ÍNDICE - “Libros objeto” EL LIBROOBJETO COMA ARTE! EL ARTE HA MUERTO
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__________________________ CopyRight --> EDITORIAL KRAUSSE, Valencia 2009. // De las fotografías: Gabriel Spenser, Enrique Rodrigo Mancho. // Todos los libro objeto representados en esta edición, son creación y propiedad, de Enrique Rodrigo Mancho y la Editorial Krausse. Oficina -->
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LIBROS OBJETO Enrique Rodrigo Mancho En los últimos años, el libro objeto ha adquirido un interés social y artístico digno de estudio. El artista plástico ha encontrado en este medio, una forma de comunicación realmente sorprendente, ágil y poética. El arte del libro objeto es la antítesis, el libro-no-libro, la nada y el todo del arte de vanguardia. Ignorar esta forma de comunicación artística es ignorar lo evidente e ignorar lo evidente, es ignorar la metáfora e ignorar la metáfora, es una forma como otra cualquiera de vivir sumergido en la ignorancia. Entonces…¿Qué es un libro objeto? Piensa lo contrario, por lo que entiendes por libro y encontrarás lo que es. El soporte que utiliza el pintor para plasmar sus ideas, es el lienzo, el soporte del escritor el papel, el soporte del escultor es la piedra, el papel o la madera; el soporte del artista de libros objeto, es todo y nada. Cualquier cosa es buena para su creación: una botella, una caja de cartón, una jaula de pájaros vacía o un sombrero viejo, es la disculpa que el artista utiliza para contar y crear un mundo maravilloso y sutil. ¿Y para que sirve el libro objeto? Uno podría quedar muy bien, diciendo que el libro objeto sirve para intelectualizar nuestras conciencias, para agudizar nuestro ingenio, para conquistar una pequeña parcela del arte…, pero, la verdad sea dicha, el libro objeto, no sirve para nada…. Bueno, sirve para disfrutar mientras los hacemos, para divertirnos y para que se diviertan y gocen los espectadores mientras los contemplan. ¿Es importante intelectualizar la existencia de los artistas que elaboran libros objetos? No. El artista del libro objeto los crea porque quiere. Hacer literatura o filosofía de este tipo de arte, es rizar el rizo de la cabeza de un cadáver en una sala de autopsias y lo digo yo, que soy un creador de estos libros. ¿Intento con esto, matar el arte? Si. ¿Intento con esto creerme lo que no soy? También. Entonces… ¿que pretendo al crear libros objetos? Nada. Si el lector espera que le explique que es un libro objeto y para que sirve, le diré que la respuesta está en lo mirado, en lo que es. El libro es lo que él quiera que sea. No hace falta hacer preguntas. Solo es necesario saber mirar.
Era un libro. Es un libro objeto. Será su universo. Preguntas -¡Pero si es ya no es un libro! Es que no lo ves! -¿Y el libro qué? - ¿Quizás una escultura? Si, ¡una escultura! Es manifiesto. -¡Pero si esto ni se puede leer!
¿Qué tienen en común un libro objeto y la gota fría? Pasan de repente y no se quedan. El libro objeto es una verdad: *es un chiste, para reírte debes captarlo; *es un cuento, para leerlo debes verlo; *es una lema, para la vida *es un dicho, para la muerte; -es su mundo.
El libro ha encontrado su antónimo. El libro objeto se ha comido el libro, se ha bebido la poesía. Hace falta masticar y tragar para sobrevivir.
ยกCOMA ARTE! La vang uardia si empre g ana, cag a DADA Neoclas icismo y y arte co rococรณ ntempo rรกnea Romant icismo y nismo renacim iento Tiene di arrea: im Tenemo presios una cit a con las vanguar dias: se c omerรก d e todo,
Vivimos en una sociedad moralmente precaria. Esta frase ha sido repetida por demasiadas bocas y en demasiadas épocas. El arte no es diferente, y como no pretende ser diferente basta con ser igual a los demás, no hay que pretender ser diferente al igual que los demás quieren ser diferentes, siendo o pretendiendo ser normal acaba uno siendo diferente. Por ello, debemos seguir diciendo que morimos en una sociedad moralmente precaria, esa precariedad hace precario al arte, lo remata. Un comprador con mal gusto compra arte de malgusto. Una sociedad con una obligada libertad moral acaba por no re-estructurando sus valores, sino directamente acabando con ellos. El arte al igual que la sociedad no necesita más libertad, las raices libre-conservatidas de los abuelos del arte y su séquito de críticos, no necesitan ser re-interpretadas. El arte no necesita críticos. Necesita nuevos valores, nuevas raíces, nuevos abuelos del arte, para que dentro de 50 años otra persona pueda volver a decir algo estúpido. Y ustedes diran «LA LIBERTAD». El pensamiento es libre, pero se sabe que el pensamiento es condicionado. Por lo cual, y según esta contradicción, el pensamiento como algo “básico” no es libre. Lo único que puede ser libre es la cadena de pensamientos. Diran. Pero si pudiésemos separar cada uno de esos eslabones de la cadena de pensamiento, seguramente nos daríamos cuenta, de que cada una de esas partes es un pensamiento “básico”, generado por el bagage de nuestra memoria, es decir, condicionado. La cadena de pensamientos, a la que atribuímos la libertad de pensamiento del ser humano, tampoco es libre. Por lo tanto el pensamiento no es libre. La búsqueda de la libertad es un pensamiento, y dicha búsqueda se genera en él, por lo que la búsqueda de la libertad no tiene sentido, ya que ella misma es un pensamiento, no existe. No existe la búsqueda, la libertad ni el pensamiento libre. El ser humano no es libre porque cuelga de su propio egoísmo. La libertad es una utopía, ya que un pensamiento siempre viene sujeto a otro pensamiento. No puede ser libre. No hay un pensamiento suelto, uno puro, limpio, no condicionado. EL ARTE NO ES LIBRE. EL ARTE HA MUERTO.
proximas publicaciones “De un espectador cansado” Alberto Adsuara Prologo por Felix de Azúa **** “La Muerte” Enrique Bader, Susana Benet Vicent Berenguer José Luis Parra, Pedro A. Parra **** “El solitario en invierno” Manuel Galindo Widenmann www.editorialkrausse.com