Caminito del Rey

Caminito del Rey / Málaga LA BELLEZA ESTÁ EN EL INTERIOR

Buscar tierra adentro, a veces nos permite desenterrar viejos tesoros que pasaron inadvertidos a nuestros ojos o que nos parecieron que no valía la pena destapar. El turismo de interior se ha convertido en la revelación de los últimos años en la provincia de Málaga.

> ALGO MÁS QUE UN CAMINO

El Caminito del Rey es más que un vertiginoso camino es un testigo mudo de la historia de la industrialización de Málaga y un viaje por la naturaleza que envuelve a esta seña de identidad del interior de la provincia.

Alrededor de 80 kilómetros separan las aguas malagueñas de una de las joyas del interior de la provincia y que se ha convertido en una parada obligada para cualquier turista. Se trata del Caminito del Rey, un sinuoso itinerario que atraviesa el Desfiladero de los Gaitanes a través de pasarelas ancladas a la roca a cien metros de altura.

Un recorrido de casi ocho kilómetros a través de pasarelas de apenas un metro de ancho y que se encuentran sujetas a las paredes verticales de los Desfiladeros Gaitanejo y Gaitanes. pero también de senderos de tierra para descubrir la fauna y flora pobladora. Con suerte se podrán avistar buitres leonados y águilas reales en el trayecto. Los pinos piñoneros, los eucaliptos, las retamas y los enebros o las adelfas o carrizos en la ribera del río son parte de la vegetación que componen el espacio. Un recorrido de casi ocho kilómetros a través de pasarelas de apenas un metro de ancho y que se encuentran sujetas a las paredes verticales de los Desfiladeros Gaitanejo y Gaitanes.

Para conocer los orígenes de este camino hay que remontarse a 1901 cuando se iniciaron las obras de un trazado de servicio para los trabajadores de la central hidroeléctrica del Chorro ubicada en este enclave. La visita del rey Alfonso XIII en 1921 para inaugurar la gran obra fue lo que propició que a partir de ese momento este itinerario fuera conocido como Caminito del Rey. •