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VILLA VERANO
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Los dueños de esta casa encontraron en medio del campo mallorquín su paraíso en la tierra. Es una casa familiar donde volver cada año y redescubrir la calma
ESTILISMO: G. Conde FOTOS: P. Oromí TEXTO: M. Corredera
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ENELPORCHE SillonesOslode Graham&Green. VajilladeTrends Home.Mantely cojinesdeFilocolore. PlantasdeCan Juanito Vivers.
EN EL SALÓN Sofá mod. Linus y butacas Claire de Atemporal, en Barr Baleares. Mesa de centro de Graham & Green.
En el corazón de Mallorca, entre pinos y vegetación autóctona, se esconde esta casa, bautizada como Villa Mariposa. Blanca y con techos de madera, enamora con su sencillez. “Fue construida hace ya tres décadas por un arquitecto tan fascinado del lugar que se la quedó”, nos explica Luis Fernández, de LDFL studio, quien la rehabilitó junto a la constructora Barr Baleares.
HACIA LA VENTANA Cojín artesanal de Camale_on. Mesita auxiliar de Home Barn.
EL COMEDOR Mesa rústica de madera de olmo de Barr Baleares. Lámparas de techo con pantalla de bambú de Maisons du Monde.
SALÓN COMEDOR Sillas diseñadas por Hans Wegner y fabricadas por Carl Hansen. Mesa metálica de Barr Baleares con lámpara Chevron de Cox & Cox.
Las lámparas de bambú refuerzan el estilo relajado de la casa
Los actuales propietarios son una familia que vive en Reino Unido y que espera con ansia las vacaciones para volver a la isla balear. “La construcción estaba en buen estado, aunque fueron necesarias algunas reformas parciales y adecuar la casa a las nuevas necesidades”, comenta el arquitecto. ¿La clave? En todo momento respetaron los materiales y elementos constructivos originales, porque los dueños querían ‘respirar’ esa esencia tradicional de Mallorca, no querían que se perdiera por nada del mundo. ¿Dónde vemos esos materiales de siempre, pero con look moderno? Los materiales naturales están, por ejemplo, en las fundas de lino de los sofás y la ropa de cama, en las alfombras, las lámparas y la hamaca de fibras vegetales, hasta en las contraventanas o las vigas de madera.
LA COCINA La cocina fue diseñada por Barr Baleares. En las vigas del techo, focos negros de Astro Lighting.
MUEBLES PINTADOS Los armarios, de madera pintada en verde grisáceo, se completan con baldas de madera en la parte superior.
BAJO LA VENTANA Banco de obra con cojín de lino de Designers Guild. Sillas de Carl Hansen y mesa de Barr Baleares.
CAMA CON DOSEL Cama a medida por Barr Baleares con acero pintado. Cabecero con tela de lino de Designer’s Guild. Mesilla de Graham & Green. Cojines de Filocolore.
ELDORMITORIO EspejodeThe WhiteCompany. Lámparadepie negradeCox& Cox.Mecedora típicadeMallorca demaderayfibras de La Percera.
EN EL JARDÍN Tumbonas regulables mod. Riviera de Skagerak y cojines de la misma firma. Las plantas son de Can Juanito Vivers.
EL DORMITORIO Ropa de cama de The Fine Bedding Company, Filocolore y Textura. Cojines con volantes diseño de Gabriela Conde.
EL CABECERO Barra de forja diseño de Jim Lawrence. Cabecero de Designers Guild. Mesita de Maisons du Monde. Aplique de Holloways of Ludlow .
Aunque, si nos fijamos bien, hay toques modernos que actualizan el rústico. Por ejemplo: sobre una base de tonos neutros, los infalibles crudos y beiges, se añadieron acentos de color en verde grisáceo, verde oliva, matices azulados… El negro también ha servido para crear contrastes interesantes: está presente en las lámparas, en los tiradores de los muebles y en los cabeceros, que por cierto, han sido realizados con barras de cortina. No podemos olvidarnos de la cama del dormitorio principal, protagonista gracias al dosel de acero y mosquiteras livianas. Las piezas artesanales mallorquinas nos acompañan por toda la casa: aquí un taburete de madera, allí una mecedora de ratán, en el suelo una estera... No nos extraña que los ingleses quieran volver siempre. n