Periódico EL PODER DEL ESPÍRITU

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UN SOPLO DE DIOS

MAYO: «MES DE FIESTA»

S.S. BENEDICTO XVI

«Ya corren por los montes los pies del mensajero, del que anuncia la paz. ¡Celebra tus fiestas, oh Judá, cumple tus votos! Porque no volverá a pasar por ti el bandido: ha sido extirpado totalmente.» Nahún 2:1

«Al atardecer de aquel día, el primero de la semana, estando cerradas, por miedo a los judíos, las puertas del lugar donde se encontraban los discípulos, se presentó Jesús en medio de ellos y les dijo: La paz con vosotros. Dicho esto, les mostró las manos y el costado. Los discípulos se alegraron de ver al Señor. Jesús les dijo otra vez: La paz con vosotros. Como el Padre me envió, también yo os envío. Dicho esto, sopló y les dijo: Recibid el Espíritu Santo. A quienes perdonéis los pecados, les quedan perdonados; a quienes se los retengáis, les quedan retenidos.» (Jn 20:19-23). El pasaje evangélico nos ofrece, después, una imagen maravillosa para aclarar la conexión entre Jesús, el Espíritu Santo y el Padre: el Espíritu Santo DOMINGO 20 DE MAYO se presenta como el soplo de Jesucristo resucitado (cf. Jn 20, 22). El evangelista san Juan retoma aquí una imagen del Luego de Su Resurrección de entre los muertos, Jesús se manifestó a Sus relato de la creación, donde se dice que discípulos dándoles numerosas pruebas de que vivía, y durante cuarenta Dios sopló en la nariz del hombre un días se les apareció y les habló del Reino de Dios. Luego de haberles dado aliento de vida (cf. Gn 2, 7). El soplo de sus últimas instrucciones por medio del Espíritu Santo a los apóstoles que Dios es vida. Ahora, el Señor sopla en había elegido, y mientras les bendecía, fue levantado al cielo y sentado a la nuestra alma un nuevo aliento de vida, Diestra de Dios Padre. el Espíritu Santo, su más íntima esencia, Este acontecimiento glorioso de la Ascensión del Señor lo encontramos y de este modo nos acoge en la familia relatado en los evangelios según San Marcos y según San Lucas, así como de Dios. Con el Bautismo y la en el Libro de los Hechos de los Apóstoles. Confirmación se nos hace este don de Su celebración litúrgica es el domingo anterior a la Fiesta de Pentecostés. modo específico, y con los Sacramentos San Agustín, con ocasión de esta solemnidad, decía en un sermón: «Hoy de la Eucaristía y de la Penitencia se nuestro Señor Jesucristo ha subido al cielo; suba también con Él nuestro repite continuamente: el Señor sopla en corazón. Oigamos lo que nos dice el nuestra alma un aliento de vida. Todos Apóstol: «Si habéis sido resucitados los sacramentos, cada uno a su manera, con Cristo, buscad las cosas de arriba, comunican al hombre la vida divina, donde Cristo está sentado a la Diestra gracias al Espíritu Santo que actúa en de Dios. Poned vuestro corazón en las ellos. -Pascua 2011cosas del cielo, no en las de la tierra.» Pues, del mismo modo que Él subió sin alejarse por ello de nosotros, así también nosotros estamos ya con Él allí, aunque todavía no se haya realizado en nuestro cuerpo lo que se nos promete. ( ) Él está allí, pero continúa estando con nosotros; asimismo, nosotros, estando aquí, estamos también con Él. Él está con nosotros por Su Divinidad, por Su Poder, por Su Amor; nosotros, aunque no podemos realizar esto como Él por la divinidad, lo podemos sin embargo por el amor hacia Él. ( ) Bajó, pues, del cielo, por Su misericordia, pero ya no subió Él solo, puesto que nosotros subimos también en Él por la gracia. Así, pues, Cristo descendió Él solo, pero ya no ascendió Él solo; no es que queramos confundir la divinidad de la cabeza con la del cuerpo, pero sí afirmamos que la unidad de todo el cuerpo pide que éste no sea separado de su cabeza.» Agustina Spegazzini

La Ascención del Señor

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*Dirección General: Juan Carlos Hovhanessian Diego Hovhanessian

