La Processó dels Xiulitets

La “processó dels Xiulitets” es la última de las procesiones que se encadenan en Semana Santa, pero no es una procesión de silencio, de recogimiento, de reflexión. No, esta procesión es un estallido de alegría, de júbilo, de fiesta, pues se está celebrando la Resurrección de Jesucristo y el encuentro con su Madre, en el día de Pascua de Resurrección, en el día de la Gloria. En realidad, la procesión se llama “del Encuentro”, pero es popularmente conocida como “dels Xiulitets”. El nombre le viene dado por el uso que se hace “dels rossinyols”, que son pequeños botijos, que al llenarlos con algo de agua y soplar por el agujero pequeño, producen un sonido parecido al trinar de los pájaros, de ahí el nombre de “rossinyols”, es decir, ruiseñores. A estos “xiulitets dels rossinyols” hay que añadir cualquier tipo de silbato, cuanto más estridente mejor, que de buena mañana hacer sonar los jóvenes y no tan jóvenes con acompañamiento de petardos.

Esta procesión está organizada desde finales del siglo XIX por el Círculo Católico de Obreros de Alcoy en el día de la Pascua Florida. A las siete de la mañana se realiza un pasacalle o “despertà” a los sones del pasodoble “Els Xiulitets. Desperta’t Alcoy” composición de Gregori Casasempere. Se empieza desde la sede del Círculo Católico en la plaza de España, y después de recorrer las calles pintor Casanova, S. Blas, S. Agustín, Embajador Irles, Mossén Torregrossa y S. Francisco, desemboca en la plaza de Ramón y Cajal, en la entrada principal de la Parroquia de S. Mauro y S. Francisco. Desde esta parroquia, a las siete y media, se organiza la procesión, sacando primero la imagen de Cristo Resucitado, conocida comúnmente como El Salvador, a los acordes del himno nacional para situarse en espera en la calle S. Nicolás. Mientras, casi de tapadillo, la imagen de la Virgen ha ido por la calle S. Francisco, doblando por la calle S. Mauro, hasta desembocar en la parte baja de la calle S. Nicolas, cerca de la plaza de España. En el momento en que la Virgen ve a su hijo resucitado, emprende una frenética carrera, llevada por cuatro porteadores, por norma general jóvenes y en buen estado físico, remontando la calle S. Nicolás, mientras el sonido “dels xiulitets” se vuelve atronador. Cuando la Virgen llega a presencia de Cristo resucitado hace tres genuflexiones y seguidamente, desde el balcón de una casa, el párroco de S. Mauro pronuncia una breve homilía, destacando la resurrección del Señor como fundamento de la fe cristiana y que “els Xiulitets” son el pórtico de nuestra Fiesta de Moros y Cristianos, ya que apenas dos horas y media después se celebra la Gloria, acto primero y pregón de la Fiesta.

Una vez terminada la homilía se realiza la procesión que llevará por las calles S. Nicolás, S. Mauro y S. Francisco las dos imágenes de vuelta a la Parroquia de S. Mauro y S. Francisco, donde se celebra una misa solemne poniendo fin a los actos de la “processó dels Xiulitets”.