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Sala del Teatro Calderón

Félix Cano, 50 años de pintura

Hasta el 28 de mayo

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Nació en la capital del Pisuerga el 22 de enero de 1930. Desde pequeño se sintió atraído por la pintura, entre 1940 y 1946 estudia dibujo y pintura con Pedro Collado, Valentín Orejas y Eugenio Ramos, recibiendo también orientación artística con Constantino Candeira, director del Museo Nacional de Escultura, donde Félix estuvo dibujando las obras de la colección permanente durante casi dos años. En 1948 ingresa en la Escuela de la Academia de San Fernando de Madrid donde recibe clases de Daniel Vázquez Díaz y Benjamín Palencia. Posteriormente comenzó a frecuentar el taller de restauraciones del Museo del Prado para copiar, y sobre todo, pintar. En 1985 fue nombrado académico de número de la Real Academia de Bellas Artes de la Purísima Concepción de Valladolid. Además de en esta institución, tiene obra permanente en la Galería Nacional de Río de Janeiro, el Museo de la Casa de Cervantes de Valladolid, Colegio de Santa Cruz, Ateneo de Sevilla, Galería de Rectores de la Universidad de Valladolid, Galería de Presidentes de la Junta de Castilla y León, The Florida Museum of Hispanic and Latin American Art, etc… Desde 1998 es miembro de honor del The Florida Museum of Hispanic and Latin American Art, lo que significa que no sólo tiene allí obra permanente sino que participa en muestras colectivas que se organizan cada cierto tiempo y para las que envía cuadros recientes. Son, además, una ocasión para regresar a América y escuchar ese jazz improvisado que tanto le gusta. Según Martín González, Félix Cano es “temperamento abierto, sobrio en el gesto, medido en la expresión, sin límites en la generosidad. Su brillante mirada no da opción a la duda. Ante él, surge espontánea la charla. Hombre culto, le gusta escuchar y sólo dice lo que al interlocutor pueda interesar. Hay en él el instinto de la prudencia”.

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