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Socuéllamos mensual, febrero 2011

AFYMOS ofrece la hipoterapia como tratamiento complementario Desde hace un año la asociación de familiares y amigos de discapacitados de Socuéllamos a puesto a disposición de sus usuarios este tipo de terapia novedosa, que se encuentra todavía en fase de investigación. Hasta el momento se han observado diferentes avances entre los que la practican y el proyecto Educaequis ya recoge los resultados obtenidos Silvia Torrejón La Asociación de amigos y familiares de personas con discapacidad de Socuéllamos (AFYMOS), se acogió, hace aproximadamente un año, a la nueva campaña terapéutica con animales de compañía llevada a cabo por Educaequis. El proyecto está desarrollado por un grupo de jóvenes investigadores de la Universidad de Castilla-La Mancha, que intentan averiguar, y ya lo están haciendo, los efectos positivos que conlleva el trato de personas de diferentes discapacidades con animales de compañía, especialmente con caballos. La hipoterapia es una de las iniciativas más novedosas para el tratamiento complementario de este tipo de pacientes, tanto en franjas infantiles como en edades adultas. En esta ocasión, Socuéllamos Mensual se ha interesado por el desarrollo de la actividad en la localidad y por los efectos que está produciendo en quienes la practican. Además, hemos obtenido una primera valoración de los familiares y de los profesionales que, voluntariamente, están ofreciendo este tipo de terapia en fase de investigación. Actividades Aunque AFYMOS ha acogido esta iniciativa para la práctica de adultos y niños, son éstos últimos los que mejores resultados están obteniendo y los que muestran avances más obvios tras el desarrollo de la hipoterapia durante un año. Irene Muñoz, logopeda de profesión, investigadora de Educaequis, y voluntaria en la realización de la hipoterapia en Socuéllamos, declaró que la idea principal está basada en que los más pequeños tomen confianza en sí mismos y aprendan poco a poco a relacionarse con los caballos de manera natural, para después poder avanzar en el tratamiento, siempre personalizado, de sus afecciones. Para ello, indicó, la iniciativa contó con un periodo de adaptación en que los pacientes conocieron las partes del caballo, aprendieron a dibujarlos, a reconocerlos, a ponerles nombre o a darles de comer.

Para tomar confianza, los niños dan de comer a los caballos

La terapia tambien fomenta el reconocimiento de los animales

Entre las tareas asignadas, los pequeños peinan la crin de los caballos con la ayuda de los adultos, que les explican lo que es Se trata de una tarea, a simple vista fácil, pero imprescindible para dejar de tratar al animal como un ente extraño y tomarlo como un amigo, una mascota o un instrumento de trabajo. Esta es la razón de que cada semana, el grupo infantil acuda a montar a caballo, realizando antes labores de toma de contacto con los animales. Posteriormente, algunos más predispuestos que otros, los pequeños tienen la oportunidad de montar a caballo y realizar a lomos de éste todo de tipo de actividades, dependiendo del grado de discapacidad que presenten y el grado de desarrollo, así como de la edad y adaptación al medio. Durante esta jornada, por ejemplo, se pusieron en marcha labores de apoyo en el terreno de la logopedia, aprendiendo y recordando el orden de los números cardinales, juegos de reconocimiento y juegos de palabras; prácticas de equilibrio y otras actuaciones destinadas al ejercicio de los músculos así

como en ensayo de la postura. Personal En cuanto al equipo humano que compone este proyecto, la iniciativa cuenta con profesionales como Irene Muñoz, diplomada en logopedia o Luis Manuel Villena, fisioterapeuta. Además, la organización ha considerado de vital importancia la colaboración de expertos en el comportamiento y adiestramiento de los caballos como José Ángel Morales, dueño de la Escuela de Equitación Morales, y Antonio Morales, así como la ayuda de un grupo de voluntarios, que acuden cada sábado a modo de soporte básico. Entre todos, están atendiendo a un total de dieciocho personas, once chicos y siete chicas de entre 3 y 30 años de edad que presentan diferentes discapacidades intelectuales y/o motoras así como la enfermedad de síndrome de down. Muchos de ellos, han sido tratados a edades tempranas en

El proyecto cuenta con la importante labor de los voluntarios el centro de la localidad gestionado por AFAS, sin embargo, según apuntó Pilar Alarcón, presidenta de AFYMOS, ésta asociación pretende dar un tratamiento continuado a todas esas personas que superando la edad de 6 años ya no pueden acogerse al proyecto del centro de atención temprana. Así mismo, AFYMOS cuenta con otras actividades complementarias a ésta como la hidroterapia, realizada en el

entorno acuático, especialmente durante el verano. Además, adelantaron que la apertura de la próxima piscina climatizada permitirá que estos niños puedan hacer actividades como la hidroterapia a lo largo de todo el año. Tratamiento Desde el campo de la fisioterapia, Luis Manuel Villena, señaló que se tratan diversas áreas como la


