1 minute read
Gran oportunidad
El Archipiélago de San Andrés, Providencia y Santa Catalina, única región insular de Colombia ubicada en el Gran Caribe, comparte fronteras y costumbres con varios países de Centroamérica; y es además Reserva Mundial de la Biosfera declarada así por la UNESCO, gracias a su enorme, variada y rica biodiversidad.
Durante los años 2020 y 2021, atravesó, debido a la pandemia y al paso de los huracanes ETA e IOTA, un tiempo no solo de cambios sino también de resiliencia dada la gravedad de la devastación experimentada, especialmente en las islas de Providencia y Santa Catalina. Allí, se reconstruyó gran parte de su infraestructura en un proceso colosal que aún no ha detenido su marcha.
Advertisement
Ente tanto, en 2021 San Andrés abrió sus puertas al turismo logrando ser el primer destino del país en tener a la inmensa mayoría su población vacunada contra el Covid-19, con estrategias de recuperación tanto en materia de infraestructura como económica, dando como resultado una oferta en gran parte reinventada, pujante e innovadora.
Una oferta, que más allá de lo convencional, también involucró con mayor fuerza y protagonismo a su población étnica raizal con todas sus manifestaciones culturales. Procesos que van en camino de consolidarse con características adicionales de un creciente mercadeo, creativo, incluyente y transformador.
Por estas razones y seguramente otras más, las directivas de la Vitrina Turística Internacional de la Asociación Colombiana de Agencias de Viajes y Turismo (Anato), decidieron otorgarle al Archipiélago el estímulo y el honor de ser escogido como Destino Nacional Invitado en esta, la versión 42 de su tradicional evento anual.
Sin duda, una gran oportunidad para fortalecer y consolidar el destino en un tiempo en el que –no sobra decirlo– la crisis económica internacional afecta sin miramientos a la industria mundial del transporte aéreo, única vía de acceso al Archipiélago, razón por la cual algunas rutas y frecuencias lo comienzan a afectar.