Diario de a bordo – 2000 Statsraad Lehmkuhl

2000 – Staatsraad-Lehmkuhl (Diario de a bordo)

19 junio – 18 octubre 2019

Voy a escribir este diario, al que me he atrevido a llamar “Diario de a bordo” aprovechando que la imagen del puzzle es la de un barco, contando cómo voy haciendo el puzzle, un puzzle de una de las temáticas que más me gustan; espero que no deje de escribir y que si algún día alguien lo lee se divierta y entretenga, que es de lo que se trata. Empecemos…

19 de junio de 2019

Empiezo el puzzle. Clasifico las piezas en cinco grupos: bordes, blancas, mar, cuerdas y barco. Los dos grupos que más piezas se han llevado son las cuerdas y el barco. Creo que las cuerdas van a ser un quebradero de cabeza. Voy a empezar con el borde y en seguida con el mar. Calculo que serán entre ambos unas 500-600 piezas.

21-23 de junio de 2019

Clasifico las piezas de mar por forma. Empiezo a colocarlas, primero las olas color blanco y luego las más verdosas. Ahora empieza lo duro, son todas más oscuras y no se diferencian unas de otras.

25 de junio de 2019

Finalizo la parte del mar, creo que la más fácil. Clasifico las piezas blancas y pongo alguna. Empieza lo difícil...

26 de junio de 2019.

He puesto 16 piezas blancas… y ahí me he quedado. Qué desastre. No tengo referencias y me faltan muchas que tienen cuerdas, ya clasificadas aparte, así que de momento opto por dejar las piezas blancas.

Me pongo a clasificar por formas todas las piezas que tengo del barco, incluidas velas, y consigo acabar la clasificación, sin poner ninguna pieza. Llevo unos días pensando si utilizar el rollo de puzzle o hacerlo - como lo tengo ahora - por tablas. Lo bueno del rollo es que tengo extendido todo el puzzle y eso me ayuda bastante; lo malo, que para extenderlo en su totalidad tengo que despejar la mesa del salón y cubrirla con el rollo. Ello quiere decir problemas con Sara (se ríe), qué cruz. Lo bueno de las tablas es la comodidad. Ocupan poco espacio (4 tablas de 60 x 42 cm); lo malo es que solo veo una pequeña parte del puzzle y me retarda y dificulta mucho el montaje. Y quizá lo más importante, que no lo disfruto igual. Ahí estoy dándole a la cabeza, aunque casi seguro que lo siga haciendo por tablas con tal de no molestar en demasía.

8 de julio de 2019.

Llevo unos días que no he puesto ni una pieza. El finde han estado aquí Pili, José y David y no he podido hacer nada. De todas formas, me encuentro en una etapa complicada. Me pongo a montar las velas, un montón de piezas que me tiene embarrancado, nunca mejor dicho. A ver si antes de irnos a la playa le puedo dar un empujoncito. De momento sigo con las tablas. 11 de julio de 2019 Voy avanzando —lentamente— con las velas. De momento están hechas casi en su totalidad el primer gran grupo de cuatro (empezando por la izquierda) y bastante avanzadas el segundo grupo: Me queda el mástil con la vela enrollada de la izquierda y el

grupo de tres sueltas de la derecha, de todas ellas no he hecho nada todavía. Por el número de piezas de velas que tengo en tablas —tres tableros llenos—, calculo que habré puesto aproximadamente la mitad de ellas. A este ritmo, y si en agosto se me da bien, creo que podré acabar el puzzle para finales de ese mes. Pero

si no puedo dedicarle mucho, al ritmo que voy ahora no lo acabaré antes de mitad de septiembre.

Me da mucha rabia tener que hacerlo por tablas, me ralentiza mucho y se disfruta menos. Cuando veo que la gente lo extiende en una mesa enorme y va poniendo fichas por todo el puzzle extendido, ahhhhhhhhhhhhhhhh… qué envidia sana. Pero mejor es hacerlo por tablas que no hacerlo.