*Asesor Espiritual: Monseñor José Guido Pesce *Redacción:

Florencia Adanalian Alba Acosta Miriam B. de Mavilian Lourdes Chiappetta Laura Gómez Lucía Hovhanessian Milagros Hovhanessian Lidia I. de Papazian Geraldine Miguel Lic. Anahí Raggio Lic. Valeria Salinas Agustina Spegazzini *Coordinación de contenidos: Dra. Mónica V. de Adanalian *Distribución y envíos postales: Liliana E. de Francia y José Francia *Diagramación y Coordinación General: Roxana B. de Hovhanessian www.elpoderdelespiritu.org

EL ESPÍRITU SANTO Y NUESTRA JUSTIFICACIÓN 1989 La primera obra de la gracia del Espíritu Santo es la conversión, que obra la justificación según el anuncio de Jesús al comienzo del Evangelio: «Convertíos porque el Reino de los cielos está cerca» (Mt 4, 17). Movido por la gracia, el hombre se vuelve a Dios y se aparta del pecado, acogiendo así el perdón y la justicia de lo alto. «La justificación no es solo remisión de los pecados, sino también santificación y renovación del interior del hombre» (Concilio de Trento: DS 1528). 1990 La justificación libera al hombre del pecado que contradice al amor de Dios, y purifica su corazón. La justificación es prolongación de la iniciativa misericordiosa de Dios que otorga el perdón. Reconcilia al hombre con Dios, libera de la servidumbre del pecado y sana. 1992 La justificación nos fue merecida por la pasión de Cristo, que se ofreció en la cruz como hostia viva, santa y agradable a Dios y cuya Sangre vino a ser instrumento de propiciación por los pecados de todos los hombres. ( ) 1994 La justificación es la obra más excelente del amor de Dios, manifestado en Cristo Jesús y concedido por el Espíritu Santo. San Agustín afirma que «la justificación del impío [...] es una obra más grande que la creación del cielo y de la tierra» [...] porque «el cielo y la tierra pasarán, mientras [...] la salvación y la justificación de los elegidos permanecerán» (San Agustín, In Iohannis evangelium tractatus, 72, 3). Dice incluso que la justificación de los pecadores supera a la creación de los ángeles en la justicia porque manifiesta una misericordia mayor.

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«Al llegar el día de Pentecostés, estaban todos reunidos en un mismo lugar. De repente vino del cielo un ruido como el de una ráfaga de viento impetuoso, que llenó toda la casa en la que se encontraban. Se les aparecieron unas lenguas como de fuego que se repartieron y se posaron sobre cada uno de ellos; quedaron todos llenos del Espíritu Santo y se pusieron a hablar en otras lenguas, según el Espíritu les concedía expresarse. Había en Jerusalén hombres piadosos, que allí residían, venidos de todas las naciones que hay bajo el cielo. Al producirse aquel ruido la gente se congregó y se llenó de estupor al oírles hablar cada uno en su propia lengua. Estupefactos y admirados decían: « ¿Es que no son galileos todos estos que están hablando? Pues ¿cómo cada uno de nosotros les oímos en nuestra propia lengua nativa?» (Hechos 2:1-8) ¡Pentecostés: «La Promesa del Padre», como Jesús la llamó... En el capítulo 2 podemos ver el cumplimiento. En la gloriosa mañana, el «Amanecer de la Iglesia», el Espíritu Santo vino sobre María y los Apóstoles y discípulos - «UNOS CIENTO VEINTE» (1:15) que congregados esperaban en oración. Jesucristo Resucitado «Cabeza de la Iglesia», envía el Espíritu Santo sobre ella, «que es su cuerpo» (ver Efesios 1:22). «La Promesa del Padre» que «hace» que «CABEZA Y CUERPO» sean «UNO». «Mas el que se une al Señor, se hace un solo espíritu con Él» (1 Corintios 6:17). «Pues somos miembros de Su Cuerpo...» (Efesios 5:30). Y así pueda su Iglesia cumplir el Mandato de Su Señor: «Me ha sido dado todo poder en el cielo: LA CABEZA y en la tierra: SU CUERPO, LA IGLESIA. Id pues, y haced discípulos...» (Ver Mateo 28:19). Esa misma mañana, el Apóstol Pedro anunció con poder el «Kerygma»: CRISTO, MUERTO, RESUCITADO, EXALTADO, GLORIFICADO, DADOR DEL ESPÍRITU SANTO. ¡Gloria sea a Dios! Por tanto, Pentecostés es ¡Fiesta grande de la Iglesia! ¡Pentecostés, cumpleaños de la Iglesia! En esta corriente de Gracia, la Renovación Carismática Católica, hablamos de «un nuevo Pentecostés», que fue la Premisa del Concilio Vaticano II, que por oración del Papa Juan XXIII pedía «UN NUEVO PENTECOSTÉS» para la Iglesia, para que pueda ser un «PENTECOSTÉS PERMANENTE», como enseñan los «Padres» de esta corriente de gracia, cuyo fundador es el mismo Espíritu Santo. Por eso, desde la experiencia de vida, a través de tener un encuentro personal con Jesucristo por la fe, podemos vivir también un «Pentecostés personal» y es allí cuando se produce el cambio, ya que el que encontró un GOZO GRANDE, no lo puede guardar para si, sino quiere darlo a conocer, compartirlo con todos. En el libro de los Hechos, entre otros, Saulo, Cornelio y los suyos, tuvieron su «Pentecostés Personal»... luego comunidades fueron fundadas, por el testimonio de los cristianos, testigos del Amor y del Poder de Jesucristo. ¡Aleluya! Providencialmente, este mes celebramos el 31° Aniversario de vida apostólica de nuestra Comunidad «Santa María», ya que fue en Mayo de 1981 que el Amor del Padre, por Su infinita Misericordia, me «llamó de las tinieblas a Su Admirable Luz». Tuve «mi encuentro personal» con Jesucristo

