Su fuerza, en la Iglesia. Amén. Ese poder Apostólico y Profético fue impartido a otros, en varias generaciones posteriores por los primeros cristianos. Con la profecía fluyendo, y la imposición de manos de presbiterios ungidos, la unción fue transferida. Esta Iglesia marcada por el diseño divino, cambió el mundo en los dos primeros siglos después de Cristo. Llenó el mundo conocido con el Evangelio y conmovió al Imperio Romano, el más grande de la tierra. Amén.
Lastimosamente en los años subsiguientes, la Iglesia sufrió la infiltración de políticos religiosos y también dejó crecer en su seno a falsos maestros que desestabilizaron sus pasos y a partir del siglo IV (1,300 en adelante) la apostasía y el poder babilónico romano tomaron el control del movimiento cristiano. Constantino, el Emperador romano, adoptó al cristianismo como religión del estado y prostituyó entonces la Casa de Dios. El resultado de años posteriores fue el surgimiento de la Iglesia Católica Romana; el intento mayor de satanás de ahogar el mover Profético y Apostólico del Espíritu Santo. El Imperio impuso pastores y una estructura babilónica que poco a poco fue anulando el Patrón Bíblico Apostólico y la Iglesia fue devastada y descortezada cual árbol arruinado, según la Profecía de Joel 1. Las consecuencias vinieron contra todo lo establecido por el Padre. Desaparecieron los Apóstoles y los Profetas, la unción, el poder y los milagros. Poco a poco, el paganismo tomó los altares y se perdió la vida y manifestación del Espíritu. La oscuridad envolvió a la Iglesia dejándola por siglos a merced de la devastación del diablo y sus tinieblas religiosas.
La doctrina de la Santidad y el poder del Espíritu de Wesley, cumplía la verdad expresada en el simbolismo de Moisés en la Mesa de los Panes de la Proposición. Estos panes hablaban proféticamente de la pureza y santidad no solo del pan o Palabra Divina predicada sino de la pureza de vida del mismo sacerdote. Amén Las verdades simbólicas restantes, profetizadas en el Santuario del Desierto en los días de Moisés, tendrían que esperar al siglo pasado, al cierre del Segundo Milenio después de Cristo. Sería en los años de 1900 a 2000 en los cuales el Espíritu Santo aceleraría el proceso de Restauración para poner de nuevo en orden Su Casa y su funcionamiento. Los símbolos del Candelero de Oro, que figuraban al Poder y Luz del Espíritu, verían el cumplimiento con el Avivamiento en Gales y sobretodo en Azuza, California en 1906. Allí Dios, inició un derramamiento de su Espíritu glorioso. Para 1925 más de 80 millones de personas habían recibido un nuevo Pentecostés. Desde aquel edificio casi destruido de la calle Azuza, el Señor movió Su Espíritu. Esto inició desde Norte América el movimiento misionero moderno más grande del continente y que llevó con fuerza increíble el Evangelio a Latinoamérica y cada una de sus ciudades importantes.
A pesar de todo, Dios mantenía y guardaba para Si un remanente fiel. Aleluya.
Con el Avivamiento de la calle Azuza, surgieron las denominaciones pentecostales de vanguardia que lideraron el mover pentecostal del siglo XX (Asambleas de Dios, Iglesia de Dios, E.C. etc.) Esta etapa de la Restauración del Espíritu Santo fue denominada “El Primer Oleaje del Espíritu Santo o Movimiento Pentecostal”. Con este Avivamiento, se empezó a encender el “Candelero de Oro” en el Sentido Profético. En el Santuario de Moisés, este candelabro representó la luz, la guía y el poder del Espíritu de Dios.
Después de siglos de oscurantismo religioso, idolatría y sincretismo engañoso, el mundo vio una nueva luz de Restauración divina con la transformación de Martín Lutero y sus tesis bíblicas. Dios inició un proceso restaurador
Las manifestaciones pentecostales vinieron a América; gritos, saltos profecías y milagros, tuvieron lugar en las iglesias del Siglo XX. El mover tradicional de la Iglesia Fundamentalista de otros siglos se empezó
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a ver perturbado (metodistas, presbiterianos, luteranos y bautistas). Había comenzado un viaje restaurador moderno que levantaría al Ministerio del Evangelista y afirmaría el Ministerio Pastoral contundentemente. En la primera mitad del siglo pasado, Dios levantó a hombres como Oral Roberts, Morris Cerullo, T.L. Osborn y muchos más para la tarea evangelizadora más grande en el Tercer Mundo. Entre los años 30 y 70 se dieron las cruzadas evangelísticas más conmovedoras del siglo. África y Asia fueron tocadas por el poder de Dios, así como parte de Europa y Sur América. La Obra Pentecostal emergió con poder. La Restauración de la Verdad Apostólica, empezaba a florecer otra vez. Amén. De ese mover restaurador, surgen en las décadas de 1950 y 1960, Maestros de la Palabra, según Efesios 4:11; constituidos y ungidos por Dios. Estos traerían “pan del cielo”, Palabra revelada por el Espíritu Santo. Era como si fuera restaurada a plenitud la Verdad Profética anunciada por Moisés en la Mesa de los Panes de la Proposición del Lugar Santo junto al Candelero de Oro. Era obvio que, al restaurarse el poder pentecostal del Espíritu, como consecuencia directa, se restauraría el Ministerio de la Palabra al brotar como lluvia, los maestros del Señor. Estos maestros con frescas Verdades Apostólicas renovadas, nos introdujeron a la nueva ola del Espíritu Santo; la Segunda de ellas denominada el Movimiento Carismático (por los dones del Espíritu) o Movimiento Neo Pentecostal. Este mover renovador provocó el levantamiento de miles de congregaciones autóctonas o nacionales, plantadas en su mayoría por líderes nacionales. A estas iglesias, grotescamente, las denominaciones pentecostales y tradicionales les llamaron “independientes”. Término despectivo que fue para muchos sinónimo de rebelión o satanismo evangélico. Hoy a pesar del ataque del pentecostalismo a esas iglesias y sus líderes, estos grupos están a la vanguardia del desarrollo cristiano de nuestras naciones. Con estos maestros y su enseñanza ungida, la Restauración del Espíritu Santo continúa a pasos agigantados. Es cierto que un amplísimo sector de la Iglesia ha seguido resistiendo a lo que Dios está haciendo, pero también es cierto que el pueblo que va en pos de la Visión Apostólica Renovada es mucho mayor de lo que se piensa. Este pueblo es el que hará la diferencia en este Tercer Milenio. Aleluya. Es con este nuevo oleaje que el Espíritu introduce al Ministerio Profético y lo consolida en los años 90. Verdades esenciales son devueltas a los púlpitos de la iglesia: Reino de Dios, Adoración, Alabanza e Intercesión. Es la Verdad Profética anunciada por Moisés con el Altar del Incienso en el Lugar Santo. Proféticamente los años 80 nos restauran este detalle. A inicios de la década final del Siglo XX, en los años 90, Dios da un giro en Su Iglesia, llevándola a los pies del Espíritu Santo. Allí se inicia el Mover del Espíritu Santo o Tercer Oleaje Divino. La Iglesia ahora, lo quiere a Él; quiere Su unción y Su Presencia. En esta etapa, Dios consolida el hecho de que todavía hay Profetas en su Casa e inicia un proceso de Restauración del Ministerio del Apóstol.
