En honor a Pepe Rayas Salas ANTONIO PÉREZ GUERRERO

EN HONOR A PEPE RAYAS SALAS

Pepe Rayas Salas, nació en Olvera, un lunes día 22 de diciembre de 1947 en la calle General Franco nº 11 y falleció el domingo 25 de marzo de 2012 a los 64 años de edad. Era hijo de José Rayas y Antonia Salas, siendo el segundo de tres hermanos: Juan, Pepe y Jesús. Pepe estudió en la escuela del convento y lo finalizó en el instituto Zaframagón, llegando hasta finalizar bachiller, alternando sus estudios con su trabajo de camarero, ayudando a sus padres en cuanto podía, en el bar que sus padres tenían, en la antigua Plaza de Abastos, hoy “Bar La Plaza” en la Plaza del Ayuntamiento. Su gran pasión era el fútbol, aunque también practicaba otros deportes como el tenis o arbitraje. Fue muy activo en el mundo del deporte. Él se movió en distintas facetas, pero donde mas disfrutaba era en el fútbol. Estoy muy seguro que Pepe disfrutó muchísimo jugando como guardameta junto a su mejor amigo y a la misma vez cuñado y capitán del Club Deportivo Olvera (Cádiz), unos colores que cientos de jugadores han tenido el honor de defender. Los primeros jugadores que se conocen datan del 1923, por aquel entonces el campo era cercado con madera y estaba situado aproximadamente a la altura de la antigua terraza de Olid y la carpintería de ‘Los Corrales’.

Volviendo a la biografía de Pepe, como bien hemos dicho antes estuvo estudiando hasta los 16 años y empezó trabajando junto a sus padres y hermanos en el bar que su padre regentaba, un poco más tarde se incorporó al servicio militar, una vez licenciado.

José Rayas Salas y María Ramírez Toledo, hija de Rafael Ramírez y de Sacramento, un buen día deciden casarse haciéndolo público el sábado día 7 de septiembre de 1975, teniendo lugar la ceremonia a las nueve de la mañana en el Santuario de Ntra. Señora de los Remedios y fue oficiada y bendecida por el sacerdote Don Juan Caballero de las Olivas y Buzón y el banquete se celebró en la terraza de Olid. Un poco más tarde Pepe emigra a Francia, junto a su amigo Paco Menacho, trabajando conjuntamente en una fábrica de embotellado de agua por espacio de dos años, una vez finalizado el contrato regresaron junto a sus familias que aguardaban en Olvera. Al poco tiempo Pepe emigró en solitario a la población de Alkmaar (Holanda) en una fábrica de fundición donde trabajo por espacio de siete años aproximadamente, una vez finalizado regresa a Olvera, dando por finalizado sus años como emigrante. Un día un grupo le da la idea de fomentar un criadero de pollos y aquella idea se fue madurando, aquellos siete amigos se embarcaron a terminar la fabrica dándole nombre a la cooperativa

“INAVICO” que tanta vida le ha dado al pueblo de Olvera, Cádiz. Pepe, cuando estaba trabajando ya en su pueblo, se le empezó a despertar su pasión por el fútbol, él la hereda de su abuelo Joseito Salas que fue presidente del C.D. Olvera siendo su entrenador y José de la Rosa lo hicieron en primera categoría regional, donde la mayoría de los jugadores procedían de Sevilla: Álvarez, Carmona, Pineda, Godoy y por Olvera: Enrique Sánchez, Manolo Palma, Pepillo Villalba, Paco Rocha, Pepe Cazalla, Antonio Sánchez, “El campanero”, Enrique Pastor, Alcalaita. También fueron convocados con aquel equipo Paquín Sánchez, ellos sí que nos dejaron para todos los buenos aficionados una herencia y un legado para toda nuestra vida.

Pepe Rayas Salas conocido cariñosamente como “el chato” se llevó la gloria en primer lugar por tener una buena y guapa familia: señora, hijas, nietos, hermanos y muchos amigos, que tanto lo querían y segundo haber sido presidente del club de sus amores el C.D Olvera, y haber traído a nuestro pueblo a uno de los más grandes que ha dado la historia del fútbol mundial: Don Alfredo Di Stefano, Gento, Amancio, Santa María, Feren Puska.

El estará junto a su entrenador Cristóbal Reina, Luis Verdeja, Antonio Calderón, Juan Perchi, Antonio Campanero, Paco Rocha, Beroni, Antonio ‘El moro’, Pepe Cazalla, Manolo Palma, Enrique Sánchez.

Yo siempre estaré orgulloso y agradecido de haber obtenido la confianza de su señora, de sus hijas y demás familia para poder plasmar estas líneas para reconocerte tus virtudes y por el amor que tu derrochaste por tu pueblo, tu familia y amigos.

Antonio Pérez Guerrero

Pepe Rayas junto a su esposa María Ramírez.