por la fe; una «visión» del Señor Jesús, que en lo profundo de mi corazón, decía: «¡SÍGUEME!» Tuve mi «PENTECOSTÉS PERSONAL», fue un ANTES y un DESPUÉS desde ese instante. ¡Gloria a Su Nombre! Por eso digo que la Comunidad «Santa María» es fruto de la Gracia de Jesús, del Amor del Padre y de Su Espíritu Santo, bajo la mirada maternal de la que llevamos su nombre: Nuestra Madre la Virgen, «Santa María». ¡Gracias Señor! También es el mes del 12° cumpleaños de nuestro periódico «El Poder del Espíritu», por el cual nos podemos mantener comunicados con tantísimos hermanos y amigos a lo largo y ancho de nuestra querida República Argentina, como los hermanos países de América, Europa y el mundo entero. Aprovecho para agradecerle a todos los que hacen posible su realización. A todo ese equipo que trabaja y a su «alma máter» -Roxana- que «cuidan» y «llevan al crecimiento» a la «creatura», fruto del Ministerio de la Evangelización y la Enseñanza «El Poder del Espíritu», de nuestra Comunidad. ¡Gracias a ustedes y a todos los que «acompañan y sostienen» su crecimiento! ¡Felices 12 años! Quiero mencionar también que en el mes pasado de Abril, cumplimos un año en el aire radial de FM 93.9 (Radio Palermo) y que todos los martes a la medianoche, llega vía internet -literalmente- a los 5 continentes, como gratísimamente tantos hermanos en el mundo nos hacen conocer en cada emisión: ¡Gracias a todos! ¡Bendiciones! Y que hemos inaugurado, los miércoles a la medianoche, un ciclo televisivo, en el canal «Nueva Imagen» y que también, a través de nuestra web llega a todo el mundo. Todo esto, con el propósito de dar a conocer lo que de Jesús hemos graciosamente recibido, así como nos lo dice el Pastor Universal de la Iglesia S.S. Benedicto XVI, en relación con la Evangelización por los medios masivos de comunicación, redes, etc., anunciando a Jesucristo, «el Camino, la Verdad y la Vida...» ¡Gloria a Su Nombre! Les deseo a todos, en mi nombre y en el de mis hermanos: ¡UN FELIZ PENTECOSTÉS! ¡FELIZ ANIVERSARIO COMUNIDAD SANTA MARÍA!

