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OPINIÓ de la FAVLL
Frenem els “botellons”
Aprofitant que s’acosta l’estiu, quan les festes i la disbauxa abunden, m’agradaria reflexionar sobre un tema preocupant i que va en augment: els “botellons” entre els joves i en molts casos amb menors d’edat.
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Malauradament, es reprodueixen els “botellons” amb massa freqüència i és habitual passejar per determinades zones de Lleida i trobar-ne. Cal dir que no és un problema només de Lleida, ni de bon tros, sinó que de fet afecta la majoria de ciutats i pobles del país.
Un greu problema dels “botellons”, a més de perjudicar la salut i encara més si afecten menors d’edat, és l’incivisme que generen. Per què els veïns hem de pagar els desperfectes que es puguin ocasionar derivats de “botellons”? I no només són els veïns qui en paguen les conseqüències sinó que molts negocis que estan situats a prop d’aquestes zones crítiques es troben amb desperfectes en els seus establiments.
Com es podrien frenar?
• Pedagogia familiar i en les escoles. • Augment del control als bars i botigues que subministren alcohol. • Activitats i programació alternativa per a aquesta franja d’edat que ajudin a frenar el consum d’alcohol. Per tant, i sabent que no és fàcil controlar-ho, animo els familiars de joves adolescents perquè estiguin més a sobre dels seus fills durant els caps de setmana i durant les festes d’estiu.
Els veïns i veïnes que veuen que al voltant d’on viuen hi ha adolescents que fan “botellón”, els animo a trucar a la Guàrdia Urbana les vegades que facin falta, ja que una forma de suprimir-ho és amb la presència dels cossos policials. Ells estan al servei de la ciutadania, i no tenen cap problema en anar a les places on es fa “botellón” a requisar les begudes i sancionar la gent.
És clar que s’ha de deixar una certa llibertat als adolescents, però tal com diuen, la llibertat de l’un acaba on comença la de l’altre. •••
Marta Salla
Pacte Social per a la Ciutadania Inicio de la campaña de la fruta 2017
Para este año 2017 las perspectivas para esta campaña que se está iniciando son inmejorables a efectos de producción, con unas previsiones de un incremento aproximado del 20%. Esto llevará consigo también un aumento de las contrataciones en el mismo porcentaje, por lo que esperamos que se sobrepasen las 300.000 jornadas realizadas en cada uno de los meses de julio y agosto. Ante la posibilidad de que falte mano de obra debemos trabajar en dos direcciones: una es la posibilidad de encadenar campañas desde otras comunidades autónomas donde los sindicatos podemos colaborar y la otra es un incremento de salarios que haga más atractivo el trabajar en el campo y en los almacenes de fruta.
A diferencia de la campaña anterior, con las buenas temperaturas la fruta del sur, de Almería, de Murcia, etc. (albaricoques y melocotones principalmente) ya está en el mercado y se espera que no se produzca solapamiento de campañas y que por lo tanto la fruta de Lleida, de mayor tamaño y mejor calidad, se pueda comercializar a unos precios por encima de los de producción.
Cabe decir que la producción de Cataluña ya sobrepasa a la de toda Francia y que a nivel nacional está a punto de superar al líder en producción mundial hasta ahora, que era Italia. Se está trabajando bien en el cambio de plantaciones viejas y de variedades menos productivas por otras mucho más productivas y, con una comercialización mejor, variedades como el paraguayo y la nectarina están copando las nuevas plantaciones. Si esto va acompañado con ayudas tanto internas dentro de Afrucat como externas, será posible una conversión rápida y con menor coste para los agricultores que apuesten por mejoras en el campo. Las últimas campañas de manzanas, sobre todo las de menor calibre, están dando unos dividendos con muy malos resultados y parece ser que es por aquí donde se debe empezar a trabajar y debemos obtener unos estándares de calibre buenos, a la vez que trabajar en mejorar las cantidades de azúcares en producto para que tengan un mayor sabor. La exportación es el pilar que debe dar seguridad y garantías para mantener unos precios que aseguren la supervivencia del sector y su futuro. El otro pilar, por supuesto, es el mercado interno, que debemos cuidar e invertir para que aumente; de hecho ya se están haciendo campañas en colegios, hospitales, etc.
La fruta debe ser el primer producto de la dieta mediterránea. Estamos en el inicio de la campaña y se están dando protestas de trabajadores porque no se les está pagando según marca el convenio agropecuario de Cataluña, donde la hora de trabajo en el campo es de 6,18 € brutos, protestas que se han producido en Zaidín y la última en Seròs. Estas protestas se pueden extender a otros municipios, por lo que desde UGT estaremos pendientes para defender a aquellos trabajadores que nos lo pidan. •••