12 de agosto de 2019

Tras el parón veraniego de julio, ya veo que en agosto será imposible acabarlo y al paso que voy, ya veremos si en septiembre… no digo más. Desde la vuelta de la playa he avanzado bastante en el tercer grupo de velas, el problema es el de siempre, como no tengo el puzzle desplegado en su totalidad no soy capaz de ver muchas veces dónde van colocadas las piezas, lo que me ralentiza bastante; no obstante, y como siempre digo, pieza que colocas es una menos a buscar. Aunque sea “piano a piano”, voy avanzando. Lentamente, eso sí.

11 de septiembre de 2019

Después de casi un mes, vuelvo a escribir… y no, no está terminado (ríe) ¡falta más o menos la mitad! Ayer por la noche — Sara salió a cenar con las amigas— lo puse por fin en el tapete y pude colocar todo lo que llevaba hecho en las tablas. Creo que voy a ir mucho más deprisa, aunque lo malo (siempre hay una parte negativa) es que me costará más ponerme con él, ya que cuando lo haga tengo que despejar la mesa entera del salón y como que a Sara no le gusta mucho. El grueso de las velas más grandes ya está hecho. El objetivo ahora es rellenar los huecos blancos. Tengo una tabla y dos filas de otra de fichas sólo blancas, con lo que espero no sea demasiado difícil.

24 de septiembre de 2019

Quedan muy poquitas piezas blancas por colocar, calculo que unas 20, y otras tantas de velamen y partes del barco que no he logrado situar. Me faltarán unas setecientas piezas por colocar, complicadillo, pero ya sabemos: pieza a pieza.

25 de septiembre de 2019

Pongo todas las piezas que me faltan en 5 tablas. Son 607, o dicho de otra forma, he puesto hasta la fecha 1.393 piezas. ¡Ya queda menos!

8 de octubre de 2019

Como es bastante complicado estar todos los días enrollando y desenrollando el puzzle, voy cogiéndolo por partes y rellenando huecos. Estoy con el segundo hueco, que me parece el más complicado. Luego montaré el primero, y ya me quedará sólo la parte central. Mi objetivo es acabar antes del lunes 21 de octubre, ya que me voy a La Coruña hasta el jueves y en esos días no podré hacer nada. ¡A ver si cumplo!

14 de octubre de 2019

Ahora sí que puedo decir que esta semana finiquito el puzzle (espero que así sea, que si no, ¡vaya ridículo!) El viernes Sara salió de cena, puse el tapete con el puzzle y le di un buen empujón: añadí lo que había hecho durante la semana y me quité la parte de la izquierda que me faltaba

Anoche cuando Sara se acostó lo desplegué y puse unas seis

o siete piezas. Era muy tarde y estaba muy cansado, pero me aparté parte del cuadro central para hacerlo en una tabla aparte entre hoy y mañana. Calculo que me quedarán unas trescientas piezas. Si todo va bien y me pongo tres o cuatro días esta semana lo termino. ¡Qué ganas! Esto fue lo que puse en una tabla:

15 de octubre de 2019

Ayer puse… 4 piezas. A este paso… No me pongo nervioso porque se trata de disfrutar. También me puse anoche con el puzzle de SPuzzles “Fractal 3”, que me quedaban unas 30 piezas, y cuando lo acabé estaba tan cansado que solo rellené el hueco al que le faltaban esas cuatro piezas. Espero esta noche darle un buen empujón.

16 de octubre de 2019

Bueeeenoooooo. Casi lo acabé anoche y si no lo logré fue porque era tarde y lo quiero disfrutar a tope. ¡¡Me quedan 44 piezas!! La verdad es que anoche se ponían solas, da gusto cuando quedan tan pocas. No lo acabé porque eran las doce y cuarto de la noche y aunque podía acabarlo con un cuarto de hora más, lo quería disfrutar. La sensación de que un puzzle se acaba cuando llevas tanto tiempo con él es tan especial que se debe disfrutar como se merece.

21 de octubre de 2019

¡Fin, fin, fin! El viernes lo acabé cuando llegué por la tarde. Sentía una sensación de ‘deja vu’, como si te faltara algo y no quieres que finalice. Le saqué un montón de fotos, aunque hice una muy especial, la de la última pieza puesta: