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ENTREVISTA A

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CÁMARA OVAL

CÁMARA OVAL

SAM KATZ

Vuelve el hijo prOdigo

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ALLÁ POR ABRIL DE 2021 SE CONOCÍA LA NOTICIA: SAM KATZ VOLVERÍA A VESTIR LA CAMISETA DE SILVERSTORM EL SALVADOR A PARTIR DE LA TEMPORADA 2021/22. EL TALENTOSO APERTURA INGLÉS ATIENDE LAS PREGUNTAS DE ‘RUGBY EN BLANCO Y NEGRO’ PARA CONTAR A NUESTROS AFICIONADOS CUÁLES SON SUS SENSACIONES DE VUELTA EN LA QUE SIEMPRE HA SIDO SU CASA.

Se cumple un deseo de toda la afición, volver a verte vestido de blanco y negro. También mío, la verdad. Soy muy feliz de estar otra vez en este gran Club, y de aportar todo lo que pueda para que se cumplan los objetivos de este gran equipo que tenemos.

¿Qué han aportado estos años en diferentes países y ligas a tu juego? ¿Qué diferencias vamos a ver respecto al Sam que conocíamos en Valladolid? He aprendido mucho. Sobre todo, mi juego ha evolucionado mucho, y he conseguido una capacidad de liderazgo, que espero aportar al equipo. Es algo que creo que ya se ve, y el grupo de líderes del vestuario tenemos que poner en juego la experiencia que tenemos. En el primer bloque de la temporada nos ha ido muy bien, y esperamos poder seguir así, creciendo como equipo y logrando lo que nos hemos propuesto.

Inglaterra, Francia e Italia, por este orden, tras tu paso por SilverStorm El Salvador. ¿Serías capaz de quedarte con lo mejor, y, si lo hay, lo peor, del rugby en cada una de las ligas en las que has jugado? Me ha encantado esta experiencia que he tenido, empezando desde que salí de mi país, Inglaterra, para venir aquí. Ha sido divertido, y me ha encantado estar en todos los países en los que he jugado. El nivel más alto lo encontré en el ProD2 de Francia, en los dos años que estuve [en RC Massy Essone y AS Béziers Hérault], jugando casi 40 partidos, en estadios muy grandes y conocidos en el mundo del rugby. En Béziers me encontré con un club con mucha historia, con títulos de campeón del Top 14 en los años 80. Me resulta difícil quedarme con la mejor experiencia, porque todas han sido muy interesantes.

Lo peor, sin duda, la llegada de la pandemia y la interrupción de la competición. Estaba en Italia, jugando en San Donà, donde estaba con mi mujer, y fuimos además padres en ese momento, con un aislamiento que se nos hizo difícil de llevar, además de no poder disfrutar de un lugar tan bonito como Venecia, donde estábamos.

Has mencionado ya a tu hijo, que difícilmente podría ser más internacional: mitad inglés, mitad español, y nacido en Italia, con tu mujer, además, vallisoletana. ¿Qué tal ha sido para ellos esta vuelta a casa? Al marchar, dejé a mi familia, y a la familia que es El Salvador. Ahora estamos de vuelta, con nuestra familia, y estoy seguro de que mi hijo tiene posibilidades en el rugby.

Es decir, está decidido: será jugador de rugby. ¡Sólo si él quiere! [risas]. También tiene la opción de dedicarse al fútbol, como hizo su padre hasta los 14 años, y luego convertirse en jugador de rugby.

Cuando llegue el momento, que lea lo que dijo su padre. ¿Qué diferencias te has encontrado entre el SilverStorm El Salvador que dejaste, y el club que es en la actualidad? Está claro que estamos en un camino muy bueno ahora mismo, con la dirección de Rian Butcher presidiendo el Club, que además fue mi jefe en SilverStorm, y es algo que me ha decidido por volver a ser parte de este gran proyecto.

Dentro del rugby, hay más profesionalismo en el primer equipo, y un montón de jóvenes con una gran trayectoria clara y nivel, llegando al primer equipo con 18 o 19 años, y marcando la diferencia en el juego, algo que estamos viendo desde el comienzo de la División de Honor este año. Esto es algo que me gusta mucho. Cuando llegué la otra vez no era tan claro, con jóvenes de la cantera de mi edad por entonces, 23 o 24 años, que aportaban nivel, pero ahora llegan antes, y es muy importante para el equipo.

¿Hasta qué punto es importante? Mucho. Lo veo yo, y lo ve todo el grupo de líderes, los jugadores con experiencia internacional con España, y también en otros países. También ellos aportan mucho, y en esa mezcla entre los jóvenes y los mayores hacemos una buena mezcla, “He aprendido mucho. Sobre todo, mi juego ha evolucionado mucho, y he conseguido una capacidad de liderazgo, que espero aportar al equipo”

y aportamos mucho entre todos, como se está demostrando en nuestro juego y en la forma del equipo.

¿Qué o quién es lo que más te ha sorprendido a tu llegada? En general, me gusta todo lo que veo en el equipo. Hay una gran mezcla, como he dicho, pero me quedo con la calidad de

“Ahora veo más profesionalismo en el Club que en mi anterior etapa”

Martin Du Toit. He jugado a alto nivel, y no me he cruzado con jugadores como él, que tienen de todo en su juego, y que hace las cosas fáciles, y es muy sencillo entenderse y jugar con él.

¿Te resulta fácil entenderte también con los jóvenes de la cantera que se han asentado en el primer equipo, como puede ser el caso de David Barrios? Sí, trabajamos muy duro desde el comienzo de la pretemporada para conseguirlo, y para conocernos bien entre nosotros. Hablamos mucho entre nosotros, y aquí también son importantes los líderes, para manejar el equipo, desde los entrenamientos hasta las charlas, porque hablan, pero también escuchan, y todos tenemos que escuchar a los jóvenes, porque se necesita que sean líderes, como en el caso de David, con la gran madurez que tiene. Hablamos durante los partidos, y es algo que nos ayuda a solucionar problemas. Ocurre en muchos casos, también por ejemplo con Pablo Alonso-Villalobos.

En conjunto, más allá del Club, ¿cómo crees que ha cambiado el rugby español en estos años? Cuando me fui de España estábamos en un punto importante para el rugby español, con una final que llenó el estadio José Zorrilla. Pero esta oportunidad se podría haber aprovechado más, lo que habría hecho muy interesante el rugby en

España. Ahora mismo se tiene un empuje parecido al de aquel momento, y hay posibilidades, porque el rugby en España está creciendo mucho, tanto en el XV como en el Seven.

Se está haciendo un trabajo increíble, creciendo mucho, con proyectos como Castilla y León Iberians, que dan envidia a mucha gente de fuera. Estamos al inicio de algo que puede ser muy grande, y somos los pioneros. Tengo ganas de aportar lo que pueda al rugby español.

Si tuvieses que comparar el nivel de España con el de los otros países donde has jugado, ¿dónde está para ti? En el pasado, hubiese estado a la cola. Pero ahora, tras los dos años que he estado en Italia, es que la distancia se ha cerrado mucho. La competitividad está creciendo, como se vio en el partido frente a Italia A, y no veo tanta diferencia, sobre todo en cuanto al profesionalismo. Si en la División de Honor se llega a hacer algo parecido en más clubes a lo que hacemos en El Salvador, creo que podremos adelantar a Italia, que tiene mucha diferencia entre su Top10 y las franquicias que disputan el Pro14.

Sam Katz conserva su ambición, como hemos visto desde el arranque de la temporada. ¿Te atreves a poner una meta clara a los objetivos de la temporada? Lo que tenemos muy claro es que queremos ser un equipo ganador. Para nosotros esto es lo más importante. Queremos ser los mejores en ataque y defensa, lo que nos ayudará a ganar las competiciones.

En tu anterior etapa fuiste el líder de anotación de la División de Honor (296 puntos en la temporada 2014/15 y 352 en la 2015/16). ¿Te planteas el objetivo de volver a conseguirlo? Me gusta marcar muchos puntos, claro, pero no es algo en lo que piense como objetivo personal. Estoy centrado en los objetivos del equipo, en crecer como conjunto. Si llegamos al final y lo consigo, sería algo que me haría muy feliz, pero no es algo que me marque como objetivo ahora mismo.

Un cambio importante para ti ha habido en Pepe Rojo: los palos ahora son de un solo color. ¿En qué medida echas de menos las franjas rojas? ¡Nadie me lo había contado antes! Pero sí que me había dado cuenta de que había algo raro con los palos… ¿Será eso por lo que fallé tres intentos a palos frente a Complutense Cisneros? [Risas]. No se puede echar la culpa a los elementos, porque los palos son los mismos para todos, pero sí que los echo de menos, porque son los palos con los que ganamos la División de Honor 2015/16. Ahora, ¡a ganar títulos con los nuevos!

“Se está haciendo un trabajo increíble, con proyectos como Castilla y León Iberians. Estamos al inicio de algo que puede ser muy grande, y somos los pioneros. Tengo ganas de aportar lo que pueda al rugby español”.

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