“…Extiende tu mano. Y él lo hizo así, y su mano fue restaurada.” Lucas 6:10
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Edición 89 | Restauración y Reforma
El Dr. Peter Wagner en su libro “Terremoto en la Iglesia” nos hace ver contundentemente que la Reforma Apostólica presente no tiene la intención de traer cambios en el orden teológico, pues los principios fundamentales de la fe cristiana, principios teológicos emanados de la Reforma de Lutero, quedan inalterables. Wagner enfatiza que la Reforma actual no es una reacción contra la corrupción y apostasía en la Iglesia como sucedió en los días de Lutero sino que es una reacción contra la irrelevancia, la religiosidad y el control manipulativo. La Nueva Reforma Apostólica Por cuanto el Fundamentalismo ha decaído estrepitosamente y las Denominaciones están fracasando en realizar su tarea hoy; y por cuanto apóstoles falsos se han levantado y han creado diversos conflictos, es que necesitamos una Nueva Reforma Apostólica. Con esto, Él introduce la necesidad del trabajo en Equipos Apostólicos, en Redes y Coaliciones Apostólicas.
proceso de Restauración y que la Verdadera Reforma Apostólica está emergiendo en nuestros días. Aleluya.
Esta será la norma de relación de los años 2000, milenio en el que pareciera que las más fuertes denominaciones pentecostales, están perdiendo membresía, control y hegemonía mundial.
El movimiento reformista iniciado con Lutero, nos dio desde luego un gran impulso y produjo en años posteriores organizaciones que llevaron al movimiento misionero más importante de los últimos siglos (Iglesia Luterana, Bautista, Presbiteriana, Santidad Pentecostal, etc.)
La Restauración de los ministerios de Profeta y de Apóstol en las naciones, lleva a la Iglesia en pos del Lugar Santísimo; en pos del Diseño Divino y Su Presencia. Esto sería la restauración en el modelo del Tabernáculo de Moisés, lo que correspondería a correr el velo de separación entre el Lugar Santo y el Lugar Santísimo e introducirse donde está Dios, tipificado y simbolizado proféticamente en el Arca del Pacto de Jehová. Esto tiene que ver en una mayor manifestación de Su Gloria; esto es Avivamiento Verdadero. La Obra Restauradora del Espíritu Santo está ya en su etapa final. Esa restauración de Apóstoles y Profetas, y de las verdades fundamentales de la Iglesia Primitiva, están dándose en todo lugar de la tierra. El Cumplimiento Profético es universal. El Señor completará en breve su obra. Nosotros debemos prepararnos para La Reforma Apostólica que se inicia ya a finales del Siglo XX. Amén. LA REFORMA Cuando Dios quiere restituir algo que prometió y se está perdiendo, trae Restauración y Reforma a su Pueblo. El Antiguo Testamento nos presenta tres tiempos impresionantes para Israel. Un ejemplo de esto sucede en los días de Nehemías, en el tiempo de Hageo y en los años del Rey Josías. Dios envió a sus Profetas para traer cambios sustanciales en el Sacerdocio de Israel y en el comportamiento de su gente.
La Reforma traída por Dios a través de Lutero también fue conocida como La Reforma Protestante. Mi opinión personal es que esta Reforma más que Apostólica fue Evangelística, pues puso en claro sobre todo, la doctrina fundamental de la salvación por la gracia y la fe en la Sangre de Jesucristo. ¿Qué es una Reforma Divina? Es una obra extraordinaria del Espíritu Santo a través de la cual, Él cambia la forma del cristianismo “protestante” imperante en el mundo entero. Una Reforma Divina transforma la manera en que se experimentará el cristianismo en la generación respectiva. Este es un cambio radical ordenado por Dios para producir cambios radicales entre Su pueblo y su forma de vida. Como ya mencioné anteriormente, la Primera Reforma después de los días de la Iglesia Primitiva, los historiadores religiosos la definen como aquella que sucedió en el Siglo XVI con Martín Lutero. La Segunda Reforma está empezando a ocurrir en nuestros días, Dios la está dirigiendo y afectará ineludiblemente a la Iglesia del Tercer Milenio. Creo que cambios más radicales y más bíblicos en cuanto al Modelo Apostólico tendrán lugar en esta “Hora del Espíritu”.
En años posteriores, Martín Lutero fue usado por el Espíritu de Dios para iniciar una nueva etapa de cambios sustanciales al mundo cristiano religioso. Esa época fue conocida como La Reforma Luterana.
La Reforma Protestante de Lutero fue una reforma muy ligada a la renovación de la doctrina de la fe fundamental; fue una Reforma de la Fe. La actual Reforma del Espíritu es más una reforma de la práctica. Concierne a gobierno y administración eclesiásticos y ministerios. Es una Reforma Apostólica. Se ciñe a traer cambios sustanciales en la forma de gobernar, dirigir y administrar la Iglesia y sus ministerios.
A pesar de que se dieron grandes cambios y en los siglos siguientes, personalmente creo que La “Hora de Lutero” sólo inició el
Estamos empezando a ver el cambio más radical y Apostólico en el cristianismo mundial desde los días de Lutero.
Igualmente en el Nuevo Testamento, el Señor trajo Su Reforma a través de Jesús y la Iglesia.
La Iglesia clama para un cambio 1. Porque necesita volver su corazón a Dios. 2. Porque necesita Liderazgo Espiritual. 3. Porque requiere un nuevo nivel en la Unción. 4. Porque necesita Visión fresca. 5. Porque necesita al Espíritu Santo y Sus Dones. 6. Porque necesita destruir la Religiosidad. 7. Porque necesita el Milagro de la Habitación de Dios en ella. ¿Qué es una Reforma Apostólica? a. Es un cambio drástico en la Iglesia producido por el Espíritu Santo. b. Es una trasformación necesaria cuando la Iglesia se ha alejado del patrón o modelo bíblico. c. Es una reestructuración del Espíritu Santo para formar el corazón de la Iglesia y llevarla hacia el modelo teocrático. d. Es el movimiento del Espíritu Santo para guiar a Su Iglesia. ¿Cuándo es necesaria una Reforma Apostólica? 1. Cuando hay religiosidad en la Iglesia. 2. Cuando el Liderazgo quedó ciego. 3. Cuando Babilonia y sus diseños invadieron La Iglesia. 4. Cuando la mundanalidad y la tibieza predominan. 5. Cuando falta la Palabra de Dios . 6. Cuando no hay revelación del Espíritu Santo. 7. Cuando Satanás se ha infiltrado en la Iglesia. 8. Cuando la sociedad está demonizada. 9. Cuando el espíritu de la Reina del Cielo y el espíritu de Jezabel dominan e influencian la Iglesia. 10. Cuando el humanismo secular es exaltado. ¡Sin duda, necesitamos una Reforma Apostólica!!! ¿Qué nos trae una Reforma Apostólica? 1. Luz en las Escrituras. 2. La Teocracia y el Reino de Dios. 3. Lo Operación del Espíritu Santo y Sus Dones. 4. El Retorno al Lugar Santísimo y a La Presencia de Dios. 5. El volvernos al estudio de La Palabra (hambre). 6. Restauración de las Verdades Perdidas.