Espíritu de Pentecostés ¡OH! «ESPÍRITU DE AMOR» TE INVOCAMOS, SEÑOR. ¡TE NECESITAMOS TANTO! VEN A CADA CORAZÓN CON TU AMOR Y UNCIÓN... ¡OH, DIOS ESPÍRITU SANTO! ¡OH! «PADRE DE LOS POBRES» ELEVAMOS NUESTROS CLAMORES CON ALABANZAS Y CANTO. TRANSFORMA NUESTRA FLAQUEZA EN GOZO, PAZ Y FORTALEZA... ¡OH, DIOS ESPÍRITU SANTO! ¡OH! «ESPÍRITU DE PENTECOSTÉS» REALIZA HOY OTRA VEZ LO QUE OBRASTE «HACE TANTO» AL NACER TU IGLESIA AMADA... ¡¡¡RECIBAMOS UNA FE RENOVADA!!! ¡OH, DIOS ESPÍRITU SANTO!

JUAN CARLOS

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LES CONVIENE QUE YO ME VAYA... «Pero yo os digo la verdad: Os conviene que yo me vaya; porque si no me voy, no vendrá a vosotros el Paráclito; pero si me voy, os lo enviaré»

(Juan 16:7)

*Acaso, estando Él aquí, ¿no podía enviarlo? Sabemos que vino y permaneció sobre Él en el bautismo, y aún sabemos que nunca se separó de Él. ¿Por qué, pues, decir «Si no me fuere, el Paráclito no vendrá a vosotros», sino porque no podéis recibir el Espíritu Santo, cuando persistís en no conocer a Cristo sino según la carne? Separándose Cristo corporalmente, vino a ellos espiritualmente, no sólo el Espíritu Santo, sino que también el Padre y el Hijo. (SAN AGUSTÍN) *Como si claramente dijera: Si no sustraigo mi cuerpo de vuestras miradas, no alimentaré invisiblemente vuestro espíritu con el Consolador Espíritu Santo. (SAN GREGORIO)

*CATENA AUREA ¿Alguna vez te has preguntado cuál es el origen del dicho popular: «Quien encuentra un amigo, encuentra un tesoro»? Pues bien, la Palabra de Dios nos da la respuesta: «El amigo fiel es un apoyo seguro, quien lo encuentra, ha encontrado un tesoro.» (Eclesiástico 6:14). ¡¡Jesús es nuestro amigo fiel por excelencia!! Su amistad es el mayor de los tesoros. Él nos dice: «No os llamo ya siervos, porque el siervo no sabe lo que hace su amo; a vosotros os he llamado amigos, porque todo lo que he oído a mi Padre os lo he dado a conocer.» (Juan 15:15). ¡Gracias Jesús! Geraldine Miguel

Amigos

Hasta el último rincón de la tierra «A nadie envidia quien no persigue el propio deleite, ni desea satisfacciones personales porque, sobre todo otro bien, desea la felicidad en Dios. A nadie atribuye algún bien, porque todo lo refiere a Dios, del cual como de su fuente, manan todas las cosas, y en quien, como en su fin, todos los santos descansan en paz» (Tomás de Kempis). La salvación de cada hombre es algo que depende de quien es Único Dueño del Poder: Dios, y no de nuestras capacidades. Siguiendo el mandato de Jesucristo de «Id y predicad el Evangelio a toda criatura», hace hoy 31 años, nacía nuestra Comunidad «Santa María». Un hombre, Juan Carlos, y su esposa, Celia, por llamado del Señor, emprendieron juntos el camino del servicio en la Iglesia. Sin estridencias, apoyados firmemente en la Palabra de Dios, decidieron mostrar con el testimonio de su vida, la obra de restauración que Cristo había hecho en ellos. Tenacidad, firmeza y sacrificio mostrados en ejemplo de coherencia con el Evangelio. Y como bandera, siempre la Palabra de Dios, que fue semilla divina implantada en cada hermano que se sumó a esta experiencia. Luego se fueron multiplicando en generaciones de familias enteras dedicadas al Reino de Dios primero y todo lo demás les llegó por añadidura. En momentos de tribulación, el amor fraternal de los hermanos derramándose «como el rocío que baja del Hermón», levantó y fortaleció esas vidas. Nunca mejor aplicado aquello de «yo y mi casa serviremos al Señor»; hoy tres generaciones de su familia de sangre acompañan y aportan a la siempre viva y eficaz Predicación de la Palabra de Dios. Fruto del anhelo de llegar a todos «nació» el Periódico «El Poder del Espíritu» (que en este mes cumple 12 años de tirada mensual ininterrumpida). Luego, los nuevos aires de la tecnología en la página de Internet (www.elpoderdelespiritu.org), visitada por cientos de miles de hermanos de todo el mundo. Ese intrépido grupo de «locos por el Evangelio» se tomaron en serio aquello de ser testigos hasta el último rincón de la tierra y se lanzaron a la experiencia de hacer radio para hablar de Cristo, a una hora insólita y, por esas maravillosas cosas del Espíritu Santo, del otro lado encontraron hermanos con hambre y sed espiritual, algunos con desesperanza y soledad, deseosos de un soplo de avivamiento, diseminados por los cinco continentes, que se prendieron en una fraterna comunidad radial. Un año ya de «entendernos» sin traductores porque la bendición del Señor no tiene fronteras. Gozosos y felices, decimos GRACIAS, THANKS, MERCI, GRAZIE al Señor como Hacedor de esta obra y a nuestros queridos, entrañables hermanos, brothers, frères, confratelli, de aquí y de allá, incondicionales «compinches» en el Espíritu y trabajadores incansables por el Evangelio de Jesucristo; a los sanados, levantados, prosperados, esperanzados y fortalecidos por la Palabra: ¡¡FELIZ ANIVERSARIO!! Laura Gómez www.elpoderdelespiritu.org

