LAS AVENTURAS DEL HADA PIRULETA
Un d铆a caluroso de verano, el hada piruleta sali贸 a pasear por el bosque cuando a lo lejos vio un enorme castillo.
Poco a poco se empezó a acercar al castillo con algo de miedo y con su varita en la mano, y cuando estaba a punto de abrir la puerta, algo salto detrás de ella, se giró rápidamente y ahí estaba delante de ella una ardilla que le miraba con una bellota en sus manos.
La ardilla imitaba velozmente todos los movimientos que el hada hacía, y como no hablaba, decidió llamarla ardilla rapidilla. Rápidamente se hicieron compañeras de viaje y buenas amigas inseparables. La ardilla empezó a correr y el hada la siguió olvidándose de entrar al castillo.
Se lo estaban pasando genial juntas, pero llegó la noche y se quedaron dormidas junto a un árbol. Por la mañana la ardilla se levantó y fue en busca de algo de comida para desayunar, y cuando llegó vio a un dragón de color rojo que estaba asustando a la pobre hada.
La ardilla tenía que hacer algo para ayudar a su amiga, así que pensó y miró a su alrededor que podía utilizar para que el dragón se fuera.
De repente, vio un collar extraño en el suelo y lo cogió y comenzó a salir de él una fuerte luz que molestaba los ojos. Así que lo dirigió hacia el dragón y el dragón se asustó y marcho corriendo.
Las dos amigas se dieron un fuerte abrazo y corrieron hacia el castillo para esconderse. Una vez allí vieron que en el castillo no había nadie, así que decidieron quedarse a vivir juntas allí y no separarse nunca más.
ColorĂn Colorado, el hada y la ardilla se han encontrado y nunca mĂĄs se han separado.
FI N
FIN
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