7. Confrontación de Babilonia y los poderes malignos. 8. Fuego, gozo y poder del Espíritu Santo. 9. Levantamiento de Apóstoles y Profetas. 10. Cielo Abierto (El Tercer Cielo invade la Tierra, Avivamiento Divino). Bases para una Reforma Apostólica 1. El establecimiento otra vez de una Estructura y Diseño Apostólico. 2. El establecimiento de la Unidad Ministerial Apostólica. 3. El establecimiento de Redes y Coaliciones Apostólicas. 4. Palabra de Revelación. 5. Hambre por la Verdad de Dios. 6. El Espíritu Santo y una fuerte comunión con Él. 7. Pasión por la Presencia de Dios. 8. Sed del Vino Nuevo del Espíritu (Nuevo Pentecostés). 9. Creación de Odres nuevos para el Vino Nuevo. 10. Enseñanza sobre la Teología del Reino de Dios. Beneficios de una Nueva Reforma 1. Dios establece su Diseño Profético para el fresco mover del Espíritu Santo. 2. Con la Reforma, Dios restituye a Su Pueblo algo que Él prometió y que se está perdiendo. 3. La Reforma viene para cambiar estructuras eclesiásticas caducas y estériles, para preparar modelos nuevos para el mover presente del Espíritu. 4. La Reforma trae nuevos ajustes para devolver el esplendor y la dinámica a la Iglesia que satisface el corazón de Dios por lo que es restablecido. 5. La Reforma es llamada para traer La Presencia de Dios y extasiarnos con ella. 6. La Reforma renueva y restablece a los Ministerios Apostólicos en la Iglesia; ministerios que traen el sentido de Presencia y hambre de ella al pueblo. 7. La Reforma trae cambio de estructuras. 8. La Reforma trae nuevas formas de edificar La Casa de Dios y levanta los ministros edificadores.
La Restauración de los ministerios de Profeta y del Apóstol en las naciones, lleva a la Iglesia en pos del Lugar Santísimo; en pos del Diseño Divino y Su Presencia. Cuando Dios quiere restituir algo que prometió y se está perdiendo, trae Restauración y Reforma a su Pueblo.
“Entonces dijo á aquel hombre: Extiende tu mano. Y él la extendió, y fue restituida sana como la otra.” Mateo 12:13
Restauración y Reforma | Edición 89
9. La Reforma elimina las estructuras andamios para edificar La Casa del Señor (dígase estructuras religiosas o denominacionales que sirvieron al mover del Espíritu en determinada época y no se renovaron con el tiempo). 10. La Reforma Apostólica restaurará la imagen perdida de la Iglesia ante la gente. 11. La Reforma es una ayuda determinante en la transición y los cambios que deben ocurrir. 12. La Reforma trae Restauración del Gobierno Apostólico y el “conocimiento del parecer o voluntad” del Espíritu. 13. La Reforma devuelve los patrones bíblicos de Dios a la Iglesia y con ello su estructura de gobierno, adoración y manifestación. 14. La Reforma renueva los Principios Proféticos y Apostólicos del Reino de Dios para el fluir del Espíritu. 15. La Reforma devuelve al Cuerpo de Cristo su identidad, reafirma la seguridad en si misma y levanta su nivel de autoestima personal y ministerial (especialmente quienes han sido precursores o apoyadores del nuevo mover del Señor). 16. La Reforma organiza al pueblo de Dios para la Restitución que hará el Señor. 17. La Reforma nos prepara para el Avivamiento. 18. La Reforma Apostólica traerá “Vino Nuevo” para “Odres Nuevos”. 19. La Reforma trae el Espíritu de la Cosecha. 20. La Reforma trae “Nueva unción del Señor”. RESTITUCIÓN La Obra de Restauración y Reforma del Espíritu Santo traerá a la Iglesia de Cristo la Restitución prometida por el Señor a través del Profeta Joel. Todo lo que Satanás le ha robado a la Iglesia, nos será devuelto en nuestros días. Amén. El siglo pasado cerró inmerso en el Tercer Oleaje del Espíritu Santo denominado el “Movimiento del Espíritu Santo”. Este “Oleaje nos anticipó que en este Tercer Milenio seríamos envueltos por la “Ola Apostólica” más grande de lo que hayamos visto antes, después de los primeros siglos del Cristianismo; Aleluya. Esta “Ola Apostólica Gigantesca” es la Restitución prometida por Jehová a Su Pueblo. Amén. La Restitución traerá sobre el Cuerpo de Cristo una Unción Nueva de Cosecha. El Espíritu de Dios impartirá a la Iglesia, el Espíritu Apostólico de Cristo para llevarla a caminar sometida a plenitud bajo los diseños, propósitos y voluntad del Padre.
Con la Nueva Reforma Apostólica, la Iglesia del Tercer Milenio será edificada bajo la Unción Apostólica y Profética para quebrantar el dominio de satanás sobre nuestras ciudades y países. Esto nos llevará a ver la Restitución de:
La Obra de Restauración y Reforma del Espíritu Santo traerá a la Iglesia de Cristo la Restitución prometida por el Señor a través del profeta Joel. Todo lo que Satanás le ha robado a la Iglesia, nos será devuelto en nuestros días. Amén.
1. Multitud de Apóstoles y Profetas en las naciones. 2. El Espíritu Apostólico o Misionero en la Iglesia. 3. El Gobierno Teocrático y Apostólico del Cuerpo de Cristo (basado en los cinco Ministerios de Efesios 4:11). 4. El ministerio de Milagros y Señales Apostólicas más sorprendente jamás visto. 5. El poder, la unción y los dones del Espíritu Santo. 6. La Iglesia como una “Compañía Apostólica” (hombres y mujeres) con una visión y una unción misionera. 7. Los planes, estrategias y diseños divinos. 8. El poder espiritual contra el señorío de satanás. 9. La Autoridad Espiritual para quebrar el yugo sobre los pueblos de principados y potestades. 10. EI Pan (Palabra); el Vino (gozo); y el Aceite (unción del Espíritu Santo) en la Iglesia. 11. EI funcionamiento Apostólico del Cuerpo de Cristo para hacer del mismo un “Organismo Viviente”. 12. La Presencia de Dios en Su Casa. La Restitución en la Iglesia La Restitución le devolverá a la Iglesia, el carácter de Cristo, es decir, el fruto del Espíritu Santo. La Iglesia será edificada para operar como una enorme Compañía Apostólica dotada de una Unción Evangelística, Intercesora y Misionera.