DE LA PROFUNDIDAD DE ESE AYER QUE POR SIEMPRE VA A PERMANECER EMERGE CUAL EJEMPLO DE VALENTÍA... «HOMBRES DE MAR, HOMBRES DE HONOR», DIERON SUS VIDAS EN SUBLIME AMOR ¡POR NUESTRAS MALVINAS, CON HIDALGUÍA! A LOS VALIENTES DE «AQUEL CRUCERO» DE PATRIÓTICO CORAZÓN SINCERO NUESTRA ADMIRACIÓN Y GRATITUD... VIVEN EN LA ARGENTINA MEMORIA Y EN LAS PÁGINAS DE LA HISTORIA... ¡TODOS LOS HÉROES DEL «ATLÁNTICO SUD»! A LOS MARINOS DEL «GENERAL BELGRANO» MIS POBRES VERSOS, CON SINCERO AMOR. CUAL ORACIÓN DEL CORAZÓN CRISTIANO... «¡HABITEN EN LA ETERNA LUZ DEL SEÑOR!» JUAN CARLOS HOVHANESSIAN

En el 30° aniversario del hundimiento del Crucero General Belgrano y dedicado a todos los héroes del Atlántico Sur... con amor. 1982 - 2 de mayo - 2012

Por el Espíritu Santo que nos ha sido dado Recuerdo que, siendo niña, cantábamos en Misa: «Los hombres tenemos mil máscaras vanas para no encontrarnos con nuestra verdad. Tememos mirarnos de frente a los ojos y al ver lo que somos tener que cambiar. Callemos hermanos y que hable El Señor.» Poder ver y reconocer nuestras debilidades, nuestras carencias de amor, nuestros errores... nuestros temores; orgullo, celos, falta de perdón entre tantas cosas que muchas veces «escondemos» con «una máscara»nos RECONCILIA CON DIOS, con nosotros mismos y con el prójimo. Todas esas «máscaras» que pudiéramos llevar nos «asfixian» y producen un gran dolor; aíslan y nos separan de las bendiciones de Dios. Pero es Dios Mismo quien nos limpia de todo pecado porque no envió a Su Hijo para condenarnos sino para SALVARNOS. Esto trae gran libertad al corazón, y también al entorno. Nos cambia radicalmente. «Porque el Señor es el Espíritu, y donde está el Espíritu del Señor, allí está la libertad.» (2 Corintios 3:17). ¡Aleluya! Es entonces que fluye la Vida de Dios, por el Espíritu Santo que nos ha sido dado. ¡Gloria a Dios! Liliana Francia