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Socuéllamos mensual, febrero 2011 motricidad, la flexibilidad o el equilibrio, dependiendo del trastorno que presente cada paciente. En el caso concreto del grupo infantil de AFYMOS, se tratan a niños espásticos, es decir con problemas de contracción en los músculos, principalmente en los de las piernas, y a niños con trastornos auditivos, que padecen alteración del equilibrio a causa de esta afección. Por otra parte Villena señaló que su labor resulta especialmente idónea para pacientes que están aprendiendo a andar porque el caballo les ayuda mucho a practicar la posición erguida y el ejercicio de las extremidades inferiores, así como la flexibilidad de las mismas. Finalmente, el fisioterapeuta, indicó que la elección de este animal como herramienta para el desarrollo se debe a que el caballo cuenta con dos grados de temperatura por encima del cuerpo humano, por lo que ayuda a estirar de forma fácil los músculos de las piernas y adaptar la posición de las personas que sufren trastornos espásticos. Irene Muñoz, logopeda y propulsora de esta iniciativa, es la encargada de la segunda parte del tratamiento, tan importante como la primera. Normalmente su actuación se centra más en aquellos pacientes que no presentan dificultades motrices, por lo que pueden aprovechar la hipoterapia como apoyo a otras aptitudes. Así, Irene destacó las tareas de reconocimiento que se realizan con los más pequeños, intentando que memoricen y conozcan el nombre de sus compañeros y de los caballos con los que trabajan. Además, se intenta que los niños preparen la comida y peinen a los animales, familiarizándose así con el entorno en que van a trabajar. No obstante, la logopeda ha puesto en marcha otros sistemas de aprendizaje en un nivel superior como la organización del trabajo mediante la coordinación de un líder, elegido entre todos los pacientes, que se encarga de la preparación de las actividades y la supervisión

Antonio es uno de los pacientes que ha conseguido aprender a montar de manera normalizada

Los ejercicios de equilibrio son imprescindibles para Para comenzar es importante que los personas con trastorno de audición como Jorge niños se familiaricen con los animales

es el mantenimiento de la postura erguida, algo que consiguió lograrse en un principio y que ahora es una realidad. Además, Villena, aseguró que a través de esta terapia se están mejorando las condiciones de flexibilidad y equilibrio de los discapacitados que la realizan. Irene Muñoz, por su parte, destacó que la mejoría depende mucho del nivel de discapacidad que presente cada uno de los pacientes y aseguró que los que más avanzan habitualmente son a los que más trabajo les cuesta en principio adaptarse a la terapia La logopeda explicó que supone un gran reto para muchos de los niños enfrentarse a algo desconocido como es el caballo, pero que actualmente todos han conseguido superar ese miedo o lo están trabajando poco a poco. Finalmente Muñoz destacó los avances que se están consiguiendo a nivel de actitud y mencionó el caso de Antonio, que resulta especialmente significativo porque ha conseguido montar a caballo y dirigirlo por sí mismo casi como cualquier otra persona que acuda a las clases habituales. En cuanto a la valoración de las familias, éstas se han mostrado muy satisfechas con el desarrollo de la actividad, no sólo en el terreno médico propiamente dicho sino en el terreno personal, ya que para muchos de ellos supone una superación el adaptarse a este entorno y el aprender poco a poco a montar a caballo en condiciones practicamente normales. Otros proyectos

Irene Muñoz, logopeda y Juan Manuel Villena, fisioterapeuta del proyecto realizan durante el paseo distintos ejercicios para mejorar la motricidad y la logopedia de los participantes parcial de las mismas. Ya subidos a lomos del animal, Irene desarrolla con cada niño una actividad adaptada especialmente a sus necesidades y capacidades. Algunas de ellas están directamente relacionadas con el

El fisioterapeuta enseña a mantener la postura erguida

cálculo, la memorística.

lectura

o

la

Valoraciones Hasta ahora y desde hace un año esta actividad se viene repitiendo de forma semanal,

excepto en periodo de vacaciones, y según los profesionales que tratan con ellos las mejorías desde entonces son notables. Según Luis Manuel Villena, encargado de la fisioterapia, uno de los avances más perceptibles

La logopeda aprovecha la terapia para repasar conocimientos aprendidos en el colegio

Además de la terapia que realizan en colaboración con AFYMOS, Educaequis mantiene otros proyectos abiertos de este mismo tipo en localidades cercanas como Alcázar de San Juan, donde comenzó, o Villarrobledo. No obstante, se encuentran investigando también con personas drogodependientes y en personas de la tercera edad.

Esta terapia fomenta la independencia de los niños


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