La Iglesia tendrá gente así:
1. Basada en relaciones con los demás (relacionable) 2. Amante de la Unidad del Cuerpo. 3. Vibrante, apasionada y entusiasta. 4. Reverente ante la Presencia de Dios. 5. Sumisa y obediente ante la Autoridad del Espíritu. 6. Enfocada en establecer y vivir el Reino de Dios. 7. Ungida y Evangelística. 8. Consolidadora del fruto (almas). 9. Discipulable y discipuladora. 10. Con un espíritu positivo y progresista (de fe) 11. Violenta en el espíritu. 12. Dependiente y confiada en el Espíritu, en Su Obra, y en Su Plan. La Restitución anunciada por Joel
El Profeta de Dios profetizó, no sólo una época de grandes conmociones naturales para la tierra de Judá, sino que anunció lo que sucedería espiritualmente a la Iglesia del Señor al ser devastada por satanás después de los años de su esplendor. En el capitulo 1 de su libro, Joel exhorta a comunicar a las generaciones los acontecimientos catastróficos sobre su pueblo para que no se repitan más. Allí el Profeta en forma descriptiva nos indica todo lo que perdió el pueblo judío en la devastadora obra de la langosta (figura simbólica de satanás y los demonios). Veamos lo que ocurrió a Judá: 1. Le fue quitado el mosto de su boca. 2. Fue descortezada como higuera; perdió su cobertura de protección. 3. Le fue robado el gozo y la alegría. 4. Le asolaron económicamente y le robaron sus ofrendas para Jehová.
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5. Le robaron el vino para la libación. 6. Enlutaron a sus sacerdotes. 7. Le asolaron sus campos. 8. Enlutaron su tierra. 9. Destruyeron su trigo. 10. Perdieron su mies del campo. 11. Secaron su vid y mataron su higuera. 12. Secaron sus árboles y se extinguió el gozo de sus hijos. Aunque todo esto sucedió al cumplirse la Profecía en lo concerniente a la nación hebrea, el cumplimiento cabal y universal quedaría reservado para nuestros días. Cada cosa mencionada nos habla de un valor espiritual devastado en el Mover Apostólico de la Iglesia. Esto implica que, satanás atacó a la Iglesia con sus demonios como nube de langostas para devastaría. El diablo robó de la Iglesia: 1. Su gozo, su alegría y su llenura o embriaguez del Espíritu Santo. 2. Su Cobertura Apostólica y Profética (su protección). 3. Sus ministerios según Efesios 4:11 (Apóstoles, Profetas, Evangelistas, Pastores y Maestros). 4. Su potencial económico y sus ofrendas para Dios. 5. Su revelación de la Palabra (vino nuevo). 6. Su adoración y alabanza viva. 7. La vida del Espíritu en las congregaciones. 8. La Palabra del Espíritu. 9. El fruto y la cosecha (almas). 10. EI propósito y destino de la Iglesia. 11. EI liderazgo, la visión y el poder 12. El potencial de crecimiento y desarrollo. Así como cada palabra de Joel se cumplió en lo concerniente a lo trágico y negativo, nuestra esperanza es que cada profecía positiva también será cumplida por el Señor. Joel mismo anunció que hay promesas de Restauración y Devolución de lo perdido. ¡Aleluya!. El Profeta exhorta a la tierra, a los animales del campo y a los hijos de Sión a alegrarse por lo que Dios hará. Joel anuncia que Dios nos enviará tiempos de refrigerio; esto es, tiempos de Restauración y Restitución. Él proclama que Dios nos enviará Su lluvia, la temprana y la tardía; a su tiempo. La Promesa del Padre es que Él lo restituirá todo. Nuestras eras se llenarán de trigo y los lagares rebosarán de vino y aceite. Amén. El Anuncio Profético de Restitución apela no solo a Judá sino a la Iglesia. Es lo prometido por Dios; la restitución de lo que satanás devastó; amén.
Esta Restitución, le devolverá a la Iglesia La Unción, Carácter y Espíritu Apostólico que la llevará ineludiblemente a cumplir con la tarea de Evangelización, Cosecha y Discipulado en las naciones según Mateo 28, conocida como la Gran Comisión. La Restauración y Reforma Divinas nos llevarán directamente a La Cosecha de almas más gigantesca de la historia del hombre en nuestros días.
“Y os restituiré los años que comió la oruga, el saltón, el revoltón y la langosta, mi gran ejercito que envié contra vosotros”. Comeréis hasta saciaros, y alabaréis el nombre de Jehová vuestro Dios, el cual hizo maravillas con vosotros; y nunca más será mi pueblo avergonzado.
A este fenómeno espiritual, lo declararemos como parte de la Restitución anunciada por los Profetas.
Y conoceréis que en medio de Israel estoy yo y que yo soy Jehová vuestro Dios, y no hay otro; y mi pueblo nunca jamás será avergonzado. Joel 2:25, 26, 27.
Con la “Restitución de lo perdido”, vendrá un impacto de evangelización en cada nación. Esta maravillosa ola del Espíritu Santo, está consumando el Movimiento de Restauración Profética, La Reforma Apostólica y la Restitución. Amén.
¡Iglesia; vivimos tiempos de Restitución; Amén!