EL MAESTRO INTERIOR Hay diversos motivos por los cuales una persona puede tener la necesidad de recurrir a un abogado. Pero más allá de las razones, un abogado honesto requerirá lo mismo de parte de su defendido: que sea honesto, que le diga la verdad, que no le oculte nada. La Biblia nos enseña que el Espíritu Santo es para nosotros un Abogado y un Defensor que siempre ha de estar a nuestro lado (ver Juan 14:16). Pero una persona en quien hay doblez, falta de verdad y sinceridad, no podrá recurrir a Él y por consiguiente, su oración no será del agrado de Dios. «El Espíritu Santo, cuya unción impregna todo nuestro ser, es el Maestro interior de la oración cristiana. Es el artífice de la tradición viva de la oración.» (CIC n° 2672). Esto no quiere decir que no cometamos errores, sino que nuestra vida debe ser íntegra, que no estemos divididos, que no seamos una persona en la Iglesia y otra fuera de ella. La sinceridad y la verdad son dos virtudes necesarias para acercarnos al Señor en la oración y para crecer en nuestra vida espiritual. Anahí Raggio


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Dice en Mateo 28:1-6: «Pasado el sábado, al alborear el primer día de la semana, María Magdalena y la otra María fueron a ver el sepulcro. De pronto se produjo un gran terremoto, pues un ángel del Señor bajó del cielo y, acercándose, hizo rodar la piedra y se sentó encima de ella. Su aspecto era como el relámpago y su vestido blanco como la nieve. Los guardias, atemorizados ante él, se pusieron a temblar y se quedaron como muertos. El ángel se dirigió a las mujeres y les dijo: Vosotras no temáis, pues sé que buscáis a Jesús, el Crucificado; no está aquí, ha resucitado, como lo había dicho. Venid, ved el lugar donde estaba». Dios se manifiesta a quienes le buscan, aún cuando éstos no lo comprendan todo; como en el caso de las mujeres, «María Magdalena y la otra María», que no habían comprendido que Jesús había resucitado, pero que de todas formas fueron a honrarle, pues ellas le amaban. Para quienes aman a Dios -le adoran y le sirven-, para ellos son las «sorpresas» del Señor. ¡Aleluya! El poder político y religioso de aquella época «estaba satisfecho» con la muerte de Jesús, porque creían que se habían terminado los problemas; mientras que los seguidores del Señor estaban llorando, tristes y con miedo. Pero era exactamente al revés para los creyentes: tiempo de festejar, y tiempo de llanto para aquellos que habían mandado crucificar a Jesús. Por eso para ti, querido hermano, éste es un tiempo de gozo, pues Cristo resucitó para no morir nunca más y reinar con todo Su Poder. Los discípulos tampoco habían entendido que Jesús iba a resucitar. Pero Él resucitó tal como lo había dicho. Todo se cumplió según fue profetizado en las Escrituras. Por eso debes tener la seguridad de que todas las promesas de bendición que hallamos en la Palabra de Dios, para los creyentes, ¡han de cumplirse! Nadie había robado el Cuerpo de Jesús, Él estaba vivo ¡¡¡ÉL ESTÁ VIVO!!! Antes de la escena del sepulcro vacío, en Mateo 27:62-66 leemos: «Al otro día, el siguiente a la Preparación, los sumos sacerdotes y los fariseos se reunieron ante Pilato y le dijeron: Señor, recordamos que ese impostor dijo cuando aún vivía: A los tres días resucitaré. Manda, pues, que