El viaje de El Campello:

120 años de municipio, milenios de historia

© GERARDO MUÑOZ LORENTE, 2021

PRÓLOGO

Cuenta saldada

Quien no conoce su pasado, difícilmente entenderá su presente ni podrá diseñar su futuro. Siempre he mantenido que El Campello tenía una asignatura pendiente: dar forma de libro a su historia, más allá de los asentamientos prehistórico, íbero, romano o del medievo, de los que ya han dado buena cuenta los arqueólogos que tan a menudo nos visitan para desgranar y explicarnos a todos que muy diversas civilizaciones escogieron este bendito lugar para erigir sus moradas y llevar adelante una vida tan laboriosa como placentera.

Me refiero a una laguna que, hasta hoy, existía en el municipio, cual era documentar página a página, década a década, año a año, el devenir del vecindario desde que tomó forma de pequeña aldea de agricultores y pescadores hasta convertirse en lo que es hoy: un pueblo próspero, de gentes hospitalarias, con mentes abiertas, centro turístico de innegable valor y paraíso soñado por miles de españoles y extranjeros que nos eligen para residir de forma permanente.

Con este libro que edita el Ayuntamiento, considero que esa cuenta pendiente queda saldada, y con creces, pues el encargo de escribir esta prolija, exacta e interesante historia lo recibió el literato, historiador e intelectual Gerardo Muñoz Lorente, a quien muchos de ustedes conocerán bien por su producción literaria integrada por decenas de libros, como por sus artículos de historia, personajes y costumbres con los que cada semana nos deleita en las páginas del Diario Información.

Socio de la Asociación Colegial de Escritores de España (ACE), en los últimos años ha destacado también por su activo trabajo en el seno del Consell Valencià de Cultura (CVC), del que forma parte desde 2018.

Alicantino de adopción, reside en la provincia desde 1981. Aquí formó una familia, y aquí escribió su primera novela en 1987 (El fantasma de Lucentum), que recibió muy buenas críticas nacionales, a la que siguieron otras que han llegado a cruzar el Atlántico y han penetrado con fuerza en las librerías de México, entre otros países.

Recreación fortín púnico de Aigües Baixes (aiguesbaixes.wixsite.com/elcampello)

cercana, con túmulo rectangular y manchas de ceniza. Se trata de pequeños núcleos de población dispersa, próximos entre ellos.6

El asentamiento de Aigües Baixes está situado junto a un puerto natural, en el margen derecho del barranco de Aigües, frente a la playa de Cala Piteres. Es un pequeño fortín púnico, construido entre los siglos V y IV antes de nuestra era, para la defensa y vigilancia de la costa desde Benidorm hasta el Cabo de la Huerta. Un recinto trapezoidal de 350 m², sobre una loma de algo más de 30 metros de altura, a 80 metros de la costa y a 4 kilómetros de la Illeta dels Banyets.7

6 LÓPEZ SERRANO, David y VALERO CLIMENT, Ana. Prospección de los valles meridionales del Cabeço d’Or, 2002-2004. Catálogo de protecciones de El Campello, Ayuntamiento de El Campello. 7 SALAS SELLÉS, F., MORATALLA JÁVEGA, J., PRADOS MARTÍNEZ, F., VALERO CLIMENT, A. y LÓPEZ SERRANO, D. El fortín de Aigües Baixes y la vigilancia del litoral contestano, San Sebastián de los Reyes (Madrid), 2017. Catálogo de protecciones de El Campello, Ayuntamiento de El Campello.

Plano de David López y Ana Valero

Torre de la Illeta en tres épocas distintas (AMC)

SIGLO XVIII

Un Real Decreto expedido en 1702 permitió a Nicolás Pérez de Sarrió establecer enfitéuticamente en sus tierras a más de treinta colonos16. En años sucesivos continuó concediendo cesiones de este tipo a más personas que, a cambio de tierras, se comprometían por escrito a reconocer su dominio, a pagar una cantidad por tahúlla cedida y a cultivar la tierra.17

En junio de 1730, Nicolás Pérez de Sarrió solicitó al Ayuntamiento de Alicante que permitiera a los vecinos del Campello abrir tiendas, para que pudieran abastecerse sin necesidad de desplazarse a otros lugares. Comoquiera que los tenderos y el alcalde de la universidad de San Juan se opusieron, el cabildo alicantino denegó en un principio la petición, pero ante la insistencia de Pérez de Sarrió, que recurrió a la Real Audiencia de Valencia, el Ayuntamiento de Alicante no tuvo más remedio que autorizar, el 8 de agosto de 1730, a que se abriesen tiendas en la partida del Campello. Ocho años más tarde, cuando en esta partida ya había levantadas veinticinco casas, el alcalde de Alicante prohibió la venta de comestibles en las tiendas allí esta-

16 Enfiteusis: Cesión perpetua o por largo tiempo del dominio útil de un inmueble, mediante el pago anual de un canon y de laudemio por cada enajenación de dicho dominio (DRAE). 17 ALBEROLA ROMÁ, Armando. op. cit., pp. 481-482.