“Restauraré tus jueces como al principio,...” Isaías 1:26
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EL GOBIERNO APOSTÓLICO DE LA IGLESIA Consejo Editorial - Revista “En Conquista” (Enero 2008) “Acepté a Jesús como mi Señor en el año 1972, y a partir de entonces me acostumbré a ver funcionar la totalidad de las iglesias a las que asistí con un invariable modelo: la sobresaliente figura de un Pastor, el apoyo para Evangelistas en su mayoría itinerantes, y un grupo de Maestros para discipulados. Tiempo después, en los años 90, ocasionalmente se invitaba a ministrar a un “Profeta”, al que recibíamos con mucho recelo y a veces con más temor que expectativa debido a profundos cuestionamientos acerca de las formas un tanto escandalosas de su proceder. A finales de los 90 se dio el cambio más controversial; por primera vez escuchamos nombrar a un siervo de Dios bajo el título de Apóstol; que atrevimiento. Pensamos: será que se cree “El Apóstol Pablo”. Al principio; este mover presentado de la mano con lo Profético fue interpretado por nuestra denominación casi con características de blasfemia, especialmente por el atrevimiento de una persona a llamarse Profeta o Apóstol. Fue hasta el año 2004 que un gran velo se rompió, y por medio de las contundentes evidencias del poder de Dios a través de siervos que enseñaban sobre esta reforma; algunas iglesias de nuestra denominación incluida la nuestra, ingresamos al Mover Apostólico y Profético. Ahora yo puedo reconocer el llamado Apostólico y Profético y llamar a mis autoridades como tales”. El testimonio anterior podría resumir la experiencia de miles de cristianos en estos últimos tiempos, el fenómeno del cambio nos ha afectado prácticamente a todos, algunos hemos transicionado, otros no; sin embargo sin importar cuál sea nuestra postura; benefactores u opositores, no podemos negar que la Restauración Apostólica y Profética ha venido a sacudir muchas de nuestras más profundas estructuras. La iglesia de Cristo en América Latina viene experimentando una serie de cambios sustantivos en lo que se podría llamar la estructura orgánica de su liderazgo y en consecuencia en la constitución interna de un nuevo poder de conducción de la iglesia. Se trata en realidad de una nueva configuración de los ministerios, según la carta de San Pablo a los Efesios. “él mismo constituyó a unos Apóstoles; a otros Profetas; a otros, Evangelistas; a otros, Pastores
Todo cambio provoca una crisis, sin embargo; esas crisis o “errores de instalación” no pueden servirnos de excusa para no cambiar y aferrarnos a nuestro sistema tradicional porque nos da una relativa seguridad.
y Maestros, a fin de perfeccionar a los santos para la obra del ministerio, para la edificación del cuerpo de Cristo” Efesios 4:11-12 Hasta hace poco los ministerios que han operado en la gran mayoría de iglesias en nuestro medio han sido: 1. El Ministerio Pastoral, como titular indiscutible y figura preponderante en la conducción de la congregación. 2. El Ministerio del Evangelista, como brazo asociado de proyección fuera de las cuatro paredes actuando como un cosechador o “el pescador” de las almas. 3. El Ministerio del Maestro, que capacite e instruya para los nuevos miembros. A partir de esta trilogía la iglesia ha funcionado durante muchos años, reservando con estricto rigor el Ministerio Apostólico y Profético como exclusivos para la Iglesia Apostólica del primer siglo. Esta aparente calma ha sido rota por los fuertes vientos de Reforma Apostólica y Profética de finales del siglo pasado que como un reguero de pólvora han venido por «liado a trastornar el modelo tradicional y por otro
lado a vivificar y contagiar de una vigorizante y poderosa reforma a nuestra iglesia actual. Lo anterior ha colocado sobre el tapete de la discusión aspectos fundamentales de la manera de concebir la vigencia actual y el modo de operación de estos cinco ministerios expresados en Efesios 4:11. Una de las discusiones fundamentales entre reformistas y conservadores ha radicado siempre en torno a la vigencia del Ministerio Profético; en determinar si éste sigue funcionando hasta hoy o no. Una de las posiciones conservadoras más fuertes se basa en la interpretación del mensaje de Pablo a los Corintios, de acuerdo a este criterio las profecías según el testimonio bíblico se acabarán, cesarán las lenguas (glosolalía) y la ciencia acabará (1 Corintios 13:8) hacia el final de los tiempos. El único Testimonio Profético más seguro reconocido por ellos es el que está registrado en las Sagradas Escrituras. La posición no pentecostal argumentaba que aceptar las profecías hoy era señalar que el canon (regla de fe del cristianismo) aún permanecería abierto después que el dogma fundamental de la iglesia se selló en los grandes Concilios de Nicea y Calcedonia (S. IV DC). Aceptar la vigencia del Ministerio Profético según los no pentecostales podría implicar restarle autoridad a las Sagradas Escrituras y dar paso a las más diversas arbitrariedades con relación a la inspiración divina única e inerrante. La posición de la Reforma Apostólica y Profética actual por el contrario declara sin temor que la Profecía existe, porque aún existen las lenguas extrañas de Pentecostés, de modo que la vigencia de una (las lenguas y la ciencia en aumento) es el testimonio de la vigencia de la otra (las Profecías); además la claridad expresada por la Palabra acerca de que el fundamento original de la iglesia según Efesios 4:11 está basado en Apóstoles y Profetas. El debate en torno a la vigencia del Ministerio Profético ha estado ligado a la discusión de si Dios aún habla hoy de forma audible o si por el contrario sólo lo hace mediante las Sagradas Escrituras; de si la revelación está abierta o si ya está cerrada. Actualmente se ha tratado de buscar una posición de consenso que pueda llevar a un parcial acuerdo entre las partes al admitir que “Dios está presente y no está callado” pero que las Profecías de hoy no tienen el mismo valor o autoridad que las Profecías Bíblicas, dejando las Profecías actuales limitadas para la edificación de la iglesia o equiparándolas como lo hicieron algunos teólogos al testimonio de la predicación tradicional asignándole sólo una función de apoyo en nuestros cultos o reuniones. El gobierno apostólico De la democracia a la teocracia Ahora bien, ¿qué ha pasado con el Ministerio Apostólico? En los últimos 20 años, especialmente en los Estados Unidos, se ha levantado un movimiento de restauración de la iglesia que sostiene la vigencia del Ministerio Apostólico, urgiendo y exhortando hacia un inmediato retorno al modelo original de la iglesia de Jesucristo basado como dice la escritura en Efesios 4:11 sobre el fundamento de los Apóstoles y Profetas. Líderes o dirigentes destacados de iglesias pentecostales, incluso de iglesias históricas con sed de renovación, están aceptando la restauración del Ministerio Apostólico y su instauración en el marco de sus denominaciones religiosas. Esto les ha llevado a cambiar la nomenclatura de su liderazgo, pues ya en un pasado reciente algunos líderes pasaron de ser “Presidentes Nacionales” (estructura democrática) a “Apóstoles” (Estructura