quede asegurado el sepulcro hasta el tercer día, no sea que vengan sus discípulos, lo roben y digan luego al pueblo: Resucitó de entre los muertos, y la última impostura sea peor que la primera. Pilato les dijo: Tenéis una guardia. Id, aseguradlo como sabéis. Ellos fueron y aseguraron el sepulcro, sellando la piedra y poniendo la guardia». Todo eso que los sumos sacerdotes planearon terminó por «darle aún más credibilidad a la Resurrección». Hermano: todo aquello que en tu vida se presente con el fin de apartarte de la bendición, ¡NO PODRÁ!, porque Dios dispone todas las cosas (no algunas, sino todas) para nuestro bien: «Por lo demás, sabemos que en todas las cosas interviene Dios para bien de los que le aman » (Romanos 8:28) ¡Aleluya! Mira la escena: las mujeres van al sepulcro. Se dirigen con fe, con insistencia no entendían todo, pero sus corazones desbordaban de amor por el Señor. Y nota que a ellas no les importó la guardia, fueron confiadas y seguras de que alguien les ayudaría y les correría la piedra. Así también debemos hacer nosotros: buscar al Señor con fe, con insistencia, sin permitir que los obstáculos nos paralicen, amando profundamente a Jesús, aunque no entendamos todo Y puedes tener la seguridad de que serás bendecido por Dios. ¡Gracias Señor! «Y ahora id enseguida a decir a sus discípulos: Ha resucitado de entre los muertos e irá delante de vosotros a Galilea; allí le veréis. Ya os lo he dicho. Ellas partieron a toda prisa del sepulcro, con miedo y gran gozo, y corrieron a dar la noticia a sus discípulos. En esto, Jesús les salió al encuentro y les dijo: ¡Salve! Y ellas, acercándose, se asieron de sus pies y le adoraron. Entonces les dice Jesús: No temáis. Id, avisad a mis hermanos que vayan a Galilea; allí me verán.» (Mateo 28:7-10). ¡Él siempre va delante de ti, es tu Pastor, no temas y sigue adelante! Aquellas mujeres caminaron en obediencia, movidas por el amor y la fe en Jesús. Nosotros debemos hacer lo mismo, por eso no podemos desconocer la Palabra de Dios, puesto que « la fe viene de la predicación, y la predicación, por la Palabra de Cristo.» (Romanos 10:17). Cuando alguien obedece aunque tenga miedo, aunque parezca una locura Cristo le sale al encuentro. Sí, la obediencia te trae un encuentro con Cristo. La obediencia a la Palabra de Dios nos trae una nueva «visión». Esto no quiere decir negar la realidad, sino tener la seguridad de que ¡Dios está en control! Entonces, aun en medio de las contrariedades podrás decir: «Todo lo puedo en Cristo que me fortalece» (Filipenses 4:13). Si hay enfermedad: «Por las llagas de Cristo hemos sido curados» (Isaías 53:5). Si estás preocupado: «La paz del Señor guarda mi mente y mi corazón» (Filipenses 4:7). La Palabra de Dios involucra todos los asuntos de nuestra vida. ¡Aleluya! Pero hay un detalle que debemos tener en cuenta: el gozo. Ellas tenían miedo, sí, pero el pasaje bíblico aclara que también tenían gran gozo (vs. 8). Obedecer la Palabra de Dios trae a nuestro corazón gozo y alegría, porque confiamos en Dios y esperamos Sus bendiciones: paz, prosperidad, s a n i d a d , restauración familiar, etc. Aparentemente, las mujeres habían sido mandadas como simples mensajeras, como si el Glorioso facebook.com/DiegoHovhanessian Mensaje de la

