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Gastronomía y fiestas ancestrales, protagonistas del invierno

El invierno en Navarra es sinónimo de gastronomía y tradición. La época invernal invita a descubrir las materias primas “estrella” de la Comunidad foral y que se convierten en protagonistas de las mesas: las verduras y hortalizas. La huerta navarra es una de las despensas más amplias del país y en esta época del año destacan verduras únicas y singulares que no se pueden encontrar en otros lugares: el cardo, la borraja, el puerro, la coliflor o el brócoli son algunas de ellas.

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La calidad en la materia prima no es fruto de la casualidad. El Ebro genera en toda la senda del río una tierra fértil, “La Mejana”, que junto a la climatología y la cultura creada por la convivencia pasada de las tradiciones judía, árabe y cristiana conforman estos manjares autóctonos. De norte a sur, podrás degustar platos típicos como la tradicional menestra, el cardo con almendras y jamón, alcachofas con almejas, la borraja con patatas o la ardanzopa o zurrukutun, sopa elaborada con los caldos sobrantes de las verduras, que caracterizan la salubridad y riqueza culinaria de Navarra.

Esta riqueza y variedad gastronómica se refleja en numerosas

Fotografías cedidas por el Archivo de Turismo “Reyno de Navarra”

citas cuyos protagonistas son los productos navarros. Citas como las Jornadas de las Verduras de Invierno (InVerduras), del 16 de noviembre al 9 de diciembre, las Jornadas de las Verduras del Hielo, del 9 de diciembre al 28 de febrero, ambas en Tudela o la Semana del Pincho (15-24 de marzo), una delicia en miniatura que mezcla tradición y calidad con sabores, texturas, colores y temperaturas de vanguardia, todo ello maridado con los mejores vinos de la DO Navarra. La mejor excusa para pasear, charlar y reunirse con los amigos y la familia en alguno de los más de 70 establecimientos de Navarra que participan.

El invierno también es menos duro gracias a la algarabía y el colorido de sus Carnavales rurales. Hablar de Carnavales en Navarra es hablar de danzas y de rituales mágicos, de espectáculos que recuperan las costumbres más arraigadas de los pueblos rurales. Carboneros, brujas aulladoras,

Lantz. Carnaval. E. Buxens

fantasmas de tela de saco rellenos de hierba seca, bandidos con varas, el oso o hartza, mayordomos… son algunos de los personajes que todos los años toman las calles de los pueblos de la mitad norte de Navarra para anunciar la llegada de la Cuaresma.

Mézclate con la muchedumbre y disfruta de una fiesta auténtica poblada de personajes inolvidables. Destacan los carnavales de Ituren y Zubieta, donde los Zanpantzar o ioaldunak (cencerros) desfilan por las calles ataviados con pellizas de oveja y gorros cónicos con cintas de colores, agitando sus grandes cencerros a un compás estrepitoso y sobrecogedor, con el fin de ahuyentar a los malos espíritus; o de Lantz, presidido por el bandido Miel Otxin; ambos declarados como Bien de Interés Cultural. En Altsasu/Alsasua, cuyo carnaval está declarado Fiesta de Interés Turístico, los protagonistas son los momotxorros, figuras ataviadas con trajes ensangrentados y grandes cornamentas, con las caras cubiertas de crines de caballo y cencerros a sus espaldas.

Y en Lesaka, los zaku zaharrak, embutidos en sacos de tela rellenos de hierba seca y con la cara tapada por un pañuelo, “golpean” al público con la pizontzia (vejiga). Estos personajes desfilan siguiendo la música y acompañados de las mairus (mujeres con sombreros de abundantes tiras multicolores) y los goitarrak (habitantes de los caseríos de las montañas). Son numerosos los pueblos navarros que celebran estas tradiciones. Aoiz, Arizkun, Goizueta, Bera, Unanu… elige tu destino y vive una experiencia única.

Fotografías cedidas por el Archivo de Turismo “Reyno de Navarra”

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