teocrática), este cambio del gobierno democrático y representativo heredado de la cultura humanista vigente en nuestra sociedad e infiltrado durante generaciones al interior de la iglesia un gobierno teocrático delegado a través de la figura de Apóstoles cuyas dimensiones y limites todavía no alcanzamos a definir con claridad; es el que genera las más feroces persecuciones a esta naciente Reforma Apostólica. Al perder la iglesia en los primeros siglos de nuestra era el modelo original del Gobierno Apostólico e irse deteriorando progresivamente el carisma, la autoridad de gobierno del liderazgo, y su capacidad de ser un representante fiel de Jesucristo en la tierra; ese poder de gobierno fue tomado por las congregaciones o asambleas. Entonces si un líder que actuaba como autoridad máxima y que por lo tanto concentraba mucho poder como los obispos se desviaban, por ende, todo el cuerpo sufría las consecuencias. De esta manera, se estableció como una mejor opción correctiva y alternativa la forma de gobierno congregacional en la cual los representantes regionales o locales de las diferentes denominaciones en representación de la asamblea se constituyeron en el poder máximo de la iglesia. Valga el apunte de la similitud con la máxima del gobierno político secular “EI pueblo al poder” o “La asamblea es el órgano máximo de gobierno”. “Sin embargo, estimado lector no lo dude, esta alternativa u opción humana nunca fijó el diseño original ni un plan alternativo de Dios para gobernar a su pueblo. El retornar de este sistema tradicional de gobierno a un sistema teocrático representado en la persona de Apóstoles y Profetas ha representado en muchas ocasiones un verdadero cisma estructural de grandes denominaciones. El lógico temor de muchas organizaciones al hecho de concentrar “Demasiado poder” en manos de una sola persona, viste de recelos en algunos casos el avance y la instalación plena de esta Reforma Apostólica. Sin embargo, cabe aclarar y destacar que la Reforma Apostólica no aboga por concentrar de manera dictatorial el poder en manos de un sólo hombre, tal como lo define Efesios 4:11. Jesús dejó establecido los cinco ministerios para constituir un equipo coherente y dinámico sobre la base o el fundamento de los Apóstoles y Profetas. Entonces, no hablamos de una sola persona que no rinde cuentas a nadie, sino de un equipo de personas profundamente conscientes de lo delicado de su rol y de su responsabilidad en la rendición de cuentas ante Dios, de sus actuaciones al frente de una iglesia. Obviamente el cambio es claro, de la concepción del ejercicio del poder por parte de la asamblea en el modelo tradicional, al ejercicio del gobierno por parte de Apóstoles y Profetas en el movimiento de la reforma; sus efectos y los “accidentes” que puedan darse en esta transición no deben escandalizarnos. Todo cambio provoca una crisis, sin embargo; esas crisis o “errores de instalación” no pueden servirnos de excusa para no cambiar y aferrarnos a nuestro sistema tradicional que aunque desgastado y a veces obsoleto ante nuestro entorno vertiginosamente cambiante, nos aferramos al mismo porque nos da una relativa seguridad. No debemos quedarnos atrás, es necesario orar con fervor pidiéndole a Dios sabiduría y de ser necesario que su Espíritu Santo renueve nuestro entendimiento y pueda derribar toda estructura humana que quiera mantenernos atados, limitándonos de poder volar con agilidad hacia esas grandes alturas del propósito de Dios para nuestras vidas e iglesias.
“ Vol veos a la fortaleza, oh prisioneros de esperanza; hoy también os anuncio que os restauraré el doble ”. Zacarías 9:12
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SIETE ÁREAS EN QUE PODEMOS ESPERAR LA RESTAURACIÓN Maestro Bill Sheidler restaurando los cinco ministerios, Apóstoles, Profetas, Evangelistas, Pastores y Maestros para perfeccionar a los santos, hasta que lleguemos a la unidad de la fe (Ef.4:11-16). La Iglesia no puede ser perfeccionada sin los cinco ministerios de la ascensión, que son un don de Dios para la Iglesia. Cuando Dios obra en la restauración, podemos esperar entonces que también prepare a un buen liderato, para que haya obreros hábiles en guiar al pueblo.
Ez. 34 nos describe la condición del pueblo de Dios y su necesidad de restauración. Las escrituras se refieren a siete áreas, por lo menos, en las cuales podemos esperar el mover de Dios en restauración. A. RESTAURACIÓN DE LA VERDAD 1. Para que Dios pueda restaurar totalmente a su Iglesia, ella tiene que ser expuesta a la verdad, en una manera que jamás ha experimentado. La verdad es el medio que Dios usa para cambiarnos. Cuando miramos la verdad, somos cambiados de gloria en gloria (2 Co.3:18). A través de las escrituras la verdad se relaciona con el concepto de luz. La Palabra de Dios es la Palabra de verdad (Sal.119:43; 2 Co.6:7; Ef.1:13; Col.1.15; Stg.1:18). Y aun es una lámpara a nuestros pies y una lumbrera a nuestro camino (Sal. 119:105). Cuando somos expuestos a la palabra, esto nos lleva al lugar de la luz (Sal.119:130). Dios quiere hacer una obra tremenda en su Iglesia hoy en día (Ef.3:10-11; Ef.4:11-16; 5.26-27; Hch.3.21), pero es importante para nosotros ver que cuando Dios trabaja, siempre obra en la atmósfera de luz, Verdad (Gn.1:3). Es el ministerio del Espíritu Santo, el Espíritu de verdad (Jn.14:17; 15:26; 16:13; 1 Jn.4:6), crear una atmósfera de recepción para la verdad. En la primera restauración encontramos que la condición de tinieblas fue interrumpida por el Espíritu de Dios, que se movía sobre la faz de las aguas, “Y dijo Dios: sea la luz;” (Gn.1:23). También podemos ver al Espíritu Santo en relación con el candelero en el Tabernáculo de Moisés. Él es el aceite por el cuál aquella luz era producida; hoy, y de la misma manera, Él produce luz en la vida del creyente. También Él es quien prepara el terreno sobre el cuál será sembrada la semilla de la verdad, que es la Palabra (comparece con Le.8:11 y Jn.17:17; vea 1 Jn.2:3). La Iglesia de los últimos días va a experimentar algo que ninguna otra generación de creyentes ha experimentado; tiene que recibir y aceptar la luz de Dios para abrir sus ojos. Tenemos que experimentar más luz que cualquier otra generación. El Espíritu Santo, el revelador de la verdad, es nuestro maestro; y va a guiarnos línea sobre línea, precepto sobre precepto (Is.28:10), hasta que seamos cambiados a su imagen (Ef.4:13). Este es el método de enseñanza de Dios, siempre progresivo. Hay necesidad de una restauración de verdad a la Iglesia. No necesitamos leer el Nuevo Testamento muchas veces, para saber que hemos perdido algo de la revelación y poder de la Iglesia Primitiva. Nos paramos juntamente con los cristianos hebreos en su necesidad de ser establecidos y bien fundamentados en los rudimentos de la doctrina de Cristo (He.6:13); pero también, necesitamos tener un oído para las cosas particulares que Dios quiere