Resurrección no fuera para ellas. Aparecen llevando un anuncio «que otros verán». Pero de todas formas obedecen, y finalmente llega el encuentro con Jesús. Ahora el miedo va desapareciendo y el gozo va creciendo. ¡Gloria a Dios! Y en el encuentro Jesús te dice: ¡NO TEMAS!, pero también te da un mandamiento. Recuerda que si quieres encontrarte con Él, recibirás instrucciones que habrás de cumplir: «Entonces les dice Jesús: No temáis. Id, avisad a mis hermanos que vayan a Galilea; allí me verán.» (vs. 10). Ahora veamos algunos puntos importantes sobre la Resurrección de Jesús: Mateo 28:1 «Pasado el sábado, al alborear el primer día de la semana, María Magdalena y la otra María fueron a ver el sepulcro». Respetaron el día de reposo (el sábado). El descanso sabático estaba instituido por Dios. Esto significa que para ver la Gloria de la Resurrección (esto es: recibir las bendiciones que Cristo ganó con Su Muerte y Resurrección) necesitas cumplir lo establecido por Dios y descansar, salirte de las preocupaciones que quieren abarcarte por completo y confiar en el Señor, que te dice «descansa en Mi fuerza y Mi poder». Mateo 28:11-15: «Mientras ellas iban, algunos de la guardia fueron a la ciudad a contar a los sumos sacerdotes todo lo que había pasado. Éstos, reunidos con los ancianos, celebraron consejo y dieron una buena suma de dinero a los soldados, advirtiéndoles: Decid: Sus discípulos vinieron de noche y lo robaron mientras nosotros dormíamos. Y si la cosa llega a oídos del procurador, nosotros le convenceremos y os evitaremos complicaciones. Ellos tomaron el dinero y procedieron según las instrucciones recibidas. Y se corrió esa versión entre los judíos, hasta el día de hoy». Mientras tú te mantengas firme, creyendo, fiel al Señor, habrá voces que harán lo imposible para «tapar», negar, para hacerte creer que estás loco, que las cosas no son así PERO SIGUE ADELANTE, NO TEMAS QUE ¡CRISTO VIVE! Mateo 28:2 «De pronto se produjo un gran terremoto, pues un ángel del Señor bajó del cielo y, acercándose, hizo rodar la piedra y se sentó encima de ella». Por la Resurrección de Jesús, por Su Victoria, se producirán «cosas repentinas» de parte de Dios. El Señor se ocupará de lo que tú no puedas hacer, así que deja de preocuparte por «la piedra sellada». Muchas veces nos preocupamos por cosas que «no tienen sentido», y aun cuando realmente se trate de situaciones difíciles Hermano querido, podemos pasarnos toda la vida preocupándonos, pero debes saber que Cristo -mientras ellas se preocupaban- ¡ya había resucitado! Debes saber que ¡CRISTO VIVE! Mateo 28:5-6: «El ángel se dirigió a las mujeres y les dijo: Vosotras no temáis, pues sé que buscáis a Jesús, el Crucificado; no está aquí, ha resucitado, como lo había dicho ». Cree lo que Él te ha dicho, que como dijo: así será. Finalmente el Evangelio concluye diciendo: «Por su parte, los once discípulos marcharon a Galilea, al monte que Jesús les había indicado. Y al verlo le adoraron; algunos sin embargo dudaron. Jesús se acercó a ellos y les habló así: Me ha sido dado todo poder en el cielo y en la tierra. Id, pues, y haced discípulos a todas las gentes bautizándolas en el nombre del Padre y del Hijo y del Espíritu Santo, y enseñándoles a guardar todo lo que yo os he mandado. Y he aquí que yo estoy con vosotros todos los días hasta el fin del mundo.» (Mateo 28:16-20). Había algunos que aún dudaban. Leamos 1 Corintios 15:3-8: «Porque os transmití, en primer lugar, lo que a mi vez recibí: que Cristo murió por nuestros pecados, según las Escrituras; que fue sepultado, y que resucitó al tercer día, según las Escrituras; que se apareció a Cefas y luego a los Doce; después se apareció a más de quinientos hermanos a la vez, de los cuales todavía la mayor parte viven y otros murieron. Luego se apareció a Santiago; más tarde, a todos los apóstoles. Y en último término se me apareció también a mí, que soy como un aborto.» Y el versículo 14 dice: «Y si no resucitó Cristo, vacía es nuestra predicación, vacía también vuestra fe». Quienes no creen en el Poder de Cristo, que Resucitó y Vive por los siglos, más allá de la fe que digan profesar o de lo que prediquen, eso es vano, falto de solidez, VACÍO; conforme lo expresa el Apóstol Pablo. PERO LA IGLESIA MUESTRA A CRISTO, VIVO Y GLORIOSO, Y ESTÁ LLENA DEL PODER DEL ESPÍRITU SANTO, PORQUE ES LA IGLESIA DE JESUCRISTO. Es ahí donde hallamos una predicación y una fe poderosas. No temas, no dejes lugar a la duda, pues no hay nada por encima de Nuestro Señor y Su Poder. Nada lo puede opacar, nada lo puede vencer. Hemos recibido un mandato divino: GANAR ALMAS PARA CRISTO, hacer discípulos; es tiempo de levantarnos a cumplirlo. Su Presencia está con nosotros para siempre: « Y he aquí que yo estoy con vosotros todos los días hasta el fin del mundo.» (Mateo 28:20). ¡Gracias Señor! Vive seguro en Su Presencia, pues Él siempre está contigo. Cuando el temor te asalte, cuando tengas que enfrentar «gigantes», recuerda que CRISTO VIVE y gózate, pues Él tiene todo Poder y está siempre contigo. Anímate a todo «en» y «con» Cristo: ¡Él ha resucitado! ¡Aleluya! BREVE EXTRACCIÓN DE LA PRÉDICA «ÉL HA RESUCITADO» www.elpoderdelespiritu.org


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