hacer, tocante a la Iglesia de los últimos días. Hay muchas verdades que nunca han sido manifestadas a través de la historia porque son reservadas para esta Iglesia de los últimos tiempos. Necesitamos oír lo que el Espíritu está diciendo en este día; 2 P:1:5 “Vosotros también, poniendo toda diligencia por esto mismo, añadid a vuestra fe virtud; a la virtud, conocimiento”. 2. Jesus va a ser revelado a través de un proceso de restauración Jn.14:6. a. Jesús Como EL CAMINO Jesús dijo en Jn.14:6 “Yo soy el camino, y la verdad, y la vida; nada: viene al Padre, sino por mí”. Jesús es el camino; el único camino hacia la salvación y vida eterna. En realidad Él es el camino a una salvación triple de espíritu, alma y cuerpo (1 Ts.5:23). Cuando aceptamos a Cristo como nuestro Salvador, nuestro espíritu nace de nuevo, conocemos a Jesús como EL CAMINO. Jesús es conocido como el cordero molido (camino establecido) desde la fundación del mundo (Ap.13:8). b. Jesús Como LA VERDAD. Él está renovando nuestras almas, diariamente conforme a la imagen del Creador (Col.3:10; Ro.12:2). Esta obra de redención tiene que ver con la mente, la voluntad y las emociones, o podríamos decir, el alma del hombre (Ef.4:23; 2 Co.4:16). Cuando nos sometemos a este proceso renovado experimentamos a Jesús como LA VERDAD, Jesús llega a ser para nosotros como el que bautiza con el Espíritu Santo y fuego (Mt.3:11-12). El Señor nos dijo en 3 Jn.4. “No tengo yo mayor gozo que este, el o que mis hijos andan en la verdad.” c. Jesús Como LA VIDA. Esto tiene que ver con el aspecto de salvación que se ha de revelar los últimos días (1 P.1:5). Es la consecuencia o fruto de una experiencia con Dios mismo (1 Co.15:51-58); significa que la revelación de vida de Cristo está en realidad fluyendo en la Iglesia, supliendo vida recta y poder trasformador al pueblo de Dios. Cuando esto se convierte en una parte de la experiencia cristiana vamos a considerar a Jesús con LA VIDA. Jesús cumplió esta fase de su ministerio como el gran Sumo-sacerdote (He.7:15-16). B. RESTAURACIÓN DE LOS MINISTERIOS Siempre que Dios restaure una verdad, tendrá ministerios maduros verdaderamente preparados para ministrar aquella verdad. Si una verdad no viene bajo la guianza propia de un ministerio, puede ser muy peligroso. Tenemos que ver como unos movimientos modernos han pervertido la verdad genuina de la Biblia, excluyendo el equilibrio natural que viene al considerar las escrituras, para ver la importancia de ministerios dirigidos por Dios. Es una gran necesidad de obreros instruidos, que usen bien la palabra verdad. Dios está
Habrá una restauración de los labradores (Jer.31:14,24-26), cuyas almas han sido saciadas por el Señor, y por esta razón pueden hacer descansar a sus rebaños (Jer.33:12-13). De este tipo de ministerios vendrá crecimiento, porque el rebaño será alimentado y saciado. Jesús es el gran pastor (Jn.10:11), que muestra el patrón para todos los verdaderos pastores del redil, la Iglesia. Dios, en este tiempo, está levantando a estos ministerios y se está cumpliendo Is.30:20-21, “Bien que os dará el Señor pan de congoja y agua de angustia, con todo, tus maestros nunca más te serán quitados, sino que tus ojos verán a tus maestros. Entonces tus oídos oirán a tus espaldas palabras que diga: Este es el camino, andad por el; y no echáis a la mano derecha, ni tampoco torzáis a la mano izquierda.” C. RESTAURACIÓN DEL PUEBLO El pueblo, durante la Edad Oscura, estaba en cautividad, natural o espiritual; y desde entonces ha estado en una condición triste, como si hubiera sido robado y despojado. Las aves de rapiña han limpiado sus huesos, y hay un olor de muerte y derrota. Pero Dios ha prometido que si un pueblo mira hacia Él, Él les va a edificar (Jer.31:4). A la Iglesia de la Edad Oscura vino un arrancar y destruir, pero Dios ha prometido que si la nación se arrepiente y se vuelve de su mal camino, Él otra vez les edificará y les plantará en lugares regados (Jer.31:5-14). La Iglesia era como los huesos secos (Ez.37:1) que habían sido limpiados por los buitres teológicos de su día. Tenían el esqueleto teológico, no había vida en los huesos. Cuando Dios visita a su pueblo, estos huesos tienen el potencial de convertirse en el cuerpo restaurado de Cristo. Dios ha prometido dar vigor, otra vez, a los huesos de su pueblo (Is.58:11). Serán como huerto de riego y “reverdecerán como la hierba” (Is.66:14). Ahora el pueblo de Dios está siendo restaurado. Dios está restaurando nuestra alma y guiándonos junto a aguas de reposo, el adereza una mesa delante de nosotros donde hay vida y salud, tanto en lo natural como en lo espiritual (Sal.23). D. LA RESTAURACIÓN DE ADORACIÓN La adoración verdadera en Espíritu y en verdad solamente puede venir de los labios de un pueblo, que ha tenido una experiencia con el Espíritu y que ha conocido la verdad (Jn.4:2324). Esta es la expresión natural de los labios de un pueblo que ha sido restaurado, y que está caminando en la luz de la presencia de Dios, donde hay plenitud de gozo (Jer.31:12; Sal.16:11). La voz de la Iglesia del último tiempo dirá, “Alabad a Jehová de los Ejércitos” (Jer.33:11), porque se compone de un pueblo que conoce la importancia de traer sacrificios espirituales de alabanza a la casa del Señor (He.13:15). La Iglesia de Dios debe ser una habitación del Espíritu (Ef.2:21-22), y sabemos que Dios mora en las alabanzas de su pueblo (Sal.22:3). Es claro que una restauración en la Iglesia, de verdadera adoración, implica una restauración de la presencia del Señor en su casa. Dios está edificando a Sion la congregación de los primogénitos (He.12:2223). El Tabernáculo de David fue establecido
en Sion y será un lugar de alabanza audible. Esta es una generación que alabará a Jehová; esta es la generación que romperá la cita con la muerte (Sal.102:16). (Vea también Jer.31:1213) E. RESTAURACIÓN DE CAMINOS EN QUE CAMINAR Dios ha prometido caminos en que caminar. El mensaje de restauración guía una vida más profunda en nuestra experiencia diaria. Dios está restaurando principios prácticos al individuo, a la familia y a la Iglesia; porque el llamamiento es, “¡Pongan en orden su casa!” Cuando comencemos a aplicar los principios de Dios a nuestra vida cotidiana, veremos una restauración de relaciones personales que nunca habíamos considerado posible (Is.58:12). La decadencia de la Iglesia comenzó cuando se formó una brecha entre la doctrina y la experiencia. Muchas de las doctrinas de la Escritura permanecían en la Iglesia; pero no había ninguna experiencia correspondiente en la vida del creyente ordinario. Fue como si estuvieran quemando incienso a vanidad (adorando a cosas inútiles), porque tropezaron en el camino de verdad (Jer. 18:15). Andando así, con el tiempo, aun traspasaron los grandes linderos de doctrina, para hacer a su conciencia concurrir con la experiencia de una persona ordinaria (Job.24:2-4). Al hacer esto se rebelaron contra la luz y salieron aún más fuera del camino (Job.24:13). Dios ha prometido restaurar estos caminos y restablecer las sendas (Jer.31:21). Él está haciendo esto en la Iglesia, el lugar de seguridad, el redil. La Iglesia debe ser el centro de toda actividad del rebaño, espiritual y naturalmente. Toda la recreación, juego o comunión para los jóvenes y los ancianos debe venir de la Iglesia, bajo la cubierta de la gloría de Dios, de la vara del Pastor. Dios está revelando esto como el camino, y Él está instruyéndonos para caminar en Él. (Is.30:21). F. RESTAURACIÓN DE LOS AÑOS Al ver la Iglesia en decadencia, encontramos que muchos años de la historia han sido comidos por la apostasía y falta de progreso. Hay muchos cristianos individuales que han tenido una experiencia similar, en un nivel personal. Hay también ministros del evangelio que saben, que por años estaban funcionando en una luz parcial; pero Dios ha prometido restaurar los años que fueron perdidos (Jl.2:25). Él promete que la gloria de la postrera casa será mayor que la gloria de la primera (Hag.2:9). Él promete que el fin de una cosa es mejor que el principio. (Ec.7:8). Él nos da un cuadro de Sansón que hizo más en su última hazaña, que en todas las anteriores (Jue.16:30). G. RESTAURACIÓN DEL REINO Podemos esperar que estos días de restauración prepararán el camino para la venida del reino (Mt.6:10). El tiempo vendrá cuando las leyes del reino sean puestas en operación por el pueblo de Dios. Jesús enseñó a sus discípulos los principios para vivir en su Reino (Mt.5:7). Cuando la Iglesia aprenda a vivir conforme a las cosas que están involucradas en la restauración de verdades, ministerios, pueblos, caminos, adoración y años, veremos un pleno establecimiento del Reino de Dios en la tierra. La plenitud de todas estas cosas está todavía en el futuro, pero podemos ser usados para traer el Reino, al orar por su venida; reconociendo, “Porque el reino de Dios no es comida ni bebida sino justicia, paz y gozo en el Espíritu Santo”. (Ro.14:17). Este Reino será victorioso sobre todos los demás Reinos espirituales o terrenales; y al fin, todos estos serán entregados al Padre (1 Co.15:24). El Reino que Dios está restaurando es eterno.
“...y por sus manos la obra fue restaurada, y restituyeron la casa de Dios a su antigua condición...” 2 Crónicas 24:13
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Edición 89 | Restauración y Reforma
Agenda de ORACIÓN Las autoridades gubernamentales de la nación: Por temor de Dios y sabiduría en toma de decisiones. Poder Ejecutivo (Presidente y Ministros), Poder Legislativo (Diputados) y Poder Judicial. Por asesores y consejeros. I Timoteo 2:2. Derribar todo argumento y altivez de espíritu manifiesta en gobernantes y autoridades superiores. Llevar cautivo todo pensamiento a la obediencia de Jesús. 2 Corintios 10: 5. - Para que todo tipo de corrupción en los jerarcas del Ministerio de Seguridad Pública y otros Ministerios sea descubierto y corregido. - Por el desempeño que ejecutan policías, policía de control de drogas por tierra, aire y mar, policía antimotines, policía auxiliar del Ministerio de Seguridad Pública, jueces y fiscales, investigadores de la OIJ, que enfrentan temas de narcotráfico, guarda parques. Por protección de Dios. Por Proyectos de Ley en la Asamblea Legislativa: - Contra el Proyecto de Ley N. 19.841 Ley de reconocimiento de la identidad de género, propone el cambio de sexo ante el Registro Civil. Decretar que esta iniciativa se seca y no prospera. - Contra el Proyecto de unión de personas del mismo sexo. - Contra el Estado Laico ( Libertad de Culto) - Por el Proyecto del Plan Fiscal (aprobación de más impuestos) promovido por el Presidente de la República. - Orar por la Corte Interamericana de Derechos Humanos, sean cerradas las puertas para obligar a la nación al reconocimiento de los matrimonios entre personas de un mismo sexo. Por la niñez costarricense: - Por cobertura y protección. Pedir activación de ángeles que resguarden la entrada y salida. - Desatar un manto de salud divina. Atar espíritus de muerte y destrucción que operan a través de la enfermedad. - Atar espíritus de incesto, de abuso, de agresión, Para que sea sacado a la luz abusos, maltratos, agresiones en contra de niños. Por sanidad de las heridas emocionales y físicas, que el amor del Padre les arrope y restaure. Isaías 45:8 - Por los Directores y Maestros por temor de Dios y sabiduría en la implementación de Proyectos de avanzada. Por la Convocatoria Juvenil del 21 de Mayo en el Gimnasio Nacional, por un impacto poderoso del Espíritu en la generación presente. Desatar la gloria de Dios sobre sus vidas. Por la salvación, liberación y sanidad de la nación: - Pedir perdón por los pecados nacionales: idolatría, libertinaje, fornicación, adulterio, violencia, homicidios, suicidios, narcotráfico, corrupción, hechicería, ocultismo, etc). “ … y será sanada nuestra tierra” según 2 Crónicas 7.14. - Proclamar sobre la nación Año de Jubileo, decretar que se abren las cárceles y son sanados y liberados los cautivos. Proclamar lo establecido en Isaías 61:1-4. Decretar Isaías 60:18 “Nunca más se oirá en tu tierra violencia, destrucción…, sino que a tus muros llamarás Salvación, y a tus puertas Alabanza”. - Por el crimen organizado, narcotráfico, y la violencia en Limón (Talamanca). Atar espíritus de muerte y destrucción. Anular pactos por derramamiento de sangre. Decretar que la sangre de Jesús rompe con esos pactos. - Decretar la caída y ruina del narcotráfico (por aire, por tierra y por mar). Que sus bases de operaciones sean descubiertas y sean sacadas a la luz. Decretar Lucas 12:2. - Por la situación actual en Paso Canoas en la Frontera con Panamá con la presencia de migrantes en su mayoría africanos. Por sabiduría de Dios para el Presidente, La Dirección de Migración y Extranjería y Ministerio de Salud. “…. Fuerte ciudad tenemos; salvación puso Dios por muros y antemuro” Isaías 26:1.
Profeta Dania Navarro
“ Por tanto, así dijo Jehová: Si te convirtieres, yo te restauraré, y delante de mí estarás...” Jeremías 15:19
Gran apertura
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CONFERENCIA
I N T E R N A C I O N A L
D E
"Dirigida para jovenes menores de 35 años" L A
Del 12 al 16 de julio 2016
Palabra de Dios Gran Culto Profético de Apertura Martes 12 de julio | 6:30 pm En el Centro Mundial de Adoración De Correos de Tibás 35 mts sur, Costa Rica
Ministrará como Invitada especial
reconocida internacionalmente
Profeta Cindy Jabobs
Con el Apóstol Rony Chaves
organiza
Profeta Pavlo Chaves
Entregando la conferencia como su legado a la juventud Más info: h avance@ronychaves.org / 1 2236-9118